Post on 08-Jul-2015
transcript
TRASFORMACIONES
AGRARIAS
DEL SIGLO XIX
ROSARIO MARRUFO GÓMEZ & DIEGO SÁNCHEZ PÉREZ 2ºBTO D
I. TRANSFORMACIONES AGRARIAS Y DESARROLLO
INDUSTRIAL
INTRODUCCIÓN.A finales del siglo XIX, la
economía española poseía un atraso evidente con respecto a los otros países. Una agricultura arcaica que constituía el centro de la economía. El mercado interior era incapaz de absorber la producción industrial. El mayor problema era la inadaptación del sistema político y social a las nuevas realidades económicas, planteadas tras la pérdida de las colonias americanas. Las zonas más pioneras fueron Cataluña
y País Vasco en donde
predominaron la industria textil
y siderúrgica.
El siglo XVIII fue considerado como de proceso económico a diferencia del XIX considerado como fracaso de revolución industrial. España fracasa en el intento de establecer el nuevo régimen hasta 1960, en donde se produce la consolidación definitiva.
RELACIÓN ENTRE LAS
TRANSFORMACIONES AGRARIAS
CAPITALISTAS Y EL PROCESO DE
REVOLUCIÓN INDUSTRIAL EN EL
MODELO CLÁSICO.• Estas transformaciones son más que evidentes,
condicionando todo el proceso:
• Obtención de un capital previo necesario para afrontar los elevados gastos que una industria conlleva.
• Abundante mano de obra constituida por parte del campesinado que había perdido sus tierras, emigrando entonces a las ciudades para trabajar.
TRANSFORMACIONES EN
LA ESTRUCTURA DE LA
PROPIEDAD.
• Mediante las desamortizaciones de Mendizábal y Madoz, las tierras pasaron a ser una mercancía más que podía comprarse y/o venderse igual que cualquier otro producto ya que habían perdido su vinculación a una serie de instituciones (mayorazgos, ayuntamientos…) que impedían que fuesen compradas o vendidas.
• También tenían una “finalidad social” puesto que facilitaban tierras a los campesinos que antes no podían comprarlas.
LA CONYUNTURA EN LA
AGRICULTURA Y
GANADERÍA. • La agricultura seguía siendo la
actividad económica más importante. El avance de la agricultura comercial tuvo gran desarrollo en Valencia y Murcia, en donde predominaba el cultivo de arroz.
• Los principales productos de exportación fueron los cereales y el vino y el producto más importante fue el trigo y su exportación alcanzó gran relevancia a consecuencia de la guerra de Crimea (1840-1860).
PROBLEMAS DEL PROCESO DE
INDUSTRIALIZACIÓN EN ANDALUCÍA
La industria siderúrgica andaluza nació a comienzos del siglo
XIX con los obstáculos del mercado insuficiente y las
materias primas tan caras, pero a pesar de esto, logró
sobrevivir hasta los años 60 de ese siglo, momento en el que
se cerraron los altos hornos de Málaga y Sevilla fracasando
así, el proceso de industrialización en Andalucía. Causas:
• El problema del combustible en la siderurgia malagueña, lo
que obligó a la importación del carbón extranjero.
• La inexistencia de un mercado de consumo interno.
• La inexistencia de ferrocarriles.
• El papel de los bancos que invertían en el norte el dinero
que captaban en Andalucía.
IV. LOS CAMBIOS EN LA
SOCIEDAD
Debido al retraso económico y al fracaso
de industrialización, la sociedad seguía
siendo mayoritariamente rural.
La emigración del medio rural a las
ciudades hizo que creciese la población
urbana y que las ciudades cambiasen y
que comenzaran “los ensanches”.
LA TRANCISIÓN DEL ANTIGUO AL
NUEVO RÉGIMEN DEMOGRÁFICO
• En el primer tercio del siglo XIX, se produce un
lento crecimiento a pesar de la alta natalidad y
mortalidad que había en España con respecto a
otros países.
• El crecimiento tenía lugar en la periferia y
disminuyó en el interior del país, excepto en
algunas regiones como Madrid.
• Se da también un proceso de emigración del
campo a la cuidad.
LA FORMACIÓN DE UNA MODERNA SOCIEDAD DE
CLASES.A pesar de que la sociedad de este siglo poseía las
características de una sociedad preindustrial en la
segunda mitad del siglo se irá perfilando una moderna
sociedad de clases:
• ARISTOCRACIA
Formada por una mezcla de la antigua nobleza, que
mantiene su poder económico. La gran burguesía era
de origen heterogéneo (grandes comerciantes,
terratenientes, agrarios, etc.) El ideal de este grupo
será asemejarse a la forma de vida de la nobleza.
• LAS CLASES MEDIAS.
Formada por la mediana burguesía y a los propietarios
medios, empleados cualificados de la administración,
profesionales liberales del derecho a la sanidad.
Son muy tradicionales y acomodaticios desde el punto de
vista económico, social y laboral. Pero ideológicamente
se mueven entre el apoliticismo, republicanismo y
liberalismo progresista.
• LAS CLASES BAJAS.
Representan la gran mayoría de la población a pesar de
los cambios. El grupo más significativos, en el mundo
rural, es el de los jornaleros que predominan en las
explotaciones agrarias.
Sufren condiciones muy duras de trabajo y paros
estacionales muy largos manteniéndoles en el límite de
la subsistencia.
En el medio urbano se tratan de criados, mozos de
comercio, tenderos autónomos, etc.
EVOLUCIÓN DE LA CONYUNTURA EN LOS DISTINTOS
SECTORES INDUSTRIALES.
• SIDEROMETALURGIA
En España se inicia en forma de tanteos entre 1860-70. Podemos
distinguir tres etapas:
1. Hegemonía andaluza (1830-61). Los primeros Altos Hornos
explotaban el hierro de la zona utilizando carbón vegetal (madera)
Producían un hierro de magnífica calidad pero caro debido a la
necesidad de importar tanto el carbón para su producción como a
lo costoso de los transportes.
2. Hegemonía asturiana (1861-79): en 1861 la industria andaluza
sólo producía la mitad de hierro colado fabricado en España,
debido a la aparición de un nuevo núcleo de producción en
Asturias, cuyos altos hornos utilizaban el carbón mineral de la
región, mas energético y barato, lo que le permitió restar
importancia al foco andaluz.
3. .Hegemonía vasca (1880-90): a finales del siglo XIX se consolida
la industria bilbaína, al hundirse el núcleo de Málaga.
• INDUSTRIA TEXTIL.
En Cataluña a partir de 1830 se asiste a la modernización y
despegue de la industria algodonera gracias a
la mecanización (telares mecánicos y máquina de vapor), el triunfo
de la fábrica frente al taller artesano, la contratación de mano de
obra barata (mujeres y niños), el impulso de la demanda interna,
la presencia de una burguesía emprendedora y el amparo de una
legislación La guerra de Secesión de EE.UU., redujo
la importación de la materia prima y la crisis económica de 1866-
1867 terminó con el periodo de mayor crecimiento. En 1870 se da
otra etapa de expansión, aunque esta vez es menor, debido a la
ampliación del mercado con Cuba y Puerto Rico. Con la
independencia de estas dos colonias en 1898 la producción
se estancó hasta las primeras décadas del siglo XX. A parte de la
industria algodonera también existían industrias laneras en
Castilla y sederas en Valencia, aunque estas industrias eran de
menor importancia que la algodonera.
La coyuntura fue positiva para los productos agrarios hasta
finales del siglo, momento en el que la entrada masiva de
cereales procedente de Rusia, Estados Unidos y Australia
provocaron una crisis que sumió a todo el campo europeo
en una debacle europea.
2. EL DESARROLLO INDUSTRIAL.
LA PROBLEMÁTICA GENERA DE NUESTRA REVOLUCION
INDUSTRIAL.
En las zonas económicamente más desarrolladas se produce un proceso
de revolución agraria e industrial. En España la ausencia de una llevó a
la debilidad de la otra. Causas:
• Ausencia de una red de comunicaciones que impidió la formación de un
mercado nacional que actuase como estimulante a la producción.
• La no existencia de un poderoso mercado de consumo, ya que las
condiciones de la mayoría del país no se podían permitir consumir.
• La incapacidad exportadora, lo que hace desde los sectores de la
burguesía industrial se reclamen continuamente medidas y leyes
proteccionistas.
• El escaso e irregular aporte de financiación por parte de los capitales
españoles tanto a la construcción de los ferrocarriles como a la
explotación del sector minero.
El problema no era sólo la ausencia de reforma, era mucho más
complicado.
En Cataluña y en menos medida País Vasco, se consolidó
la industria química vinculada a la textil y a la producción
de abono y explosivos
La industria catalana siempre tuvo una gran independencia
de la industria bilbaína.
• INDUSTRIA ELÉCTRICA.
Apareció tímidamente en España hacia 1890, cuando la
instalación de pequeñas centrales térmicas o
hidroeléctricas permitían iluminar algunos núcleos de
población.
A partir de 1900, se formarán las grandes empresas
productoras de electricidad, que instalan centrales y
presas en los ríos españoles.
• EL FERROCARRIL.
Durante toda la segunda mitad del siglo XIX, actúa como verdadera
locomotora que tira de la economía nacional:
El Gobierno se comprometía a dar una rentabilidad del 6% para los capitales
que se invirtiesen en su construcción.
Quedaban libres de impuestos los productos que fuesen necesarios para su
construcción.
La ley 55 permite la creación de grandes compañías (S.A.) con capital
extranjero nacional que se dedicaban a la especulación con los terrenos por
donde discurren las líneas.
Se crearon muchos empleos (120.000), además se consumía carbón
nacional, pero se criticó el trazado radial de la red con centro en Madrid.
En las carreteras fue la época de los puentes de piedra y se mejoraron
36.000 km con la técnica de la macadamización (capas de piedra aprisionadas
y de tierra)
La reforma en la Hacienda implicaba que el Estado recaudaba sus ingresos
en un 20% de la contribución urbana, rural, empresarial y comercial. De los
impuestos indirectos obtiene un 40% y de los aranceles, venta de propiedades
desamortizadas y loterías, el 40% restante.