Date post: | 02-Jun-2015 |
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PANIZA EN LA FRONTERA
Sierra de Paniza: Las fronteras no son más que líneas imaginarias marcadas en un
mapa, las naturales se pueden ver y lo que es más importante se pueden atravesar, casi solo con
desearlo. Un pequeño esfuerzo en bici puede servir para una y otra vez atravesarlas, sin otra
intención que disfrutar de la naturaleza, de la compañía de otros bikers que comparten el amor
a la naturaleza y al deporte que permite adentrarte en ella, sin causarle daño.
Una de ellas puede estar en la sierra de Paniza, de un lado la civilización de las tierras roturadas,
los campos de cereal, los viñedos las bodegas, las carreteras las prisas; del otro la naturaleza, el
tiempo que discurre tranquilo, el sonido del viento, el monte autóctono.
La sierra de Paniza está ocupada en gran parte por un bosque de encinas de un valor ecológico
enorme, de todas ellas destaca “La Carrasca” catalogada como árbol monumental de Aragón,
por el gobierno de la región, además es muy querida en el pueblo, por su leyenda.
La Carrasca es un majestuoso Quercus illex de 1´30m. de diámetro en base y 15 en la copa y una
altura de más de 12m. (Impresionante)
LA RUTA
Preparados listosssssssss…….ya
Con los nervios en el estómago
comenzamos el recorrido desde la
puerta de nuestro cole bajo la
atenta supervisión de nuestr@s
profes.
Nada más comenzar dirección
Aladrén por la carretera nos
encontramos con el primer
esfuerzo del recorrido (la subida
de la cuesta de las piscinas) como
estamos empezando la superamos
con un poco de dolor en las piernas
pero sin más problemas que no
querer quedarnos los últimos.
Una vez superado la cuesta si giramos nuestra cabeza hacia la izquierda podemos ver una
tablilla informativa con tres datos.
Para nosotros nos resultará de
gran ayuda la indicación
referente a la GR 90.3
dirección Virgen del Águila.
Circularemos por carretera
con sumo cuidado y respetando
las normas, procurando ir lo
más pegados al lado derecho.
Tanto a un lado como al otro
estamos fraquedados por las
tierras de cultivo que van
variando de colores según la
estación del año en la que nos
encontremos, esto hace que
nunca se nos haga aburrido el
paisaje (mi época favorita al
igual que dice mi padre) es el otoño justo después de la vendimia cuando las hojas de las vides
están de todos los colores, verdes, amarillos, rojo vino…y algunos árboles ya empiezan a perder
sus hojas creando una alfombra natural en el suelo que casi invitan a abalanzarse sobre ellas
como si de un mullido colchón se tratase.
Así divagando sobre el paisaje si vas solo ó conversando con los amigos en otras ocasiones nos
encontramos a 1 Km. Más o menos atravesando nuestra primera frontera.
Giramos 90º a la derecha y
aquí está, hemos
abandonado el continuo y
previsible suelo asfaltado.
Mirando a nuestro lado
derecho podremos ver otra
estaquilla que nos indicará
que vamos por buen
camino.
Durante otros 2Km de
subida larga pero tendida,
no dejaremos nunca el
camino principal (en caso
de duda el de la derecha) y
para más seguridad
observaremos las marcas de
la GR.
Ahora sí que tendremos que mirar por donde conducir nuestras bicicletas, esquivando piedras
baches e incluso alguna rama que pueda sobresalir al camino.
Esta marca nos indicara que el
camino escogido no es el correcto,
desandaremos el camino elegido
hasta la bifurcación y cogeremos
el recorrido antes desechado.
Guiándonos por estas
indicaciones llegaremos hasta la
tan deseada parada en la famosa
“Carrasca”
Una vez hemos llegado a la carrasca estaremos justo en nuestra segunda frontera. A partir de
aquí desaparecen ya por completo las tierras cultivadas por las manos del hombre para
introducimos por completo en un bosque autóctono de carrascas.
Bajo la sombra del gigantesco y famoso árbol será el sitio ideal para recuperar fuerzas, beber y
comentar el recorrido hecho y el que nos queda.
Con las pilas cargadas reanudaremos el
camino y a unos 100m. Abandonaremos
ahora sí la GR 90.3.
Nos desviaremos a la derecha para después
de una muy leve bajada, veremos una
terrible subida que pondrá a prueba nuestra
fuerza y habilidad para no meternos en las
regacheras causadas por las lluvias.
Por fin llagamos a nuestra cuarta frontera cuando conseguimos coronar el punto más alto del
recorrido.
Desde este punto los días despejados podemos observar hasta los pirineos (más de 200Km.)
Si nos giramos 180º sobre nuestros pies nuestra vista solo alcanzará alrededor de 10m. (La gran
vegetación y el terreno tan montañoso no nos dejará ver más.)
Nada más comenzar la bajada nos
encontramos con un circuito de motos que
bordearemos para continuar con una bajada
algo técnica y peligrosa por su escarnado piso
esta nos dejará ya en las tierras de cultivo y un
camino en falso llano hacia abajo que nos
conducirá hasta las puertas traseras de Paniza.
Una vez en el casco urbano callejearemos por el pueblo.
Después de 7Km. llegaremos a nuestro punto de salida y llegada.
Espero que os haya
gustado tanto como a
mi, nos vemos en la
próxima salida.
La información la he obtenido del nº 233 de la revista Bike
publicada en septiembre de 2011 y de mi padre aficionado a este
deporte.
El muontain Bike es un deporte para disfrutar de la naturaleza
y la compañía, no para competir y rivalizar.
FIN