Cambio Global: el fin del sistema
“Capitalista”.
INTRODUCCIÓN:
El cambio social que me propongo analizar es el cambio civilizatorio global que está en proceso
debido a la extralimitación de los límites del crecimiento, el extractivismo y la huella ecológica,
que atañe tanto a sociedades como a instituciones y organizaciones, probablemente de la
forma más traumática y abrupta que habrá conocido la humanidad desde que esta está
“globalizada”.
Se trata de un proceso que se inició incluso antes de la aparición del “capitalismo” como
modelo productivo y sistema socio-económico, sustentado por las obras de Adam Smith, John
Locke, Milton Friedman entre otros y que ha conseguido modificar incluso la dimensión
temporal de la sociedad, ya que ha modificado sus ritmos y los tiempos de los efectos que ésta
produce en su entorno, produciendo cambios bio-geo-físicos de dimensión temporal
geológica transformándolos en procesos de dimensión temporal “generacional”.
Se trata del cambio climático, pero también de la falta de recursos y la destrucción de los
ecosistemas provocados por un sistema socioeconómico extractivista que está provocando
procesos y efectos que en algunos casos eran cíclicos y naturales en dimensiones geológicas y
climatológicas, pero que en este caso son de carácter antropogénico y con un carácter
temporal mucho más reducido.
ANÁLISIS:
Al tratarse de un proceso de cambio social (probablemente de una revolución) de gran calado,
espontáneo y que está en proceso, intentaré exponer aquí las causas (tanto las
empíricamente probadas como las teorías socioeconómicas), la dinámica tanto bío-geo-física
como la de cambio de paradigma socio-económico que está en proceso y los efectos de estos
cambios, así como distintos escenarios posibles dependiendo de la morfogénesis que adopte
la dinámica social en sus procesos endógenos.
CAUSAS:
Si hablamos del auge del capitalismo, el neo-liberalismo o la cultura occidental, debemos
hablar de un proceso lineal, multifactorial, con saltos cualitativos o rupturas no lineales ya
que se trata de la cultura y sistema que ha hecho de su ideal socio-económico la base de la
práctica totalidad del proceso de globalización que hemos vivido en las últimas décadas.
Cualquiera que fuera la forma de esos procesos, es la amalgama de todos ellos la que nos ha
llevado a la situación actual, por lo que, analizar el pasado o la historia, a pesar de la
multifactoriedad de los procesos y a pesar de las “propensiones” de K.Popper, hacerlo desde el
presente tal y como me propongo hacer no se vuelve tanto una tarea especulativa en torno a
“que hubiera pasado si” sino más bien, una reconstrucción histórica de ciertos
acontecimientos clave en la historia de la humanidad que han resultado (aún y habiendo
sucedido procesos con trayectorias alternativas) ser los que han construido el corpus de la
situación en la que nos encontramos. Desde mi punto de vista, un proceso con una influencia
dialéctica clara entre estructura y agentes y viceversa, sin ningún tipo de predominancia.
LA REVOLUCIÓN NEOLÍTICA:
Hace aproximadamente unos 10.000 años, la humanidad, pasó de la caza y recolección a la
agricultura; del nomadismo al sedentarismo, probablemente debido al crecimiento de la
población y a una cada vez más acuciante escasez de los recursos necesarios en la época para
la subsistencia y a su disponibilidad estacional.
Hasta ese momento, se practicaba el mercado de intercambio (unos productos por otros) pero
a partir de la aparición de la agricultura surgió el excedente productivo, lo que permitía el
almacenaje (sobre todo de cereales) y con ello la acumulación, la cual, al cambiar los tiempos
de consumo inmediato a consumo futuro (dependiendo de la durabilidad del producto)
propiciaron la aparición de algún tipo dinero (al principio fueron conchas, luego un registro y
finalmente se acuñó la moneda).
La aparición del superávit, la acumulación y el dinero fue un hito que cambió la concepción y
el funcionamiento de lo que se podría llamar proto-economía.
El hecho de poder producir no solo por valor de uso, sino por valor de cambio, propició la
especialización en la agricultura, ya que ésta permitía cultivar grandes extensiones de un
mismo producto sin necesidad de diversificar según las necesidades alimentarias de la
población puesto que el excedente de producción podía ser almacenado, obteniendo por el
dinero ”imperecedero” con el que se adquirirían otros productos necesarios para el consumo,
para el comercio o simplemente se podía acumular paulatinamente.
Pero esa estrategia adaptativa traía consigo otras dinámicas y consecuencias:
-Los silos, graneros, o lugares de almacenaje de productos podían sufrir desastres naturales,
plagas,…por lo que el valor monetario que se les había dado perdía su vigencia y podía generar
deuda.
-El dinero, a diferencia de los productos, era fácilmente acumulable, por lo que empezaron los
procesos de acumulación y desigualdad de acceso a productos y a la tierra que más adelante
se agudizarían.
-Apareció el crédito, por lo que se generaba beneficio del dinero en sí mismo, por lo que
aparte de la oferta y la demanda entró ya en juego la especulación desligada del mundo
material, por lo tanto, el dinero dejó de actuar obligatoriamente como moneda de cambio y
los mercados dejaron de depender solo de la producción, la oferta y la demanda.
-Aún así, la producción dependía de tres factores: el trabajo, el capital y la tierra y durante
mucho tiempo, incluso en la época feudal aún no eran considerados una mercancía y
simplemente el señor se quedaba con parte de la producción.
COLONIZACION:
Siguiendo desde una visión occidental, el superávit debía ser invertido, ya que el dinero
estático, por norma general no genera beneficio ni plusvalor y se empezó a invertir en
tecnología, tanto productiva como militar.
Juntando esas dos variables posibilistas junto con el hecho de que cada vez quedaban menos
tierras disponibles para la producción y el extractivismo, las sociedades occidentales
empezaron el proceso de colonización y expansión a otras tierras con el fin de expandir su
territorio y su actividad económica.
Al mismo tiempo, los pueblos y sociedades que eran colonizados, pudieron ofrecer poca o
ninguna resistencia ya que además de sufrir las epidemias que traían consigo los colonos, no
estaban preparados tecnológicamente para la guerra ya que en muchos casos seguían
pudiendo mantenerse y socializando con el pastoreo, la caza y la recolección, por lo que no
iniciaron las mismas dinámicas que las sociedades occidentales.
Podríamos decir en este caso que los colonizadores actuaron por procesos endosomáticos
(casi siempre hay elección) y exosomáticos (la necesidad de expansión por dinámicas
estructurales), pero que los colonizados se encontraron con procesos esporádicos
exosomáticos fortuitos, ya que no eran fruto de su actividad ni estructura y sucedieron
repentinamente.
LA ÉTICA PROTESTANTE.
Como sugería Karl Popper en su crítica al historicismo, no hay una historia universal, sino
historias sociales dispersas y dispares, aunque debido a la colonización y a la globalización, un
quehacer común en muchos casos impuesto ha hecho modificar las pautas de conducta a unas
sociedades bajo la influencia o imposición de otras.
Tal como explica Max Weber en “La ética protestante y el espíritu del capitalismo” el cambio
de ética que se produjo dentro del protestantismo, fomentado por la corriente calvinista
basándose en el dogma de la predestinación, hizo posible el cambio de mentalidad en la
sociedad hacia la racionalidad, la austeridad, el enriquecimiento,… prácticas que no se
llevaban a término en el resto del Cristianismo o en el Islam por ejemplo, donde el préstamo y
la usura estaban prohibidos.
Éste cambio de mentalidad y el hecho de la expansión colonialista del mundo “occidental”
hizo que se extendiera e impusiera, sino la religión, si las bases para un modelo económico
que dominaría las relaciones comerciales y de producción en el futuro. (Un caso sería la
prohibición de la práctica del “Potlatch” a las tribus del noroeste americano que practicaban
hasta el momento el “don”).
No obstante aún faltaban las bases ideológicas y productivas para poder hablar del
surgimiento de lo que algunos llamarían capitalismo, el sistema socioeconómico hegemónico
en los tiempos que estaban por llegar; si es que el capitalismo realmente ha existido como
sugiere el entrecomillado del título del trabajo.
LA REVOLUCIÓN FRANCESA.
En 1788 estalló la Revolución Francesa, que puso fin al Antiguo Régimen, el feudalismo y el
absolutismo, para dar paso a la república, la monarquía constitucional o el imperio y donde la
hegemonía pasaría de estar a manos de los señores feudales a ser ostentada por la burguesía
con el apoyo del pueblo.
Fue también el período de surgimiento de la Ilustración (Rousseau, Montesquieu, Diderot,
Humme, Locke, Hobbes) donde se pretendía salir de la oscuridad de la ignorancia a la luz de la
razón.
Se trató de un movimiento ostentado prácticamente en su totalidad por la aristocracia y la
burguesía, que debía, con su empuje y conocimientos sentar las bases del progreso y
desarrollo (conceptos muy cuestionados hoy en día) y que devendría en la base ideológica del
liberalismo económico.
LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL.
A mediados del siglo XVIII se originó en Gran Bretaña la Revolución Industrial, que sentaría la
base del cambió productivo y del uso de los recursos y que junto a la base ética e ideológica
anteriormente comentadas, formarían el corpus del “sistema” socioeconómico crecentista
“capitalista”.
Fue el inicio de una transición del trabajo manual y la tracción animal, a la producción en masa
y en serie que permitirían las nuevas fuentes de energía disponibles, que multiplicaban la
capacidad de trabajo de la sociedad y aumentaban su capacidad “metabólica” lo que propició
el inició del crecimiento económico exponencial pero como analizaremos más adelante, en
una ecuación de línea de producción que no tenía en cuenta las externalidades
(recursos/residuos) y que generaba especialización en el trabajo y los conocimientos con su
consecuente alienación.
Fue la época de grandes migraciones del campo a las urbes o a colonias industriales, ya que se
abandonó la sociedad agrícola para dar paso a una sociedad industrializada y Fordista.
EL NEW DEAL.
El New Deal fue la iniciativa de intervención política en la economía que promovió Franklin
Delano Roosvelt que tuvo lugar entre 1933 y 1938 para encontrar una solución a los
problemas socio-económicos generados por una de las crisis más importantes que ha sufrido
el “capitalismo”, el crac del 29 y que pretendía sostener a las clases más pobres a través de
una ley de seguridad social, reformar los mercados financieros y re-dinamizar la economía.
Unas políticas que sentarían las bases de la social-democracia y el estado del bienestar que se
extenderían a posteriori.
La iniciativa de Roosvelt será recogida y metamorfoseada en la actualidad para solucionar los
problemas bío-geo-físicos que afronta la humanidad en forma de propuesta social-demócrata
para una supuesta transición ecológica en forma de Green New Deal Global.
REVOLUCIÓN TÉCNICA. (GLOBALIZACIÓN)
La aparición a gran escala del uso de los combustibles fósiles como carbón, gas y petróleo,
propiciaron una internacionalización de la economía y la consiguiente expansión económica,
ya que la fuerza de trabajo y transporte proporcionada por estos nuevos recursos facilitaban
un crecimiento económico y de “metabolismo” aún mayor. Se descubren también nuevos
materiales como el acero, el zinc, el cobre,…
ERA DE LA INFORMACIÓN.
La era de la revolución digital e informática, dónde la información se ha vuelto universal,
trajo consigo distintas problemáticas, como la sobre-información, la desinformación o la
manipulación de la misma, lo que ha facilitado una maquinaria de propaganda colosal, donde
es difícil discernir cual es la información veraz, necesaria y o buscada y cual no.
A través de la segunda Globalización, con una base ética e ideológica concretas las cuales
podían ser difundidas fácilmente a través de los nuevos canales de comunicación universal y
con disposición de materiales y energías con la más elevada TRE (tasa de retorno energético)
que ha conocido la humanidad, se disponían sobre la sociedad o la civilización global, todos
los ingredientes para implementar un “capitalismo” férreo o más bien para desarrollar el
proyecto neo-liberal.
REVOLUCIÓN CIENTÍFICO-TECNOLÓGICA.
Según Jeremy Rifkin, “ las transformaciones económicas suelen presentarse cuando
convergen las nuevas tecnologías de la comunicación con los nuevos sistemas de generación
energética. Las nuevas formas de comunicación se convierten en el medio de organización y
gestión que las civilizaciones más complejas han hecho posible mediante el desarrollo y el
uso de nuevas fuentes de energía. La conjunción en el siglo XXI del avance de las tecnologías
de las comunicaciones, junto al gran desarrollo y uso de Internet y de las energías renovables,
están dando lugar a lo que bien podríamos llamar 'Tercera Revolución Industrial' o 'Tercera
Revolución Tecnológica'”.
El desarrollo de las energías renovables sería algo discutible.
REFLEXIÓN SOBRE EL CAPITALISMO.
El “modelo” o “sistema” mal llamado capitalista, desde el punto de vista generalizado en la
sociedad o en los “Think Tanks” dominantes representa un modelo socioeconómico que nos
ha llevado a la cúspide de nuestra civilización, a las mayores cotas de progreso, desarrollo y
crecimiento económico que haya visto la humanidad, pero lo ha hecho a costa del deterioro
del medio ambiente (como hemos comentado con anterioridad, la línea de producción
capitalista no tiene en cuenta las externalidades como recursos ni residuos) de un aumento
creciente de las desigualdades en el mundo y del agotamiento de los recursos naturales,
especialmente los que han permitido ese aumento exponencial del crecimiento económico
cómo los combustibles fósiles, una energía barata, con un rendimiento muy alto pero que
debido a su sobreexplotación y al extractivismo voraz del sistema nos está llevando a los picos
de extracción de esos recursos y a convertir recursos que serían renovables, en no-renobables.
¿Pero porqué considero que el sistema es mal llamado capitalismo?
Porqué básicamente no cumple ninguna de sus normas básicas de funcionamiento
teórico/práctico:
-En teoría para el buen funcionamiento del libre mercado debería haber muchos oferentes y
muchos demandantes, pero la realidad es que la acumulación de capital y poder por parte de
los oligopolios hace que en muchos casos los oferentes sean en realidad unos pocos
plutócratas o instituciones que controlan la oferta incluso llegando a pactos entre sí para
regular los precios de forma fraudulenta para no ver así afectados sus beneficios, pasando por
encima de la soberanía de los estados en la mayoría de los casos, más aun con los distintos
tratados de libre comercio que se han ido acordando alrededor del globo.
Esos plutócratas generan además la demanda, a través de estrategias de publicidad y
marketing y con el control del “big data”, el cual les da acceso a las preferencias de los
consumidores y les permite producir en función de la demanda generada con anterioridad.
-También para el buen funcionamiento del libre mercado debería haber “competencia
perfecta”, hecho que no se da en ningún caso por los motivos anteriormente comentados y
que hace que en un mercado que debería mejorar debido a la competencia, suceda el efecto
inverso, una falta de competencia generalizada, que produce desigualdad de oportunidades e
imposibilidad de prosperidad por parte de los pequeños agentes frente a las grandes
multinacionales que controlan el mercado global.
-La información perfecta es otro de los pilares de la ideología capitalista, pero es evidente que
si tenemos en cuenta todos los factores y variables, ese es un hecho imposible en términos
absolutos y relativos, ya que como hemos comentado son los grandes plutócratas y oligarcas
quienes disponen de la mayoría de la información y por su propio interés nunca la comparten.
-El libre mercado aborrece el intervencionismo de los estados-nación, es más, a través de los
tratados de libre comerció que se han aprobado o se siguen intentando aprobar y de sus
consejos, se limita la soberanía de estos en cuanto a regulación así como en cuanto a
demarcación de estándares cualitativos, por ejemplo aplicando el principio de precaución, que
es inverso en EUA y en Europa. En el primer caso, se comercializa el producto y luego hay que
probar que no sea nocivo, en cambio en Europa el proceso es inverso.
Además es bien sabido que el “capitalismo” sufre de oscilaciones o de burbujas y crisis
cíclicas (probablemente la que afrontamos no tenga esa naturaleza) a lo que Adam Smith
proponía que en dichos casos el estado-nación debía intervenir. En el caso de las burbujas,
regulando precios y en el caso de crisis insuflando capital y políticas estatales para estabilizar la
situación al estilo New Deal. Nada más alejado de la realidad, cuando en estadios de burbuja,
los beneficios a costa de los precios para los consumidores van en mayor parte a las arcas de
los plutócratas, pero en cambio en tiempos de crisis, el estado debe, por ejemplo, rescatar a
los bancos con dinero público, dinero que no se recupera en cuanto las mismas entidades
publican beneficios históricos.
-Es una expresión muy extendida entre las mentes neoliberales “el efecto goteo” según el
cual, si hay una clase o un grupo social que dispone de más capital, este genera actividad
económica en forma de empleo gasto por parte de quién posee que va así filtrando la riqueza
hacia los sustratos inferiores de la sociedad.
Ese es un hecho y una teoría que se han mostrado falaces en todos los estudios sobre
desigualdades existentes a día de hoy o al menos en los más relevantes. Es más, Adam Smith
no apelaba a la acumulación en los eslabones superiores de la sociedad para, de forma
sistemática o automática filtrar esa riqueza a las capas inferiores, sino que lo que proponía en
realidad era un sistema en el que, sí, creía necesario que ciertos agentes dispusieran de
acumulación de capital y recursos, al estilo de los terratenientes, para poder de ese modo
competir en los mercados, obtener mayores beneficios debido a la capacidad de una mayor
inversión, ofrecer más trabajo y en este caso repartir beneficios, no en forma de goteo o
solamente a través del pago por salario sino por una cuestión moral, ya que dicho agente
había usado el sistema, la acumulación y el trabajo asalariado para obtener unos beneficios
que debían revertir en cierto grado en el resto de la sociedad.
Por lo tanto, pienso que más que de capitalismo, actualmente podríamos hablar de un
“proyecto neoliberal” ya que el concepto “capitalismo” no se ajusta a la realidad actual, que
más bien responde a un proyecto orquestado por una élite de agentes plutócrata,
aprovechando las dinámicas y estructuras comentadas anteriormente que aunque
actualmente marque las pautas dentro de unos límites razonables, no disponen de la
capacidad de análisis y control de todas las variables para controlar procesos sociales,
civilizatorios y en definitiva naturales que condicionan la dinámica social por completo .
EFECTOS:
Los efectos de este “proyecto neoliberal” son los que están propiciando y propiciaran el
cambio al que me quiero referir. Se trata de un cambio de paradigma obligado que cambiará la
estructura bio-geo-física y por lo tanto la civilizatoria, en el segundo caso de forma voluntaria o
forzosamente, lo que nos remite a distintos escenarios posibles. Se trata de una morfogénesis
provocada por los agentes y su estructura organizativa, que generará un cambio en nuestro
entorno vital (somos seres interdependientes y eco-dependientes) el cual actuará de forma
exógena obligándonos a un cambio social probablemente de un calado sin precedentes en la
historia de la humanidad.
De acuerdo con Nisbet, se trata de un cambio necesario, pero que puede ser abordado o no
(de momento no se está haciendo) por lo que presenta distintos escenarios posibles.
Según la definición de Charles Tilly, dependerá de la conducta social que se produzcan
cambios en una vía u otra, hacia la diferenciación o bien hacia la des-diferenciación o en este
caso al colapso y que seguramente generará patologías sociales ya que el cambio social
dependerá del grado de brusquedad con el que este se produzca que va a ser muy alto en
cualquiera de los casos y que si se afronta con consciencia, generará una forma legítima de
conflicto de una mayoría desposeída que sufre las consecuencias de la tiranía de unos pocos
adalides del proyecto neoliberal que están generando que la base para nuestra existencia se
vuelva harto imposible, o al menos la de la mayoría.
Immanuel Wallerstein nos dice que la noción de desarrollo mantiene la idea típica de las
disciplinas sociales del s.XIX de la existencia de tres sub-campos separados: el político, el
económico y el social, como si mantuvieran trayectorias separadas que debían analizarse por
separado, con ciencias separadas, cuando en realidad esto no es más que un sinsentido, y las
nuevas orientaciones teóricas nos muestran que la ciencia social globalizada, necesariamente
debe ser interdisciplinar.
Actualizando la reflexión de Wallerstein a los distintos estudios que van apareciendo en los
últimos años, desde el informe Meadows encargado por el Club de Roma, hasta los más
actuales del I.P.C.C pasando por las teorías de la Bío-Economía de Nicholás Georgescu-
Roegen, entre otros, yo añadiría a esos supuestos sub-campos la biología, la geología, la
climatología, la demografía y sobretodo la física, ya que ahí es donde hemos provocado los
desajustes que nos llevan al problema y al mismo tiempo a la potencialidad de cambio y es en
esos campos dónde como civilización deberemos afrontar los grandes retos que se nos
plantean.
CAMBIO CLIMÁTICO.
El Cambio Climático es uno de los principales retos que debemos afrontar como civilización y
una de las problemáticas generadas por el “proyecto neo-liberal”. Éste, genera una serie de
desajustes ambientales que se van acelerando continuamente y de forma exponencial, algunos
de los cuales nos llevan a activar dinámicas de retroalimentación en ciclos bío-geo-físicos que
nos pueden llevar a puntos de no-retorno y con consecuencias catastróficas e impredecibles.
Los principales efectos del cambio climático son:
• Temperaturas más cálidas: lo que provocaría desertificación, incendios,…
• Tormentas más intensas: debido a la desestabilización de los ecosistemas y la
biosfera y los consiguientes cambios climatológicos y meteorológicos.
• Propagación de enfermedades: sobretodo de ambientes tropicales como la malaria,
que serían más fácilmente transmisibles a través de los mosquitos.
• Olas de calor más fuertes: con su consecuente morbilidad, sobre todo en las esferas
más empobrecidas.
• Derretimiento de los glaciares: No solo provocando un aumento de las temperaturas
sino también la crecida del nivel del mar con la consecuente salinización de aguas
dulces y la posible rotura o variación de las corrientes oceánicas lo que afectaría
drásticamente a la meteorología y al desplazamiento de plancton y kril, lo que
afectaría directamente a la cadena trófica marina i su interrelación con la terrestre.
• Huracanes más peligrosos: e impredecibles causando estragos sobre todo entre los
más desfavorecidos.
• Cambio de los ecosistemas: Impredecibles a partir de cierto punto. Para empezar,
desertificación dentro del área de los trópicos y aumento de la pluviosidad fuera de
ella.
• Desaparición de especies animales: Nos encontramos ya dentro de la sexta gran
extinción.
• Aumento del nivel del mar: con la consecuente destrucción de las áreas comúnmente
más pobladas y la salinización de aguas dulces.
• Alimentos más caros: debido a la menor disponibilidad por múltiples factores, entre
ellos la escasez de agua o de combustibles para el transporte.
COLAPSO SOCIOECONÓMICO.
Vivimos en un sistema socioeconómico basado en el crecimiento ilimitado lo que provoca el
agotamiento de la base material necesaria para la vida. Desde la separación del tipo de
cambio con un material físico como el patrón oro “Bretton Woods” al paso del tipo de cambio
entre monedas y la creación de dinero por parte de las empresas y banca privada a través,
básicamente del crédito, en vez de por parte de los bancos centrales teniendo esa moneda el
Valor del tipo correspondiente en comparación con otras monedas, la economía ha podido ir
creciendo de forma exponencial sin ir ligada a una base material lo que termina en una crisis
de la deuda en este caso global (La deuda global a 2019 tripica al PIB global). Además este
crecimiento exponencial e incontrolado provoca:
• Disminución de disponibilidad energética: ya que la mayor parte de nuestra energía
provienen de los combustibles fósiles y éstos han llegado casi en su totalidad a sus
picos de extracción y las energías renovables no nos ofrece en la misma tasa de
retorno energético.
• Agotamiento de los recursos naturales. (materias primas): muchas de ellas renovables
pero convertidas en no-renovables debido a su sobre explotación.
• Problemas de producción y abastecimiento alimentarios: debido a las futuras sequías
extremas, al monocultivo y a los problemas de distribución derivados de la escasez de
energía necesaria para su transporte.
• Problemas de acceso/gestión de recursos hídricos: debido a la desertificación y a la
salinización de las aguas dulces.
HUELLA ECOLÓGICA.
Todo ello es medible fácilmente gracias a la huella ecológica, que cómo podemos comprobar a
continuación sobrepasa con creces los límites planetarios que serían equivalentes a uno o
menos para su sostenibilidad.
La huella ecológica es el indicador del impacto ambiental generado por la demanda humana
que se hace de los recursos existentes en los ecosistemas del planeta, relacionándola con la
capacidad ecológica de la Tierra de regenerar sus recursos.
PROCESO DE OBTENCION DE ENERGÍA.
El proceso de obtención de energía no es circular ni lineal, siempre utilizamos y perdemos
energía al transformarla de acuerdo con la segunda ley de la termodinámica o sea la entropía.
PROBLEMÁTICAS CON LA ENERGÍA.
• Picos de extracción de combustibles fósiles: hemos llegado ya al pico de extracción de
petróleo y estamos a punto de llegar a los del gas, carbón, uranio. Eso no sólo afecta a
la disponibilidad neta de energía sino a su precio debido a la oferta/demanda. No hace
falta que el recurso en cuestión se agote, simplemente que sus niveles de producción
disminuyan para que dejen de convertirse según la economía capitalista en un
recurso, ya que dicha economía sólo considera recurso aquel que produce un
beneficio al ser usado por lo que no tiene en cuenta el valor de uso, sino el valor de
cambio.
• Energía nuclear (uranio): funciona con uranio un material finito del que ya estamos
llegando al pico de extracción.
• Materiales.(para las renovables): Neodimio, Terbio, Indio, Disprosio, Praseodimio,
Tantalio, Niobio, Didimio, Litio, son necesarios para la construcción de paneles solares
molinos eólicos y la mayoría de tecnología para obtener energías renovables. La
mayoría de ellos son materiales raros y escasos.
• Que es un recurso energético?: Segunda economía neoliberal imperante es aquel que
al ser extraído produce un beneficio, aquel que es rentable económicamente extraer
(no aquel que sería deseable o no) por lo que frente a la disminución de la
disponibilidad de combustibles fósiles y la baja tasa de retorno energético de la
renovables es probable que no sea rentable la extracción de dichos materiales.
• Disminución de la disponibilidad de energía. (TRE, eficiencia): nunca antes habíamos
tenido a disposición tal cantidad de energía “gratis” y con unas tasas de retorno
energético tan altas. El petróleo nos llegó a proporcionar veinte unidades de energía
por cada unidad inserida. El “fracking” nos retorna aproximadamente cinco unidades y
las renovables suelen retornarnos de una a cinco unidades.
• Transición energética (autoconsumo/comercialización): si la transición energética se
realiza hacía un modelo de autoconsumo este puede ser sostenible. En el caso de que
se opte por la producción en masa y la posterior comercialización ligada al precio
marginal de la subasta energética esto nos sigue evocando a una espiral de
crecimiento y a la insostenibilidad.
• Subasta energética a precio marginal: en la subasta energética precio marginal
primero entran las energías renovables luego la biomasa luego la energía nuclear para
posteriormente pasar a los combustibles fósiles como el gas o el petróleo. Eso hace
que terminemos pagando las energías renovables a precio de combustible fósil por lo
que o bien se cambia el sistema de producción y distribución energética o seguiremos
en el mismo sistema con espiral de crecimiento insostenible.
MATERIALES.
El modelo de producción lineal crecentista agota los recursos materiales a un ritmo que la
Tierra es incapaz de regenerar (Huella Ecológica).
Recursos→Producción→Transporte→Consumo→Reciclaje→Residuos
Esta sería una línea de producción estándar pero en el caso de la línea de producción
capitalista nunca tuvo en cuenta los recursos ni los residuos obviando durante mucho tiempo
las externalidades producidas por dicho sistema. Además, el transporte lo podemos encontrar
en varias partes del proceso.
• Materiales renovables y no renovables: el planeta dispone de materiales renovables y
no renovables pero incluso los renovables se vuelven no renovables si el ritmo de
extracción de los mismos es más elevado que el ritmo de recuperación. (Huella
Ecológica)
• Materiales raros (escasos) muy usados sobretodo en nuevas tecnologías: Neodimio,
Terbio, Indio, Disprosio, Praseodimio, Tantalio, Niobio, Didimio, Litio, son materiales
raros y escasos que en muchos casos además son de difícil recuperación o
reutilización, por lo que es posible que no dispongamos de la suficiente cantidad para
realizar la transición energética necesaria. Muchos de ellos además se encuentran en
China y Bolivia, con los conflictos geopolíticos que ello pueda suponer.
ALIMENTACION.
Aparte del evidente problema de abastecimiento alimenticio para una población creciente el
modelo de producción alimentario genera externalidades que afectan directamente a los
ecosistemas y la base material del planeta.
• Responsable de aprox. el 30% de gases de efecto invernadero: el modelo productivo
sobretodo de la industria cárnica representa un alto porcentaje del total de gases de
efecto invernadero producidos por el hombre.
• Los cultivos extensivos destruyen los ecosistemas (incluso los “ecológicos”): los cultivos
extensivos y monocultivos destruyen la biodiversidad de los ecosistemas así como su
fertilidad y resiliencia.
• Transporte/pesticidas/abono: el transporte de alimentos en varias fases de la línea de
producción y el uso de pesticidas y abonos químicos hacen de este un modelo
productivo insostenible para los ecosistemas y la biosfera.
• Transgénicos (resistencia y patentes): para algunos los transgénicos son la solución al
problema alimentario global, pero los transgénicos son más resilientes que las
especies autóctonas, por lo que también destruyen los ecosistemas. Además el hecho
de que la mayoría de semillas transgénicas estén patentadas, hace que si estas
polinizan un campo vecino este deba pagar por la patente a su propietario, por lo que
se pierde la soberanía alimentaria.
• Bancos de semillas. Aunque exista un banco de semillas global que consista en
mantener las plantas vivas en su propio ecosistema, el mayor banco de semillas
mundial es de propiedad privada, con gran parte de las semillas de origen
transgénico, lo que afecta directamente a la soberanía alimentaria y al futuro sistema
productivo alimentario en caso de catástrofe.
• Ecológico, biológico, orgánico, de proximidad….: La mayoría de etiquetas ecológicas,
biológicas, orgánicas o de proximidad sólo nos indican el modo de cultivo o su origen,
pero no su huella ecológica en real, por lo que muchos casos aún y disponer de la
etiqueta, muchos productos tienen una huella ecológica insostenible.
• ¿Permacultura Ecológica y de proximidad? Seguramente la permacultura ecológica y
de proximidad sea la única solución posible ya que se trata de uno de los pocos
modelos productivos alimentarios con una huella ecológica sostenible.
• Disponibilidad de agua: probablemente la disponibilidad de agua sea uno de los
problemas más grandes que deba afrontar la humanidad ya que es la base de la vida.
La salinización, acidificación, la desertificación y la contaminación de las aguas dulces
del planeta, mermando su disponibilidad, probablemente sea uno de los principales
motivos de conflicto geopolítico en el futuro.
QUE PROPONEN LAS INSTITUCIONES?
Las propuestas de las instituciones tanto gubernamentales como empresariales son
prácticamente nulas, ciñéndose en muchos casos a propuestas continuistas o como mucho
reformistas aplicándoles un lavado verde o “greenwashing”.
Greenwashing.
Eco-blanqueamiento, lavado verde o lavado de imagen verde es una forma de pseudo-
ecologismo, una propaganda en la que se realiza marketing verde de manera engañosa para
promover la percepción de que los productos, objetivos o políticas de una organización son
respetuosos con el medio ambiente con el fin de aumentar sus beneficios.
ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible).
Los ODS o Objetivos del Desarrollo Sostenible promovidos por la ONU, son una serie de
diecisiete propuestas o líneas a seguir para conseguir como su mismo nombre indica, un
desarrollo sostenible.
Se trata de una serie de medidas o pautas, no vinculantes, por lo que la mayoría de países no
los cumple al igual que la mayoría de acuerdos de las distintas COP (Cumbres por el Clima).
La mayoría de los objetivos de desarrollo sostenible se basan en el crecimiento económico, en
aumentar la capacidad productiva agrícola, no hay mención ninguna a la reducción del
consumo energético, hay mención específica a un aumento de los tratados libres de aranceles
o tratados de libre comercio por lo que se otorgaría la soberanía a las grandes multinacionales
y plutócratas que sólo tienen interés en su propio beneficio y que reproducen el sistema que
está destruyendo nuestro soporte vital.
Hablan también de sensibilizar a los consumidores sobre hábitos de consumo culpando así a
los individuos cuando son las empresas productoras las mayores emisoras de gases de efecto
invernadero con su modelo productivo. Es más, la mayoría de residuos no los genera el
consumidor, sino que ya han sido generados en la línea de producción.
Finalmente, otra de las propuestas, sugiere preservar la vida silvestre y animal a través de la
recaudación de fondos, reproduciendo una vez más el sistema que está generando el
problema, en vez de abandonar las prácticas que lo provocan y entrando así en un bucle de
retroalimentación.
COPs.
Como se ha podido comprobar en las distintas cumbres por el clima, no hay ninguna voluntad
por parte de los gobiernos de los países más contaminantes de tomar medidas al respecto
(de hecho, no se ha llegado a ningún acuerdo relevante). Es más, los países más contaminantes
como Estados Unidos o China, ni tan siquiera han tomado parte de dichas cumbres, incluida la
última en Madrid.
Campañas institucionales.
La mayoría de campañas institucionales van dirigidas a la culpabilización de los individuos, se
trata de la individualización y mercantilización de un problema común y estructural.
Ecoembes por ejemplo, empresa que gestiona los residuos en España, es propiedad de varias
empresas que se encuentran entre las más contaminantes del mundo, entre ellas Coca-Cola,
Nestlé o Danone. Dicha empresa, Ecoembes, sólo es capaz de recuperar el 33% de la fracción
amarilla, para luego revendernos los envases producidos con parte de sus propios residuos a
través de dichas empresas, por lo que sacan doble beneficio, el pago por la gestión de los
residuos producidos por ellos mismos y el beneficio de revendernos-los.
También está la conocida campaña de “si no va, no vuelve”. Dicha campaña culpa a los
individuos por no separar la fracción orgánica. Se nos informa de que si separamos la fracción
orgánica se podrá producir biogás que nos será devuelto en forma de electricidad.
En realidad, al separar nuestra fracción orgánica ciertamente se produce biogás, el cual pasa
por la subasta energética de precios marginales y nos es devuelto en forma de electricidad,
pero a precio de combustible fósil.
Economía Circular.
Se trata de una estrategia que tiene por objetivo reducir tanto la entrada de materiales como
la producción de desechos vírgenes, cerrando los bucles o flujos económicos y ecológicos de
los recursos.
Se trata de una propuesta muy extendida sobre todo entre las empresas e incluso dentro de
los programas electorales de los partidos políticos. Aunque se trate de una alternativa mejor al
sistema actual, no deja de tratarse de una medida reformista e incluso continuista, que nos
llevaría a un desenlace igual, pero quizás, ganando un poquito de tiempo.
Como he comentado con anterioridad la segunda ley de la termodinámica (la entropía) impide
que el proceso de producción sea circular, ya que siempre perdemos energía en el proceso de
obtención de la misma y recuperamos un pequeño porcentaje de los materiales que forman
parte de los residuos.
Por lo tanto, si el proceso de producción no puede ser circular, la economía tampoco y menos
cuando se pretende obtener beneficio de esta supuesta circularidad.
Algunos pretenden solucionar el problema “desmaterializando la economía”, pretendiendo así
mantener el crecimiento exponencial necesario para la supervivencia del capitalismo. Pero ese
hecho tampoco es posible, ya que no se puede basar toda la economía en el tercer sector o
sector servicios, incluidos los virtuales, ya que sin la base material necesaria para la
reproducción de la vida, el resto de actividad económica no sería posible. Como dijo aquel
“sólo cuando hayan cortado el último árbol se darán cuenta que el dinero no se come.”
Para terminar aunque el proceso de economía a circular también llamado “de estado
estacionario” fuera posible, en estos momentos no sería viable, ya que ya hemos sobrepasado
la huella ecológica global de 1, con los efectos conocidos que ello conlleva, por lo que antes de
aplicar medidas parecidas sería necesario reducir dicha huella a 1 o menos, ya que ya nos
hemos extralimitado con los límites del planeta.
POSSIBLES ESCENARIOS ANTE EL COLAPSO.
Ante el colapso socioeconómico y ecológico que debemos afrontar y como hemos comentado
con anterioridad, que ya fue predicho por el informe Meadows y ha sido corroborado por los
distintos informes del IPCC (panel intergubernamental para cambio climático), se abren
distintas vías de actuación o escenarios con sus pertinentes consecuencias. Voy a intentar aquí,
anticipar brevemente alguna de ellas con los cambios sociales radicales que supondrían.
CONTINUISMO (BUSINESS AS USUAL).
Éste probablemente sea el escenario preferido por el “stablishment”. En él, se continuaría con
el mismo modelo que actualmente, seguramente con un “greenwashing” por parte de todas
las instituciones, tanto gubernamentales (que difícilmente conservarían mucha autonomía)
como empresas para ganarse a parte de la opinión pública. Con un marcado tecno-optimismo
que claramente sería la válvula de escape en pos de un futuro mejor.
En este escenario, ante el avance de los efectos del calentamiento global y la escasez de
recursos, lo más probable es que se extendiera el Eco-fascismo. Una lucha geo-política
encarnizada por los recursos, posiblemente con un alto gradiente identitario, tanto de clase
como de etnia o sentimiento patriótico. Seguramente se trataría de una civilización menos
globalizada por la escasez de energía, por lo que se crearían poderes regionales muy fuertes
pero dónde también se abriría la posibilidad de surgimiento de pequeñas sociedades auto-
organizadas y sostenibles ya que la capacidad de control a gran escala de las grandes
superpotencias decaería. Aún así la práctica totalidad o incluso la totalidad de la raza humana
se vería abocada a la extinción ante la escasez de recursos, pero sobre todo a los bucles de
retroalimentación que habríamos activado en los ecosistemas y la biosfera los cuales harían
del planeta tierra un lugar no apto para la vida humana.
REFORMISMO (GREEN NEW DEAL GLOBAL).
Escenario reformista por el que apuestan la mayoría de fuerzas social-demócratas. Se trataría
de un Neo-Keynesianismo con un New Deal al estilo Roosvelt, pero a nivel global y con las
políticas de estado y las inversiones dirigidas a medidas verdes, como la supuesta transición
ecológica a energías verdes (aunque ya saben que serán insuficientes incluso pudiendo cubrir
la extensión del planeta tierra 3 veces), un mejor sistema de reciclaje y reaprovechamiento,
políticas fiscales sobre las emisiones de gases de efecto invernadero, fondos para los rescates
por emergencia climática o desastre natural y en definitiva intentar instaurar algún tipo de
economía circular, que como he comentado con anterioridad es imposible según las leyes de la
física.
En definitiva, buenas intenciones (probablemente el intento de una sociedad socialmente más
justa y ecológica), pero insuficientes, que probablemente solo nos permitirían ganar tiempo
para quizás encontrar alguna solución tecnológica o para pasar directamente al escenario del
Eco-fascismo ya que dicho sistema o proyecto neoliberal, seguiría necesitando de crecimiento
económico exponencial e infinito para mantener sus “políticas del bienestar”.
RUPTURISMO (DECRECIMIENTO).
Escenario rupturista. Se trataría de un cambio de paradigma total, con un cambio de
consciencia común hacia sociedades auto-organizadas, auto-sostenibles, comunitaristas,
respetuosas e integradas con su entorno y sobre todo con un metabolismo mucho menor.
No se trata de una marcha atrás, ya que eso no es posible y tampoco deseable, sino de aplicar
los conocimientos adquiridos según la Razón y no según los intereses del mercado de los
plutócratas. Quizás en una “nueva ilustración radical” como nos explica Marina Garcés. Al fin
y al cabo como nos expone Kropotkin en “El apoyo mutuo”, somos seres eco-dependientes e
interdependientes y así es como hemos sobrevivido hasta ahora.
El decrecimiento es una corriente de pensamiento político, económico y social favorable a la
disminución regular y controlada de la producción económica con el objetivo de establecer
una relación de equilibrio entre el ser humano y la naturaleza ya que como hemos
comentado, somos seres interdependientes y eco-dependientes.
El concepto ideológico de decrecimiento surge sobre la década de los 70 (cuando se publica el
informe Meadows) de la mano del economista y matemático Nicholás Georgescu-Roegen
(padre de la bio-economía), quien decía que “la economía debe ser una rama de la biología ya
que somos una de las especies biológicas de este planeta y como tal estamos sometidos a
todas las leyes que gobiernan la existencia de la vida terrestre ". También de Ivan Illich y
posteriormente de las tesis de Serge Latouche entre otros. Sin embargo, ya se habían
asentado unas bases con anterioridad en las obras de Estoicos y Cínicos, de Henry David
Thoreau y las corrientes anti-industriales del siglo XIX en Estados Unidos, Lev Tolstoi en Rusia
o Gandhi, quien reflexionaba sobre el papel de cada individuo en la sociedad.
La interpretación de Gandhi acerca a la práctica de la vida sencilla y la simplicidad voluntaria.
“Necesitamos vivir simplemente para que otros puedan simplemente vivir”. En su obra
realiza una crítica al desarrollo y a la noción de civilización representada por Gran Bretaña y los
occidentales. Gandhi muestra que cada progreso conseguido implica el agravamiento de las
condiciones de vida, y que la civilización occidental deja de lado la moralidad y la religión y
crea nuevas necesidades relacionadas con el dinero, imposibles de satisfacer y que aumenta
por tanto las desigualdades.
Aunque las tesis del decrecimiento son básicamente la antítesis de las necesidades y efectos
del capitalismo y la sociedad de consumo (decrecimiento, des-patriarcalizar, des-tecnologizar,
des-urbanizar, des-complejizar,....) beben de una de las anomalías principales de las ideologías
hegemónicas surgidas después de la revolución francesa y la revolución industrial, ya sea el
mismo capitalismo o el comunismo ... y es que aunque el comunismo sí que planteaba el
problema ecológico, ambas corrientes necesitaban de un crecimiento continuo y ilimitado en
un entorno con unos recursos limitados.
Durante los inicios de su gestación ideológica hasta no hace mucho tiempo, la base argumental
se cimentaba en la observación de los sucesos que se producían en las sociedades post-
industriales y en las anomalías teóricas y prácticas que se producían dentro de estos
paradigmas pero, aunque podía resultar sencillo prever las consecuencias ecológicas y de
desigualdades sociales, carecían evidencias o base empírica para probar tales anomalías.
En este sentido hoy en día resulta sencillo observar las consecuencias del cambio climático o
de las desigualdades que genera el modelo capitalista pero además contamos ya con estudios
empíricos y con modelos de medición del bienestar alternativos al PIB como serían:
- el indicador de progreso genuino o real (IPG)
- el sistema de contabilidad ambiental económica integrada (SCAE)
- el PIB verde
-el Índice de desarrollo humano (IDH).
-la felicidad interior bruta (FIB)
-los indicadores del tipo huella, como la huella ecológica o la huella hídrica, que miden la
sostenibilidad de una región, producto o actividad respecto a su consumo de recursos
naturales.
Hay que tener en cuenta que el decrecimiento es el camino hacia otro tipo de vida o
paradigma, no el paradigma en sí, el cual tal vez lo podríamos encontrar en el ecologismo
social o el "Buen Vivir". También que toda acción o iniciativa que emprendamos chocará
directamente con el paradigma capitalista y consumista imperante lo que hará que entramos
en contradicciones y paradojas constantemente (Paradoja de Jevons) y finalmente que
hablamos de una corriente de pensamiento que pretende modificar y sustituir el modelo
actual.
Cabe recordar (y este es uno de los principales lastres de comprensión del Decrecimiento) que
estamos hablando de decrecer voluntaria, ordenada y pausadamente hasta alcanzar unos
niveles de metabolismo socioeconómico compatibles con nuestro entorno, potenciando el
bienestar, los cuidados, el placer por el saber, la observación, la creación, la abundancia
frugal… en vez de buscarlos en placeres fugaces y frustrantes relacionados con el consumismo,
la posesión y la acumulación. Por lo tanto hablamos de un cambio de paradigma decrecentista,
de cambio de modelo productivo, pasando de producir por valor de cambio a hacerlo por
valor de uso.
Este decrecimiento es imposible sin un cambio de paradigma en todas las esferas, ya que
dentro del modelo capitalista representaría crecimiento negativo, lo cual nos evocaría a crisis
y su autodestrucción. Incluso si la economía circular fuera posible, representaría un estado
estacionario, de crecimiento 0, por lo que tendría las mismas consecuencias.
CONCLUSIÓN.
Las evidencias científicas nos muestran que, lo queramos o no, vamos a decrecer socio-
económicamente, voluntaria o involuntariamente, posiblemente de forma traumática en
ambos casos debido al retraso en la toma de consciencia y medidas que hemos acumulado.
Pero del camino que tomemos y de la presteza con la que lo hagamos dependerán nuestra
subsistencia y la de los seres de nuestro alrededor así como la construcción de sociedades
más justas e igualitarias, basadas en la Razón e interconectadas con su entorno. O por el
contrario, nuestra extinción o una lucha fratricida por unos recursos escasos, en un entorno
devastado en la que ya podríamos denominar “la era de la estupidez”.
Tariq Baig Vila
4/1/20