Date post: | 27-Nov-2015 |
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AGRADECIMIENTOS
AGRADECIMIENTOS
A la Universidad Autónoma Chapingo, por la oportunidad que nos dio de cultivarnos
hasta cosechar una carrera.
Al Departamento de Zootecnia y a los profesores del mismo por las facilidades y apoyos
que otorgaron para el desarrollo y realización del presente trabajo de investigación.
Al MC. Sergio Iban Mendoza Pedroza, al Dr. José Luis Zaragoza Ramírez y al Dr. Eliseo
Sosa Montes por sus atinados consejos, asesoría y dirección en la realización del
proyecto.
Al personal del departamento: los laboratoristas Emilio, José Luis, Eva y Juan Carlos, así
como al señor Cecilio parte importante para la realización del trabajo.
A todos los maestros de quien recibimos los conocimientos que ahora poseemos, además
de brindarnos su amistad y paciencia, quienes colaboraron en nuestra formación
profesional.
DEDICATORIAS
Dedico este trabajo principalmente a Dios, por haberme dado la vida y permitirme el
haber llegado hasta este momento tan importante de mi formación profesional.
Con mucho cariño principalmente a mis padres José Manuel Quezada Raigoza y
Esperanza Torres Escalante, que me dieron la vida y han estado conmigo en todo
momento. A mi amada esposa. Martha Ruth Pérez, a mi hijo José Manuel.
A mis hermanos, Manuel y Alan por estar conmigo y apoyarme siempre, por su cariño y
comprensión los quiero mucho.
A mis tíos, primos y amigos, quisiera nombrarlos a cada uno, pero son muchos. Eso no
quiere decir que no me acuerde de cada uno, a todos los quiero mucho, gracias por todo.
A la familia de mi esposa, le agradezco el apoyo incondicional que me brindaron durante
la realización de este trabajo.
Ilises Quezada Torres
A mis padres Graciela López Hernandez y Nicolas Aguilar Guzmán: a quienes debo mi
vida y de cuyos esfuerzos y sacrifícios he obtenido una formación como ser humano y
que me han impulsado para lograr mis metas.
A mis hermanos, Ana Yosmeri, Adrian y Antonio por compartir conmigo buenos y malos
momentos.
A todos y cada uno de mis amigos por brindarme su amistad limpia y sincera; por su
apoyo y consejos que me brindan incondicionalmente.
Alain Aguilar López
ÍNDICE
LISTA DE CUADROS ……………………………………………………………………..... I
LISTA DE FIGAS…….…………………………………………………………………….... II
LISTA DE ANEXOS ……………………………………………………………………...... III
RESUMEN…………….………………………………………………………………......... IV
SUMARY………………………………………………………………………………………V
1. INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………………1
2. REVISIÓN DE LITERATURA…………………………………………………………..3
2.1 Origen…………………………………………………………………………………….3
2.2 Características taxonómicas………………………………………………………......3
2.3 Órganos Vegetativos………………………………………….………………………...4
2.3.1 Raíces……………………………………………………….…………………………4
2.3.2 Tallos ……………………………………………………….…………………………..5
2.3.3 Hojas…………………………………………………………………………………..5
2.3.4 Lígulas………………………………………………………………………………....5
2.3.5 Órganos reproductivos……………………………………………………………….6
2.4 Factores que afectan la producción de forraje…………………………………........8
2.4. Clima …………………………………………………………………………………...8
2.4.2 Radiación solar y crecimiento vegetal ............................................................. 10
2.4.3 Defoliación ....................................................................................................... 11
2.4.4 Habito de crecimiento……………………………………………………………….14
2.4.5 Enfermedades………………………………………………………………………..14
2.5 Factores que influyen en la calidad del forraje……………………………….........15
2.5.1 Temperatura………………………………………………………………………….15
2.5.2 Precipitaciones……………………………………………………………………....17
2.5.3 Suelo ………………………………………………………………………………….18
2.5.4 Fertilización ..................................................................................................... 19
2.5.5 Estado de madurez ........................................................................................ .20
2.6 Análisis de alimentos…………………………………………………………………..24
3. MATERIALES Y MÉTODOS ................................................................................ 25
3.1 Localización………………………………………………………………………….....25
3.2 Obtención de muestras…………………………………………………………….....25
3.3 Análisis de la composición química………………………………………………….26
3.3.1 Contenido de materia seca parcial………………………………………………...26
3.3.2 Contenido de humedad ................................................................................... 26
3.3.3 Determinación de cenizas totales y materia inorgánica. ................................. 27
3.3.4 Determinación de extracto etéreo ................................................................... 28
3.3.5 Determinación de fibra cruda .......................................................................... 28
3.3.6 Determinación de nitrógeno total. .................................................................... 28
3.3.7 Determinación de fibra detergente neutro ....................................................... 29
3.3.8 Determinación de fibra detergente ácido ......................................................... 29
3.3.9 Digestibilidad in vitro de la materia seca de un forraje .................................... 30
3.4 Análisis estadístico…………………………………………………………………….30
4. RESULTADOS Y DISCUSIÒN………………………………………………………...31
4.1 Cenizas…………………………………………………………………………………31
4.2 Proteína cruda………………………………………………………………………....33
4.3 Extracto Etéreo………………………………………………………………………...36
4.4 El análisis del contenido de Fibras…………………………………………………..38
4.4.1 Fibra cruda ...................................................................................................... 38
4.4.2 Fibra detergente neutro ................................................................................... 41
4.4.3 Fibra detergente ácido..................................................................................... 43
4.5 Análisis de digestibilidad in vitro de la materia seca……………………………….45
5. CONCLUSIONES ................................................................................................ .49
6. LITERATURA CITADA ......................................................................................... 57
7. ANEXOS .............................................................................................................. 50
I
LISTA DE CUADROS
Cuadro 1. Ventajas y desventajas de la defoliación mediante apacentamiento. ..... 13
Cuadro 2. Efecto de madurez en la composición química de distintas especies de
zacate. ....................................................................................................................... 23
Cuadro 3. Composición de las diferentes determinaciones del análisis proximal .... 24
Cuadro 4. Esquema básico de análisis de forrajes usando detergentes. ................. 29
II
LISTA DE FIGURAS
Figura 1. Raíces adventicias del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) ........................ 4
Figura 2. Morfología de las hojas del zacate Maralfalfa. ............................................ 5
Figura 3. Inflorescencia de Maralfalfa (Pennisetum sp). ............................................. 6
Figura 4. Esquema de las espiguillas del zacate Maralfalfa. ....................................... 7
Figura 5. Porcentaje de cenizas en planta completa, hojas y tallos del zacate
Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad. ......................................... 32
Figura 6. Porcentaje de Proteina cruda en planta completa, hojas y tallos del
zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad. ............................... 35
Figura 7. Porcentaje de extracto etéreo en planta completa, hojas y tallos del zacate
Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad……………………………….37
Figura 8. Porcentaje de Fibra cruda en planta completa, hojas y tallos del zacate
Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad……………………………….40
Figura 9. Porcentaje de fibra detergente neutro en planta completa, hojas y tallos del
zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad………………………42
Figura 10. Porcentaje de Fibra detergente ácido en planta completa, hojas y tallos
del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad………………….44
Figura 11. Digestibilidad in vitro de la materia seca en planta completa, hojas y tallos
del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) en diferentes días de edad…………….……48
III
LISTA DE ANEXOS
Anexo 2. Proteína cruda (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte. ......... 50
Anexo 1. Cenizas (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte. ................... 50
Anexo 3. Extracto etéreo (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte. ........ 51
Anexo 4. Fibra cruda (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte. .............. 51
Anexo 5. Fibra detergente neutro (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
.................................................................................................................................. 52
Anexo 6. Fibra detergente acido (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
.................................................................................................................................. 52
Anexo 7. DIVMS (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte….…………….53
Anexo 8. Disminución y aumento en unidades porcentuales de los componentes
químicos y digestibilidad de las plantas, hoja y tallo del zacate Maralfalfa
(Pennisetum sp.)…………………………………………………………………………….53
IV
RESUMEN
CAMBIOS EN LA COMPOSICIÓN QUIMICA DEL FORRAJE DE MARALFALFA
(Pennisetum sp.) CON LA EDAD DE LA PLANTA.
Maralfalfa (Pennisetum sp.) es un zacate tropical originario de Colombia, al que se la atribuye un alto potencial nutritivo y forrajero, por lo que ha sido muy difundido en los últimos años en México; sin embargo, es necesario conocer su composición química y calidad nutricional conforme avanza su edad para con ello realizar un manejo adecuado de la especie. Para esto fue propuesto el presente estudio, con el objetivo de evaluar el efecto de la madurez sobre la calidad del zacate, determinando el contenido de Humedad total (HT %), Cenizas (CZ %), Proteína cruda (PC %), Extracto etéreo (EET %), Fibra cruda (FC %), Fibra detergente acido (FDA %), Fibra detergente neutro (FDN %) y el porcentaje de Digestibilidad in vitro de la materia seca (DIVMS %). Las muestras fueron colectadas en las parcelas de las instalaciones del Sitio Experimental Papaloapan del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), en el municipio de Isla, Veracruz; que se localiza entre los paralelos 18° 02´ latitud Norte y 95° 32´ longitud Oeste, a 65 msnm; cuyo clima es cálido subhúmedo, el más seco con lluvias en verano Aw0, con una temperatura media anual de 25.7°C, precipitación media de 1,000 mm. La parte de análisis químico se llevó a cabo en las instalaciones del laboratorio de Nutrición animal del Departamento de Zootecnia de la Universidad Autónoma Chapingo. Se colectaron plantas con 33, 61, 77, 90, 107, 121, 135, 151, 167 y 184 días de rebrote. Los datos se analizaron con un modelo estadístico completamente al azar con tres repeticiones, utilizando el procedimiento GLM del paquete estadístico SAS. Las comparaciones de las medias se realizaron a través de la prueba de Tukey. El valor nutritivo del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) declinó a medida que avanzó la edad del forraje afectando significativamente su composición química (P< 0.05), se incrementó el contenido de FDN (de 67.1 a 79.1 %), FDA ( de 39.1 a 48.0 %) y FC ( de 27.9 a 40.3 %) al avanzar la edad de corte y se redujo la concentración de PC ( de 8.8 a 3.2 %), EE (de 2.5 a 1.6 %) y CZ (de 14.3 a 6.0 %). Estos cambios en la composición química del zacate, repercutieron en la disminución del porcentaje de digestibilidad in vitro de la materia seca, la cual paso de 83.2 % a los 33 días hasta un 49.8 % en el día 167 de rebrote. El pasto Maralfalfa, posee una calidad nutricional aceptable para la alimentación del ganado, la cual se ve influida por la edad del forraje. Se recomienda el corte entre el día 60 y 65 después del primer corte; en los cuales se concentra la mayor cantidad de nutrimentos y su porcentaje de digestibilidad es alto.
Palabras clave: Maralfalfa, madurez, composición química, Digestibilidad, Proteina.
V
SUMMARY
CHEMICAL COMPOSITION CHANGES ON MARALFALFA FORAGE AS
PLANT AGE INCREASES
Maralfalfa (Pennisetum sp.) is a tropical grass native to Colombia, which is attributed to the high potential nutritive fodder, so it has been widely used in recent years in Mexico, but it is necessary to know its chemical composition and nutritional quality as they age to thereby perform a proper management of the species. To this was proposed in this study, with the objective of evaluating the effect of maturity on the quality of the grass, determining the total moisture content (HT %), ash (CZ %), crude protein (CP %), ether extract (EET %), crude fiber (CF %), acid detergent fiber (FAD %), neutral detergent fiber (FND %) and the percentage of in vitro digestibility of dry matter (IVDMD %). Samples were collected from the plots of facilities Papaloapan Experimental Site of the National Institute for Forestry, Agriculture and Livestock (INIFAP), in the municipality of Isla, Veracruz, which is located between parallels 18° 02' north latitude and 95° 32' west longitude, 65 m, where the climate is warm humid, driest summer rains Aw0, with an average annual temperature of 25.7°C, average rainfall of 1,000 mm. The part of chemical analysis was carried out on the premises of Animal Nutrition Laboratory, Department of Animal Science at the University of Chapingo. Plants were collected at 33, 61, 77, 90, 107, 121, 135, 151, 167 and 184 days of regrowth. Data were analyzed with a statistical model completely randomized with three replications, using the GLM procedure of SAS. Comparisons of means were performed by the Tukey test. The nutritional value of Maralfalfa grass (Pennisetum sp.) Declined as age progressed significantly affecting forage chemical composition (P <0.05), increased FND content (from 67.1 to 79.1 %), FDA (from 39.1 to 48.0 %) and CF (from 27.9 to 40.3 %) with advancing age and reduced cutting CP concentration (from 8.8 to 3.2 %), EE (2.5 to 1.6 %) and CZ (from 14.3 to 6.0 %). These changes in the chemical composition of grass, affected the decrease in the percentage of in vitro digestibility of dry matter, which went from 83.2 % at 33 days to 49.8 % at day 167 of regrowth. The grass Maralfalfa, has an acceptable nutritional quality for animal feed, which is influenced by the age of the forage. We recommend cutting between day 60 and 65 after the first cut, in which the highest concentration of nutrients and digestibility rate is high.
Keywords: Maralfalfa, maturity, chemical composition, digestibility, protein.
1
1 INTRODUCCIÓN
En muchas explotaciones pecuarias, el forraje es considerado la fuente de
menor costo para suplir nutrientes a los animales, por lo que el éxito de dichas
empresas depende en una gran proporción del adecuado uso y manejo de este
elemento. En los últimos años uno de los zacates más difundido en el trópico
mexicano, es llamado Maralfalfa (Pennisetum sp.), es un zacate perenne con alta
productividad al que se le atribuye un contenido de proteína en el forraje que produce
superior al de cualquier otro zacate tropical, incluyendo los del genero Pennisetum,
razón por la cual, muchos ganaderos lo han introducido este con la finalidad de
disponer de un forraje de mayor calidad para alimentar su ganado.
Pocas evaluaciones científicas se han realizado en este zacate para definir
cuáles son las adecuadas prácticas de manejo así como su potencial forrajero y valor
nutritivo. Por estas razones este estudio fue conducido con la finalidad de relacionar
la composición química de las plantas, hojas y tallos del zacate Maralfalfa con la
edad de las plantas lo que va a definir en gran parte el aprovechamiento que se
puede lograr del material disponible; al mismo tiempo puede ayudar a identificar la
edad de cosecha óptima en la cual el material obtenido presente las más aptas
características físicas y químicas para la producción.
2
Es importante asociar la composición química con la edad de las plantas al
momento del corte, ya que el contenido de proteína y la digestibilidad de la materia
seca de las forrajeras disminuyen con la edad de las plantas, entendiéndose por
madurez fisiológica el aumento de los componentes de la fibra de las paredes
celulares de las plantas (Kamstra et al., 1968; Clavero y Razz, 2009; Chacón y
Vargas, 2009; González et al., 2011). El estado de madurez de una planta se
identifica con el estado vegetativo, inicio de floración, floración plena y senescencia
(Kamstra et al., 1968; Jafari y Rezaeifard, 2010). Sin embargo, estas categorías
asociadas al grado de madurez de plantas forrajeras carecen de aplicación práctica
en forrajeras de corte cuando se desea cosechar forraje de mayor calidad. Así que,
se ha empleado la edad de las plantas como sinónimo de madurez fisiológica para
determinar cuándo cortar una planta forrajera con mayor contenido de nutrimentos
(Zaragoza, 1987; Kamstra et al., 1968).
3
2 REVISIÓN DE LITERATURA
2.1 Origen
El zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) es un zacate perene de origen
Colombiano. Es resultado de combinar dos especies forrajeras, el zacate Elefante
(Pennisetum purpureum) y el Mijo perla (Pennisetum glaucum), aparentemente la
idea original fue obtener mediante el cruzamiento un zacate con mejores cualidades
nutritivas (Clavero et al, 2009).
2.2 Características taxonómicas
En plantas de Maralfalfa se han identificado características del Pennisetum
violaceum, y del P. americanum L. x P. purpureum, sin embargo, no hay nada
definitivo sobre su semejanza morfológica con estas especies. Se requiere, sin
embargo, estudios más detallados para establecer su clasificación taxonómica por lo
que se sugiere identificarlo de manera genérica como Pennisetum sp. (Correa et al,
2004).
4
Dawson y Hatch (2002) proponen la siguiente clasificación para el zacate Maralfalfa.
2.3 Órganos Vegetativos
2.3.1 Raíces
Las raíces del zacate Maralfalfa son fibrosas y adventicias que surgen de los nudos
inferiores de las cañas (Figura 1), son de crecimiento rápido y de alta capacidad de
profundizar en el suelo (Correa, 2006).
Reino Plantae
Clase Liliopsida
Orden Poales
Familia: Poaceae
Sub – familia: Panicoideae
Tribu: Paniceae
Género: Pennisetum
Especie: Pennisetum sp.
Figura 1. Raíces adventicias del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) Foto: José Luis Zaragoza Ramírez 2012.
5
2.3.2 Tallos
El tallo es una caña, sin vellosidades, con varios entrenudos cada uno
delimitado por nudos. Los entrenudos en la base del tallo son muy cortos, mientras
que los de la parte superior del tallo son más largos (Correa, 2006).
2.3.3 Hojas
Las hojas nacen de las yemas axilares situadas en los entrenudos, de manera
opuesta una en cada nudo. Están compuestas por lámina, vaina, lígula y aurículas.
La vaina nace del entre nudo, es generalmente cilíndrica que abraza al entre nudo.
La lamina o limbo es plana con nervaduras dispuestas en paralelo. Es común
encontrar bordes pilosos (Correa, 2006).
2.3.4 Lígulas
La lígula nace en el punto de encuentro de la vaina con el limbo y es pilosa,
ver Fig. 2.
Figura 2. Morfología de las hojas del zacate Maralfalfa. Fuente: Correa, 2006.
6
2.3.5 Órganos reproductivos
El principal órgano de reproducción del zacate Maralfalfa es la inflorescencia
en forma de panícula (figura 3), característica del género Pennisetum. A partir del
eje principal surgen ramificaciones verticiladas o individuales que se siguen
ramificando (Häfliger et al, 1980).
Las espiguillas en el zacate Maralfalfa es típica del género Pennisetum, esto
es, presenta seis brácteas: dos glumas, dos lemas y dos paleas (figura 3). Sin
embargo, hace falta adelantar una descripción más detallada de las mismas. Algunas
claves para su clasificación a partir de las estructuras que se pudieran hallar, son las
siguientes: las flores bajas pueden ser estériles y vigorosas o sin estambres, las
Figura 3. Inflorescencia de Maralfalfa (Pennisetum sp.) Fuente: Andrade, 2009.
7
flores superiores pueden ser fértiles, con un tamaño entre la mitad o igual al de las
flores inferiores; las primeras glumas pueden estar fusionadas con callos, sin rodear
la base de la espiga y sin aristas; la lema de la parte superior es suave, sin arista, de
color café a amarillo o púrpura, glabrosa, con márgenes redondeadas o planas, sin
aristas; la palea de las flores superiores están presentes. Poseen tres estambres; y
las anteras son oscuras o grises (Dawson y Hatch, 2002).
Figura 4. Esquema de las espiguillas del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) Fuente: Correa, 2006.
8
2.4 Factores que afectan la producción de forraje
Se entiende por forraje a todo aquel alimento de origen vegetal, que sirve para la
alimentación de los animales. En ciertos casos también se utilizan como forrajes
hojas, ramas, frutos de arbustos y árboles. Estos cultivos pueden ser almacenados
en forma de heno o ensilaje, o consumidos directamente por el ganado, en forma de
pasto o forraje recién cortado. La capacidad de los pastos de garantizar o no las
exigencias nutritivas de los animales para el mantenimiento, crecimiento y
reproducción es lo que se conoce como valor nutritivo. En términos generales, el
valor nutritivo de las especies forrajeras es la resultante de la ocurrencia de factores
intrínsecos de la planta como la especie, parte de la planta, composición química,
digestibilidad, factores ambientales, factores propios del animal y la interacción entre
las pasturas, el animal y el ambiente. También las enfermedades, proceso de
conservación, fertilidad del suelo y fertilización.
2.4.1 Clima
Las circunstancias atmosféricas que rodean a las plantas forrajeras influyen en
su productividad. Ejemplo, la temperatura ambiental regula las tasas de fotosíntesis,
de respiración, de crecimiento, de desarrollo, de aparición y expansión de las hojas,
de aparición y muerte de tallos, de estolones, y del crecimiento radical (Mc Kenzie et
al., 1999). La intensidad de la temperatura cambia día a día y de una estación a otra,
9
debido a estos cambios la distribución del rendimiento de forraje varia de un corte a
otro, así como de una estación a otra (Lemaire, 2001). En tanto que la genética de
las plantas forrajeras, determinan el potencial de cada especie para acumular peso
seco después de cada defoliación (Perreta et al., 1997). El peso seco acumulado es
resultado de la velocidad con la que ocurren los procesos bioquímicos y fisiológicos
relacionados con la síntesis, el transporte y la degradación de sustancias a nivel
celular (Simpson et al, 1987). Estos procesos son regulados por la temperatura, en
gramíneas tropicales la máxima actividad enzimática, asociada a la fotosíntesis, es
entre 35 y 39ºC, y en leguminosas tropicales entre 30 y 35ºC. Pero son reducidas a
temperaturas entre 0 y 15ºC. Pero si las plantas sufren estrés hídrico temperaturas
de 20ºC causan una reducción en la tasa de conversión de azúcares y procesos de
biosíntesis.
Según Jiménez y Martínez (1984) al aumentar la temperatura se incrementa la
respiración celular y se duplica o triplica la producción de anhídrido carbónico por
cada 10 hasta los 45ºC, y por consecuencia se acumula más materia orgánica en la
planta. Temperaturas superiores reducen la tasa de fotosíntesis debido a la
desnaturalización de las enzimas, al incremento en respiración celular y la tasa de
fotorrespiración repercutiendo en la tasa de aparición y expansión de hojas, la tasa
de aparición de tallos y estolones y en la tasa de crecimiento de las raíces (Mc
Kenzie et al., 1999).
10
2.4.2 Radiación solar y crecimiento vegetal
La radiación solar es fuente de energía para la fotosíntesis, procesos fisiológico
que ocurre en los cloroplastos del cual resultan la formación de energía química
(NADPH y ATP) y sacarosa, junto con azucares intermedios, que las plantas
emplean para formar tejido vegetal; el cual se mide como peso seco de una pradera
o cultivo agrícola. Por lo tanto, la cantidad y calidad de radiación solar que incide
sobre una pradera influencian el potencial de cada especie forrajera para acumular
peso seco (Lemaire et al., 2000). Al defoliar una pradera se afecta el equilibrio
fisiológico de las plantas y modifica la tasa de fotosíntesis (Richards, 1993). Después
de una defoliación, el área foliar residual fotosintéticamente activa produce los
fotoasimilados para iniciar un nuevo crecimiento. El crecimiento y respiración de una
planta defoliada dependen de la energía en forma de azúcares simples, previamente
producidos por fotosíntesis y almacenados en la base de los tallos y raíces de la
misma planta (Briske, 1991).
La energía química formada, a partir de la radiación solar, se usa para iniciar
las reacciones enzimáticas del ciclo de Calvin, las cuales reducen el dióxido de
carbono en diversos azucares intermedios (triosas, pentosas y hexosas) hasta
culminar en un producto final, la sacarosa. En algunas plantas, las reacción
enzimática inicial es la carboxilación de la ribulosa di-fosfato y en otras es la
carboxilación del fosfoenolpirubato por las enzimas del mismo nombre; a las primera
11
les llama plantas C3 y a las segundas plantas C4. La diferencia entre ambos tipos de
plantas son: la presencia de células especializadas (células de la vaina) en plantas
C4 para concentrar el dióxido de carbono, efectuar el ciclo de Calvin y evitar la
fotorrespiración, en condiciones normales las plantas C4 no exhiben síntomas de
saturación de luz por lo que utilizan mejor la luz solar, las plantas C4 pierden menos
agua por transpiración, las plantas C4 fijan el dióxido de carbono a un ácido orgánico
de tres carbonos (fosfoenolpiruvato) para formar un primer ácido de cuatro carbonos
(Malato), mientras que las plantas C3 fijan el dióxido de carbono a un azúcar
fosfatado de cinco carbonos (ribulasa 1,5 di-fosfato) para formar dos ácidos
orgánicos fosfatados de 3 carbonos (ácido fosfoglicérico fosfatado) (Ascon-Bieto et
al., 2008)
2.4.3 Defoliación
Se considera como el principal efecto de los animales en la pradera y se
define como la remoción de las partes aéreas de la planta llevada a cabo por el
animal en pastoreo o por cualquier medio (implementos mecánicos, fuego, otros
seres vivos, etc.). Harris (1978), define la defoliación a través de tres parámetros:
intensidad, frecuencia y tiempo: la intensidad corresponde a la proporción del forraje
removido en la defoliación; la frecuencia se refiere al intervalo de tiempo entre
defoliaciones; y el tiempo se relaciona con la época del año o el estado de desarrollo
en que la pradera es defoliada.
12
En general, al incrementar Ia frecuencia e intensidad de la defoliación, la
producción de materia seca en la pradera se reduce por las siguientes causas:
Disminución en la intercepción de luz por parte de los tejidos
fotosintéticamente activos.
Agotamiento de los nutrientes de reserva.
Reducción en la absorción de nutrientes y de agua por la planta.
Remoción o daño de los meristemos apicales.
Se ha demostrado que las defoliaciones intensas y frecuentes reducen la
cantidad de raíces de las plantas forrajeras en las praderas, además, como
consecuencia de la defoliación, también disminuye la absorción de agua y de
nutrientes al reducirse la elongación de las raíces. Un sistema ideal de manejo de la
pradera buscará un balance apropiado entre la cantidad y la calidad de forraje que
se ofrece al animal así, una frecuencia baja de defoliación (pastoreo) favorece la
acumulación de forraje y la supervivencia de la planta, lo que va en detrimento de la
digestibilidad y de la concentración de proteína (Harris, 1978).
En el cuadro 1, se muestran las ventajas y desventajas de la defoliación del
zacate cuando esta es realizada directamente por el animal.
13
Cuadro 1. Ventajas y desventajas de la defoliación mediante apacentamiento. Fuente: Harris, 1978.
Ventajas Desventajas
Remueve el tejido vegetal maduro y aumenta la proporción de tejido verde.
Permite la selectividad por el animal; por lo que el corte no es de forma uniforme.
Incrementa la calidad forrajera y la eficiencia fotosintética de la cubierta vegetal.
Si el pastoreo no es controlado puede reducir el vigor de varias especies, su producción forrajera y de semillas
Si elimina el material muerto en pié de la base de las plantas, éstas se iluminan y se promueve la germinación, se estimula el macollaje, etc.
Ocasiona cambios en la composición florística del potrero. En casos extremos hará desaparecer especies y esos espacios podrán ser ocupados por malezas.
En momentos no oportunos puede arrancar plántulas, plantas o partes de éstas no arraigadas aun.
Pisoteo
Voltea el material muerto y favorece su descomposición.
Produce lesiones mecánicas en hojas, tallos, yemas, coronas, etc.
Mejora el contacto entre la semilla y el suelo favoreciendo la germinación. Reduce los riesgos de erosión hídrica, eólica y previene la pérdida de humedad por evaporación.
Compacta los primeros centímetros del suelo, modificando su densidad aparente, tamaño de los poros y capilaridad. Así, reduce la aireación del suelo y la infiltración del agua.
Puede romper costras superficiales del suelo que impedían la germinación y el crecimiento vegetal.
La compactación del suelo puede causar problemas para el crecimiento y la exploración radicular.
Excremento y orina
Interviene en el reciclaje y la disponibilidad de nutrientes (N y P).
En altas concentraciones la orina puede quemar plantas.
Aporta materia orgánica al suelo.
Modifica la macro y micro flora y meso fauna del suelo.
Algunas plantas o partes de las mismas pueden quedar tapadas por heces. Así se generan áreas dé rechazo al pastoreo.
Genera sitios de germinación; solo si las semillas de la excreta corresponden a especies forrajeras.
14
2.4.4 Habito de crecimiento
La forma de crecer de una gramínea perenne, como el género Pennisetum, se
clasifica como erecta, debido a que el nuevo crecimiento es vertical a partir de las
yemas axilares basales (Briske, 1991). Las propiedades mecánicas de las plantas
son otro de los factores que dan resistencia a la defoliación, debido al esfuerzo que
el animal debe realizar para cosecharlas, consumirlas y digerirlas (Wright e Illius,
1995). En especies de habito de crecimiento erecto, la acumulación neta de forraje
disminuye conforme se incrementa la frecuencia de defoliación; sin embargo, ocurre
lo contrario con las especies de crecimiento postrado (Davidson, 1968).
2.4.5 Enfermedades
Las enfermedades atacan principalmente las partes más tiernas de las
plantas, de manera tal que toda enfermedad de origen criptogamito o provocadas por
zooparasitos, compiten directamente con los animales, ya que al afectar a las partes
más jóvenes de las plantas, disminuye el valor nutritivo de la pradera. Enfermedades
de las plantas, alteraciones del crecimiento y desarrollo propios de los vegetales
causadas por microorganismos, nematodos, virus, plantas con flor parásita o
condiciones ambientales adversas (Davidson, 1968).
15
2.5 Factores que influyen en la calidad del forraje
Son muchos los factores ambientales, biológicos y de manejo que influencian
la composición química del forraje que se cosecha. Un factor biológico es las
características morfológicas y genéticas de la planta forrajera, en tanto un factor de
manejo es el tiempo de cosecha (Zaragoza, 1987). Los factores climáticos tales
como la temperatura, humedad, precipitación, intensidad de luz y altitud pueden ser
determinantes sobre el valor nutritivo de las plantas; estos factores afectan la
respiración, asimilación, fotosíntesis y metabolismo, hasta el grado que el contenido
de materia orgánica y mineral de las plantas puede ser fuertemente modificada
(Olberg, 1956).
2.5.1 Temperatura
La temperatura parece ser el factor climático más importante que gobierna la
fenología de la planta. Los procesos bioquímicos y fisiológicos básicos relacionados
con la síntesis, transporte y degradación de sustancias en las plantas están
influenciados por la temperatura. No todas las especies de pastos tienen el mismo
valor óptimo de temperatura para el cumplimiento de estas funciones. Cuando este
valor óptimo es superado, los pastos utilizan mecanismos estructurales para reducir
los efectos de estrés por altas temperaturas, como es el aumento del contenido de la
pared celular, en especial de la lignina, la cual reduce de forma muy marcada la
16
digestibilidad y la calidad de los pastos. Las bajas temperaturas tienden a iniciar la
transformación de almidones en azucares dentro de la planta (Oelberg, 1956). La
pared celular, celulosa, lignina y sílice tienden a incrementarse durante la parte cálida
del periodo de crecimiento (junio, julio y agosto); indicando esto, que al parecer, que
los pastos perenes responden con un incremento en sus componentes estructurales
cuando comienzan las altas temperaturas, asociado esto con una disminución en la
digestibilidad.
En términos generales, los pastos tropicales tienen menos digestibilidad que
los de clima templado. En el caso de las leguminosas, la digestibilidad es más o
menos similar, ya que existe menos diferencia entre las leguminosas tropicales y
templadas. En pastos tropicales, la mayoría de los fotosintatos que se almacenan
son irrecuperables, los pastos templados si pueden echar mano de ellos y este factor
es sumamente importante en la selección evolutiva de estas plantas, debido a que
modifican la distribución de los productos de la fotosíntesis y de los nutrientes
minerales del suelo entre la reserva metabólica, las reservas de la planta y las
sustancias protectoras y de resistencia de la misma. La planta que crece en un
ambiente frío no dispone de muchas reservas en su medio, por lo que sacrifica sus
estructuras de resistencia y favorece los depósitos de reserva, ya que de otra
manera no podrían sobrevivir a las heladas. Por otro lado, en el trópico donde no hay
heladas, hay menos necesidad de esas reservas y más problemas por
17
depredadores, plagas y enfermedades, por lo que las plantas tropicales para poder
sobrevivir, invierten sus reservas en estructuras de resistencia (Van Soest, 1982)
2.5.2 Precipitaciones
El volumen de agua caída por las precipitaciones y su distribución a través del
año ejercen efectos notables en el crecimiento y calidad de los zacates debido a su
estrecha relación con los factores bioquímicos y fisiológicos que regulan estos
procesos biológicos de gran complejidad en los zacates. El agua es un componente
esencial en las células de las plantas; casi todos los procesos metabólicos dependen
de su presencia, además se requiere para el mantenimiento de la presión de
turgencia, la difusión de solutos en las células y suministra el hidrógeno y oxígeno
que están involucrados durante el proceso fotosintético. Tanto el exceso como el
déficit de precipitaciones pueden provocar estrés en los cultivos forrajeros (Perretea,
1997).
En el caso del primero, generalmente ocurre en los suelos mal drenados
durante la estación lluviosa o en las regiones donde las precipitaciones son altas
durante todo el año. Su efecto fundamental radica en que causa anoxia en las raíces,
afectando su respiración aeróbica, absorción de minerales y agua, y si este se
prolonga en especies no tolerantes, disminuye la asimilación y translocación del
carbono produciéndose cambios metabólicos que activan la respiración anaeróbica,
18
lo cual implica una menor eficiencia energética y bioproductividad en las plantas. Sin
embargo, el estrés por sequía es más común en las regiones tropicales, el cual
afecta el comportamiento fisiológico y morfológico de las plantas. El efecto depende
de su intensidad, el estado de crecimiento y desarrollo de la planta. Entre los efectos
más sensibles se destacan: la reducción de la expansión celular motivado por una
disminución en la presión de turgencia, cierre estomático, la transpiración y por ende
la fotosíntesis, aunque, en este último con efectos directos en los procesos
enzimáticos y transporte electrónico contenido de clorofila y la estructura de las
membranas, las cuales a su vez afectan la respiración (Andrade, 2009).
2.5.3 Suelo
Las propiedades físicas y químicas del suelo ejercen una influencia ilimitada
sobre el contenido de nutrientes de las plantas. Las propiedades físicas tales como la
textura y porosidad afectan la calidad nutritiva del forraje de una forma más o menos
indirecta; una pobre aeración en los suelos limita grandemente o disminuye la
absorción de elementos esenciales, especialmente el fosforo; los suelos ricos en vida
biótica muestran una mejor aeración y fertilidad. En tanto que las propiedades
químicas del suelo pueden determinar los nutrientes que las plantas sean capaces
de absorber. Por ejemplo, el fosforo es indispensable en un pH de 6 y 7. En suelos
con pH bajos este elemento reacciona químicamente con hidróxido de fierro,
aluminio y magnesio formando un compuesto insoluble, en el cual no está disponible
para la planta (Oelberg, 1956).
19
2.5.4 Fertilización
La fertilidad del suelo es un factor importante en el valor nutritivo de los
zacates, puesto que el suelo suministra a la planta los nutrimentos necesarios. La
adición de fertilizantes se practica a fin de satisfacer los requerimientos nutricionales
de la planta y mejorar su composición nutritiva. La aplicación de nitrógeno merece
especial atención, pues produce un incremento en las sustancias nutritivas
nitrogenadas y trae consigo grandes beneficios sobre el consumo (Rodríguez et al,
1976). La fertilidad de los suelos es un factor clave para el crecimiento de las plantas
y tiene una gran influencia sobre la productividad y la calidad del forraje, en especial
con referencia a su contenido de proteína cruda. Bajo condiciones limitantes de
producción, el agregado de nutrientes aumenta la productividad de biomasa y la
concentración de nutrientes en el forraje. Existe una relación directa entre el nivel de
fertilidad del suelo y el resultado de la producción ganadera, debido a que la calidad
del forraje, indicador de la satisfacción de los requerimientos nutricionales de los
rumiantes (Robinson, 2005). La mayoría de las gramíneas perennes cultivadas tiene
altos requerimientos de nitrógeno y los suelos donde se los cultiva generalmente son
bajos en materia orgánica y proveen bajas cantidades de nitrógeno al cultivo. De este
modo el nitrógeno es normalmente el nutriente más limitante y su aplicación resulta
en altas respuestas en cantidad y en calidad. El nitrógeno es el nutriente más fácil de
manejar para satisfacer los objetivos de producción. La clave de una fertilización
nitrogenada adecuada es aplicar la cantidad adecuada en el momento correcto
usando la clase de fertilizante adecuado (Robinson, 2005).
20
2.5.5 Estado de madurez
La madurez se refiere al estado de desarrollo fisiológico de las plantas,
caracterizado por cambios morfológicos y fisiológicos (aumento de tamaño, hojas,
tallos, inflorescencia y fruto) que influyen sobre la composición química de las
plantas. El estado de madurez es el factor más importante que afecta la composición
química y digestibilidad del forraje (Zaragoza, 1987).
A medida que las plantas crecen, aumenta la necesidad de tejidos de sostén y
con ello aumentan también los carbohidratos estructurales (celulosa, hemicelulosa y
lignina), disminuye el contenido de sustancias nitrogenadas y de cenizas, y por
consiguiente su valor nutritivo. El zacate joven contiene poca fibra, representada por
la celulosa casi pura, al contrario de la planta madura. Con el progresivo aumento de
celulosa, se verifica el proceso de lignificación, que determina una importante
disminución de la digestibilidad de todas las sustancias nutritivas. El valor nutritivo es
máximo en los pastos jóvenes, se mantiene elevado hasta el principio de la floración,
para decrecer más o menos rápidamente, en dependencia de la especie de que se
trate y las condiciones climáticas, que pueden ejercer una influencia importante en
acelerar o retardar el estadío de maduración (Rodríguez et al, 1976).
21
Con el avance de la madurez, las plantas desarrollan tejido de xilema para el
transporte de agua, acumulan celulosa, y otros carbohidratos complejos, y estos
tejidos llegan a enlazarse a través de un proceso conocido como lignificación; el
efecto combinado de cambios fisiológicos resulta en un aumento de los componentes
menos digestibles de la pared celular de las plantas, lo que dificulta que la bacteria
ruminal pueda adherirse y digerirla. El cambio en la relación hoja-tallo de los zacates
afecta la digestibilidad de los mismos, la FDN en hojas es significativamente más
digestible que la FDN del tallo. Conforme el forraje madura, la relación hoja: tallo
disminuye (mas tallos, menos hojas) y como resultado la digestibilidad de la FDN
baja porque una porción más grande del total es asociada con tejido del tallo
(Hoffman et al, 2007).
El zacate joven posee un contenido proteínico, referido a la materia seca
notablemente más elevado que en la época de plena floración, en la que ese
nutriente se reduce. El valor de 7 % de proteína, es un punto crucial y está
determinado por los requerimientos de proteína de los microorganismos del rumen;
aunque el valor real que necesitan en cantidad de proteínas es de 12 %, la saliva
reciclada adiciona alrededor de un 5 %, por lo que un pasto con un contenido de
proteína de 7 % ya es suficiente para cubrir sus requerimientos. En consecuencia, el
objetivo mínimo que se debe considerar, es mantener los pastos con más del 7 % de
proteína para no afectar el consumo de materia seca de los animales y no alterar con
ello la fermentación de ese forraje dentro del rumen (Van Soest, 1982).
22
En zacates se ha informado que la digestibilidad disminuye con la edad o el
estado fisiológico; esta disminución es muy lenta hasta que la planta comienza a
espigar y posteriormente es mucho más rápida, dependiendo de la especie, la
precocidad, entre otras. La digestibilidad de la materia orgánica puede ser tan alta
como el 80% en gramíneas tiernas y descender hasta el 50% o menos en los forrajes
maduros. Es importante destacar que al disminuir la digestibilidad, también
disminuye el consumo total de alimentos, puesto que aumenta el volumen con la
proporción de fibra cruda (Weiss y Demarquilly, 1970).
En el Cuadro 2, se muestran los resultados de varios estudios donde se
evalúa el efecto de la edad en la composición química de los forrajes.
23
Cuadro 2. Efecto de madurez en la composición química de distintas especies de . zacate.
Especie
Edad (Días)
PC (%)
DIVMS
(%)
EE (%)
FDN (%)
CZ (%)
King grass. Pennisetum purpureum cv. (Caceres, 1985)
49 56 63 70
8.64 7.98 6.48 5.80
66.7 65.9 64.5 61.5
King grass. Pennisetum purpureum cv. (Chacón, 2009)
60 75 90
9.56 8.7 8.42
1.41 1.37 1.29
73.78 75.48 76.91
14.47 13.86 13.61
Maralfalfa. Pennisetum sp (Correa, 2006)
56
105
21.8 11.9
2.51 1.66
54.7 66.9
10.4 10.5
Maralfalfa. Pennisetum sp (Cruz, 2008)
30 75
105 135
17.2 15.3 14.0 13.3
2.02 1.91 1.88 1.83
18.47 16.08 15.86 15.79
Kikuyo. Pennisetum clandestinum (Laredo et al., 1988)
50 60 70
14.6 16.6 20.1
66.72 57.48 63.60
18.9 19.2 17.9 15.9
57.3 79.2 71.2
Elefante. Pennisetum purpureum (Gonzales et al., 2011)
28 42 56 70
18.5 14.9 13
11.2
50.9 57.5 56.5 63.3
PC: proteína cruda (%), DIVMS: digestibilidad invitro de la materia seca (%), EE: extracto etéreo (%), FDN: fibra detergente neutro (%), CZ: cenizas (%).
24
2.6 Análisis de alimentos
Sistema de Weende o análisis proximal. Es un conjunto de determinaciones de
laboratorio que pretende evaluar en forma global cada grupo de los nutrimentos que
contiene un alimento. Consta de las siguientes determinaciones: humedad, extracto
etéreo, fibra cruda, extracto libre de nitrógeno, proteína cruda y cenizas. Este sistema
fue establecido hace más de 110 años en la estación experimental de Weende, en
Alemania, de donde se deriva su nombre (Sosa de Pro, 1979).
Cuadro 3. Composición de las diferentes determinaciones del análisis proximal (Mc Donald y Dewar, 1973).
Nutriente Determinación del análisis proximal.
Compuestos químicos que teóricamente pueden estar presentes en cada
determinación.
Agua Humedad Agua
Lípidos
Extracto etéreo
Grasas, aceites, ceras, fosfatos, lipoproteínas, pigmentos liposolubles, ácidos orgánicos liposolubles, esteroles y vitaminas liposolubles.
Carbohidratos
Fibra cruda Celulosa, hemicelulosa y lignina.
Extracto libre de
nitrógeno
Monosacáridos, disacáridos trisacáridos, pectinas, almidones, resinas, ácidos orgánicos hidrosolubles y vitaminas hidrosolubles.
Proteínas
Proteína cruda
Proteínas, aminoácidos, compuestos orgánicos nitrogenados no proteicos, clorofilas, compuestos inorgánicos nitrogenados como sales de amonio, amoniaco.
Minerales Cenizas Compuestos de Ca, K, Mg, Na, P, Fe, Mn, Cl, S, Cu, Co, Zn, Mo, Se, Si.
Vitaminas No hay Ninguna
25
3 MATERIALES Y MÉTODOS
3.1 Localización
Las muestras de forraje analizadas se obtuvieron de un sitio Experimental del
Instituto Nacional de Investigación Forestal, Agrícola y Pecuaria (INIFAP)
Papaloapan en el municipio de Isla Veracruz, ubicado entre los paralelos 18° 02´
latitud Norte y 95° 32´ longitud Oeste, a 65 msnm. El clima del lugar es cálido
subhúmedo, el más seco de los subhúmedos cálidos (Awo), con lluvias en verano,
temperatura media anual de 25.7°C, y precipitación media de 1,000 mm (García,
2004). Con base a la frecuencia y distribución de las lluvias se han identificado tres
temporadas en el año; seca, lluvias y nortes. El suelo del sitio experimental es muy
ácido (pH 4.0), de origen aluvial, y pobres en materia orgánica y nitrógeno.
3.2 Obtención de muestras
Las plantas de Maralfalfa se establecieron en surcos de 15 m de largo, con
separación de 0.50 m. Se fertilizaron con 75 kg de nitrógeno, 33 kg de fósforo y 10 kg
potasio ha-1. Las plantas fueron cortadas a los 33, 61, 77, 90, 107, 121, 135, 151, 167
y 184 días de edad después de un corte de uniformidad. Las plantas completas,
hojas y tallos fueron troceados y guardados en bolsas de papel previamente
identificado con la edad, fecha de corte y nombre del contenido, seguido a esto
fueron secadas a una temperatura de 55°C para lograr la evaporación del agua que
26
contenía el material hasta que el peso de la muestra fue constante en el medio
ambiente. Una vez secas se molieron y se metieron a la estufa de secado a una
temperatura de 100°C, preparando las muestras para su análisis.
3.3 Análisis de la composición química
3.3.1 Contenido de materia seca parcial
El contenido de materia seca en las muestras aun frescas de Pennisetum sp.,
se conoce como materia seca parcial. Esta fue estimada por él método gravimétrico,
al exponer las muestras frescas a un proceso de secado, en una estufa, a una
temperatura de 55º C por 24 horas, con la finalidad de que se evaporará el agua que
contenían (Pf). Al termino de este periodo se pesó la muestra seca y con ambos
pesos se calculó el porcentaje de materia seca parcial en las muestras (MSp).
3.3.2 Contenido de humedad
Si bien no es considerado un análisis químico per se, una correcta
determinación del contenido de materia seca de un alimento dado es fundamental, ya
que un error en este paso se transfiere al resto de los componentes químicos, los
cuales debieran ser expresados sobre base materia seca para permitir
27
comparaciones con otros alimentos (Sosa de Pro, 1979). El contenido de humedad
en las muestras secas y molidas de las plantas de Pennisetum sp., se estimó por él
método gravimétrico. Se colocaron 100 g de muestra, tal como se encontraba en las
bolsas de plástico (Pi), en una estufa 100º C por 24 horas, con la finalidad de que se
evaporará el agua que contenían (Pf). Al termino de este periodo se pesó la muestra
seca y con ambos pesos de calculó el porcentaje de humedad y por diferencia la
cantidad de materia seca en las muestras almacenadas (MSt).
3.3.3 Determinación de cenizas totales y materia inorgánica.
El contenido de sustancias no combustibles contenidas en las muestras de las
plantas de Pennisetum sp., se determinó mediante el análisis proximal. Se colocó 1
g de muestra en un crisol de porcelana secado a peso constante, luego de una pre
incineración se colocaron en la Mufla a 500°C durante 2 horas, hasta que toda la
materia orgánica desapareció (Sosa de Pro, 1979).
28
3.3.4 Determinación de extracto etéreo
La cantidad de grasa bruta es determinada en la fracción llamada extracto
etéreo al exponer 1 g de las muestras de Pennisetum sp., al calor (100°C) y éter
durante 6 horas para eliminar los compuestos volátiles contenidos en las muestras
(Sosa de Pro, 1979).
3.3.5 Determinación de fibra cruda
La celulosa, hemicelulosa y lignina son los tres principales componentes. Las
muestras desengrasadas fueron expuestas a un proceso de digestión ácida (ácido
sulfúrico 0.255 N) y después a una digestión alcalina (hidróxido de sodio 0.313 N).
La materia orgánica del producto obtenido corresponde a la fibra cruda (Sosa de Pro,
1979).
3.3.6 Determinación de nitrógeno total.
La cantidad de nitrógeno total en las muestras de las plantas de Pennisetum
sp., se determinó mediante el método de micro Kjeldahl. El porcentaje de nitrógeno
obtenido se multiplica por 6.25 para obtener lo que se conoce como proteína bruta
(Sosa de Pro, 1979).
29
3.3.7 Determinación de fibra detergente neutro
Este método descrito por Van Soest (1982), consiste en hervir a reflujo con un
detergente neutro, una muestra de alimento previamente secado, el residuo obtenido
representa los componentes de las paredes celulares: Celulosa, Hemicelulosa,
Lignina, Nitrógeno insoluble y Queratina (Ver Cuadro 4).
3.3.8 Determinación de fibra detergente ácido
La muestra de forraje es sometida a reflujo con una solución detergente en
medio acido. El detergente disuelve a todo el contenido celular y además a las
hemicelulosas. El residuo insoluble está formado por paredes celulares sin
hemicelulosa (Sosa de Pro, 1979).
Cuadro 4. Esquema básico de análisis de forrajes usando detergentes. Fuente: Van Soest, 1982
Determinación
Fracción
Solución utilizada
Compuestos químicos que teóricamente pueden estar
presentes en cada determinación
Fibra detergente neutro (FDN)
Fracción insoluble en detergente
neutro
Lauril sulfato de sódio,
EDTA.
pH: 7
Celulosa, Hemicelulosa, Lignina, Nitrógeno insoluble
y Queratina
Fibra detergente ácido (FDA)
Fracción insoluble en detergente
ácido
Bromuro de dietiltrimetil
amonio
Celulosa, lignina y sílice
30
3.3.9 Digestibilidad in vitro de la materia seca de un forraje
Esta técnica está basada en que el contenido celular o la fracción soluble en
detergente neutro de un alimento, es digerible totalmente, por lo que, si se mide el
contenido de paredes celulares provenientes de un forraje que ha sido sometido a
fermentación con liquido ruminal puede conocerse concretamente la fracción no
digerida por los microorganismos del rumen y por diferencia de la materia seca de la
muestra inicial, puede conocerse el contenido de materia seca. Se determinó
sometiendo las muestras a una fermentación anaeróbica durante 48 horas con
líquido ruminal extraído de un animal fistulado ruminalmente, de raza Pardo suizo.
Posteriormente se lavó con 25 ml de detergente neutro, se hirvió durante una hora,
se lavó con agua caliente y se filtró. Seguido a esto se sometió el residuo a secar a
100°C, empleando el método descrito por (Van Soest, 1982).
3.4 Análisis estadístico
Los datos se analizaron con un modelo completamente al azar considerando a
la edad de las plantas como única variable independiente. Para probar el efecto de
edad sobre la composición química, y calcular las medias y coeficientes de
correlación se empleó el paquete computacional SAS (2002). La comparación de
medias fue realizada con la prueba de Tukey a un nivel de significancia del 0.05.
31
4 RESULTADOS Y DISCUSIÒN
4.1 Cenizas
El porcentaje de cenizas de la planta, tallos y hojas del zacate Maralfalfa
cosechado a diferentes edades de rebrote, mostró diferencias significativas (P<
0.05). En la Figura 5, se observan las ecuaciones de regresión que describen el
cambio del porcentaje de cenizas con respecto a la edad de las plantas; la
disminución en el contenido de cenizas para el caso de planta completa (R2 =
0.8995) y tallo (R2 = 0.8051) están descritas por un modelo de regresión cuadrático.
Las cenizas en planta completa disminuyeron en 0.187 unidades porcentuales por
día hasta los 158 días de rebrote, a partir de este, la tasa de diminución fue reducida
en 0.006 unidades porcentuales. En tallos disminuyó en 0.192 unidades porcentuales
por día, mientras que en las hojas el porcentaje de cenizas prácticamente se
mantuvo oscilando entre 12.06 y 9.41 % (ver Anexo 1). Por esta razón no se pudo
ajustar ningún modelo de regresión al contenido de cenizas en hoja que describiera
una tendencia específica (R2 = 0.3524).
Los valores obtenidos en el estudio se consideran bajos, al compararlos con
los reportados por Cruz (2008), quien señala haber encontrado los siguientes
resultados: 30 días con 18.47 %, 75 días 16.08 %, 105 días con 15.86 % y a los 135
días con un 15.79 %; lo cual bien podría ser explicado por el contenido de micro
nutrientes en el suelo. Por otra parte, Andrade (2009), registró un contenido de
cenizas de 11.30 % a los 70 días y de 10.89 % a los 90 días, los cuales tienen una
mayor similitud con los resultados del presente estudio.
32
33
4.2 Proteína cruda
El contenido de proteína cruda de las muestras analizadas se presenta en el
anexo 2 y podemos observar su comportamiento en la Figura 6; hubo diferencias
significativas (P<0.05) para los tres componentes. Las respectivas ecuaciones de
regresión explicaron 88.71, 77.41 y 74.13 % de la variabilidad detectada en plantas,
tallos y hojas. En planta completa, existe un decremento a medida que la edad del
zacate avanza, desde un 8.85 % en el día 33 de rebrote a 3.17 % en el día 184 de
rebrote. La proteína en tallo mostró una disminución en su contenido, teniendo su
máxima concentración de 9.26 % en el día 61 de rebrote y el mínimo de 2.02 % en el
día 121 de rebrote. Para el caso de las hojas, la curva de regresión no revelan una
disminución clara en su contenido de proteína, ya que varía en un rango de 12.2 a
7.28 % a lo largo de la siembra, mostrando que es un componente más estable en
cuanto al contenido de proteína, con respecto a la edad de la planta.
Carulla et al. (2009), reporta los siguientes valores de PC para el zacate
Maralfalfa: 11.8 %, 11.4 % y 4.8 % a los 47, 60 y 120 días de rebrote
respectivamente, similares a los encontrados en el presente trabajo, donde se
comprueba que existe un descenso en el contenido de proteína a medida que la
edad avanza. Los resultados obtenidos, en ambos estudios, coinciden con lo escrito
por Zaragoza (1987), quien menciona que el contenido de proteína disminuye
gradualmente a medida que la planta se acerca a su madurez y decrece rápidamente
34
después de que la semilla madura. En plantas maduras la proteína y fosforo
disminuyen rápidamente, mientras que el extracto libre de nitrógeno y fibra cruda se
incrementan. Aparentemente esta disminución de proteína durante el periodo de
crecimiento, es debido a su translocación de aminoácidos y otros compuestos
nitrogenados hacia la raíz y semilla y en la madurez completa se debe a lixiviación o
lavado de los compuestos nitrogenados solubles; la desaminación y descomposición
de la proteína son de menor importancia.
35
36
4.3 Extracto Etéreo
En la Figura 7, se presenta el análisis de extracto etéreo (EE) del forraje
Maralfalfa. En las muestras analizadas, se observan diferencias significativas
(P<0.05). Sin embargo, solo la planta muestra una clara disminución mientras avanza
la edad, con un valor máximo de 3.91 % y un mínimo de 0.63 %, con una diferencia
de 3.28 %. En comparación con hojas y tallos, en los cuales se mantuvo oscilando
entre valores de 2.53 % y 1.56 % para las hojas, mientras que para los tallos vario de
1.6 % a 0.64 %, a lo largo de la siembra (ver Anexo 3).
De acuerdo con Guevara (2008), el extracto etéreo en el componente hoja de
los pastos no supera el 3 %; dicha fracción incluye a las grasas, aceites, ceras,
fosfatos, lipoproteínas, pigmentos liposolubles, ácidos orgánicos liposolubles,
esteroles, vitaminas liposolubles, triacilglicéridos en las semillas, galactolípidos y
fosfolípidos. En base a lo anterior, la Maralfalfa evaluada como de buena en cuanto
al contenido de EE, que es de suma importancia al momento de estimar el aporte
energético en la formulación de dietas. Correa (2006), reporta valores de EE de 2.51
% a los 56 días y 1.66 % a los 105 días. Por su parte Cruz (2008), registra de 2.02
% a los 30 días, 1.91 % a los 75 días, 1.88 % a los 105 días y 1.83 % a los 135 días.
Comparando con estos autores los valores obtenidos en el estudio se puede decir
que tienen similitud y manifiestan el mismo comportamiento, que es la tendencia a
disminuir el porcentaje de EE a medida que la edad del zacate avanza.
37
38
4.4 El análisis del contenido de Fibras
4.4.1 Fibra cruda
El porcentaje de Fibra cruda (FC) en el forraje de Maralfalfa cosechado a
diferentes edades se muestra en la Figura 8. Existe un incremento en el contenido de
FC para tallos, hojas y plantas mientras se incrementa la edad del zacate (P<0.05).
En los tallos, se observa un marcado aumento en el contenido de FC a medida que
aumenta la madurez de la planta, se obtuvieron los siguientes valores: a los 33, 77,
107, 135 y 184 días de rebrote con 27.6, 33.3, 35.08, 37 y 41.84 % respectivamente.
Para las hojas mostró un incremento a partir del día 33 con 29.5 % hasta el día 107
de rebrote con un valor máximo de 37.5 %; a partir de este día, se detiene el
aumento e incluso tiende a bajar el contenido de fibra hasta llegar al día 184 con un
valor similar al del inicio de 29.99 %. En las plantas se aprecia un aumento que oscila
desde 27.9 en el día 33 como valor mínimo hasta un máximo de 40.29 % en el día
167 de rebrote (ver Anexo 4).
Estos valores concuerdan con los encontrados por Cruz (2008), quien observó
valores de 31.0, 34.17, 35.13, 35.65 % a los 30, 75, 105, y 135 días de rebrote
respectivamente, pero difieren con los reportados por Andrade (2009), quien indica
los siguientes contenidos de fibra cruda: 42.1 % a los 70 días y 42.03 % a los 90
días.
39
Aunque el análisis de FC tiene un error, al efectuar la digestión acida se
disuelve parte de las hemicelulosas y al efectuar la digestión alcalina se disuelve
parte de la lignina (Sosa de Pro, 1979); por lo tanto, el producto final no puede
considerarse como la totalidad de la fibra y los resultados obtenidos por este método
son menores que los reales, sirve para realizar la determinación de otros
componentes del análisis proximal y se corrige con las determinaciones de FDN y
FDA.
40
41
4.4.2 Fibra detergente neutro
El contenido de fibra detergente neutro (FDN) de las muestras analizadas se
presenta en el anexo 5 y podemos observar su tendencia en la Figura 9; en la que
se muestra que hubo diferencias significativas en los tres componentes (P<0.05), y
que aumentó el contenido de FDN a medida que la edad del zacate avanza, desde
un 67.06 % en el día 33 de rebrote, hasta un 79.06 % en el día 167 de rebrote, esto
para las plantas. En los tallos mostró un incremento en su composición de FDN no
tan marcado como el anterior; teniendo su máximo de 85.48 % en el día 167 y el
mínimo de 66.3 % en el 33 de rebrote. Comportamiento similar el de las hojas, que
no tienen tan pronunciado aumento en cuanto a su contenido de FDN; ya que varía
en un rango de 71.42 % como mínimo en el día 33 hasta 82.89 % en el día 90 de
rebrote como máximo.
Correa (2004), registró valores de 54.7 % a los 56 días y 66.9 a los 105 días,
mientras que Andrade (2009), de 52.29 % a los 70 días y 53.78 % a los 90 días;
podemos decir que nuestros resultados son mayores a los anteriormente citados, sin
embargo, manifiestan también un aumento en el porcentaje de FDN a medida que la
edad del zacate avanza.
42
43
4.4.3 Fibra detergente ácido
El contenido de fibra detergente acido (FDA) del zacate Maralfalfa se presenta
en la Figura 10; en ella se observan diferencias significativas para plantas, hojas y
tallos (P<0.05), así mismo, un aumento en el contenido de FDA a medida que la
edad del zacate avanza. En plantas, se registró un 40.36 % en el día 33 a 58.5 % en
el día 167 de rebrote. Similar comportamiento presentó la FDA de los tallos, ya que
incrementó a medida que aumenta la madurez de la planta; teniendo su máximo de
59.61 % en el día 167 y el mínimo de 35.35 % en el día 33 de rebrote. Caso contrario
al de las hojas, que no tienen un aumento tan pronunciado, ya que oscila en valores
desde 39.08 % en el día 33 hasta 51.09 % en el día 90 de rebrote (ver Anexo 6).
Al respecto Carulla et al. (2009), registró los siguientes valores para FDA:
47.3, 46.6, 61.7 y 50.5 % a los 47, 60, 90 y 120 días de rebrote, respectivamente, los
cuales concuerdan con los obtenidos en el presente estudio, donde se observa que
aumenta, aunque con algunas variaciones el contenido de FDA con la edad de la
planta.
44
45
4.5 Análisis de digestibilidad in vitro de la materia seca
El porcentaje de digestibilidad in vitro de la materia seca (DIVMS) en el forraje
de Maralfalfa cosechado a diferentes edades de la planta se muestra en la Figura 11,
en la cual pueden observarse las ecuaciones de regresión que describen el cambio
del porcentaje de DIVMS con respecto a la edad de las plantas; la disminución en la
DIVMS para el caso de planta completa (R2 = 0.9409), tallo (R2 = 0.7691) y hoja (R2
=0.8888), están descritas por un modelo de regresión cuadrático. El análisis del
porcentaje de DIVMS, mostro diferencias significativas (P < 0.05). En planta completa
disminuyó en 0.60 unidades porcentuales por día hasta los 167 de rebrote, siendo a
los 33 días 83.25 % digestible y decayendo hasta un 49.78 % en el día 167. En los
tallos disminuyó en 0.38 unidades porcentuales por día, pasando de ser 79.29 %
digestible a los 33 días hasta los 42.12 % a los 167 días de rebrote, acentuándose
más a medida que avanza la edad. En las hojas disminuyó 0.53 unidades
porcentuales por día hasta los 157 días de rebrote. Comenzando con un 77.19 % de
digestibilidad hasta un 51.03 % en el día 151 (ver Anexo 8). Al respecto, Clavero
(2000) reporta los siguientes resultados de DIVMS, para los 30, 90 y 105 días una
digestibilidad de 79.7, 65.2 y 52.4 % respectivamente; lo cual concuerda con los
resultados del presente estudio, de igual manera se observa la disminución de la
DIVMS con el aumento en la edad. Por su parte Zaragoza (1987), señala que en las
paredes celulares de plantas jóvenes existe solamente celulosa, pero con el avance
en la edad esta celulosa se infiltra con lignina y otras sustancias incrustadas. La
lignina tiene un efecto negativo sobre la digestibilidad del forraje ya que ningún
46
mamífero es capaz de degradar este compuesto, tampoco los microorganismos del
rumen producen enzimas que la degraden (Sosa de Pro, 1979). Se ha encontrado
que a medida que aumenta el contenido de lignina, disminuye la digestibilidad del
forraje debido a la formación del complejo lignina – carbohidrato, ya que físicamente
impide la acción de las enzimas glucosidasas puesto que se incrusta en la celulosa
(Van Soest, 1982).
Los carbohidratos superiores de las plantas son: almidón, celulosa y
hemicelulosa, unidas a lignina, esta última, aumenta a medida que la planta madura,
algunas de sus funciones importantes son, mantener rígidos los órganos vegetales,
incrustándose en los carbohidratos y proteger a la planta del ataque de
microorganismos, insectos y otras plagas.
Estudios realizados por Kamstra et al. (1968) sobre digestibilidad de la
celulosa de las plantas y celulosa aislada de las mismas muestran que la
digestibilidad en las plantas varia indirectamente con la madurez de la planta, dado
que la mayoría de las planta madura se observa una mínima digestibilidad. En
cambio, la celulosa aislada de varias muestras de forraje fue más digestible que la
celulosa tal como existe en las plantas. Estas observaciones indican que la calidad y
distribución de la lignina en las plantas maduras es la responsable de la disminución
en la digestibilidad de la celulosa presente en la planta (Zaragoza, 1987).
47
El sílice es utilizado como un elemento estructural junto con la lignina
fortalecen y dan rigidez a la pared celular de las plantas. Este tiene efectos negativos
sobre la digestibilidad al parecer en dos formas: efectos inhibitorios sobre la digestión
de la pared celular y efecto dilutorio por la alta acumulación de sílice (Van Soest,
1982).
48
49
5 CONCLUSIONES
La composición química del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.) se vio
afectada a medida que la edad de la planta avanzó; aumentando los porcentajes de
Fibra detergente acido, Fibra detergente neutro y Fibra cruda.
El contenido de Cenizas, Proteína cruda y Digestibilidad in vitro de la materia
seca disminuyo a medida que la edad, crecimiento y estado de madurez de
Pennisetum sp. avanzó.
El zacate Maralfalfa, posee una calidad nutricional aceptable, debe
cosecharse entre el día 60 y 65 del rebrote; en los cuales se concentra la mayor
cantidad de nutrimentos y el porcentaje de digestibilidad es alto.
50
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57
7 ANEXOS
Anexo 1. Proteína cruda (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
Días de rebrote
Plantas
Hojas
Tallos
33 8.85 ± 0.131 a 12.08 ± 0.059 a 7.92 ± 0.007 b
61 8.37 ± 0.011 b 12.2 ± 0.058 a 9.26 ± 0.163 a
77 5.96 ± 0.049 d 9.13 ± 0.49 bc 8.24 ± 0.04 b
90 5.08 ± 0.075 e 8.8 ± 0.075 d 5.93 ± 0.012 c
107 6.51 ± 0.031 c 7.94 ± 0.013 e 3.02 ± 0.063 d
121 5.06 ± 0.089 e 9.43 ± 0.14 b 2.02 ± 0.0008 g
135 3.64 ± 0.059 f 8.18 ± 074 e 2.21 ± 0.001 fg
151 3.81 ± 0.0005 f 7.28 ± 0.03 f 2.51 ± 0.003 fe
167 3.35 ± 0.032 g 9 ± 0.23 cd 2.58 ± 0.07 e
184 3.17 ± 0.06 g 8.97 ± 0.04 cd 2.35 ±0.067fe
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
Anexo 2. Cenizas (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
Días de rebrote
Plantas
Hojas
Tallos
33 14.34 ± 0.069 a 12.06 ± 0.147 a 14.5 ± 0.116 b
61 13.77 ± 0.075 a 10.74 ± 0.075 b 12.11 ± 0.152 c
77 11.13 ± 0.208 b 9.4 ± 0.331 c 15.37 ± 0.054 a
90 7.5 ± 0.149 c 9.55 ± 0.116 c 8.24 ± 0.038 d
107 6.55 ± 0.069 d 10.48 ± 0.019 b 6.29 ± 0.072 e
121 6.67 ± 0.041 cd 10.65 ± 0.003 b 3.64 ± 0.064 g
135 6.53 ± 0.442 d 11.65 ± 0.012 a 3.6 ± 0.148 g
151 5.05 ± 0.129 e 11.76 ± 0.091 a 4.4 ± 0.056 f
167 6.28 ± 0.025 d 10.7 ± 0.082 b 3.61 ± 0.011 g
184 6.01 ± 0.08 d 11.47 ± 0.098 a 4.05 ± 0.096 gf
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
58
Anexo 4.Fibra cruda (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
Días de rebrote
Plantas
Hojas
Tallos
33 27.90 ± 1.126 e 29.52 ± 0.218 d 27.6 ± 0.918 f
61 33.38 ± 0.104 d 36.43 ± 0.022 bc 33.33 ± 0.131 ed
77 36.19 ± 0.24 bcd 37.82 ± 0.28 a 32.97 ± 0.545 e
90 40.14 ± 0.284 a 37.03 ± 0.064 ab 34.63 ± 0.298 ed
107 35.08 ± 0.528 cd 37.53 ± 0.284 ab 35.39 ± 0.052 cd
121 38.02 ± 0.999 ab 35.55 ± 0.029 c 37.34 ± 0.014 cb
135 36.55 ± 0.676 bc 30.56 ± 0.187 d 37.09 ± 0.462 cb
151 36.56 ± 0.089 bc 30.53 ± 0.087 d 42.69 ± 0.237 a
167 40.29 ± 0.191 a 29.53 ± 0.372 d 39.03 ± 0.55 b
184 37.53 ± 0.374 abc 29.99 ± 0.312 d 41.84 ± 0.073 a
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
Anexo 3. Extracto etéreo (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
Días de rebrote
Hojas
Plantas
Tallos
33 2.53 ± 0.074 a 3.92 ±0.048 a 1.46 ± 0.013 b
61 1.37 ± 0.002 e 2.58 ± 0.012 b 1.32 ± 0.0003 c
77 1.42 ± 0.086 ed 1.26 ± 0.038 d 1.21 ± 0.004 d
90 1.61 ± 0.015 bcde 1.69 ± 0.08 c 1.14 ± 0.006 ed
107 1.52 ± 0.049 cde 1.63 ± 0.038 c 1.53 ± 0.034 ba
121 1.77 ± 0.071 bc 1.68 ± 0.036 c 1.49 ± 0.004 b
135 1.81 ± 0.036 b 1.19 ± 0.005 d 1.6 ± 0.0004 a
151 1.57 ± 0.034 bcde 0.89 ± 0.017 e 1.05 ± 0.016 e
167 1.66 ± 0.039 bcd 0.79 ± 0.004 e 0.64 ±0.021 g
184 1.56 ± 0.019 cde 0.92 ± 0.039 e 0.81 ± 0.035 f
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
59
Anexo 5. Fibra detergente neutro (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
Días de rebrote
Planta
Hoja
Tallo
33 67.06 ± 0.884 e 71.42 ± 0.697 f 66.36 ± 0.329 g
61 73.78 ± 0.009 cd 80.35 ± 0.289 bc 75.37 ± 0.375 d
77 73.02 ± 0.419 d 81.87 ± 0.059 ab 68.39 ± 0.101 f
90 75.76 ± 0.114 bc 82.89 ± 0.253 a 72.4 ± 0.424 e
107 78.74 ± 0.632 a 79.04 ± 0.3 dc 70.14 ± 0.065 f
121 76.87 ± 0.523 ab 80.56 ± 0.343 bc 75.61 ± 0.646 d
135 77.73 ± 0.234 ba 77.72 ± 0.881 d 77.75 ± 0.438 c
151 78.24 ± 0.329 a 76.88 ± 0.32 de 82.62 ± 0.302 b
167 79.06 ± 0.248 a 74.85 0.442 e 85.48 ± 0.487 a
184 75.54 ± 0.253 bc 76.96 ± 0.469 de 81.31 ± 0.458 b
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
Anexo 6. Fibra detergente acido (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
Días de rebrote Hoja Planta Tallo
33 39.08 ± 0.385 e 40.36 ± 0.238 e 35.35 ± 0.323 f
61 50.28 ± 0.493 a 49.28 ± 0.414 d 47.8 ± 0.321 e
77 47.79 ± 0.627 b 54.4 ± 0.192 c 47.24 ± 0.449 e
90 51.09 ± 0.194 a 50.64 ± 0.224 d 47.13 ± 0.436 e
107 49.96 ± 0.066 a 56.56 ± 0.227 b 58.64 ± 0.562 ba
121 45.99 ± 0.088 c 53.7 ± 0.078 c 55.05 ± 0.695 c
135 45.35 ± 0.243 c 55.07 ± 0.366 bc 53.01 ± 0.0009 d
151 49.49 ± 0.25 ab 58.76 ± 0.106 a 55.17 ± 0.033 c
167 43.14 ± 0.41 d 58.5 ± 0.807 a 59.61 ± 0.191 a
184 48.02 ± 0.176 b 55.35 ± 0.061 bc 57.55 ± 0.1 b
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
60
Días de rebrote
Hoja
Planta
Tallo
33 77.19 ± 0.564 a 83.25 ± 1.435 a 79.29 ± 0.744 a
61 66.99 ± 0.177 b 70.83 ± 3.24 b 65.4 ± 1.347 c
77 62.32 ± 1.695 bc 63.79 ± 1.39 c 71.73 ± 0.019 b
90 61.37 ± 2.193 bcd 57.75 ± 0.4 dce 68.42 ± 0.326 cb
107 55.37 ± 2.048 def 53.79 ± 0.825 dfe 48.95 ± 0.135 e
121 58.67 ± 0.41 ced 59.1 ± 0.23 dc 53.95 ± 2.086 d
135 53.13 ± 1.007 ef 55.96 ± 0.234 dfe 56.55 ± 0.577 d
151 51.03 ± 0.298 f 51.64 ± 0.847 fe 56.96 ± 0.382 d
167 60.48 ± 0.896 bcd 49.78 ± 0.876 f 42.12 ± 0.841 f
184 55.94 ± 1.901 cdef 51.75 ± 0.283 fe 48.51 ± 0.297 e
Medias en la misma columna con diferente literal son estadísticamente significativas a una P<0.05.
Anexo 8. Disminución y aumento en unidades porcentuales de los componentes químicos y digestibilidad de las plantas, hoja y tallo del zacate Maralfalfa (Pennisetum sp.).
Edad Cenizas PC EE FC FDN FDA DIVMS
Plantas
Edad 1.0000 -0.8744 -0.9300 -0.8528 0.6936 0.7565 0.8139 -0.8911
Prob | r |
0.0009 <.0001 0.0017 0.0261 0.0113 0.0042 0.0005
Cenizas
1.0000 0.8868 0.8331 -0.7563 -0.8653 -0.8253 0.9391
Prob | r |
0.0006 0.0028 0.0114 0.0012 0.0033 <.0001
PC
1.0000 0.8990 -0.8024 -0.7279 -0.7892 0.8833
Prob | r |
0.0004 0.0052 0.0170 0.0066 0.0007
EE
1.0000 -0.8482 -0.8332 -0.9514 0.9419
Prob | r |
0.0019 0.0028 <.0001 <.0001
FC
1.0000 0.7815 0.7508 -0.8471
Prob | r |
0.0076 0.0123 0.0020
FDN
1.0000 0.9095 -0.9282
Prob | r |
0.0003 0.0001
FDA
1.0000 -0.9368
Prob | r |
<.0001
Anexo 7. Digestibilidad in vitro de materia seca (%) del zacate Maralfalfa a diferentes días de corte.
61
Hojas
Edad Cenizas PC EE FC FDN FDA DIVMS
Edad 1.0000 0.2038 -0.6912 -0.3515 -0.4509 -0.0843 0.1466 -0.7862
Prob | r |
0.5723 0.0269 0.3193 0.1909 0.8170 0.6861 0.0070
Cenizas
1.0000 0.1144 0.5704 -0.8227 -0.8037 -0.4996 0.0104
Prob | r |
0.7531 0.0851 0.0035 0.0051 0.1415 0.9772
PC
1.0000 0.3876 0.0261 -0.2322 -0.3871 0.9011
Prob | r |
0.2684 0.9430 0.5185 0.2691 0.0004
EE
1.0000 -0.5252 -0.7224 -0.8446 0.5709
Prob | r |
0.1191 0.0183 0.0021 0.0848
FC
1.0000 0.8502 0.6323 0.0186
Prob | r |
0.0018 0.0498 0.9594
FDN
1.0000 0.7945 -0.3187
Prob | r |
0.0060 0.3695
FDA
1.0000 -0.5300
0.1151
Tallos
Edad Cenizas PC EE FC FDN FDA DIVMS
Edad 1.0000 -0.8694 -0.8569 -0.5772 0.9402 0.8619 0.8608 -0.8655
Prob | r |
0.0011 0.0015 0.0806 <.0001 0.0013 0.0014 0.0012
Cenizas
1.0000 0.9513 0.2390 -0.8284 -0.7663 -0.8228 0.8591
Prob | r |
<.0001 0.5060 0.0031 0.0097 0.0035 0.0014
PC
1.0000 0.1720 -0.7823 -0.6404 -0.7939 0.8238
Prob | r |
0.6348 0.0075 0.0461 0.0061 0.0034
EE
1.0000 -0.5307 -0.6584 -0.3690 0.4021
Prob | r |
0.1145 0.0385 0.2940 0.2494
FC
1.0000 0.8651 0.8416 -0.7827
Prob | r |
0.0012 0.0023 0.0074
FDN
1.0000 0.7094 -0.7517
Prob | r |
0.0216 0.0122
FDA
1.0000 -0.9589
Prob | r |
<.0001
PC = Proteína cruda; EE = Extracto etéreo; FC = Fibra cruda; FDN = fibra detergente neutro; FDA = Fibra detergente acido; DIVMS = Digestibilidad in vitro de la materia seca; Prob | r | = Probabilidad para el coeficiente de correlación