+ All Categories
Home > Documents > El Árbol Del Conocimiento. Maturana

El Árbol Del Conocimiento. Maturana

Date post: 05-Jan-2016
Category:
Upload: romar366
View: 25 times
Download: 1 times
Share this document with a friend
Description:
Capítulo 1 y 2
34
7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 1/34 EL  ÁRBOL DEL CONOCIMIENTO Las bases biológicas del entendimiento humano HUMBERTO MATURANA R.Y FRANCISCO VÁRELA G.
Transcript
Page 1: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 1/34

E L

  Á R B O L D E L C O N O C I M I E N T O

Las bases b iológicas del entendimiento humano

H U M B E R T O M A T U R A N A R . Y F R A N C I S C O V Á RE L A G .

Page 2: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 2/34

í n d ice

Capítulo I : Con ocer e l conocer 5

Cap ítulo II: La organizació n de lo vivo 19

Cap ítulo III: Historia: repro ducció n y herencia 37

Capítu lo IV: La vida de los metacelulares 49

Ca pítu lo V: La deriva natural de los seres vivos 63

Capítulo VI: Dom inios conductuales 81

Capítulo VII : Sistema nervioso y conocim iento 97

Capítu lo VIII: Los fenóm enos sociales 121

Capítulo IX: Dom inios l ingüíst icos y conciencia hum ana 137

Capítulo X: El árbol del conocim iento 159

Glosario 168

Fuentes de las ilustraciones 170

Page 3: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 3/34

plast ic idad

Page 4: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 4/34

I

Conocer el conocer

La gran tentación

En la página del frente admiramos e l "Cri s to coro nado de espinas" del maestro de Hertog enbosh ,

mejor conocido como Bosch.

Esta representación tan poco tradicional de la coronación de espinas pinta la escena casi en un

plano, con grandes cabezas, y más que a un incidente de la Pasión, apunta a un sentido universal de

lo demoníaco contrastado con el reino de los cielos. Cristo, en el centro, expresa una inmensa pacien

cia y aceptación. Sus atormentadores, en cambio, no fueron pintados aquí como en tantas otras com

posiciones de la época y del Bosch mismo, con figuras extraterrenas que agreden directamente, mesan

do los pelos, hiriendo la carne. Los verdugos del Cristo aparecen como cuatro tipos humanos que, en

la mente medieval, representaban una visión total de la humanidad. Cada uno de estos tipos es como

una gran tentación para la espaciosidad y paciencia de la expresión de Cristo. Son cuatro estilos de

enajenación y pérdida de ecuanimidad interior.

Mucho hay para contemplar y meditar sobre estas cuatro tentaciones. Pero para nosotros, al

comenzar el largo itinerario que será este libro, el personaje de abajo a la derecha es particularmente

relevante .Tiene

  a

 Jesús sujeto p or el manto . Lo afirma co ntra el suelo. Lo re tiene y restringe su l iber

tad fijando su perspectiva. Parece estarle dicien do: "Pero si yo sé, yo ya lo s é. .. " Es la tentación de la

certidumbre.

Nosotros tendemos a vivir un mundo de cer t idumbre, de sol idez perceptual indisputada, donde

nuestras convicciones prueban que las cosas sólo son de la manera que las vemos, y lo que nos parece

cier to no puede tener otra a l t rnat iva . Es nuestra s i tuación cot idiana, nuestra condición cul tural ,

nuestro modo corr iente de ser humanos.

Pues bien, todo este libro puede ser visto como una invitación a suspender nuestro hábito de caer

en la tentac ión de la certid um bre. Esto es doble me nte necesario. Por una p arte, porq ue si el lector no

suspende sus cer t idumbres no podríamos comunicar aquí nada que quedara incorporado a su expe

r iencia com o un a com prensión efect iva del fenómeno del c onocimiento. Por otra par te , porque pr e-

Page 5: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 5/34

I

6

+

A

Fig. 3.  Experiencia del punto ciego.

Page 6: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 6/34

cisamente lo que este libro va a mostrar, al estudiar de cerca el fenómeno del conocimiento y nues

tras acciones surgidas de él, es qu e toda expe rienc ia cog noscitiva involucra al que co noc e de un a

manera  personal, enraizada en su estructura biológica, donde toda experiencia de certidumbre es un

fenómeno individual ciego al acto cognoscitivo del otro, en una soledad que (como veremos) sólo se

trasciende en el mundo que se crea con él.

Las sorpresas del ojo

Nada de lo que vamos a decir va a ser comprendido de una manera verdaderamente eficaz a menos

que el lector se sienta aludido personalmente, a menos que tenga una experiencia directa más allá de

la descripción que uno hace de ella.

Por eso, en vez de hablar de cómo es que la aparente solidez de nuestro mundo experiencial se

hace rápidamente sospechosa cuando la miramos de cerca, vamos a demostrarlo con dos simples situa

ciones. Am bas corres pond en al ámbito de nuestra experien cia visual cotidiana.

Primera situación: el lector deberá fijar la mirada en la cruz dibujada en la página 6 (Fig. 3)

cub rien do su ojo izquierdo y a justando la página a una dis tancia de a lrede dor de cuarenta cen

tímetros. Lo que observará es que el punto negro de la figura, nada despreciable de tamaño, ¡de

pron to desaparece Exp erim ente rotando u n poco la página o abr iendo el o tro ojo . Tam bién es

interesante copiar el mismo diseño en otra hoja de papel y agrandar gradualmente el punto negro

hasta ver cuál es el tamaño máximo para desaparecer. Más aún, rote la página de manera que el punto

B ocupe el lugar que antes ocupaba A, y repita la observación. ¿Qué pasó con la línea que cruza el

pun to?

De hecho, esta misma situación se puede observar sin ningún diseño de papel, simplemente reem

plazando la cruz y el pun to po r los pulgares. El dedo aparece com o decapitad o (¡hágalo ). Entre paré n

tesis,

  fue así como esta observación se hizo popular: Marriot, un científico en la corte de uno de los

Luises , le mostr ó a l Re y po r este pro ced im ien to c óm o podría te ner una vis ión de sus subdi tos

decapitados antes de proceder a cortarles la cabeza.

La explicación normalmente aceptada para este fenómeno es que, en esa posición específica, la

| - ^ s imag en del pu nt o (o del de do o del subdito) cae en la zona de la retina dond e sale el nerv io óp tico,

y por lo tanto, no tiene capacidad sensitiva a la luz. Se lo llama el punto ciego. Sin embargo, lo que

C ^ g ^  Cada fez que aparezca  este símbolo,  el lector podrá encontrar  la explicación de un término en el Glosario

  pág.

 168).

Page 7: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 7/34

I

8

M¿^—

• •• H n V i r

  m '

  „¿̂^̂^̂

Fig. 4.  Los dos  círculos  de esta página

han sido  impresos con  una tinta idéntica.

Sin embargo, el de abajo  se  ve rosado por

su entorno verde.

  Moraleja:

 el color no es

un a propiedad de las  cosas;  es inseparable

de  cómo  estamos constituidos para  verlo.

mu y r a r amen te s e en f a t i za a l d a r e s a ex p l i cac ió n e s ¿p o r q u é n o an d amo s p o r e l mu n d o co n  

j e r o d e e s e t a m a ñ o d e m a n e r a p e r m a n e n t e ? N u e s t r a e x p e r i e n c i a v i s u a l e s d e u n e s p a c i o c o n t

a m e n o s q u e h a g a m o s e st as m a n i p u l a c i o n e s i n g e n i o s a s , n o p e r c i b i m o s q u e d e h e c h o h a y u n a  

t i n u id ad q u e d eb e r í a ap a r ece r . L o f a s c in an te co n e l ex p e r imen to d e l p u n to c i eg o e s q u e

  no ve

no vemos.

S eg u n d a s i t u ac ió n : t o m em o s d o s lu ces y d i s p o n g ámo s la s co mo en la F ig . 5 . ( E s to p u ed e l

s i m p l e m e n t e h a c i e n d o u n t u b o d e c a r t u l i n a d e l t a m a ñ o d e u n a a m p o l l e t a p o t e n t e y u s a n d o u n

ce lo f án r o jo co m o f il t ro . ) L u e g o , i n t e r p o n g am o s u n o b je to , p o r e j emp lo l a ma n o , y m i r em o s la

b r a s q u e s e p r o y ec t an s o b r e u n a mu r a l l a . ¡ Un a d e la s s o mb r as d e l a m an o ap a r ece azu l - v e r d o s a

to r p u ed e ex p e r im en t a r u s a n d o d i f e r en te s p ap e le s d e co lo r e s t r an s p a r en te s f r en t e a l a s l ámp

d i f e r en te s i n t en s id ad es d e lu z .

L a s i t u ac ió n aq u í e s i g u a lme n te s o r p r e n d e n te q u e en e l c a s o d e l p u n t o c i eg o . ¿De d ó n d e

co lo r azu l - v e r d o s o cu an d o to d o lo q u e s e e s p e r a e s b l an co , r o jo y d e mezc la s b l an co co n r o jo

d o ) ? E s t amo s aco s tu mb r ad o s a p en s a r q u e e l co lo r e s u n a cu a l id ad d e lo s o b je to s y d e l a l u z

e l los se ref le ja . As í , s i veo verde debe ser porque l lega a mi o jo luz verde, es decir , luz de un

lo n g i tu d d e o n d a . Ah o r a , si t o m am o s u n ap a r a to p a r a med i r la co m p o s ic ió n d e l a l u z en e st a s i t

n o s v a m o s a e n c o n t r a r c o n q u e d e h e c h o n o h a y u n p r e d o m i n i o d e l o n g i t u d e s d e o n d a s l l

v e r d es o azu le s en l a s o mb r a q u e v emo s v e r d e - azu l , y h a l l amo s s ó lo l a d i s t r i b u c ió n p r o p ia d e

b lan ca . Nu es t r a ex p e r i en c i a d e l v e r d e - azu l e s p a r a cad a u n o d e n o s o t r o s , s in emb ar g o , i n n eg ab

E s te h e r m o s o f e n ó me n o d e l as l l amad as s o mb r as d e co lo r e s fu e d es c r i t o p o r p r im er a v ez p o

v o n G u e r i ck e en 1 6 7 2 , a l n o t a r q u e s u d ed o s e p o n ía azu l cu a n d o h ac í a s o mb r a e n t r e s u l ámp a

s ol n a c i e n t e . H a b i t u a l m e n t e , p r e s e n t a d a c o n e s t e f e n ó m e n o ( y o t r o s p a re c i d o s ) , l a g e n t e d i c e : "

p e r o ¿d e q u é co lo r e s  realmente? , co mo s i l a r e s p u es t a q u e n o s d a e l i n s t r u men to d e med i r l o n

d e o n d a f u e r a l a ú l t ima r e s p u es t a . De h ech o , e s t e s imp le ex p e r imen to n o n o s r ev e l a u n a s i t u ac i

l ad a , q u e p u d ie r a ( co mo s e h ace a men u d o ) l l amar s e mar g in a l o i l u s o r i a . Nu es t r a ex p e r i en c i a

m u n d o d e o b j e t o s d e c o l o r e s e s l i t e r a l m e n t e i n d e p e n d i e n t e d e la c o m p o s i c i ó n e n l o n g i t u d e s d

d e l a l u z p r o v en ien te d e cad a e s cen a q u e m i r am o s . E n e f ec to , si l l ev o u n a n a r an ja d e l i n t e r io r

ca sa a l p a t io , l a n a r an ja s ig u e s i en d o d e l m i s m o co lo r ; s in emb a r g o , en e l i n t e r io r d e l a ca sa e r a

n ad a , p o r e j em p lo , p o r l u z f lu or es cente q u e t i en e u n a g r an can t id ad d e lo n g i t u d d e o n d a l l ama

( o co r t a ) , en ca mb i o , el so l t i en e p r ed o min an c ia d e lo n g i tu d es d e o n d as l l amad as ro j a s ( o l a r g

h a y m o d o d e p o n e r e n c o r r e s p o n d e n c i a l a t r e m e n d a e s t a b i l i d a d d e l o s c o l o r e s c o n q u e v e m

Page 8: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 8/34

^r

Fig.  5 .  Sombras de  colores.

Page 9: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 9/34

objetos del mundo con la luz que viene de ellos. La explicación de cómo vemos los colores n

cilla, y no podemos intentarla aquí en sus detalles. Pero lo esencial es que para explicarlo  

dejar de pensar en que el color de los objetos que vemos está determinado por las caracterí

luz que nos llegue de e llos, y debemos, en cambio, concentrarnos en c ompre nder c óm o la e

cia de un color corresponde a una configuación específica de estados de actividad en el

nervioso que su es tructura determina. De hecho, aunque no lo hagamos aquí en es te mom

posible demostrar que, debido a que tales estados de actividad neuronal (como en el ver verde

ser gatillados por una variedad de perturbaciones luminosas distintas (como las que hacen po

las sombras de colores), es posible correlacionar el nombrar colores con estados de actividad

pero no con longitudes de onda. Qué estados de actividad neuronal son gatillados por las disti

turbaciones, está determinado en cada persona por su estructura individual y no por las car

cas del agente perturbante.

Lo dicho es válido para todas las dimensiones de la experiencia visual (movimiento, textur

y demás) así como para cualquier otra modalidad perceptual. Podríamos ofrecer situaciones

que nos revelan, de un solo golpe, que lo que tomábamos como una simple captación de

com o espacio o color) tiene la estampa indeleble de nuestra propia estructura. Tendre mos q

tentarnos aquí sólo con las observaciones anteriores, y confiar que el lector verdaderament

hec ho, y que, por lo tanto, pod em os co ntar con q ue está fresco en su experiencia el haber e

do algo resbaladizo en lo que estaba habituado a encontrar muy sólido.

De hecho, estas experiencias —o muchas otras similares— contienen de una manera capsu

el sabor esencial de lo que queremos decir. Porque nos están mostrando de qué manera nuest

riencia está amarrada a nuestra estructura de una forma indisoluble. No vemos el "espa

mundo, vivimos nuestro campo visual; no vemos los "colores" del mundo, vivimos nuestro

crom ático. Sin lugar a dudas, y co mo de alguna ma nera vam os a descub rir a lo largo de estas

estamos en un mundo. Pero, cuando examinemos más de cerca cómo es que llegamos a con

mundo , s i empre nos encon t ra remos con que no podemos sepa ra r nues t r a h i s to r i a de a

— biológ icas y sociales— de có m o nos aparece ese mun do . Es tan obvio y cercano que es lo

cil de ver.

Page 10: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 10/34

Fig. 7.  Manos que d

de M. C. Escher.

Page 11: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 11/34

El gran escándalo

Hay en el zoológico del Bro nx en N ueva York, un gran pab ellón especialmen te dedicad o

mates.

  Uno puede encontrar así la posibilidad de ver en buenas condiciones a los chimpan

las,  gibones y tantos otros monos del nuevo y del viejo mundo. Llama la atención, sin emb

al fondo hay una jaula especialmente separada, cerrada c on gruesos b arrotes. Al acercarse u

título qu e dice: "El prim ate m ás peligroso del planeta." Al mirar entre los barrotes uno ve

presa su propia cara: aclara la leyenda que el hombre ha matado a más especies sobre el pl

ninguna otra especie conocida. De ser miradores pasamos a ser los mirados (por nosotros

pero ¿qué vemos?

El momento de la ref lexión ante un espejo es s iempre un momento muy pecul iar por

momento en que podemos tomar conciencia de lo que, de nosotros mismos, no nos es posib

ninguna otra manera . Co m o c uando revelamos e l pun to c iego que nos muestra nuestra prop

tura, y como cuando suprimimos la ceguera que ella conlleva rellenando el vacío. La reflex

proceso de conocer com o con ocem os, un acto de volvernos sobre nosotros mismos, la únic

nidad qu e tenem os de descu brir nuestras cegueras, y de recono cer q ue las certidumb

conocimientos de los otros son, respectivamente, tan abrumadoras y tan tenues como los nu

Esta situación especial de conocer cómo se conoce resulta tradicionalmente elusiva par

cultura occidental centrada en la acción y no en la reflexión, de modo que nuestra vida per

en general, ciega a sí mism a. En alguna parte pareciera haber un tabú: "Pro hibid o c onoc er

cer." Pero en verdad el no saber cómo se constituye nuestro mundo de experiencias, que es

lo más cercano de nuestra existencia, es un escándalo. Hay muchos escándalos en el mundo,

ignorancia es uno de los peores.

Quizás, una de las razones por las que se tiende a evitar tocar las bases de nuestro conoc

nos da una sensación un poco vertiginosa por la circularidad de lo que resulta ser utilizar

me nto de análisis para analizar el instru me nto de análisis: es com o si pretendiésem os q ue

viese a sí mismo. En la Fig. 7, que es un grabado del artista holandés M. C. Escher, este vé

representado muy ní t idamente , con esas manos que se dibujan mutuamente de ta l modo q

se sabe dónde está el fundamento de todo el proceso: ¿cuál es la mano "verdadera"?

Page 12: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 12/34

D e man er a p a r ec id a , au n q u e v imo s q u e lo s p r o ces o s i n v o lu c r ad o s en n u es t r a s ac t iv id ad es , en n u es

t r a co n s t i t u c i ó n , e n n u e s t r o a c t u a r c o m o s e re s v i v o s, c o n s t i t u y e n n u e s t r o c o n o c e r , n o s p r o p o n e m o s

in v es t ig a r có m o co n o ce mo s a t r av és d e mi r a r e s o s s u ces o s co n e s o s p r o ces o s . P e r o n o t e n em o s a l t e r

n a t i v a a l g u n a p o r q u e h a y u n a i n s e p a r a b i l i d a d e n t r e l o q u e h a c e m o s y n u e s t r a e x p e r i e n c i a d e l m u n d o

co n s u s r eg u la r id a d es : s u s p l azas , s u s n iñ o s y su s g u e r r a s a tó mica s . L o q u e s í p o d e mo s in t e n t a r — y q u e

e l l e c to r d eb e to ma r co m o u n a t a r ea p e r s o n a l— es d a r n o s cu en t a d e to d o lo q u e imp l i ca e s t a co in

c id en c ia co n t in u a d e n u es t r o s e r , n u es t r o h ace r y n u es t r o co n o c e r , d e j an d o d e l ad o n u es t r a a c t i t u d

co t id i an a d e t r a t a r a n u es t r a ex p e r i en c i a co n u n s e l lo d e in d u b i t ab i l i d ad , co mo s i r e f l e j a r a u n mu n d o

ab s o lu to .

P o r e s to e s t a r á , a l a b a s e d e to d o lo q u e v amo s a d ec i r , e s t e co n s t an t e d a r s e cu en ta d e q u e a l f en ó

m e n o d e l c o n o c e r n o s e l o p u e d e t o m a r c o m o si h u b i e r a " h e c h o s " u o b j e t o s al lá a fu e ra , q u e u n o c a p t a

y s e l o s me te en l a cab eza . L a ex p e r i en c i a d e cu a lq u ie r co s a a l l á a f u e r a e s v a l id ad a d e u n a man e r a p a r

t i cu l a r p o r l a e s t r u c tu r a h u man a q u e h ace p o s ib l e " l a co s a" q u e s u r g e en l a d e s c r ip c ió n .

E s t a c i r cu l a r id ad , e s t e en cad en amien to en t r e acc ió n y ex p e r i en c i a , e s t a i n s ep a r ab i l i d ad en t r e s e r d e

u n a m a n e r a p a r t i c u l a r y c o m o e l m u n d o n o s a p a r e c e , n o s d i c e q u e  todo acto de conocer trae un mundo a

la mano.  E s t a ca r ac t e r í s t i c a d e l co n o ce r s e r á , i n ev i t ab l emen te , a l a v ez q u e n u es t r o p r o b lema , n u es t r o

p u n t o d e p a r t i d a y e l h i l o d i r ec t r i z d e t o d a n u es t r a p r e s en t ac ió n en l a s p r ó x ima s p ág in as . To d o e s to

p u ed e en cap s u la r s e en e l a f o r i s mo :

  Todo hacer es conocer  y todo conocer es hacer.

C u a n d o h a b l a m o s a q u í d e a c c i ó n y e x p e r i e n c i a , s e r í a u n e r r o r m i r a r l o c o m o a q u e l l o q u e o c u r r e

s ó lo en r e l ac ió n co n e l m u n d o q u e n o s r o d ea , en e l p l an o p u r a me n te " f í s i co " . E s t a ca r ac t e r í s ti c a d e l

h ac e r h u m an o s e ap l i ca a t o d as la s d im en s io n es d e n u es t r o v iv i r . E n p a r t i cu l a r s e ap l i ca a l o q u e e s t a

mo s h ac i en d o aq u í y ah o r a , e l l e c to r y n o s o t r o s . ¿Y q u é e s t amo s h ac i en d o ? E s t am o s en e l l en g u a je ,

m o v i é n d o n o s e n é l e n u n a p e c u l i a r f o r m a d e c o n v e r s a c i ó n e n u n d i á l o g o i m a g i n a d o . T o d a r e f l e x ió n ,

i n c l u y e n d o u n a s o b r e lo s f u n d a m e n t o s d e l c o n o c e r h u m a n o , se d a n e c e s a r i a m e n t e e n e l l e n g u a j e , q u e

es n u es t r a p ec u l i a r f o r m a d e s e r h u man o s y e st a r en e l h ace r h u m an o . P o r e s to , e l l en g u a je e s t a mb ién

n u e s t r o p u n t o d e p a r t i d a , n u e s t r o i n s t r u m e n t o c o g n o s c i t i v o y n u e s t r o p r o b l e m a . E l n o o l v i d a r q u e l a

c i r cu l a r id ad en t r e acc ió n y ex p e r i en c i a s e ap l i ca t amb ién a aq u e l lo q u e e s t amo s h ac i en d o aq u í y

ah o r a , e s mu y im p o r t an t e , y t i en e co n s ecu en c ia s c l av es, co m o e l l e c to r v e r á más ad e l an te . E s to n o

d e b e m o s o l v i d a r l o n u n c a , y c o n e s e f in r e s u m i r e m o s t o d o e s t o e n u n s e g u n d o a f o r i s m o q u e d e b e m o s

Page 13: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 13/34

mantener presente a lo largo de este libro:

 Todo lo dicho es dicho  por alguien.

  Toda reflexió

mundo a la mano y, como tal, es un hacer humano por alguien en particular en un lugar p a

Estos dos aforismos debieran ser como dos faros que nos recuerden permanentemen

dónde par t imos y hacia dónde vamos.

Lo más corriente es que a este traer a la mano del conocer se lo trate como dificultad

residuo explicativo que hay que erradicar. De ahí, por ejemplo, que se diga que la sombra de

una "ilusión óptica" y que "en realidad" no hay color. Lo que nosotros estamos diciendo   es ju

lo opuesto: ese carácter del conocer es la clave maestra para entenderlo, no un residuo mole

obstáculo. El traer a la mano es lo palpitante del conocimiento, y está asociado a las raíces m

das de nuestro ser cognoscitivo, cualquiera que sea la solidez de nuestra experiencia. Y por

raíces van hasta la base biológica misma —como veremos— este traer a la mano se manifiesta

nuestras acciones y todo nuestro ser. Por cierto, se manifiesta en todas aquellas acciones de

social humana donde nos es a menudo evidente, como en el caso de los valores y las preferen

hay una discontinuidad entre lo social y humano y sus raíces biológicas. El fenómeno del co

todo de una sola pieza, y en todos sus ámbitos está fundado de la misma manera.

Explicación

Nuestro objetivo es tá entonces c laro: queremos examinar e l fenómeno del conocer tom

universalidad del hacer en el conocer, este traer a la mano un mundo, como problema y punt

tida, de modo que podamos revelar su fundamento. ¿Y cuál será nuestro criterio para decir qu

tenido éxito en nuestro examen?

Una explicación siempre es una proposición que reformula o recrea las observaciones de

meno en un sistema de conceptos aceptables para un grupo de personas que comparten un

de validación. La magia, por ejemplo, es tan explicativa para los que la aceptan, como la cien

los que la aceptan. La diferencia específica entre la explicación mágica y la científica está en

como se genera un sistema explicativo científico, el cual constituye de hecho su criterio de va

Page 14: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 14/34

Así podemos distinguir esencialmente cuatro condiciones que deben ser satisfechas en la proposición

de una explicación científica, las que no necesariamente ocurren secuencialmente, sino en algún

orden imbricado:

l_»- a. descripción del o los fenómenos a explicar de una manera aceptable para la comunidad de obser

vadores;

b.  proposición de un sistema conceptual capaz de generar el fenómeno a explicar de una manera

aceptable para la comunidad de observadores (hipótesis explicativa);

c. deducción a partir de b de otros fenómenos no considerados explícitamente en su proposición, así

como la descripción de sus condiciones de observación en la comunidad de observadores;

d. observación de estos otros fenómenos deducidos de b.

Sólo si se satisface este criterio de validación, una explicación es una explicación científica, y una

afirmación es una afirmación científica sólo si se funda en explicaciones científicas.

Este ciclo de cuatro componentes no es extraño a nuestro pensar cotidiano; a menudo lo usamos

para dar explicaciones de fenómenos tan variados como la

 patine

  del auto o las elecciones presiden

ciales. Lo que los científicos hacen es intentar ser plenam ente consistentes y explícitos con cada u no

de los pasos, y dejar un registro doc um enta do de tal man era que se crea una tradición que va más allá

de una persona o una generación.

Nuestra situación es exactamente la misma. Estamos convertidos, el lector y nosotros, en obser

vadores que hacemos descr ipciones.Y como observadores hemos escogido precisamente e l conocer

como nuestro fenómeno a explicar. Más aún, lo que hemos dicho hace evidente cuál va a ser nuestra

descr ipción de par t ida del fenómeno del conocer: ya que todo conocer t rae un mundo a la mano,

nuestro punto de partida será necesariamente la efectividad operacional del ser vivo en su dominio

de existencia. En otras palabras, nuestro punto de partida para generar una explicación validable cien

tíficamente es el entender el conocer como  acción  efectiva,  acción que permita a un ser vivo continuar

su existencia en un medio determinado al traer allí su mundo a la mano. Ni más, ni menos.

¿Y cómo sabremos cuándo hemos logrado una explicación satisfactoria del fenómeno del cono

cer? Bueno, el lector podrá, a estas alturas, imaginar la respuesta: cuando hayamos propuesto un sis

tema conceptual capaz de

 generar

  el fenóm eno cognoscitivo co m o resultado del op erar del ser vivo, y

hayamos mostrado que tal proceso puede resultar en seres vivos como nosotros, capaces de generar

descripciones y reflexionar sobre ellas como resultado de su realizarse como seres vivos al operar efec-

C O N O C E R

Conoc e r e s a c c i ón e f e c t i va , e s de

e f e c t i v i d a d o p e r a c i o n a l e n e l d o m

de e x i s t e nc i a de l s e r v i vo .

E X P L I C A C I Ó N D E L C O N O C E R

Fenómeno a expl icar : acc ión e fec t i

se r vivo en su medio ambiente .

I I . Hipótes is expl ica tiva : organiz ac ión

no ma del ser vivo; deriva f ilogenética

togené t ica con conservac ión de la a

c ión (acoplam iento es t ruc tura l ) .

I I I . D e duc c i ón de o t r os f e nóme nos : c

nac ión conductua l en la inte racc ion

cur rentes ent re se res vivos y coordi

conductua l r ecurs ivas sobre la coo

c ión conductua l .

IV. Observac iones adic iona les : f enó men

ciales, dom inios l ingüís t icos , lenguaje

toconcienc ia .

Page 15: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 15/34

tivamente en sus dominios de existencia. Desde esta proposición explicativa habremos de

es que pueden generarse todas las dimensiones del conocer que nos son familiares.

Tal es el itinerario que p ropo nem os al lector e n estas páginas. A lo largo de los cap

siguen, iremos desarrollando tanto esta proposición explicativa, como su conexión con va

menos adicionales tales como la comunicación y el lenguaje. Al fmal de este viaje podr

volver a leer estas páginas y evaluar la fertilidad de aceptar nuestra in vitación de m irar así el

del conocer.

Page 16: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 16/34

plasticidad est

Page 17: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 17/34

Page 18: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 18/34

La organización de lo vivo

II

Nuestro punto de partida ha sido darnos cuenta de que todo conocer es un hacer por el que

conoce, es decir, que todo conocer depende de la estructura del que conoce.Y este punto de partida

da la pista de lo que será nuestro itinerario conceptual a lo largo de estas páginas: ¿cómo se da este

traer a la mano del conocer en el hacer?, ¿cuáles son sus raíces y sus mecanismos para que así opere?

Frente a estas preguntas, el primer paso de nuestro itinerario es el siguiente: el que el conocer sea

el hacer del que conoce, está enraizado en la manera misma de su

 ser

 vivo, en su

  organización.

  Nosotros

sostenemos que no se pueden entender las bases biológicas del conocer sólo a través del examen del

sistema nervioso, y nos parece que es necesario entender cómo estos procesos se enraizan en el ser

vivo en su totalidad.

En consecuencia, en este capítulo vamos a entrar a discutir algunas cosas que tienen que ver con

la organización de lo vivo. Notemos que esta discusión no es un adorno biológico, o una especie de

relleno académicamente necesario para los que no tienen una formación biológica. Es en este libro

una pieza fundamental para entender el fenómeno del conocimiento en toda su dimensión.

Breve historia de la Tierra

Para emprender los primeros pasos en lo que se refiere a la comprensión de la organización del ser

vivo,

  veremos pr imero cómo su

 materialidad

  nos puede servir como guía para llegar a comprender cuál

es su clave fundamental. Vamos a hacer un viaje p or algunos hitos de transform ación material que

hacen posible la

 aparición

  de los seres vivos.

En la Fig. 8 al frente se pu ede admirar la galaxia llamada M I 0 4,  de la constelación de Virgo, cono

cida popu lar m ent e co mo la galaxia som brero. Adem ás de su belleza, tiene para nosotros un interés

especial: nuestra propia galaxia, la vía láctea, nos parecería de una forma muy parecida si pudiéramos

verla desde le jos . Como no podemos, debemos contentarnos con un diagrama como el de la Fig . 9 ,

que incluye algunas dimensiones del espacio estelar y de las estrellas, que, comparadas con las nues

tras,

 nos hace n sentir hum ildad . Las unid ades de la escala están en kiloparsec, y cada uno de ellos son

3.260 años luz. Dentro de la vía láctea nuestro sistema solar tiene una posición más bien periférica

como a 8 kiloparsec del centro.

Fig. 9. Abajo: distancias  en la vía láctea  y 

nuestro Sol en ella.

+ 10

Page 19: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 19/34

Fig. 10. Esquema de la secuencia  de

transformaciones   de una  estrella desde su formación.

Nuestro Sol es una de varios millones de otras estrellas que conforman estas estructur

facéticas que son las galaxias. ¿Cómo se originaron las estrellas? Una reconstrucción propuest

historia es la siguiente.

El espacio interestelar contien e e norm es cantidades de hidróge no. Turbulencias en est

gaseosas producen verdaderos bolsillos de gases a alta densidad, ilustrados en la primera etapa d

10.

  En este estado, algo muy interesante comienza a pasar: se produce un equilibrio entre la

cia

  a

  la cohesión por la gravedad y la tendencia a la irradiación producto de reacciones termo

al interior de la estrella en formación. Esta irradiación visible desde el exterior nos permit

estrellas como las vemos en el cielo, aun a grandes distancias.

Cuando se equilibran ambos procesos, la estrella entra en lo que se llama su "secuencia p

(Fig. 10), vale decir, su curso de vida como estrella individual. Durante este período, la mater

sido condensada es gradualmente consumida en reacciones termonucleares durante un pe

alrededor de och o mil millone s de años. Al consum irse una fracción de l hidró geno conde

secuencia principal termina en un proceso de transformaciones más dramáticas. Primero la es

convierte en un gigante rojo, luego en una estrella que pulsa, y finalmente, transformándos

Page 20: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 20/34

súper-nova, explota en un verdadero estornudo cósmico en el que se forman los elementos pesados.

Lo que queda de materia en el centro de la estrella se colapsa en una estrella más pequeña de densi

dad muy alta llamada un enano blanco.

Nuestro Sol está en un punto más o menos en el medio de su secuencia principal, y se espera que

siga irradian do p or al menos tres mil millones de años más, antes de consum irse. Ah ora bie n, en

mu cho s casos, duran te esta transformación de una estrella, ésta agrupa a su alrededor u n halo de m ate

ria que gira en tor no a ella y que ella capta del espacio interestelar, pero qu e dep ende energ éticam ente

del curso de transform aciones de la estrella. La Tierra y los otros planetas de nuestro sistema plan e

tario son de este tipo y deben haber sido captados como remanentes de la explosión de una súper-

nova, a juzg ar po r su riqueza en átomo s de alto peso.

Según los geofísicos, la Ti err a tiene al me nos c inco m il millones de años y una historia de inc e

sante transformación. Si fuéramos visitantes de hace cuatro mil millones de años y nos paseáramos

sobre la superficie de la Tierra, nos encontraríam os c on una atmósfera co nstituida po r gases co mo

met ano, am onio, h idrógeno y hel io . Cier tam ente , una a tmósfera m uy dis t in ta a la que co nocem os hoy.

Distin ta, entre otras cosas, po r estar constantem ente som etida a un bom bard eo en ergético d e radia-

Page 21: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 21/34

ciones ultravioletas, rayos gamma, descargas eléctricas, impactos meteóricos y explosiones volcá

Todos estos aportes energéticos produjeron (y continúan produciendo), en la tierra primitiv a

atmósfera, una co ntinua diversificación de las especies molecu lares. Al com ienzo de la historia

estrella, había fundamentalmente homogeneidad molecular. Luego de la formación de los planet

un continuo proceso de transformación química, se ha producido una gran diversidad de es

moleculares, tanto en la atmósfera como en la superficie de la corteza terrestre.

Sin embargo, dentro de esta compleja y continua historia de transformaciones moleculares

nosotros es particularmente interesante el momento en que se acumulan y diversifican las molé

formadas por cadenas de carbono o  moléculas  orgánicas.  Debido a que los á tomos de carbono

formar, solos y con la participación de muchas otras clases de átomos, una cantidad ilimitada de

nas distintas en su tamaño, ramificación, plegamiento y composición, la diversidad morfológ

química de las moléculas orgánicas es, en prin cipio, infinita. Y es, precisamen te, esta diversidad

fológica y química de las moléculas orgánicas lo que hace posible la existencia de seres vivos, a

mitir la diversidad de reacciones moleculares involucradas en los procesos que los realizan. E

veremos más adelante . Entre tanto , podem os decir que quie n se pasease por la Tierra pr imit iva

la continua producción abiógena (sin la participación de seres vivos) de moléculas orgánicas tan

la atmósfera co mo en los mares agitados co mo verdaderas sopas de reacciones molecu lares. Al

esta diversidad se muestra en la Fig.

  11 ,

  donde se ve una molécula de agua que sólo tiene forma

limitadas de asociación, en comparación con algunas moléculas orgánicas.

Aparición de los seres vivos

Cuando las transformaciones moleculares en los mares de la tierra primitiva llegaron a este p

se llegó también a la situación en la que era posible la formación de sistemas de recciones mo

lares de un tipo peculiar. Esto es: debido a la diversificación y plasticidad posible en la fami

moléculas orgánicas, se hace a su vez posible la formación de redes de reacciones moleculares que

ducen a las mismas clases de moléculas que las integran, y aun que limitan el entorno espacial e

se realizan. Tales redes e interacciones moleculares que se produc en a sí mismas y especifican su

pios límites son, como veremos más adelante, seres vivos.

Page 22: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 22/34

f?

Fig . 11 .

 Comparación a escala  de modelos moleculares

del agua (a la izquierda),  un  aminoácido  (Usina, al cen

tro) y una proteína (la enzima ribonncleasa, a la

derecha).'

Page 23: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 23/34

D I S T I N C I O N E S

El acto de señalar cualquier ente, cosa o

unidad , es tá amarrado a que uno real ice un acto

de

  distinción

 que separa a lo señalado com o dis

t in to de un fondo. Cada vez que hacemos refe

rencia a algo, implícita o explícitamente, estamos

especif icando un  criterio de distinción  que señala

aquello de que hablamos y especifica sus

propiedades como ente , unidad u objeto .

És ta es una s i tuación enteramente co t id iana

y no única , en la que es tamos sumergidos nece

s a r i a y p e r man en temen te .

U N I D A D E S

U n a  unidad  (entid ad, objeto) queda definida

por u n acto de distinción. Conv ersam ente, cada

vez que hacemos referencia a una unidad en nues

tras descripciones, implicamos la operación de

distinción que la define y hace posible.

En la Fig. 12 se muestran fotos tomadas al microcopio electrónico de este tipo de agru p

moleculares así formadas hace más de 3.400 millones de años. Se han encontrado todavía poc o

de este tipo, pero los hay. Hay otros ejemplos encontrados en depósitos fósiles más recientes d

pun to de vista geoló gico: meno s de dos mil millones de años. Los investigadores han clasificado

agrupaciones moleculares como los primeros seres vivos fósiles y, en realidad, como fósiles d

vivos que existen hasta el día de hoy: las bacterias y algas.

 

Ahora bien, esa afirmación, "Eso es un ser vivo fósil", es muy interesante y conviene exam

de cerca. ¿Q ué le perm ite a un investigador decir eso? Vamos paso a paso. En pr ime r lugar fue

sario hacer una observación y decir aquí hay un algo, unos globulitos a los cuales se les puede

perfil bajo el microscopio. En segundo lugar, se observa que esas unidades así señaladas se pare

lo morfológico, a seres vivos que existen actualmente. Como hay evidencia convincente de

apariencia es peculiar a los seres vivos, y que estos depósitos datan de una fecha comp atible con

toria de transformaciones de la corteza y la atmósfera terrestre, que tienen que haber estado aso

a procesos propios de los seres vivos que conocemos, la conclusión es que son seres vivos fósil

Es decir, el investigador está en el fondo p rop oni end o un .criterio que dice: los seres vivos qu

antes tienen que p arecerse (en este caso, en lo m orfológico) a los seres vivos actuales. Esto im pli

uno tiene que tener, aunque sea implícito, algún criterio para saber y clasificar cuándo un ente

tema actual es un ser vivo y cuándo no.

Esto nos deja con un problema difícil: ¿Cómo sé yo cuándo un ser es vivo? ¿Cuáles son m

terios? A lo largo de la historia de la biología, se han propuesto muchos criterios, todos ellos co

cultades. Por ejemplo, algunos han propuesto que debiera ser la composición química. O b

capacidad de movimiento. O bien la reproducción. O, en fin, alguna combinación de tales cri

es decir, una lista de propiedades. Pero ¿cómo sabemos cuándo está la lista completa? Por ejem

se construye una máquina capaz de reproducirse, pero que está hecha de fierro y plástico,

moléculas orgánicas, ¿está viva?

Nosotros queremos proponer una respuesta a esta pregunta de una manera radicalmente dis

esta tradicional enumeración de propiedades, y que simplifica tremendamente el problema

entender es te cambio de ópt ica , tenemos que darnos cuenta de que e l solo hecho de q

hagamos la pregunta de cómo se reconoce a un ser vivo indica que tenemos una idea, aún im

Page 24: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 24/34

de cuál  es su

  organización,

  y es esta idea la que va a determinar el que aceptemos o rechacemos la

respuesta que se nos proponga. Para evitar que una tal idea implícita sea una trampa que nos ciega,

debemos estar conscientes de ello al considerar la respuesta que sigue.

¿Qué es la organización de algo? Es a la vez muy sencillo y potencialmente complicado. Son aque

llas relaciones que tienen que existir o tienen que darse para que ese algo sea. Para que yo juzgue a

este objeto como silla, es necesario que yo reconozca que ciertas relaciones se dan entre partes que

llamo patas, respaldo, asiento, de una cierta manera tal que el sentarse se haga posible. El que sea de

madera , con clavos, o de plástico y tornillos, es enter am ente irrelevante para qu e yo lo califique o clasi

fique com o silla. Esta situación en la que recono cem os imp lícita o explícitame nte la organización de

un objeto al señalarlo o distinguirlo, es universal en el sentido de que es algo que hacemos constan

temente como un acto cognoscitivo básico que consiste nada menos y nada más que en generar clases

de cu alqu ier tip o. Así, la clase de las sillas que dará definida p or las relaciones qu e de ben satisfacerse

para que yo clasifique algo como silla. La clase de los actos buenos quedará definida por los criterios

que yo establezca que deben darse entre las acciones realizadas y sus consecuencias para considerarlas

como buenas.

Es sencillo apuntar a una organización determinada al señalar los objetos que forman una clase,

pero puede ser complejo y difícil describir exactamente y de manera explícita las relaciones que

constituyen dicha organización. Así, en la clase de las sillas parece fácil describir la organización "silla",

pero no es así con la clase de los actos buenos, a menos que se comparta una cantidad inmensa de

trasfondo cultural.

Cu and o hablam os de los seres vivos, ya estamos suponiend o q ue hay algo en com ún e ntre ellos,

de otra manera no los pondríamos dentro de la misma clase que designamos con el nombre: vivo. Lo

que no está dicho, sin em bargo, es cuál es esa organización que los define co mo clase. Nue stra p ropo si

ción es que los seres vivos se caracterizan porque, literalmente, se producen continuamente a sí mis

mos, lo que indicamos al llamar a la organización que los define,

  organización.

  En lo fundamental, esta

organización está dada por ciertas relaciones que entramos a detallar y que veremos más fácilmente a

nivel celular.

En prime r lugar, los com pone ntes moleculares de una unidad celular deberán estar dinámic amen te

relacionados en u na c ontinua red de interacciones. A esta red se le conoc en h oy día much as de sus trans

formaciones químicas concretas, y el bioquímico colectivamente las llama

 metabolismo

 celular.

f

ífr

^ 3

Fig. 12. A la izquierda: fotografía de fósil

que se presume fueron bacterias encontra

depósitos de más de tres  m il millones de a

A la   derecha:  fotografías de b acterias

actuales, cuya forma es comparable  a la de

reproducidos  a la izquierda.

II

Page 25: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 25/34

26

Fig. 1 3. El experimento de Miller como metáfora  de

los  sucesos de la atmósfera primitiva.

Page 26: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 26/34

A h o r a b i en , ¿q u é e s l o p ecu l i a r d e e s t a d in ámica ce lu l a r en co mp ar ac ió n co n cu a lq u ie r o t r a co l ec

c ió n d e  t r an s f o r ma c io n es mo le cu la r e s en lo s p r o ces o s n a tu r a l e s ? E s m u y in t e r e s an te : e s t e me t ab o l i s m o

ce lu l a r p r o d u ce co mp o n en te s , t o d o s lo s cu a l e s i n t eg r an l a r ed d e t r an s f o r mac io n es q u e lo s p r o d u jo , y

a lg u n o s d e lo s cu a l e s co n f o r man u n  borde, u n l ím i t e p a r a es t a r ed d e t r an s f o r mac io n es . E n t é r m in o s m o r

f o ló g ico s , p o d e mo s v e r a l a e s t r u c tu r a q u e h ac e p o s ib l e e s t e c l iv a j e en e l e s p ac io , co m o u n a  membrana.

A h o r a b i e n , es t e b o r d e m e m b r a n o s o n o e s u n p r o d u c t o d e l m e t a b o l i s m o c e l u la r , c o m o e s l a t e la e l p r o

d u c to d e u n a má q u i n a d e p r o d u c i r t e l a s . E s to p o r q u e e s t a me mb r an a n o s ó lo l im i t a la ex t en s ió n d e l a

r ed d e t r an s f o r mac ió n q u e p r o d u jo s u s co mp o n e n te s i n t eg r an te s , s i n o q u e p a r t i c ip a en e l l a. D e n o h ab e r

e s a a r q u i t e c tu r a e s p ac i a l , e l me tab o l i s m o ce lu l a r s e d e s in t eg r a r í a en u n a s o p a mo lec u la r q u e d i f u n d i r í a

p o r t o d as p a r t e s y n o co n s t i t u i r í a u n a u n id ad d i s c r e t a co mo l a cé lu l a .

E L  ORIGEN DE LAS MOLÉCULAS ORGÁNICAS

Cuando se discute la aparición de moléculas

orgánicas que son comparables a las que se encuentran

C^ S^ en los seres vivos (tales com o bases nucleotídicas,

aminoácidos o cadenas proteicas), hay a menudo la

tentación de pensar que la probabilidad de que ellas se

hayan producido espontáneamente es demas iado

pequeña, y que se requiere alguna direccionalidad en

todo el proceso . Según la recons trucción que hemos

estado esbozando, esto no es así. Cada una de las eta

pas descritas surge como consecuencia de la anterior

de manera inevitable. Hasta el día de hoy, s i uno toma

una imitación de la atmósfera primitiva, y produce la

agitación energética adecuada, se producen moléculas

orgánicas de complejidad com parable a las enc on

tradas en los seres vivos actuales. Hasta el día de hoy, si

uno concentra suficientemente una masa gaseosa de

hidrógeno, se producen al interior de ella reacciones

termonucleares que dan or igen a nuevos e lementos

atóm icos que antes no estaban presentes. La historia

que hemos estado esbozando es una de secuencias   que

se s ig uen una a l a o t ra inev i t a b lem ent e ,  y sólo le

puede sorprender a uno un resultado si es que uno no

tiene acceso a la secuencia históric a c omple ta.

Una de las evidencias más clásicas de que no hay

discontinuidad en estas transformación por etapas, fue

dada por un exper imento real izado por Mil ler en

1953,

  e ilustrado en la figura de este recuadro. La idea

de Miller es simple: tomar en un frasco de laboratorio

una imitación de la atmósfera primitiva tanto en com

posición com o en radiaciones energéticas. En su caso,

esto consiste en hacer pasar una descarga elétrica por

una mezcla de amoníaco , metano, h idrógeno y vapor

de agua. Los resultados de las transformaciones mole

culares se recogen mediante la recirculación del agua,

y el análisis de las sustancias que quedan allí disueltas.

Para la sorpresa de toda la comunidad científica, Miller

obtuvo la abundante producción de moléculas t íp ica

mente halladas en organismos celulares modernos,

tales como los aminoácidos alanina, ácido aspártico, y

otras moléculas orgánicas como la urea y en ácido suc-

cínico.

J

S. L. Miller, Science  117:528, 1953.

II

Page 27: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 27/34

28

O R G A N I Z A C I Ó N Y E S T R U C T U R A   ^

Se ent iende por

  organización

 a las relaciones

que deben darse en tre los componentes de a lgo

para que se lo reconozca como miembro de

una clase específica. Se entiende por  estructura d e

algo a los componentes y re laciones que concre

t amen te co n s t i t u y en u n a u n id ad p a r t i cu l a r

real izando su organización .

As í , por e jemplo , en e l excusado la organi

zación del s istema de regulación del nivel de

agua consiste en las relaciones entre un aparato

capaz de detectar el nivel de agua, y otro apara

to capaz de cortar el flujo de entrada de agua.

En el baño de la casa, esta clase de artefacto se

realiza con un sistema mixto de plástico y metal

consistente en un flotador y una válvula de

paso. Esta estru ctura específica, s in em bar go,

podr ía ser modif icada reemplazando el p lás t ico

por madera, s in alterar el hecho de que seguiría

s iendo un excusado.

Lo que tenemos, entonces, es una situación muy especial en cuanto a relaciones de tran

ciones químicas: por un lado, pod em os ver una red de transformaciones dinám icas que pro d

propios componentes y que es la condición de posibilidad de un borde, y por otro, podemos

borde que es la condición de posibilidad para el operar de la red de transformaciones que la

como una unidad:

. r *

D i n á m i c a B o r d e

( m e t a b o l i s m o ) ( m e m b r a n a )

4  I

Notemos bien que éstos no son procesos secuenciales, sino que son dos aspectos de un fe

unitario. No es que primero haya borde y luego dinámica, y luego borde, etc. Estamos habla

un tipo de fenómeno donde la posibilidad de distinguir un algo del todo (algo que yo puedo

microscopio, por ejemplo) depende de la integridad de los procesos que lo hacen

¡Interrumpamos (en algunos puntos) la red metabólica celular y nos encontraremos con que

emos,

  después de un tiem po, más unidad de la que hablar La característica más peculiar de un

autopoiético es que se levanta por sus propios cordones, y se constituye como distinto del me

cundante por medio de su propia dinámica, de tal manera que ambas cosas son inseparables.

Lo que caracteriza al ser vivo es su organización, y distintos seres vivos se distinguen porq ue

estructuras distintas, pero son iguales en cuanto a organización.

Autonomía y autopoiesis

El reconoc er qu e lo que caracteriza a los seres vivos es su organización perm ite relacio

gran cantidad de datos empíricos sobre el funcionamiento celular y su bioquímica. La no

autopoiesis, por lo tanto, no está en contradicción con ese cuerpo de datos, al contrario, se a

ellos,

 y prop one , explícitam ente, interpretar tales datos desde un p unt o de vista específico que

za el hecho de que los seres vivos son unidades

 autónomas.

Estamos utilizando la palabra "auto nom ía" en su sentido c orrien te. Vale decir, un sis

autónomo si es capaz de especificar su propia legalidad, lo que es propio de él.  No  es tam

Page 28: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 28/34

pon ien do que los seres vivos son los únicos entes autónomos; ciertamente no lo son. Pero es evidente

que una de las cosas más inmediatas propias de un ser vivo es su autonomía. Nosotros proponemos

que el modo, el mecanismo que hace de los seres vivos sistemas autónomos es la autopioesis que los

caracteriza como tales.

La pregunta por la autonomía de lo vivo es tan vieja como la pregunta por lo vivo. Son sólo los

biólogos contemporáneo s los que se s ienten incóm odos frente a la pregunta ¿cómo p uede com pren

derse la autonomía de lo vivo? Desde nuestro punto de vista, en cambio, esa pregunta se transforma

en un hi lo guía que nos permite ver que, para comprend er la autonomía del ser v ivo, debemos com

prender la organización que lo define como unidad. Esto porque es el dar cuenta de los seres vivos

como unidades autónomas lo que permite mostrar cómo su autonomía, usualmente vis ta como algo

misterioso y elusivo, se hace explícita al señalar que lo que los define como unidades es su organi

zación, y que es en ella donde simultáneamente se realizan y especifican a sí mismos.

Nu estro enfoque entonces es proce der c ient í f icam ente: si no pod em os dar una lista que ca

racteriza un ser vivo, ¿por qué no proponer un sistema que al operar genere toda su fenomenología?

La evidencia de que una unid ad tiene exac tame nte esas características se encu entra al mirar tod o lo

que sabemos sobre metabolismo y estructura celular en su mutua interdependencia.

El qu e los seres vivos tengan una organización , naturalm ente, no es prop io d e ellos, sino com ún a

todas aquellas cosas que podemos investigar como sistemas. Sin embargo, lo que es peculiar en ellos

es que su organización es tal que su único producto es sí mismos, donde no hay separación entre pro

ductor y producto. El ser y el hacer de una unidad son inseparables, y esto constituye su modo especí

fico de organización.

La organización autopoiética, como toda organización, puede ser satisfecha en particular por

muchas clases diferentes de componentes. Sin embargo, debemos darnos cuenta de que, en el ámbito

molecular del origen de los seres vivos terrestres, sólo algunas especies moleculares deben haber poseí

do las características que permitieron constituir unidades autopoiéticas, iniciando el devenir estruc

tural al que nosotros mismos pertenecemos. Por ejemplo, fue necesario contar con moléculas capaces

de formar membranas suficientemente estables y plásticas como para ser, a la vez, barreras efectivas, y

de propiedades cambiantes para la difusión de moléculas y iones por tiempos largos con respecto a las

velocidades m oleculares. Las moléculas que form an las láminas de mica, por ejemp lo, forman barreras

demasiado rígidas en sus propiedades para permitir que ellas participen como tales en unidades

dinám icas (células) en contin uo y rápido recamb io molecu lar con el medio .

Page 29: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 29/34

2f  -•"">*  » -¿v

*»•  » ' ' • '• • V - - '/• - 5 l '

  •*•>...

 . - . -5 ,

  -, •• ,

H K v "  -• • - , •<  -  •*  • • > L ^ ^ j & * » »».

i ^ 5 ^

'  C É L U L A S Y S U S M E M B R A N A S 

La mem bran a en las célu las juega un ro l much o

r ico y d iverso que una s imple l ínea de demarc

espacial para una colección de t rans formaciones q

cas , porque par t ic ipa en e l la como los o tros co

nentes celu lares . Es to en c ircuns tancias en que e l in

celu lar t iene una r ica arqui tectura de grandes b lo

moleculares , a t ravés de la cual t rans i tan múl

especies orgánicas en cont inuo cambio , y la memb

operacionalmente , es par te de ese in ter ior . Es to es c

tan to para las membranas que l imitan los espacios

lares que col indan con el medio exter ior , como

aquel las que l imitan cada uno de los var iados esp

internos de la célula, como se muestra en las figura

acompañan es te recuadro .

Es ta arqui tectura in ter ior y la d inámica celu lar

como hemos enfat izado, caras de un mismo fenó

de autoproducción . As í , por e jemplo , hay dentro d

célu las organelos especial izados , como las mitocond

en cuyas paredes se ubican, en secuencias espaciales

cisas , enzimas que en la membrana de la mitocondr

compor tan como verdaderas cadenas t ranspor tadora

electrones , proceso que cons t i tuye la base de la

p iración celu lar .

Fig. 14.  Fotografía  tomada al microscopio  electrónico,

de un corte  de una  célula  de sanguijuela, que muestra

membranas y componentes intracelulares  (aumentada

aproximadamente  20.000  veces).  El diagrama destaca

lo s perfiles  principales, tales como membrana n uclear,

mitocondrias, retículo endoplasmático, ribosomas y

membrana celular.  En  la página del frente, se ha dibu

jado una proyección tridimensional hipotética de lo que

quedaría p or debajo  de la superficie  del corte.

Page 30: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 30/34

retículo

endoplasmát

Page 31: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 31/34

Sólo cuan do en la historia de la Tierra se dieron las condiciones para la formación de m

orgánicas como las proteínas, cuya flexibilidad y posibilidad de complicación es prácticamen t

tada, se dieron las circunstancias que hicieron posible la formación de unidades autopoiéti

hech o, pod em os supone r que, cuando en la historia de la Tierra se dieron todas las condicio n

cientes, la formación de los sistemas autopoiéticos ocurrió de manera inevitable.

Tal momento es el punto que se puede señalar como el origen de la vida. Lo que no quier

qu e fue sólo en un instante y en un solo lugar, ni que po dam os especificar una fecha para é

hace pensar que, una vez que las condiciones estaban dadas para el origen de sistemas vivos, é

originaron muchas veces; es decir, muchas unidades autopoiéticas, con muchas variantes estruc

surgieron en mu chos lugares de la Tier ra a lo largo quizás de mu chos m illones de años.

La aparición de unidades autopoiéticas sobre la superficie de la Tierr a marca un hito en la

ria de este sistema solar. Esto hay que entenderlo bien. La formación de una unidad determina

pre una serie de fenómenos asociados a las características que la definen, lo que nos permite de

cada clase de unidades especifica una

 fenomenología

 particula r. Así, las unida des a utopo iéticas e

can la

 fenomenología biológica

  como la fenomenología propia de ellas con características distin

fenomenología física. Esto es así no porque las unidades autopoiéticas violen ningún aspecto

fenomenología física —ya que al tener componentes moleculares deben satisfacer toda la le

física— sino porque los fenómenos que generan en su operar como unidades autopoiéticas de

de su organización y de cómo ésta se realiza, y no del carácter físico de sus componentes qu

determinan su espacio de existencia.

Por esto, si una célula interactúa con una molécula X incorporándola a sus procesos, lo que

a consecuencia de dicha interacción no está determinado por las propiedades de la molécula

en la manera cómo tal molécula es "vista" o tomada por la célula al incorporarla en su di

autopoiética. Los cambios que ocurran en ella a consecuencia de esa interacción van a ser a

determinados por su propia estructura como unidad celular. Por lo tanto, en la medida en que l

nización autopoiética determina la fenomenología biológica al realizar a los seres vivos como un

autónomas, será fenómeno biológico todo fenómeno que involucre la autopoiesis de al menos

vivo.

Page 32: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 32/34

plast ic idad es

Page 33: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 33/34

Page 34: El Árbol Del Conocimiento.  Maturana

7/16/2019 El Árbol Del Conocimiento. Maturana

http://slidepdf.com/reader/full/el-arbol-del-conocimiento-maturana 34/34

Historia: reproducción y herencia

III

En este capítulo hablaremos de reproducción y herencia. Hay dos razones que lo hacen necesario.

Una de ellas es que nosotros, como seres vivos —y, como veremos, también como seres sociales—,

tenemos una  historia: somos desc endientes p or repr oduc ción, no sólo de nuestros antepasados

humanos, sino de antepasados muy distintos que se extienden en el pasado hasta hace más de tres mil

millones de años. La otra es que, como organismos, somos seres multicelulares y todas nuestras célu

las son descendientes por reproducción de la célula particular que se formó al unirse un óvulo con

un e sperm io y nos dio origen. La reprod ucció n está, por lo tanto, metida en nuestra historia en

relación con nosotros como seres humanos y en relación con nuestros componentes celulares indi

viduales, lo que, curiosamente, hace de nosotros y nuestras células seres de la misma edad ancestral.

Más aún, desde un punto de vista histórico, lo anterior es válido para todos los seres vivos y todas las

células contemporáneas: compartimos la misma edad ancestral. Por esto, para comprender a los seres

vivos en todas sus dimensiones, y con ello comprendernos a nosotros mismos, se hace necesario

entender los mecanismos que hacen del ser vivo un ser histórico. Con este fin examinaremos primero

el fenómeno de reproducción.

Reproducc ión: ¿qué ocur re?

La biología ha estudiado el proceso de reproducción desde muchos puntos de vista, y en particu

lar a nivel celular. Allí ha mostrado desde hac e m uc ho ti em po q ue una célula puede dar origen a otra

mediante una división, y se habla de la división celular (o mitosis) como un complejo proceso de reor

den ació n de elem entos celulares que resulta en la dete rm inac ión de un plano de división. ¿Q ué ocu rre

en este proceso? En general, el fenómeno de reproducción consiste en que, a partir de una unidad, y

mediante a lgún proceso determinido, se or igina

  otra

  de la misma clase. Es decir: se origina otra unidad

que un observador puede reconocer como definida por la misma organización que la original.

Es evidente, pues, que para que haya reproducción tienen que darse dos condiciones básicas:

unidad original y el proceso que la reproduce.

F E N Ó M E N O S H I S T Ó R I C O S

Cada vez que en un s is tema un es tado su

m o mod if icac ión d e un es ta do previo, t

u n

 fenómeno

  histórico.


Recommended