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RESUMEN
Los errores en el proceso de administración de medica-
mentos (EPAM) corresponden a un 19% de los eventos
adversos asociados a la atención de salud de acuerdo al
reporte del Institute of Medicine. Su incidencia es mayor
en las unidades críticas, la que se estima en 1.75 EPAM
por paciente por día. Esto se debe a múltiples factores:
La condición de vulnerabilidad del paciente; la dinámica
propia de las unidades críticas y la complejidad de la
terapia farmacológica, entre otros. El mayor porcentaje de
los EPAM se produce en la etapa de administración, por lo
que el rol de enfermería en la prevención es fundamental.
Existen múltiples estrategias destinadas a la prevención,
con distintos niveles de complejidad, en términos de imple-
mentación. Es importante entonces conocer la forma en que
se han implementado estas estrategias y los desafíos que
se presentan en el proceso. El presente artículo tiene como
objetivo compartir nuestra experiencia, la que podría ser un
aporte en la búsqueda de un objetivo común: Brindar una
atención segura a los pacientes críticos.
Palabras clave: Cuidados intensivos, farmacología, seda-
ción, error en la administración de medicamentos, estra-
tegias de prevención.
IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIAS DE
PREVENCIÓN DE ERRORES EN EL PROCESO
DE ADMINISTRACIÓN DE MEDICAMENTOS:
UN ENFOQUE PARA ENFERMERÍA EN
CUIDADOS INTENSIVOS IMPLEMENTATION STRATEGIES ERROR PREVENTION IN THE DRUG ADMINISTRATION
PROCESS: AN APPROACH FOR INTENSIVE CARE NURSING
EU INÉS BARBAGELATA (1)
(1) Enfermera Universitaria, Especialista en Cuidados Intensivos. Servicio de Medicina Intensiva. Clínica Las Condes. Santiago, Chile.
Email: [email protected]
Artículo recibido: 09-08-2016Artículo aprobado para publicación: 05-09-2016
SUMMARY
Errors in medication administration process (EPAM)
correspond to 19% of those associated with health care
according to the Institute of Medicine report adverse events.
The incidence is higher in critical units, estimated at 1.75
EPAM per patient per day. This is due to several factors: The
vulnerability of the patient; The dynamics of critical units
and complexity of drug therapy among others. The highest
percentage of EPAM occur in the administering step, so
that the role of nursing in prevention is fundamental.
There are multiple strategies for prevention, with different
level of complexity, in terms of implementation. It is
therefore important to know how these strategies have been
implemented and the challenges that arise in the process.
This article aims to share our experience, which could be a
contribution in the search for a common goal: To provide
safe care to critically ill patients.
Key words: Intensive care, pharmacology, sedation, errors
in medication, prevention strategies.
INTRODUCCIÓN
En el año 1999, el reporte del Institute Of Medicine “To
Err Is Human: Building a Safer Health System” evidencia
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(5) 594-604]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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una realidad alarmante: La elevada mortalidad asociada a
errores médicos no intencionales. El reporte refiere que
se producen entre 44.000 a 98.000 muertes anuales,
con implicancias económicas estimadas entre $17 a $29
billones de dólares por año en hospitales norteamericanos
(1). Este reporte marcó un hito en la historia de los están-
dares de calidad en salud. Puso en evidencia la necesidad
de desarrollar una cultura de seguridad, que debía invo-
lucrar a organismos gubernamentales, proveedores de la
salud, industrias, empresas de tecnologías de la informa-
ción y a los consumidores en la generación y aplicación de
estrategias de prevención.
Dentro de los eventos adversos asociados a la atención de
salud, los errores en el proceso de administración de
medicamentos (EPAM) son los más frecuentes. De acuerdo
al National Coordinating Council for Medication Error Reporting
and Prevention (NCC MERP) se definen como: “Cualquier inci-
dente prevenible que pueda causar daño al paciente o de lugar
a una utilización inapropiada de los medicamentos, cuando
éstos están bajo el control de los profesionales sanitarios o del
paciente o consumidor”. Los EPAM representan un 19% del
total de eventos, provocando más de 7000 muertes anuales
en Estados Unidos (2, 3). Estudios posteriores estiman que
ocurre un EPAM por paciente por día en ese país (4).
Las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), tienen una
mayor incidencia de EPAM, los que además suelen ser más
graves que en otras unidades de hospitalización, presen-
tando un gran desafío en términos de seguridad (5,6).
Los EPAM pueden ocurrir en cualquier etapa del proceso,
desde la indicación del fármaco hasta la monitorización
de su efecto en el paciente. Las estrategias de mejora
continua de la calidad y seguridad, deben ir enfocadas a
evitar los principales riesgos en cada una de las etapas del
proceso (1,7,8). Sin embargo, es en la etapa de adminis-
tración donde se genera el mayor número de errores (9), lo
que involucra directamente al profesional de enfermería.
Las estrategias de prevención de EPAM en UCI son diversas
por los múltiples factores de riesgo que deben ser abor-
dados. Es importante conocer la forma en la que se han
implementado en la realidad local, las dificultades que se
presentan en el proceso y los desafíos pendientes.
En este artículo se presentan estrategias de prevención de
EPAM, que han sido implementadas en la UCI de Clínica Las
Condes, enfocadas principalmente a la etapa de adminis-
tración, donde el rol de enfermería intensiva cobra mayor
relevancia, en la búsqueda continua de una atención
segura y de calidad.
EPAM EN UNIDADES DE CUIDADOS INTENSIVOS
Los EPAM se estiman en un 78% del total de eventos
adversos en UCI, con 1.75 errores por paciente por día, los
que tienden a ser más graves y causar mayor daño que en
otras áreas de hospitalización (9,10). En nuestro país, no
existen estudios multicéntricos sobre el tema ni estadís-
ticas que muestren la realidad local de este tipo de eventos
adversos. Sin embargo, un estudio realizado en la unidad
de cuidados intensivos del Hospital Clínico de la Univer-
sidad de Chile, describe un 34% de EPAM por droga pres-
crita, lo que se correlaciona con los resultados de estudios
internacionales (11).
Las causas que pueden conducir a un EPAM en UCI son
múltiples:
El aporte que puede hacer el paciente en términos de
proporcionar una barrera frente a errores, se encuentra
parcial o totalmente anulado por sedación o alteración de
conciencia.
La dinámica propia de la UCI, con múltiples procedi-
mientos en forma simultánea; interrupciones frecuentes
y emergencias que requieren de acciones terapéuticas
inmediatas, dificultan una pausa de seguridad frente al
proceso de medicación.
La terapia farmacológica que requiere el paciente crítico es
especialmente compleja por diversos factores:
Polifarmacia: La terapia del paciente crítico incluye un
gran número de drogas, destinadas a tratar el cuadro
actual, estabilizar las comorbilidades previas y prevenir
eventos asociados a la condición crítica (úlceras por estrés;
trombosis venosa profunda, infección, entre otros.)
La farmacocinética en pacientes críticos se encuentra
frecuentemente alterada por disfunción hepática y/o
renal, cambios en la distribución de volumen, SIRS, y
problemas de absorción, entre otros.
La vía parenteral es la vía de elección en pacientes
críticos y con frecuencia las drogas se administran en
infusiones continuas lo que supone un riesgo aún mayor
(12).
Los tratamientos involucran el uso de drogas de alto
riesgo (vasoactivos, inótropos, antiarritmicos; sedantes;
bloqueadores neuromusculares, electrolitos anticoagu-
lantes, entre otros.), los que se administran en su mayoría
en microdosis por su alta potencia, requiriendo dilución,
ajuste de acuerdo al peso y/o un cálculo previo a la admi-
nistración.
[IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN DE ERRORES EN EL PROCESO DE ADMINISTRACIÓN DE MEDICAMENTOS... - EU Inés Barbagelata]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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Las indicaciones de dosis en múltiples unidades de medida
(Porcentaje; microgramos; ml.; gr.; miliequivalentes; unidades
internacionales o fracciones) aumentan el riesgo de error.
La administración correcta de antibióticos endove-
nosos: implica ciertos cuidados: La velocidad de la
infusión se asocia a reacción adversa a medicamento,
por lo que se debe monitorizar los tiempos de adminis-
tración. Dependiendo del objetivo terapéutico y el PK/PD,
varía la indicación (bolo, infusión lenta o Infusión prolon-
gada). En algunos casos se debe ajustar la dosis a niveles
plasmáticos o modificar el horario de acuerdo a la terapia
dialítica, esto puede conducir a error por variaciones
diarias de la dosis o el horario de un mismo fármaco.
El número de medicamentos que debe administrar
un/una enfermero/a por cada paciente a cargo en un
turno de 12 horas, es el doble que en otras unidades de
hospitalización y en cada administración existe un riesgo
potencial de error (9).
La combinación de estos factores de riesgo, aumenta la
incidencia de EPAM en pacientes que además, tienen menor
tolerancia a los errores debido a la vulnerabilidad que les
confiere su condición de gravedad. Es por esta razón que
la seguridad en el proceso de administración de medica-
mentos cobra vital importancia en las unidades críticas.
IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN
DE EPAM EN UCI
A continuación se presentan las estrategias de prevención
de EPAM implementadas en la UCI de Clínica Las Condes,
basadas en las recomendaciones internacionales de segu-
ridad, protocolos institucionales y en las mejoras conti-
nuas derivadas del aprendizaje de análisis causa-raíz. Se
presentan a su vez, los desafíos que se han observado en
la implementación y los proyectos de mejora continua
actualmente en desarrollo.
1. INCORPORACIÓN DE METAS INTERNACIONALES DE
SEGURIDAD DEL PACIENTE (MISP) JOINT COMISION INTERNATIONAL (J.C.I.)La primera acreditación institucional por JCI en el año
2007, determinó la adopción de las 6 MISP como pilares
de la cultura de seguridad. Las tres primeras metas involu-
cran importantes medidas de prevención de EPAM.
1.1 Identificar correctamente a los pacientes: El obje-
tivo de esta meta es el de prevenir el riesgo de errores
relacionados con el paciente incorrecto. El verificar dos
identificadores en el brazalete del paciente (nombre
completo y fecha de nacimiento) al momento de admi-
nistrar medicamentos es una medida de seguridad que
cobra aún mayor importancia en pacientes críticos, los que
con frecuencia se encuentran sedados o con alteración de
conciencia.
1.2 Mejorar la Comunicación Efectiva: Las indica-
ciones verbales son frecuentes en UCI y corresponden a
una importante fuente de error. El protocolo de órdenes
verbales define que frente a ellas el enfermero(a) debe
escuchar la orden médica; escribirla; leerla al médico y
corroborar que es correcta. Al registrar el medicamento
en la ficha electrónica, el enfermero(a) debe indicar que
corresponde a una orden verbal. Frente a cada registro
de este tipo, el sistema envía una notificación al médico
residente, quién debe ratificar en forma posterior la indi-
cación. Debido al riesgo que implican las indicaciones
verbales, se ha establecido que éstas deben ser restrin-
gidas a situaciones de emergencia o de excepción. Con el
objetivo de monitorizar el cumplimiento de esta medida,
el departamento de calidad audita la cantidad de indica-
ciones verbales asociadas a cada médico, esta informa-
ción es enviada periódicamente a los jefes de servicio para
su gestión. Además del riesgo, las indicaciones verbales
generan mayor carga laboral, por lo que se debe asegurar
un acceso expedito para la indicación escrita, favorecién-
dola siempre que sea posible.
1.3 Mejorar la Seguridad de los Medicamentos de Alto
Riesgo: La indicación de cargas de electrolitos es habitual
en UCI. Su administración sin dilución previa supone un
riesgo grave de error. Por esta razón, se ha definido que
el cloruro de potasio no puede ser despachado desde
farmacia en ampollas, estandarizándose su uso en forma
de, matraces de 1.5grs en un total de 50ml de suero fisio-
lógico. En el caso del NaCl 10% y el sulfato de magnesio,
debido a que en casos específicos, hipertensión intracra-
neal y arritmias respectivamente, debe administrarse en
bolo, sólo pueden ser despachados en ampolla con doble
receta (en ficha electrónica y prescripción en papel de
puño y letra del médico residente). Se despachan sólo a los
servicios críticos y cuentan con una etiqueta distintiva con
la leyenda “uso con precaución”.
Con el fin de dar a conocer las metas y los protocolos
asociados, se incorporaron las MISP como parte de las
capacitaciones en la inducción del personal. Al ingresar a
UCI, los protocolos se entregan contra firma de toma de
conocimiento y se realiza capacitación de los aspectos
específicos de aplicación de estos en la unidad. El cumpli-
miento de las metas se supervisa mensualmente infor-
mando los resultados al departamento de calidad.
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(5) 594-604]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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Frente a resultados bajo los estándares se deben presentar
un proyecto de mejora. Una de las mejoras continuas que
se ha trabajado en UCI es la comunicación permanente
de la importancia de la aplicación de las metas de segu-
ridad. Con este fin se dispusieron pantallas en las áreas
de descanso, en las que se presenta imágenes rotativas
con información relevante de la unidad, noticias positivas
(felicitaciones a expositores, jornadas, paseos y/o celebra-
ciones), proyectos y tareas por lograr. Junto a esta infor-
mación, se presenta una meta de seguridad por mes con
ejemplos de aplicación prácticos y su importancia en la
prevención de errores.
Las visitas ambientales que se realizan mensualmente en
forma local y trimestralmente en modalidad multidiscipli-
naria, evalúan el correcto almacenamiento de los medica-
mentos con enfoque a la prevención de EPAM. Mediante
una pauta se evalúan los siguientes ítems:
Medicamentos Termolábiles: Almacenados en refrige-
rador exclusivo para éste fin, el que se encuentra identifi-
cado con etiqueta distintiva (Figura 1). Se revisa el registro
cada 12 horas de la temperatura y el cumplimiento del
protocolo frente a lecturas fuera de rango. La insulina debe
ser de uso individual (se evita el uso de medicamentos
multidosis) debe tener fecha de apertura y estar identifi-
cada con la etiqueta del paciente.
Almacenamiento de Drogas de Alto Riesgo: Esta auto-
rizado en las áreas críticas un stock mínimo de medica-
mentos para emergencias, el que está estandarizado de
acuerdo a las necesidades de cada área, cualquier modi-
ficación debe ser autorizada por el comité de farmacia. En
la visita se verifica que cada droga se encuentre almace-
nada en contenedor único (Figura 2). Se verifica también la
ausencia de electrolitos concentrados.
FIGURA 1. REFRIGERADOR DE MEDICAMENTOS EXCLUSIVO
FIGURA 2. ALMACENAMIENTO INDIVIDUAL DE DROGAS
Carro de Paro: El carro de paro está estandarizado para
toda la institución. Contiene una bandeja de medicamentos
específicos para el manejo de emergencias, la que debe
encontrarse sellada. Se utiliza una etiqueta que describe
la droga con vencimiento más próximo en la bandeja, esta
información es revisada por farmacia, quién hace el cambio
de bandeja periódicamente en base a los vencimientos. El
carro se mantiene cerrado con candado plástico identifi-
cado con un número de serie. Cada 12 horas los enfer-
meros deben revisar la indemnidad del candado y registrar
en una planilla el número de serie. Esto asegura que frente
a emergencias, estén disponibles y vigentes todos los
medicamentos e insumos definidos para la atención. En la
visita se verifica el cumplimiento de este protocolo.
2. FICHA ELECTRÓNICA
La ventaja de los sistemas de registro electrónico en la
prevención de EPAM, al eliminar los errores de legibilidad
e interpretación de indicaciones ha sido ampliamente
demostrado (13-16). En nuestro centro la ficha elec-
trónica (Cerner) ha permitido estandarizar unidades de
medida, dosis y diluciones mediante sentencias predefi-
nidas de indicación. El software Millenium contiene alertas
sobre alergias, advertencias de interacciones de medica-
mentos, permiten realizar la conciliación de medicación
previa del paciente e incluir protocolos y/o indicaciones
por metas que simplifican los procesos. Para prevenir EPAM
esta herramienta debe ser administrada por un comité
multidisciplinario que actualice continuamente los set de
indicaciones, detecte errores y potenciales riesgos y los
corrija. La relación entre este comité y el comité de calidad
es estrecha y frente a EPAM se analizan posibles barreras
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protectoras que el sistema electrónico pudiese incor-
porar. Los protocolos de medicación deben ser trabajados
en conjunto para asegurar su correcta implementación,
registro y vigilancia.
3. INCORPORACIÓN DEL QUÍMICO FARMACÉUTICO A LA UCI
Las ventajas de contar con un Químico Farmacéutico (QF)
clínico en las áreas críticas para la prevención de EPAM,
ha sido evidenciado en diversos estudios (17,19). Nuestro
centro fue pionero en la integración de un QF al equipo
de UCI. Si bien su rol está enfocado principalmente al
apoyo en la labor médica, el trabajo conjunto entre el
QF y enfermería es beneficioso y favorece el aprendizaje
mutuo. Al incorporarse a un área crítica, el QF debe fami-
liarizarse con los diferentes dispositivos utilizados para
la administración de medicamentos (catéteres, tubos
o sondas), conocer los horarios de administración de
acuerdo a los procedimientos, incorporar al análisis las
distintas terapias dialíticas o el uso de sistemas de asis-
tencia extracorpórea.
En la etapa de administración de medicamentos, su
incorporación ha permitido optimizar la terapia farmaco-
lógica, al adecuar la vía de administración a las necesi-
dades del paciente, facilitar la administración de nuevos
medicamentos; establecer la estabilidad de una infusión,
determinar la compatibilidad en las líneas de medica-
ción, definir el mejor horario de administración frente a
la diálisis o ajustar la concentración de un medicamento
en pacientes con restricción de volumen.
4. EQUIPO MULTIDISCIPLINARIO
La evaluación diaria de los pacientes por un equipo multi-
disciplinario permite abarcar todos los aspectos relacio-
nados con la terapia farmacológica. Con el aporte de cada
profesional y toda la información en línea, se puede evaluar
la respuesta del paciente a la terapia y los problemas que
se han presentado en la administración de la medicación.
El uso de set de cuidados que contienen las metas diarias,
recuerdan las terapias de prevención de TVP o úlceras por
estrés. Se evalúan los exámenes para ajustar la terapia a
las necesidades específicas de cada paciente (pruebas de
función hepática y renal, triglicéridos, plaquetas, niveles
plasmáticos de drogas o CIM de microrganismos). Es reco-
mendable en las áreas que no cuentan con ficha elec-
trónica, la implementación de un check list que permita
asegurar el análisis de todas estas variables.
5. PRESENCIA DE LA ENFERMERA EN LA VISITA DE LOS
PACIENTES
Es frecuente que la enfermera que tiene a cargo dos
pacientes en UCI, deba estar en procedimientos, adminis-
trando medicamentos o en exámenes fuera de la unidad
con el paciente A, cuando se realiza la visita del paciente B.
Por lo tanto, es importante incentivar y recordar frecuente-
mente la relevancia que tiene la presencia de la enfermera
tratante en cada visita, debido a la importante informa-
ción que puede proporcionar al momento de tomar deci-
siones (necesidad de SNG ó SNY, tolerancia a los opioides,
retención gástrica, titulación de drogas, manejo del dolor,
nivel de sedación, presencia de delirio, condición de los
accesos, signos o síntomas de infección, entre otros). La
enfermera debe coordinar sus actividades con el horario
de la visita, se debe considerar su relevo y/o adecuar en lo
posible el horario de la visita a las actividades previamente
programadas.
6. PROGRAMA DE SEGURIDAD
El programa de prevención de EPAM debe ser de carácter
no punitivo. El departamento de calidad debe actualizar
en forma continua las medidas de prevención y comuni-
carlas.
Para fomentar el reporte, los medios de registro deben
ser sencillos y fáciles de completar (formulario específico
en Excel por ejemplo), pero a su vez contener la informa-
ción necesaria para el análisis, tales como:
¿Por qué ocurrió?
¿Qué podría haber hecho para evitarlo?
¿Hay otro paciente en la unidad en riesgo de sufrir el
mismo evento?
¿A quién se comunicó el error?
¿Cuáles fueron las medidas que se realizaron para
mitigarlo?
En el análisis que debe realizar la jefatura, es importante
considerar carga laboral del profesional, horario en que
ocurre, tipo de indicación (verbal, escrita; por protocolo
o no indicado), años de antigüedad del profesional, entre
otros.
Recientemente se ha incorporado un software que permite
en forma anónima reportar un evento desde cualquier PC
de las unidades, el error es comunicado vía mail a las jefa-
turas del área y al departamento de calidad. Este sistema
permite hacer un análisis grafico de los eventos, deter-
minar tasas y realizar el análisis causa raíz. Promete ser
una herramienta que conducirá a una mejor gestión de los
procesos.
La detección de un Near Miss o evento que se detecta
antes de llegar al paciente, como por ejemplo detección
de errores de despacho desde farmacia, debe ser recono-
cido, socializado y fomentado. Sería importante analizar
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(5) 594-604]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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el proceso que se aplicó para evitar el error y considerar
incorporarlo a las rutinas, si no se encuentra en los proto-
colos de prevención.
Una estrategia de prevención de EPAM muy importante
y conocida por los enfermeras (os) desde pregrado, es la
aplicación de los 5 correctos:
1. Paciente
2. Medicamento
3. Vía
4. Dosis
5. Horario
A esta medidas se agrega un sexto ítem que corresponde a
la verificación de alergias. Estas medidas pueden evitar
gran parte de los errores en la etapa de administración y
sin embargo no siempre se aplican. Es importante incor-
porarlos dentro de la supervisión del correcto proceso de
administración de medicamentos, con el fin de recordar
continuamente su importancia.
7. ENFERMERA DOCENTE EN UCI
El rol de la enfermera docente (exclusiva para la unidad), es
fundamental en la mantención activa de un programa de
capacitación continua y el fomento de una cultura de segu-
ridad. Las necesidades de capacitación de los profesionales
de intensivo son variadas y extensas e inciden en forma
directa en la calidad y seguridad en la atención. Uno de los
principales roles de este profesional es la capacitación enfo-
cada a la formación de profesionales con una sólida base de
conocimientos que permitan brindar una atención segura,
en la que la prevención de eventos adversos es uno de los
contenidos más importantes. El cargo fue aprobado como
parte de una mejora en el año 2013, inicialmente como
proyecto piloto en UCI, para luego extenderse al resto de
las unidades, debido a los excelentes resultados en relación
al cumplimiento de los estándares de capacitación, dismi-
nuyendo el tiempo de formación del personal en el manejo
de terapias de alta complejidad, con una modalidad de
mentoría. Mientras se justifica el cargo para el presupuesto
de personal, se puede avanzar formando expertos en cada
turno sobre temas de prevención de eventos adversos, los
que deben participar en los análisis causa raíz de la unidad,
socializar a través de ellos los EPAM (el error, no los involu-
crados) y las medidas que lo hubiesen evitado. Deben parti-
cipar también en las mejoras a proponer.
8. CAPACITACIÓN EN FARMACOLOGÍA CRÍTICA Y
PREVENCIÓN DE EPAM
El programa de capacitación de UCI para enfermería
contiene un módulo de farmacología crítica cuyo objetivo es
entregar los contenidos necesarios para el manejo correcto
de drogas de alto riesgo (Farmacocinética y farmacodinamia
en pacientes críticos; principales drogas; efectos adversos
a monitorizar; talleres de cálculo de dosis, entre otros). Se
incorpora a este módulo, información sobre las tasas locales
de EPAM, los principales eventos ocurridos en la unidad, el
análisis de causalidad y las estrategias que se han imple-
mentado para evitarlos. Estos contenidos permiten crear
conciencia de la importancia del reporte y de la adherencia
a los protocolos de seguridad en la administración de medi-
camentos.
En nuestra experiencia, la capacitación continua en esta
materia es aún un desafío. Luego de cursar el módulo
por primera vez, la enfermera debe mantener sus cono-
cimientos actualizados mediante sistemas dinámicos
de aprendizaje, que le permitan adoptar una actitud de
seguridad, detectar errores o near miss y prevenir eventos
adversos. La implementación de sistemas de aprendizaje
por simulación, análisis de casos o aprendizaje basado en
problemas (ABP) podrían tener un espacio en este tema.
9. ESTANDARIZACIÓN DE DILUCIONES
Los EPAM relacionados con las infusiones de drogas, se
pueden presentar por error en el cálculo de la velocidad
de infusión, al seleccionar el fármaco, al ingresar el peso del
paciente, la dosis, la concentración o el volumen de dilu-
ción en la bomba de infusión continua (BIC). Una forma de
evitar estos errores, es mediante la estandarización del uso
de drogas de alto riesgo (20). Con este fin se confeccionó
una tabla que contiene las principales drogas de alto riesgo
utilizadas en UCI, con la fórmula de cálculo, presentación,
diluyente y se estableció un máximo de dos concentraciones
para cada droga (Figura 3). Esta tabla se mantiene en el área
de preparación de medicamentos y en la ficha electrónica
sólo se permite indicar la droga con la dilución estándar.
10. DOBLE CHEQUEO
El doble chequeo es recomendado en diversos artículos,
previo a la administración de drogas y en forma especial
en las administradas por BIC (20,21). Sin embargo, no hay
consenso en la forma en que se debe realizar el procedi-
miento. Las alternativas pueden ser:
Chequeo Independiente: Dos enfermeras en forma sepa-
rada calculan la droga y comparan resultados.
Chequeo en conjunto: Revisión simultanea verbal.
Visual: Una enfermera observa el cálculo de la otra.
Hacer y mostrar: La primera enfermera muestra el resul-
tado del cálculo a una segunda enfermera, quien chequea
si este es correcto.
[IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN DE ERRORES EN EL PROCESO DE ADMINISTRACIÓN DE MEDICAMENTOS... - EU Inés Barbagelata]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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Entre otras variantes del proceso. La falta de definición
sobre cómo realizar el procedimiento genera confusión en
las enfermeras y baja adherencia al protocolo.
Entre las causas de baja adherencia se describen: El tiempo
empleado en buscar a una compañera para realizar el
chequeo, las interrupciones frente a la solicitud, el tiempo
invertido en el procedimiento en sí y la necesidad de auto-
nomía en el trabajo (23-25). El factor común en los análisis
causa-raíz de los EPAM relacionados con drogas en BIC,
es que no se realiza el doble chequeo. Es muy importante
entonces diseñar un proceso sencillo y seguro de chequeo,
definir quién puede chequear y asegurar que al momento
de requerir el procedimiento, exista una persona dispo-
nible para la tarea y esto no genere una carga adicional
para ambas. Se debe supervisar el cumplimiento y deter-
minar las causas de omisión para trabajar en mejoras al
proceso que permitan definir la mejor forma de realizar
el doble chequeo. Las BIC con software diseñados para la
prevención de errores podrían ser parte de la solución.
FIGURA 3. ESTÁNDAR DE DROGAS DE ALTO RIESGO
American Society of Health System Pharmacists, 2007. Trissel handbook on Injectable drugs. 14th ed.Cooper, BE. 2008. Review and update on onotropes and vasopressors. AACN Advanced Critical Care. 19(1): 5-15MIMS Online. 2011. CIAP; NSW Health department. Accessed January 2011 http://www.mims.hnc.net.au/Micromedex 1.0 Healthcare series. 2011
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(5) 594-604]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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11. OPORTUNIDAD DE ACCESO A LA INFORMACIÓN
Se recomienda que las guías, protocolos y la norma
de administración de medicamentos se encuentren
disponibles en un sistema centralizado que permita
mantener siempre la versión actualizada al momento de
consultar (Por ejemplo en Intranet en los PC de todas
las unidades). Sin embargo, debido a la dinámica de
trabajo de la UCI, es muy importante además contar con
material de consulta rápida frente a dudas. Con este fin,
se diseñaron fichas termolaminadas con las principales
drogas, que contienen una breve descripción, el rango
terapéutico, la fórmula a utilizar en el cálculo, las dilu-
ciones estándar, compatibilidades y los efectos adversos
que deben ser monitorizados (Figura 4). Estas fichas se
mantienen en el área de preparación de medicamentos
para consultas al preparar o administrar un medica-
mento.
Otra estrategia que puede contribuir a disminuir los
EPAM es la oportunidad de revisar la indicación médica
al momento de preparar los medicamentos para evitar
errores por cambios en la indicación luego de haber sido
revisada por la enfermera o errores de comunicación en
el equipo. Con este fin, en el área de administración de
medicamentos se aprobó la instalación de una pantalla
táctil que permite revisar las indicaciones del paciente en
línea con la ficha electrónica, facilitando el acceso a la
información.
12. ALERTAS VISUALES
Se recomienda diferenciar en lo posible los medicamentos
de alto riesgo con etiquetas especialmente diseñadas para
este fin (27,28).
Para diferenciar las vías de administración y prevenir EPAM
relacionados, se diseñaron etiquetas de color para cada vía
(Verde:EV; Roja:VO; Amarillo:SC y Blanco para vía aérea).
(Figura 5)
FIGURA 5. ETIQUETAS DIFERENCIADORAS DE VÍA DE
ADMINISTRACIÓN POR COLOR
Brazaletes de advertencia: Se definió el uso de brazalete
rojo para los pacientes con alergia a algún medicamento;
Morado para alergias a alimentos y verde para indica-
ción de no puncionar la extremidad (en caso de fístulas ó
mastectomías por ejemplo).
Los medicamentos de alto riesgo se identifican con un
sticker de color rojo con la leyenda “Uso con precaución” y
los medicamentos termolábiles con una etiqueta amarilla
con la leyenda “Producto Refrigerado”. En algunos casos se
requieren ambas (Figura 6)
[IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN DE ERRORES EN EL PROCESO DE ADMINISTRACIÓN DE MEDICAMENTOS... - EU Inés Barbagelata]
FIGURA 4. FICHA DE ACCESO FÁCIL PARA MEDICAMENTOS DE ALTO RIESGOS
Droga AcciónRango
TerapéuticoDilución Estándar
Reacciones Adversas
Fentanilo
OpioideDepresor SNCAnalgésicoSedante
0,5 - 4mcg/kg/hr
2000 mcg / 100 ml5000 mcg / 250 ml
HipotensiónBradicardiaConstipación e íleo paralíticoMiosisDependencia al uso prolongado o
dosis elevadas
Solventes Compatibles
Comentarios
AMP 500 mcg/20 ml
SF 0,9%SG 5%
Antídoto: Naloxona (amp. 400 mcg/1 ml)Administrar media ampolla cada 5 minSIM
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Los medicamentos de alto riesgo que se administran en
infusión continua, se identifican con una etiqueta de borde
rojo, que contiene un espacio para la firma de la enfermera
que inicia la infusión y otro espacio para la enfermera que
chequea que la programación sea correcta (Figura 7). Esta
mejora fue propuesta por las enfermeras en una lluvia de
ideas de mejora continua frente a EPAM.
Se recomienda supervisar dentro del programa de calidad,
el cumplimiento de estas medidas y recordar continua-
mente la importancia de ellas.
13. BOMBA DE INFUSIÓN CONTINUA (BIC) “INTELIGENTES”
Existen en el mercado diversas BIC con software que
prometen reducir los EPAM en forma significativa. La
incorporación de una farmacoteca que contenga las
diluciones estándar de drogas de alto riesgo y permita
la fijación de límites blandos (alerta cuando la dosis
programada está en el límite del rango terapéutico) y
límites duros (no permiten la programación de dosis
definidas como tóxicas), son el primer paso para evitar
errores de programación. En nuestra unidad se reali-
zará un estudio piloto con una farmacoteca diseñada de
acuerdo a nuestros estándares, que permitirá medir la
eficacia de esta herramienta. Se recomienda diferenciar
las BIC enterales de las parenterales y utilizar BIC exclu-
sivas para la administración de nutriciones parenterales.
14. CÓDIGOS DE BARRA
La administración de medicamentos con chequeo elec-
trónico por código de barra ha demostrado ser seguros y
eficientes (29). Una de las aplicación de la ficha electró-
nica es el sistema de administración de medicamentos con
código de barra POCMAR®. Este sistema se compone de
una pantalla táctil en la que se selecciona el paciente y
la indicación, se genera la impresión de una etiqueta con
código de barra que contiene la información de los cinco
correctos (paciente, medicamentos, dosis, vía, horario). Un
dispositivo portátil permite escanear la etiqueta y el braza-
lete del paciente para hacer el doble chequeo electrónico. Al
administrar el medicamento y dar el visto bueno, se registra
automáticamente la administración en la ficha electrónica.
Este es un sistema de chequeo ideal, sin embargo, está
diseñado para medicamentos vía oral, lo que limita su uso
en intensivo. El desarrollo de este tipo de soluciones para
infusiones continuas y medicamentos endovenosos podrían
disminuir significativamente los EPAM.
CONCLUSIÓN
La prevención de EPAM en la UCI es una tarea compleja
debido a los múltiples factores de riesgo asociados a
la atención del paciente crítico. Debido a que el mayor
porcentaje de los errores, se producen en la etapa de
administración, es probable que una de las estrategias más
importantes a implementar sea la capacitación continua
de los/las enfermeros/as de intensivo, con el fin de lograr
en ellos la integración de una cultura de seguridad. Esta
capacitación debe incluir los factores de riesgos asociados
al proceso de administración de medicamentos en inten-
sivo y las medidas disponibles para evitarlos.
Si bien los avances tecnológicos en términos de prevención
prometen disminuir significativamente los riesgos, su costo
FIGURA 6. ALERTAS VISUALES PARA DROGAS DE ALTO
RIESGO Y TERMOLÁBILES
FIGURA 7. ETIQUETA DIFERENCIADA PARA
MEDICAMENTOS DE ALTO RIESGO
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(5) 594-604]Documento descargado de http://www.elsevier.es el 18-10-2016
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de adquisición y mantención es elevado. Se debe tener
presente que técnicas ampliamente conocidas, como la apli-
cación de los 6 correctos y la participación activa en la visita
multidisciplinaria por parte de Enfermería podrían disminuir
en gran parte los errores en la etapa de administración. Se
debe fomentar su aplicación y supervisar el cumplimiento.
La implementación de estrategias de prevención, que
basadas en la evidencia, han demostrado ser eficaces en la
disminución de EPAM deben ser consideradas y adoptadas
de acuerdo a la realidad de cada centro. Sin embargo, es
importante conocer formas de implementación y los desa-
fíos que se han presentado en el proceso.
Compartir las estrategias de prevención de EPAM que se
han adoptado en nuestro centro, ha tenido como finalidad,
aportar en parte a la difícil tarea a la que nos vemos enfren-
tados a diario, reducir los riesgos asociados a la atención
en salud, para brindar una atención cada vez más segura
en beneficio de nuestros pacientes.
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