Documentos Artesanía Manuel Chaves Los programas de emprendedores rurales de Andalucía Antonio González Cabrera El futuro de las políticas de desarrollo rural María del Mar Delgado Luces y sombras de una década de desarrollo rural en Andalucía 10 Revista de Desarrollo Rural. Otoño 2002 Los Grupos de Desarrollo Rural andaluces firman los convenios de Leader Plus y Proder-A Entrevista Vicente Forteza del Rey Director General de Desarrollo Rural del ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación Comarca de Guadix Red ProRural El desarrollo rural en Chile tierra sur Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía
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DocumentosArtesanía
Manuel ChavesLos programas de emprendedores rurales de Andalucía
Antonio González CabreraEl futuro de las políticas de desarrollo rural
María del Mar DelgadoLuces y sombras de una década de desarrollo rural en Andalucía
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Los Grupos de DesarrolloRural andaluces firman losconvenios de Leader Plus yProder-A
EntrevistaVicente Forteza del ReyDirector General de DesarrolloRural del ministerio deAgricultura, Pesca yAlimentación
Comarca de Guadix
Red ProRuralEl desarrollo rural en Chile
tierra sur
Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía
www.andaluciarural.org es la web de la Asociación para el Desarrollo Rural de Andalu-
cía (ARA). www.aratierrasur.com es la web de la revista aratierrasur, editada por ARA.
Financiadas por la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía.
andaluciarural.org
aratierrasur.com
Desarrollo rural
de Andalucía
infórmate
infórmanos
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decía un ejecutivo norteamericano muy conocido, hoy en horas bajas,
que para crear empresas no hace falta dinero. Según él lo más importante es la energía, las ganas y
el empuje que se tengan para sacarlas adelante. Este tipo de afirmaciones, sobre todo en boca de
personas que han tenido mucho dinero a su disposición, no resultan del todo convincentes, pero sí
parece verdad que siendo importante, el dinero no lo es todo, y puede que ni siquiera sea lo más
importante. Si alguien se da una vuelta hoy por diferentes zonas de la Andalucía rural, oirá a más de
uno contar no sé qué de un proyecto empresarial que tiene entre manos. Siempre ha habido gente
con espíritu emprendedor, en la ciudad y en el campo, pero ahora, sin la menor duda, es mucho más
frecuente encontrarla en el medio rural que antes.
Aunque muchos pequeños pueblos aún sigan perdiendo actividad, y población, en el conjunto
de una comarca, incluso en las más deprimidas o con peores perspectivas, mucha gente piensa en las
posibilidades que se le ofrecen de crear una empresa. Una empresa de diseño de páginas web, por
ejemplo. Numerosas actividades que antes eran impensables no ya fuera de una ciudad, sino fuera
de Madrid o Barcelona, van surgiendo en el medio rural con mejor o peor fortuna. Jóvenes que han
ido a estudiar la carrera fuera, vuelven para tratar de aplicar en una pequeña empresa propia aque-
llo que han aprendido . Y no se trata de un fenómeno pasajero.
Llevan razón quienes dicen que aunque solo fuera por eso, por haber contribuido a estimular la
iniciativa y difundir ideas, los programas Leader y Proder ya habrían resultado muy beneficiosos. En
el nuevo y largo periodo que se inicia ahora, con la firma de los convenios que permite a los Gru-
pos de Desarrollo Rural empezar a gestionar los fondos de los programas, va a resultar fundamen-
tal que estas iniciativas empresariales, de jóvenes o de mayores, encuentren apoyos de todo tipo.
Esa es la labor que tienen los Grupos por delante.
E D I T O R I A L
Una oportunidad para las ideas
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N O T I C I A S
Los Grupos de Desarrollo Rural andalucesya pueden empezar a desarrollar los progra-mas Leader Plus y Proder, tras firmar en Se-villa el pasado 3 de octubre, en un acto pre-sidido por Manuel Chaves, los convenios decolaboración con la Junta de Andalucía. Losprogramas de Desarrollo Rural Proder y Lea-der Plus, que contarán con una financiaciónpública de 342,13 millones de euros, aporta-dos por las administraciones Comunitaria,Central y Autonómica, tienen como benefi-ciarios a 693 municipios andaluces (90% delterritorio de la región) y a una población demás de tres millones de personas. Se esperaque generen una inversión total de 1.026,3millones de euros hasta 2006.
El programa Proder contará con 212,3millones de euros, financiados con fondoscomunitarios (70%), Junta de Andalucía(21%) y Gobierno central (9%). Las ayu-das tendrán como principal objetivo apo-yar proyectos que contribuyan a vertebrarlas sociedades rurales mediante la diversifi-cación de sus estructuras productivas, lapromoción de un crecimiento socioeconó-mico equilibrado y el incremento de losniveles de renta y empleo. Para acceder a lagestión de estas ayudas, los grupos de de-sarrollo rural debían representar a comarcasde al menos 10.000 habitantes.
La iniciativa Leader Plus supondrá unainversión pública de 129,7 millones de eu-ros, el 67% procedentes de fondos europeosy el resto aportado por las administracio-nes Nacional, Autonómica y Local. Estosrecursos se destinarán a estrategias de fo-mento de las nuevas tecnologías, incorpora-ción de las mujeres y los jóvenes al desa-rrollo rural, mejora de la capacidad de orga-nización, apoyo a las pequeñas empresas
agrarias, valorización de los productos loca-les y aprovechamiento de las posibilidadesculturales y medioambientales de cada terri-torio. Su ámbito de aplicación es todo el te-rritorio rural andaluz, salvo los municipiosde más de 50.000 ha. y las áreas turísticas.
Grupos seleccionados
En total se han elegido 50 Grupos de Desa-rrollo Rural para gestionar los fondos delPRODER de Andalucía, de los cuales 22gestionarán también los del Programa Re-gional LEADER Plus de Andalucía. La se-lección de estos grupos la ha realizado uncomité formado por la Consejería de Agri-cultura y Pesca; el Ministerio de Agricultura,Pesca y Alimentación; la Federación Anda-luza de Municipios y Provincias (FAMP); laAsociación Rural de Andalucía (ARA); lossindicatos UGT y CCOO, y la Confedera-ción de Empresarios de Andalucía (CEA).
Nueva regulación
La nueva regulación incorpora la posibi-lidad de que los dos programas funcio-nen de forma complementaria en el mar-co de una estrategia integral, a diferenciade lo que ocurre en el resto de España yde la Unión Europea. De este modo, par-te de los grupos de desarrollo rural queestén acogidos al Proder de Andalucíapodrán complementar su actividad in-corporándose también al Leader Plus enla estrategia de cooperación. Otra nove-dad destacada es que los grupos podrántrabajar en red a través de fórmulas decooperación.
En este nuevo periodo, se ha dado unpaso más en cuanto a cooperación y se hancreado los denominados Grupos de Coo-peración, que son estructuras estables, di-señadas y orientadas hacia la promociónde actuaciones de cooperación. En Anda-lucía se han constituido siete Grupos deCooperación, en los que participan los 50grupos de desarrollo rural andaluces. Estosgrupos están abiertos a colaborar con otrosgrupos andaluces, españoles, comunitarios,o de terceros países. A través de ellos se fi-nancian actuaciones que pueden repercutiry ser aprovechadas por los emprendedo-res rurales de Andalucía.
Los Grupos de Desarrollo Ruralfirman los convenios de Prodery Leader Plus
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10S U M A R I O
Edita ARA(Asociación para el DesarrolloRural de Andalucía)Edificio EuroceiAutovía Sevilla-Coria del Río km. 3,541920-San Juan de Azanalfarache (Sevilla)Tel. 954 179 2 10Fax 954 179 2 18Apartado de correos [email protected]
Con la colaboración y financiación Consejería de Agricultura y PescaJunta de AndalucíaC/ Tabladilla s/n41071 SevillaTel. 955 032 000www.cap.junta-andalucia.es
PresidentaAlicia Agudo Pérez
VicepresidentesJosé Ángel Cifuentes LozanoJuan García Baena
SecretarioJosé Lancha Aranda
TesoreroRafael Moreno Segura
VocalesMiguel de Haro GonzálezJosé Manuel Alonso MartínezJosé Luis Sánchez TeruelJuan Nieto SánchezLuis Romero AcedoLuis Moreno CastroManuel Leyva JiménezJuan Manuel Fernández SerranoFélix Soto PérezJuan Coronel MartínFrancisco Oliva Marín
DirectorJosé María Sánchez-Robles
EdiciónEdinexus Multimedia
DiseñoÍndigo
PortadaAlfarero de Ronda (Málaga)Fotografía de Jane Munro
Impreso en España
Depósito legalD.L.M. 979-98
OPINIÓN
6 Manuel Chaves Los programas de emprendedoresrurales de Andalucía
8 Antonio González CabreraEl futuro de las políticas dedesarrollo rural
10 María del Mar Delgado1991-2000: Luces y sombras deuna década de desarrollo rural enAndalucía
14 ENTREVISTAVicente Forteza del Rey Director General de DesarrolloRural del ministerio de Agricultura,Pesca y Alimentación
DOCUMENTOSArtesanía
18 La artesanía rural y sus razonesFrancisco Luque-Romero AlbornozJosé Cobos Ruiz de Adana
22 Artesanía y empleoJosé María Casado Raigón
24 Aprendices en talleres artesanalesAlicia Domínguez Núñez
Fe de erroresEn la entrevista publicada en el nº 9 de ‘ARA
Tierra Sur’ con el presidente de la REDR, Anto-
nio González Cabrera, donde decía: ‘...los ge-
rentes del IDC se están formando de forma gra-
tuita en el master que ha pagado el Ministe-
rio...’, debía decir: ‘...a los gerentes del IDC los
ha becado el Ministerio...’. Por otra parte, el ar-
tículo sobre ‘La aceituna aloreña’, publicado en
ese mismo número, lo escribió Margarita Jimé-
nez Gómez, técnico en Agroalimentación del
G.D.R. Valle del Guadalhorce.
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pLos representantes de los Grupos de Desa-rrollo Rural, del Ministerio y de la Junta deAndalucía acaban de suscribir los Conve-nios de Colaboración para la puesta enmarcha de las Iniciativas PRODER y LEA-DER PLUS, del Programa de EMPRENDE-DORES RURALES ANDALUCES, corres-pondientes al periodo 2000-2006. Quiero,ante todo, expresar mi reconocimiento atodos los que han hecho posible un acuer-do de tanta importancia para nuestra Co-munidad y, de manera especial, deseo tras-ladar mi más cordial felicitación a quieneshabitan en el espacio rural andaluz en suconjunto, por la trascendencia que tiene eldocumento firmado para impulsar el pro-greso, el bienestar y la calidad de vida ennumerosos pueblos y comarcas andaluzas.
Ponderar en su justa medida las conse-cuencias del acto que hoy nos convocaobliga a hacer una valoración retrospectivade la incidencia que este tipo de Programashan supuesto para la transformación de unentorno que parecía abocado a la pérdidade población por falta de perspectivas defuturo, por el envejecimiento de sus habi-tantes y, en definitiva, por unas condicio-nes de vida muy alejadas de los indicadoresque definen a una sociedad moderna y de-sarrollada.
Las iniciativas adoptadas por el Gobier-no Andaluz en la década de los ochenta y,de manera especial, el impulso que han su-puesto las iniciativas europeas para el sec-tor, han permitido que el medio rural denuestra Comunidad haya experimentadoun cambio inimaginable hace algo más de10 años. Esta transformación se evidenciaen elementos cuantitativos, como son el
aumento de la riqueza y del empleo, lacreación de equipamientos e infraestruc-turas, la consolidación demográfica o elincremento de las cotas de bienestar, entreotros ejemplos que podrían citarse.
Creo, sin embargo, que hay aspectoscualitativos tan esenciales como los ante-riores. Me refiero al marco participativoen el que se han producido tales cambios,al espíritu emprendedor generado y a laincorporación decisiva de determinadossegmentos sociales, como las mujeres y losjóvenes.
Conviene subrayar que estamos anteunos programas de amplia repercusión,tanto en lo geográfico como en lo econó-mico y social, que superan límites e intere-ses sectoriales, que nos comprometen a to-dos y, por tanto, todos debemos sentirnoscorresponsables de la aplicación de unaspropuestas que vienen a ofrecer solucio-nes eficaces a las demandas del entorno alque van dirigida.
Con una perspectiva temporal que al-canza hasta el año 2006, medio centenarde Grupos de Desarrollo que cubren el90% del territorio andaluz, casi 700 muni-cipios (693) donde habitan más de 3 mi-llones de personas, van a tener a su dispo-sición una potente herramienta que debepermitir consolidar los logros obtenidos yabrir nuevas vías de progreso. La inversiónglobal prevista que movilizarán los 342 mi-llones de euros públicos para financiar losproyectos de los emprendedores ruralesandaluces se incrementa en un 126% conrespecto al periodo anterior (94-99), pa-sando de 454 millones de euros a 1.026millones de euros. Este volumen de recur-
sos financieros debe permitir alcanzargrandes e importantes objetivos. Para elloes imprescindible la colaboración de la ini-ciativa privada y de las AdministracionesPúblicas. En este espíritu de colaboracióninterinstitucional, la Junta de Andalucía haasumido la financiación que corresponderíaaportar a las Entidades Locales de nuestraComunidad.
El medio rural andaluz se encuentra, portanto, ante una magnífica oportunidad deprofundizar y ampliar sus horizontes.Cuenta con los apoyos institucionales, fi-nancieros y sobre todo con los recursoshumanos necesarios para planificar a medioy largo plazo las estrategias más adecua-das a sus necesidades y expectativas.
Dispone, asimismo, de una valiosa ex-periencia acumulada durante los últimosaños, que ha producido excelentes resul-tados. Y sobre todo, disponemos del activoesencial para fortalecer e intensificar la di-námica seguida hasta ahora: el capital hu-mano. Los hombres y mujeres que vivenen el medio rural andaluz están alcanzandoun grado de formación que revalida y con-creta en todos los ámbitos de nuestra Co-munidad la gran apuesta educativa que vie-nen realizando las instituciones públicas yla sociedad andaluza.
El espíritu emprendedor y la capacidadde iniciativa, junto con la introducción demodernos sistemas de gestión, la solidezde los proyectos empresariales y el conti-nuo afán innovador, son hoy elementos ca-da vez más arraigados y asociados a un en-torno que, hasta hace bien poco, tenía enla agricultura tradicional su principal y casiúnico medio de subsistencia, mientras que
PRODER y LEADER PLUS
Los programas de emprendedores rurales
de AndalucíaManuel Chaves
Presidente de la Junta de Andalucía
odríamos decir que
el medio rural andaluz
pasa a ser un buen
exponente de
prosperidad y calidad de
vida, en un contexto en el
que crecen la cohesión, la
solidaridad y la igualdad
de oportunidades
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hen la actualidad ofrece una variada gama deproductos y servicios de calidad.
A estos parámetros de desarrollo eco-nómico deben añadirse una serie de con-quistas en el terreno social de gran valor. Elprotagonismo de la mujer no ha parado decrecer en los últimos años, al tiempo que seiba produciendo también una mayor in-corporación de jóvenes a las actividadeseconómicas. Si tuviéramos que definirlo enpocas palabras, podríamos decir que el me-dio rural andaluz pasa a ser un buen expo-nente de prosperidad y calidad de vida, enun contexto socio-político en el que crecenla cohesión, la solidaridad y la igualdad deoportunidades.
Sobre tales premisas tenemos que se-guir dando pasos hacia delante. Los anda-luces hemos demostrado, durante estos 20años de autogobierno, que podemos supe-rar grandes desafíos si contamos con losrecursos necesarios y con un proyecto quemovilice e ilusione al conjunto de la so-ciedad. La globalización económica, la re-volución tecnológica y la sociedad de lainformación representan tres elementosesenciales del nuevo orden mundial que seestá configurando y nuestra Comunidadno puede quedar otra vez al margen de lasgrandes transformaciones que se están pro-duciendo. El sector rural tampoco.
Vivimos momentos en los que es preci-so definir entre todos y con urgencia el ca-mino que queremos seguir, decidir sobrenuestras opciones de futuro y adoptar, enconsecuencia, las medidas y las estrategiasnecesarias para lograrlo. Desde el Gobier-no Autónomo estamos promoviendo ungran debate entorno a estas cuestiones, a
través de lo hemos denominado la SegundaModernización de Andalucía.
El objetivo de esta propuesta es abrir unproceso de análisis y reflexión entre todaslas fuerzas políticas, sociales y económicasandaluzas que permita definir el escenarioen que pretendemos situar a nuestra Comu-nidad en los próximos años y recabar el con-senso que facilite solventar los desafíos queuna empresa de esta envergadura plantea.Precisamente el primer encuentro sobre lasegunda modernización se celebró reciente-mente en Córdoba para reflexionar y debatirsobre las aportaciones del mundo rural a estenuevo proceso de modernización.
El medio rural andaluz, en especial losgrupos de desarrollo rural, sus emprende-dores, sus organizaciones representativasy en general todos los hombres y mujeresque han conseguido en poco tiempo in-troducir importantes cambios y mejoras,colaborando eficazmente al progreso denuestra Comunidad, tienen que volver adesempeñar un papel destacado en estanueva tarea.
Se han dado algunos pasos importantesen esta dirección, pero es preciso generali-zar e intensificar de manera especial todolo relacionado con la innovación y las nue-vas tecnologías. Esa es hoy una de las llavesque abre el camino del progreso, la quenos puede permitir mejorar la gestión y laproducción, mediante la optimización delos recursos. También hay que apostar porel valor del medio ambiente, la calidad y lacompetitividad de nuestra industria agroa-limentaria; para ello, hay que estar atentosa los avances en biotecnología y hay quemejorar en los procesos de comercializa-
ción, dos tareas en las que pueden y debentener un especial protagonismo los gruposde desarrollo rural.
La misión que cabe esperar de los em-prendedores y de los Grupos de DesarrolloRural es que asuman este reto y sean capa-ces de hacer aflorar las enormes potencia-lidades que tienen a su alcance, incorpo-rándose así a la vanguardia de la Andalucíadel siglo XXI. A ellos mi ánimo y mi grati-tud para afrontar la ilusionante tarea queles espera. Las ayudas y el apoyo institu-cional no van a faltar. El Gobierno Andaluzes consciente del crucial desafío al que seenfrenta el medio rural y, en consecuen-cia, reiteramos nuestro compromiso de de-fender sus intereses en los foros europeos yante las reformas que se avecinan (PAC), yreiteramos también nuestra voluntad de co-laboración con los ayuntamientos, con losagentes económicos o sociales y con losemprendedores rurales en la consecuciónde los objetivos reseñados.
Concluyo por tanto estas palabras agra-deciendo a todos su esfuerzo y su partici-pación. La respuesta de Andalucía y delmundo rural andaluz continuará siendo lade una Comunidad y una sociedad que tra-baja con ahínco, que apuesta por la inno-vación y la cultura emprendedora, y quees capaz de avanzar en el proceso de con-vergencia con los países europeos de nues-tro entorno.
Mi gratitud, sobre todo, a la labor calla-da y anónima que realizan a lo largo denuestra geografía rural, miles de andalucesy andaluzas para conseguir que sus pue-blos y comarcas alcancen cada vez mayo-res cotas de progreso y bienestar.
ay que apostar por el valor del medio
ambiente, la calidad y la competitividad
de nuestra industria agroalimentaria; para
ello, hay que estar atentos a los avances
en biotecnología y hay que mejorar en los
procesos de comercialización, dos tareas
en las que pueden y deben tener un
especial protagonismo los Grupos de
Desarrollo Rural
Este texto recoge la intervención del presi-
dente de la Junta de Andalucía, Manuel Cha-
ves, en el acto de la Firma de los Convenios
de Colaboración de la Junta de Andalucía
con los Grupos de Desarrollo Rural (3 de oc-
tubre de 2002).
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eSi se realiza un análisis para evaluar la crea-ción del segundo pilar de la PAC y el re-fuerzo del mismo, a través de la Agenda2000, tenemos que reconocer que en reali-dad lo que ha significado es un cambio dela financiación del FEOGA-Orientaciónpor la del FEOGA-Garantía; no la aplica-ción de nuevas medidas ni el incrementode los recursos disponibles, sino la conti-nuación del enfoque aplicado en el periodoanterior. Sí es cierto que se han integradoacciones y medidas, pero no se ha produ-cido una modificación de sus contenidos.
En España, el Reglamento de DesarrolloRural solo tiene una financiación europea de1.200 millones de euros por año frente a al-rededor de 6.000 millones de euros por añopara el primer pilar. El gasto comunitario so-bre las medidas de desarrollo rural en Españase sitúa aproximadamente en un 17% de losgastos del conjunto de la PAC (primer y se-gundo pilar). A esto debemos añadir las me-didas del artículo 33, que forman parte de losprogramas regionales de desarrollo rural, porlo que son las CC.AA. las que deciden losfondos que deben destinarse. Se calcula quemenos del 9% del presupuesto del Regla-mento de Desarrollo Rural (RDR) se dedicaa medidas no estrictamente agrarias en Es-paña. El PRODER (programa nacional para-lelo a Leader) representa el 4,6%.
En su conjunto esto implica que se gastapoco más del 1,5% del presupuesto de laPAC en las medidas no agrarias de desarro-llo rural. El presupuesto de Leader en Espa-ña es de en torno a 500 millones de eurospara todo el periodo (o sea alrededor de 80 millones deeuros por año) y, por lo tanto, no cambia la si-tuación global de forma significativa.
La ecocondicionalidad y la preocupaciónde los consumidores por alimentos sanos yde calidad tampoco tienen el peso que lesdebe corresponder. Por ejemplo, las medi-das de protección ambiental (artículo 33) ylas medidas de promoción de productos decalidad no alcanzan el 4% y el 0,38% delpresupuesto del RDR, respectivamente. Mu-chas otras medidas pueden tener un impactodudoso sobre el medioambiente. En estecontexto, la modulación del 20% de la PACpermitida por la Comisión Europea dupli-caría el presupuesto disponible actualmenteen el Reglamento de Desarrollo Rural. Porla misma regla, el margen de maniobra paraaumentar las medidas de diversificación ru-ral, calidad alimentaria y protección am-biental sería muchas veces mayor.
La modulación obligatoria debe ser el pri-mer paso, pero los otros pasos hay que dar-los simultáneamente. Resulta imprescindibleque, junto a la modulación y a la ecocondi-cionalidad, se plantee implantar una nuevatipología de zonas rurales con distinto gradode cofinanciación comunitaria, en base a sugrado de ruralidad y al desarrollo económicode los territorios. Esto es exigible desde elprincipio de cohesión. En el Estado español,con una modulación del 10%, el ministeriode Agricultura y las CC.AA. tendrían queaportar 110 millones de euros adicionalescada uno. Es necesario dejar abierta la posi-bilidad de que los Estados miembros, si así lodesean, puedan aplicar los fondos obtenidosmediante modulación y ecocondicionalidaddirectamente al desarrollo rural, sin necesi-dad de cofinanciación alguna.
El planteamiento no solo debe ser la re-forma de la PAC, sino algo más profundo,
porque se está hablando de solidaridad entrelos ciudadanos europeos y la cohesión entrelos territorios. En España, a lo que supusoLEADER I para el Desarrollo Rural, se haañadido el programa PRODER, permitien-do a muchas regiones extender las estructu-ras políticas y técnicas de los Grupos de Ac-ción a una proporción muy elevada del te-rritorio rural. Esta decisión sitúa a los Gru-pos de Acción Local y las diversas redes queemanan de ellos en una posición estratégicacomo herramienta de gestión participativa eintegración de las diversas políticas queafectan al mundo rural en España.
Pero la estrategia española de DesarrolloRural también conlleva una serie de riesgosmuy elevados: una excesiva burocratiza-ción, una excesiva politización y una posi-ble marginación de los movimientos, orga-nizaciones e instituciones que realmentepueden afectar al desarrollo de las zonasrurales. La España rural, la España olvidada,existe y ninguna política que quiera basarseen la cohesión social y territorial puedeconstruirse al margen de esta realidad. Ha-blar de la España rural es hablar de más de7.000 municipios, casi el 90% del territorioy más del 20% de la población.
Esta no es una situación que afecte sóloa la España interior. Prácticamente en cadaComunidad Autónoma se está reprodu-ciendo un modelo basado en la despobla-ción de gran parte del territorio, en bene-ficio de la concentración en una parte delmismo. Los efectos que provoca esta situa-ción pueden resumirse gráficamente en lahuida masiva de los jóvenes del mundo ru-ral ante la ausencia de un futuro profesio-nal, laboral y personal.
El futuro de las políticasde desarrollo ruralAntonio González Cabrera
Presidente de la Red Española de Desarrollo Rural
n las medidas no agrarias
de desarrollo rural se
gasta poco más del 1,5%
del presupuesto de la PAC
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A modo de imagen rápida, el mundorural está caracterizado por:
• Un nivel de rentas muy inferior al delmedio urbano. Hoy, la renta agraria por ocu-pado, en términos reales, es inferior a la de1996.
• Unos servicios públicos manifiesta-mente mejorables. Los servicios sanitarios,la oferta formativa, las dotaciones sociales oculturales, no solo no convergen con los delas ciudades, sino que, al contrario, se dis-tancian cada vez más.
• Las carencias en infraestructuras difi-cultan la apuesta de emprendedores, tantode agricultores y ganaderos, como de las ini-ciativas de diversificación económica (turis-mo rural, actividades medioambientales…).
• Y unas prestaciones de la SeguridadSocial manifiestamente mejorables.
Un concepto integral de medio rural
El hecho de que los programasde desarrollo rural se formulensobre un territorio concreto, porquienes viven en ese territorio, ysobre los recursos propios pues-tos en valor, ha permitido dar aesos programas un carácter inte-gral e integrador de las distintaspolíticas que inciden sobre ese te-rritorio y sobre todos sus sectoressocioeconómicos. Desde esta óp-tica cualquier recorte de los re-cursos destinados a cualquiera deestos sectores es una agresión almedio rural. Las recientes medi-das sobre las prestaciones por de-sempleo, el decretazo, son unaagresión al medio rural. El recortede ayudas al sector agrario, no elmás importante, pero sí de unaimportancia evidente, es unaagresión al medio rural. El retrasoen la llegada de las nueva tecno-logías de la información y la co-municación al medio rural, estambién una agresión.
Bajo esta concepción inte-gral, no podemos quedarnos enla reivindicación de aquello que directa-mente gestionaríamos los Grupos, sino quenuestro papel como Red de los Grupos deDesarrollo Rural que aglutinan la totalidadde agentes de un territorio debe ser másambicioso y debemos reivindicar una aten-ción específica al medio rural a través deun verdadero Plan de Medidas de Desarro-llo Rural, que debería presentar el Gobiernoal Parlamento, coordinado con Comunida-
des Autónomas y Ayuntamientos, con unosobjetivos prioritarios, que a nuestro enten-der serían:
1. Mejora de infraestructuras en el me-dio rural, con especial incidencia en el ac-ceso a las telecomunicaciones.
2. Oferta formativa adaptada a las espe-ciales condiciones y necesidades del mun-do rural, con especial atención a las pro-puestas de ciclos formativos relacionadoscon las economías rurales.
3. Mejora de servicios sanitarios, conespecial incidencia en urgencias y trans-porte sanitario.
4. Dotación de servicios sociales de pro-ximidad adaptados a las condiciones demo-gráficas y geográficas del mundo rural.
5. Impulso a las posibilidades de diversi-ficación económica de los diferentes terri-
torios rurales.6. Adaptación de políticas
de género a las condiciones es-pecíficas del medio rural.
7. Impulso a la incorpora-ción de jóvenes a la vida ac-tiva en el mundo rural.
8. Apoyo a los partenaria-dos locales, como foro departicipación conjunta delas iniciativas publicas y pri-vadas, e instrumento de pro-fundización de la democra-cia en el medio rural.
La propuesta de reforma
intermedia de la PAC
Para Bruselas, el proyectoestá influido por la exigen-cia ciudadana de una mayorcalidad alimentaria y un me-nor intensivismo frente acrisis como la de las vacaslocas. A la vez, la Comisiónrecuerda que los jefes deGobierno de la Unión Eu-ropea apostaron en la cum-bre de Gotemburgo (Sue-cia) del año pasado por unaagricultura sostenible. La
primera valoración que hacemos desde laREDR es que aún considerando correctoslos objetivos planteados, los instrumentosque se utilizan para su logro no son losapropiados o se desarrollan de una formaparcial, por lo que la redacción actual deesta revisión intermedia no resulta acepta-ble, ni para nuestro país, ni para el resto depaíses ya miembros, ni para los de una Eu-ropa ampliada.
En segundo lugar hay que decir que laactuación del Gobierno español en estamateria ha sido nefasta. Cuando se pudoaprovechar la Presidencia de la UE paraintroducir propuestas en uno de los Con-sejos de Agricultura, nuestro Gobierno sededicó a pasar una encuesta, sin manifestaruna posición clara. Ahora, con la propues-ta aprobada, le pide a las CC.AA. que leenvíen propuestas. No nos parece de reci-bo que hasta ahora no se haya tenido vo-luntad para aplicar una modulación justa,mediante un debate público abierto, ycuando la Comisión la impone, decir queno es aceptable, sin plantear alternativas.
Respecto a los tramos de las ayudas a lasque afectaría la modulación, el umbral delos 5.000 euros es muy bajo para iniciarla,y muy alto el límite de 300.000 euros porarriba. La reforma de algunas OCM, aúnsiendo necesaria, no parece proporcionada,y la vinculación de ayudas a la explotacióny no a la producción se realiza sobre losdatos actuales de las ayudas, lo que resultatremendamente injusto porque precisa-mente no se comparte el reparto actual.
Y el aspecto que más nos preocupa. Elque los fondos procedentes de la modula-ción vayan a Desarrollo Rural es algo quesiempre hemos reivindicado, pero o eseacuerdo de modulación es pactado por to-dos, o el Desarrollo Rural seguirá con ellastre que nos supone un enfoque finan-ciero dependiente de que se solucionen losproblemas del primer pilar. Asimismo re-sultarían discutibles las medidas de Desa-rrollo Rural a que se van a destinar esosfondos. En definitiva mejora la situaciónactual, al destinarse más fondos, pero noacaba de decirse claramente cuál es el mo-delo de desarrollo que se quiere. Siguensiendo misterios que esperamos que prontonos sean desvelados.
la modulación del 20%
de la PAC permitida por la
Comisión Europea
duplicaría el presupuesto
disponible actualmente en
el Reglamento de
Desarrollo Rural
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Andalucía, desde la aprobación del Estatutode Autonomía ha sido una Comunidad Au-tónoma ampliamente preocupada por losproblemas de sus áreas rurales. En ello hatenido una gran influencia el retraso relati-vo y el gran peso de estas zonas, tanto enpoblación como en superficie, dentro de laregión. Esta inquietud le ha llevado a apro-vechar todas las oportunidades existentes,pero sobre todo a ser pionera en la puestaen marcha de algunas actuaciones de desa-rrollo rural.
A principios de los noventa, la necesidadde mejorar la calidad de vida y de garantizarla presencia de población en las áreas rurales,junto con el nuevo marco internacional exis-tente llevaron a un cambio de paradigma,pasándose del productivismo al ruralismo (Ramosy Romero, 1994). La materialización de estecambio de enfoque se plasmó en la creaciónen 1992 de la Mesa de Concertación sobreel Desarrollo Rural Andaluz, que, como unade sus primeras actuaciones, decidió encargara un grupo de expertos agrupados en torno ala Universidad de Córdoba la elaboración yredacción de un documento de reflexión so-bre la situación y las perspectivas de futurodel mundo rural andaluz 1.
Este documento fue presentado a la so-ciedad andaluza en marzo de 1993, inician-do de manera oficial el debate sobre el de-sarrollo rural en la región. El estudio se es-tructuró en dos partes, una primera de refle-xión global y diagnóstico sobre los proble-mas de la agricultura y el mundo rural anda-luz, en el marco del nuevo contexto inter-nacional, y una segunda en la que se incluyóun análisis específico de los problemas exis-tentes en cada una de las grandes áreas ho-
mogéneas en las que fue dividido el territo-rio andaluz y una propuesta de líneas de ac-tuación. Con este planteamiento se preten-dió consensuar un Plan Andaluz de Desa-rrollo Rural que resolviera los problemas delmedio rural andaluz 2.
No obstante, la situación política internay el nuevo contexto externo (cuyo expo-nente más destacado fue la aprobación delMarco de Apoyo Comunitario 1994-99, queestableció una nueva forma en las relacionescontractuales con la UE), hicieron que elPlan no llegase nunca a cumplir el amplioobjetivo con el que fue diseñado. Como as-pecto positivo se puede destacar que el es-fuerzo de reflexión generado dejó un poso apartir del cual se han puesto en marcha di-ferentes iniciativas de desarrollo rural en laComunidad Autónoma andaluza, muchasde las cuales han sido pioneras y han posi-cionado a Andalucía dentro de las regionesmás preocupadas por el desarrollo rural 3.
De esta actitud se derivó el que en LEA-DER I, a pesar de que las Comunidades Au-tónomas tenían un escaso margen de ma-niobra en cuanto a sus actuaciones (al ser elMAPA el Organismo Intermediario), la Jun-ta de Andalucía y en concreto la Consejeríade Agricultura adoptaran un papel de granrelevancia en la aplicación y seguimientode la Iniciativa Comunitaria. En Andalucíase aprobaron nueve grupos en esta convo-catoria (Tabla 1).
El arranque de LEADER I no fue fácil. Elescaso plazo dado por la convocatoria parapresentar los proyectos motivó que los quese presentaban fuesen elaborados sobre labase de otros proyectos existentes 4. Estooriginó una escasa o nula participación de la
población y una composición y fórmula ju-rídica de los GAL dominada por el sectorpúblico y con una notable ausencia de lossectores privados 5. Además el hecho de quela mayoría de los GAL adoptasen la fórmulade sociedad mercantil 6 dificultó tanto la en-trada de otros sectores como la posterior in-corporación de nuevos socios privados (antela negativa de apertura o la complejidad delproceso de ampliación de capital).
A la novedad de la iniciativa y a la faltade experiencia de los actores que la pusieronen marcha se unieron entre otros los si-guientes problemas: a) la ambigüedad de laComunicación a los Estados miembros; b)la falta de experiencia en gestión de este tipode programas por parte de las restantes ad-ministraciones implicadas, que hizo que noexistieran unas directrices de actuación cla-ras; c) el escaso conocimiento de la iniciativapor parte de la población local, que motivóuna muy escasa participación e implicaciónen el desarrollo de la misma o d) la indefini-ción en cuanto a la aportación financiera delas administraciones nacional, regional y lo-cal, que aunque venía recogida en los cua-dros financieros en ningún caso había sidonegociada con estas administraciones 7.
A pesar de las dificultades a las que se en-frentó la Iniciativa, es de destacar el apoyoque en todo momento recibió de la Junta deAndalucía. Así, a pesar de no tener respon-sabilidad en la gestión de LEADER, desde elprincipio arbitró una serie de mecanismosde colaboración con los gestores de la mis-ma, como la creación de un órgano de coor-dinación (función asumida inicialmente porel IFA y después por el Servicio de Desarro-llo Rural de la Consejería de Agricultura) o el
anivel político, se ha buscado que no
haya grandes diferencias en cuanto a la
gestión y forma de actuar de los grupos
LEADER y PRODER, apostando más por un
modelo de desarrollo rural andaluz que por
las diferenciaciones burocrático-
administrativas realmente existentes entre
los dos programas
1991-2000: luces ysombras de una década
de desarrollorural en Andalucía
Mª del Mar Delgado
Equipo de Desarrollo Rural
Universidad de Córdoba
otoño 2002 • tierra sur 11
apoyo constante de los funcionarios de Agri-cultura al buen funcionamiento de la misma.
La aplicación de LEADER I, a pesar delpoco tiempo con que contó, tuvo un nota-ble grado de éxito. Su carácter de laboratoriode experiencias in vivo (Beltrán, 1994) permitióponer en marcha nuevas prácticas de desa-rrollo en las zonas más periféricas y, en oca-siones, marginadas de Andalucía. Los gru-pos LEADER andaluces pusieron en marchamás de 900 actuaciones en el territorio,movilizaron una parte considerable de fi-nanciación privada y crearon el germen pa-ra futuras actuaciones (AEIDL, 1994). Lamayor parte del presupuesto se destinó aturismo rural, lo que tuvo como efecto ne-gativo el que en muchas zonas se identifi-case desarrollo rural con turismo rural. Noobstante, las actuaciones de LEADER con-siguieron que despegara una oferta de tu-rismo rural en la región que, a pesar de losesfuerzos puestos en marcha por las distin-tas administraciones, no había conseguidocuajar hasta entonces.
Andalucía también fue pionera, a nivelnacional, en la puesta en marcha de una redde grupos de desarrollo rural: ALA (Asocia-ción LEADER de Andalucía). Posterior-mente esta Asociación cambió su nombrepor el de ARA (Asociación para el Desarro-llo Rural de Andalucía), para así poder aco-ger en su seno a aquellos grupos de desarro-llo rural que no eran LEADER.
Aunque hubo muchos problemas 8 en laaplicación de LEADER I se considera que lainiciativa consiguió, entre otros, los siguien-tes logros: a) un cambio radical en la actitudde las administraciones ante los problemasde las zonas más deprimidas; b) una apuesta
por lo rural y por la puesta en marcha de es-trategias articuladas en torno a la conserva-ción y valorización conjuntas de los recursosnaturales (frente a la actitud predominantehasta el momento de que los Espacios Natu-rales Protegidos debían ser 'protegidos' de laacción del hombre); c) una demostración deque las zonas rurales tenían posibilidades yde que el interés demostrado por las admi-nistraciones en estas zonas podía traducirseen una mejora de las condiciones de vida yde empleo; d) una puesta en marcha de ac-ciones innovadoras que contribuyeron a ladinamización económica y social; e) unaapuesta por la calidad; f) una mayor crea-ción de equipamientos e infraestructuras enestas zonas y g) la movilización de un consi-derable volumen de recursos financieros (ca-si se doblaron las previsiones iniciales) queno sólo fueron privados, sino que ademásen su mayoría fueron endógenos.
La Comunicación a los Estados miem-bros de LEADER II constituyó una oportu-nidad excelente de aplicar en la práctica losobjetivos que se habían elaborado para elPDRA y no habían sido aplicados por faltade recursos. En esta edición, las Comunida-des Autónomas actuaron como OrganismosIntermediarios frente a la Comisión Euro-pea elaborando y presentando un ProgramaRegional con el diagnóstico, los objetivos ylos criterios de selección de zonas necesariospara poner en marcha los Programas.
La aplicación de LEADER II en Andalucíavino regulada por la Orden de 15 de julio de1994 (BOJA nº 111 de 20 de julio de 1994).A la convocatoria se presentaron cincuenta yun proyectos de los cuáles fueron seleccio-nados veintidós grupos 9 (Tabla 2) mediante
Tabla 1: Relación de los Grupos LEADER Iaprobados en AndalucíaG.A.L. ProvinciaAlpujarra Granada-AlmeríaSierra de Cádiz CádizAxarquía interior MálagaLa Loma JaénCuenca del Río Tinto HuelvaSerranía de Ronda MálagaSierra Norte de Sevilla SevillaSierra Sur de Sevilla SevillaSierra Subbéticas Córdoba
Fuente: AEIDL, 1994.
Tabla 2: Relación de los Grupos LEADER IIaprobados en AndalucíaG.A.L. ProvinciaLos Vélez AlmeríaAlpujarras Granada-AlmeríaSierra de Cádiz CádizLos Alcornocales CádizSierra Morena Cordobesa CórdobaLos Pedroches CórdobaGuadiato CórdobaNoroeste de Granada GranadaGuadix GranadaPoniente Granadino GranadaAracena y Picos de Aroche HuelvaAndévalo HuelvaRío Tinto-Cuenca Minera HuelvaSierra Mágina JaénSierra de Segura JaénEl Condado JaénAxarquía MálagaSierra de las Nieves MálagaSerranía de Ronda MálagaSierra Norte de Sevilla SevillaEstepa-Sierra Sur SevillaCorredor de la Plata Sevilla
Fuente: Florencio, 1999 (fuente inicial,Junta de Andalucía).
Tabla 3: Relación de los Grupos PRODERaprobados en AndalucíaG.A.L. ProvinciaAlmanzora AlmeríaFilabres-Alhamilla AlmeríaLevante Almeriense AlmeríaJanda Litoral CádizZona Rural Jerez CádizGuadajoz-Campiña Este Córdoba Valle Medio Guadalquivir CórdobaCampiña Sur CórdobaSubbética CórdobaLos Montes de Granada GranadaValle de Lecrín-Temple GranadaLa Vega-Sierra Elvira GranadaCosta Occidental HuelvaEl Condado HuelvaSierra Sur JaénAlto Guadalquivir JaénCampiña Norte JaénLa Loma-Las Villas JaénComarca de Antequera MálagaGuadalteba MálagaComarca Nororiental MálagaValle del Guadalhorce MálagaCampiña-Alcores SevillaSerranía Suroeste SevillaGran Vega SevillaAljarafe-Doñana SevillaBajo Guadalquivir Sevilla
Fuente: Florencio, 1999 (fuente inicial,Junta de Andalucía).
12 ara • tierra sur • opinión
la Orden de 4 de octubre de 1995 (BOJA nº134 de 21 de octubre de 1995). Esto supusoun notable aumento con respecto a LEA-DER I, pero también que muchas zonas que-daran fuera de la iniciativa.
Las expectativas despertadas en las zonasrurales por la segunda edición de LEADER yel ya comentado notable número de solici-tudes que se presentaron en Andalucía a lainiciativa y que no pudieron ser aprobadas,hicieron que el lanzamiento de PRODERfuese acogido muy favorablemente en estaComunidad. La aplicación de este progra-ma fue regulada por la Orden de 12 de juliode 1996 (BOJA nº 84 de 23 de julio). A laconvocatoria se presentaron treinta y cua-tro candidaturas y finalmente fueron apro-bados veintisiete grupos PRODER, como serecoge en la Tabla 3.
En general se puede afirmar que la puestaen marcha de LEADER II y PRODER ha su-puesto para Andalucía la oportunidad de ar-ticular todo su territorio en torno a estrate-gias de desarrollo rural. Así, la política se-guida ha buscado el incluir en ellas el mayornúmero de territorios posible 10, aun en de-trimento de la disponibilidad de recursos fi-nancieros en los mismos. Como aspecto po-sitivo de esta actitud se puede destacar laimportancia de contar con estructuras de in-terlocución en todas las comarcas y de per-mitir en todas ellas que la población se im-plique en su desarrollo y en el diseño de sufuturo. Sin embargo, esta política de repartoindiscriminado ha penalizado a los gruposque han realizado una buena dinamizaciónsocial y a partir de ahí un diagnóstico y unproyecto de actuación consensuado de sucomarca, y ha permitido el acceso a LEA-DER o PRODER de zonas que han realizadoesfuerzos menores.
A nivel político, se ha buscado que nohaya grandes diferencias en cuanto a lagestión y forma de actuar de los gruposLEADER y PRODER, apostando más porun modelo de desarrollo rural andaluz que porlas diferenciaciones burocrático-adminis-trativas realmente existentes entre los dosprogramas 11.
Aunque, inicialmente, la Junta de Anda-lucía en su discurso no haya discriminadoentre zonas LEADER y PRODER y las hayaconsiderado a todas como comarcas conproblemáticas similares, un análisis de mayordetalle pone de manifiesto diferencias muysignificativas entre ellas. En primer lugar des-taca que la situación de partida de ambos ti-pos de comarcas es muy diferente. El nivelde desarrollo territorial de las zonas LEA-DER es menor que el de las zonas PRODERy el nivel de actividad económica medio delas zonas PRODER también es superior al delas zonas LEADER. Además las zonas LEA-DER están considerablemente más despo-bladas (su densidad de población media esde 28 hab/km2 frente a 66 hab/km2 de PRO-DER). Esto permite concluir que las zonasacogidas a la IC LEADER presentan un gra-do de depresión socioeconómica superior alexistente en las zonas PRODER.
Otro aspecto diferencial puede verse enel hecho de que en las zonas PRODER elgrado de uniformidad u homogeneidad co-marcal es muy inferior al existente en las co-marcas LEADER. Existen grupos que ni si-quiera tienen una continuidad física u otrosen los que se han unido dos comarcas concaracterísticas diferentes. Este hecho estáacarreando consecuencias negativas en al-gunos de estos grupos, ya que uno de losobjetivos que persiguen los programas dedesarrollo rural es definir territorios establescon características homogéneas tanto desdeel punto de vista de los recursos que contie-nen como en relación con un modo de vidao una cultura y tradiciones comunes. Sólo deesta manera se podrá fortalecer la cohesiónterritorial y la identidad del territorio y defi-nir unos ámbitos de actuación coherentes.
Las diferencias entre ambos programastambién se han visto reflejadas en sus cua-dros financieros, significativamente inferioresen PRODER. La media de inversión aproba-da en LEADER es de 9.041,5 meuros, mien-tras que la de PRODER es de 5.849 meuros.En este hecho ha influido el que la dotaciónpresupuestaria destinada a este último pro-grama haya debido de ser repartida entre un
NOTAS1. Bases para un Plan de Desarrollo Rural Andaluz.
Junta de Andalucía, 1993. Coords: Eduardo Ra-mos y José Juan Romero.
2 Plan de Desarrollo Rural 1994-1999, aprobadopor el Consejo de Gobierno de la Junta de Anda-lucía en su reunión del 15 de marzo de 1994.
3 Algunas de estas iniciativas han sido: en el ámbi-to académico, la puesta en marcha en 1995 de laprimera Titulación Superior en Desarrollo Ruralexistente en España, en la Universidad de Córdo-ba. En el ámbito político la Junta de Andalucía haconvocado ayudas públicas al desarrollo rural conel objetivo de cumplir los compromisos regionalesde pago o de evitar la interrupción en el funciona-miento de los GDR ante los retrasos producidosen el cambio de uno a otro periodo de programa-ción. Además en 1999 firmó un Compromiso porel mundo rural de Andalucía, con la patronal y lossindicatos, cuyo objetivo fue 'establecer las basesy los cauces para el trabajo conjunto por el desa-rrollo del mundo rural andaluz'.
4 En general se utilizaron los proyectos realizados pa-ra la declaración como Espacio Natural Protegido.
5 Frente a las críticas derivadas de este hecho, Flo-rencio (1999) pone de manifiesto dos realidadesexistentes en Andalucía en ese momento: 1) la es-casa tradición de funcionamiento democrático delos municipios (apenas doce años) que dificultó elacceso a los órganos de decisión de la sociedadcivil y 2) el rechazo por parte de las distintas ad-ministraciones a que se realizase una gestión defondos públicos por parte de entidades privadas.Para atenuar esta segunda situación, el control delos órganos de decisión se concentró en los agen-tes institucionales.
6 Condición impuesta por el Instituto de Fomento deAndalucía (IFA) para entrar a formar parte del GAL.
7 Esta situación fue resuelta por la Junta de Anda-lucía posteriormente mediante la firma en 1993de un Convenio Marco de Cooperación entre laJunta de Andalucía y los CEDER beneficiarios deLEADER I en esta Comunidad.
8 Entre ellos se pueden destacar, la ya comentadaausencia de participación de la población local, laescasa distribución territorial de las actuaciones ola concentración de los recursos económicos enpocos proyectos.
9 De ellos, 13 pasaron por la fase de Adquisición deCapacidades y los 9 restantes pasaron directa-mente al Programa de Innovación Rural.
10 El 89% del territorio andaluz está acogido a unade estas dos iniciativas, y el número de GAL exis-tente representa casi el 25% del total nacional.
11 Quizás donde estas diferencias se han hechomás patentes ha sido en el acceso de los gruposLEADER a la cooperación transnacional. Esta po-sibilidad, muy bien valorada por muchos de losgrupos LEADER, ha sido imposible de incluir enPRODER dadas sus características de ProgramaOperativo.
12 Programa Operativo Integrado de la ComunidadAutónoma de Andalucía, que se integra en el Mar-co Comunitario de Apoyo para las intervencionesestructurales en las regiones españolas del Obje-tivo 1 del periodo 2000-2006 (Junta de Andalucía,2001). Este programa fue aprobado por Decisiónde la Comisión C(2000) 3965 de 29 de diciembre.
13 Las medidas financiadas por ambos programaspueden ser diferentes y vienen cofinanciadas porfondos diferentes, que en cada caso tienen unosprocedimientos administrativos y de fiscalizacióndistintos. Además, la filosofía subyacente en LEA-DER+ de articular toda la estrategia en torno a uneje temático no es imprescindible en PRODER,por lo que puede haber heterogeneidad en la for-ma de abordar ambos programas. A todo esto sele puede añadir que el porcentaje del total que sepuede destinar a cada medida no es el mismo(aunque la medida en sí sea la misma).
BIBLIOGRAFÍA
AEIDL (1994): Directory of the 217 Local Action Groups. Bruselas.BELTRAN, C. (1994): El Desarrollo Rural y la Iniciativa Comunitaria LEADER en Es-
paña. Papeles de Economía, 60-61, 226-228. FLORENCIO, A. (1999): Antecedentes y actualidad del desarrollo rural. Estudio de
casos. Trabajo Profesional Fin de Carrera. Universidad de Córdoba. JUNTA DE ANDALUCIA (1993): Bases para un Plan de Desarrollo Rural Andaluz.
Coords: E. Ramos y J.J.Romero. Junta de Andalucía. Sevilla.RAMOS, E. y ROMERO, J.J. (1994): Del 'productivismo' al 'ruralismo'. Revista de Es-
tudios Agrosociales, 169, 175-212.
otoño 2002 • tierra sur 13
número de grupos bastante supe-rior al inicialmente previsto.
A las anteriores diferenciashay que añadir la distribución fi-nanciera por medidas asignada alos distintos grupos PRODER. LaJunta de Andalucía, al hacer el re-parto de fondos, no ha tenido encuenta las peticiones expresadaspor los grupos en sus proyectos yha distribuido los recursos entrelas distintas medidas, trasladandola distribución proporcional delcuadro financiero regional al cua-dro de cada uno de los grupos.De esta manera, para cada grupofue aprobado un cuadro financie-ro en el que tanto el porcentajede inversión pública y privadacomo el porcentaje destinado acada una de las medidas son unfiel reflejo del que existe en elcuadro financiero de Andalucía.
Esta decisión ha ocasionadonumerosos problemas ya que notodas las zonas poseen los mis-mos tipos de recursos ni su po-blación está dispuesta a hacer elmismo uso de ellos. Ante las in-congruencias derivadas de esta actitud yotros conflictos como la dificultad de conse-guir cofinanciación en las medidas financia-das con FEDER, los grupos solicitaron unareprogramación de sus cuadros financieros.Esta solicitud fue aceptada en junio de 1998.Sin embargo, las estrictas pautas que se esta-blecieron para cambiar fondos de partidas ylos retrasos de la Junta en aprobar los cam-bios (no se aprobaron hasta junio de 1999,cerrándose el plazo de admisión de proyec-tos el día 30 de ese mismo mes) hicieroninefectivo el cambio y obligaron a los gruposa una aceptación y aprobación de proyectosforzadas y poco acordes, en muchos casos,con las necesidades reales de la comarca.
Otros problemas derivados de la aplica-ción de estos programas han sido: a) el es-caso tiempo de funcionamiento de los gru-pos, sobre todo en PRODER, que en algu-nos casos no ha llegado ni a los dos años; b)los retrasos en la percepción de los fondos;c) las dificultades de cofinanciación o d) lafalta de un criterio uniforme en cuanto a laelegibilidad, que ha originado, en ocasio-nes, que estos criterios sean diferentes entreprovincias.
En cuanto a los logros conseguidos porLEADER II y PRODER, se puede afirmarque estos programas han conseguido que en
la actualidad haya una per-cepción diferente de una par-te significativa de la sociedadrural con respecto a las zo-nas en las que viven, con res-pecto a los recursos existen-tes en las mismas y con res-pecto a su futuro. La mayorimplicación de la población,la transferencia de capacidadde decisión y la posibilidadde gestionar programas dedesarrollo a la medida del te-rritorio, están en el origen deestos cambios.
Además, la aceptación dela población se hace patenteen la apuesta por su propiofuturo a través de la movili-zación del ahorro local y enla aportación de las adminis-traciones locales, que hanconseguido no sólo una va-lorización de recursos endó-genos, hasta ahora ociosos,sino que en la mayoría de losgrupos se ha superado la fi-nanciación inicialmente pre-vista por la Administración.
Este posicionamiento de la sociedad locales un claro refrendo a los principios de estosprogramas y a su forma de actuación, y unaclara indicación a las Administraciones in-termedias de que la iniciativa privada es ca-paz de complementar a la iniciativa pública eincluso de suplirla, en aquellos casos en losque esta última no ha respondido a las de-mandas manifestadas por la población.
Este cambio de actitud y esta acepta-ción de los programas de desarrollo ruralson tan patentes en algunas zonas, que in-cluso están produciendo un efecto superioral esperado, creando expectativas que pu-dieran no ser fáciles de cumplir. No con-viene olvidar que la dotación financiera deestos programas es bastante reducida si secompara con otro tipo de actuaciones. Lapoblación local, en muchas ocasiones, no esconsciente de las limitaciones de estos pro-gramas, y acuden a ellos pensando que sonla panacea a los problemas de su zona. Laslimitaciones de los programas y su imposi-bilidad para abordar determinadas compe-tencias pueden restarles credibilidad y creardesconfianzas en la población, con lo quelos efectos del programa podrían llegar aser contrarios a los pretendidos.
Otras políticas a las que la Junta de An-dalucía está prestando gran atención se re-
fieren a la incorporación de las perspecti-vas de género y juventud en las actuacionesde desarrollo rural. El origen de las mis-mas está en las bases del Plan de Moderniza-ción de la Agricultura Andaluza y en concretoen la necesidad de establecer mecanismosque faciliten la renovación de actores y suincorporación como protagonistas de ple-no derecho a la actividad agraria y a la vidaeconómica, política, social y cultural delmundo rural. Así, desde 1999 se han reali-zado diferentes actuaciones para incorpo-rar a las mujeres y a la juventud, como laconvocatoria de ayudas específicas; la rea-lización de jornadas, foros y seminarios; lapublicación de textos y documentos o lacreación de un sitio web específico paraestos temas.
Con respecto a las actuaciones previstaspara el actual periodo de programación2000-2006, la Junta de Andalucía pretendecontinuar la estrategia de profundizaciónen la articulación y desarrollo del mediorural andaluz, a través de LEADER+ y dePRODER-A. Este último programa es con-siderado como uno de los ejes estratégi-cos prioritarios de este periodo de progra-mación. Ha sido incluido dentro del Pro-grama Operativo Integrado de Andalucía 12
(POIA) y sus actuaciones se enmarcan enlas del artículo 33 del Reglamento 1257/99.La financiación de esta Medida va a estar acargo del FEOGA-O, aunque algunas ac-tuaciones más marginales podrán ser fi-nanciadas por FEDER.
La propuesta de Andalucía para este pe-riodo es que los 50 grupos de desarrollorural existentes se mantengan y que dis-pongan de una financiación pública por ha-bitante similar. Para ello se han selecciona-do veintidós grupos dentro de LEADER+, yel resto de los grupos son PRODER-A. Enel momento de finalizar este artículo se co-nocen ya los grupos seleccionados dentrode LEADER+, aunque aún no han sido pu-blicados en el BOJA y por tanto no hanempezado a funcionar.
Como novedad se plantea el que losgrupos LEADER pueden ser también gru-pos PRODER, de manera que la dotaciónfinanciera aprobada para los grupos LEA-DER será complementada con presupuestoproveniente de PRODER-A. Aunque estaúltima financiación estará destinada a sub-vencionar medidas diferentes a las finan-ciadas por LEADER. Esta forma de proce-der aún no ha sido implantada, aunque yase vislumbran dificultades tanto en su ges-tión como en su fiscalización 13.
14 ara • tierra sur • entrevista
E N T R E V I S T A
Desde que la Comisión publicó durante laetapa Delors el documento El futuro delmundo rural (1988) hasta ahora, ¿los cam-bios en el paisaje rural español han sidolos previstos?La Comunicación ‘Llevar a buen término elActa Única Europea: una nueva frontera pa-ra Europa’, presentada por la Comisión ydenominada Plan Delors, recogía aspectossobre el futuro del mundo rural, y supusoaplicar un mayor realismo económico en losprogramas comunitarios, establecer una ma-yor coherencia con las políticas nacionales ypresentar un margen de actuación más am-plio en las medidas descentralizadas.
Las consecuentes reformas de los Fon-dos estructurales comunitarios de 1988 yen especial la reforma de 1992 supusieronla concentración de las intervenciones eu-ropeas en cinco objetivos prioritarios, delos cuales el objetivo 1 se orientó a fomen-tar el desarrollo y ajuste de las regionesmenos desarrolladas y el objetivo 5 a adap-tar las estructuras agrarias y a fomentar eldesarrollo de las zonas rurales.
La mayor parte del territorio españolquedó cubierto por estos dos objetivos, loque se ha reflejado en una disminución delas disparidades con la media del territoriode la Unión Europea, ya que el ProductoInterior Bruto de España ha pasado de re-presentar el 72,8 por ciento de la mediaeuropea en 1988 al 82,5% en 1998.
En el paisaje rural, como usted lo llama,o más propiamente, en el mundo rural, loscambios producidos han sido ciertamenteimportantes, tanto en lo que se refiere a laevolución de los apoyos a la actividad agra-ria, con el consiguiente reflejo en el bie-
nestar de la población rural, como en loque se refiere a la estructura de las explota-ciones agrarias y censos ganaderos, a laevolución del sector industrial ligado al sec-tor agrario y a la actividad comercial deproductos alimentarios. Estos cambios enmuchos casos han superado las previsiones.
¿Qué opinión le merece la nueva reforma dela PAC planteada por la Comisión Europea?El planteamiento de reforma de la PAC rea-lizado por la Comisión presenta muchos as-pectos básicos no aceptables ni para laagricultura ni para el funcionamiento or-denado del sistema agroalimentario espa-ñol, que debe orientarse a un fin tan im-portante como es el de garantizar el abas-tecimiento, en cantidad y calidad, de la ali-mentación que toda la población españolanecesita, todos los días y casi en cualquierpunto de nuestra geografía.
El tiempo ha demostrado que esa orien-tación, utilizando apoyo público, es nece-saria dadas las diferentes características delas actividades implicadas (agricultura, in-dustria, comercio) y el diferente grado deorganización y de peso económico de los
agentes implicados en el funcionamientodel sistema agroalimentario. Desgraciada-mente los instrumentos de orientación deeste tipo desaparecen de la propuesta y losque vienen a sustituirlos se aplicarían sintener en consideración las diferentes con-diciones de las agriculturas europeas. To-dos estos hechos requieren un debate enel que España se está mostrando beligeran-te, con razón.
Ampliación y reforma de la PAC ¿van inevi-tablemente de la mano? ¿En qué medida lasegunda es consecuencia de la primera?No van de la mano, aunque todo tiene sureflejo sobre las disponibilidades presu-puestarias. En todo caso, no cabe pensarque la segunda sea consecuencia directa dela primera. La Unión Europea se enfrenta aretos diversos, no solo a la ampliación. Enconcreto, los compromisos derivados delanálisis de los sistemas de apoyo a la agri-cultura, de todos los países que forman par-te de la Organización Mundial de Comer-cio, tienen mucho que ver con la propues-ta de reforma, como viene poniendo demanifiesto estos días el comisario Fischler.
Vicente Forteza del ReyDirector General de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación
“Ahora lo que se reivindica esla retribución de los bienes
públicos que se generan con laactividad agraria”
otoño 2002 • tierra sur 15
Otra cosa es que la propuesta sea acertadaen su integridad.
¿Podría resumir las razones que esgrimenlos países partidarios de una drástica re-ducción del presupuesto agrícola y de unaprofunda reforma de la PAC, y las que con-traponen los demás, entre ellos España?Como sabe, los debates han dado comien-zo muy recientemente por lo que aún no esposible conocer la opinión completa decada Estado miembro. Por otra parte lapropuesta de la Comisión es muy amplia;incluso cabe decir que sobrepasa lo inicial-mente previsto. No obstante, da la sensa-ción de que los partidarios de la reformaestarían por considerar que los sistemasagroalimentarios que operan en los dife-rentes países de Europa para garantizar la
alimentación de los ciudadanos pueden ydeben funcionar con menos apoyo públicoy, en todo caso, orientados casi exclusiva-mente a la calidad de la producción. Frentea esta idea estarían los países que conside-ran que la orientación pública del sistemaque permite alimentarnos cada día debereferirse a la cantidad y a la calidad de laproducción y que los recursos para esaorientación deben ser los necesarios paraque los sistemas nacionales puedan satisfa-cer las exigencias de sus ciudadanos, res-pecto de hábitos alimentarios consolida-dos a lo largo de la historia. El asunto tienemás alcance de lo que parece porque, sinser tremendista, ni menospreciar el aspectopuramente económico del negocio de laalimentación, hay que pensar en la seguri-dad alimentaria, en cantidad y calidad, co-mo un componente imprescindible de lasalud individual de los ciudadanos y comoun componente esencial de la cohesión denuestras sociedades, al facilitar la convi-vencia; algo que no se valora suficiente-mente pero que, si se quiere tener, no ha-brá más remedio que sufragarlo.
¿La reforma de la PAC propuesta por Fisch-ler persigue fines como la seguridad ali-mentaria y la protección medioambiental osu objetivo prioritario es la progresiva libe-ralización de la agricultura?La propuesta contiene elementos de am-bas clases y ambos pueden ser estimulantespara la evolución de las agriculturas euro-peas. Lo que hace falta ver y discutir sonlas dosis en que se aplican esos elementospara que los sistemas alimentarios que re-ciben su impacto, que es tanto como decirlas poblaciones y los territorios en que es-tos se asientan, los puedan absorber sinque generen más problemas que los que setratan de resolver.
¿Es posible que los problemas de la agricul-tura encuentren una solución en los valoresañadidos que propugna el desarrollo rural?Es verdad que la agricultura tiene proble-mas, pero quien verdaderamente los tiene
nuestra sociedad, tan volcada
hacia el mantenimiento de los
valores culturales y paisajísticos,
y hacia todo lo rural, no tiene
más remedio que asumir el papel
del agricultor como constructor
y sostenedor de esos valores,
y si quiere disfrutar de
ellos tendrá que retribuirle”
16 ara • tierra sur • entrevista
es la sociedad, que no puede vivir sin ella.Pero ciñéndome a su pregunta, efectiva-mente el fomento del desarrollo rural, en suconcepción actual y futura, a juzgar por loscontenidos de la propuesta, tiene comopropósito fundamental permitir que el me-dio rural se mantenga económicamente vi-vo merced a la actividad agraria, pero tam-bién a otras actividades capaces de dar em-pleo y generar rentas complementarias alas procedentes de la agricultura, ayudandoasí a que aquella se mantenga, pues es ne-cesaria.
En otras palabras, lo que se está propug-nando es que, además del valor que suponesuministrar alimentos a la sociedad, lo queno es poco, el mundo rural muestre los otrosmuchos valores que encierra y los rentabili-ce, pero siempre sin perder de vista quenuestra sociedad, que tantas cosas necesita,lo primero que precisa es alimentación, encuya base, hoy por hoy, está la agricultura.
¿El enfoque multifuncional tiene visos deprosperar?En mi opinión sí porque se trata de un en-foque muy fundamentado. No es la imagenmás habitual del agricultor, pero un buenagricultor de los que en España hay a miles,ha tenido que saber de muchas cosas paraejercer su actividad con profesionalidad ymantenerse en condiciones de competir enunos mercados cada vez más exigentes.
En este sentido ha sido multifuncional,ha hecho de todo, dentro de su explota-ción, lo que se le ha retribuido a través delprecio de los productos que programa, cul-tiva, cosecha y vende. Ahora lo que se rei-vindica es la retribución de los bienes pú-blicos que se generan con la actividad agra-ria, de los que no es el menor la garantía deabastecimiento de alimentos a la población,que la sociedad disfruta pero no los recom-pensa. Nuestra sociedad, tan volcada haciael mantenimiento de los valores culturales ypaisajísticos y, en general, hacia todo lo ru-ral, no tiene más remedio que asumir el pa-pel del agricultor como constructor y sos-tenedor de esos valores y si quiere disfrutarde ellos tendrá que retribuirle.
¿Los agricultores españoles están prepara-dos, entonces, para desempeñar activida-des rurales no agrícolas?Los agricultores españoles han dado mues-tras, a lo largo de nuestra reciente historia,de una capacidad de adaptación a las de-mandas de la sociedad que, por cierto, casinadie les reconoce. La imagen que se tiene
de ellos es la de gente apegada a sus formasde hacer y vivir, casi inmutables. Sin em-bargo, basta con recapacitar un poco paraver la auténtica revolución que se ha pro-ducido en el campo en los últimos 50 años,y eso ha sido labor de los agricultores; esverdad que apoyados por la sociedad, peroel protagonismo ha sido y está siendo suyo.
Ahora sucederá otro tanto, siempre quedispongan, como van a disponer, de losmedios necesarios para ejercer esas nuevasactividades. En este sentido, las accionesactuales a favor de la mejora de las infraes-tructuras, de los equipamientos y de losservicios de las zonas rurales, así como lasmedidas de instalación, de adaptación pro-fesional y de formación orientadas funda-mentalmente a los jóvenes y a las mujeres,permiten compensar la reducción del em-pleo agrario con el aumento de la actividaden otros sectores.
En la reciente Jornada temática del Li-bro Blanco sobre la Agricultura y el Desa-rrollo Rural referida al Mundo Rural, cele-brada el 23 de mayo, se ha puesto de ma-nifiesto cómo los agricultores españoles, ysus familias, participan activamente en eldesarrollo rural —generado en base a laactividad agraria— cuando las políticas in-tegradas que actúan en el mundo rural per-miten fomentar la creación de PYMES, enparticular pequeñas industrias agroalimen-tarias y artesanales, la promoción de pro-ductos de calidad del territorio o la crea-ción de redes de turismo rural.
Todo ello contribuye a compensar lapérdida de empleo agrario con la creaciónde empleo en otros sectores, y ha podidocontribuir al hecho de que actualmente nose pierda población rural en España, comovenía sucediendo desde hace muchos años.
¿Introduciría algún cambio en el organigra-ma de desarrollo rural en España: Adminis-tración, redes, grupos? Desde el punto de vista organizativo nocreo que fuera necesario introducir cam-bios que, por otra parte, no estarían en mimano. Si acaso lo que nos cabe, a quienesde uno u otro modo formamos parte de laorganización que administra el fomentodel desarrollo rural en España, es mejorarnuestros sistemas de coordinación, de co-laboración y cooperación.
Hay mucho trabajo por hacer y somosbastantes los implicados en la labor, cadauno en su ámbito, pero será tanto más fácilabordarla cuanto más se coopere, cuantomás se aúnen esfuerzos, cuanto menor sea
la dispersión. En este sentido, sí me gusta-ría avanzar y trataré de hacerlo porque es-toy seguro de que será para bien.
En las grandes ciudades, parece que la gen-te en general no conoce los beneficios quele proporcionan los trabajos del campo.¿Por qué no se les explica? ¿Cómo se con-vence a la sociedad de que es preciso desti-
si la sociedad necesita de la
agricultura para garantizarse
la seguridad que quiere y es
razonable tener, y la
agricultura es poco atractiva
como negocio, no cabe otra
cosa que apoyarla con
recursos de la sociedad, con
recursos públicos”
otoño 2002 • tierra sur 17
nar presupuestos elevados para la pobla-ción agraria?Creo haber respondido en parte esta cues-tión, aunque no renuncio a seguir tratandode ella. El problema del desconocimientode los beneficios que proporcionan los tra-bajos del campo, que usted sugiere, tienesu base en que los productos del campono han dejado de acudir a la cita diaria de
las mesas españolas desde hace casi 40años. Esto, evidentemente, es una buenanoticia, pero como usted también sabe, poreso mismo no es noticia y, en eso todostenemos nuestra parte de responsabilidad;los medios de comunicación también.
En cuanto a cómo convencer a la socie-dad de la necesidad de destinar dinero a laagricultura aun cuando puede haber muchospuntos de vista, se puede argumentar di-ciendo que la nuestra es una sociedad delbienestar porque satisface muchas necesi-dades (de alimentación, salud, educación,energía, transportes, comunicaciones, ocio,recreo, entre otras). Creo que hay que citara la alimentación, en primer lugar, porque,sin ella, todo lo demás sobra. Pues bien, ga-rantizar la cobertura de esas necesidades daseguridad y confianza en el futuro, al con-junto de la sociedad y a sus individuos. Lasociedad ha elegido tener seguridad alimen-taria, en cantidad y calidad, y la base de esaseguridad está en la agricultura. Pero la agri-cultura es un negocio de alto riesgo y bajaremuneración y, por tanto, menos atractivorespecto a otros posibles, por lo que la ini-ciativa privada no acude a él, como lo hacea otros. Sin apoyos, la actividad agraria po-dría abandonarse y el abandono de lo agra-rio repercutiría en todo el sistema agroali-mentario (particularmente, en el sector in-dustrial), que se debilitaría. Si la sociedadnecesita de la agricultura para garantizarse laseguridad que quiere y es razonable tener, yla agricultura es poco atractiva como nego-cio, no cabe otra cosa que apoyarla con re-cursos de la sociedad, con recursos públicos,como por otra parte es habitual en socie-dades como las nuestras, como por ejem-plo Estados Unidos, Canadá o Japón.
Ya sé que este planteamiento es discuti-ble y que caben otras alternativas, pero esimportante tener en cuenta lo que hacenquienes se enfrentan a problemas semejan-tes a los nuestros.
La política de comunicación de la Admi-nistración central en relación con el desa-rrollo rural parece poco ambiciosa. En lospueblos todavía hay mucha gente que nisiquiera conoce los programas de desarro-llo. ¿El Gobierno no considerada prioritarioel desarrollo rural en España?No lo veo yo así. Como usted sabe bien,en comunicación, como en otros órdenesde la vida, no se acaba nunca, por lo que elhecho de que haya gente que no conozcala existencia de los programas de desarro-llo, a la que alude, resulta estimulante para
hacer llegar a todo el mundo el mensajede las posibilidades que ofrece el desarrollorural, pero no debe tomarse como un indi-cador de la política de comunicación de laAdministración General del Estado y delas Administraciones autonómicas.
En cuanto a la consideración del Go-bierno sobre el desarrollo rural en España,no le quepa duda de que es de máximaprioridad. Se está apostando fuertementepor estas iniciativas y buena prueba de elloes que el gasto público total previsto para eldesarrollo rural, en el período 2000-2006,alcanza la cifra de 14.074 millones de eu-ros, que equivalen a 2,3 billones de pesetas.
Hay quién piensa que los programas LEA-DER o PRODER son parches y no cimien-tos. ¿Qué argumentos puede ofrecer en sudefensa?Muchos, pero para no extenderme dema-siado diré que se trata de programas quesirven para dar confianza al trabajo en gru-po, tan necesario en nuestra sociedad; paraapoyar iniciativas que surgen del propioámbito local, con lo que eso supone para laautoestima de los proponentes; para traba-jar por el futuro de nuestros pueblos, quesiguen teniendo tanto que enseñar a lasciudades en cuanto a forma y modo de vi-vir… Y todo esto, trabajando en perma-nente conexión, unos grupos con otros, in-tercambiando información continuamen-te, aprendiendo sin parar… Si esto no soncimientos de una nueva forma de enten-der el trabajo en común por una causa no-ble, que venga Dios y lo vea.
Es evidente que a veces las luchas políticaspueden entorpecer la gestión, también enmateria de desarrollo rural. ¿Realmente soninevitables?Lo de lucha lo quiero entender en el tonocoloquial en el que hablamos, pero no creoque sea para tanto. Lo que sí hay, son pun-tos de vista diferentes sobre las cosas y esose deja traslucir en cualquier aspecto de lavida colectiva y también en lo que se refie-re a la política de desarrollo rural. Pero esono debe entorpecer la gestión, sino al con-trario, enriquecerla en la medida en que laincorporación de visiones distintas den lu-gar a soluciones más completas de los pro-blemas que se tratan de resolver.
En definitiva, se trata de sumar y no res-tar. Si se mira así, las luchas de las que ha-blamos son positivas, por lo que no habríaque evitarlas, aunque sí conducirlas.
J. M. S. R.
da la sensación de que
los partidarios de la reforma de
la PAC considerarían que los
sistemas agroalimentarios que
operan en Europa para
garantizar la alimentación
pueden y deben funcionar con
menos apoyo público y
orientados casi en exclusiva a
la calidad de la producción”
18 ara • tierra sur • documentos
D O C U M E N
El concepto de artesanía es complejo y po-lisémico, y se aplica indistintamente a múl-tiples productos, así como a una gran varie-dad de procesos de fabricación que no hansido afectados por la mecanización. Sin du-da, la característica comúnmente admitidacomo básica y diferenciadora en la produc-ción artesana es su manualidad. El sello de“hecho a mano” es, pues, la garantía comer-cial del valor artesanal de un objeto.
Hasta la revolución industrial los oficiosartesanos fueron los encargados de surtir ala sociedad de todos los productos necesa-rios para su supervivencia. Hoy en día yano son necesarios, aunque nos encontra-mos con que los medios de comunicación,la publicidad, o bien los nuevos mercados,apuestan por lo artesanal como un valoren alza. Así, es fácil encontrar en las hela-derías, panaderías, herrerías, etcétera, elconcepto de artesano con el fin de marcar yestablecer diferencias entre sus productos yaquellos otros fabricados industrialmente oen serie. Por tanto, estamos en unos mo-mentos de revalorización de lo ‘artesano’.
Parece obvio que en algunos casos loartesano es tan sólo un cebo comercial, sinduda propiciado por la moda; en otros seasocia con hobbies y puro esnobismo y, enno pocas ocasiones, representa la reaccióna la propia sensación de insuficiencia e in-satisfacción que la evolución industrial ylas nuevas tecnologías producen en la so-ciedad. Es evidente, pues, que existe año-ranza de artesanía, puesto que ésta repre-senta en nuestra sociedad el equilibrio en-tre un desarrollo tecnológico desorbitado,que muchos de nosotros no alcanzamos nitan siquiera a comprender, y una deseada y
utópica calidad de vida. Se busca en losobjetos artesanos una exclusividad perso-nalizadora frente a la uniformidad y masi-ficación moderna, así como una vuelta aun modelo de sociedad cuyo sistema deproducción haga al hombre más dueño detodo lo que le rodea.
A lo largo de la pasada centuria surgie-ron movimientos cíclicos de recuperacióny valoración de formas de vida más natura-les, reivindicándose con ello una vuelta alcampo, el retorno a los trabajos manualesy, también, a un mayor equilibrio ecológi-co. Con anterioridad, en el siglo XIX, losartesanos y su trabajo manual pasaron, nopocas veces, a convertirse en objeto depreocupaciones románticas. De ahí que losprimeros folcloristas, atentos a las produc-ciones del pueblo y sensibilizados ante suposible desaparición, se esforzaran por re-coger sus saberes.
Consideramos que habría que acercarseal papel que juegan las artesanías dentrode los mecanismos culturales de nuestrasociedad, así como a la función que de-sempeñan económicamente y tratar deaveriguar lo que les depara el futuro. Eneste sentido nos encontramos con que lasociedad, con el paso de los años, ha idodiferenciando dos conceptos que nos pue-den parecer, a primera vista, similares. Porun lado, se pueden distinguir los oficios ar-tesanos y las artesanías rurales, que son losmantenedores de técnicas y productos tra-dicionales, restos de necesidades ruralesque tienden a desaparecer; y, por otro, elconcepto amplio de artesanías, que englo-baría todas aquellas piezas de elaboraciónmanual que están destinadas, casi exclusi-
vamente, a la decoración y al goce pura-mente estético. Se las conoce, igualmente,como artes populares.
Desde antiguo, las comunidades ruralesse rodearon de una serie de objetos utili-tarios que cubrían sus necesidades cotidia-nas. Estos objetos se realizaban con las ma-terias naturales que el propio medio geo-gráfico les brindaba y que, a pesar de su ca-rácter marcadamente funcional, no deja-ban de representar el gusto personal de surealizador. Para éste no primaban los as-pectos estéticos, sino tan sólo el dar con elresultado más eficaz y barato.
En la artesanía rural, la racionalizaciónde las formas y su adecuación a la funciónque deben realizar es lo que hace útil y be-llo el resultado. Pero, puesto que no seaprecia lo construido más allá de su fun-cionalidad práctica, el artífice queda en elanonimato o, como máximo, se le recono-ce en la comarca por su habilidad. Su des-treza es la que le ha encaminado a especia-lizarse. Este artesano, que evoluciona y seadapta a las nuevas necesidades demanda-das y a los recursos del medio en el que sedesarrolla, va modificando con el tiempono sólo la forma de producir, sino tambiénlos medios de distribución, así como lasrelaciones sociales inherentes a su activi-dad. Cuando las formas y los objetos arte-sanales no se adaptan a los cambios cultu-rales, se abandonan para pasar entonces aser objetos de estudio de etnólogos e his-toriadores.
Por otra parte, el modo de producciónindustrial no ha avanzado en todos los lu-gares al mismo ritmo, por lo que las áreas ycomarcas con mayor retraso industrial, ca-
La artesanía rural y sus razonesFrancisco Luque-Romero Albornoz
José Cobos Ruiz de Adana
AntropólogosLa artesanía hace tiempo que perdió su lugar en el mundo rural,
devorada por los productos industriales provenientes de las ciu-
dades. Pero con una nueva función estética, lejos de los fines utili-
tarios del pasado, cuenta hoy con una oportunidad de recuperar te-
rreno. En este artículo se ofrece un análisis de lo que ha represen-
tado y puede representar esta forma de producción en el futuro.
otoño 2002 • tierra sur 19
tT O S
so de Andalucía, han tenido mayores faci-lidades para prolongar la existencia de susproductos artesanos. Tendríamos queapuntar que, con el paso de los años, losnúcleos rurales de Andalucía se transfor-maron en agrociudades en las que, aun sinperder su carácter preindustrial, se fue con-solidando el asentamiento de artesanos en-tre sus pobladores. Parece obvio que laagrociudad necesita cubrir unas necesida-des cotidianas y, por ello cuenta con unartesanado orientado a la elaboración debienes de consumo y de objetos utilitarios.
Habría que indicar que entre el artesa-nado urbano y el rural existen diferenciasnotables. El artesanado urbano es especia-lista, es decir, se dedica exclusivamente asu oficio y vive de las ganancias que le re-porta su trabajo. El taller es el lugar de for-
mación-producción y, constituye, juntocon la vivienda, una misma unidad. Porcontraposición al artesano rural, el urbanono se autoabastece y tiende, casi siempre, aguardar una cantidad de productos en re-serva para los futuros posibles comprado-res. Entre estos últimos y los artesanosexiste habitualmente una diferenciación declase social. Sus clientes proceden de lasclases medias-altas, altas e incluso de lamisma Iglesia. Sus producciones se elabo-ran con materias primas caras y tienen unproceso de creación complejo y refinado.Son productos de alto costo y con un ca-rácter suntuario que destaca por encima delo meramente funcional.
El artesano de la ciudad está, por reglageneral, más abierto a las novedades crea-tivas, a los nuevos diseños y, también, a
an sólo aquellas
artesanías que encuentren
el equilibrio entre las formas
tradicionales de producción
y aprendizaje, y
los modernos sistemas
productivos –comercialización
y diseño– podrán
mantenerse y pervivir
20 ara • tierra sur • documentos
los avances tecnológicos. Así, por ejem-plo, un orfebre trabajará con arreglo al es-tilo predominante en su época, pero unaladrero o un espartero lo harán, por reglageneral, como lo vieron hacer a sus ante-pasados o, lo que es lo mismo, sin modifi-car técnicas y formas. Con la introducciónde las nuevas tecnologías a lo largo de losaños, el artesano rural tendió a desaparecer,mientras que el urbano, obligado a cam-biar al ritmo de la modernización, hubode transformar cada cierto tiempo sus dise-ños para industrializarse, en las fases inter-medias de producción, si quería manteneruna competitividad con los restantesmiembros de su sector.
Por otro lado, tendríamos que apuntarque cuando la artesanía no se adecua a lademanda, o bien ya no es necesaria, o suproducción está descontextualizada y esajena a la funcionalidad que la originó, tien-de a desaparecer. Y cuando desaparece, conella no sólo se pierde la producción de unosobjetos, sino también un vocabulario, unosmodos de hacer y unas determinadas for-mas de vida. Así, cada día vemos cómo de-saparece un artesano y, ante ello, no debe-ríamos caer en el dramatismo ni tampocoen el más puro sentimentalismo.
En la actualidad, los productos artesana-les de finalidad utilitaria están en clara des-ventaja en relación con los artículos indus-triales que nos encontramos en el mercadoy, tal vez por esta razón, aquellos artesanosque se dedicaban a su producción desapare-cen. En otras ocasiones, sin embargo, pier-den el rumbo y se dedican entonces a lacreación de objetos de gusto dudoso, paraservir como souvenir a turistas. Sin duda, el
ejemplo paradigmático que mejor ilustra loexpuesto es el de la alfarería. En nuestrosdías la alfarería y la cerámica son objeto decoleccionismo, de exposición en museos yvitrinas de nuestras casas. Sin embargo, has-ta no hace mucho tiempo, servían para con-tener y transportar líquidos, cocinar y algu-nos otros menesteres, siendo su lugar habi-tual la cocina y la despensa.
Las actividades artesanales de carácterrural con el paso de los años se fueron ex-tinguiendo, lo mismo que los profesionalesque las llevaban a cabo, siendo sustituidaslas mismas por productos procedentes delexterior. Es evidente que, en otro tiempo,el campesino andaluz ligaba su propia exis-tencia a la de los diferentes artesanos quedesarrollaban su actividad dentro de la co-munidad, tales como herreros, alfareros,talabarteros, etcétera, los cuales, al desa-parecer, hicieron que se incrementara ladependencia del exterior de forma nota-ble. Con el tiempo, la ciudad y los pro-ductos industriales fueron haciendo de-pendientes a las zonas rurales, conformeiba suministrándoles cuanto necesitaban,perdiendo así sus habitantes no sólo la po-sibilidad de abastecimiento que durantecenturias tuvieron, sino también la poten-cialidad para transformar los productos ru-rales o, lo que es lo mismo, su propia capa-cidad artesanal.
Probablemente, una transformación in-dustrial de los productos propios, sin quesalieran por completo de la comunidad, talvez hubiera sido una solución en las zonasrurales andaluzas para la producción artesa-nal, sobre todo cuando se produjo la ferozcompetencia de los productos del exterior.
conviene advertir que el encarecimiento sufrido
por los productos artesanos, cuando hubieron de
adaptarse a nuevos fines como el comercio turístico, o bien
el objeto de lujo, es relativamente reciente en los medios
campesinos de Andalucía
otoño 2002 • tierra sur 21
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Comunitarias.
la racionalización de las formas y su adecuación a la
función que deben realizar es lo que hace útil y bello el
resultado en la artesanía rural
la contratación de aprendices, quienes enun futuro pueden decidir la supervivenciadel sector. Pero, todo esto, siempre y cuan-do los propios artesanos no desvirtúen sussaberes, las técnicas y los modelos, puestoque ellos son un componente más del pa-trimonio que, en nuestro caso, forma tam-bién parte de la identidad andaluza y quecomo tal debería ser valorado, conservadoy promovido.
¿Cómo se explica, entonces, que en estaszonas se claudicara ante la invasión externade productos, abandonando sus propiosmedios de producción en beneficio deotros llegados en peores condiciones eco-nómicas? Conviene advertir que el encare-cimiento sufrido por los productos artesa-nos, cuando éstos hubieron de adaptarse anuevos fines como el comercio turístico, obien el objeto de lujo, es relativamente re-ciente en los medios campesinos de nuestraregión. Porque, cuando no habían perdidoaún su función de autoabastecimiento, co-mo bien apunta Limón Delgado, teníanunos precios tan bajos que contradecían to-das las leyes económicas modernas, sobretodo en lo referente al costo en horas detrabajo y a la ley de la oferta y la demanda.Antes el precio de los productos reflejaba laestrecha vinculación que existía con laclientela habitual y estaba más relacionadocon el material empleado que con las horasinvertidas en el trabajo.
No debemos, pues, engañarnos creyen-do en un porvenir halagüeño para las arte-sanías rurales. Debemos, más bien, hacer-nos a la idea de que muchas de ellas estánabocadas irremediablemente a su desapari-ción. Tan sólo aquellas que encuentren elequilibrio entre las formas tradicionales de
producción y aprendizaje, y los modernossistemas productivos –comercialización ydiseño– podrán mantenerse y pervivir.Hoy en día son ya muy escasas las necesi-dades para las que se precisa el puro traba-jo artesano, de manera que la mayoría desus producciones se han orientado, casi enexclusiva, hacia el ámbito ornamental.
Para concluir apuntaremos, una vez más,que la supervivencia de algunas de estas ar-tesanías está en manos no sólo de los pro-pios artesanos sino también de la Adminis-tración, que ha tomado conciencia del im-portante papel socioeconómico que siguendesempeñando como fuente de riqueza ymotor de empleo, si se tiene en cuenta labaja inversión requerida para la creación desus puestos de trabajo. Por otra parte, lapromoción de la artesanía es un factor im-portante para intentar frenar, de alguna for-ma, el éxodo a las ciudades, fijando así a lapoblación rural en su espacio tradicional.La Administración debería ofrecer asesora-miento, realizar estudios de viabilidad yanálisis de mercado, favorecer la formaciónde cooperativas, buscar nuevos canales decomercialización, de divulgación de la obraartesana, e incorporar sus productos comoelementos representativos de Andalucía, ali-gerando además las cargas impositivas para
22 ara • tierra sur • documentos
l
La dualidad artesanía-industria
La artesanía presenta frente a la industria una gran capacidad deadaptación y de respuesta ante los cambios, modas vanguardistas olanzamientos innovadores. No debe plantearse en ningún caso unantagonismo entre artesanía-industria, porque sería una torpezaque no conduciría más que a la desaparición de la actividad artesa-na; mientras que, por el contrario, concebir esta dualidad como al-go necesario y complementario en el panorama de la actividadeconómica de la sociedad hace que se puedan aprovechar recursoshumanos desperdiciados y mercados potenciales ocultos por laconsiguiente ganancia de bienestar social.
De otro lado, las industrias propiamente dichas tienen unas pau-tas de comportamiento bien diferentes de las que podríamos deno-minar industrias artesanas o industrias culturales, aunque se trate eneste caso de un término poco afortunado. La ventaja de esta expre-sión es que con ella queremos indicar que en la artesanía la culturaestá implicada en la estructura industrial de la economía y que tienerepercusiones en la propia economía a través de su contribución a larevitalización urbana, rehabilitación del patrimonio, el desarrolloregional, la creación de empleo, el turismo y el comercio, por poneralgunos ejemplos. La artesanía aparece así como una fuente po-tencial presente y futura de dinamismo económico en los escenariostanto locales como regionales y, cuando crece, puede ejercer unaimportante influencia sobre los niveles de empleo, absorbiendo eltrabajo procedente de los sectores en decadencia de la economía.
Artesanía y mercado de trabajo
En lo que se refiere al mercado de trabajo, la artesanía es el sectorcon mejor relación capital/puesto de trabajo, lo que permite unmayor nivel de ocupación por volumen de inversión, además depermitir el empleo de capas marginales de personal no competitivopara otras actividades industriales, agrarias o de servicios, que pue-den trabajar en la artesanía a pleno rendimiento. Precisamente elhecho de que la rentabilidad del trabajo artesano sea limitada encomparación con otras actividades, permite, por una parte, la ocu-pación de estos colectivos, por diversos motivos marginales, desdeel punto de vista de la oferta de empleo (mayores, mujeres, estu-diantes, etc) pero al mismo tiempo da lugar a que los jóvenes cria-dos en ambientes artesanos que tratan de acceder al primer empleobusquen nuevas salidas laborales fuera de la artesanía, con la consi-guiente pérdida de acervo cultural, al romperse la cadena genera-cional que, por lo común, asegura la transmisión de las técnicas pro-fesionales de padres a hijos.
Este problema, que resulta quintaesencial a la propia artesanía ya la evolución de los tiempos, es de difícil solución, ya que el sector
Artesanía y empleo José María Casado Raigón
Catedrático de Economía Aplica-
da de la Universidad de Córdoba
Desde el punto de vista de la creación de empleo, la artesanía representa un actividad con
grandes posibilidades, pero necesita un apoyo decidido de las administraciones. Sin medidas
de estímulo específicas, los artesanos van a encontrar cada vez mayores dificultades para renta-
bilizar su trabajo. En este artículo se exponen algunas medidas que servirían para potenciar la ar-
tesanía y crear empleo en el sector.
as instituciones no parecen tener una
voluntad política decidida en materia
de mantenimiento y creación de empleo
en la artesanía
artesano parece, a pesar de necesitarlo, estar ausente de las grandeslíneas de ayuda al desarrollo. En efecto, las instituciones no parecentener una voluntad política decidida en materia de mantenimiento ycreación de empleo en la artesanía, como lo prueba el hecho de queentre las medidas para la modernización y fomento de la artesaníaandaluza no se contemplan acciones directas a este respecto (polí-ticas activas), siendo lo único destacable en materia de empleo unepígrafe (véase Orden de 19 de febrero de 1999) relativo a ‘Perfec-cionamiento profesional: asistencia a programas formativos, orga-nización de cursos de formación’.
La constatación de esta escasez de ayudas no nos hace incurriren el error de que el artesano deba escudarse en las subvenciones,sino muy al contrario, debe tomar una posición activa, explorandonuevas fórmulas de producción, organización, comercialización,etc, que le permitan mantenerse en el mercado. Efectivamente,existen situaciones concretas que deben estudiarse en cuanto a laoportunidad de ayudas a las empresas artesanales, en función:
—Del sector de actividad correspondiente (sector muy intensivoen mano de obra o en capital, sectores tradicionales o sectores in-novadores);
• Del ciclo vital de la empresa (creación, desarrollo, trasmisión);• De determinados grupos objeto de preocupación (jóvenes em-
presarios, mujeres empresarias, etc.), que representan un poten-cial por explotar en materia de creación de puestos de trabajo.
En todo caso las ayudas deberían ir en la línea del artículo 130.1de la Constitución Española: "Los poderes públicos atenderán a lamodernización y desarrollo de todos los sectores económicos y enparticular de la agricultura, de la ganadería, de la pesca y de la ar-tesanía a fin de equiparar el nivel de vida de todos los españoles".Pues bien, ese marco legal particular del que gozan los demás sec-tores citados en el art. 130.1 no existe para la artesanía. Muy al con-trario, parece que existe un control fiscal implacable que contribu-ye a un abandono progresivo del ejercicio de los oficios artesanales,
otoño 2002 • tierra sur 23
en lugares donde no existen muchas alternativas de empleo. Sin en-trar por el momento en mayores detalles se hace necesario reducir lascargas impositivas y sociales, especialmente gravosas para los talleresy microempresas artesanas, así como simplificar los trámites y requi-sitos existentes para la creación de estas empresas, estimulando el au-toempleo y la creación artesanal en condiciones dignas.
Las microempresas artesanas y los talleres artesanos empleanen un tanto por ciento muy elevado entre uno y tres trabajadores.El marco legal actual para estos talleres actúa literalmente como uncorsé, dificultando tanto el comienzo de la actividad como su de-sarrollo, a pesar de las buenas perspectivas del productos artesanoen el mercado. Además la mayor parte de los artesanos de Españatienen la condición de trabajadores autónomos y al margen deldebate sobre la idoneidad o no del actual Régimen Especial de laSeguridad Social para los trabajadores autónomos, es necesario es-tudiar medidas específicas para la artesanía que permitan dotar demayor flexibilidad estas cargas, como por ejemplo un acceso pro-gresivo a este Régimen para el inicio de la actividad, en tanto quemedida de fomento del empleo en el sector. La medida es de unalógica inapelable, ya que si un empresario puede contratar a un tra-bajador como aprendiz, con condiciones especiales, un trabajadorautónomo tiene derecho a contratarse a sí mismo, siendo como esen la mayoría de los casos autodidacta.
Como se sabe, las microempresas constituyen la mayor partede las empresas artesanas y son las unidades de producción quecuentan con el mayor potencial como generadoras de empleo, co-mo demuestra el elevado número de puestos de trabajo que se hancreado a lo largo del último año. Esta circunstancia, unida al pro-centaje nada desdeñable de la población activa empleada por elsector de la artesanía, ratifica la necesidad de crear un entorno fa-vorable a la creación y desarrollo de microempresas y talleresartesanales.
La necesidad de acotar el ámbito de la artesanía
La falta de una definición aceptada no ya a nivel mundial, sino in-cluso europeo, de lo que se entiende por artesanía dificulta y hastapuede decirse que impide abordar con rigor la economía de los tra-bajadores especializados en esta actividad, es decir, los artesanos.En relación con esta cuestión, a la vista de las informaciones esta-dísticas disponibles en la actualidad, resulta muy difícil —imposi-ble— determinar cuántas empresas pueden ser definidas como ar-tesanales. En algunos países, el número de empresas y de emplea-dos, en sectores o subsectores que podrían ser definidos como ar-tesanales, está infradimensionado por la aplicación sin más de lasdefiniciones y criterios utilizados. Por ejemplo, según un dicta-
men del Comité Económico y Social de la Unión Europea, en Es-paña las empresas artesanales registradas son unas 15.000, cifraque creemos que es muy inferior a la realidad. En cambio, en otrospaíses donde las estimaciones sobre el artesanado se realizan sola-mente sobre el número de empresas con menos de nueve emplea-dos, se puede estar cometiendo el error opuesto.
Adoptando la genérica definición de considerar como artesanosa los que producen bienes con su sello personal —para lo que uti-lizan fundamentalmente sus manos—, cuentan con una reducidaparticipación de maquinaria y pueden emplear a un escaso númerode trabajadores, encontraremos serias dificultades para encuadrardentro del sector artesano unas actividades u otras. Igualmente, sepueden definir como artesanos los objetos producidos total o par-cialmente a mano.
Dentro de un mismo sector podemos distinguir actividades ar-tesanas de las no artesanas. En efecto, del total de actividades delsubsector del mármol en la provincia de Almería, por ejemplo, lasactividades artesanas sólo representan el 20% del total, según losdatos de la Asociación de Productos de Mármol, que consideramosplenamente fiables. Por otra parte, si tuviéramos en cuenta el cri-terio vigente en muchos países de Europa de clasificar como arte-sanos solamente las empresas que cuentan con menos de nuevetrabajadores, según los datos a los que nos referimos, en Almería nohabría muchos artesanos en el sector del mármol, ya que el tamañomedio es de 13, 3 trabajadores por empresa.
Formación para asegurar el empleo
El colectivo de trabajadores artesanos se encuentra muy dispersogeográficamente en Andalucía, utilizan tecnologías muy variadas—desde las más rudimentarias hasta las más avanzadas— y tienentambién economías muy diferentes. Además se trata de un colec-tivo de edad media comparativa avanzada y sin que, a pesar de losesfuerzos de diversas instituciones, existan enseñanzas específi-cas, sean regladas o no, que garanticen en alguna medida su con-tinuidad.
Lo cierto es que una parte importante de nuestros artesanos es-tán próximos a jubilarse o son jubilados que completan su renta tra-bajando todavía en su oficio de siempre o son personas que lo ha-cen como hobby y para completar también su renta. En este sentidohay que subrayar que la pérdida de puestos de trabajo en artesaníacomo consecuencia de la jubilación de un artesano sin su reempla-zo supone una serie de riesgos como son la pérdida de un oficio tra-dicional, la pérdida de puestos de trabajo y la pérdida de una de-manda de productos y de una cartera de pedidos.
Se hace necesaria en artesanía una formación más personalizaday flexible a fin de que se ajusten las necesidades y los medios de ca-da territorio, cuestión que en Andalucía se hace especialmenteconveniente. Para que el futuro de la artesanía sea variable, se ne-cesita ampliar el contenido de la formación, superando lo estrcita-mente técnico para abordar aspectos empresariales, legales, finan-cieros, comerciales, tecnológicos, etc. Por tanto, hay que adoptaruna formación continua.
Para finalizar, añadiré que quieran unos y otros o no lo quieran,lo sepan o no lo sepan, estoy convencido, después de un año in-tenso y sincero de contacto con la artesanía y con los artesanos, deque en un mundo donde aumenta la desigualdad y la injusticiaeconómica, se necesita un enfoque de la economía de mentalidadmás abierta y más centrada en lo humano. Y ese es precisamente elenfoque de la artesanía.
24 ara • tierra sur • documentos
La tradición artesanal en Sevilla ha inspira-do durante siglos una forma de vida, de-sempeñando un papel determinante en sucultura. La zona San Luis-Alameda de Se-villa se ha mantenido como un núcleo deartesanos a lo largo de los años, y por ello,desde que se empezó a aplicar la iniciativaComunitaria Urban —en 1996, a travésdel Ayuntamiento de Sevilla— se inicióuna línea de actuación dirigida a incentivarlos oficios tradicionales mediante el apoyoy promoción de su actividad.
Al constatar la existencia de un foco im-portante de artesanos en la zona se planteóun modelo de desarrollo basado en la ex-plotación de sus recursos endógenos, el co-nocimiento de su problemática y sus po-tencialidades. Para ello se realizó un estu-dio sobre la realidad artesanal de la zona,en la que más de 70 talleres desarrollan
una actividad específicamente artesanal:orfebres, vidrieros, escultores, tallistas, ce-ramistas...
Los artesanos mostraban una problemá-tica común: la falta de mano de obra cuali-ficada. El estudio constataba al mismotiempo el auge de la artesanía, su valora-ción y, por tanto, el incremento de su pro-ducción y mercado. Ante esta carencia,surgió la idea de recuperar la figura delaprendiz. Así nació el Programa de Inser-ción de Aprendices en Talleres Artesanales,con los objetivos de potenciar la artesanía,el empleo juvenil y la revitalización de ofi-cios tradicionales en extinción.
Un total de 23 jóvenes, de entre 16 y21 años, se formaron durante doce mesesen los talleres artesanales. En este perio-do, los aprendices no solo reciben una for-mación práctica de manos de los maestros
Programa de inserción de aprendices en talleres artesanales
Alicia Domínguez Núñez
Jefa de Negociado de Formación y Empleo
Ayuntamiento de Sevilla
La figura del aprendiz, que prácticamente desapareció a me-
diados del siglo XX, puede resultar de gran importancia en
el mantenimiento y recuperación de la artesanía, según se de-
duce de una experiencia desarrollada por el Ayuntamiento de
Sevilla al amparo de la iniciativa Urban y bajo el nombre de
Programa de Inserción de Aprendices en Talleres Artesanales. En
este artículo se recogen las conclusiones extraídas de la aplica-
ción del programa durante dos años en la zona de San Luis-
Alameda de Sevilla, núcleo tradicional de artesanos de la capital
andaluza.
e
artesanos con los que trabajan, sino quetambién asisten a clases teóricas relaciona-das con el oficio y las nuevas tecnologías.El programa subvenciona la contrataciónde los jóvenes que realizan los talleres (sa-lario mínimo interprofesional) y sufraga elcoste de materiales en la fase formativa.También contrata a un coordinador comoresponsable de realizar las tutorías y de lasupervisión y seguimiento. El programa habasado su metodología en la recuperacióndel la figura del aprendiz, clave en la for-mación profesional desde la Edad Mediahasta mediados del siglo XX, momento enel que la regulación de la relación laboral yla emergencia de centros formativos regla-dos alejaron el aprendizaje de los oficios delos centros de trabajo. Se ha consideradoque la recuperación de la formación en elpuesto de trabajo es clave para la poten-ciación de los oficios artesanales.
El aprendizaje de un oficio artesanal ne-cesita conocimientos teóricos pero, funda-mentalmente, de una sólida formaciónpráctica. Articular la formación fuera delas aulas posibilita las condiciones para elaprendizaje eficaz en estos oficios. La eva-luación del programa permite realizar al-gunas reflexiones.
l 60% de los jóvenes han seguido
trabajando con los artesanos
otoño 2002 • tierra sur 25
l
En relación con el aprendiz se ha consi-derado válido el método porque:
1. No se reproduce el modelo escolar.Algunos jóvenes responden más adecuada-mente a procesos formativos que tienencomo referente la realidad laboral.
2. Facilita la adquisición de un oficio.Muchos oficios artesanales (tallistas, vi-drieros) no pueden ser aprendidos por laausencia de centros formativos específicos.
3. Promueve cambios en la actitud delos jóvenes. El aprendiz se enfrenta a unarelación laboral real. Esto conlleva asumirresponsabilidades. Se producen cambiosen relación a la disciplina, hábitos, relacio-nes laborales...
4. Adapta el perfil profesional a la de-manda del mercado. El aprendiz se adaptaa las necesidades reales del taller y ademásse forma en las nuevas tecnologías posibi-litando nuevas vías de producción y co-mercialización a los talleres.
5. Consigue altos índices de inserciónlaboral. El 60% de los jóvenes, al concluirlas dos ediciones realizadas, han seguidotrabajando con los artesanos. Si la rela-ción maestro aprendiz es adecuada y lostalleres tienen mercado, el aprendiz tieneposibilidades de seguir trabajando en lostalleres. Se produce un conocimiento delartesano en relación a las habilidades, co-nocimientos y actitudes del aprendiz quele dan confianza en sus habilidades comotrabajador.
En relación con los artesanos el progra-ma ha posibilitado:
1. La revitalización de oficios en extin-ción. Se crea una vía para la supervivenciade oficios tradicionales en serio peligro deextinción.
2. El desarrollo de habilidades formati-vas. Los artesanos han descubierto susposibilidades y capacidades para trasmitirsus oficios. Uno de los problemas para laorganización de cursos formativos relacio-nados con algunos oficios artesanales es laausencia de docentes.
3. La rentabilidad del taller. El índiceelevado de contrataciones al finalizar losprogramas constata que los artesanos ne-cesitaban y demandaban mano de obracualificada.
Aunque los aspectos más relevantes delprograma son la inserción laboral de losaprendices y la mano de obra cualificadaque se facilita a los talleres, también se haposibilitado una relación, y por lo tanto,conocimiento y confianza, entre los arte-sanos del mismo territorio y entre estos yla Administración pública. Esto ha hechoposible la realización de otra serie de ac-tuaciones con el objetivo de promocionarla artesanía en otros ámbitos, entre los quedestacan los siguientes:
1. Creación de un servicio de informa-ción y orientación artesanal.
2. Participación en la I, II, III y IV Feriade Munarco ‘Feria de Artesanía Cofrade’.
3. Organización de la I y II exposiciónJóvenes Artesanos.
4. Participación en la Feria de Artesaníade Milán.
5. Artesanos-Net. Programa de adapta-ción tecnológica. Ha posibilitado la forma-ción en ofimática de artesanos y aprendices,la adquisición de ordenadores, diseño de unsitio web y disposición de correo electrónico.
6. Promoción del sector, a través deprensa, vídeos, exposiciones, TV, radio...
Y por último la creación de la Asocia-
ción de Artesanos Las Sirenas para la con-secución de objetivos en relación a intere-ses comunes.
Estas actuaciones han supuesto una me-jora en los sistemas de producción, la adap-tación de los artesanos a las demandas delmercado y, sobre todo, un incremento ydiversidad de sus vías de comercialización.
El Ayuntamiento de Sevilla ha apostadopor potenciar y promocionar el sector arte-sanal al ser una de las fuentes de riqueza pa-ra su desarrollo económico y cultural, y es-tán convencidos de que la metodología uti-lizada es transferible a cualquier otro terri-torio en el que los oficios tradicionales cons-tituyen una de las bases socio-económicas.
Este artículo es un resumen de la conferencia
pronunciada por la autora en las Segundas Jornadas
Técnicas de Artesanía de Andalucía.
a recuperación de la formación en el puesto de
trabajo es clave para la potenciación de los oficios
artesanales
A algunas personas les puede resultar extraño relacionar artesaníacon Internet. Son términos que en principio pueden parecer inclusoantagónicos. A la artesanía se la relaciona con la manualidad y la tra-dición, y a internet con las máquinas, la tecnología y la modernidad.Esta visión está mas cerca del tópico que de la realidad.
No solamente no son términos antagónicos, sino que en la sim-biosis de lo mejor de ambos mundos encontraremos probablemen-te una de las claves que marcará la actividad productiva y comercialen las próximas décadas. Los artesanos ofrecemos productos indi-vidualizados o realizados en series cortas pero siempre con un sellode honestidad y autenticidad. Son productos que en muchos casosse inspiran en nuestras raíces culturales y que se revelan cada vezmás necesarios y demandados por los consumidores como res-puesta a la estandarización y al fenómeno de la globalización.
Como complemento, internet nos ofrece visibilidad: la posibilidadde dar a conocer nuestros productos a miles de consumidores situadoslejos de nuestros mercados habituales. Permite a nuestros clientes po-tenciales buscar, ver y comprar multitud de productos sin moverse decasa. Cuántas veces nuestros amigos nos han enseñado un objeto de ar-
tesanía que nos ha encantado por su diseño uoriginalidad y que nos gustaría comprar, pero,claro, no se vende en ninguna tienda de lazona, porque su producción es muy limita-da. Imagínese que pudiera visitar su taller, verel trabajo de ese artesano, ponerse en contac-to con él y si lo desea finalmente compraresa pieza sin moverse de su casa.Conscientes de la importancia que internetestá jugando y va a jugar en el futuro, ydel importante papel que las AsociacionesProfesionales tienen que jugar en la intro-ducción de estas tecnologías, la Organiza-
ción de los Artesanos de España, puso en marcha el proyecto PA-SANTIC 2000, que contó con el patrocinio de la Dirección Gene-ral de Política de la Pyme del Ministerio de Economía y Hacienda,Caja Madrid y los departamentos responsables de Artesanía en 11Comunidades Autónomas.
PASANTIC 2000 sentó las bases de la modernización tecnoló-gica del sector artesano, siendo sus mayores logros la página webde la Organización de los Artesanos de España, ‘www.oficioyar-te.org’, y el programa informático Agata (aplicación de gestión yadministración para talleres artesanos) que ya utilizan más de 400talleres artesanos en todo el país.
La nueva versión AGATA 2.0 añade nuevas y potentes funcionesa un programa que destaca por su sencillez de manejo a la vez quepor sus potentes herramientas de administración y gestión. El éxitode Agata se basa, como digo, en su facilidad de uso y en la adapta-ción real a las necesidades diarias de un taller artesano (artístico ono artístico) o de cualquier microempresa de producción.
Con Agata 2.0, el artesano gestiona todo su catálogo de pro-ductos, pudiendo crear e imprimir catálogos y listas de precios, y
El director de proyectos de la Organización de los Artesanos de
España, Pablo Blanco, expone las grandes ventajas que puede
aportar internet a los artesanos, y comenta los dos principales
proyectos que ha desarrollado su organización para que el sector
obtenga el mayor beneficio posible de las nuevas tecnologías, la
web ‘oficioyarte.org’ y el programa informático Agata, un instru-
mento diseñado para atender todas las necesidades de cualquier ta-
ller de artesanía.
El programa Agata
26 ara • tierra sur • documentos
actualizarlos de forma automática al final del ejercicio. El almacénde productos terminados le permite llevar un control de las exis-tencias y movimientos en cualquier intervalo de fechas. La herra-mienta de cálculo de costes ha sido una revolución dentro de nues-tro sector.
Desde el módulo de Proveedores puede gestionar las materiasprimas que adquiere y que controla a través de su propio almacén.Podrá controlar igualmente toda la relación con sus represen-tantes. El módulo de Clientes, corazón del programa, gestiona suspedidos, albaranes de envío, facturas, facturas proforma y presu-puestos. Desde ‘Gastos’ llevará la gestión de todas las facturaspagadas por el taller con la posibilidad de imprimir diversos lis-tados, lo que le permite mantener un control y previsión total so-bre los mismos.
Con el módulo de ‘Mailing’ creará todas las cartas de contactocon clientes, proveedores etc, tanto individuales como masivas,con una versatilidad y facilidad de manejo extraordinaria.
Agata se ha convertido en la Asesoría de decenas de talleres ar-tesanos porque con sólo tocar un botón el programa elabora todoslos impresos fiscales: IVA trimestral y anual, IRPF trimestral, ope-raciones con terceros, libro de ventas y libro de gastos.
Puede descargar una versión de demostración de AGATA total-mente operativa desde nuestra web http://www.oficioyarte.org pin-chando en el apartado ‘Varios’ y después en ‘Agata’.
Nuestro sitio web pretende ser el punto de encuentro de todaslas personas que de una u otra manera están relacionadas con la ar-tesanía, cumpliendo tres objetivos fundamentales:
- Ser el centro de información sobre el sector y para el sector:legislación, libros y revistas, enlaces relacionados, escuelas, ferias,tiendas, proveedores de materias primas y herramientas, cursos,concursos, jornadas y exposiciones, etc.
- Punto de promoción de los talleres artesanos miembros denuestra organización a través del buscador de talleres y de la gale-ría donde se muestran las páginas web de nuestros socios.
- Centro de servicios web, ofreciendo registro de dominios, di-seño de páginas y alojamiento web profesional.
Se trata sin duda del sitio web de referencia de la artesanía es-pañola, superando ya las 10.000 visitas mensuales. En este mo-mento estamos trabajando en el desarrollo de proyectos que den vi-sibilidad en la red a las asociaciones miembros de la organización,dotándolas de herramientas web adecuadas y adaptadas a su reali-dad y necesidades. Insistiremos en el salto de los talleres artesanosa Internet, con diferentes niveles de proyectos, desde las páginassemilla (extremadamente simples) hasta otras mucho más comple-jas, dotadas de catálogos en línea que favorezcan la relación de losartesanos con sus clientes profesionales.
Las carencias tecnológicas que tradicionalmente presentan nosólo los talleres artesanos sino la gran mayoría de las microempre-sas españolas va poco a poco dando paso a una utilización cre-ciente y en algunas casos entusiasta de las nuevas tecnologías.
Es nuestra responsabilidad, como Organización Profesional re-presentativa del sector, marcar los caminos y establecer todo tipode ayudas para que esta transición sea lo más fluida posible, no va-ya a ser que en los próximos años no estemos en el lado bueno, sies que el profesor Castells tiene razón cuando dice que "en el fu-turo habrá dos tipos de empresas, las empresas de Internet y las em-presas muertas". Los artesanos, contra lo que algunos puedan pen-sar, no somos ajenos a este cambio vertiginoso.
La Federación de Artesanos deAndalucíaLa institución de referencia en la artesanía andaluza es la Federa-
ción de Artesanos de Andalucía (FADA), que agrupa a las diferentes
asociaciones de artesanos de la región. Su objetivo es la promoción
de sus asociados así como el apoyo en todos los aspectos de su ac-
tividad. Presta asesoramiento y suministra valiosa información sobre
eventos y de tipo administrativo: ayudas y subvenciones, requisitos
legales, convocatorias, etc. Además organiza ferias y otras activi-
dades, y promueve la asistencia a los grandes acontecimientos na-
cionales e internacionales relacionados con la artesanía.
Su cuidada imagen, reflejada en el diseño de las bolsas, mar-
capáginas y todos los productos que pone al servicio de los talleres
de la región, se está mostrando como un elemento fundamental pa-
ra trasmitir la idea de calidad que va asociada a la artesanía an-
daluza. La FADA trabaja en perfecta sintonía con Oficio y Arte,
Organización de los Artesanos de España (OAE), editora de la re-
vista Oficio y Arte y de la web oficioyarte.org.
Para ser socio de FADA hay que pertenecer a alguna de las aso-
ciaciones miembros de la Federación. Pero si alguien trabaja en una
zona donde no existe ninguna asociación, o no quiere asociarse a la
que existe, tiene la posibilidad de federarse a través de Artesanos
Andaluces Asociados, organización gestionada desde la FADA.
Cada taller artesano paga a la Federación a través de su Aso-
ciación o de manera directa una cuota de inscripción de 30'5 eu-
ros (al darse de alta) y una cuota mensual de seis euros, pagade-
ra cada seis meses (36 euros al semestre). Los pagos de las cuo-
tas dan derecho a voto en las asambleas, a pertenecer a la Orga-
nización de Artesanos de España, a recibir cada dos meses la re-
vista Oficio y Arte, a recibir cada cuatro meses la revista Con bue-
nas manos, a toda la información que la FADA estime de interés, y
a beneficiarse con un precio especial en las actividades que la FA-
DA organice. La FADA cuenta con una web desde la que ofrece in-
formación de interés para todos los artesanos andaluces y en es-
pecial para sus asociados: artesaniadeandalucia.org
Mi nombre es Concha Blanch, y me dedi-co desde hace 18 años, de forma profesio-nal, al diseño textil, habiéndome especiali-zado en pañuelos de seda natural pintadosa mano. Hago hincapié en la palabra pro-fesional, porque para mí significa ‘vivir deello’. Aunque los inicios fueron siempremuy variopintos (trabajé en el campo de ladecoración, de la arquitectura, etcétera),finalmente dediqué el cien por cien de mienergía hacia el mundo de la moda, y másconcretamente, hacia el complemento parala mujer.
En mi esquema de empresa hay algunospuntos fundamentales sobre los cuales desa-rrollo toda la dinámica del estudio-taller.Para mí, las claves para evolucionar y con-solidarse en un mercado tan agresivo son:
• Crear un producto de calidad.• Que el producto tenga un precio ase-
quible o razonable.• Que se trate de piezas actuales y, esto
es fundamental, de utilidad.• Que tengan una presentación muy
cuidada.
• Y que globalmente nuestra empresaofrezca una imagen muy profesional.
No tengo nada en contra de las ferias deartesanía, pero para mí nunca ha sido la for-ma de conseguir ingresos. No voy a entraren dar mi opinión sobre éstas, porque seríamateria para otro debate. Siempre he enfo-cado la gestión de mi empresa a ferias de ca-rácter exclusivamente profesional, como In-tergift, en Madrid, o Expohogar, en Barce-lona, y aunque conozco varias ferias euro-peas, que visito al menos una vez al año al-ternativamente, en estos momentos todanuestra producción anual está cubierta desobra por el mercado nacional. De momen-to, el mercado internacional lo tenemos enlista de espera.
Me gestiono siempre como una empresa,quiero decir, que si hay una facturación muyalta en determinados meses del año, es laempresa y no yo quien tiene ese beneficio; yde la misma manera, si hay meses flojos, estambién la empresa la que tiene pérdidas.Y si se necesita un soporte económico porencima de las posibilidades de la empresa,
El arte de vender
Concha Blanch
Aveces la presentación del producto artesano puede ser
tan importante para vender como el propio producto,
asegura Concha Blanch, una empresaria que desde hace 18
años comercializa con notable éxito los pañuelos de seda natu-
ral que pinta a mano. En este artículo explica cuáles son, según
la experiencia de su taller, las claves para convertir la artesanía
en un negocio rentable.
p
voy al banco a hacer las gestiones oportu-nas. Nunca pienso que sea una subvención ouna ayuda del gobierno autónomo quientenga que solucionarme los problemas. Y sieste problema persiste demasiado tiempo,es que ha llegado el momento de hacer unexamen exhaustivo de la gestión económicay comercial de la empresa y, por supuesto,un análisis profundo del producto que esta-mos presentando en el mercado. Debemosanalizar objetivamente si lo que produci-mos es lo que el mercado demanda o si es loadecuado para el mercado al que queremosdirigirnos. Generalmente, ahí solemos fallartodos los que producimos creaciones pro-pias: nunca pensamos que no lo estamos ha-ciendo adecuadamente, sino que nuestroego nos lleva a creer siempre que el merca-do no entiende nuestras piezas.
Al trabajar en el textil y, principalmente,en complementos para la mujer, las dos tem-poradas de moda del año, otoño-invierno yprimavera-verano, nos obligan a planteardos colecciones completamente diferentesen cuanto a colores y texturas. Nosotros es-tudiamos mucho la colección, hacemos mu-chas pruebas, y cuando finalmente ya cree-mos tener el producto acabado, hacemos loque podemos denominar un estudio de mer-cado. Enseñamos las piezas a varios seg-mentos de consumidores a los que van diri-gidas y ello nos da un baremo muy intere-sante de la producción que deberemos hacerde cada producto o dónde tenemos quecambiar algo o, sencillamente, no presen-tar un producto porque ya hemos visto queno tiene suficiente aceptación. Todo estonos permite preparar un stock de productoantes de ir a la feria y poder servir de unaforma casi inmediata días después de que elcliente nos haya hecho el pedido.
Uno de los puntos fundamentales en quese basa mi intervención en estas Jornadas esla imagen de empresa y presentación delproducto. Evidentemente, en 18 años ha ha-bido una evolución y adecuación importan-tes. Nuestra imagen de empresa, aunque haido variando en cuanto a color y diseño,
uedes fracasar con un producto, pero
el fracaso no es tan importante si al final
sabes en qué te has equivocado
otoño 2002 • tierra sur 29
c
siempre se ha mantenido fiel al logo que,en mi caso concreto, es mi propia firma, conla que van identificadas todas las piezas quesalen del taller. A partir de ese logo se ha de-sarrollado toda la línea de papel de empresa,albaranes, bloc de pedidos, tarjetas, etiquetascon las que se identifican las cajas del pro-ducto, y cada producto, a su vez, va acom-pañado de un certificado que autentifica sucalidad artesana. No es lo mismo vender unpañuelo a secas que vender un pañuelo quelleva su propio embalaje, su etiqueta, su cer-tificado, etcétera... Aunque el costo es supe-rior, el comprador lo valora mucho y nuncaha sido un inconveniente el que valga más,sino todo lo contrario.
En las dos colecciones que presentamosal año siempre sacamos un producto quenormalmente por su presentación, su eti-queta, sabemos seguro que estamos delantede un número uno en ventas de la tempora-da. Y a veces no por el pañuelo o la pieza,sino por cómo lo presentamos. Para que seentienda, daré un ejemplo: en el año 99 lan-zamos una colección denominada ‘Corazónde melón’, que era y es, porque aún formaparte de nuestros productos-estrella, un pa-ñuelo de 55x55, justo la medida del cuello,cuando empezaron las más avanzadas a lle-varlo. El pañuelo en sí no tenía demasiadomérito si no era por el colorido; presentadotal cual, la verdad, no era nada del otromundo, pero se me ocurrió doblarlo y colo-carlo dentro de una caja de CD y fue justa-mente esta forma de sacarlo al mercado laque lo convirtió en un número uno de ven-tas en esa temporada y en la siguiente. De
este modelo en concreto hemos hecho co-lecciones para muchísimas empresas, perso-nalizándolo, bien en el diseño del pañuelo,bien en la carátula de la cara posterior.
Para dar una idea de para quién hemostrabajado puedo decir que para el museo Pi-casso de Barcelona, el museo de Historia deBarcelona, Acuarium de San Sebastián, mu-seo de la Naturaleza y El Hombre, de Tene-rife; museo Nacional de Bellas Artes de Cu-ba, plaza de toros de la Maestranza de Sevi-lla, y una infinidad de empresas no menosimportantes, pero sí menos conocidas. Elaño pasado, en la colección de inviernotambién tuvimos, porque lo buscamos, otroboom de ventas, en otro pañuelo queaisladamente no tenía nada de especial. Hi-cimos un tratamiento al tejido, arrugándolo,y lo presentamos en una caja cuadrada de12x12x12, forrada de color plata, y el pa-ñuelo era una bola redonda con unas pe-queñas antenas metálicas. Esta colección sellama O.C.N.I. (Objeto Cuello No Identifi-cado). Probablemente el pañuelo presentadotal cual, con un tamaño de 180 x 90, en co-lores más o menos bonitos, no hubiera teni-do la aceptación que tuvo ayudado por laparafernalia de su presentación y de la dobleintención del nombre de la colección. En laprimera feria se vendieron 693 unidades, to-do un éxito para un taller que produce arte-sanalmente. Superó en el cien por cien elstock que habíamos preparado para la feria.
Se ve ya más o menos la línea que tene-mos en el taller. He dado un ejemplo, comopodía dar cinco. Todo lo podría resumir enuna palabra, que es filosofía de empresa y fi-
losofía de producto. Se me pueden escaparcosas, pero que sean las mínimas. Preparomuy bien las temporadas porque del éxito ofracaso de la colección depende el trabajode cuatro personas, que somos las que inte-gramos ‘Concha Blanch’, y es una responsa-bilidad muy asumida. No tenemos represen-tantes ni hacemos visitas posteriores a clien-tes. Por tanto, nos jugamos a una sola cartala producción anual del taller, una parte conla colección de invierno y otra con la colec-ción de verano. Puedes fracasar con un pro-ducto, pero el fracaso no es tan importantesi al final de una feria sabes en qué te hasequivocado. Siempre hay una explicaciónpara todo; lo importante es saber encontrar-la. Yo, personalmente, hace mucho tiempoque aprendí que cada día estoy aprendiendoalgo nuevo. Hubo un tiempo en que me da-ba mucha rabia comprobar que después detantos años de profesión todavía había cosasa diario que me sorprendían y luego penséque era justo porque nunca me estancaba ysiempre estaba investigando y probando.
Quiero terminar diciendo que creo sin-ceramente que las microempresas de pro-ducciones artesanas tenemos un futuro bri-llante y que debemos aprender a andar porla vida comercial con los oídos alerta y losojos muy abiertos para captar todo lo quesucede a nuestro alrededor: ser capaces dever hacia dónde van las tendencias del mer-cado y escuchar con atención lo que el con-sumidor pide. Hacer lo contrario es estre-llarse contra un muro que se llama fracaso.Señoras y señores, no debemos mirarnos lospies, sino el horizonte.
reo sinceramente que las microempresas de producciones artesanas tenemos
un futuro brillante, siempre que sepamos ver hacia dónde van las tendencias del
mercado y lo que el consumidor pide
30 ara • tierra sur • documentos
Hace 14 años que instalé mi taller y casi mivida en Benamahoma, un pequeño pueblode la Sierra de Grazalema rodeado de mon-tañas, donde corre el agua abundantemente,y la tierra está cubierta de un verde casi eter-no. Las piezas que nacen de mi taller quizátraten de evocar este entorno extraordinarioen el que vivo. Entre ellas, hay esculturas depersonajes que andan por las calles o des-cansan en los bancos de la plaza, abuelosjubilados y también duendes y hadas quesurgen en la imaginación durante mis cami-natas por el bosque. El taller está lleno deduendes y hadas.
Todas las esculturas o piezas son origi-nales y únicas. En cuanto a su elaboración,empleo barros refractarios y gres. Los mo-tivos decorativos se inspiran principalmen-te en la flora del parque natural, desde lapeonia o el espino majoleto hasta especiesde árboles autóctonas, como el quejigo, elpinsapo, alcornoque, encina... Estos moti-vos me sirven para decorar platos, cuencos,lámparas o murales tanto para el interiorde la casa como para el exterior. Tambiénrealizo otros trabajos más personales, quenacen en periodos de tiempo muy concre-tos. Se trata de vasijas con caras moldeadas,o con dibujos, en las que utilizo colores dealta temperatura (1.280º).
Soy de Jerez de la Frontera, pero mi tra-bajo como artesana empezó en Santander,en la aldea de Arenal de Penagos, muy pró-xima a Solares. Un verano, cuando tenía 19años, decidí ir allí de vacaciones y ya novolví: pasé en aquella aldea tres años conun grupo de amigos, todos dedicados a tra-bajos artísticos, en una gran caserón cánta-bro sobre la ladera de una montaña, dondeuno pintaba, otro esculpía o, como era micaso, modelaba. Durante mucho tiempo me
dediqué a levantar a escala las edificacionesde Santillana del Mar, que vendía a unatienda de esta pequeña y magnífica ciudad.Las coloreaba e incluso reproducía el dete-rioro que pudieran tener las fachadas.
Notaba que esto se me daba bien, comose le daba bien a mi padre, que siempre habíasido muy aficionado a modelar, y a mi her-mana, hoy también dedicada de lleno a lacerámica artística. Así que había conseguidovivir de lo que me gustaba y pensé en probarfortuna en Madrid, pero la experiencia de lagran ciudad no fue buena. Después de tresmeses, volví finalmente a Jerez, mi tierra, yabrí un taller en el centro. La experienciatampoco fue del todo satisfactoria, y enton-ces comprendí que me atraía la vida del pue-blo pequeño. Había ido a Benamahoma devacaciones, de niña, y me gustaba, de modoque me instalé allí.
Para un artesano, las ventajas de trabajaren un sitio como éste son evidentes: tranqui-lidad, el contacto con la naturaleza, soledad...¿Desventajas? La poca vida cultural. Benama-homa, no obstante, es un pueblo bien comu-nicado, lo que me permite viajar con muchafrecuencia a Jerez o Sevilla. Siempre tuve enmente que quería vivir en un pueblo perocon buenas conexiones con grandes ciuda-des. En estos 14 años, mi trabajo ha experi-mentado una transformación total. Ahora tra-bajo mucho por encargo, y tengo muy encuenta que mi actividad artesanal es una pro-fesión de la que tengo que vivir. A mí megusta mucho la escultura artística, pero si tie-nes que ganarte la vida resulta muy difícil de-dicarte a ello por completo. Tienes que pen-sar en lo que te piden. Tienes que adaptarte alas circunstancias de cada sitio. Cuando vivíaen Santander, me pagaban muy bien los tra-bajos. Donde vivo ahora es más difícil porque
Una artesana en BenamahomaMercedes Jiménez
Mercedes Jiménez es una artesana rural, con muchos años
de profesión en el pequeño pueblo de Benamahoma, en la
sierra de Cádiz. Allí mantiene un taller que le ha permitido vivir
hasta hoy de su trabajo, la cerámica decorativa y artística.
la renta y el nivel cultural son menos eleva-dos. Como muestra puedo decir que en laactualidad vendo trabajos al mismo precioque hace 18 años, cuando empecé, a pesar delo que ha subido todo. Algunas piezas sí laspongo a un precio alto porque son obras sin-gulares, y acabo vendiéndolas siempre a per-sonas que vienen de Madrid o de cualquierotra gran ciudad.
Desde hace unos años tengo un taller in-dependiente de mi vivienda, en una casa an-tigua, como tenía en Arenal, y en un salónsituado a la entrada expongo las obras al pú-blico. También vendo en ferias, o en exposi-ciones —en febrero expuse en Jerez y esteverano, en Chipiona—, y mantengo algunosclientes desde hace mucho tiempo a los quemando piezas. Se trata de clientes que mecompran directamente o bien de tiendas, deGranada, Madrid, Santiago de Composte-la... También me encargan trabajos algunosorganismos, pero siempre de forma muypersonalizada. Mi producción es muy pe-queña y no tiene mucho sentido tratar deaumentar los puntos de venta.
Me gustaría decir, para terminar, que sepuede vivir de la artesanía en un pequeñopueblo, si bien es necesario contar con unamayor protección social. Los artesanos, comogran parte de los trabajadores autónomos, vi-vimos en una situación precaria, expuestos ala ruina si sobreviene una larga enfermedad ocualquier otra circunstancia que nos impidatrabajar a pleno rendimiento. Y eso es comouna espada de Damocles, como una amenazaque siempre está ahí.
otoño 2002 • tierra sur 31
Escuela-taller Molina Lario
El trabajo finoFernando Ramos Rivas
Director de la escuela-taller Molina Lario
no sé si sería bueno inventarnos
el eslógan de ‘diseño y montaje a mano’
o semiartesanal
Puede compatibilizarse la labor de artesanos, industrias artesa-nales, nuevos productos de síntesis, nuevas tecnologías y nuevosprocedimientos de producción sin perjuicio de la utilidad, la ela-boración, la belleza, lo ergonómico, lo funcional, etc. No podemosdesechar la utilización de productos orgánicos de síntesis en larestauración de la piedra, que no cabe duda de que se realiza de for-ma artesanal y con procedimientos manuales. Al momento de fijarlos lazos de un ensamble en ebanistería no usaremos cola animal,usaremos cola de contacto, de fabricación sintética y de un com-portamiento muchísimo más estable y duradero. ¡Ojo! Los lazos delensamble los hemos ejecutado a máquina. Debemos hacer entenderal mercado que la máquina la inventó, la ejecutó y la utiliza elhombre para sufrir menos fatiga. De aquí a las fabricaciones enserie normalizadas aún dista mucho. No sé si sería bueno inventar-nos el eslogan de ‘diseño y montaje a mano’ o semiartesanal. La so-ciedad nos exige siempre diseño, calidad y precio, y necesaria-mente hay que entender que debemos poner los mejores medios anuestro alcance. La utilidad viene determinada por un cierto gradode necesidad.
Decíamos que la utilidad o el uso determinaba la realización deelementos o utensilios artesanales. Hoy, en sentido inverso, podría-mos decir: usando damos carta de naturaleza en el tiempo a nuestropatrimonio histórico y, con ello, continuidad a nuestros oficios ar-tesanos. La experiencia obtenida en las labores de mantenimiento,conservación y restauración por la escuela-taller Molina Lario en laCatedral de Málaga nos muestra la necesidad de crear especializa-ciones dentro de los oficios para atender estas necesidades.
Declarada Escuela-taller Permanente por acuerdo del Ministeriode Trabajo, el Obispado y el Ayuntamiento de Málaga, lleva cincoaños continuados de trabajos con magnífico rendimiento y óptimacalidad. Pero, con independencia de la calidad de lo realizado porun número de alumnos aproximado de 250, es importante destacarque un 94% ha logrado la inserción laboral o han decidido crear ta-lleres, por ejemplo de vidrieras artísticas, mantenimiento de suelos,albañilería, carpintería, forja, etc. De los cinco módulos con que co-menzó la escuela en diciembre de 1996, ha pasado hoy a contarcon 60 alumnos en los siguientes ocho módulos: cantería, albañile-ría, carpintería, forja-cerrajería, vidriera artística, delineación-car-tografía, orfebrería y bordados.
32 ara • tierra sur • experiencias
E X P E R I E N C I A S
pLa situaciones de pobreza en el medio ruralchileno se caracterizan en los últimos añospor un doble proceso: estancamiento enlos ingresos de la población y, a la vez, unamejora en los accesos a servicios básicos.Por otra parte, existen grandes diferenciasentre unas zonas y otras, lo que se está tra-duciendo, en relación con las opciones dedesarrollo económico territorial, en opor-tunidades muy diferentes para la pobla-ción, tanto en materia de ingresos comoen calidad de vida.
Debido a este estancamiento de los in-gresos y al proceso de disminución relativade la actividad agrícola en relación con la‘extra-agrícola’ en las zonas empobrecidas,el Gobierno de Chile se planteó la necesi-dad de desarrollar en el medio rural unplan innovador en materia de gestión pú-blica, y de esta necesidad surge la Red deCooperación Institucional para Zonas dePobreza Rural (PRORURAL), con el ob-jeto de mejorar las condiciones de vida delos habitantes y trabajadores de zonas ru-rales empobrecidas. El programa pretendedinamizar las economías locales con unavisión territorial, multisectorial y partici-pativa. La Red PRORURAL se enmarcadentro de las ‘Bases para una Política de
Superación de la Pobreza Rural’, aproba-das por el Consejo de Ministros chilenoasí como del plan del Gobierno (1998-2000) para la reducción de la pobreza ru-ral en Chile. Una vez trazadas las líneasgenerales, el programa se ha articuladoen torno a dos grandes objetivos: desa-rrollo de planes de inversión en las re-giones y zonas seleccionadas, y formula-ción de propuestas para erradicar la po-breza en el mundo rural.
En cuanto al primer objetivo, se estándesarrollando experiencias concretas en lascinco regiones definidas para una primerafase, y se están gestando ‘Planes de inver-sión zonal’ en doce zonas rurales empo-brecidas, que incluyen en conjunto un totalde 67 comunas. Cada una de ellas ha esta-blecido un programa de desarrollo territo-rial a medio plazo, basándose en los ejesestratégicos acordados. Estas iniciativas al-canzaron un monto global de alrededor de10 millones de dólares, aportados por lasdistintas instituciones integradas en PRO-RURAL, para el periodo 2001-2002.
El segundo pilar del programa, la for-mulación de propuestas, se planteó comoun debate muy participativo en torno a laidea de una nueva ruralidad para el Chile
Red PRORURALEl desarrollo rural en Chile
El Gobierno chileno ha creado un programa, denominado PRORURAL, para desarrollar las zo-
nas rurales más desfavorecidas del país. Financiado con cargo a los presupuestos generales
del Estado, PRORURAL presenta muchas similitudes con los programas europeos, pero también
algunas diferencias notables. Se trata de una experiencia innovadora, cuya finalidad principal
es buscar nuevos mecanismos de gestión y nuevas políticas públicas en el mundo rural.
RORURAL pretende
dinamizar las economías
rurales con una visión
territorial, multisectorial
y participativa
otoño 2002 • tierra sur 33
del año 2010. Del debate tenía que surgiruna formulación de propuestas en torno ala Adecuación de los instrumentos y políti-cas públicas para esta nueva ruralidad, di-rigidas en particular a favorecer la igualdadde oportunidades de la población ruralfrente al resto del país, y al aumento de losingresos y bienestar de quienes viven en elmedio rural en condiciones de pobreza ymarginación.
El ciclo de talleres y seminarios reali-zado para la formulación de propuestas sedesarrolló durante un periodo de siete me-ses, en los años 1999-2000, con cerca de500 participantes provenientes de múlti-ples ámbitos del medio rural, y tanto delos niveles locales, regionales y nacionalescomo internacionales: instituciones públi-cas, Gobiernos regionales y municipales,ONGs rurales, empresarios, dirigentes deproductores rurales, expertos nacionales yde organismos internacionales, profesoresde universidad, etc.). El documento a quedio lugar este gran debate marca el rumbodel desarrollo rural en Chile, con el hori-zonte situado en el año 2010 (PRORU-RAL cuenta con una web cuya direcciónes: www.redprorural.cl).
Planes de Inversión Zonal
Definidos como un proceso de interacción entre los gobiernos regionales, los servicios
públicos participantes, las respectivas asociaciones de municipalidades y representan-
tes del sector privado y la sociedad civil local, los Planes de Inversión Zonal se desa-
rrollan siguiendo las siguientes pautas:
• En cada zona se realiza un proceso sistemático de interacción entre los diferentes
agentes de desarrollo, a fin de acordar aquellos elementos sustantivos que permitan
elaborar un proyecto de mejora socioeconómica a medio plazo.
• Sobre la base de este proyecto, se definen de forma participativa los ejes estratégicos
para el desarrollo del territorio, y se identifican las principales líneas de acción e in-
versión.
• A continuación se perfilan las iniciativas integradas de gestión e inversión, y la insti-
tución que gestiona PRORURAL en una zona determinada analiza, junto con los bene-
ficiarios potenciales, las capacidades técnicas y los recursos financieros disponibles.
• Con los acuerdos alcanzados y la identificación de las respectivas aportaciones de las
instituciones y de los particulares que participan en el proyecto, se perfila y formaliza
el Plan de Inversión Zonal, que una vez firmado por las partes en actos públicos, inicia
su etapa de ejecución.
Acuerdo de colaboración entre ARA y PRORURAL
El lunes 17 de junio de 2002 la Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía (ARA) y la Red PRORURAL
de Chile suscribieron en Granada un importante convenio de colaboración, con el objetivo de "impulsar ini-
ciativas, acciones y proyectos orientados al desarrollo de las zonas rurales de Andalucía y Chile a través del
intercambio de información, experiencias, metodologías, técnicos y agentes de desarrollo, estrategias de in-
tervención aplicables a una u otra realidad, así como la puesta en marcha de acciones coordinadas o con-
juntas propias o frente a terceros que coadyuven a los objetivos señalados". ARA favorecerá la interlocución,
colaboración y participación de las 50 Asociaciones de Desarrollo Rural (ADR) de Andalucía miembros de la
misma con PRORURAL.
Por su parte, PRORURAL favorecerá también dicha interlocución, colaboración y participación con ARA de
los actores de los Planes de Desarrollo Territorial Chilenos, así como con la Comisión Rural de la Asociación
Chilena de Municipalidades, la Coordinadora Nacional de ONG Rurales de Chile y las Organizaciones Nacio-
nales del Mundo Rural en Chile. Las entidades firmantes se comprometen a mantener permanentemente in-
formada a la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía y al Gobierno de Chile de las accio-
nes que se pongan en marcha en el marco de este Convenio de Colaboración.
Este convenio se enmarca dentro de la nueva política que preconiza tanto la Unión Europea (UE) como
el Gobierno de la Comunidad Autónoma Andaluza consistente en fomentar las acciones de cooperación in-
terregionales y transnacionales (tal y como se exigen en la nueva Iniciativa comunitaria LEADER+ y en el
Programa PRODER de Andalucía). En este sentido, la UE logró un acuerdo con Chile, en abril de 2002, con-
siderado por fuentes comunitarias como el más ambicioso e innovador jamás firmado por la UE. El convenio
incluye una zona de libre comercio de productos industriales, pesqueros y agrícolas. También se establecie-
ron convenios sobre otras materias, tales como: protección de la denominación de origen de los vinos y otras
bebidas alcohólicas, armonización de normas sanitarias y fitosanitarias, eliminación de burocracia aduanera,
libre comercio de servicios e inversiones, tratamiento igualitario en las compras gubernamentales y reglas so-
bre competencia y propiedad intelectual. Chile, que está negociando un pacto similar con Estados Unidos, le
compra a la UE por valor de 3.460 millones de euros anuales y le vende por 5.113 millones. España es el se-
gundo mayor inversor extranjero en Chile.
34 ara • tierra sur • comarcas
C O M A R C A S
La ciudad de Granada pesa mucho en laprovincia, al igual que la estación de esquíde Pradollano, La Alpujarra o la costa. Enesa batalla por dar cuenta de la propia exis-tencia al mundo, la comarca de Guadix nolo tiene ciertamente fácil, ni fuera ni dentrode la provincia, y sin embargo quizá seauno de esos lugares que concentran de ver-dad ventajas difíciles de encontrar en otraparte. Si la publicidad acertara a mostraresta comarca con un poco de énfasis segu-ro que su nombre sonaría mucho. Situadaen una plataforma, a 900 metros sobre elnivel del mar, esta tierra suele disfrutar enverano de un clima envidiable, con tem-peraturas lo suficientemente altas duranteel día como para bañarse y noches frescas,más propias en Andalucía de la primavera ode las primeras semanas del otoño.
La comarca de Guadix, que se encuen-tra en el centro de la provincia de Granada,limitando al norte con Jaén, constituye, so-bre todo desde que se abrió la autovía A-92hace 10 años, un importante nudo de co-municaciones (la conexión de Guadix conAlmería capital, último tramo de la A-92que faltaba por construir, se inauguró haceunas semanas), lo cual aporta grandes be-neficios, pero también tiene su lado nega-tivo, hasta el momento, al menos. Grana-da, situada a poco más de 50 kilómetros,queda ahora muy cerca, y su comercio hadesplazado en parte al de la ciudad deGuadix.
En los últimos años esta población deaproximadamente 20.000 habitantes ha su-frido una relativa pérdida de relevancia co-mo gran centro de servicios comarcal, yaún parece vivir en un proceso de trans-
formación, sin un horizonte muy definido.Con un hermoso y noble casco histórico,en torno a la magnífica catedral del obis-pado Guadix-Baza, el turismo le ofrece sinduda unas puertas abiertas de par en par. Yseguro que a los buenos hoteles y restau-rantes que ya existen vendrán a añadirseotros en los próximos años. Pero el turismono ha alcanzado todavía un gran protago-nismo en la actividad económica. Siguesiendo la agricultura, junto al comercio, ypor supuesto la construcción, el sector enel que Guadix basa su renta. En el resto dela comarca la agricultura también sigue te-niendo mucho peso: cereal, almendro, oli-vo, oveja, cabra, cerdo, granjas de pollos y,en menor medida, ganado vacuno, fruta-les y hortalizas, constituyen los recursosprincipales.
La comarca se extiende por una granllanura dedicada en su mayor parte al cul-tivo de secano, con predominio de grandesfincas, y justamente en torno a la ciudad deGuadix, y en una hoya perfectamente di-bujada, cuenta con una fértil zona de rega-dío donde hasta hace poco se cultivaba ca-si en exclusiva el melocotón. En el regadíola propiedad está muy repartida, lo cual aveces impide un mayor rendimiento. Por lodemás, el melocotón sale de allí sin trans-formación alguna, destinado en un 95% alas empresas de elaboración de zumos oconfituras de Murcia. El clima peculiar deGuadix produce un melocotón muy dulce,que en los mercado goza de mucho apre-cio, pero la estacionalidad de la produc-ción le resta a esta fruta rentabilidad frentea otros cultivos, y durante los últimos añosse ven cada vez más olivos y también ála-mos, que se utilizan para madera.
Una de las pocas actividades industria-les surgidas en torno a la agricultura en lacomarca es la fabricación, con la madera delos álamos, de cajas para la fruta. Existenvarias fábricas, sobre todo en Purullena yBenalúa, y en ellas encuentran muchos jó-venes, cortando y ensamblando tablillas,
GuadixUna tierra enbuen camino
A la derecha, castillo de La Calahorra. Bajo
estas líneas, Gorafe, y en la foto pequeña, Je-
res de El Marquesado.
otoño 2002 • tierra sur 35
un primer empleo. También hay que men-cionar la elaboración de embutidos de muybuena calidad en varios municipios, y vol-viendo al melocotón, las tres cooperativasagrarias, una en Purullena y otra dos enBenalúa, donde trabajan unas decenas depersonas.
Estos dos municipios, Purullena y Be-nalúa, colindantes con Guadix —separa-dos apenas por seis o siete kilómetros—muestran desde hace ya muchos años unagran iniciativa empresarial pese a su escasonúmero de habitantes: en torno a los3.000. En el colegio de Benalúa se puedever en los recreos un auténtico enjambrede niños, algo no muy frecuente en los nú-cleos rurales de su tamaño, y, como otroindicador importante de su crecimiento,también se observan numerosas edificacio-nes en construcción.
La historia de Benalúa como pequeñonúcleo industrial arranca de principios delsiglo XX, y está ligada a las inversiones dela familia Fígueres, impulsora del impo-nente ingenio del azúcar, así como de es-parteras, una fábrica de ladrillos y otras va-rias empresas. Aquella familia despertó en-tre sus vecinos un espíritu emprendedor
que ha llegado hasta nuestros días. En laactualidad pueden verse, por ejemplo, va-rias fábricas de muebles de cocina, empre-sas de embutidos e incluso una cooperativaque fabrica ladrillos. Alguien monta un ne-gocio que va bien, y al amparo de esa ideasurgen luego otras fábricas.
Purullena, travesía importante antes dela inauguración de la A-92, aún sigue man-teniendo, como estandarte de su pujanteactividad, las tiendas y muestrarios de ce-rámica que le dieron fama.
De todas formas, las industrias que secuentan en la comarca en la actualidad, to-das de pocos trabajadores, no alcanzan areducir significativamente el elevado de-sempleo, consecuencia del progresivoabandono de la agricultura.
Al escuchar al ingeniero del grupo deDesarrollo Antonio Román enumerar losmuchos recursos con que cuenta la comar-ca de Guadix, es razonable creer que a po-co que surjan iniciativas esta comarca debealcanzar un desarrollo intenso y armoniosodurante los próximos años. Según cuenta,incluso el esparto, muy ligado a la zona, esreclamado hoy por empresas de telecomu-nicaciones como una materia prima de
gran utilidad. Y si la producción agrícola setransformara allí, al menos en parte, el pa-norama económico experimentaría un pro-fundo cambio.
De momento, es el sector del turismo elque muestra mejores perspectivas en elaprovechamiento de sus recursos, extradi-narios por otra parte. Cuenta con una va-riedad de ecosistemas y paisajes excepcio-nal, con pueblos bien conservados, con unpatrimonio histórico muy rico —es la zonacon más monumentos megalíticos de Es-paña—, y además está cerca de Granada ymuy bien conectada con otras ciudades im-portantes. A ello hay que añadir una ofertade servicios y actividades muy completa.Desde el parapente o el esquí de fondohasta el automovilismo, la vela o el tirocon arco en modalidad de bosque, en elcampo de tiro del Club de Arqueros de Pu-rullena, no hay deporte que no se puedapracticar allí. Un circuito de velocidad, dospantanos, una estación de esquí de fondoen La Ragua, senderos... Además, dos fa-mosos balnearios.
La gran meseta sobre la que se asienta es-te territorio, situada entre 700 y 1.000 me-tros de altitud, está jalonada por una depre-
Al mencionar el nombre
de Guadix, todo el mun-
do piensa en las cuevas habi-
tadas, esas viviendas singula-
res que apenas se ven en otro
lugar. Hoy, convertidas mu-
chas de ellas en apartamentos
y hoteles, representan sin du-
da uno de los atractivos de la
comarca. Pero más allá de las
cuevas, estas tierras de la pro-
vincia de Granada cuentan con
un patrimonio y unos recursos
de excepción aún poco explo-
tados. El turismo ofrece gran-
des posibilidades de desarrollo, al igual que la industria agroali-
mentaria o la de la madera y el mueble, que pueden disponer de
excelentes materias primas. En estos años van surgiendo iniciati-
vas en uno u otro sector, aunque se echan en falta más.
36 ara • tierra sur • comarcas
ALGUNOS DATOS DE INTERÉS
• La Comarca de Guadix se encuentra en la Depresión Intrabética, espacio entre las cordilleras subbéticas
y penibéticas. Está formada por 33 municipios y tiene una extensión total de 2.152 km2.
• El clima tiene un marcado carácter continental, puesto que Sierra Nevada impide la influencia marítima.
• El emplazamiento de la comarca, al pie de los llamados castillos béticos, proporciona aguas abundantes
y de muy buena calidad.
• La comarca presenta una gran variedad agrológica, distiguiéndose cuatro grandes ambientes: Serranías
Subbéticas, al norte; hoyas y valles fluviales, Altiplano y Sierras Penibéticas, al sur de la comarca.
• En las faldas de Sierra Nevada, a manera de oasis y junto a los barrancos portadores del agua, se sitúan
las villas de El marquesado. Vegas, gruesos castaños, nogueras, moreras y almendros embellecen su en-
torno.
• Excavaciones arqueológicas realizadas en distintas zonas han puesto de manifiesto asentamientos del
hombre de Neandertal, del Paleolítico Superior y de la Edad de los Metales.
• Guadix tuvo un importante papel en la red romana de calzadas ya que por ella discurría la vía Augusta.
• La comarca sigue siendo, hoy por hoy, un entorno eminentemente rural en el que el agro se encuentra
fuertemente protegido gracias a las subvenciones que recibe de la P.A.C.
• En cuanto al ganado, predomina el ovino, ovino segureño, una raza autóctona, común en las comarcas
de Guadix y Baza, que desde el punto de vista gastronómico, resulta extraordinaria.
• El queso de La Calahorra, único en Andalucía elaborado a partir de leche de oveja, ha gozado siempre de
una gran reputación.
• En los últimos años han surgido numerosas granjas de pollos, unas 40 en toda la comarca, ubicadas so-
bre todo en los términos de Albuñán, Charches y Dólar. Las granjas están integradas a la hora de la dis-
tribución en mataderos de Guadix (Avigenil y otras).
• Según el número de empresas, el mapa industrial de la comarca tiene el siguiente perfil: transformación
agroalimentaria, 25,71% del total; industria de la madera y el mueble, 21,43%; producción de minerales no
metálicos, 12,55%, y la fabricación de productos metálicos, 12,86 %.
• El sector oleícola adquiere gran repercusión en la comarca, sobre todo en la zona de los Montes (12 mu-
nicipios), inserta totalmente en una Denominación de Origen.
• Aunque con muchos problemas, debido a su escasa dimensión y a baja productividad, subsisten en bue-
na parte de los municipios de la comarca actividades artesanales (cerámica, alfarería, forja, fibras vege-
tales, bordados, etc) que convendría conservar y revitalizar, ya que tienden a desaparecer, al no poder com-
petir con productos similares de fabricación industrial.
sión, que a modo de cañón discurre desde lasestribaciones de Sierra Nevada en El Mar-quesado del Zenete hacia el norte, creandoun paisaje espectacular y único. Y alrededorse localizan nada menos que tres montaño-sos parques naturales, algunos metidos biendentro de la comarca y otros acariciándolaapenas: al este el parque de la Sierra de Baza,al sur las estribaciones de Sierra Nevada, quedan la espalda a La Alpujarra; y al noroeste,el parque de Huétor-Santillán.
En cuanto al patrimonio cultural, almargen de los magníficos monumentosde Guadix, hay que destacar el conjuntode dólmenes diseminados en pleno cañónen torno al hermoso pueblo de Gorafe, oel espléndido castillo de La Calahorra, si-tuado en la zona de El Marquesado, sobreuna colina que se ofrece a la vista desdemuy lejos. El castillo —un castillo-pala-cio— se construyó entre 1509 y 1512, enun estilo italianizante, y se considera uno
de los de mayor interés del Renacimientoespañol.
Si se continúa de ruta por El Marquesa-do, van surgiendo pueblos pequeños de ca-lles y casas bien conservadas, similares enmuchos de sus elementos a las de La Alpu-jarra. También aparecen a un lado de la ca-rretera la célebre mina de Alquife, en tiem-pos entre las importantes de producciónde hierro de España, y abandonada haceunos años por falta de rentabilidad. Se tra-
Municipios y población.
M U N I C I P I O S 1950 1998
Alamedilla 3019 953
Albuñan 1023 486
Aldeire 2118 789
Alicun de Ortega 1389 727
Alquife 1699 962
Beas de Guadix 870 389
Benalua 4016 3339
Cogollos De Guadix 1543 768
Cortes y Graena 1769 1013
Darro 1931 1521
Dehesas de Guadix 1873 694
Diezma 1889 945
Dólar 1401 643
Ferreira 1010 375
Fonelas 2790 1286
Gobernador 614 390
Gor 6113 1165
Gorafe 1427 581
Guadix 30532 20322
Huelago 1588 644
Hueneja 3074 1277
Jerez del Marquesado 3038 1174
Calahorra (La) 1969 927
Lanteira 1516 669
Lugros 1166 412
Marchal 749 439
Morelabor 2496 917
Pedro-Martinez 4865 1499
Peza (La) 2853 1450
Policar 481 254
Purullena 3173 2068
Valle de Zalabi 4272 2417
Villanueva de las Torres 2173 965
Total Comarca 100439 52460
Granada 793338 801177
Andalucía 5647244 7236459
Fuente: Elaboración Grupo de Desarrollo a partir del Cen-so de 1950 y la Renovación Padronal de 1998. SIMA.IEA
otoño 2002 • tierra sur 37
ta de una mina a cielo abierto, con un ho-yo de más de cien metros que el agua haido transformando en pantano desde quecesaron los trabajos. En torno al hoyo: elpoblado donde vivían los mineros, con suscasas oscuras, construidas al gusto de losingleses a principios del siglo XX. Se tratade un curioso y atrayente lugar, donde lavegetación ha crecido abundantemente. Enesta mina se ruedan numerosos anunciospublicitarios, y no hace falta ser demasiadolisto para comprender la potencialidad tu-rística que tiene. El recorrido por El Mar-quesado puede muy bien concluir en Jeres,un pueblo bien vestido que surge al pie delas frías montañas de Sierra Nevada, en unfrondoso rincón, ya de vuelta hacia Guadix.
De todo, lo que más se conoce de Gua-dix son las casas construidas en cuevas. Es-to es por el momento lo que el turismo en-cuentra como elemento diferencial en lazona. Y es verdad que estas construccionesmerecen, por sí solas, una atenta visita.Hay cientos en la zona que bordea la Ho-ya de Guadix, incrustadas en un terrenoarcilloso que se deja moldear con facili-dad. Dicen que fueron los árabes, al huir,quienes iniciaron la construcción de estaspeculiares viviendas, pero sea o no cierto elhecho es que se vive en ellas desde hacemuchos siglos. Y en los últimos años estándisfrutando de su particular boom inmobi-liario, una vez se han puesto de moda entrelas clases acomodadas. Si antes se consi-deraban viviendas humildes, hoy se pue-den encontrar muchas acondicionadas contodo lujo, y los precios, consecuentemente,se han disparado.
Para los visitantes, hay varios hoteles yapartamentos en cuevas de gran calidad,semejantes a cualquier otro establecimien-to de su categoría pero con alguna peculia-ridad que les otorga ventaja: las cuevas es-tán más protegidas y mejor aisladas queuna vivienda habitual, y los problemas dehumedad que podían tener antes por la fal-ta de ventilación, han sido solucionándosecon ventanas y chimeneas por donde cir-cula bien el aire. Otra ventaja, al menospara quien busque tranquilidad, es el silen-cio, total dentro de una cueva. Y en cuantoa instalaciones, no se echa en falta absolu-tamente nada.
El proceso de construcción resulta degran interés. Normalmente se abre un agu-jero estrecho en la montaña y se horada co-mo una galería, hacia el fondo y hacia los la-terales, abriendo las diferentes dependen-cias, hasta que se considera que ya se ha al-canzado el espacio necesario. Más adelante,si se necesita ampliar se puede seguir agran-dando el hueco, de modo que el procesode construcción siempre queda abierto. Lostechos deben tener forma abovedada, para
que la fuerza que ejerce la tierra sobre loshabitáculos esté bien repartida y se evitenderrumbamientos. Los muros de arcilla, sinaparente consistencia, se convierten en puraroca en cuanto les da el aire y reciben lacal. Todo un mundo el de las viviendas encuevas, pero más allá, en este espléndidolugar, es posible descubrir otros muchosmundos llenos de interés, para visitar y paraponer en marcha cualquier tipo de empresa.
J.M.S.R.
EL GRUPO DE DESARROLLO
El Grupo de desarrollo se constituyó como Líder Comarca de Guadix,
S.L. en 1994 por los 33 municipios de la Comarca, con el 51% de
las acciones, y la Asociación de empresarios de la comarca de
Guadix con el 49%.
En los años que lleva funcionando ha gestionado los siguientes programas y actuaciones:
• Iniciativa Comunitaria Leader II (vigencia de 1995 a 2001): 189 proyectos aprobados. Resultados fina-
les (en pts): Coste global: 2.074.091.963; Total gasto público: 1.004.964.283; UE: 662.835.594; Total
• Iniciativa Comunitaria Empleo-Integra. Gestionamos en los años 1998 y 1999 el proyecto ROMPIENDO
INERCIAS que tenía como finalidad ensayar un modelo de intervención para la formación e inserción en el
colectivo de jóvenes gitanos
• Acciones encaminadas a mostrar el potencial de desarrollo que encierra la comarca, dirigidas a entes pú-
blicos locales (ayuntamientos, mancomunidades), entidades privadas (asociaciones de distinto tipo) y a la
población en general.
• Acciones encaminadas a llamar la atención de organismos privados (entidades financieras, fundaciones
diversas, etc.) o públicos supracomarcales, tales como el INEM, las Delegaciones Provinciales de las Con-
sejerías de la Junta de Andalucía, la Diputación, etc. sobre las carencias que sufre actualmente la comarca
y de las posibilidades que encierra la puesta en valor de sus recursos, con el fin de demandarles una im-
plicación activa dentro de las competencias y las posibilidades económicas de cada uno en la planificación
del futuro de la Comarca de Guadix.
• Se ha fomentado el asociacionismo y la cooperación como herramientas básicas de supervivencia en el
medio rural. En este sentido cabe destacar entre otras actuaciones el trabajo desarrollado para la consti-
tución de la Asociación para el Desarrollo Rural de la Comarca de Guadix. Así mismo se ha trabajado de for-
ma considerable con dos colectivos que el grupo considera de especial importancia en la comarca, los jó-
venes y las mujeres.
• A lo largo de estos años se ha consolidado en el trabajo del Grupo una metodología pro-activa en su ma-
yor parte, es decir, el grupo ha lanzado ideas de proyectos que consideraba necesarios acometer en base
a su conocimiento de la Comarca y la respuesta ha sido muy positiva.
PERSONAL Y MEDIOS
En la actualidad la plantilla del Grupo está formada por un gerente, un técnico, dos técnicas administrativas
y un responsable administrativo financiero. En cuanto a medios disponibles por el Grupo, actualmente po-
seemos unas instalaciones ubicadas en una nave de la antigua azucarera de Guadix, con planta baja de 550
m2 y planta 1ª de 300 m2. Esta nave se ha rehabilitado recientemente para albergar la sede del Grupo. Las ins-
talaciones disponen de un área administrativa, aula informatica, sala de juntas, biblioteca y salon de actos.
FUTURO
En el año 1999 se constituyó la Asociación para el Desarrollo Rural de la Comarca de Guadix como here-
dera del anterior grupo y encargada en el futuro de articular y gestionar todos los programas de desarrollo
en la comarca. Actualmente esta compuesta por 197 socios, entre los que se cuentan los 33 ayunta-
mientos de la comarca; los sindicatos UGT, CCOO, UPA y ASAJA; 131 empresas de la comarca y diferentes
asociaciones de mujeres, jóvenes, profesionales, etc. En cuanto a la perspectiva de nuevos programas, te-
nemos ya aprobada la Iniciativa Comunitaria LEADER + y el PRODER-A, y se está a la espera de la reso-
lución de otros que también se han solicitado, como INTERREG y EQUAL.
38 ara • tierra sur • experiencias
E X P E R I E N C I A S
South West MayoPrograma irlandés
Gerry O’Neil
Gerente del Grupo de Desarrollo de
South West Mayo
Pese a las empresas de alta tecnología y el impresionante progre-
so económico de los últimos años, Irlanda sigue siendo un país
predominantemente rural, con poblaciones de escaso tamaño y cos-
tumbres ligadas a la vida de campo. Esa mezcla de economía avan-
zada y vida rural convierte al país en un modelo de lo que puede re-
presentar un desarrollo sostenible. En estas páginas se recoge la ex-
periencia y los proyectos del Grupo de Desarrollo Rural de la co-
marca de South West Mayo, un idílico lugar de la costa occidental.
El 28 de julio de 2002 me encontré con una visita enla oficina. Algo normal como se puede comprender,pero en esta ocasión el visitante era diferente. Se pre-sentó como José María Sánchez-Robles, con direc-ción en Marbella. Estaba de vacaciones en Irlanda.Es frecuente que los irlandeses vayamos de vaca-ciones a Marbella, pero era la primera vez que co-nocía a alguien de Marbella ¡de vacaciones en eloeste de Irlanda!
El señor Sánchez-Robles me habló sobre su tra-bajo en la revista ARA Tierra Sur, y me manifestósu interés en recibir información acerca de los pro-gramas de desarrollo rural en Irlanda. El resultadode aquella conversación es este artículo que me pidiópara su publicación en la revista ARA Tierra Sur.
El Grupo de Desarrollo Rural
El Grupo de Desarrollo Rural de SouthWest Mayo se creó en 1991 para gestionarel programa piloto Leader. Después ges-tionó también Leader II en la comarca yahora está comprometido en la gestión delPrograma Nacional de Desarrollo Rural,que es un programa de naturaleza muy si-milar a Leader +. El Grupo se ocupa tam-bién del Programa Local de IntegraciónSocial, cuyo objetivo es apoyar de modoespecífico a los sectores más desfavoreci-dos de la sociedad, como por ejemplo laspersonas con discapacidades, desemplea-dos de larga duración, pequeños granjeros,jóvenes con riesgo de abandonar la escuela,así como refugiados, personas que buscanasilo y personas que viajan de un lugar aotro y no disponen de un domicilio.
La zona en la que trabajamos se encuen-tra en la costa oeste de Irlanda y cuenta conuna población de 58.192 habitantes, segúnel censo de 2002 (en el censo de 1996 secensaron 52.537). La densidad de poblaciónes aproximadamente de 21 personas por ki-lómetro cuadrado, y más de las tres cuartas
partes de los habitantes viven en pueblosmuy pequeños o en el campo. Las dos po-blaciones más importantes son Castlebar yWestport, con unos 12.000 habitantes entrelas dos. Castlebar es la capital administrativadel condado de Mayo, y Westport es elprincipal destino turístico.
La población ha crecido durante los últi-mos años, pero el crecimiento se ha produ-cido exclusivamente en torno a los puebloso ciudades más grandes. Por el contrario,en las zonas rurales más aisladas y alejadasde los núcleos urbanos importantes está des-cendiendo el número de habitantes. Ade-más, cuando estén disponibles los datos delcenso relativos al perfil de la población, creoque van a mostrar un crecimiento de las per-sonas de mayor edad y un descenso de quie-nes están en edad de trabajar en las áreasmás remotas.
La economía agraria en esta comarca esmuy diferente de la andaluza, ya que sebasa en el ganado ovino y vacuno, y enuna pequeña producción de leche. Comoen todas partes, también en South WestMayo están descendiendo las rentas agrí-
la población ha crecido
durante los últimos años,
pero el crecimiento se ha
producido exclusivamente
en torno a los pueblos
o ciudades más grandes.
Por el contrario, en las
zonas rurales más aisladas
y alejadas
está descendiendo el
número de habitantes
El famoso pub Matt Molloy’s, en Westport. A
la derecha, la calle más animada de Clifden.
otoño 2002 • tierra sur 39
colas. Por otra parte, hay pocos tierras cul-tivables debido a su baja calidad y al clima,excesivamente húmedo. Y aunque la co-marca tiene un buen número de kilóme-tros de costa, la actividad pesquera, desdeel punto de vista económico y comercial,es muy escasa. No existe ningún puertocon capacidad para albergar grandes barcospesqueros, así que el aprovechamiento delos recursos marinos se limita a pequeñaspiscifactorías, donde se crían principal-mente mejillones y ostras del Pacífico, ade-más de salmón y trucha.
Programa de Desarrollo Rural
El programa de Desarrollo Rural de la co-marca de South West Mayo tiene tres ob-jetivos principales:1. El desarrollo de las comunidades rurales.2. El desarrollo del turismo rural.3. La implantación de empresas en zonas
rurales.
Desarrollo de comunidades rurales
El Grupo ve el desarrollo de las comunida-des rurales como su labor prioritaria dentrodel programa, una labor para la que con-tratamos un equipo de animadores que tra-bajan con grupos de habitantes de peque-ños pueblos, con asociaciones de desarrolloy agrupaciones que defienden intereses co-munes, colaborando con ellos en el análisisde su situación y desarrollando un plan deactividades que contribuyan a satisfacer lasnecesidades de cada uno de los sectores dela población, dentro del pueblo o la aldea.
Las subvenciones van destinadas a pro-yectos que favorezcan el desarrollo de esteproceso. Un proyecto típico podría tener
como finalidad que los niños, personas ma-yores y discapacitados no tropiecen conbarreras en su pueblo que les impidan mo-verse con normalidad. La meta es capacitara las aldeas locales y a las pequeñas ciuda-des para que puedan disponer de facilida-des y servicios que les permitan asegurar elmantenimiento de la población. Junto aello, y con la misma intensidad, se persigueel desarrollo de la capacidad de organiza-ción en estas pequeñas asociaciones ruralescon el fin de contribuir a mejorar las con-diciones de vida en cada zona.
South West Mayo es una comarca afor-tunada porque todavía mantiene el medioambiente escasamente contaminado: buenaparte de su territorio se encuentra protegi-do por normas jurídicas medioambientalesde la UE o de Irlanda. Al amparo del Pro-grama de Desarrollo Rural se concede apo-yo a las comunidades de vecinos para quemejoren sus pueblos, poniendo especial én-
vos establecidos en el proceso de anima-ción de la comunidad expuesto más arriba.
• Los cursos de iniciación o de profun-dización para profesionales del turismo ru-ral también pueden ser subvencionados.
La prioridad, en definitiva, es apoyarlas iniciativas y proyectos turísticos pen-sados para las zonas menos desarrolladas,más auténticas y menos degradadas de lacomarca.Apoyo a las empresas de zonas rurales
El Grupo de Desarrollo de South WestMayo apoya y subvenciona, como partede su Programa, las siguientes empresas:
• Las que ofrezcan servicios locales ycontribuyan a crear empleo en las zonasrurales.
• Las empresas o cooperativas que ex-ploten los recursos marinos.
• Las que trabajen en cualquier activi-dad que obtenga provecho de los recursoslocales, como por ejemplo las que desarro-llen planes de marketing para los productosagroalimentarios, incluyendo entre ellos elpescado.
• Las empresas dedicadas a la agricultu-ra ecológica y su promoción que desarro-llan su actividad en cooperación con laAsociación de Granjeros y AgricultoresEcológicos Irlandeses y los AgricultoresEcológicos de Mayo.
• Por último, se están explorando lasposibilidades de obtener energía en lasgranjas y en la producción de fibra.
El apoyo a las empresas se concreta enasesoramiento empresarial, subvencionespara inversión de capital y marketing, cur-sos de aprendizaje y colaboración en la in-vestigación y el desarrollo.
un proyecto típico
podría tener como finalidad
que los niños, personas
mayores y discapacitados no
tropiecen con barreras en su
pueblo que les impidan
moverse con normalidad
40 ara • tierra sur • experiencias
fasis en la preservación del entorno natural,así como del patrimonio arquitectónico ylas edificaciones tradicionales. También setrata de estimular la conservación y el de-sarrollo de la cultura tradicional de la po-blación.
Turismo rural
Sobre la base de las inversiones realizadascon los programas LEADER y LEADER IIen alojamientos e instalaciones, se está po-niendo en marcha un programa de desarro-llo de agroturismo y turismo rural, incluidoen el Programa Nacional de Desarrollo Ru-ral. Incluye las siguientes tareas:
• Un programa de marketing fácil decomprender, basado en la calidad.
• El desarrollo y promoción de nuevasactividades rurales, que se estimula consubvenciones a la inversión de capital y alos gastos de marketing.
• Los productos y servicios basados enel agroturismo o turismo de granja tam-bién se apoyan y subvencionan.
• El desarrollo y expansión del uso decentros colectivos utilizados para infor-mar, celebrar asambleas, o bien como cafésy aseos para viajes organizados pueden sersubvencionados si responden a los objeti-
Vacaciones en el Oeste de Irlanda
Pocos días antes de viajar a Irlanda vi en te-
levisión un magnífico reportaje sobre el di-
rector de cine Jonh Huston, centrado sobre to-
do en los muchos años —si no recuerdo mal,
unos veinte— que vivió en este país de sus
antepasados, en el campo, en una gran man-
sión próxima a la ciudad de Galway. Esa zona,
algunas decenas de kilómetros más al norte,
es la que íbamos a visitar. El reportaje habla-
ba de la gran afición a los caballos de la gen-
te de la región y en general de todos los irlandeses. También, de la caza, de la pesca, de ejer-
cicios y actividades que regala al hombre la naturaleza cuando no tiene no enfermedades gra-
ves. Creo que aquel documental, de espléndidas imágenes, reflejaba a la perfección los
atractivos de Irlanda, que contrariamente a lo que parece una opinión bastante extendida, no
son fáciles de apreciar. Esta tierra no entra como una canción de verano; exige atención y al-
go de tiempo, hasta que los muchos matices de la luz, de los prados y del aire húmedo y fres-
co empiezan a hacerse notar, y entonces lo que resultaba un paisaje un tanto monótono se ve
con ojos entusiastas y complacidos.
De la región del oeste de Irlanda, y en concreto de esta comarca denominada South West
Mayo, se puede decir que aún permanece en estado de gracia. Le pregunté a Gerry O’Neil,
gerente del grupo de Desarrollo, cómo era posible que en un lugar como aquel no hubiera mi-
les de visitantes ocupando hasta el último rincón, y como si resultara muy obvio, me con-
testó: "El clima. Llueve mucho. No suele hacer frío ni siquiera en invierno —apenas una se-
mana de nieves— pero llueve mucho". A mí, aquel clima suave en pleno mes de julio me pa-
recía una bendición. Días semejantes a los del norte de España —el Cantábrico— con uno,
dos, quizá tres grados menos. Quienes buscan en las vacaciones un lugar donde no pasar
calor, donde ofrecerle buenos paisajes a la vista, dormir sin ruido, dar largos paseos, viajar
por carreteras estrechas, pescar, tomar unas cervezas entre gente simpática y afable, en un
pub con músicos, deben conocer esta parte del mundo.
José María Sánchez-Robles
Paisaje de la isla de Achill. A la derecha, una
imagen de Newport.
otoño 2002 • tierra sur 41
E X P E R I E N C I A S
Nuestra empresa familiar, situada en Poci-to (San Juan), nace en 1996, con la inten-ción de buscarle rentabilidad a la activi-dad olivícola. Somos productores de acei-tuna desde 1944. La explotación olivareratiene 20 hectáreas, una extensión muy pe-queña en el ámbito argentino, si bien todase halla puesta en regadío. La actividadindustrial se maneja al margen de la acti-vidad productiva básica, con el fin de lo-grar una mayor rentabilidad en ambas. Losprimeros pasos se dieron elaborando sola-mente una muy pequeña cantidad de acei-tuna (6.000 kg./año) y en nuestro primeraño de vida esa cantidad se agotó.
Hoy día estamos elaborando 50.000kg./año entre aceitunas verdes, negras y acei-te de oliva. En lo que respecta a la elabora-ción de aceitunas verdes y negras, el primeraño se contrató personal técnico externo;luego lo venimos realizando nosotros mis-mos con conocimientos adquiridos durantelos estudios de Ingeniero Agrónomo y a tra-vés de propias experiencias. La elaboraciónde aceite de oliva se hace en colaboracióncon otra pequeña empresa que solo poseefábrica de aceite de oliva. Nosotros le pa-gamos la elaboración del aceite entregándo-le aceitunas verdes elaboradas. Y con esteacuerdo nos beneficiamos las dos empresas:ahora tanto nosotros como ellos poseemosaceitunas verdes elaboradas y aceite de oliva.
Actualmente elaboramos solo el 30%de las aceitunas producidas en la finca; elresto se vende en verde a terceros.
Las variedades de aceituna que abarca-mos son:• Para aceituna verde: Arauco (variedad tí-
pica de Argentina).
• Para aceituna negra: ChanglotReal.
• Para aceite de oliva: Arbequina.Desde un primer momento
hemos estado en contacto conorganizaciones públicas comopor ejemplo C.F.I (Consejo Fe-deral de Inversiones), que nosayuda con temas de inversionesy nos imparte cursos de marke-ting, comercialización, exporta-ción, etc. Esta entidad organizaferias en algunos puntos de vera-neo o en fiestas provinciales, enlas cuales nos proveen de unstand para exponer y vendernuestros productos en variasprovincias argentinas, así comopara establecer relaciones co-merciales con clientes de dichos sitios.
Al ser una pequeña empresa, nuestromayor problema es la falta de capital, perotenemos a favor que la toma de decisioneses rápida, y para tratar de decidir correcta-mente es por lo que estamos permanente-mente capacitándonos (cursos, talleres ymasters incluso en el extranjero, como elde Olivicultura y Elaiotecnia en España).
En lo que respecta a la estrategia co-mercial, actualmente todos los productosse venden con una sola marca, que es'Granja Pocitana'. Se eligió ese nombrepara dar imagen de una empresa pequeña,y porque Pocito es el departamento quemás olivos posee de San Juan. En un futurotenemos pensado incorporar otra marcapara atender a otro sector de la poblacióncon menos recursos. En estos momentosvendemos en los mejores restaurantes de la
provincia y apuntamos alsector de más ingresos.Como Argentina es uno delos mayores productoresde aceites vegetales susti-tutivos del de oliva, hay undiferencial grande de pre-cios entre unos y otrosaceites y solo consumenaceite de oliva las personasde alta renta.
La parte de la imagencorporativa la desarrollaCopigraf Ltda., que es unaempresa publicista pertene-ciente a familiares, muybien posicionada en Chile.Al tener esta posibilidad derelación de confianza los
costes de publicidad son muy bajos. La ges-tión de ventas se hace con los clientes di-rectamente para el caso de los que están enla provincia, y contra reembolso para los delas demás provincias.
También estamos presentes en la mayorcadena de supermercados de Argentina,pero vendemos a nivel provincial solamen-te. En esta última opción de venta, la ren-tabilidad está dada por los beneficios decomunicación de imagen solamente, pues-to que la politíca de compras y pagos esdemasiado agresiva y hacen que la rentabi-lidad sea casi nula. Nuestras metas para elfuturo son: elaborar el 100% de las aceitu-nas que producimos y tener una pequeñafábrica de aceite de oliva.
Leonardo Moral Torés
Ingeniero Agrónomo
Un ingeniero agrónomo ha enviado a
ARA Tierra Sur este artículo sobre su tra-
bajo al frente de una empresa de pro-
ducción de aceitunas en Pocito, dentro
de la provincia argen-
tina de San Juan.
‘Granja Pocitana’
Explotación familiaren Argentina
42 ara • tierra sur • publicaciones
P U B L I C A C I
EOLSS, una enciclopedia sobre los sistemas que posibilitan y favorecen la vida
Más allá de los grandes discursos y de los acuer-
dos, de la Cumbre de la Tierra de Johanesburgo
se pueden destacar muchos actos de gran interés,
aunque los medios de comunicación españoles no les
hayan dedicado la mucha atención. Por ejemplo, la presentación
de la enciclopedia EOLSS sobre los sistemas que hacen posible la
vida’, es decir, sobre los sistemas, tanto los naturales como los
creados por el hombre, que favorecen una vida sostenible en la
biosfera. Se trata de una publica-
ción, patrocinada por la Unesco, en
la que han participado 450 científi-
cos de todo el mundo —entre ellos
15 premios nobel— de las más di-
versas materias, todas orientadas
directamente a la supervivencia del
hombre y del planeta.
La difusión de esta enciclopedia, pu-
blicada sin ánimo de lucro, figura entre los principales proyectos
de la Unesco para los próximos años. Economía, ecología, física,
química, medicina, tecnología, matemáticas, cualquiera de las dis-
ciplinas en las que el hombre ha clasificado su conocimiento y es-
tudio encuentran en EOLSS un espacio desde la particular, y ori-
ginal, perspectiva del desarrollo sostenible. Cada materia se es-
tudia desde un punto de vista histórico, desde que surge como co-
nocimiento, mostrándose luego sus avances y el estado actual de
la investigación, con las discusiones y debates más destacables, y
por último se recogen las perspectivas y previsiones para el futuro.
EOLSS pretende ser de utilidad general, si bien los editores han
establecido como principales destinatarios cinco grupos profe-
sionales, institucionales o sociales: universidades, educadores
interesados en el desarrollo sostenible, profesionales y especia-
listas con intereses en las respectivas materias tratadas, inves-
tigadores y todos aquellos que tienen responsabilidades sociales,
en la vida política, en ONGs o bien el sector privado. Si alguien
desea más información sobre esta enciclopedia puede dirigirse a
la web ‘eolss.com’.
ARTESANOS DE LA ALPUJARRALa Asociación de Artesanos de La Alpujarra acaba
de publicar un catálogo que recoge todos los talle-
res de la comarca, con varias páginas dedicadas a
cada uno de ellos que incluyen fotografías del arte-
sano y sus producciones así como una extensa no-
ta donde se da cuenta de su vida y obra. El libro,
que se abre, en su página cinco, con un hermoso
paisaje en blanco y negro, trata de acercarse en la
introducción al concepto de artesanía, para aden-
trarse luego en la delimitación y descripción geo-
gráfica de La Alpujarra. A continuación se presen-
tan, a modo de fichas, los diferentes talleres con
comentarios artísticos e históricos. Por último, se
incluye un apartado con datos técnicos, que per-
miten su localización.
Libro útil desde todos los puntos de vis-
ta: por su valor documental y recopila-
torio, por su valor cultural y naturalmen-
te por su contribución al desarrollo eco-
nómico de la comarca, difundiendo la
producción de sus artesanos. Un trabajo
por el que hay que felicitar a esta aso-
ciación que con tanto empeño trabaja
en favor de la artesanía.
PRODER CAMPIÑA ALCORESEl Proder Campiña Alcores (Asociación para el de-
sarrollo de La Campiña-Alcores) ha publicado re-
cientemente su memoria de gestión 1997-2001,
además de un CDRom y un vídeo donde se recoge
también información sobre los trabajos realizados en
estos años. El acertado diseño de la memoria per-
mite al lector pasar revista con rapidez a los distin-
tos proyectos, presentados todos en fichas muy cla-
ras. Cuatro proyectos en cada página, con un campo
para el promotor, y otros para el municipio, la inver-
sión, para el título o encabezamiento del proyecto y,
por último, para una descripción del mismo. En for-
mato de revista, la memoria incluye junto con los
proyectos una información práctica y de gran valor
para quienes pretender obtener beneficios del Proder
y del Grupo de Desarrollo (de cualquier Proder y
cualquier Grupo de Desarrollo). Con un len-
guaje directo y fácil de entender se explica
en los capítulos introductorios de la me-
moria lo que es el Proder, cómo funciona,
quiénes forman el Proder Campiña Alco-
res, qué ha hecho por la comarca, qué va
a ocurrir con el Proder en el futuro, y quién
evalúa al Proder. Se trata de una publica-
ción que sin duda agradecerán los veci-
nos de la comarca y también los trabaja-
dores del Grupo, que tienen en ella un
buen instrumento para informar.
otoño 2002 • tierra sur 43
PUBLICACIONES DE LA COMARCA DE GUADIXCoincidiendo con el artículo que se incluye en este número
de la revista ARA Tierra Sur sobre la comarca de Guadix,
hemos querido reseñar algunas de las publicaciones que a
lo largo de estos últimos años ha editado el Grupo
de Desarrollo Rural. Resultan de particular interés
las dedicadas a los vestigios megalíticos de Go-
rafe o al megalitismo en general. Una de estas pu-
blicaciones trata sobre los territorios megalíticos
del Mediterráneo: Gorafe, en la comarca de Gua-
dix, y Sa Corona Arrùbia, en Cagliari (Cerdeña). Es
un trabajo descriptivo e histórico muy ambicioso,
que explica pormenorizadamente lo que represen-
taron estas tumbas funerarias y lo que represen-
tan hoy en día como vestigios arqueológicos. Con
profusa bibliografía e ilustraciones en color —fo-
tografías, mapas y dibujos—, el libro, de gran ta-
maño, alcanza las 150 páginas. Los textos están
escritos en castellano e inglés.
Este mismo tema del megalitismo de Gorafe y
Sa Corona Arrùbia aparece abordado en otro libro
desde la perspectiva del parque temático, es de-
cir, del territorio donde se encuentran los megali-
tos, un espacio en la actualidad habilitado para
que los visitantes puedan contemplar sobre el te-
rreno estas misteriosas tumbas. Además de las
tumbas, la publicación dedica un breve espacio a
atender la fauna y el paisaje de la zona, y en el ca-
so de Gorafe, incluye varias rutas para visitar los megalitos
de la mejor forma posible.
Un CDRom cierra, por último, las publicaciones dedica-
das a estos vestigios. Titulado así: ‘Vestigios megalíticos en
el valle del río Gor’, permite seguir a través de mapas, y me-
diante un buen sistema de navegación, los puntos donde se
localizan los megalitos en cada ruta.
La olla de Guadix. Poco tiene que ver esta publica-
ción con las anteriores. ‘La olla de Guadix’ es un recetario
de cocina tradicional con infinidad de platos de la comarca.
Las recetas, redactadas en muchos casos al hilo de las pa-
labras de los vecinos, se dejan leer con gusto por su es-
pontaneidad y por su precisión. El diseño, añejo, un tanto
arcaizante y de estirpe rural, ayuda a disfrutar del libro co-
mo si fuera uno de los platos que reseña. Bonitos dibujos de
frutos, animales y de todo lo que viene al caso, y alguna fo-
to, por supuesto en blanco y negro, sirven para condimentar
este estupendo manual que aborda la cocina en sus mil po-
sibilidades. Las recetas, por cierto, se presentan con nom-
bre de autor. Un acierto más.
Guía turística. El Grupo de Desarrollo ha publicado
también una guía turística donde se ofrece una completa
información de la comarca, en todos sus aspectos. La
guía, que organiza la información a través de una serie de
rutas, incluye numerosas fotos en color y planos encarta-
dos de la comarca y de la ciudad de Guadix.
O N E S
Andaluciarural.org
EL PORTAL DE LA ASOCIACIÓN PARA EL DESARROLLO RURAL DE ANDALUCÍA
El portal de la Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía
(ARA) presenta desde hace unas semanas una imagen renovada,
con nuevas secciones, más información en sus páginas y nuevo di-
seño. Concebido fundamentalmente como un instrumento informa-
tivo al servicio de los grupos de desarrollo rural andaluces, el portal
recoge legislación, ayudas, noticias, artículos y bibliografía sobre de-
sarrollo rural, así como numerosos enlaces que permiten al visitante
conocer los portales, institucionales y empresariales, relacionados
con esta materia. Cualquier persona interesada en el desarrollo rural
andaluz tiene en andaluciarural.org su portal de referencia. Para
los emprendedores que busquen invertir representa también una
dirección sumamente útil.
La web se actualiza constantemente pero no es una web de actua-
lidad, excepto en lo que se refiere a la sección de ‘Noticias’. Se tra-
ta más bien de un gran centro de documentación que va recibiendo
constantemente novedades. Es el hilo conductor, por otra parte, de
los portales de todos los grupos
de desarrollo andaluces, y en es-
te sentido desempeña un papel
muy importante de interconexión
en la Red. Su buena posición en
los buscadores incrementa su
importancia. Para los próximos
meses, uno de los principales ob-
jetivos de ARA es ir convirtiendo
la web en el gran foro de debate
sobre el desarrollo rural en An-
dalucía, con propuestas que sir-
van para enfocar los problemas
desde cualquier perspectiva.
Ahora que se han puesto en mar-
cha los programas Proder y Lea-
der Plus, andaluciarural.org co-
bra un gran protagonismo, y ARA
ha querido que nadie que se
acerque a sus páginas quede de-
fraudado.
I N T E R N E T
44 ara • tierra sur • internet
Aratierrasur.com
VERSIÓN ELECTRÓNICA DE‘ARA TIERRA SUR’
La versión para internet de la revista ‘ARA
Tierra Sur’ pretende ser un complemento de
la publicación en papel, en un doble sentido:
ofreciendo, por una parte, un tipo de infor-
mación que no puede tener cabida en una
revista trimestral de sus características, co-
mo son las noticias de actualidad o los anun-
cios, y por otra, añadiendo la interactividad
que no permite el papel. Cualquier interesado
podrá introducir en el portal su anuncio, una
convocatoria o una noticia relacionada con
su comarca o con el desarrollo rural. Y junto
a estos servicios exclusivos de la versión pa-
ra internet, aratierrasur.com incluye también
todos los números de la revista en papel
transformados en formato PDF para que se
puedan leer en cualquier parte del mundo.
El portal, que se puede visitar ya, está en pe-
riodo de pruebas, a la espera de recibir su-
gerencias de los usuarios.
Webs recomendadas
antequeracom.comEl Grupo de Acción y Desarrollo Local de la la co-
marca de Antequera dispone de un estupendo portal
en internet. Su diseño atractivo, pensado para que el
visitante se divierta al tiempo que busca informa-
ción, le confiere sin duda un importante valor aña-
dido. Además, cuenta con una información comple-
ta, fácil de seguir y presentada de forma sintética.
Cualquier dato que se requiera para acercarse a la
comarca de Antequera o a sus pueblos se puede en-
contrar en este portal, así como todo lo relativo al
Grupo de Desarrollo y a los programas y proyectos
que gestiona. Cada una de los trabajadores tiene su
ficha, que incluye una fotografía. Hay que desta-
car las numerosas fotografías turísticas que se in-
cluyen, de gran calidad en cuanto a contenido y
en cuanto a la calidad de las imágenes. Los enlaces
con el correo electrónico se encuentran bien des-
tacados, la web se descarga con gran rapidez y
tiene a dispoción de los usuarios, por último, una
sección de foros.
magina.orgOtra web muy interesante entre las de los grupos
Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía (ARA)Edificio. Eurocei. Autovía Sevilla-Coria del Río, km. 3,541920. San Juan de Aznalfarache (Sevilla). Ap. Corr. 76
Tel 954 179 210. Fax 954 179 [email protected] www.andaluciarural.org
Consejería de Agricultura y PescaJunta de Andalucía
C/ Tabladilla, s/n. 41071 SevillaTel. 955 032 000
www.cap.junta-andalucia.es
EnAndalucía hay mucho campo...
...para la gente emprendedoraLos Grupos de Desarrollo Rural se han convertido en una pieza básica en el gran proyecto de Andalucía para el siglo XXI.Su labor de apoyo a la gente emprendedora está produciendo magníficos resultados. ARA es su Asociación: la Asociaciónque los representa, la Asociación que trabaja para todos ellos, la Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía.
