Proyecto “Autoabastecimiento de Alimentos”
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MANUAL PRACTICO MANUAL PRACTICO MANUAL PRACTICO MANUAL PRACTICO
PARA EL MONTAJE Y PARA EL MONTAJE Y PARA EL MONTAJE Y PARA EL MONTAJE Y
MANTENIMIENTO DE MANTENIMIENTO DE MANTENIMIENTO DE MANTENIMIENTO DE
UN HUERTO URBANOUN HUERTO URBANOUN HUERTO URBANOUN HUERTO URBANO
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MANUAL PRÁCTICO PARA UN HUERTO URBANO
I. HERRAMIENTAS Y REQUISITOS BÁSICOS PARA EL HUERTO
1.1. Diseño del huerto.
1.2 Diseño del sistema de riego para la parcela.
1.3. Calendario de siembra. Algunos consejos para el cultivo de
hortalizas.
II. PRODUCCIÓN, SELECCIÓN Y MEJORA DE SEMILLAS
2.1. Semillas y semilleros.
2.2. Extracción y multiplicación de semillas.
2.3. Obtención y procesamiento de semillas.
III. ACONDICIONAMIENTO Y NUTRICIÓN DEL HUERTO
3.1. Abono y compost: abonos y fertilización;
3.2. pH de la tierra.
IV. MEDIDAS DE PREVENCIÓN Y CONTROL BIOLÓGICO DE
PLAGAS Y ENFERMEDADES EN CULTIVOS HORTÍCOLAS
4.1. Identificación y control de plagas en cultivos hortícolas.
V. PRODUCCIÓN Y COSECHA
5.1. Rotación de plantas; periodo, trasplante.
5.2. Sistemas tradicionales de caña para el aguante de hortalizas.
5.3. Barreras vegetales autóctonas y plantas aromáticas.
VI. NUTRICIÓN Y COMIDA INTELIGENTE
6.1. Comer sano: alimentarse y disfrutar.
6.2. Cómo conservarlas para evitar la pérdida de sus
propiedades.
6.3. Hortalizas de temporada; recetas tradicionales.
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I. HERRAMIENTAS Y REQUISITOS BÁSICOS PARA EL HUERTO
1.1 DISEÑO DEL HUERTO. UBICACIÓN DE LA PARCELA
La mejor ubicación de la parcela, es la que tiene una orientación SUR.
En cuanto a la orientación de las líneas de cultivo, elegiremos una orientación
NORTE-SUR.
Antes de empezar a cavar, conviene tener muy claro con cuantos metros
contamos, las características de la tierra por si necesita enmienda, la
orientación a lo largo del año, la distribución de los espacios de cultivo,
disponibilidad de agua.
Resulta muy útil realizar la planificación detallada mediante dibujos y esquemas
gráficos, y trasladarlo a nuestro cuaderno de campo.
La forma de la parcela, normalmente suele ser rectangular, y dentro de la
parcela, se distribuyen los bancales de cultivo en grupos (múltiplos de cuatro,
cinco o seis), lo que facilita el seguimiento de las rotaciones y las asociaciones
por familias botánicas.
Una vez elegido el diseño, conviene realizar un dibujo, del espacio cultivable
disponible, porque en función del mismo, se podrá realizar cualquier
modificación posterior.
Es importante indicar la fecha de inicio en cada plano y numerar los bancales, e
incluso poner un número o una letra a las líneas de cada bancal.
ESPACIOS DE CULTIVO. DISEÑO DE LOS BANCALES DE LA PARCELA
El sistema que vamos a emplear en nuestra parcela, y quizá el método que
mejor nos permita usar nuestro terreno, se denomina Parades en Crestall. Este
método sigue un sistema de bancales planos acolchados con compost, y es
idóneo para pequeños huertos. Requieren poco mantenimiento y son muy
productivos. Al realizar los bancales a ras de suelo, se requiere una menor
labor inicial, y también retiene mejor la humedad.
A este método le vamos a introducir una variante denominada bancales
enladrillados. Recurrimos a ladrillos cerámicos tipo “machihembrado”, que
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tienen unas dimensiones de 1 m de largo unos 25 a 50 cm de altura. Para que
se mantengan rectos, haremos una pequeña zanja y enterraremos parte del
ladrillo en el suelo, sujetándolos con estacas de madera o metal, que
introduciremos en las esquinas y en las uniones entre ladrillos.
Ya para el resto de tareas, seguiremos el método de Parades en Crestall,
desarrollado por el horticultor Gaspar Caballero.
Mediante este método, nos ahorramos labores de cava con motocultor,
preparando solamente la zona a cultivar dentro de la parcela. Previamente
preparamos la tierra de cada parcela, y sobre esta, añadiremos un manto de
unos 2 cm de compost orgánico que no hay que mezclarlo con la tierra. Este
manto orgánico se va descomponiendo lentamente, al igual que harían restos
vegetales de manera natural, y a su vez, permite mantener la humedad.
Las dimensiones de cada parcela, serán de 2 m de ancho por 6m de largo). Si
quisiéramos hacerlos mas grandes, aumentaremos el largo en múltiplos de 3.
Cada parcela, se organiza en dos partes de 60 cm de ancho, con un corredor
central de 30 cm en el que colocaremos unos ladrillos planos cada 60 cm para
el cultivo de plantas medicinales y aromáticas; este pasillo nos sirve para
trabajar sin pisar el cultivo ni la tierra. El uso de aromáticas cumple diversas
funciones: por un lado, es una manera de controlar las plagas, a la vez que
incrementa los niveles de biodiversidad.
Como sistema de riego, colocaremos las mangueras tal y como se ha explicado
anteriormente.
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Otra característica importante, es que se deben de agrupar en múltiplos de
cuatro (cuatro, ocho, doce paradas...). pudiendo así seguir la rotación de
cultivos.
En cada uno de los cuatro bancales unificamos las familias por plantas:
solanáceas (tomate, pimiento, berenjena), umbelíferas (zanahorias, apio,
rábano) junto con liliáceas (cebollas, ajos), las leguminosas (judías, habas)
junto con crucíferas (coles, rábanos), y en otro bancal las compuestas
(lechuga) con acelgas y cucurbitáceas (calabacines, pepinos).
Sino deseamos complicarnos demasiado con las rotaciones, podemos
fundamentarlas de acuerdo a la exigencia de nutrientes que presenten los
cultivos, alternando plantas exigentes en nutrientes con plantas medianamente
exigentes, seguidas con plantas menos exigentes, y posteriormente con
plantas poco exigentes y completar el ciclo con plantas mejorantes de la tierra
o fertilizantes (leguminosas y abonos verdes).
- Plantas exigentes: plantas muy voraces que se desarrollarán muy
bien en presencia de grandes aportes de nutrientes como
compost o estiércol: patatas, calabacines, tomates, pimientos,
berenjenas, melones, pepinos...
Solanáceas
Tomate Pimiento
Berenjena
Umbelífera Zanahoria
Apio
Liliáceas Cebolla
Ajo
Leguminosas Judías Habas
Crucíferas
Coles Rábanos
Compuestas Lechugas
Cucurbitáceas
Calabacines
Pepinos
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- Plantas medianamente exigentes: necesitan aportes moderados
de compost: acelgas, lechugas, escarolas. Las zanahorias,
rabanitos son medianamente exigentes pero necesitan un
compost muy descompuesto (o humus de lombriz).
- Plantas poco exigentes: pueden desarrollarse bien con restos del
compost de cultivos precedentes, como ajos, cebollas, y
leguminosas (guisantes, judías, habas) que tienen la facultad de
sintetizar y absorber el nitrógeno atmosférico por lo que no
requieren aportes de compost.
- Plantas mejorantes: precisan pocos nutrientes y enriquecen la
tierra en donde se desarrollan, son conocidas como abono verde:
trébol, habas forrajeras; pueden cultivarse mezcladas con alguna
gramínea (cebada, avena, centeno).
LABORES COMPLEMENTARIAS DE CULTIVO Y MANTENIMIENTO DE UN
HUERTO
Aparte de las grandes tareas de cultivo como el laboreo, abonado, siembras,
trasplantes, etc, vamos a ver una serie de tareas complementarias de cultivo y
mantenimiento del huerto.
Acolchados protectores de la tierra y los cultivos
Los acolchados protegen la vida de la tierra de cultivo, potencian su fertilidad y
facilitan el trabajo en el huerto. Los materiales con los que acolchamos pueden
ser vegetales (paja, restos de cosechas y/o poda) y en casos concretos roca
volcánica o gravas. Todos ellos evitan la aparición de hierbas, y por otro lado
evitan la rápida evaporación de agua, lo que supone un ahorro de riegos, y
también protegen a la tierra de la radiación solar, creando las condiciones de
sombra y humedad que propician la actividad de los microorganismos
degradadores de la materia orgánica y productores de nutrientes para las
plantas. Opciones de acolchados:
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- Acolchado de paja: el acolchado de paja, es la cobertura orgánica
que ofrece los mejores resultados, usando una capa de 4 a 8 cm.
- Triturado de ramas y restos de poda: presentan una degradación
muy lenta, por lo que si añadimos capas regulares, nos
despreocuparemos del crecimiento de otras hierbas y del
abonado. Se suele usar sobretodo en árboles.
- Grava o arlita: en arbustos y setos, se puede usar este tipo de
acolchado para retener mejor la humedad.
- Acolchado de piedras: en zonas áridas y ventosas.
Labores de mantenimiento
- Clareo: al sembrar de manera espesa, tras la germinación se
precisa uno o varios clareos de las plantitas a medida que van
creciendo, eliminando las mas débiles. Esta operación se repite
hasta obtener la separación entre plantas adecuada: lechuga 20-
30 cm, 3-5 cm en zanahorias.
- Despunte o desmoche: consiste en cortar los brotes centrales o
laterales de las plantas cultivadas para conseguir tallos
principales más vigorosos o un follaje más frondoso. En el caso
de las tomateras conseguimos frutos más grandes.
- Entutorado: plantas como tomates, judías, pimientos, tienden a
desarrollarse en altura y precisan de estructuras de soporte o
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tutores. En nuestra zona es usual usar las cañas para esta tarea,
y se sujetan de manera piramidal por grupos de cuatro.
- Cosechas: salvo las que dejemos para producir semilla, que
requieren más tiempo en la mata y conviene que estén bien
formadas y excepcionalmente maduras, elegiremos el mejor
momento para la recolección.
1.2 DISEÑO DEL SISTEMA DE RIEGO PARA LA PARCELA
El agua es el elemento que disuelve las sustancias nutritivas presentes en la
tierra y permite la absorción de nutrientes por las raíces, además de favorecer
la proliferación de microorganismos y de las micorrizas que se encargarán de
asimilar los elementos químicos y así nutrir a las plantas.
En el caso de nuestra zona, necesitamos regar abundantemente y proteger esa
humedad con el mejor acolchado posible, de forma que consigamos un largo
periodo de estabilidad en la relación ideal humedad/aire en la tierra.
Para reconocer si estamos regando en exceso o por defecto, cogeremos un
puñado de tierra de nuestra parcela. Si al apretar el puñado, la tierra se
deshace, significa que está demasiado seca y necesita riego; si se queda prieta
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y pastosa, y rezuma agua, tendremos demasiada humedad; y si se queda
hecha una bola, significa que estamos en el punto idóneo.
Podemos también disponer de higrómetros que nos indican el grado de
humedad existente.
La mejor forma de regar, es instalar riego por goteo en nuestra parcela, con
goteros intercalados cada 30 o 35 cm, y un programador de riego que permita
conectar el sistema a la toma de agua.
En cuanto a las necesidades de riego, diferenciamos entre vegetales de hojas
anchas y jugosas, que necesitan de más cantidad de agua, mientras que los de
hojas estrechas necesitan menor riego.
Riegos regulares: las lechugas o las acelgas, requieren riegos mas regulares.
Riegos escasos: los ajos, cebollas o plantas medicinales requieren riegos
escasos, les bastará con aproximadamente ½ litro de agua por cada 10 litros
de tierra.
Riegos moderados: para la mayoría de hortalizas, en condiciones climáticas
normales, requieren riegos de aproximadamente 1 litro de agua por planta.
Riegos copiosos: en verano, las alcachoferas, escarolas, coliflores y lechugas
requieren unos 2 litros por planta.
ELEMENTOS BÁSICOS DEL RIEGO POR GOTEO
Mangueras
Encontramos diferentes grosores de mangueras para riego por goteo; para la
toma general, de 25 a 33 mm; de 25 a 30 mm para la manguera de distribución
entre los bancales/parcelas, y mangueras de 12, 16 o 18 mm con goteros
incorporados para el riego de las líneas de cultivo; el diámetro de estas líneas,
dependerá de la presión que tengamos.
Goteros
Existen mangueras con los goteros incorporados, o bien goteros individuales
que conectamos a las mismas.
Es conveniente cada cierto tiempo limpiar las mangueras de riego, para evitar
obstrucciones, y acumulación de cal.
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Filtros
Es necesario colocar un filtro en la acometida, al inicio de las mangueras de
distribución del agua y antes del temporizador o programador de riego.
Una vez a la semana o de manera quincenal, es conveniente limpiar los filtros.
Programadores de riego
En nuestro caso, podemos encontrar en el mercado sencillos programadores
de riego que nos darán buen resultado.
Complementos
Llaves para abrir y cerrar el riego, piezas de conexión entre mangueras, codos
y sobretodo, conexiones en forma de T, para la distribución de las mangueras
entre las parcelas.
1.- Toma general de agua con llave de paso.
2.- Filtro de malla
3.- Programador de riego
4.- Manguera para la traída general del agua de 25 o 33 mm de grosor, tan
larga como el espacio a cultivar.
5.- Manguera de 16 mm sin goteros.
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6.- Conexión en T para conectar la manguera principal con cada manguera de
16 mm que alimenta los bancales.
7.- Una llave de 16 mm por bancal/parcela
8.- Manguera de 16 mm de riego por goteo, con goteros a 25-35 cm de
separación. Con 3 o 4 líneas de manguera por parcela.
9.- Codos. También podemos usar tapones para cerrar las mangueras.
Para calcular los metros de manguera que nos hacen falta, multiplicaremos x 3
la longitud de cada parcela y el resultado lo multiplicaremos por la cantidad de
parcelas totales. Ejemplo: 3 x 5 m de largo = 15m; 15 x 6 parcelas = 95 m de
manguera. Redondeamos porque necesitaremos algo mas de manguera = 100
m.
1.3 CALENDARIO DE SIEMBRA. ALGUNOS CONSEJOS PARA EL
CULTIVO DE HORTALIZAS
Calcular el tiempo que cada cultivo ocupará la tierra
Cada una de las variedades que vayamos a plantar, tienen un ciclo de
desarrollo y producción diferentes, por lo que su cultivo mantendrá la parcela
ocupada durante un periodo de tiempo variable. Es necesario tenerlo en
cuenta, a la hora de planificar correctamente la sucesión de siembras y
plantaciones a lo largo del año.
También es importante tener en cuenta las rotaciones de los cultivos, y no
repetir en una misma parcela, una misma familia de plantas durante varios
años seguidos. Así evitamos que se especialicen determinados parásitos que a
la larga nos podrían acarrear serios problemas.
PLANTAS DE CRECIMIENTO RAPIDO
VARIEDAD TIEMPO CRECIMIENTO
Lechuga 4-5 semanas
Rábanos 8 semanas
Berenjenas 10-12 semanas
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Judías 10-12 semanas
Pimiento 20 semanas
Calabacín 16 semanas
Alcachofa 22 semanas
Cebolla
Ajo
TABLA DE REFERENCIA DE POSIBLES ROTACIONES
Primer año o 1º ciclo de cultivo
Parcela 1 Parcela 2 Parcela 3 Parcela 4 Parcela 5 Parcela6
Segundo año o 2º ciclo de cultivo Tercer año o 3º ciclo de cultivo
Solanáceas Tomates Pimientos
Berenjenas +
Lechugas intercaladas 3 a 6 kg/m2 de compost
Compuesta Lechuga Rúcula
Quenopodia
Acelgas Espinacas
0 a 2 kg/m2
compost
Umbelíferas Zanahorias
Apio Liliáceas
Ajo Cebolla
+ Hinojo
0 a 2 kg/m2 compost
Leguminosa Judías Habas
+ Lechugas
0 kg/m2 compost
Plurianuales Alcachofas
+ Fresas
3 a 6 kg/m2 compost
Voraces 1º Patatas 2º Brócoli o
abono verde
3 a 5 kg/m2 compost
Compuesta Lechuga Rúcula
Quenopodia
Acelgas Espinacas
0 a 2 kg/m2
compost
Umbelíferas Zanahorias
Apio Liliáceas
Ajo Cebolla
+ Hinojo
0 a 2 kg/m2 compost
Leguminosa Judías Habas
+ Lechugas
0 kg/m2 compost
Solanáceas Tomates Pimientos
Berenjenas +
Lechugas intercaladas 3 a 6 kg/m2 de compost
Plurianuales Alcachofas
+ Fresas
3 a 6 kg/m2 compost
Voraces 1º Patatas 2º Brócoli o
abono verde
3 a 5 kg/m2 compost
Umbelíferas Zanahorias
Apio Liliáceas
Ajo Cebolla
+ Hinojo
0 a 2 kg/m2 compost
Leguminosa Judías Habas
+ Lechugas
0 kg/m2 compost
Solanáceas Tomates Pimientos
Berenjenas +
Lechugas intercaladas 3 a 6 kg/m2 de compost
Compuesta Lechuga Rúcula
Quenopodia
Acelgas Espinacas
0 a 2 kg/m2
compost
Voraces 1º Patatas 2º Brócoli o
abono verde
3 a 5 kg/m2 compost
Plurianuales Alcachofas
+ Fresas
3 a 6 kg/m2 compost
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En huertos de climas cálidos, en una misma parcela podemos llegar a realizar
de dos a tres cultivos diferentes en un mismo año, por eso los ciclos de cultivo
y las rotaciones son más cortos: en 1 o 2 años, habremos completado el
esquema anterior.
CULTIVOS MÁS FRECUENTES EN EL HUERTO
ACELGA
- Época de siembra: Todo el año.
- Marco de cultivo: 30-40 cm
- Observaciones: siembra directa y/o repicado y trasplante
- Recolección: todo el año.
- Riego: frecuente
Tierra y abonado: se adapta bien a casi todas las tierras, aunque prefiere
tierras arcillosas-silíceas antes que calcáreas, y a poder ser, profundas y ricas
en humus. Conviene realizar un abonado a base de compost y aportar
regularmente compost o humus de lombriz en la fase de gran desarrollo.
Siembra y trasplante: en zonas cálidas podemos plantar en semillero y
repicarlas a macetas cuando alcancen los 6-8 cm de altura. Elegiremos para la
siembra y el trasplante un día de luna creciente.
Mantenimiento: es conveniente disponer de acolchado, y también protegerlas
de los pájaros, instalando algún CD. A medida que van engrosando,
cosecharemos hoja a hoja.
AJO
- Época de siembra: de Octubre a Enero.
- Marco de cultivo: 10-15 cm
- Profundidad de siembra: 2-4 cm
- Observaciones: siembra directa
- Recolección: Junio-Julio
- Exposición solar: pleno sol.
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- Riego: escaso
Su cultivo es necesario tanto por su uso, como por servir de repelente de
insectos y para preparar diferentes insecticidas.
Tierra y abonado: prefiere tierras ligeras, permeables y bien aireadas, y no le
sientan bien las tierras pesadas y húmedas.
Siembra: con clavar sobre la base plana los dientes de ajo, dejando las puntas
fuera (a poder ser en luna menguante). Tendremos que dejar de 6 a 10 cm
entre ajo y ajo.
Mantenimiento: requieren pocos cuidados y mínimo riego, no necesitan abono
previo ni durante su fase de cultivo.
No conviene acolchar con paja los ajos, es mejor cultivarlos en tierra desnuda.
Cosecha: cuando estén bien formados y las hojas comienzan a secarse.
ALCACHOFAS
- Época de siembra: División de matas en julio-septiembre
- Marco de cultivo: 60 x 70 cm
- Observaciones: trasplante por división de matas
- Recolección: de noviembre a junio
- Riego: frecuente y abundante
Son plantas muy voraces que necesitan de buenos abonados de fondo y
aportes regulares de compost bien descompuesto. Le gustan las tierras francas
y sueltas, ricas en humus. No soporta las heladas ni el calor excesivo, por lo
que en climas cálidos se cultivan de finales de verano a principios de
primavera. Requiere abonados regulares durante la fase de producción, así
como un buen aporte de compost en el aclareo de finales de verano, antes del
otoño.
Su forma mas habitual de reproducción es por división de matas, y consiste en
arrancar las estacas laterales de las matas de las alcachoferas. Se plantarán
en líneas o bancales, separadas unos 70 cm entre sí y entre líneas, y
cubriendo la tierra con una capa de 5 cm de compost. Aplicaremos una capa de
acolchado para no realizar muchas labores de mantenimiento.
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Cada brote de alcachofa, saca una inflorescencia central y luego varias
laterales, que cada vez son de tamaño inferior. A partir de la tercera alcachofa
cortada, conviene apartar el acolchado y depositar una nueva capa de
compost, a fin de no agotar las reservas de nutrientes en la tierra.
Los ataques de pulgón en épocas de cambios climáticos y en épocas donde
abusamos de abono fresco, podemos controlarlos propiciando la presencia de
tijeretas o recurriendo al jabón potásico, a repelentes de extracto de ajo.
CALABACINES
- Época de siembra: Marzo-Abril
- Profundidad de siembra: 2 cm
- Marco de cultivo: 90 x 80-90 cm
- Trasplante: siembra directa o semillero/trasplante
- Recolección: 60 a 90 días
- Exposición solar: pleno sol.
- Riego: frecuente y abundante
Son de las plantas mas fáciles de cultivar y mas productivas del huerto.
Prefieren tierras bien abonadas, francas, mullidas, ricas en humus y aireadas,
pero que retengan bien la humedad.
Siembra-trasplante: podemos sembrar las semillas en semilleros, desde febrero
hasta mayo; cuando estén bien desarrolladas sus hojas, los llevaremos a la
tierra, aportando antes una buena dosis de compost muy descompuesto en
cada hoyo en donde hagamos el trasplante. Tras el trasplante, esparciremos
unos 3 kg de compost por mata, y cubriremos con acolchado de paja. Pasado
mes o mes y medio, podremos comenzar a cultivar calabacines; es importante
recolectarlos tiernos, y cortar las hojas viejas que presenten manchas de oidio.
CEBOLLA
- Época de siembra: Enero a Marzo; Agosto a Septiembre
- Profundidad de siembra: 1 cm
- Marco de cultivo: 10-15 x 10-15 cm
- Observaciones: Trasplante a los 3 – 4 meses de la siembra
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- Recolección: a los 3 – 4 meses del trasplante
- Riego: regular
HABAS
- Época de siembra: septiembre a noviembre
- Profundidad de siembra: 3-4 cm
- Marco de cultivo: 20-25 x 50 cm
- Siembra directa 2 o 3 semillas por hoyo.
- Recolección: 4 meses desde la siembra
- Exposición solar: pleno sol
- Riego: esporádico
No toleran el exceso de calor, lo que limita su cultivo a finales de otoño-invierno
y/o a principios de primavera.
Es una planta con mucha energía y prefiere suelos con exceso de estiércol. Se
pueden sembrar las semillas en plena tierra (septiembre-octubre), colocando
de 2 a 3 semillas en cada hoyo, dejando una separación entre hoyos de 20 –
25 cm, y entre líneas de 50 cm. La siembra de habas es importante realizarla
en luna llena, si se quiere propiciar la obtención de abundantes cosechas. Se
aconseja cubrirlas con acolchado de paja. Para la obtención de semillas,
podemos dejar la mejor mata de habas sin cosechar, y dejamos granar y secar
las vainas y sus frutos, para así disponer de buena semilla para próximos años.
LECHUGAS
- Época de siembra: todo el año
- Profundidad de siembra: 0,5 cm
- Marco de cultivo: 20 cm x 40 cm
- Siembra directa y clareo o en semillero y trasplante.
- Recolección: 70-90 días.
- Riego frecuente y regular.
Existen una gran variedad de lechugas que nos permiten cultivarlas durante
todo el año. En nuestra zona, tenemos que plantar de cara al verano, lechugas
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resistentes al espigado. Las mas populares son las lechugas romanas, grandes
y de hojas alargadas, seguidas de las maravillas de verano, y después existen
otras como hojas de roble, iceberg...
Las lechugas se desarrollan bien en tierras fértiles ricas en humus y que
retienen bien la humedad. En verano se aconseja buscarles zonas
semisombreadas para evitar el espigado. Al tener un desarrollo rápido,
podemos combinar su cultivo con pimientos o tomates, ya que en el momento
que las tomateras alcancen un gran porte, ya habremos cosechado las
lechugas.
Antes de plantarlas en nuestra parcela, se aconseja aportar gran cantidad de
materia orgánica; si las vamos a plantar en tierras pobres, podemos añadir de 2
a 3 kg de compost por metro cuadrado de cultivo.
Se pueden sembrar al aire libre de marzo a septiembre, y el resto de meses en
semilleros. Cuando las plantas alcanzan de 6 a 8 cm, las podemos repicar a
botes reciclados o macetitas, y trasplantar a plena tierra cuando ya tengan
desarrolladas sus raíces y alcancen
los 10 cm de altura. Dejaremos
entre lechugas una distancia de
unos 20 cm, y entre líneas de
lechugas unos 40 cm.
Es importante planificar bien las
siembras para poder cosechar
regularmente, realizando así
siembras escalonadas y trasplantes
regulares a ser posible de distintas
variedades.
Una vez cultivadas, cubriremos la zona con acolchado. Si abusamos del
compost fresco, podemos tener problemas de pulgones.
La cosecha de la lechuga se puede realizar, o bien cortando la misma cuando
alcanza su máximo desarrollo y antes de que espigue, o podemos hacer
cosechas solo de hojas, al igual que se hace con las acelgas. Este sistema
permite alargar durante mas de un mes el tiempo de cosecha, al tiempo que
consumimos las hojas con mas riqueza a nivel nutritivo.
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Cultivo de lechugas paso a paso
Sembraremos las semillas en un sustrato de siembra. Cubrimos con mantillo y
regamos bien.
Cuando alcancen los 5 cm de altura, haremos un repicado, trasplantando
plantitas de lechuga en recipientes de enraizado (macetitas o bandejas
alveoladas).
Cuando las plantitas hayan enraizado bien, las trasplantaremos al espacio de
cultivo, teniendo en cuenta los requerimientos de la variedad.
MELON
- Época de siembra: Abril-mayo
- Profundidad de siembra: 1 cm
- Marco de cultivo: 1 metro x 70 cm
- Recolección: a los 4 meses.
- Exposición solar: a pleno sol.
- Riego: escaso.
El melón necesita zonas muy soleadas dentro del huerto y en tierras francas,
mullidas, y bien abonadas. Realizaremos semilleros y en marzo o abril,
trasplantarlas en plena tierra. Una vez en tierra, cuando las plantas tengan ya 4
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o 6 hojas, depositaremos de nuevo una capa de compost sobre la tierra y
acolcharemos con paja.
La época de cosecha la podemos reconocer cuando, al detectar que se seca la
hojita pegada al melón, o también observando cuando el pedúnculo empieza a
separarse o se hunde fácilmente al presionar el extremo de la zona
correspondiente al punto floral de cada melón.
PATATAS
- Época de siembra: Enero-Marzo y Agosto-Septiembre
- Profundidad de siembra: 7-8 cm
- Marco de cultivo: 30-40 x 50-70 cm
- Recolección: 3 o 4 meses.
- Exposición solar: pleno sol y espacios bien aireados
- Riego: regular.
Su cultivo es relativamente fácil si disponemos de suficiente espacio en la
parcela. Necesitan de tierras francas, ricas en humus, mullidas. Las patatas
necesitan para engrosar, grandes cantidades de estiércol (4 a 6 kg de estiércol
por metro cuadrado). Si enterramos hojas frescas o secas de albahaca en la
tierra de cultivo, podremos incrementar notablemente el tamaño de las patatas.
Se puedes realizar dos cultivos de patata al año: uno en invierno, y el segundo
en pleno verano (agosto), para obtener una cosecha tardía en noviembre.
La técnica de siembra mas habitual, consiste en cortar las patatas en varios
trozos, presentando estos varios brotes de germinación, y enterrarlas en la
tierra bien labrada y mullida, dejando unos 40 cm entre patatas y unos 70 cm
entre líneas.
En el cultivo tradicional, se entierran los trozos de patata a unos 6 cm de
profundidad, cultivándolas en surcos de tierra a los que se practica varios
aporques con la tierra recogida de entre los surcos. Es un método que requiere
mucho trabajo, por lo que se puede plantear otro sistema.
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Siembra en surcos.
Existe un método conocido como “Método simplificado”, que consiste en
enterrar las patatas en líneas, a ras de suelo, y cubrirlas con 3 o 4 cm de
compost. Sobre el compost instalaremos las líneas de riego por goteo y
cubriremos todo con una capa de 4 a 6 cm de paja. La mejor fase lunar para la
siembra de patata es la de Luna menguante.
Con el método simplificado, no tenemos que preocuparnos de nada mas hasta
la cosecha, en cambio, con la siembra en surcos, tendremos que realizar varias
escardas y un par de aporques con tierra para mantener mullida la tierra.
La cosecha de la patata comienza cuando observamos que las hojas de las
mismas comienzan a marchitarse y secarse (generalmente tras la floración),
para ser mas exactos, podemos desenterrar alguna y frotar la piel con los
dedos, si salta fácilmente, aún le quedan unos días antes de la cosecha.
La recolección de patatas es conveniente realizarla con la Luna llena, y
dejaremos las patatas unas horas al aire libre para que se sequen.
PIMIENTOS
- Época de siembra: Febrero-Abril
- Profundidad de siembra: 1 cm
- Marco de cultivo: 40-50 cm x 60-70 cm
- Observaciones: siembra en semillero protegido y trasplante
- Recolección: a los 4-5 meses.
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- Exposición solar: a pleno sol, les favorece el calor.
- Riego: regular, abundante.
Estas solanáceas necesitan para su desarrollo, espacios muy soleados y
temperaturas elevadas. Para elegir la mejor variedad que se adapte a nuestro
cultivo, se pueden plantar tres o cuatro variedades diferentes y ver como
evolucionan.
Necesitan tierras fértiles, ricas en humus, y añadiendo de 3 a 5 kg de compost
por cada metro cuadrado de cultivo, y añadir acolchado.
En cuanto a necesidades de marco de plantación, el pimiento es muy parecido
a los tomates, salvo que necesitan de mas horas de luz y mas calor que las
tomateras. Como medida protectora antipulgón, podemos plantar una planta de
albahaca cada 4 o 5 pimientos.
TOMATE
- Época de siembra: Enero-marzo y mayo-junio
- Profundidad de siembra: 0,5 - 1 cm
- Marco de cultivo: 40-50 x 60-70 cm
- Siembra: semillero protegido, repicado y trasplante posterior
- Recolección: a los cuatro meses
- Exposición solar: a pleno sol
- Riego: regular
Existen infinidad de variedades de tomate para elegir, en nuestro caso,
elegiremos aquellas variedades que se cultiven de manera local (tomate de
Mutxamel).
Las tomateras son plantas rústicas que se adaptan a todo tipo de tierras y
factores ambientales, pero al tratarse de plantas muy voraces, necesitan de
muchos aportes de materia orgánica.
Tras la siembra en semilleros, y cuando las plantitas hayan enraizado,
podemos trasplantarlas al aire libre, respetando el marco de plantación
anteriormente indicado. En el trasplante conviene enterrar los tallos hasta las
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primeras hojas. Tras el mismo regaremos copiosamente a fin de favorecer un
buen enraizado en la tierra.
Después del trasplante, cubriremos con acolchado de paja, para favorecer el
mantenimiento de la humedad.
Con el crecimiento de las matas, se requiere un entutorado usando cañas.
Conforme vayan creciendo las tomateras, iremos cortando los brotes laterales,
dejando el brote principal y sus racimos de flores, y los ataremos al tutor.
A partir de que las tomateras hayan desarrollado su tercer ramillete de flores,
podemos ir podando también las hojas mas viejas de la parte inferior de la
mata. Una buena forma de ahuyentar a los pulgones, será el plantar albahaca
entre las tomateras.
ZANAHORIA
- Época de siembra: Febrero-Octubre
- Profundidad de siembra: 0,5 a 1 cm
- Marco de cultivo: 5-10 x 10-20 cm
- Observaciones: siembra a voleo o en líneas.
- Recolección: a los 4 o 5 meses.
- Exposición solar: todas
- Riego: frecuente
Prefiere una tierra de cultivo suelta, sin piedras. Necesita cantidades
importantes de materia orgánica, pero no soporta el estiércol fresco. La materia
orgánica ha de estar bien descompuesta, solamente aportando 1 kg de humus
de lombriz por cada metro cuadrado.
Las semillas presentan una germinación lenta, y podemos sembrar
directamente a voleo, esparciendo la semilla sobre la tierra y removiendo
ligeramente la superficie. No se aconseja poner acolchado. Una vez que van
germinando, realizaremos clareos, dejando espacio de unos 3 cm entre
plantitas.
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II. PRODUCCIÓN, SELECCIÓN Y MEJORA DE SEMILLAS
2.1 SEMILLAS Y SEMILLEROS
Algunas hortalizas se pueden multiplicar por semillas, y otras en cambio,
podemos reproducirlas a través de partes vegetativas (tubérculos, bulbos,
tallos...). A continuación se explica de manera concisa, las técnicas que
podemos poner en marcha para obtener semillas.
2.2 EXTRACCIÓN Y MULTIPLICACIÓN DE SEMILLAS
REPRODUCCIÓN MEDIANTE SEMILLAS
Las semillas que utilicemos para nuestro huerto, han de reunir diferentes
características:
- Todas las semillas deben de ser de la misma variedad.
- Deben de estar limpias, sin partículas extrañas.
- Deben de germinar en condiciones de humedad y temperatura adecuadas.
A grandes rasgos, para una extracción de semillas, seleccionaremos la mejor
planta para su extracción. Del fruto seleccionado, sacaremos las semillas y las
lavaremos para eliminar restos de pulpa. Las pondremos sobre papel de
periódico y las dejaremos secar durante al menos 2 o 3 días.
PREPARACIÓN DE SEMILLEROS
Prepararemos los semilleros de la siguiente manera:
- Llenaremos el semillero con sustrato; podemos
usar diferentes tipos de semilleros, pero es
preferible usar semilleros de alveolos, que nos
permiten manejar fácilmente los plantones
obtenidos.
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- Humedecemos el sustrato
Mezclamos y nivelamos la superficie
Trazamos los surcos a la distancia que se requiera según la variedad de
semillas que plantemos
Sembrar las semillas a la distancia que aconseje
Tapamos los surcos con tierra, y también podemos tapar el semillero con papel
de periódico y /o plástico humedecido.
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Una vez preparado el semillero, mantendremos la humedad constante en el
mismo, y lo revisaremos un par de veces al día; en cuanto germinen las
semillas, hay que retirar el papel y/o el plástico que hemos colocado.
A la hora de regar, tendremos que usar un pulverizador o similar, para evitar
desenterrar las plantitas. Es mejor regar temprano por la mañana, para que las
gotas de agua que se formen se vayan evaporando a lo largo del día.
Los semilleros han de estar protegidos de lluvias intensas, heladas, sol muy
fuerte, por lo que podemos colocar plástico sobre el semillero, o dejarlos bajo
techo.
Una vez pasados 30 o 40 días desde la siembra de los semilleros, y ya cuando
las plantitas tienen ya 4 5 hojitas, se puede realizar el trasplante. Trasplantar
significa sacar las plantitas del semillero y colocarlas en el lugar definitivo
dentro de la huerta, donde seguirán creciendo hasta la cosecha. Dos o tres
días antes del trasplante, dejaremos de regar los semilleros; el mismo día del
trasplante, regaremos un poco, ya que la tierra ha de estar mas o menos seca.
CÓMO HACER EL TRASPLANTE
Sacar las plantitas con ayuda de una pequeña pala o cuchara; junto con las
plantitas, sacar el máximo de tierra posible.
Con mucho cuidado, sacar las plantitas una a una y colocarlas en un paño
húmedo. En este momento, aprovecharemos para retirar las mas débiles.
El trasplante ha de hacerse en la mañana o en días nublados.
Si hemos conseguido sacar plantitas con tierra rodeando sus
raices, haremos agujeros en hileras; colocaremos cada plantita
en ellos, y afirmaremos el suelo con las manos para que las
raíces tomen contacto con la tierra.
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Si en cambio, las plantitas salen a raíz desnuda,
haremos agujeros con ayuda de un plantador, e
introduciremos las plantitas extendiendo sus raíces, y las
enterraremos un poco mas por debajo de donde estaban
en el semillero.
REPRODUCCIÓN VEGETATIVA
Algunas hortalizas se pueden multiplicar plantando partes vivas de la misma
planta:
Espárrago: se multiplica por raíces o arañas.
Ajo: se multiplica por dientes o bulbos.
Alcachofa: se multiplica por hijuelos
Fresas: multiplicación por estolones
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2.3. OBTENCIÓN Y PROCESAMIENTO DE SEMILLAS
CUCURBITÁCEAS
Sandía
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Pepino
Melón
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Calabazas y calabacines
LEGUMINOSAS
Familia muy numerosa distribuida por las zonas templadas del mundo, las
plantas interesantes para nosotros pertenecen a las papilonáceas o fabáceas, y
tienen como característica las hojas pinnado-compuestas y la corola
característica de la flor, formada por un dorsal alzado (estandarte), dos
laterales (alas), y dos ventrales mas o menos soldadas por el borde, formando
una quilla.
Judías o alubias
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Habas
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SOLANÁCEAS
Tomate
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Berenjena
Se escogen los primeros frutos de las plantas mas vigorosas y saludables y se
dejan hasta que la planta se vaya a caer.
Pimiento
Patata
La multiplicación normal de esta especie es vegetativa, utilizando tubérculos
como semilla.
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QUENOPODIÁCEAS
Plantas anemófilas de flores poco vistosas, que suelen aparecer en verano.
Destacan por su interés alimentario las espinacas, pero sobre todo tiene mayor
interés la acelga en sus múltiples variedades (acelga, remolacha roja, etc).
Acelga
Espinacas
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COMPUESTAS
Es el grupo de plantas mas numeroso, que presenta mas diversidad
morfológica y de requerimientos ambientales, por lo que ocupa prácticamente
todo el planeta.
Lechuga
Alcachofa
Las plantas producen flores, que cuando son inmaduras son comestibles, con
una excelente actividad diurética y depurativa.
El cultivo convencional se realiza por chupones de las plantas que dan flores
de gran tamaño, tiernas y cerradas. Cuando estos alcanzan al menos 30 cm de
altura, se extraen sacando el mayor número de raíces y se replantea en un sitio
permanente.
CRUCÍFERAS
Se diferencian por su estructura floral: cuatro pétalos que forman una cruz.
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Brócoli y coliflor
UMBELÍFERAS
Las flores se agrupan en umbelas. De manera general, estas inflorescencias se
cortan y se secan al sol, y se cubren por la noche para protegerlas del rocío.
Cuando ya están secas las semillas, se trillan.
Zanahoria
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LILIÁCEAS
Familia cosmopolita y de flores vistosas. Las piezas florales suelen ser
múltiplos de tres, y suelen ser geófitos bianuales, es decir, soportan las épocas
desfavorables bajo la tierra, con órganos de reserva, mientras pierden las
partes aéreas.
Cebolla
Puerro
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III. ACONDICIONAMIENTO Y NUTRICIÓN DEL HUERTO.
Para conseguir un huerto sano y productivo, necesiamos conocer la tierra con
la que contamos, y también diferenciar cómo podemos mejorar sus condiciones
vitales para poder producir plantas de buena calidad.
Entre los condicionantes que inducirán a elegir un momento y una técnica de
labor específicos, tenemos:
- El cultivo: en función del cultivo que queremos establecer en ese suelo,
deberemos conseguir unas características concretas tras la labor.
- Las características de la tierra: atendiendo a si nos encontramos con un suelo
arcilloso, o arenoso, etc.
- Las condiciones climáticas: realizaremos las labores necesarias en función de
retener la humedad o drenarla.
- La acción sobre la materia orgánica: el laboreo suele acelerar la vida
bacteriana y la actividad de los organismos digestores de la materia orgánica
presentes en el suelo.
- La fertilización: dependerá de la profundidad a la que queremos incorporar un
determinado abono.
3.1 ABONO Y COMPOST: ABONOS Y FERTILIZACIÓN
A la hora de preparar el terreno, tendremos en cuenta que necesitamos aportar
de manera regular nutrientes al suelo. En agricultura ecológica, usaremos
abonos orgánicos, tales como:
- Estiércol: encontramos diferentes tipos de estiércol (oveja, vaca,
caballo, etc.), debe estar descompuesto pevio a su uso.
- Algas marinas: no contienen grandes cantidades de nitrógeno,
pero en cambio presentan concentraciones de potasio y de otros
oligoelementos interesantes para la salud del huerto. Se suelen
usar para mejorar la estructura del suelo.
COMPOSTAJE
El compost es materia orgánica en descomposición mas o menos avanzada
que, habitualmente, se elabora componiendo unos montones que pueden tener
formas y dimensiones diferentes.
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La fermentación en montón permite controlar el proceso y obtener una materia
orgánica de buena calidad.
Para su elaboración podemos emplear cualquier material orgánico: estiércol de
distintas procedencias, restos de cosechas, malas hierbas, restos orgánicos de
las casas, restos de poda. La incorporación de estiércol fresco al montón de
compostaje, aporta el nitrógeno necesario para activar la vida microbiana.
A la hora de amontonar el compost, podemos hacerlo fabricando una
compostera con palets, o comprar una ya prefabricada. Ubicaremos la
compostera en un lugar sombreado, resguardado de vientos. El montón de
compost en descomposición, tendremos que mantenerlo con una humedad
suficiente.
La compostera ha de
situarse sobre la tierra,
nunca sobre asfalto ni
cemento. El material
aportado al montón se
añadirá lo mas troceado
posible, también
necesitaremos alguna
herramienta para ir
volteándolo y un tamiz para
poder separar el compost
ya preparado de los restos vegetales que aún no se han descompuesto.
COMO PREPARAR LA COMPOSTERA
En la base de la compostera, se prepara un lecho de material leñoso de 20 cm
aproximadamente, compuesto por ramas, paja, o cualquier otro material que
permita la aireación.
Se introduce una masa que alcance en altura hasta la mitad de la compostera,
de materiales húmedos y secos mezclados. Se incorporan regularmente
materiales secos (hojas, paja, papel...y mezclado con estiércol) y húmedos
(restos de fruta y verdura, césped), intentando que la proporción sea de 2
partes de material húmedo por 1 parte seca. Es importante remover el aporte
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nuevo con el aporte anterior, y si queremos acelerar el proceso, de vez en
cuando añadiremos estiércol.
Se ha de controlar la humedad general de la pila, por lo que realizaremos
volteos esporádicos para que se homogeinice la humedad en toda ella.
Una vez pasados al menos 5 meses, se puede empezar a extraer ya el
compost elaborado, por la parte inferior de la pila.
Usaremos un tamiz para separar los elementos aún no compostados e
introducirlos de nuevo en la pila. El compost recién extraído, lo dejaremos al
menos un mes al aire, antes de poder aplicarlo en la parcela.
Podemos usar el compost fresco como acolchado, y el que esté ya seco como
abono, aplicando unos 2 a 3 kg por cada metro cuadrado de parcela de cultivo.
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3.2 Ph DE LA TIERRA
Existen una serie de características específicas que predominan en
determinados suelos y que confieren a la tierra una mayor o menor aptitud para
ciertos cultivos y por tanto, condicionarán la forma de trabajarla.
La tierra se clasifica por su textura, es decir, el tamaño de sus partículas,
siendo las francas las mejor consideradas para huerto.
En el caso de suelos calizos como los que tenemos en Levante, el aporte de
enmienda orgánica nos irá ayudando a mejorar su estructura. Estas tierras
calcáreas presentan un nivel elevado de pH. Para poder medir el pH del suelo
de nuestra parcela, contaremos con un medidor de pH. Se aconsejan valores
cercanos a 6,5.
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IV. MEDIDAS DE PREVENCIÓN Y CONTROL BIOLÓGICO DE
PLAGAS Y ENFERMEDADES EN CULTIVOS HORTÍCOLAS
La lucha biológica responde a la necesidad de hacer entender que, si se hace
correctamente, apenas aparecen problemas asociados a plagas y
enfermedades. Y cuando aparece alguna plaga o enfermedad, podemos poner
en práctica remedios naturales o bien practicar el control biológico de plagas.
En la agricultura convencional, los desequilibrios que se provocan en la tierra
por el uso de sustancias químicas, y el forzado al que se someten los cultivos,
debilitan tanto a las plantas que se convierten en pasto de enfermedades,
plagas y parásitos. Estos problemas intentan solucionarlos con grandes dosis
de sustancias químico-sintéticas en forma de insecticidas, acaricidas y
fungicidas.
En el medio natural, cuando unos determinados seres vivos se convierten en
plaga, significa que por alguna circunstancia se ha roto el equilibrio biológico de
dicho medio. Ante una plaga, las plantas ponen en marcha mecanismos de
defensa en forma de sustancias repelentes o directamente tóxicas con efectos
insecticidas, fungicidas o viricidas. Sus depredadores naturales se multiplican a
expensas de él.
4.1 IDENTIFICACIÓN Y CONTROL DE PLAGAS EN CULTIVOS
HORTÍCOLAS
Ante una plaga establecida en nuestro huerto, tenemos varios modos de
intervención a nuestro alcance:
- Intervención física: recogida manual de parásitos dañinos o bien eliminación
de las partes afectadas para frenar su expansión (mallas, cintas engrasadas,
tiras amarillas que nos servirán para poder conocer la fauna auxiliar existente
en el huerto, trampas con atrayentes sexual o alimentaria...
- Repelentes: a base de decocciones o extractos de plantas como ajo, ajenjo,
ortigas, cola de caballo, nim.
- Insecticidas naturales: fumigados en las plantas afectadas, para que no
afecten a todo el sistema.
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- Control biológico: introduciendo especies antagónicas o depredadoras de la
plaga.
A continuación, se resumen las principales plagas que podemos encontrar en
el huerto, y su posible control biológico:
MOSCA BLANCA (Bemisia tabaci)
Aparece en ambientes húmedos.
DAÑOS PRODUCIDOS
� Deterioro del crecimiento (Absorción de savia)
� Transmisión de enfermedades víricas
� Desarrollo de hongos
ENEMIGOS NATURALES
� Encarsia Formosa
Esta avispa la parasita. Podemos también colocar trampas amarillas en las
plantas cultivadas. La dilución al 1% de jabón potásico también suele dar
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buenos resultados. En caso de ataques masivos, podemos probar con el uso
de Nim pulverizado
PULGÓN (Aphis sp)
Son insectos chupadores, que filtran la savia dejando sobre las hojas una
melaza pegajosa, de la que se alimentan las hormigas. Suelen aparecer en
épocas de crecimiento muy rápido de los cultivos, sobre todo en zonas con
exceso de abonos nitrogenados.
DAÑOS PRODUCIDOS
� Deterioro del crecimiento (Absorción de savia)
� Transmisión d enfermedades víricas
� Desarrollo de hongos
ENEMIGOS NATURALES
Tienen algunos enemigos que se pueden usar para su control:
� Coccinella septempunctata
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� Aphidius colemani
� Crhysopa carnea
Podemos también probar en aplicar tratamientos con jabón potásico (100 g
de jabón disueltos en 10 litros de agua), o en caso de mucha persistencia,
recurrir al aceite de Nim.
TRIP (Frankliniella occidentalis)
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DAÑOS PRODUCIDOS
� Deterioro del crecimiento (Absorción de savia)
� Transmisión del virus del bronceado del tomate
ENEMIGOS NATURALES
� Amblyseius cucumeris
� Orius laevigatus
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ARAÑA ROJA (Tetranychus urticae)
Son diminutas arañas de color rojizo, que aparecen en el envés
de las hojas, que van secando. Aparecen asociadas al estrés
hídrico en periodos secos o con falta de riego.
DAÑOS PRODUCIDOS
� Daños mecánicos
� Retraso del crecimiento
� Disminución de la producción y calidad
� Desecación de la planta en casos extremos
ENEMIGOS NATURALES
� Amblyseius californicus
También podemos probar fumigando con infusiones o decocciones de ajenjo,
cola de caballo, ortiga, o en última instancia, aplicar aceite de Nim.
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POLILLA DEL TOMATE (Tuta absoluta)
DAÑOS PRODUCIDOS
� Daños en la producción y calidad de los frutos
� Necrosan las hojas
� Si se alojan en los tallos afectan al desarrollo general de la planta.
ENEMIGOS NATURALES
� Nesidiocoris tenuis
� Macrolophus pygmaeus
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� Bacillus thuringiensis. Es una bacteria que presenta gran actividad
contra un amplio grupo de orugas de lepidópteros. Se usa tanto para el
control de orugas en pino (procesionaria), como a nivel hortícola. Se
aplica en fumigación foliar.
COCHINILLAS
Existen muchas variedades de cochinillas, pero en general, se alimentan de
savia y excretan una melaza pegajosa que acaba cubriendo las hojas, en las
que se desarrollan los hongos de la negrilla, llamado así porque deja negruzcas
todas las hojas y ramas infestadas. Para su control usaremos el lavado con
vapor de agua, y agua con zumo de limón. En casos mas graves, puede
alternarse con tratamientos con jabón potásico, y algún insecticida vegetal.
HONGOS PROBLEMÁTICOS EN EL HUERTO
OÍDIO
Vello blanquecino que actúa sobre las hojas y tallos en plantas débiles,
situadas normalmente a la sombra, o con mucha humedad ambiental.
Aparecen frecuentemente en las hojas de cucurbitáceas, y podemos controlarla
mediante diluciones con suero de leche o yogurt (mas adelante se comenta).
MILDIU
Aparecen manchas marrones en el haz de las hojas; aparece en ambientes de
elevada humedad, y se propaga fácilmente por el roce de las hojas.
ROYA
Aparecen unas pústulas anaranjadas o marrones, y prolifera en ambientes de
vegetación exuberante.
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BOTRITIS
Produce podredumbres y manchas grises en las zonas infestadas. El tejido
afectado se deteriora y muere;
Plantas mas usuales para el control de parásitos y plagas
- Ajo: se usa como repelente insecticida en general, sobretodo
contra el pulgón. Se puede preparar una tintura con ajos
troceados diluidos en alcohol (20% del volumen) dejando macerar
8 días. Se aplica de 10 a 20 cm3 por litro de agua. Lo mas sencillo
es usarlos directamente machacados o triturados y diluidos en
agua (y luego filtrar).
- Ajenjo: en maceración con agua o en decocción, actúa como
repelente de hormigas, orugas, pulgones. Se usan 300 g de
planta fresca por litro de agua.
- Cola de caballo: las decocciones de cola de caballo son un buen
preventivo de ataques fúngicos y también un gran remineralizante
y reforzante en general. Se usa 1 kg de planta fresca por cada 10
litros de agua.
Elaboraciones de preparados de plantas para tratamientos
- Maceración, fermentados: se dejan plantas frescas troceadas
diluyendo sus principios activos en agua, a temperatura ambiente
(1 kg de planta por cada 10 l de agua). El tiempo de maceración
determinará el proceso: durante 24 horas es una maceración; de
2 a 3 días es extracto fermentado. Se suelen realizar
maceraciones de ortigas, y si se añade jabón potásico a la
maceración en el momento de la aplicación, permite ampliar sus
propiedades.
- Infusiones: plantas en agua hirviendo y dejarlas macerar de 5 a
10 minutos, obtenemos que pasan al agua los principios activos.
- Decocción: en olla tapada, durante mas de 10 minutos, y
posteriormente dejamos reposar; se usa con cola de caballo.
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- Tintura: la maceración de plantas en alcohol, diluye los principios
activos contenidos en la planta mas rápidamente que cuando las
maceramos en agua. A partir de las 8 horas de maceración ya
podemos hacer uso de la tintura (conviene no dejar las plantas en
alcohol mas de 8 días) reviamente filtrada. La tintura concentra
muchos principios activos y tiene la ventaja de poder guardarse
durante meses.
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V. PRODUCCIÓN Y COSECHA
5.1 SISTEMAS TRADICIONALES PARA EL ENTUTORADO DE
HORTALIZAS
En nuestro huerto, encontramos varias hortalizas que necesitan del
entutorado para su crecimiento. El entutorado consiste en guiar a una
planta, normalmente trepadora, como puede ser el tomate, el melón, los
pimientos...
Lo mas habitual es utilizar una
estructura de caña. La caña que
se suele usar en nuestra zona, es
la caña perteneciente a la especie
Arundo donax, que crece de
manera espontánea en zonas
húmedas o en riberas de los ríos.
La mejor época de recolección de
cañas para su posterior uso,
comprende los meses desde Diciembre a Febrero, periodo en el que la
caña está en reposo vegetativo. En el momento de la recolección, se deben
usar unas tijeras podadoras para cortarlas, y con ellas se han de retirar los
brotes laterales y el extremo final de las mismas. Una vez preparadas las
cañas se han de agrupar en número de 30 o así,
y dejarlas secar.
Para realizar el entutorado, primero tendremos
que realizar cavallones a ambos lados de la
línea de plantación. Se sitúa cada caña a unos
0,75 m, y se sitúan unas frente a otras a lo largo
del cavallón. Cada caña se ata con la que tiene
enfrente, y en la segunda caña se atan cuatro
cañas en vez de dos, y se forma así lo que se
suele llamar “frare”, formando una especie de
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tipi indio. Esta manera de realizar el entutorado, nos ofrece una mayor
resistencia a los vientos. Cuando están todas las cañas atadas, se pone
una mas gruesa en el centro de la estructura, y a medida que van creciendo
las plantas, se irán añadiendo cañas en posición horizontal.
5.2 . BARRERAS VEGETALES AUTÓCTONAS Y PLANTAS AROMÁTICAS
EL HUERTO MEDICINAL La introducción de aromáticas en el huerto, responde a que favorecerá la
aparición de insectos depredadores de ciertos parásitos que resultan
beneficiosos, y de insectos polinizadores, y además, con sus aromas, repelen a
muchos parásitos de forma natural.
REQUISITOS DE ALGUNAS PLANTAS AROMÁTICAS
Albahaca: posee multitud de virtudes aromáticas, culinarias y sobre todo como
protectora de los cultivos. Prefiere tierras francas, profundas, ricas en humus,
bien abonadas, y riegos frecuentes. Prefiere lugares soleados y luminosos y
favorece acompañando a pimientos y tomateras, para protegerles frente a
ataques de pulgón. Se plantan en semilleros entre febrero-marzo, y cuando
alcancen 5 cm de altura, podemos trasplantarlas.
Aloe: no presentan demasiados requerimientos, pero no necesita demasiada
agua.
Caléndula: posee propiedades medicinales y culinarias. Sus pétalos se comen
crudos en ensaladas, y con las flores podemos preparar una pomada de
caléndula, con cera de abeja y aceite de oliva, indicada para problemas de piel,
eczemas y lesiones leves a nivel cutáneo.
Le gustan las tierras bien drenadas, en espacios soleados.
Equinácea: se puede usar como revitalizante y protectora de los cultivos. Una
vez enraizada rebrota cada año.
Espliego: se adapta bien a tierras pobres, en condiciones expuestas al sol. No
necesita demasiada agua. La lavanda, prefiere tierras mas calizas.
Menta: usaremos la hierbabuena, que necesita tierra franca y profunda, con
abundante humus, y bien soleada.
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Romero: su floración atrae a polinizadores, por lo que es aconsejable plantarlas
también cerca de tomateras y calabacines.
Se puede cultivar en cualquier tierra, aunque prefiere las calcáreas.
Salvia: no es muy exigente en cuanto a tierra y abonados, aunque no soporta
bien las tierras húmedas o muy arcillosas. Es aconsejable plantarla junto a
romeros y tomillos, ya que se potencian mutuamente.
Tomillo: requiere pocos cuidados.
Esquema de la zona de aromáticas.
Albaha
ca y
menta
Albaha
ca y
menta
Albaha
ca y
menta
Albaha
ca y
menta
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VI. NUTRICIÓN Y COMIDA INTELIGENTE
6.1 . COMER SANO: ALIMENTARSE Y DISFRUTAR
A la hora de evaluar un alimento, se valoran sus potencialidades
nutritivas y sus efectos sobre la salud, presentando valores mas alto en
cuanto a propiedades nutritivas se refiere. Tanto la agricultura ecológica
como la tradicional, tiene aparte un efecto beneficioso sobre el medio,
ya que en ausencia de residuos de plaguicidas y abonos químicos,
estamos preservando la biodiversidad, y contribuyendo a paliar los
efectos del cambio climático.
Los alimentos ecológicos presentan un contenido mas elevado de
materia seca, son mas ricos en vitaminas, y además, no contienen
sustancias indeseables para la salud.
También los alimentos ecológicos presentan mas sabor y mejor aroma
que los alimentos convencionales, debido a que se usan variedades
locales tradicionales, mas adaptadas al terreno, y se cosechan cuando
ya han alcanzado su madurez, lo que aumenta el contenido en
sustancias aromáticas, azúcares y nutrientes en general.
En agricultura convencional, al presentar los alimentos un mayor
contenido en agua, empeoran la conservación después de la cosecha, y
se aceleran los procesos de pudrición.
La menor cantidad de agua de los alimentos procedentes de cultivos
ecológicos y tradicionales, facilita la conservación de los mismos.
6.2 CONSERVACIÓN DE LAS COSECHAS
FRUTAS, HORTALIZAS Y VERDURAS
A grandes rasgos, son alimentos de bajo valor calórico, pero muy ricos en
vitaminas y minerales. Son alimentos muy perecederos, por lo que
necesitamos conocer la mejor forma de conservarlos.
Diferenciamos entre frutas, hortalizas y verduras:
- Las frutas son infrutescencias o partes carnosas de órganos
florales, que han alcanzado el grado de madurez adecuado.
Proyecto “Autoabastecimiento de Alimentos”
Plan de Medio Ambiente Cruz Roja Alicante
- Las hortalizas son aquellas partes de los vegetales en estado
fresco, que bien crudas,conservadas o preparadas de diferentes
formas, se utilizan directamente para el consumo humano
(zanahoria, patata...). Este término incluye a las verduras y
excluye a frutas y cereales.
- Las verduras son hortalizas en las que la parte comestible son
los órganos verdes de la planta, como tallos y hojas; aquí también
se incluyen las legumbres verdes (judías).
MANERAS TRADICIONALES DE CONSERVACIÓN DE FRUTAS Y
VERDURAS
- Mermeladas: productos de consistencia pastosa elaborados con
fruta fresca, separando previamente huesos y semillas. Para la
preparación de mermeladas, se trituran las frutas y se cocinan
con azúcar hasta conseguir una consistencia pastosa.
Generalmente se añaden la mitad de fruta y la mitad en azúcar.
- Las confituras son similares a las mermeladas, lo único que en
ellas aparecen trozos enteros de la fruta en cuestión.
- Conservas: la verdura a conservar se pela y se pone junto con
aceite en sartén, para que, al cabo de unas horas, y tras
esterilizar los botes de conserva, vamos introduciendo la mezcla
en los botes, y con estos los pondremos al baño maría unas dos
horas.
6.3 HORTALIZAS DE TEMPORADA, RECETAS TRADICIONALES
A continuación, se incluyen algunas de las recetas mas tradicionales de nuestra
zona, en las que se deben de usar variedades locales para su elaboración.
Pericana
Ingredientes:
- 6 ñoras
- 2 capellanes
- 2 cabezas de ajo
- Aceite de oliva
Proyecto “Autoabastecimiento de Alimentos”
Plan de Medio Ambiente Cruz Roja Alicante
Se tuestan al fuego las ñoras y los ajos. También tostaremos los capellanes, y
se hacen trocitos pequeños en una fuente. Se baña todo en aceite de oliva y
limón.
Mermelada de tomate
Ingredientes:
- 2 kg de tomates
- ¾ de kilo de azúcar
- 1 limón
- 1 pizca de sal
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- Botes de conserva
Pelamos los tomates y les quitamos las pepitas. En una olla, se ponen los
tomates cortados a trozos junto con medio vaso de agua, dejandolo a fuego
bajo-medio, y después añadimos el azúcar, el zumo de medio limón y una pizca
de sal. Lo dejaremos una hora y removeremos de vez en cuando para evitar
que se pegue.
Cuando adquiera una consistencia pastosa, apartamos e introducimos en los
botes a conservar, hasta el borde del bote. A continuación se han de esterilizar
los botes poniéndolos al baño maría al menos veinte minutos.