Date post: | 18-Feb-2016 |
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CÁRITAS DEL SOCORRO Entre todos contribuyendo a crear un ambiente de acogida.
Febrero 2013 Número especial.
1913- 2013
María Botella Cremades
Buzón: 1150€
37 FAMILIAS ATENDIDAS
17€ GASTO FARMACEÚTICO.
Donante del mercado ha colaborado
con 15 cajas de leche.
Restaurante Aspense con comida
caliente.
Página.
3/ Editorial. María Botella De Rico.
5/ María Botella Cremades. A 100 años de su muerte.
9/ Residencia de ancianos Virgen de las Nieves.
10/ Actividades del centenario.
Búscanos en…
C/. Genero Candela, 9 Bj.
Tel. 965 493 270
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Comité editorial:
Dirección: Carmen Amanda Pérez
Colaboradores: D. Fernando Navarro, Carlos Aznar, Pedro Abad,
Agustín Botella, Josep Aparici.
María Botella de Rico. Rev. Mons. D. Fernando Navarro Cremades, Rector de la Basílica.
El 11 de febrero de 1858 bajaba del cielo la Santísima Virgen y aparecía
en Lourdes de Francia, a una joven, Bernardette Soubirous. Justo 55 años
después subiría al cielo una hija singular de nuestro pueblo de Aspe:
María Botella de Rico, mujer profundamente religiosa cuya fe era
conocida por sus obras de caridad. El mismo día del centenario de su
muerte, 11 de febrero de 2013, día mundial del enfermo, S.S. el Papa
Benedicto XVI anunciaba su renuncia para el 28 de este mismo mes y el
cronista de la Villa, Don Carlos Aznar, pronunciaba una conferencia acerca
de la vida y la obra de María Botella. El vestíbulo del teatro Wagner
estaba repleto y al final, un caluroso aplauso manifestaba el placer de
todos quienes nos congregamos para escuchar su vida, su obra y su
muerte que tan minuciosamente documentada expuso el cronista.
Como Rector de la Basílica doy gracias a Dios por haber dado a este
pueblo una hija tan especial. Su vida, entrega, trabajo y constancia fue
construir un asilo para ancianos y ancianas desamparados de este
pueblo. ¡Qué modo más excelente y ejemplar de ejercer la caridad con
quienes menos recursos tenían! No en balde se ganó el honroso título de
“Madre de los pobres“. Trabajó tan bien, tan intensamente y tan
rápidamente que en plena juventud, el Señor se la llevo al cielo, el 13 de
febrero de 1913. El pueblo le dio innumerables muestras de gratitud y
admiración. Creo que ha llegado el momento de valorar su obra, hoy
conocida como “Residencia de ancianos Nuestra Señora de las Nieves de
Aspe” y comprometernos todo el pueblo en trabajar para que su bendita
obra no desaparezca, sino que reciba el apoyo económico, asistencial,
humano y religioso de todos los habitantes de Aspe y de todas las
Instituciones.
Decía al principio que María subió al cielo el 13/11/1913 con la suma
certeza de una fe en este año (año de la fe) ante la palabra de Jesús que
siguen siendo ciertas como entonces, ahora, a quienes en nombre de
Cristo se entregan a ayudar al bien de los demás (Mt. 25,34 y ss.)
“Entonces diría el Rey a los que estén a mi derecha: Venid benditos de mi
Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la
creación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve
sed, y me disteis de beber; estaba desnudo y me vestisteis: enfermo y me
visitasteis: preso y fuisteis a verme… Cuantas veces hicisteis eso a uno de
estos mis hermanos, a mí me lo hicisteis”
Carlos Aznar Pavía.
Cronista oficial de fiestas.
100 años de la muerte de MARIA BOTELLA CREMADES fundadora de la Residencia
de ancianos Virgen de las Nieves.
11 de febrero de 1913-2013
Cuando fueron llegando a mis manos todos estos datos me fui dando cuanta que
estaba ante la mujer más importante e interesante de todo lo que llevamos de siglo,
y también me di cuenta de que María Botella era la gran olvidada.
De María se puede decir que lo tenía todo en la vida: unos padres
maravillosos: Antonio y María, que le dieron una excelente educación a ella y a su
hermana Nieves, esposa de D. Francisco Calatayud Gil; un marido que la adoraba,
Luis Rico González propietario de unas destilerías de alcohol que se encontraban en
lo que hoy conocemos como “ pisos de la gomera” (calle Doctor Marañón); había
tenido cuatro hijos sanos y hermosos, María, Luis, Francisco y Águeda; gozaba de
buena posición…, pero María no era feliz, conocía mejor que nadie las necesidades
del pueblo, pues era habitual en ella andar por todas las calles y sus extrarradios,
pidiendo a unos y socorriendo a otros. Su madre le ayudaba y hasta le acompañaba.
Entonces las epidemias estaban a la orden del día y los ancianos después de
haberse quedado encorvados, de tanto trabajar, se morían de hambre, tuberculosis,
sarna y otras enfermedades de aquellos años. Esto es lo que encontraba María en su
recorrido diario, en todas partes se la veía, ahora ayudando en un parto, después
dando friegas a un anciano con sarna, cambiándole el vendaje a una mujer con
cáncer… y así transcurría su vida, pero ella se daba cuenta que era muy poco lo que
podía hacer por las necesidades que sufría el pueblo. Así surgió en ella la idea de
crear un asilo, idea que fue tomando forma cuando se lo comunico a sus amigas, y
gracias al apoyo de su madre el proyecto fue hacia adelante. Ahora con más ilusión
salía a recorrer las calles pues tenía a la junta de damas y entre todas se repartían el
trabajo.
El año 1913 los pabellones del
asilo estaban muy adelantados,
pero el invierno de aquel año fue
muy crudo. A María la vieron salir
muchas tardes a hacer su recorrido
habitual con un mantón sobre los
hombros y horas más tarde volver
sin él, el mantón se había quedado
arropando a un recién nacido o en
los hombros de una anciana. El
Doctor Calatayud, hermano político
de ella decía: “María, que no eres
de hierro, solo hace nueve meses
que nació tu hija Águeda y no estás
recuperada del todo”
Pero María tenía prisa porque se
terminasen las obras de su asilo y
después de atender a sus enfermos
pedía por las casas para el asilo.
En unos documentos hallados dentro de una botella detrás de la lapida que da
nombre a su calle, rescatados y conservados por Antonio Ramírez dice entre otras
cosas, para que no quepa duda sobre quien fue la fundadora del asilo: “fue Dña.
María Botella Cremades: La fundadora del asilo de caridad de Nuestra Señora de las
Nieves; asilo para ancianos desamparados que no tiene más consuelo en su vejez
que obras de esta índole. Esta señora puede decirse que sacrifico su vida por el fin
que perseguía, o sea abrir lo más pronto posible esta casa de caridad. Para ello
después de formar una lista bastante crecida de suscripciones mensuales, salía por
las calles de puerta en puerta pidiendo para el mismo fin, en el frio y en el calor y
todas las inclemencias del tiempo no han restado entusiasmo a tan caritativa dama,
que supo ganarse el honroso titulo de “Madre de los pobres”
El documento viene firmado y avalado por Gonzalo Bañón, José Bolorinos,
Isidoro Caparrós y Luis Cremades Bernal.
El día 3 de febrero María hizo su recorrido habitual, pero volvió a su casa con
una fiebre muy alta, que ya no la abandono, y en sus momentos lucidos a su hija
María, que contaba con 15 años y a su madre, les hizo prometer que continuarían su
obra. El día 11 de febrero María murió, los médicos pronosticaron pulmonía.
María Botella Cremades, nació el día 24 de febrero de 1876. Cuando murió le
faltaban 13 días para cumplir 37 años.
El momento más emocionante de su entierro fue cuando el cortejo fúnebre
llego a los pabellones, aun sin terminar, de la hoy Residencia de ancianos, allí en
medio de los montones de piedra y yeso fue depositado el ataúd de María y durante
un gran silencio se le rezo un Padre Nuestro.
El 14 de agosto de 1916 se inauguro el Asilo, pues así se ha llamado hasta
hace unos años. Había pasado siete años desde aquella reunión en casa de Doña
María Cremades Candela, donde quedó constituida la primera junta rectora y
fundadora, en la que figuraba la antes citada como presidenta y su hija María Botella
como secretaria, además de éstas había veinte damas entre las que se repartieron
los diferentes cargos propios de la junta. Pero de esta primera reunión, así como del
nombre de las damas vino amplia información en la revista “La Serranica” del año
1986, n0 38.
“Aquel 14 de agosto llegaron las hermanas fundadoras a las cinco de la
mañana saliendo a recibirlas D. Genaro Candela, Canónigo de la Santa Iglesia
Catedral de la diócesis y natural de Aspe.
El señor Calatayud, desde una de las ventanas del asilo pronuncio un elocuente
discurso dando la bienvenida a la comunidad y la enhorabuena a los habitantes de
Aspe porque ya tenían en la villa lo que tanto se había deseado.
Las hermanas fundadoras que llegaron aquella feliz mañana fueron: María
Dolores Martínez, Alberta Moyano, Elvira Molina y Dorotea Tomás.
Pero antes de llegar a la inauguración, concretamente, el día 11 de Febrero de
1913 ocurrió una gran desgracia en la misma casa donde se había celebrado la
primera reunión, en el nº 35 de la calle José Cremades fallecía María Botella
Cremades, secretaria de la junta y reconocida por todo el pueblo como la fundadora
de la actual residencia de ancianos.
Pero ¿Quién era esta mujer que el día de su muerte paralizo por completo la vida
normal del pueblo?, las fabricas cerraron, los labradores no fueron al campo, las
calles próximas a su domicilio se congestionaron de una gran multitud de gente, y
las campanas no cesaban de tocar a duelo, el mismo día de su muerte el diario de
Alicante le dedicaba en su primera pagina una columna de la que he extraído lo
siguiente: “Aspe llora hoy una de sus mayores pérdidas: la muerte acaba de
arrabiatarle a una de sus predilectas hijas, Dña. María Botella de Rico, que por sus
actos y obras mereció el calificativo de Madre de los Pobres”
Unos días después el Semanario Republicano Germinal le dedicaba un número
extraordinario, donde 34 personas de distintas ideologías le dedicaban los más
encendidos elogios, tanto a su obra como a su persona.
Y antes que se cumpliese un mes de su muerte ya tenía dedicada una calle,
pues todos los vecinos de la entonces calle de Gracia elevaron un escrito al Excmo.
Ayuntamiento, y presentando éste en sesión de 18 de febrero fue aprobado por
unanimidad, así el día 9 de marzo en un solemne acto fue descubierta la lapida que
le daba nuevo nombre a la calle.
“María Botella Cremades, pionera de la solidaridad con nuestros mayores”
Conferencia de Carlos Aznar, Cronista de Fiestas de Aspe, el lunes 11 de febrero en
el Teatro Warner.
La crítica situación española por causa de la guerra, con una sociedad empobrecida,
hambruna generalizada, epidemias, enfermedades, surge la figura de María Botella
Cremades quien dedico su corta vida
a la caridad, a ayudar a los
necesitados, cuidando enfermos,
entregando comida y ropa; pidiendo
de casa en casa de la más pudiente
colaboración para su causa. Se
empeño en crear un lugar donde los
mayores sin familia ni recursos
pudieran vivir y así logro la
fundación del Asilo o Residencia de
Ancianos, aunque su muerte
prematura a causa de la pulmonia,
no le permitió ver su obra
culminada, pero si pudo ver parte de
su construcción.
Fue una mujer fuera de su época,
una persona especial y fue
denominada “madre de los pobres”.
La obra de María Botella Cremades creada como centro benéfico social en su época
fue cambiando con el tiempo, en un principio estuvo regentada por hermanas de la
caridad hasta que el
Patronato se encargó
del centro. Ya para el
2004 la Generalitat
dictó una orden para
regularizar todas las
instituciones tales
como Asilos, Centros
de día, etc. Desde ese
momento deja de ser
un Asilo y se convierte
en Residencia de
Ancianos.
La Residencia comienza a tener problemas de liquidez con la anterior junta, llegando
a publicarse en los diarios de circulación nacional su inminente cierre o que sería
necesario someterlo a una subasta; esta situación se presentó por el dinero que se
debía a los trabajadores, seguridad social, proveedores, creándose una situación
crítica que alarmó a la población de Aspe, pues veían con asombro como una obra
de tal magnitud, tantos años y que prestaba una ayuda imprescindible a los mayores
se cerrara por una mala administración.
La situación fue tan grave que en el 2011 tuvieron que intervenir las autoridades
municipales, porque la situación asistencial y laboral estaba en crisis.
Ante tal situación se nombra una nueva junta directiva que gestiona la forma de
mantener y sacar a flote la residencia... Esta nueva junta convoca un concurso de
acreedores que se presenta al juzgado donde se plantea un plan de viabilidad que al
ser aprobado por el juez se prepara una hoja de ruta donde se establece el orden de
cobro. El concurso de acreedores se elabora para poder pagar la deuda acumulada
en la gestión anterior y además sirve para paralizar cualquier intento de embargo o
paralización.
Los acreedores pierden el 30% de la deuda y el pago será en 13 años, donde los tres
primeros son de carencia. El proyecto es importante para que la institución
funcione, atendiendo y ayudando a mayores desde el punto de vista médico,
psicológico, de rehabilitación, alimentación, medicación y sobre todo cariño y
compresión.
Actualmente la Residencias tiene 57 plazas de las cuales 27 son de aportación
pública y las otras 27 son de carácter privado. En cuanto al personal, aunque han
visto reducido su salario, prestan atención con todo el cariño y amor que los
ancianos necesitan. Se cuenta con personal sanitario: médicos, enfermeras,
actividades de rehabilitación, prevención, atención psicológica, trabajadora social,
terapia ocupacional. Mensualmente se contrata un peluquero y un podólogo,
aunque hay voluntarias que se encargan de la peluquería.
La nueva junta directiva estableció una adecuación a la realidad del pago de los
residentes privados tomando en cuenta la situación real económica del país.
También se han establecido normas para economizar en gastos diarios y actividades
cotidianas, donde están involucrados los trabajadores de la residencia.
Lo que se busca es que tanto residentes como sus
familiares se sientan bien, tanto en la forma como
se trata a los mayores, la relación entre ellos, las
actividades que desarrollan, así como los servicios
que se prestan, todo esto para que cambie la idea
errónea que se tiene de la residencia, culpa de una
mala gestión pasada.
La Residencia invita al pueblo de Aspe a que
realice una visita a sus instalaciones, a
conversar con los residentes para que así se
den cuentas que se han producido cambios
importantes y se continúa trabajando en pro de
mejorar cada vez mas hasta llegar al momento
de no tener deudas y poder utilizar el dinero
en mejoras para la institución.
Conferencia de Carlos Aznar, Cronista de Fiestas de Aspe, el lunes 11 de
febrero en el Teatro Warner.
“María Botella Cremades, pionera de la solidaridad con nuestros mayores”
La crítica situación española por causa de la guerra, con una sociedad
empobrecida, hambruna generalizada, epidemias, enfermedades, surge la
figura de María Botella Cremades quien dedicó su corta vida a la caridad, a
layudar a los necesitados, cuidando enfermos, entregando comida y ropa;
pidiendo de casa en casa de la más pudiente colaboración para su causa. Se
empeño en crear un lugar donde
los mayores sin familia ni recursos
pudieran vivir y así logró la
fundación del Asilo o Residencia
de Ancianos, aunque su muerte
prematura a causa de la
tuberculosis, no le permitió ver su
obra culminada, pero si pudo ver
parte de su construcción.
Fue una mujer fuera de
su época, una persona
especial y fue
denominada “madre de
los pobres”
Centenario del fallecimiento de María Botella
El domingo 10 de febrero se conmemoró el centenario de la muerte de María
Botella Cremades, fundadora de la Residencia de Ancianos Virgen de las
Nieves, develando una placa en la calle que lleva su nombre.
En el acto estuvieron familiares de María, así como el alcalde, concejales,
personas relacionadas con la industria y el comercio, los vecinos de la calle y el
cronista de fiestas Carlos Aznar, promotor de los actos en honor a María
Botella.
El acto fue muy lúcido y hubo una demostración en la calle de elaboración de
alpargatas, desde la preparación hasta la elaboración final.