ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2013;88(9):e60–e62
ARCHIVOS DE LA SOCIEDADESPAÑOLA DE OFTALMOLOGÍA
www.elsev ier .es/of ta lmolog ia
Sección histórica
Memoria sobre la Oftalmología espanola presentada en el1.er Congreso de Oftalmología (Bruselas, 1857)
Report on Spanish ophthalmology presented in the1 st Ophthalmology Congress (Brussels, 1857)
J.J. Barbón ∗ y A. Sampedro
Servicio de Oftalmología, Hospital San Agustín, Avilés, Asturias, Espana
Colegio de San Carlos de Madrid y uno de los cirujanos de
El Dr. Rafael Cervera presentó en el 1.er Congreso de Oftal-mología la memoria Sobre la Oftalmología y la Oftalmía militaren Espana y en particular en Madrid (De l’Ophthalmologie et del’Ophthalmie militaire en Espagne) como respuesta a la solicitudcursada a varios oculistas de Europa para conocer el estadode la especialidad en sus países. En este interesante docu-mento, cuyo contenido vamos a extractar, Cervera exponeen 12 páginas el estado de la Oftalmología espanola, resenalos libros publicados en nuestro país, hace consideracionessobre la ensenanza de la especialidad y, finalmente, analiza lasafecciones oculares tratadas en los hospitales militares entre1852 y 18561. A Rafael Cervera Royo (Valencia, 1828- Sant Boide Llobregat, 1903) que había adquirido su formación oftal-mológica en París, se le considera uno de los fundadores dela Oftalmología espanola; fue director del Instituto Oftálmico(1877) y diputado y senador por el partido republicano en lasdécadas 70 y 80 (fig. 1)2.
En los primeros párrafos de esta memoria explica las cau-sas de la ausencia de oculistas: «la primera y más inmediataes indiscutiblemente las violentas guerras intestinas y extran-jeras en las que el país ha estado sumido desde comienzos desiglo hasta estos últimos anos», la ausencia «de una organi-zación indispensable para la formación de especialistas» y las
1
malas comunicaciones en el país .Los oculistas, al igual que el resto de especialistas, nor-malmente adquirían su formación en otros países, ya que
∗ Autor para correspondencia.Correo electrónico: [email protected] (J.J. Barbón).
0365-6691/$ – see front matter © 2012 Sociedad Española de Oftalmología. Puhttp://dx.doi.org/10.1016/j.oftal.2013.03.005
aquí la ensenanza de la Oftalmología consistía en que: «cadaprofesor de Patología Quirúrgica trataba en sus cursos, conmayor o menor extensión las enfermedades oculares, y enlas clínicas de cirugía los enfermos afectos de estos proce-sos estaban repartidos. Es todavía lo que sucede en todaslas escuelas y hospitales del reino, a excepción de Madrid,donde, como he dicho, el gobierno ha fundado, sobre el ano1850, la única clínica de Oftalmología que poseemos, y donde,el profesor desde su fundación es M. Calvo y Martín, aquípresente». Cervera senala un grave inconveniente para el de-sarrollo de la especialidad: el profesor Calvo se encargaba almismo tiempo de la Oftalmología y de las enfermedades vené-reas, repartiendo el curso académico entre ambas ensenanzas.El curso de Oftalmología duraba unos 3 meses y medio, enlos que impartía de 70 a 80 lecciones complementadas conla visita diaria a los enfermos de la clínica, con capacidadpara 30 ingresados repartidos en 3 salas. Una vez que fina-lizaba el curso, la clínica casi dejaba de recibir enfermosoculares.
Cervera expone la situación en los hospitales de Madrid1,con especial referencia a la pericia de Melchor de Sánchez Toca(1804-1880) (fig. 2), profesor de la Cátedra de Operaciones del
mayor renombre de su tiempo, que también practicaba nume-rosas cirugías oculares: «[. . .] en su clínica, rica en ensenanzasy la primera de Espana, se puede estudiar la extracción de la
blicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2
Figura 1 – Rafael Cervera (1828-1903).
cpnyatrGl
atarata por queratotomía superior e inferior, el abatimientoor la esclerótica o por la coórnea, la reclinación, el desme-uzado y la dilaceración de la cápsula [. . .] la pupila artificial
todas las otras operaciones que se realizan sobre el ojo ynexos». El Hospital Militar de Madrid, a cargo del Dr. Serra,enía también un servicio destinado a las enfermedades ocula-
es y, respecto al Hospital General, donde los cirujanos Rafaeluarda y Antonio Saez practicaban la extracción inferior dea catarata y realizaban cada uno sobre 100 intervenciones
Figura 2 – Melchor de Sánchez Toca (1804-1880).
013;88(9):e60–e62 e61
al ano dice «[. . .] el mayor establecimiento del reino, cuandollega el otono y la primavera se disponen salas para recibir lascataratas que van a ser operadas, que suelen practicarse sobrelos meses de mayo y septiembre». En resumen, senala que lacatarata se operaba fundamentalmente mediante la extrac-ción inferior: «La operación de la pupila artificial no se practicacon frecuencia en Espana; la de la fístula lagrimal se hace más,y casi siempre por el método de Dupuytren; la miotomía ocular[. . .] se emplea raramente. Las aplicaciones del oftalmoscopioen el diagnóstico de las enfermedades de las partes profundasdel ojo son casi nulas».
Cervera repasa con detalle la contada literatura médicaque había aparecido, hasta ese momento, dedicada a laOftalmología1:
«Así, en 1785 se publica en Barcelona el Tratado de las enfer-medades de los ojos de Domingo Vidal, volumen en octava de 216de páginas con un prefacio y una impresión muy clara aun-que apretada [. . .]. Antonio de Gimbernat publicó un pequenotrabajo sobre las úlceras de la córnea que fue leído en 1800delante de la Sociedad de Medicina de París, e impreso enMadrid en 1802 [. . .]. Juan Naval publica también en Madrid,en 1796, un pequeno volumen en 12, de 351 páginas, divi-dido en tres tratados: oftalmía, gota serena y catarata. Estelibro no vale lo que el de Vidal: es una mala compilación delas ideas reinantes en enfermedades oculares, con una mul-titud de remedios farmacológicos para la curación de estosmales, y sin un solo procedimiento operatorio [. . .]. En 1814,Mexia, cirujano de gran reputación y que ejercía entonces enValladolid, hizo aparecer en esta villa su Tratado teórico y prác-tico de las enfermedades de los ojos, en dos volúmenes de 234páginas cada uno. Es una obra al corriente de la ciencia de laépoca, rica en hechos, que da una descripción aceptable delos procedimientos operatorios más en uso para practicar lapupila artificial, el abatimiento y la extracción de la catarata,la fístula lagrimal, etc.». También cita los libros de FerdinandWeiler sobre la oftalmía militar «una larga y excelente memo-ria sobre esta enfermedad», y de Hysern sobre la blefaroplastiatemporo-facial (1834), «un trabajo muy bien hecho y digno deser conocido. En este trabajo, la anatomía de los párpados,los procedimientos operatorios y los casos en que son aplica-bles son estudiados y descritos con cuidado y método. En fin,M. Calvo ha escrito sobre el estrabismo una memoria que, sinembargo, no ha popularizado esta operación entre nosotros[. . .] (y), la primera parte de un Tratado de las enfermedades de losojos. . .».
Cervera carece de los datos estadísticos sobre la inciden-cia de las enfermedades oculares entre la población generalpero nos ofrece, como referencia, una minuciosa relación delos procesos oculares atendidos en los hospitales militaresdurante el quinquenio 1852-1856. En este periodo fueron aten-didos 20.316 individuos por causa de enfermedades oculares,de los que tuvieron que ser licenciados del servicio mili-tar 2.069, una cifra considerable si la comparamos con lasenfermedades comunes, que produjeron 5.580 licencias desoldados. También recoge la casuística de ceguera completa(239), de pérdida de uno de los ojos (678) y otros 943 militares
con un déficit visual importante. Las causas de estas secuelaseran fundamentalmente las enfermedades corneales (opaci-dades, úlceras, queratitis crónicas) y las oftalmías, sobre todola purulenta y la blenorrágica1.LMOL
b
1
2Cotallo JL, Hernández E, Munoa JL, Leoz C, editores. Historia de
e62 ARCH SOC ESP OFTA
i b l i o g r a f í a
. Warlomont E. Congrès d’Ophthalmologie de Bruxelles. París:Victor Masson Libraire-editeur; 1858.
. 2013;88(9):e60–e62
. Munoa JL, Cotallo JL. La oftalmología como especialidad. En:
la oftalmología espanola. 69 Ponencia de la Sociedad Espanolade Oftalmología. Madrid: Sociedad Espanola de Oftalmología;1993. p. 205–16.