CAPACIDADES DIFERENTES:DESAFIOS DE UNA EDUCACION
INCLUSIVA
Lic. Mtra. Ana MoscaUruguay
III Congreso Internacional La psicología en el Siglo XXI
“Hacia la Multidisciplinariedad”Centro Universitario de Ixtlahuaca
Mexico - Abril 2009
Cada sociedad produce sus representaciones acerca de qué es la “normalidad”.
Estas representaciones, determinaran cómo se vive la normalidad en cierta cultura y en cierto momento.
En definitiva, lo que entendamos como “normal” estará determinado por coordenadas contextuales:
- Históricas - Geográficas - Sociales - Culturales - Políticas y - Económicas.
Lo que se considera discapacitado tendrá entonces para cada grupo humano, un lugar asignado:
- el de lo “diferente”, y en mayor o menor medida, la posibilidad de
- inclusión o - exclusión, estigmatización, descalificación
La primera mención al término “discapacidad” aparece en 1980 con la Clasificación Internacional sobre Deficiencia, Discapacidad y Minusvalía, realizada por la Organización Mundial de la Salud en el año 1983.
Actualización de conceptos: En la actualidad, se ha producido un cambio de paradigma.
El tradicional que aludía a las faltas o a la incompletud, se ha sustiuído por el de las Capacidades Diferentes.
Se estima que entre un 7% y un 10% de la población mundial está en situación de discapacidad permanente o temporaria, constituyendo, ésta, por lo tanto, la mayor minoría del mundo.
Lo primero que queremos puntualizar es que recientemente, desde un posicionamiento que parte de la psicopedagogía contemporánea, se ha sustituido la expresión “discapacidad” por el de “persona con capacidades diferentes”, entendiendo que esta expresión da cuenta de un abordaje menos descalificante y a la vez más esperanzador.
Por otra parte, hoy en día ya no se habla de la una “única capacidad”, sino que se concibe el capital cognitivo de una persona como un perfil complejo y dinámico.
De todas formas, podemos considerar el término “discapacidad” en un sentido descriptivo, como una restricción o ausencia de la capacidad de realizar una actividad
El término discapacidad, queda entonces referido a una serie de indicadores objetivos y subjetivos que comprometen la capacidad de autonomía y la posibilidad de participación social.
Existen tres ejes posibles para pensar la problematicidad que nos ocupa.
- intrasubjetivo - intersubjetivo - transubjetivo
Apostamos a que uno de los desafíos fundamentales del siglo XXI tendrá que ver con:
La construcción de democracias mas inclusivas.
Con el advenimiento de sociedades
- pluriculturales - multiculturales. - abiertas a la diversidad.
Para llevar adelante esta labor social de construir una sociedad inclusiva, debe tenerse especialmente en consideración una doble perspectiva:
- la Salud Mental - y la Educación
El sector de la salud mental es básicamente un ámbito multidisciplinario, nacido hace unos cuarenta años, destinado a prevenir, asistir y rehabilitar los padecimientos mentales.
Cumple este cometido desde una comprensión de los lazos sociales deseables, considerados como “saludables”, implementando determinadas políticas dirigidas a la integración social y comunitaria de los individuos.
La salud mental inscribe sus acciones defendiendo los valores de los derechos humanos y de la democracia participativa.
Podríamos pensar, citando a Emiliano Galende, la relación compleja que soporta hoy el campo de la salud mental desde un trípode:
3) Los cambios del Estado y la reformulación de lo público
5) La subjetividad individual contemporánea.
7) Las problemáticas dominantes que deben enfrentar hoy los profesionales de la salud mental
Existe el riesgo de que la supuesta “salud mental” se sustente en una ideología homogeneizante, violentadora del derecho a la singularidad.
En tal caso, no actuará como factor inclusivo, sino que potenciará los riesgos de fragmentación
Es necesario desmontar el muro que separa a los diferentes e interrogarlos e interrogarnos en nuestra supuesta “salud”.
Hemos de desactivar la ideología de que las diferencias, los aspectos cualitativos, connotan distinto valor, aspectos cuantitativos
Hemos de darle categoría de DDHH al vivir en y para la experiencia de inclusión.
Este sería un adecuado fundamento para una política de prevención y de promoción de la Salud Mental.
La Salud Mental tendrá así un papel privilegiado en la labor de generar sensibilidad inclusiva, tanto por parte de los usuarios como de los propios técnicos.
El papel de los medios de comunicación masiva también será fundamental ya que se requiere transformar la sensibilidad colectiva. Los comunicadores desde su discurso y desde las imágenes que seleccionan y difunden, también construyen criterios de salud mental.
Esto ha hecho decir que los medios manejan herramientas de educación no formal que ha llevado a afirmar que constituyen “el aula fuera del aula”.
En este campo también es importante diseñar una propuesta inclusiva, no solamente ocupándose de los casos particulares sino operando desde una visión panorámica, postulando una transformación que abarque a todo el Sistema Educativo.
Para construir un sistema educativo abierto a la diversidad han de transformarse ciertas concepciones y prácticas.
Requerirá de un movimiento:
- pluridisciplinario - gradual - consensual - convincente - involucrador
Trabajaremos entonces por la construcción de una cultura
- de la solidaridad, - de la tolerancia, - del respeto y - de la cooperación
Citando a Juan Carlos Tedesco (2004) diremos que “definir una estructura educativa deseable implica riesgos. El primero de ellos es la disociación entre los objetivos declarados, postulados como fines manifiestos y los que efectivamente se cumplen, tanto en la práctica cotidiana del aula como en relación al sistema en su conjunto. La teoría y la retórica educativas tienden a convertirse en una expresión vacía de significados reales, mientras que la práctica se ejerce sin ningún fundamento de legitimidad. Si bien el ajuste perfecto entre ambas dimensiones es imposible y probablemente, no deseable, ya que reduciría el rol movilizador de las utopías, es necesario introducir en la reflexión pedagógica un cierto sinceramiento que permita aumentar el nivel de responsabilidad institucional por los resultados de la acción educativa”.
Es importante implementar acciones para mejorar el sistema educativo,
La mejor calidad de vida de todos necesita de un sistema educativo justo, moderno y de calidad.
Una política cuidadosa ha de determinar áreas prioritarias. Ante todo, es necesario fortalecer la capacidad de
demanda social. La educación que precisamos ha de diseñarse teniendo en cuenta las necesidades planteadas desde la sociedad.
Un sistema educativo no se ocupa exclusivamente de cuestiones técnicas sino esencialmente de políticas.
Nos referiremos entonces a algunos aspectos que entendemos fundamentales:
6.1. Filosofía Educativa6.2. Objetivos6.3. Currícula6.4. Formación del Educador6.5. Gestión Institucional6.6. Evaluación
Educar es promover lo humano; hemos de preguntarnos cuál es el modelo de Hombre que nos proponemos construir
Se requiere de una filosofía educativa que considere esencial para la dignidad humana la experiencia de integración y participación solidaria
Se necesita habilitar la pluralidad de ideologías y de capacidades, tener como pilar ético fundamental el educar en y para la salud mental, en y para la multiculturalidad.
Se requieren objetivos diversificados, que atiendan todas las áreas del desarrollo.
Estimular la construcción del conocimiento como una labor cooperativa, promoviendo el compartir sobre el competir.
Ha de superarse la visión de lo discapacitado como una problemática singular.
Ha de lograrse un cambio de paradigma: pasar del “esta persona tiene un problema” al “tenemos un problema a resolver entre todos para la inclusión de esta persona”.
Ha de prevenirse la categorización patologizante del educando.
Adjetivizar la problemática concediéndole un encare dinámico e interactivo.
Han de multiplicarse las experiencias de educación integrada.
Ha de habilitarse la creatividad, de la persona con capacidades diferentes, del educador, del grupo, de la institución, de la sociedad toda.
Ha de asistirse las experiencias inclusivas en forma cuidadosa, continua e interdisciplinaria.
Ha de favorecerse la cohesión social, deconstruyendo prejuicios y temores.
Ha de procurarse “empoderar” a todos los actores, la transformación no sólo depende de técnicos, especialistas, sino que se sustenta en el compromiso de todos
Es necesario transformar la propuesta homologadora, homogeneizadora, que opera suponiendo que se pueden dar, en todos los educandos, los mismos procesos de construcción del conocimiento en los mismos tiempos
Es importante desarrollar programas que tengan en cuenta la diversidad y posibiliten una auténtica igualdad de oportunidades. Abiertos a dinamizar la práctica pedagógica, diversificándose para atender las distintas áreas del desarrollo.
Deben incluirse contenidos que potencien el desarrollo global como los que se ocupan de los aspectos éticos y a la vez, intercalar contenidos que desplieguen métodos de trabajo, estrategias y destrezas.
Ha de definirse el llamado “perfil de desempeño” de una persona al finalizar determinado ciclo.
En función de este perfil dinámico, ha de definirse el diseño curricular.
Es también muy importante visibilizar el llamado “currículo oculto”, que opera muchas veces como un baluarte ideológico inexpugnable en los niveles más inconscientes de la sensibilidad. Determina una matriz ideológica que sustenta la intolerancia, la discriminación y la exclusión.
Para que el docente se posicione como protagonista de un movimiento en torno al mejoramiento de la calidad de la Educación, se requiere que sea reivindicada la condición profesional del docente.
Se necesita el reconocimiento y la implementación de la carrera docente con un perfil universitario.
Es necesario capacitarlo para comprender y atender a lo heterogéneo, en el respeto a lo diverso.
Ha de ser habilitado para la autonomía en la toma de decisiones, para adaptar fraccionar y proponer modificaciones programáticas, para seleccionar métodos pedagógicos y estrategias didácticas.
Es necesario que sea formado y supervisado en su capacidad de liderazgo.
Han de construirse estructuras institucionales que sostengan la inclusión.
Ha de favorecerse la contención recíproca entre los docentes.
Ha de incorporarse a los padres en el movimiento integracionista.
Ha de fomentarse la divulgación intra e interinstitucional de experiencias innovadoras
Es importante que se advierta el riesgo que adquiere la labor de evaluación tal como la concebimos al servicio de una enseñanza homogeneizada.
Un único sistema de notas conspira contra una enseñanza personalizada e inclusiva. Qué hacer con el diferente? No se le evalúa? Se implementa otra escala o una escala especial de evaluación?
Es necesario despatologizar la situación de bajo rendimiento, de fracaso, de rezago, de deserción; éstas suelen ser vivenciadas como castigos impuestos por fallos exclusivos del educando. Se prefiere etiquetar de “repetidor”, culpabilizando así al educando, por fracasos que debieran interpelar también al educador, al grupo, a la institución escolar y al sistema educativo.
La función evaluadora se encuentra desde hace tiempo centrada en productos individuales y cuantificables, a través de un sistema de “notas”, tan tradicional como obsoleto.
Está orientado un criterio normativo (penalizando el error y al que lo comete), y aspirando a una supuesta objetividad que estaría expresada en la contundencia numérica.
Este abordaje favorece las experiencias de exclusión, aislamiento y descalificación.
Para un cambio de la modalidad evaluadora, se requiere de:
una evaluación cualitativa. una evaluación atenta a procesos más que a resultados, una evaluación habilitadora de la autoevaluación de los
distintos agentes y a la co-evaluación, incluyendo al grupo , a los otros docentes a otros integrantes de la comunidad educativa, a los padres.
REFERIDA A UN ESFUERZO POR UNA EDUCACIÓN INCLUSIVA
Quiero compartir con Ustedes ahora una experiencia que ha pretendido generar transformaciones de una comunidad educativa.
Integro, desde hace trece años (1996-2009), el equipo docente responsable de un Servicio de Facultad de Psicología (UDELAR) inserto en la Escuela Pública.
Concurren a ese Servicio, en régimen de pasantía anual, estudiantes de psicología del último modulo de la carrera de grado.
Desde allí hemos diseñado y llevado a cabo distintos proyectos de investigación - acción, financiados, en mas de una oportunidad por la Comisión Sectorial de Investigación Científica (CSIC)
El común denominador de nuestro trabajo se ha centrado en el esfuerzo por contener los efectos acumulativos del crecer en situación de pobreza.
La ultima de nuestras investigaciones, publicada con el apoyo del Instituto Interamericano del Niño, la Niña y el Adolescente, en setiembre de 2006, se titula “La integracion en la Escuela. Desafíos e interrogantes”.
Se planteò como una investigación longitudinal con el objetivo de monitorear el desarrollo de un grupo de niños, desde los cinco a los once años.
Pretendimos visibilizar los efectos de la situación psicosocial deprivada sobre el capital cognitivo y sobre el desarrollo emocional
Pretendimos visibilizar los efectos de la situación psicosocial deprivada sobre el capital cognitivo
A los cinco años, un 90% de la población testigo se ubicaba en niveles de funcionamiento que correspondían a un desarrollo “normal”.
A los once años, solo un 40% evidenciaba rendimientos dentro de lo esperado para la edad cronológica.
Para un 60% de los niños, el crecer en situación de necesidades básicas insatisfechas, generó un supuesto “retardo mental leve”.
A partir de dicha investigación, se formularon recomendaciones,
pretendiendo desarrollar estrategias de intervención multi e interdisciplinarias desde un abordaje individual y/o familiar y/o comunitario
PROMOVIENDO UNA HABILITACION A LAS CAPACIDADES DIFERENTES
Hemos de asegurarnos de que cada centro educativo sea un espacio de formación y práctica democrática.
Ha de trabajarse con todos los actores de la comunidad educativa ofreciendo formación en lugar de información y ayudando a elaborar prejuicios, ansiedades y temores.
Ha de contribuir generando ciudadanos autónomos, comprometidos, responsables, solidarios.
Ha de habilitar al educador a una gestión más flexible, respetando intereses, ritmos y estilos de aprendizaje.
Ha de multiplicar las oportunidades de acceso, permanencia y movilidad, atendiendo y previniendo el problema del fracaso y la deserción.
Ha de contar con una asignación permanente de recursos humanos y materiales (incluyendo los tecnológicos) para sostener una estructura que no podrá cumplir con la complejidad de sus fines sin contar con:
• capacitación continúa de los docentes• espacios de intercambio y reflexión• instancias de amparo, de apoyo y continentación emocional.
Ha de tener apertura, transparencia en la gestión, permitiendo a la ciudadanía tener acceso a informaciones claras y sistematizadas sobre el sistema en sus logros y carencias.
Ha de articular con otros agentes de educación no formal: familia, comunidad, medios.
Ha de generar y mantener mecanismos de auto y hetero evaluación procurando el mejoramiento de su pertinencia y calidad.
