+ All Categories
Home > Education > Mitología Griega

Mitología Griega

Date post: 11-Jul-2015
Category:
Upload: yatichiri-pamela-figueroa
View: 541 times
Download: 1 times
Share this document with a friend
10
EL MITO DE EROS Y PSIQUE Psique era una princesa de una belleza tan extraordinaria que la misma diosa Afrodita estaba celosa de ella. Psique era tan bella que seguía virgen porque su belleza sobrehumana asustaba a sus pretendientes. Afrodita ordenó a su hijo Eros, el dios del amor, que castigara a la atrevida mortal. Por eso, algún tiempo después, un oráculo mandó al padre de Psique, bajo la amenaza de una terrible calamidad, que llevara a su hija a una roca solitaria donde sería devorada por un monstruo.
Transcript
Page 1: Mitología Griega

EL MITO DE EROS Y PSIQUE

Psique era una princesa de una belleza tan extraordinaria que la misma diosa Afrodita estaba celosa de ella.

Psique era tan bella que seguía virgen porque su belleza sobrehumana asustaba a sus pretendientes. Afrodita ordenó a su hijo Eros, el dios del amor, que castigara a la atrevida mortal. Por eso, algún tiempo después, un oráculo mandó al padre de Psique, bajo la amenaza de una terrible calamidad, que llevara a su hija a una roca solitaria donde sería devorada por un monstruo.

Page 2: Mitología Griega

Pero el dios Eros, cuando vio a la muchacha que tenía que morir en la boca del monstruo que la esperaba abajo, quedó tan impresionado por su belleza que tropezó y se pinchó con una de sus propias flechas -esas flechas que utilizaba de manera tan eficaz para llevar el amor súbito tanto a los mortales como a los dioses.

Así fue como Eros se enamoró de la persona que su madre le había mandado eliminar. Temblando, pero resignada, Psique estaba esperando en su roca solitaria la ejecución del oráculo, cuando de repente se sintió suavemente elevada por los vientos; era Céfiro, el viento del Oeste, que la llevó a un valle donde quedó dormida, sobre un verde césped.

Page 3: Mitología Griega

Al despertar, Psique descubrió ante si un magnífico palacio de oro y mármol que comenzó a explorar. Las puertas se abrían y voces incorpóreas la guiaban y se presentaban como sus esclavas.

Cuando cayó la noche y Psique estaba a punto de dormirse, un misterioso ser la abrazó en la oscuridad, explicándole que él era el esposo para el cual estaba destinada. Ella no conseguía ver sus rasgos, pero su voz era dulce y su conversación llena de ternura. Su matrimonio se consumó, pero antes de que volviera la aurora, el extraño visitante desapareció, haciéndole prometer primero a Psique que jamás intentaría ver su rostro.

Psique no estaba descontenta con su nueva vida. No le faltaba de nada excepto su encantador esposo, que sólo iba a visitarla en la oscuridad de la noche. Sin embargo, fue presa de la nostalgia y una noche pidió a su marido que la dejase visitar a sus hermanas. Eros accedió a cambio de lo que le había hecho prometer a Psique.

Visitó entonces a sus dos hermanas que, devoradas por la envidia, sembraron en su corazón las semillas de la sospecha, diciéndole que su esposo debía ser un horrible monstruo para esconderse así de ella. La criticaron tanto que una noche Psique, a pesar de su promesa, se levantó de la cama que compartía con su esposo, con disimulo encendió una lámpara y la sostuvo encima del misterioso rostro.

En vez de un espantoso monstruo, contempló al joven más hermoso del mundo -el propio Eros-. A los pies de la cama estaban su arco y sus flechas. En su conmoción y su gozo, Psique tropezó y se pinchó con una de las flechas, y por eso acabó por enamorarse profundamente del joven dios que antes había aceptado por haberse enamorado él de ella. Pero su movimiento hizo que una gota de aceite caliente cayera sobre el hombro desnudo del dios. Él se despertó enseguida, regañó a Psique por su falta de palabra e inmediatamente desapareció.

Page 4: Mitología Griega

El palacio desapareció también, y la pobre Psique se encontró en la roca solitaria otra vez, en una espantosa soledad. Al principio pensó en suicidarse y se tiró a un río que había cerca de allí, pero las aguas la llevaron suavemente a la otra orilla. En su desesperación, Psique pidió ayuda a los dioses, quienes le dijeron que tendría que pedirle perdón a Venus, la madre de Cupido, a quien sin saberlo había ofendido.

Venus la despreció, sin embargo le dio una oportunidad; tendría que pasar tres duras pruebas, que eran más que imposibles de realizar, pero que Psique logró cumplir con la ayuda de la naturaleza, que la quiso ayudar.

Venus la acusó de hechicera; y deseando vencerla, la sometió a una última prueba aún más difícil. Debería bajar al Averno y llenar un cofre con una parte de la belleza de Proserpina, deidad de vida, muerte y resurrección y base de un mito de la primavera.

Sabiendo que eso era más que imposible, Psique decidió suicidarse arrojándose desde lo alto de una torre. Pero antes de caer al vacío escuchó una voz que le prometió guiarla durante su travesía; pero con la condición que una vez que se llenara el cofre con la belleza de Proserpina no debería abrirlo jamás.

Psique hizo todo lo que le aconsejó la extraña voz, pero un deseo vehemente de curiosidad la obligó a abrir el cofre.

Cuando la caja se abrió, un sueño mortal la invadió y se desplomó sobre el camino como fulminada por un rayo.

Page 5: Mitología Griega

Fuentes: http://clasesmarian.blogspot.com/2010/11/el-mito-de-cupido-y-psique.htmlhttp://www.sabersinfin.com/articulos-2/psicologia/1355-el-mito-de-eros-y-psique.htmlhttp://arescronida.files.wordpress.com/2012/06/selkies.pnghttp://diviniti.es/historia-de-la-sexualidad/http://spacioars.blogspot.com/2010/07/eros-y-psique-mitologia-griega.html

Cupido, que la había estado buscando, la encontró, pudo volver a encerrar el sueño en el cofre y después la despertó con un beso.

La alzó con suavidad y levantó vuelo llevándola con él hasta el monte del Olimpo, donde Júpiter, dios del firmamento los unió oficialmente en matrimonio para siempre.

Page 6: Mitología Griega

EL MITO DE PANDORA

En aquellos tiempos en los que todavía reinaba Cronos en el universo, los hombres vivían una época dorada: la diosa Justicia estaba todavía en la Tierra y ayudaba a ser justos.

Tiempo después, Cronos fue derrotado por Zeus. Los dioses abandonaron a los hombres. Al ver las desgracias de la humanidad, un titán llamado Prometeo se apiadó de ellos. Con mucho esfuerzo juntó todos los males esparcidos por la Tierra y los metió en una gran tinaja que tapó cuidadosamente.

Después se la entregó a Epimeteo.

-Nunca permitas que nada ni nadie abra esta tinaja y jamás aceptes ningún regalo de Zeus- le dijo.

Luego se dirigió a los demás hombres:

-Sacrificad un buey blanco en honor a Zeus. Colocad a un lado los huesos y la grasa del animal y, al otro, lo mejor de la carne y la piel.

Los hombres obedecieron. Al rato, el gran dios descendió y se hizo presente.

-Elige la mejor parte, Zeus- dijeron los hombres, temerosos.

El gran dios eligió la primera, sabiendo que no era la mejor. Los hombres, lejos de informarle de su error, se abalanzaron ansiosamente sobre la otra parte. Zeus montó en cólera.

-¡Puesto que la codicia os impide ser humildes y generosos, desde hoy vuestra vida continuará sin fuego!- le gritó indignado, y retiró el fuego de la Tierra.

Page 7: Mitología Griega

Luego se dirigió a Prometeo:

-¡Ten cuidado, Prometeo, no juegues con mi paciencia ni me desobedezcas!Zeus abandonó la Tierra rumbo al Olimpo.

Aquel invierno fue muy crudo, y los pueblos de la Tierra, sin el calor de las hogueras, morían de frío.

Prometeo sintió pena por ellos. Consciente de los peligros que corría, robó el fuego a Zeus y lo llevó de nuevo a la Tierra.

Page 8: Mitología Griega

Cuando el dios supo lo sucedido, tomó medidas ejemplares. Se dirigió hacia la fragua de Hefesto, y le encargó que crease a la mujer.

Hefesto modeló barro con sus manos y le dio apariencia de diosa. Luego horneó la figura y llamó a otros dioses para que la dotaran de cualidades. Cuando hubieron terminado su tarea, la figura de barro cobró apariencia real.

-Has hecho un buen trabajo, Hefesto, gracias- le dijo Zeus-. Tu creación se llamará Pandora.

Zeus y la mujer descendieron a la Tierra y fueron a la casa de Epimeteo.

-Toma, Epimeteo. En premio a tu fidelidad, quiero ofrecerte este presente- dijo Zeus, y señaló a Pandora.

Epimeteo vio por primera vez a una mujer y se enamoró de ella al instante, aceptando complacido el regalo.

-Vivirás conmigo, Pandora- le dijo Epimeteo-, pero hay algo que debes saber: nunca entres en aquella habitación.

A medida que transcurría el tiempo, la curiosidad de Pandora iba en aumento. Un día no aguantó más y aprovechando que Epimeteo estaba ausente se dirigió a la habitación prohibida y entró. El lugar estaba vacío. Sólo había una enorme tinaja cerrada que ocupaba el centro. Epimeteo llegó al lugar, pero ya era tarde: Pandora había abierto la tinaja.

Page 9: Mitología Griega

-¡Qué has hecho insensata!- gritó el hombre, aterrado.

De la tinaja salieron los males y se esparcieron nuevamente entre los hombres. Pandora quiso reparar su error y la tapó, pero tan sólo quedó atrapado un mal: la esperanza.

Page 10: Mitología Griega

Fuentes: http://ecosdeladistancia.wordpress.com/2010/06/22/prometeo-y-pandora-mitologia-griega/http://niiteixeira.blogspot.com/2011/05/o-mito-da-caixa-de-pandora.htmlhttp://commons.wikimedia.org/wiki/File:Martinez-prometeo.jpg?uselang=eshttp://api.ning.com/files/UDlz*Aq8sehDLV5Sg8x*54cSr7AvzhACn9pznJDgUHfmXRMRpJ-i5G6Gz2vHn5etUgFZ2QXjs9u97EsVOn62EYUFLmME-lm9/AFuego.jpg

Como castigo por su desobediencia, Prometeo fue encadenado a una gran piedra. Durante cuatrocientos años, un águila descendía diariamente al lugar y le roía el hígado, que volvía a crecerle durante la noche para que al amanecer las aves hicieran interminablemente su trabajo. Tal fue el precio que tuvo que pagar por desafiar los designios de Zeus.


Recommended