Date post: | 10-Mar-2016 |
Category: |
Documents |
Upload: | roidromo-orozcopa |
View: | 213 times |
Download: | 0 times |
Historia, ilustraciones y diseño: Rodrigo Orozco - (grafídromo)/Historia aleatoria y cómplice del Cortometraje Transdimension /Agradecimientos:Se presume una probable resurrección, un renacimiento o se trata de una metáfora que implica retornar a una etapa de totalidad…Quizá nos encontremos.
A los que me conocen y los que conozco y no lo saben, los que probablemente, pese a no recordarlos y verlos me recuerdan.a C.R y J.S.Q. a ENEa mi familia
– Muchas gracias
Impreso en la Imprenta Departamental del CaucaPopayán Octubre de 2011/[email protected]@gmail.comwww.escuelaroidromo.blogspot.com
NUSQUAM
El largo viaje a ninguna parte
NUSQUAM:Ninguna Parte, Ningún Lugar, Ningún Sitio.
En este preciso momento no sé donde me encuentro…
/ ¿Y anteriormente,
dónde me encontraba?…
/¿Y qué pasará después, en la
siguiente página?
He sido despojado de mis ropas y
cambie de rostro y cuerpo…
/y continuo en un espacio blanco, infinito y sólo.
Rodeado por este maldito contorno
de viñeta……Una insuficiente tinta y nada más
para vivir.
Ja ja ja ja ja ja…/
Ahora tengo el cuerpo deforme, es decir: un poco extraño, sin cabello,
con un suéter ridículo y manos y pies pequeños…
/Ja ja ja ja ja…
/¿Y qué sigue…?
/ahhhhh
/un poco de cabello y una mirada escondida, oculta en parpados
indescifrables……y una boca que jamás dirá algo con
sentido. /
Maldita sea.
Y ahora ojos separados… una
cabeza rebanada. La separación de mis ojos sugiere una, en términos
de evolución darwiniana...
Condición de presa, están
dispuestos de esa manera para
poder, de una manera más rápida, ver el acercamiento
de mis depredadores...
Vulnerable e invulnerable a la
vez.
El peligro está adentro.
Parece como si despertara de un profundo e
insoportable sueño…/
...Me descubro en la cima de
algo, asustado, inexplicable, miro
hacia abajo y tengo miedo.
Cierro los ojos, cuento hasta cinco…
Uno, dos, tres, cuatro, c i n c o…
Y continuo en la cima de esto,
miro hacia abajo y persiste el miedo.
Se pone más alto…El miedo aumenta.
Pero, ¿qué es eterno?
Leo una crónica sobre una persona con tres piernas
que no se ponen de acuerdo sobre a donde ir…
/“Pese a la insuficiente información se conoce
que el paciente del ala 21, donde se encuentran los internos incurables, uno de ellos es E. M. Quien
posee tres extremidades inferiores y dos aparatos reproductores totalmente
desarrollados.
Su condición extraordinaria consiste en que estos
dos órganos le dan doble personalidad y estas
discuten constantemente.
Es común que esta querella se relacione con el desplazamiento físico, pero, como posee tres
Así es. Pasa el miedo y el lugar se torna naranja ocre (pero con una tinta se verá
negro) leo un libro…
piernas, no logra decidir su marcha y permanece
en el mismo lugar.”
Casi no puedo leer las páginas del libro.
Las letras se desenroscan…
Queda una larga franja
Queda una larga franja, la recorro con la mirada y no es suficiente, debo tomar distancia y aún así me sobrepasa…
desemboca por fin en una cama. …
Una larga, larga, larguísima franja.
Y en ella estoy yo…
Me miro a mi mismo y me intento despertar, sin asustarme por supuesto.
Temo la sorpresa.
Me golpeo en las mejillas, me doy
sacudones desde los hombros, me azuzo y me azuzo y no me
puedo reanimar./
¿Quién de los dos despertará,
continuaremos así?/
Que importa, uno de nosotros está
despierto…
¿Qué sigue?:Cambiar de forma es
lo más seguro. ¿Olvidar de dónde vengo, para
dónde voy?/
Seguir durmiendo y soñando que hago
cosas…Necesito una
onomatopeya que me despierte.
Des pi er ta…
Parece que desperté
/Retomemos
/Estaba leyendo...
¿Tres piernas? no podía leer, las letras se desenroscaban.
Desaparecían las astas, se
precipitaban y recorrían el espacio...
Horizontalmente…Desee que una
onomatopeya me despertara...
¿Lo hizo?
Según la onomatopeya estoy dormido, durmiendo o
fingiendo que duermo./
Esta última es la aseveración mas apropiada, pues en mi
rostro hay una sonrisa…
Ahora sin la onomatopeya estoy despierto, contemplando el
paisaje o fingiendo que disfruto de algo.
/Esta última afirmación es la que
me parece la más apropiada.
Otra vez el titubeo/
Nuevamente la oscilación si/no
/Constantemente me ocurre esta
situación de incertidumbre, una
vacilación conspicua, perplejidad
concupiscente, es como si este cuerpo no fuera mío y lo que me
rodea hubiese sido dispuesto para
atormentarme y me sublevo energúmeno
de mi mismo.
Lo que sigue es producto de la
angustia./
Me dirijo a cualquier parte con el conflicto de sólo querer salir de aquí, no busco la libertad legendaria…
únicamente una salida…
/ Corto uno de mis dedos, lo arrojo al piso y emprendo
presuroso a dirigirme hacia donde el dedo
me señala.
Sentí miedo de cortarlo de mi mano izquierda, es la mano que más uso.
/cuando salga de aqui y pueda saludar a otras personas, el apretón de manos me recordara
lo que soy capaz de hacer./
Duele, duele…Y si duele es que no estoy soñando o es
sueño jodidamente real.
Es un sueño…Otra vez con rostro y
cuerpo diferente, desnudo y con una vara entre las
manos, mirando a mi derecha dubitativo.
¿Para que este ridículo pedazo de madera?
/Sigamos la ruta del dedo.
Hacia allá me dirijo contento y con las fuerzas renovadas
/Encuentro una gran caverna con aire caliente y raíces
que brotan de sus paredes, es mi nariz, ahí me quedo quietico en mi propio templo, en mi mismo.
Corro rápidamente como puedo. Me desdibujo, solo soy una serie de líneas con
algo de sentido…/
Ni siquiera esto que digo está dentro del bocadillo
/¡¡Corro, transpiro, revuelvo
mis trazos, corro!!
Mi cuerpo es mi templo, cuando, en una caminata
por la calle vacía y solitaria me escucho,
escucho los espejos y cuadros golpear contra
las paredes, las estatuitas caer de sus repisas, las
cortinas abstraídas en un vaivén abrumador,
los insectos enfrascados arremolinarse cada vez
con más fuerza, los libros caen y se abren
caprichosamente en ciertas paginas que he
querido olvidar.
Mi dormitorio se trastorna y debajo de la cama salen todos los fantasmas de mi
niñez, de mi juventud, de mi adultez, de mi vejez… todos.
Canicas, estampillas, cartas, monedas, libros, camisas, biógrafos, lápices, tintas, letras, hilos, muñecos, anteojos, zapatos,
uñas, tizas, ganchos, miedos…
El templo se cierra, desaparecen las
puertas y ventanas y es en ese
momento, cuando deseo escapar de la
cacofonía y sordina a la vez, no lo logro
/Con arrebatada furia busco un lugar donde
escapar.
Escapar-aventurar-salir-saltar-volar-arrollar-irrumpir
/
Escapar-aventurar-salir-saltar-volar-arrollar-irrumpir
escapar-aventurar-salir-saltar-volar-arrollar-irrumpir-escapar
saltar-aventurar-salir-saltar-volar-arrollar-irrumpir-salir
¿Dónde me encuentro: ¿dormido?,
¿caminando, en piscina, cortándome las
uñas, cazando payasos, mirándome el
ombligo, probándome el sabor de cada
dedo del pie?
¿Quién?
Me duele la cabeza, como si por primera
vez notara que tengo una cabeza para sentir dolor.
En un elevado barranco observo muchas personas idénticas a mí que
me observan y me alientan para que me arroje al
vacio./
Dudo, les sugiero que puedo volar.
/Les grito:
¡¡Puedo Volar!!
/La carcajada es colectiva y abren más los ojos para observarme caer contra la solidez
del suelo./
Así, de la nada me arrojo al
vacio y emprendo el vuelo con
la barriga desocupada y
límpida…
Se cubren sus rostros para que no les salpique mi
sangre y sesos, mis cabellos y saliva…
Pero no caigo, quedo flotando en el aire, no
volando a mi antojo, sólo
levitando. Mis espectadores
que soy yo mismo
varias veces levantan
con fuerza sus brazos coléricos y frenéticos.
Luego despierto en el campo, en la finca de mi abuelo, justo ahí; camino hacia el rio y en él lavo mi cara para
despertar… Nuevamente, en medio de una gran avenida…
Pero estoy simultáneamente arrellanado en nada y
mirándome el ombligo, dislocándome el rostro…¿Mirándome el ombligo?
Cachos, orejas puntiagudas, cuello arrugado, músculos, el
cuchillo de Rambo, ¿y cabezas de payasos? simultaneamente.
¿Cazando payasos?
Observo a izquierda y derecha, atrás y adelante ¿arriba?… me acuesto ahí mismo para hacer nada, para estar constituido por
otra cosa que no sea nada./
NADA
Estar constituido por otra
cosa que no sea nada.
/NADA
Sin camisa, y los dedos a medio dibujar, ciclope y resignado, nuevamente con cachos, cola y manos peligrosamente
filosas/
En medio de la nada y esperar a despertar.
¿Qué pasaba en la anterior
página?/
Nuevamente no sé dónde me encuentro.
/¿Esta es la última página?…
/¿Este no puede ser mi
último diálogo?Ni siquiera dije mi nombre.
/Jamás sabré quien soy
¿quien soy en la fotografía: un niño, un señor, un sa-
cerdote?
El pequeño es-
pacio entre mis ojos explica una, en térmi-
nos de evolución darwinia-na, condición depredadora,
están dispuestos de esa ma-nera para poder, de un modo más rápido, ver mi alimento, mis presas; no, no los mato,
mato el hambre.
Pero… ¿soy el máxi-mo depredador?