El Señor es compasivo y misericordioso
I I I DOMINGO DE CUARESMA
24.MARZO.2019EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS 13, 1-9
Boletín Sígueme, agradece al Padre "Chino" por estas reflexiones del
Evangelio Dominical durante la Cuaresma
Pbro. Everardo Oloño
R E F L E X I O N A N D O E L E V A N G E L I O D O M I N I C A L
En el Evangelio de este domingo, podemos ver claramente cómo Jesús nos
invita a la conversión, no nada más por el sacrificio de las otras personas o
por las situaciones de los demás, la conversión debe de ser personal.
Cuántas veces nosotros tenemos la tentación de compararnos con nuestro
prójimo, muchas de esas veces es para callar nuestra conciencia “porque los
otros lo hacen yo no estoy tan mal”, o criticamos, “por eso les pasó cierta
situación o están viviendo las circunstancias”, en algunas ocasiones he
escuchado que algunas personas dicen: “ese santo es muy cobrón” si no le
cumples lo que prometes te va a “cobrar” el favor, pero no, Dios no cobra
favores, Él nos regala la libertad, por eso hoy podemos ver cómo nos invita a
una conversión personal, a no fijarnos quién es “más pecador” si el otro, o yo;
simplemente conviértete, no nos tenemos que fijar, o tomar de consuelo a las
personas que nos rodean, por las situaciones que han pasado no quiere decir
que son mayor o menor pecadores que uno.
Tenemos que aceptar la situación que estamos viviendo, Dios no nos manda
castigos como nos decían antes, Jesús ya murió y resucitó por nosotros,
nuestro caminar hacia la santidad es día con día, no vamos acumulando
puntos para llegar a una meta, se trata de tomar una opción de vida y darle
un sí a Dios.
En lo personal, les comparto que en el caminar de mi sacerdocio he
descubierto que no soy más ni menos sacerdote por el lugar donde me ha
tocado compartir mi vocación, gracias a Dios, este tiempo que Dios me ha
llamado a vivir mi sacerdocio enfrentado distintas situaciones, pero es un
mismo Dios, es un solo sí, donde Él me invita a ser feliz, a luchar para seguir
adelante y saber vivir una conversión, tomar la decisión día con día de darle
un sí a ejemplo de María nuestra madre.
Que esta Cuaresma nos ayude a poder encontrarnos con Dios por medio de
nuestra conversión, cambiar nuestro lado a Dios mismo, desde allí vivamos
estas palabras, esta invitación que Jesús hace y nos sigue haciendo hoy en día,
vivamos este tiempo para tomar la decisión y nuestro camino al Señor.
WWW.BOLETINSIGUEME.COM