Alfahar 1/2013 PUBLICACIÓN ELECTRÓNICA
SUMARIO
Editorial ....................................................... 2
Artículo original
JOSÉ MARÍA GIMENO. Las canterías del
Aranda (Zaragoza). Estado de la cuestión ..... 3
Comunicaciones
JOSÉ Mª ABAD. Localización de un alfar del
siglo XX en Las Cuevas de Cañart (Teruel) ..... 37
EMILI SEMPERE. Miravet, los últimos hornos
tradicionales de leña ...................................... 40
AURELIO BAIL. Tejerías del Pirineo Aragonés
Occidental ...................................................... 43
EMILIO MANRIQUE, ANA ROSA ABADÍA. El
admirable legado de un coleccionista:
Kaydeda y Oleiros. .......................................... 46
Noticias y actividades de ALFACER ...... 49
Sección de identificación ......................... 54
Notas de publicaciones............................. 55
Ferias y desembalajes ............................... 57
ALFACER
Quiénes somos ........................................... 58
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Editorial
Editorial
La revista Alfahar saca a la luz un segundo número, lo que constituye un motivo de satisfacción y un estímulo
para proseguir y mejorar en este objetivo concreto de nuestra Asociación. Cada uno de los primeros números de
una publicación tiene una gran significación para consolidar y asegurar la continuidad de este proyecto informa-
tivo, quizá el más difícil de los que nos hemos propuesto.
Desde el anterior número, la Asociación ha desarrollado diversas actividades colectivas, algunas como las IX
Jornadas de Alfarería y Cerámica Tradicionales en Morillo de Tou, que podemos considerar, estas sí, plenamente
consolidadas. En ellas todos los asistentes pudimos pasarlo bien en el mercadillo, en la sesión de identificación y,
sobre todo, disfrutar en las exposiciones de las ponencias de Javier Fanlo, Ángel Leal, Juan Rovira y Sergio Sa-
bini. También fueron enriquecedoras y plenamente satisfactorias las visitas y el viaje a Navarra y el País Vasco
del pasado mes de julio sólo posibles gracias al tesón y a las ilimitadas hospitalidad y amabilidad de Lourdes y
Alfredo.
El número 1 de Alfahar, junto a las secciones con vocación de habituales, incluye como artículo original:
“Las cantarerías del Aranda, Zaragoza. Estado de la cuestión” de José Mª Gimeno Hernández. Otras notas y cola-
boraciones cortas, que creemos de interés, pretenden contribuir, de diferentes maneras, a la difusión de nuestro
patrimonio alfarero.
No cabe duda de que este nuevo número de Alfahar, que tanto nos satisface, sólo ha sido posible gracias al
esfuerzo, entusiasmo y buen hacer de muchos de los miembros de la Asociación, empezando por el editor. Quizá
un nuevo desafío consista en lograr ampliar las colaboraciones con las aportaciones de otros muchos amigos; lo
cual nos exige a todos un esfuerzo de difusión de esta publicación que quiere ser abierta.
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Alfahar
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ción de las leyes nacionales e internacionales vigentes y referidas a los derechos de autor. Está prohibida expresamente la
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Toda cita deberá ir acompañada de la respectiva referencia al autor y a la revista: título, número, año, dirección URL y fe-
cha de consulta.
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José María Gimeno Hernández ALFACER
Las cantarerías del Aranda (Zaragoza) Estado de la cuestión
l presente trabajo fue presentado en las 8as. Jorna-
das sobre Alfarería y Cerámica Tradicionales orga-
nizadas conjuntamente por la Fundación Sindica-
lismo y Cultura y el Museo de Alfarería Tradicional Arago-
nesa de Morillo de Tou (Huesca) en el otoño de 2011. Con
él pretendemos dar a conocer hasta dónde hemos llegado
en la investigación de los alfares del río Aranda y por
dónde, a nuestro entender, debería proseguir el esfuerzo
de estudiosos y coleccionistas.
LOCALIZACIÓN GEOGRÁFICA (Fig. 1)
Se trata de tres núcleos poblacionales situados en la
cuenca del río Aranda, afluente del Jalón: Sestrica, Jarque
e Illueca. En ocasiones se añaden los intentos fallidos de
Aranda de Moncayo y Tierga. Estamos en las estribaciones
aragonesas del Sistema Ibérico, en la fachada sur del Mon-
cayo. Pueblos de gran tradición mudéjar con una diferen-
ciada producción de cantarería por urdido, destacando las
tinajas y los cántaros.
BIBLIOGRAFÍA ESPECIALIZADA
Nuestro libro de referencia durante años ha sido Alfa-
rería popular aragonesa publicado por la doctora MARÍA
Isabel ÁLVARO ZAMORA en 1980 en Libros Pórtico. Las 14
páginas que dedica a estos alfares son un cúmulo de in-
formación.
Habría que esperar hasta 2005 para
que Carlos DÍEZ GALÁN de la Asociación
Cultural Barro y Fuego coordinase el libro
Barro y fuego, alfarería aragonesa en
basto. En este libro, donde destaca el apa-
rato gráfico, se le dedica un capítulo de 17
páginas al tema.
Pero no será hasta 2009 que los cata-
lanes Alfonso ROMERO y Santi CABASA
podrán publicar su segundo volumen de tinajería. En Ti-
najería tradicional española: Comunitat Valenciana,
Catalunya, Balears y Aragón, de la editorial Blume, le
dedican 23 páginas donde recogen sus viajes, entrevistas,
genealogías, croquis topográficos, producción, etc.
En la actualidad la investigadora zaragozana, con raí-
ces en Oseja, Gloria PÉREZ GARCÍA ha retomado el tema
desde su vertiente arqueológica buscando su posible en-
tronque con las producciones celtibéricas.
HISTORIA LOCAL Y FUENTES PARA EL ESTUDIO
Es común entre los estudiosos aceptar la antigüedad y
tradición mudéjar de los alfares del Aranda, pero veamos
qué dicen las fuentes, hasta el momento, al respecto. La
zona está poco trabajada arqueológicamente para las épo-
cas celtibérica, romana y musulmana. No será hasta los
momentos previos a la batalla de Cutanda, 17 de junio de
1120, cuando las fuentes nos hablan del pacto entre los
señores musulmanes de la zona y Alfonso el Batallador,
conquistador de Zaragoza, Calatayud y sus territorios ale-
daños. Será este pacto el origen del fuerte componente
musulmán en la baja Edad Media y Edad Moderna.
Durante este periodo la situación de los mudéjares no
será agobiante. En 1210 Pedro II otorga fuero nada abusi-
vo a los moros de Ricla. En 1337 Pedro IV confirma las
franquicias a los moros de Aranda de Moncayo, aduana
con Castilla. Al tiempo que los señoríos reales gobernados
mediante alcaides van evolucionando a señoríos laicos
monopolizados en la zona por las familias Luna, condes de
Morata, poseedores de Illueca, y la familia Ximénez de
Urrea, condes de Aranda, dueños de Jarque y Sestrica. Sin
olvidar la cercanía de la comunidad de aldeas de Calatayud
(HERNÁNDEZ, MILLÁN y SERRA 2001)
A finales del siglo XV, 1495, y ante la amenaza de Car-
los VIII de Francia, Fernando el Católico manda confec-
cionar un fogaje o censo poblacional de su reino con fines
recaudatorios ante el inminente impuesto extraordinario.
E
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
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La población de la zona sigue siendo mayoritariamente
mora: Jarque tiene 36 de 51 fuegos moros, Sestrica 30 de
33 e Illueca 39 de 58, pero en ninguno aparecen apellidos
relacionados con el oficio (SERRANO MONTALVO 2002).
FRANCISCO JAVIER GARCÍA MARCO (1993) en su tesis
doctoral expurgará el archivo de protocolos de Calatayud
en busca de las comunidades mudéjares. Abundan las
noticias de la familia Çulema, cantareros de Calatayud,
pero muy poco del Aranda. En 1461 se vende un huerto en
Illueca que confronta con otro de «Ali el ollero». Intere-
santísimo el documento de arriendo de las rentas de Jar-
que en 1439 por Lope Ximeno de Urrea a favor de Jayme
Vidal de Zaragoza; amplio y detallado en todas sus rentas,
pero ni palabra de cantarerías en esa fecha.
Para el siglo XVI tenemos la tesis de José Miguel Ace-
rete Tejero (2001). Ausencia total de las cantarerías del
Aranda. Sin embargo da a conocer documentación de los
escudilleros de Morata de Jalón, hasta 37 escudilleros y
pintores individualizados, y sus concordias.
Ya en el XVII la documentación se multiplica. El equi-
po del profesor Borrás se encargará de su publicación. Ni
rastro de las cantarerías.
En el apartado de historias locales, Marisancho
MENJÓN RUIZ (2011) estudia los fondos documentales del
condado de Morata cedidos al Archivo Histórico Provincial
de Zaragoza (AHPZ). Se mencionan dos cantareros del
siglo XV: Ybraym e Hilel. Nada de los escudilleros de Mo-
rata de Jalón o de las cantarerías de Illueca. Recordemos
que los Luna tuvieron el condado de Morata y la baronía
de Illueca.
A partir del siglo XVIII se amplían las fuentes. Así por
ejemplo el Diario de Zaragoza de 1797 anuncia el 26 de
enero “En el mesón de los Reyes se vende garnacha de
Cosuenda a nueve sueldos el cántaro”; o el día 2 de febrero
“En la calle de la Paja, junto a las cantarerías hay una cria-
da de quince años de edad”. O ese juez que en el Boletín
Oficial de la Provincia de Zaragoza del día 2 de enero de
1862 cita, llama y emplaza a Manuel Marta, vecino de Ma-
ra, de oficio “apañacuencos”. A finales del XIX, 1890, se
iniciará la publicación de los censos electorales en el BOE.
Allí aparecen todos los vecinos varones y mayores de 25
años con sus oficios y domicilio.
La investigación puede avanzar con los protocolos pos-
teriores a 1600 de Calatayud, La Almunia o Zaragoza; los
diversos archivos históricos de la comunidad y sobre todo
con los archivos parroquiales y municipales de la zona
hasta ahora no revisados. En el campo de las entrevistas,
el tiempo apremia. Ya quedan muy pocas personas que
vieran levantar una tinaja o a un arriero vender cántaros.
LOCALIZACIÓN DE LAS CANTARERÍAS (Figs. 2-14 y 20)
Publicadas las que aún persisten en la partida de “la
tejería” de Jarque, más allá del cementerio, la de la familia
Gómez de Sestrica o las del camino de las cuevas en Illue-
Fig. 4. Restos del horno de la familia Gil. Sestrica.
Fig. 5. Almacén del Alfar de Gaudencio Zapata. Illueca
Fig. 6. Alfar hundido de Gaudencio Zapata. Illueca.
Fig. 2. Restos del horno de la familia
Gómez. Sestrica.
Fig. 3. Cilindro de la familia Gómez
actualmente en el campo de fútbol.
Sestrica.
ca. Nos faltaría avanzar con la situación de las cantarerías
de Jarque dentro del pueblo, anteriores a su desplaza-
miento a la Tejería, el alfar de la familia Gil de Sestrica
junto a la carretera, o varias de Illueca que se implantaron
junto al río, fuera del pueblo.
Distribución de espacios
Mencionados por Mª Isabel Álvaro en 1980, serán Ro-
mero y Cabasa quienes publiquen la planimetría y alzado
de la cantarería de Domingo Marco de Jarque. A pesar del
deterioro por el paso del tiempo, se pueden levantar pla-
nos de las otras dos cantarerías de Jarque, de los restos de
Sestrica e incluso aproximarse a las de Illueca mediante
las fotos existentes de los años 1990, antes del derribo
definitivo de la última cantarería. Puede ayudarnos la po-
sible existencia de planos antiguos en los ayuntamientos o
los planes de actuación de los campos de trabajo ejecuta-
dos en Jarque.
Fig. 7 (arriba a la izquierda). Restos del horno de Gaudencio Zapata en Illueca, antes de arrasarlo.
Figs. 8-14 (de arriba abajo y de izquierda a derecha). Vistas de los alfares de la familia Marco en la partida de la Tejería. Jarque
En relación a este apartado no se ha tratado la construc-
ción de una cantarería: propiedad del suelo, diseño, mate-
riales utilizados, condiciones previas a tener en cuenta,
profesionales –si los hay- que intervienen, y una vez en
funcionamiento, su conservación.
MATERIAS PRIMAS: TIERRA, AGUA Y LEÑA (Figs. 18-19)
Ya tratados de forma general en la bibliografía, se
puede profundizar en varias líneas de investigación:
● En los tres pueblos las tierras son recogidas bajo la
misma capa jurásica. Deben ser de la misma época geo-
lógica pero falta confirmarlo y realizar un estudio mi-
neralógico de las mismas.
● La dependencia del agua está clara y puede condicionar
su localización. Se aprecia gran diversidad de acopios:
el río Isuela o un estanque junto a la ermita de San Ba-
bil en Illueca, pequeños nacientes o derivaciones de ba-
rranco en las Tejerías de Jarque, o el acarreo desde la
fuente pública en Sestrica.
● La leña, casi siempre de monte bajo, podía ser hecha
por los propios cantareros o comprada a los vecinos del
pueblo o a forasteros. Nos faltan los tipos botánicos y
su elección por abundancia o poder calorífero, así como
la relación precio-tiempo invertido en la leña necesaria
para una hornada.
GENEALOGÍAS (Tablas 1-3)
Los tres libros citados nombran a distintos cantareros.
Romero y Cabasa, utilizando entrevistas de los años 1990 y
datos de los Anuarios Generales de España publicados por
Bailly-Bailliere-Riera, van más allá y publican las genea-
logías de las familias Becerril y Marco de Jarque.
Se pueden completar con los registros parroquiales y
los censos electorales. Difícilmente ya con entrevistas. En
el primer caso, debemos partir de un cantarero conocido y
retroceder en el tiempo; en contadas ocasiones el párroco
menciona el oficio. Más interesante, pero limitado en el
tiempo, son los censos electorales. Se han publicado a
partir de 1890 para los varones mayores de 25 años y
están disponibles en los BOE custodiados en la biblioteca
de la Diputación Provincial de Zaragoza.
Puede ser interesante intentar confeccionar una histo-
ria personal de alguno o varios de los últimos alfareros:
nacimiento, aprendizaje, producción, intercambios con
otros profesionales, cambios de domicilio, chascarrillos del
oficio, etc.
Figs. 15 y 16. Minas de arcilla en la partida de San Babil.
Illueca
Figs. 15-17 (columna izquierda). Vistas de los alfares de la fami-
lia Marco en la partida de la Tejería. Jarque
Figs. 18-19 (columna central). Minas de arcilla en la partida de
San Babil. Illueca.
Tabla 1. Censos electorales de la Provincia de Zaragoza, 1890-1900. Illueca
Nombre / Año 90 92 93 94 96 97 98 99 900
Fajardo Gaspar, Lucas. Plaza Nueva 303 (1) 28 30 31 32 34 42 43 no- 56
Fajardo Gaspar, Miguel. Plaza Nueva 293 (2) 26 28 29 30 32 54 55 56 57
Fajardo Tobajas, Serafín. Constitución 66 (3) no 31 32 33 35 32 33 34 35
Garcia Aznar, Emilio. Don Roque 114. Alfarero (4) no no no no no 25 26 27 28
Garcia Cabello, Anselmo. Plaza Nueva 296 (5) 40 46 47 48 50 50 51 no no
Garcia Cabello, Constancio. Cuevas 304 40 42 43 44 46 46 47 48 40
Garcia Cabello, Ponciano. Plaza Nueva 297. Alfarero 41 43 44 45 47 47 48 49 no
Garcia Fajardo, Juan. Mesones 364 27 29 30 31 33 33 34 35 36
Garcia Forcen, Francisco. Don Roque 118 (6) 26 28 29 30 no no no no no
Garcia Forcen, Pablo. Iglesia 413 no no no no 26 26 27 28 29
Garcia Urrea, Alejandro. Cuevas 304 77 79 80 no no no no no no
Marco Becerril, Felipe. Plaza Rector 381 (7) No no 31 32 34 34 35 36 37
Zapata Forcen, Esteban. Plaza Nueva 303 (8) 41 43 44 45 47 47 48 49 50
Zapata Forcen, Eusebio. Subida Candado. No 40 41 42 43 43 44 45 46
Zapata Gómez, Dámaso. Llano 16 No 33 no no no no no no no
Zapata Laborda, Bernardo. Arguillo 182 no 62 no no no no no no No
(1) En 1897 y 1898 aparece como comerciante en calle Llana 9, y en 1900 como labrador
(2) A partir de 1897 cambia el domicilio a Plaza Nueva 303.
(3) Alguacil de 1892 al 1896 y 1899, Cantarero en 1897 y 1898 en Plaza (4) Nueva 293, y jornalero en 1900.
(4) Cambia de domicilio en 1900 a Plaza Rusos
(5) En 1896 se cambia a vivir a las Cuevas.
(6) En 1894 vive en Subida Candado 280.
(7) A partir de 1894 vive en Mesones 382.
(8) Este cantarero y el siguiente tienen errata en el 2º apellido en 1900. Aparecen como Zapata Joven.
Nota 1. En el año 1897 se repiten las edades de 1896, manteniéndose posteriormente el error.
Nota 2.Los votantes eran varones mayores de 25 años.
Fuente.- Boletín Oficial de la Provincia de Zaragoza. Biblioteca de la DPZ. Illueca.
Tabla 2. Censos electorales de la Provincia de Zaragoza, 1890-1900. Jarque
Nombre / Año 90 92 93 94 96 97 98 99 900
Becerril Marco, Cirilo. c/ Mayor. Alfarero no 25 26 27 29 29 29 30 31
Becerril Marco, Mauricio. c/ Mayor. Alfarero 26 27 28 29 31 32 32 33 34
Becerril Zapata, Manuel. c/ Mayor. Alfarero (1) 56 57 58 59 61 no 62 63 64
Marco Becerril, Pablo. c/ San Martín. Alfarero no 26 27 27 29 no 31 32 33
Marco Becerril, Serapio. c/ S. Martín. Alfarero (2) 27 28 29 27 29 30 31 32 33
(1) A partir de 1896 aparece como labrador o agricultor. (2) A partir de 1897 vive en la calle Mayor
Fuente.- Boletín Oficial de la Provincia de Zaragoza.
Tabla 3. Censos electorales de la Provincia de Zaragoza, 1890-1900. Sestrica
Nombre 90 92 93 94 96 97 98 99 900
Embid Sierra, Antonio. c/ Feria Baja 25. Alfarero no no no no no 25 26 27 28
Fajardo López, Isidro. c/ Peñas 5. Alfarero 39 40 41 no no no no no no
Gaspar Mateo, José. c/ Cerdán 4. Alfarero (1) no no no no 25 26 27 28 29
Gaspar Perales, José. c/ Hospital 5. Alfarero (2) 42 44 45 55 47 48 49 50 51
Gaspar Perales, Julián. c/ La Fuente 2. Alfarero 55 56 57 no no no no no no
Gaspar Perales, Julio. c/San Cristóbal 7. Alfarero no no 25 no no no no no no
Gaspar Perales, Rufino. c/ Cerdán 4. Alfarero (3) 46 46 47 48 53 44 45 46 57
Gómez Gómez, Félix. c/ Lafuente 28. Alfarero (7) 26 28 no no no no no no No
Gómez Perales, Félix. c/ San Cristóbal 7. Alfarero 55 56 57 no no no no no No
Gómez Perales, Francisco. c/ S Cristóbal 20. Alf. 50 52 53 no no no no no No
Gómez Perales, Javier. c/ S. Cristóbal 20. Alfarero no no no no 26 27 28 29 30
Gómez Perales, Marcelino. c/ Castillo 5. Alf. (4) no 27 28 29 31 32 33 34 36
Gil Fajardo, Santiago. c/ Lafuente 8. Alfarero (5) 36 39 40 41 43 44 45 46 47
Gil Lafuente, Gregorio. c/ Lafuente 8. Alfarero (5) no 67 68 69 71 72 73 74 No
Muñoz Mateo, Manuel. c/ Lezcano 7. Alfarero no no no no no no 25 no 29
Pinilla Hernandez, Braulio. c/ San Cristóbal 7. Alfarero (6)
no no no no no 48 49 50 51
Gómez Perales, Pío. c/ Calva 1 Alfarero 69
(1) En 1898 cambia de domicilio a calle La Fuente 4. (2) En 1894 aparece como jornalero. Error en la edad. (3) Varios cambios de domicilio a San Cristóbal 7 y Hospital 5. En 1894 aparece como jornalero.
(4) En 1894 se cambia a Plaza Mayor 8. Y en 1900 aparece como comerciante. (5) En 1894 aparecen los dos como pastores.
(6) A partir de 1898 su nombre es Basilio, y en 1899 vive en San Cristóbal 8. (7) En 1890 aparece como Félix Gómez López, La Fuente 28
Fuente.- Boletín Oficial de la Provincia de Zaragoza. Biblioteca de la DPZ. Sestrica.
Fig. 20. Otra vista de los alfares de la familia Marco en la partida de la Tejería. Jarque.
PROCESO PRODUCTIVO
Difícil avanzar en lo ya estudiado debido al falleci-
miento de sus artífices. A través de la memoria colectiva o
por comparación con otras cantarerías podríamos profun-
dizar en la mezcla de las tierras, tiempos de maduración
del barro, oreo o acumulación de obra antes de entrar en el
horno.
Un ejemplo podría ser el chascarrillo que se cuenta de
uno de los miembros de la familia Asensio de Illueca, que
tuvo que dejar el oficio ya que se mareaba dando vueltas
alrededor de las tinajas.
Interesante y contrastada la explicación que dan Ro-
mero y Cabasa a la presencia de “cercillos” en algunas
tinajas: habíamos pensado en su robustez y prestancia,
pero no, se debía a su situación en la base de la columna
dentro del horno. Hasta que se cocieran debían soportar el
peso del resto de hornada.
CATÁLOGO Y MORFOLOGÍA DE LAS PIEZAS
Muy bien tratado en la bibliografía, el libro de Díez
Galán sirve de complemento gráfico a la obra de Álvaro
Zamora. Por su parte Romero y Gabasa publican tipología
de los tres centros pero solo estudian la tinajería, inclu-
yendo cuencos y orzas. No tratan los cántaros, jarras,
huchas, estufas, tapes, filtros, jarreros, bebederos, moido-
ras etc.
No obstante echamos en falta un catálogo uniformado
de las piezas mediante fichas con su denominación, morfo-
logía, tamaños, capacidad, uso, foto y observaciones va-
rias. En dicho catálogo no deberían faltar los elementos
constructivos también producidos en las cantarerías: la-
drillos, tubos para conducciones de agua, codos, “Y” grie-
gas, canalones o chimeneas para hornos de pan.
Partiendo del artículo de Mª Isabel Álvaro Zamora
(1981), podemos profundizar en el estudio de las produc-
ciones religiosas. Se trata de pilas de agua bendita, lavato-
rios y pilas de bautizar que todavía permanecen en la co-
marca. Su riqueza decorativa y simbólica bien merece un
estudio exhaustivo: localización, encargos, ubicación de-
ntro de los edificios religiosos, morfología, tipología de
sellos y otros elementos plásticos.
COMERCIALIZACIÓN DE LA PRODUCCIÓN
Esbozado brevemente en la literatura, es un tema pen-
diente. Una línea de trabajo es la presencia masiva de
arrieros, 58, en el censo de 1890 en Sestrica y la ausencia
absoluta en Jarque e Illueca con la salvedad de dos carre-
teros. Todavía se podría entrevistar a familiares de aque-
llos arrieros o vecinos que recuerden aquel viejo e impres-
cindible oficio. Mi padre, José, de 83 años, me cuenta la
historieta del arriero de Gotor que al subir de Santa Cruz
de Grío a Viver de Vicort con dos caballerías, ató a un pino
la mula cargada con obra y despeñó al macho por viejo y
lento a la altura de las peñas Molinares.
También nos falta confeccionar un mapa de distribu-
ción. Para ello la información de los coleccionistas y ven-
dedores del rastro es imprescindible. Acotar el territorio
donde se vendió la obra de estas cantarerías nos ayudaría
a conocer la verdadera importancia de su producción.
INTERCAMBIOS CON OTROS ALFARES (Figs. 21-32)
Martínez Glera (1995) publicó la presencia de cantare-
ros del Aranda en Arnedo, La Rioja, en 1696. De más re-
ciente memoria, siglo XIX, será la marcha de un cantarero
de la familia Fajardo de Sestrica y su instalación en Nava-
rrete, La Rioja. Sus descendientes han mantenido en el
oficio hasta la actualidad y conservan piezas selladas de
sus antepasados. Referenciemos la presencia del “botijón”
de Daroca, Zaragoza, en los últimos tiempos del alfar de
los Pellés como copia a torno del cántaro de Sestrica. Sin
olvidar el expansionismo frustrado de Jarque hacia Aran-
da de Moncayo, Pablo Marco “Pablico”, y Tierga con varios
miembros de las familias Marco y Becerril.
Fig. 21 (izquierda). Ollas de Arnedo de la colección
de Frank en Munilla (Logtroño).
Fig. 22. Tinaja alquecera de Navarrete con escudo y leyenda
Fajardo.
Fig. 23. Tinajilla de Navarrete.
Fig. 24. Tinajilla de Navarrete con decoración de cordón
ondulado.
Todavía nos falta explicar la presencia de tinajillas bar-
nizadas en el alfar de Lumpiaque, Zaragoza, con la misma
morfología que las del Aranda. Romero y Cabasa publican
una fabricada por Tomás Bravo y fechada en 1848. No
tenemos explicación para las similitudes entre las tinajillas
del Aranda y los tinteros de los alfares de La Solana en
Ciudad Real.
De izquierda a derecha y de arriba
abajo:
Fig. 25. Tinajillas de Lumpiaque en
la colección de José María
Gimeno.
Fig. 26 y 27. Tinajillas
de Lumpiaque.
Fig. 28. Tinaja alquecera * de
Lumpiaque o Navarrete.
Fig. 29. Tinajilla alquecera de
Lumpiaque con relieve de
estrella. Colección de
Chema Abad.
Fig. 30. Botijón de Daroca
Fig. 31. Imitación del cántaro
de Sestrica en el alfar de
Fuentes de Ebro.
Fig. 32. Cántaro marroquí
con posibles influencias
aragonesas.
* Tinaja alquecera: ALQUEZ: del ár. hisp.: alqíst; ár. clás.: Qist; siriaco: qestá o qistá; lat. Sextarius. Medida de vino de 12 cántaras (Diccionario de la Real Academia Espa-
ñola).─ CÁNTARA: del lat.: Cantharus; ár. hisp.: Attúm; ár. clás.: Tum(u)n: octava parte. La cántara tiene 16 litros u 8 azumbres de 2 litros.
FISCALIDAD
No hay nada publicado.
Es llamativo que a mediados del siglo XIX Madoz
(1845-1850) no recoge industria alfarera en Jarque e Illue-
ca. En Sestrica “IND. La agrícola, 2 molinos de aceite, 4
harineros y fábrica de Alfarería en la que se elaboran tina-
jas, cántaros y demás vasos mayores sin barnizar”.
Entre las tres localidades sumaban entonces 2.925 al-
mas entre las que, 40 años más tarde, censo de 1890, hay
21 cantareros: 9 en Illueca, 3 en Jarque y 9 en Sestrica. ¿Se
obviaba intencionadamente el oficio para no pagar im-
puestos?
ANTROPOLOGÍA
Se ha descuidado el estudio del uso de las piezas.
Nuestra referencia sería el magnífico libro sobre los alfares
de Peñafiel, Valladolid, de Agustín García Benito (2004).
VIDA SOCIAL (Figs. 33-34)
Álvaro Zamora nos habla de las festividades de Santa
Justa y Rufina el 19 de julio en Sestrica. Hay altares a las
santas en Illueca y Sestrica.
En la iglesia de esta última población se conservan ta-
llas que se sacaban en procesión cargadas de cantaricos.
No se menciona en la zona a San Hipólito como ocurre
en Almonacid, Villafeliche o Muel.
No hemos hallado hasta la fecha estatutos gremiales o
concordias como los de Almonacid, Villafeliche y Morata
de Jalón. Todos ellos centros alfareros de la provincia de
Zaragoza.
¿Cómo fue la relación de los alfareros con los vecinos?
¿Qué conflictos pudo ocasionar la extracción de la tierra, el
aporte de agua o leña? ¿Qué parte de los excedentes fue a
parar al señor del lugar y posteriormente al municipio o al
Estado? ¿Cómo era su vida fuera de la cantarería?
El tiempo corre en nuestra contra, pero esperamos po-
der dar respuesta a algunos de los interrogantes plantea-
dos. El trabajo en preparación de Gloria Pérez puede ayu-
darnos ya que es la primera vez que se dedica un estudio
en profundidad a estas cantarerías.
Figs. 33.y 34. Cuadro al óleo y esculturas en madera
de las santas Justa y Rufina. Parroquia de Sestrica.
BIBLIOGRAFÍA
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tro de Estudios Bilbilitanos, Institución Fernando el Católico.
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ÁLVARO ZAMORA, M.I. (1981). “Pervivencias técnicas y ornamentales de la cerámica medieval mudéjar en la alfarería aragonesa
posterior a 1610”. En: ZOZOYA, J. (coord.) (1986). Segundo Coloquio Internacional de Cerámica Medieval del Mediterrá-
neo Occidental, Toledo 1981. Madrid, Ministerio de Cultura, pp. 433-439.
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nos, Institución Fernando el Católico.
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SERRANO MONTALVO, A. (2002). La población de Aragón según el fogaje de 1495. Zaragoza, Institución Fernando el Católico,
Diputación Provincial de Zaragoza.
1. TINAJAS ALQUECERAS (Figs. 35-45)
1.1. Tinaja alquecera lisa
1.2. Tinaja alquecera cercillada ½ inferior
1.3. Tinaja alquecera cercillada completa
1.4. Tinaja alquecera antigua
1.5. Tinaja alquecera pequeña
2. TINAJONES (Figs. 46-56)
2.1. Tinajón cercillado
2.2. Tinajón cercillado ½ inferior
2.3. Tinajón antiguo
2.3.1. Tinajón antiguo sellado
2.4. Tinajón de tres alqueces
3. TINAJILLAS (Figs. 57-66)
3.1. Tinajilla grande (3 tercios, 3 sueldos o 6 piezas)
3.2. Tinajilla mediada (de a real)
3.3. Tinajilla pequeña (a sueldo, tercio)
3.4. Tinajilla chica
4. ORZAS O MIELERAS (Figs. 67-88)
4.1. Mieleras grandes de 2, 4, 6 o más asas
4.2. Mieleras mediadas de dos asas
4.3. Mieleras pequeñas de dos asas
5. TAPES (Figs. 89-93)
5.1. Tape de tinaja
5.2. Tape de trujal
5.3. Tape filtro
6. CUENCOS O COLADORES (Figs. 94-100)
6.1. Cuenco grande cercillado (5 sueldos)
6.2. Cuenco grande (3 sueldos o 6 piezas)
6.2.1. Cuenco grande con asas
6.3. Cuenco mediano (a real o mediano)
6.4. Cuenco pequeño (florero, sueldo o a real)
6.5. Recipiente para líquidos
6.6. Lavadero o paridora
7. TERRIZAS (Figs. 101-106)
7.1. Terrizón (Álvaro Zamora habla de grandes terrizas de dos asas
que no he visto)
7.2. Terriza grande
7.3. Terriza mediana
7.3.1. Terriza de pico. Largo y corto
7.4. Terricilla
8. CÁNTAROS (Figs. 107-115)
8.1. Cántara de Jarque (divisor del alquez de 16 litros)
8.1.1. Cántara de dos asas
8.2. Cántaro tipo
8.3. Cántaro mediano o miajal (5 litros)
8.4. Cántaro pequeño (picharrillo, cantarico, cantarillo) para niños
8.5. Cántaro antiguo
8.6. Cántaro de vino (medida de 10 litros) (Figs. 116-124)
8.7. Cántaro de incendios de Jarque (Fig. 125)
8.8. Cántaro con pico vertedor (Fig. 126)
9. JARROS de agua o vino con pico vertedor o sin él (Figs. 127-128)
10. JARRONES DECORATIVOS (Fig. 129)
11. MACETAS (Figs. 130-138)
11.1. Maceta lisa
11.2. Maceta labrada
11.3. Maceta chata
11.4. Maceta-jarrón para jardín
12. JARREROS o CANTARERAS (Figs. 139-144)
12.1. Jarrero para un cántaro
12.2. Jarrero para dos cántaros
CATÁLOGO
Presentamos el siguiente listado como un conjunto abierto a nuevas incorporaciones pero donde destacan dos piezas sobre las demás: la tinaja y el cántaro.
Incluimos algunas piezas fabricadas por el cantarero para su uso en el oficio.
13. BEBEDEROS (Figs. 145-154)
13.1. Bebedero media tinajilla
13.2. Bebedero media cántara
13.3. Bebedero con visera
13.4. Bebedero de dos piezas
14. TONELES (Fig. 155)
15. EMBUDOS (Figs. 156-158)
16. TIESTOS (Fig. 159)
17. HUCHAS (Fig. 160)
18. MOIDORAS (Fig. 161)
19. ESTUFAS (Fig. 162)
20. CALENTADORES DE PIES
19.1. Calentador ovalado (Fig. 163)
19.2. Calentador tipo orza (Fig. 164)
21. FREGADEROS (¿dudoso en Morata de Jalón?)
22. BOTIJO (Fig. 165)
23. COMEDEROS de corral (Fig. 166)
24. TUBOS CON FILTRO (Fig. 167)
25. MEDIDAS DE LÍQUIDOS (Figs. 168)
26. RECIPIENTE PARA MASA O LEVADURA DE PAN (Fig. 169)
27. TRABAS (Fig. 170)
28. TUBERÍAS (Figs. 171-173)
29. ACCESORIOS PARA LA CONSTRUCCIÓN (Figs. 174-179)
30. JUGUETES
31. LAVATORIOS *
32. PILAS DE AGUA BENDITA *
33. PILAS BAUTISMALES *
34. CANTARICOS MILAGROSOS *
35. ELEMENTOS FUNERARIOS *
36. ANIDALES (180-198)
36.1. Anidal tipo
36.2. Anidal reutilizado.
37. PIES (Figs. 199-201)
38. INSTRUMENTOS DEL TEJAR (Figs. 202-205)
1. TINAJAS ALQUECERAS (Figs. 35-45)
Fig.35. Grupo de tinajas alqueceras. Fig.36. Tinaja alquecera semicercillada.
Fig.37. Firma del cantarero Ambrosio García de Illueca.
Hacia 1915.
Fig.38. Tinajas alqueceras del alfar de
Vicente Torrente en Illueca.
Fig.39. Tinaja alquecera de Mauricio o Manuel Becerril
de Jarque. Fig. 40. Tinaja alquecera lisa.
2. TINAJONES (Figs. 46-56)
Fig. 41. Tinaja alquecera con dos vertedores. Fig. 42. Tinaja alquecera hallada en La Almunia de Doña
Godina y marcada “N Sierra”: ¿arriero de Sestrica?
Fig. 43. Tinaja alquecera de Domingo
Marco de Jarque decorada con gallo y
leyenda.
Fig. 44. Tinaja alquecera
con serpentiforme.
Fig. 45. Tinaja alquecera
de Jarque con capacidad
reducida
Fig. 47. Tinajón cercillado
con dos vertedores.
Fig. 46. Tinajón cercillado.
Fig. 48. Tinajón semicercillado.
Fig. 49. Marca impresa en un tinajón: “JC”.
Fig. 50. Tinajón con serpentiforme en una bodega de Illueca
Fig. 51. Borde de tinajón con marcas de tradición mudéjar
hallado en el muro de una vivienda de Chodes nuevo.
Fig. 52. Tinajón con serpentiforme hallado
en Villalba, junto a Calatayud.
Fig. 53. Tinajón con serpentiforme y sellos
de tradición mudéjar. Col Jacinto Ramos.
3. TINAJILLAS (Figs. 57-66)
Fig. 54. Fragmento de tinajón con serpentiforme
ungulado y 523 sellos formando cruces y bandas.
Colección de José María Gimeno.
Fig. 55. Tinajón de 3 alqueces.
Colección de José María Gimeno.
Fig. 56. Tinajón de 3 alqueces.
Colección de José María Gimeno.
De izquierda a derecha: Figs. 57-59. Tinajillas decoradas de Jarque. Fig. 60. Tinajilla de Jarque
Fig. 62. Tinajilla de Félix Marco de Jarque.
Fig. 61. Tinajilla de Sestrica
Fig. 63. Tinajilla de Jarque marcada “MB”:
Mauricio Becerril.
Fig. 65. Pequeña tinajilla en Santa Cruz de Grío. Fig. 64. Tinajillas. Fig. 66. Tinajilla cercillada.
4. ORZAS O MIELERAS (Figs. 67-88)
Figs. 67-69. Mieleras.
Fig. 70. Mielera de Jarque. Figs. 71 y 72. Mieleras de Sestrica.
Fig. 73. Mielera.
Figs. 74 y 75. Mieleras.
Fig. 76. Mielera de 4 asas de Sestrica. Fig. 77. Mielera de 4 asas firmada por
Rufin0 Gaspar( Sestrica).
Fig. 78. Mielera de 8 asas de la colección
de Carlos Díez. Fig. 79. Mielera de 3 asas de Sestrica. Fig. 80. Mielera de 6 asas de Sestrica.
Fig. 81. Mielera de 3 asas
decorada con cordones
y conchas
Figs. 83-85. Mielera de 4 asas de Rufino Gaspar para Manuela Joven de Morés.
Figs. 86 y 87. Mielera de 4 asas y motivos florales mediante sellos en Miedes. Fig. 88. Mielera con recibidor (¿?).
5. TAPES (Figs. 89-93)
Figs. 89 y 90. Tapes de tinajón.
Figs. 91 y 92. Tapes de lagar. Fig. 93. Tape con filtro de la colección de Carlos Díez
6. CUENCOS O COLADORES (Figs. 94-100)
Fig. 94. Cuenco cercillado. Fig. 95. Cuenco grande. Fig. 96. Cuenco pequeño. Fig. 97. Recipiente (¿trujal?)
marcado “Fortunato Zabal”
Fig. 98. Cuenco grande. Fig. 99. Cuencos pequeño y mediano. Fig. 100. Posible lavadero o partera.
7. TERRIZAS (Figs. 101-106)
Fig. 101. Tres terrizas. Fig. 102. Terriza de 2 asas y pico vertedor, de Sestrica. Fig. 103. Terriza de 2 asas sin pico, de Sestrica.
Fig. 104. Terriza de Sestrica con pico corto. Fig. 105. Terrizo de tres asas imitado en Lumpiaque. Fig. 106. Terrizo de gres y barnizado imitado
en Zaragoza, Fábrica Arribas.
8. CÁNTAROS (Figs. 107-115)
Fig. 107. Cántaros grandes. Fig. 108. Tres tamaños de cántaros.
Fig. 109. Cántaros.
Fig. 110. Cántaro de Sestrica.
Fig. 111. Cántaro de Sestrica. Fig. 112. Cántaro de Illueca. Fig. 113. Cantarillo de Jarque
con decoración de peine. Fig. 114. Dos cantarillos de boca ancha.
Convento de Calatayud.
Fig. 115. Cántaro de Jarque,
de boca ancha
.
Fig. 116. Cantarillo antiguo
de boca ancha
.
Fig. 117. Cantarillos y mielera.
Fig. 119. Cántaro
antiguo fusiforme.
Fig. 118. Cantarillo reaprovechado
como maceta para fresas.
Figs. 120-123. Cantaros de vino.
9. JARROS CON PICO VERTEDOR O SIN ÉL
(Figs. 127-128)
10. JARRONES DECORATIVOS (Fig. 135)
Fig. 124. Cántaro de vino.
Fig. 129. Jarrón de Sestrica.
Figs. 127-128. Jarras de pozo negro.
Fig. 125. Cántaro de incendios.
Jarque
Fig. 126. Cántaro con pico vertedor.
Jarque
11. MACETAS (Figs. 130-139)
Fig. 130. Maceta. Figs. 131-132. Macetas floreadas. Fig. 133. Maceta chafada.
Fig. 134. Macetero con pie
y decoración incisa y plástica. Figs. 137. Maceta con pie
y decoración de sellos y diablos. Fig. 135 y 136. Maceteros.
12. JARREROS O CANTARERAS (Figs. 139-144)
Fig. 138. Macetero con aplique de ángel
(de arriba abajo, vista general y detalle).
Figs. 139-142. Jarreros.
Figs. 143-144. Jarreros de Félix Marco, de Jarque.
13. BEBEDEROS (Figs. 145-154)
Fig. 145. Bebedero-tinajilla. Fig. 146. Bebedero-medio
cántaro.
Figs. 150-153. Bebederos- cántaro.
Figs. 147-149. Bebederos de visera.
Fig. 154. Bebedero-botella.
14. TONELES (Fig. 155)
16. TIESTOS (Fig. 159)
15. EMBUDOS (Figs. 156-158)
17. HUCHAS (Fig. 160)
18. MOIDORAS (Fig. 161)
Fig. 155. Conjunto de piezas de bodega:
tinajón, tonel, tape tiesto y embudos.
Fig. 156. Embudo de Jarque. Fig. 157. Embudo para cuba
de Jarque.
Fig. 158. Embudo de Sestrica.
Fig. 159. Tiesto de Jarque.
Fig. 160. Hucha.
Fig. 158. Embudo de Sestrica.
Fig. 161. Moidora.
19. ESTUFAS (Fig. 162)
21. FREGADEROS
22. BOTIJOS (Fig. 162)
20. CALENTADORES DE PIES (Figs. 163-164)
23. COMEDEROS DE CORRAL (Fig. 163)
24. TUBOS CON FILTRO (Fig. 164)
Fig. 162. Tinajilla-estufa.
Fig. 163. Calentador ovalado.
Fig. 164. Calentador-orza.
Fig. 165. Botijo.
Fig. 166. Fragmento de comedero
de corral.
Fig. 167. Tubo con filtro.
25. MEDIDAS DE LÍQUIDOS (Fig. 168)
26. RECIPIENTE PARA MASA O LEVADURA
(Fig. 169)
27. TUBERÍAS (Fig. 170)
27. TRABAS (Fig. 170)
Fig. 168. Posible medida.
Fig. 169. Recipiente para masa de pan o levadura.
Fig. 170. Tiesto.
Fig. 171. Tuberías de Sestrica. Fig. 172. Tuberías. Fig. 173. Tubo-chimenea.
29. ACCESORIOS PARA LA CONSTRUCCIÓN
(Fig. 168)
30. JUGUETES
Fig. 174. Y para desagües. Fig. 175 y 176. Codos. Fig. 177. Tubo vierteaguas en Sestrica.
Fig. 178. Canaleras. Fig. 179. Tejón.
31. LAVATORIOS *
32. PILAS DE AGUA BENDITA *
33. PILAS BAUTISMALES *
34. CANTARICOS MILAGROSOS *
35. ELEMENTOS FUNERARIOS *
* Pueden verse las figuras correspondientes y consultarse más ampliamente su estudio en:
JOSÉ MARÍA GIMENO (2011). “La producción religiosa de las cantarerías de la comarca
del Río Aranda (Zaragoza)” en Alfahar 0/2012, pp. 12-15.
36. ANIDALES DE SESTRICA E ILLUECA
(Figs.180-198)
Fig. 180. Fig. 181. Fig. 182. Fig. 183.
Fig. 184. Fig. 185. Fig. 186. Fig. 187.
Fig. 188. Fig. 189. Fig. 190. Fig. 191.
Fig. 192. Fig. 193. Fig. 195.
Fig. 196. Fig. 197. Fig. 198.
Fig. 194.
37. PIES (Figs.199-201)
37. INSTRUMENTOS DEL TEJAR
(Figs.202-205)
© 2012, José María Gimeno Hernández
Correspondencia con el autor:
Fig. 200. Pie de Sestrica.
De izquierda a derecha y de arriba abajo:
Fig. 202. Molde de hierro para tejas en Sestrica. Familia Gómez.
Fig. 203. Molde de madera para tejas. Familia Gómez.
Fig. 204. Cuchillo de cortar el barro en cantería o tejar.
Fig. 205. Fragmentos de tinajas en suelo de yeso. Fig. 201. Pie de Illueca.
Fig. 201. Pie de Jarque.
José Mª Abad
ALFACER
Localización de un alfar del siglo XX en las Cuevas de Cañart (Teruel)
a villa bajoaragonesa de Las Cue-
vas de Cañart (Fig. 1), pertenecien-
te al municipio de Castellote, es
ejemplo del declive experimentado por
tantos núcleos rurales. Con un censo de
población muy bajo (72 habitantes), el
decremento poblacional fue continuo du-
rante todo el siglo pasado (636 habitantes
en 1910).
Sólo su judería y su rico patrimonio
arquitectónico de iglesias, conventos y
palacios queda como testigo de su pujanza
pasada.
Estaba documentada en esta localidad
la existencia de actividad alfarera a finales
del siglo XIX y comienzos del XX. Eran
alfareros de Cuevas de Cañart en 1901 los
hermanos Francisco y Vicente Armengol
Boj de 71 y 56 años respectivamente en
aquella fecha. Incluso no cabe duda de que
existió una producción anterior por los
fragmentos y atifles localizados en la po-
blación (Fig. 2).
Desde comienzos del siglo XX se des-
conocía, por tanto, la continuidad de la
actividad alfarera; por lo que el descubri-
miento de un alfar posterior y algunas in-
informaciones con él relacionadas, permi-
ten atribuir a este centro algunas produc-
ciones de las que no se conocía la proce-
dencia y ahora aparecen como compatibles
con lo elaborado en Las Cuevas de Cañart.
En especial una tipología de cántaro de
morfología arcaica y característica, a pesar
de estar fabricado a torno.
Tenemos todavía informaciones im-
precisas proporcionadas por los amables
informantes encontrados. Desconocemos
el momento de llegada al pueblo de este
alfarero y la fecha y el motivo del fin de su
actividad. Sabemos que trabajaba en
1940 porque así lo dejó pintado en un
cántaro. Desde luego no era vecino del
pueblo y nuestros informantes le atribu-
yen procedencia de La Cuba; la localidad
del Maestrazgo, en los límites de Cas-
tellón, sugerentemente localizada muy
próxima a Olocau del Rey (Castellón) y
Tronchón (Teruel). Ambas poblaciones
con tradición alfarera y que utilizaron el
almagre en la decoración pintada de los
cántaros. Sí se conoce la vivienda en la que
al parecer residió (Fig. 3) en la calle El
Horno.
Fig. 3.
Fig. 1
Con mucha probabilidad pudo utilizar
el horno que parcialmente se conserva en
la partida de “El Tosco” (Figs. 4 y 5);
mientras que restos de hornos situados en
la carretera de Ejulve, a dos kilómetros de
la localidad (Fig. 6), y de otro (Fig. 7)
corresponderían a épocas anteriores al
siglo XX.
Aunque no contamos con evidencias,
es posible que continuaran abasteciéndose
de arcilla en un terrero tradicional situado
en la parte superior del paraje denomina-
do La Pileta (Fig. 8).
L
Fig. 2. Fragmentos de cerámica de un
alfar anterior.
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2012), Comunicaciones Página 37
Fig. 4. Horno de los años 1940
encontrado en la partida "El Tosco".
Fig. 5. Partida "El Tosco".
Fig. 6. Horno situado en la carretera a Ejulve, a 2 km del pueblo. Fig. 7. Parte de un horno anterior al siglo XX.
Fig. 8. La arcilla la cogían encima de La Pileta.
Seguramente la vasija más singular e impor-
tante elaborada por este último y todavía desco-
nocido alfarero, sea el cántaro, del tipo del ejem-
plar que se conserva en la misma localidad, que
está fechado en 1940 y que se muestra en las figu-
ras 9 y 10.
Presenta una forma esférica difícilmente su-
perable; más acusada, si cabe, que la producción
característica de Calanda.
Como en este centro está decorado con trazos
de pintura en el cuerpo y en las asas (Fig. 11);
pero a diferencia de Calanda, la pintura es roja de
almagre.
Fig. 9. En el cántaro pone "Cuevas de Cañart 1940".
Otro cántaro similar y de las mismas características, se conserva (es un decir) en Las Cuevas de Cañart (Fig. 12).
Por último, un tercer cántaro (Fig. 13) conservado asimismo en la localidad, tiene características similares en lo que se refiere a la decoración pintada y al pegado del asa;
pero no así en lo que se refiere a la morfología mucho más estilizada. No obstante, puede tratarse simplemente de una vasija de menor capacidad.
En cualquier caso, se trata de un cántaro con el mismo origen.
El hallazgo de este alfar nos aporta una nueva pieza para recomponer el puzzle de la historia de la etapa final de la alfarería aragonesa.
© 2012, José Mª Abad Sancho
Correspondencia con el autor:
Fig. 10. Diferentes perspectivas del cántaro de la figura 9. Fig. 11. Asa decorada
con pintura de almagre.
Fig. 12. Fig. 13.
Emili Sempere
ALFACER
Miravet, los últimos hornos tradicionales de leña
ra uno de esos días otoñales de
tiempo plácido y colores cálidos
que invitan a viajar, cuando con mi
amigo Michel Primot, nos dirigía-
mos a Miravet donde solemos acu-
dir por lo menos una vez al año.
Miravet, pequeña población situada en
el tramo final del curso del Ebro, cuenta
con una antigua tradición alfarera paralela
a la de los centros de Benissanet, Ginestar,
Tivenys, La Galera y, ya entrando en la
provincia de Castellón, Traiguera.
Situado en el margen derecho del río,
dista apenas seis kilómetros de Mora de
Ebro. En la actualidad cuenta con una
población en torno a los 800 habitantes,
algunos de los cuales sobreviven como
alfareros.
Es un pueblo cuyo principal atractivo
turístico, cerámica aparte, es el majestuo-
so castillo medieval de los monjes templa-
rios, balcón desde el que se contempla una
panorámica excelente sobre el valle en que
fluye el Ebro como un cordón de mercurio.
Otro de los atractivos de Miravet, es el
“pas de la barca”, una barcaza que cruza
las caudalosos aguas del río con personas y
automóviles a cuestas.
Miguel y yo la tomamos y a medida
que nos acercamos a la otra orilla, tene-
mos la sensación de que se levanta el telón
y nosotros somos introducidos en un pin-
toresco decorado natural que tiene como
protagonista de fondo el pueblo y su casti-
llo.
Ya de vuelta, al desembarcar y acer-
carnos a las inmediaciones del pueblo, de
pronto nos sorprende la visión de una
inmensa columna de humo negro ascen-
diendo hacia el cielo. Dirigiéndome a Mi-
chel, le digo:
─Alguna casa se debe de estar que-
mando en el pueblo.
Él me responde de inmediato:
─¡Estás de broma!: no es una casa, es
un horno.
Yo le pregunto:
─¿Cómo lo sabes?
Me mira sonriendo y con ojos malicio-
sos, responde:
─No son las casas lo que arde, sino la
alfarería.
Sin pensárnoslo dos veces, nos dirigi-
mos en dirección a la señal de la espesa
columna de humo negro que nos indica el
camino a seguir. Efectivamente, se trata de
lo que presentía Miguel: es el horno de la
alfarería es lo que está en llamas. Uno se
emociona cuando ve que aún existen hor-
nos de leña. Ver cómo cuece, es para un
amante de la alfarería un espectáculo in-
comparable que no se puede perder.
El protagonista es JOSEP FABREGAT
SOLER, un joven alfarero de 33 años; re-
encontrarle y constatar que aún mantiene
la tradición me alegra enormemente.
Él se encuentra luchando en solitario
con aquella inmensa bola de fuego rugien-
te. Es la pelea del caballero que lucha con
su lanza contra el dragón quien se defien-
de arrojando llamaradas por la boca, en
este cas0, por la boca del hogar (fogaina) y
por los tiros de la bravera (fumerals) y
expulsa un denso humo negro para con-
fundir al contrincante.
Cada vez que Josep ataca atizando con
los fajos de leña y con la retranca, rebufa el
dragón rugiendo enfurecido y escupiendo
fuego. Después de horas de una brava
lucha, el caballero Josep Fabregat acaba
venciendo el lance y, como era de prever,
finalmente rescata de las fauces del fiero
enemigo, sana y salva, la doncella y su
tesoro de hermosas piezas de cerámica
vidriada.
E
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Artículo original Página 40
La negra columna de humo.
ENTREVISTA CON JOSEP FABREGAT
Cuando se me presenta una ocasión
tan propicia como esta, conviene aprove-
charla para no perder detalle. Y así me
permito robarle al alfarero las pausas en
su labor de atizar el horno, y le asedio con
las preguntas de rigor de estos casos.
¿Cuántas horas tardas en cocer
toda la hornada?
Una hornada consta de tres etapas: la
primera ─el precalentamiento─ con fuego
lento y muy espaciado durante unas 6
horas, para templar el horno; la segunda
─la cocción─ es de unas 20 horas depen-
diendo del estado de la leña y del tiempo:
calor o frío, o la velocidad del viento; la
tercera fase ─el enfriamiento─ por lo
menos dos días antes de entrar y deshor-
nar lentamente; de lo contario, parte de
la obra se agrieta (s'esquerda). En total se
requieren unas 26 horas de fuego y al
menos 5 días entre el inicio y el final del
proceso.
Proceso que, según me cuenta, resulta
agradable en invierno pero temible en la
canícula del verano. Continúo con el inter-
rogatorio:
¿Cuánto mide este horno?
El interior mide 3 metros de ancho
por 5 de largo (antiguamente era de 6
metros) y 2,25 de alto.
¿Y cuántas piezas caben?
Si son más bien grandes y medianas
─cántaros, orzas, lebrillos y demás─,
unas quinientas piezas; y si son piezas
medianas y pequeñas, lo que hoy en día es
más frecuente, pueden alcanzarse fácil-
mente las mil piezas.
Josep atizando leña al horno. Interior del horno visto desde una bravera (fumeral).
Interior del hogar
(fogaina).
Boca del hogar con
el rebufo.
¿Cuántas hornadas cueces
al año?
Actualmente tres porque trabajo solo;
en tiempos de mi abuelo y mi padre había
tres personas en la rueda y dos peones
ocupados en la preparación del barro y
otras tareas; entonces llegaban a cocer
hasta 15 hornadas.
¿Cuántos alfares quedan hoy
en Miravet?
Somos 8 alfarerías, de las 50 que lle-
garon a trabajar a principios de siglo XX
y unas 25 a mediados del mismo.
Mientras le hacemos compañía al calor
del fuego y contemplamos la cocción,
aprovecho para disparar fotos.
Subimos a la parte superior del horno
para mirar por las braveras o tiros la bola
roja incandescente del interior de la “pan-
za del dragón”, que ciega la vista, a la vez
que exhalamos la fragancia de la leña que
arde: antiguamente los médicos del pue-
blo, para curar la gripe, enviaban a los
enfermos a respirar junto a las braveras
del horno.
Cuántos alfareros seguís cociendo
con hornos de leña?
Somos tres, los demás, entre ellos dos
ceramistas modernos, cuecen con hornos
de gas.
¿La producción es la misma
en verano que en invierno?
No, antiguamente en primavera y
principios de verano más bien se hacían
piezas para agua: cántaros, gárgolas y
botijos, mientras que hacia finales de
verano y en otoño la mayoría eran orzas
(gerres) y tinajas grandes para conserva
de salazones, aceite y almacenaje del
agua, así como lebrillos para la matanza
del cerdo (llibrells matansers). Hoy en día,
seguimos producido básicamente las ge-
rres, bien sean para la conserva o para el
jardín, junto con las macetas.
Miravet con Tivenys también a orillas
del Ebro, Verdú en Lérida, Esparreguera
en Barcelona y La Bisbal junto con Quart
en Girona, son los seis centros que aún
producen alfarería tradicional, pero de
estos, el único que sigue alimentando los
hornos con leña es Miravet, que a su vez es
de los pocos de España y únicos de Europa
que se mantienen en activo de manera
regular y de los de una producción autén
ticamente tradicional y para uso. Estas
alfarerías con sus hornos de leña represen-
tan un rico patrimonio artesanal y cultural
que debería estar protegido.
No podemos despedirnos de Miravet
sin acercarnos a visitar a nuestro amigo
FERRAN SEGARRA y su hijo, para adquirir
alguna de esas piezas viejas interesantes
que suele tener. La familia Segarra,
además de la alfarería, posee una tienda
con su producción, y una de las mejores
colecciones ─más de 2.000 piezas─ pro-
cedentes de toda España principalmente
de las Tierras del Ebro. Todas son piezas
excelsas y seleccionadas con gusto de entre
las miles que han pasado por sus manos.
De este modo con paciencia y sabi-
duría es como se forjan las grandes colec-
ciones.
© 2013 Emili Sempere
Correspondencia con el autor:
COLECCIONES EN MIRAVET
Ferran Segarra
Antonio Pedrola (cuñado de Ferran)
también con una formidable colección.
MUSEOS DE LA ZONA
Museu de Ceràmica Popular
Carretera N-340, km. 1127 (Pol. Ind.)
L’Ametlla de Mar (Tarragona).
Tel. 977 486 440
Museu de les Terres de l’Ebre
c/ Gran Capità, 30
Amposta (Tarragona). Tel. 977 702 954
ALFARERÍAS DE MIRAVET
Emilio Treig. Teléfono: 699 672 237
Josep Jornet. Teléfono/fax: 977 407 152
Josep Fabregat Soler.
Raval 28. 43747 Miravet.
Teléfonos: 977407127, 635213043
Ferran Segarra. Raval. 43747 Miravet.
Teléfono: 977 407 194.
e-mail: [email protected].
Jordi Balart (Una nueva interpretación y
percepción de la cerámica).
Teléfono: 653 248 109.
e-mail: [email protected].
Página web: www.jordibalart.com
Josep Papaseit. Teléfono: 977 407 101.
e-mail: ceramiquespapa-
Germans Pedrola: Teléfono: 977 407
128.
e-mail: ceramicapedro-
Página web:
http://terrisseriapedrola.com
Germans Ventura. Teléfono: 977 407
587
[Fuente: Ayuntamiento de Miravet]
Michel Primot y el autor al calor
de las fauces del dragón.
Ferran Segarra y su hijo ante el alfar
Aurelio Bail
ALFACER
Tejerías del Pirineo Occidental Aragonés Datos para su localización y estudio
n esta presentación se resumen los
datos de situación y estado actual
de las antiguas tejerías del extremo
Noroeste de la provincia de Huesca, es
decir de los valles de Hecho y Ansó (Val
d'Echo / Val d'Ansó) (fig. 1) que cruzan en
paralelo y verticalmente el Pirineo Ara-
gonés limítrofe, a Poniente, con Navarra.
El Val d'Echo, generoso en paisajes
vírgenes, constituye la antesala de la Selva
de Oza, un impresionante bosque de hayas
y grandes formaciones rocosas. Por su
parte, Ansó, capital del valle de su nom-
bre, es un pueblo monumental con una
muy definida arquitectura tradicional.
EL RECORRIDO
En esta excursión ideal en busca de las
antiguas tejerías del Pirineo aragonés oc-
cidental, accedemos a ambos valles por
una red de pistas de montaña que puede
partir de Puente la Reina de Jaca, o desde
Berdún, en ambos casos hacia el norte
desde la carretera N-240, ya llamada aquí
“Carretera de Pamplona” (fig. 2)
Nuestro recorrido partirá de Berdún y
ascenderá por el Valle de Ansó cruzando
su puerta natural, la Foz de Biniés, aguas
arriba del río Veral (fig. 3). Dejaremos de
momento a la derecha el pueblo de Ansó y
nos acercaremos a Fago; de regreso, nos
detendremos en la espléndida capital del
valle, Ansó (fig. 4).
Para alcanzar el Valle de Hecho reto-
maremos la carretera de la ida hasta en-
contrar, a la izquierda, el cruce con la ca-
rretera de montaña que, cabalgando sobre
el lomo de ambos valles contiguos, lleva
hasta la capital, Hecho.
Ahora por la carretera acompañamos
el recorrido y los desfiladeros del río Ara-
gón Subordán y llegamos a Urdués (fig.
5). Seguimos descendiendo hasta encon-
trar, a la izquierda, el cruce con la carrete-
ra que conduce a Aragüés del Puerto y
Jasa, donde nos detenemos de nuevo.
E
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Comunicaciones Página 43
Fig. 1. Mapa de los valles pirenaicos
de Huesca.
Fig. 2. Mapa de carreteras de los valles
de Ansó y Hecho.
Fig. 3. Biniés bajo la protección
de su castillo.
Fig. 4. Vista general de Ansó.
Fig. 5. Urdués.
De regreso, pasamos por Embín, Ja-
vierregay y finalmente desembocamos a la
N-240, en Puente La Reina de Jaca.
LAS ANTIGUAS TEJERÍAS
Biniés
La tejería se encuentra en la Pardina
de Cillas (fig. 6).
Emplazamiento: Carretera de Ansó,
3 km antes de llegar al pueblo, a la dere-
cha, se encuentran los restos de lo que
podría haber sido un alfar (fig. 7).
Nota: Los tejados se ven con teja ára-
be.
Fago
Emplazamiento: Antes de llegar al
pueblo, camino a la derecha hacia las pis-
cinas, a unos 400 metros; la tejería es hoy
un merendero (figs. 8-10).
Nota: Me dicen que el tejero estaba
casado con una vecina de Biniés y que
tenía casa en Fago.
Informante: Isidro, de 90 años.
Ansó
Emplazamiento: Saliendo hacia Fa-
go y pasado el río sale un camino a la iz-
quierda; a unos 800 metros se ha cons-
truido otro merendero y el horno está
semienterrado (figs. 11-15).
Tejeros: De procedencia valenciana,
Enrique (casado con una vecina de Biniés
y con casa en Fago), Alberto, José, Fran-
cisco y Joaquina.
Desde muy antiguo, subían a Ansó
hacia el mes de abril y permanecían aquí
hasta que llegaba el invierno. Durante su
estancia, vendían la producción en el pro-
pio alfar; para el inverno, la producción
restante se vendía en el Ayuntamiento.
Notas: A la teja cumbrera la llamaban
Aguilón, y a la normal, Copada. El in-
formante indica que alguna vez trajeron
tejas de otras tejerías, pero que no dieron
resultado.
Informante: Juan José López López,
ex alcalde de Ansó.
Fig. 6. Pardina de Cillas.
Fig. 7. El posible alfar de la Pardina
de Cillas, en Biniés.
Fig. 8. Estado actual del alfar
de Fago, transformado.
Figs. 9. Vista del sistema constructivo
de la techumbre del alfar de Fago. Fig. 12. Techumbre del alfar de Ansó.
Fig. 11. El alfar de Ansó, estado actual.
Fig. 13. Estado actual de la zona del horno
del alfar de Ansó.
Figs. 14-15. Monumento en Ansó
construido al modo de un esconjuradero:
vistas exterior e interior del tejado
de tejas planas.
Hecho
Emplazamiento: Antes de pasar el
río que lleva al pueblo, un camino a la
derecha, a unos 500 metros. En la finca de
Casa Clareta.
Tejeros: De procedencia valenciana,
Francisco, José, Ángeles, Alberto y Enri-
que.
Estado actual: El horno está conver-
tido en yerbero y la casa se encuentra en
muy buen estado de conservación (figs.
16-19).
Nota: También se encargaron tejas a
Enrique, de Valdefierro (Zaragoza).
Urdués
Emplazamiento: Pasado el pueblo,
en el camino de la izquierda, a unos 300
metros.
Estado actual: Se conservan balse-
tas, parte del habitáculo y restos del horno
(figs. 20-24).
Procedencia de los tejeros: País
valenciano y Arcos de Navarra
Informante: Bartolomé Petriz, due-
ño de la finca.
Jasa
Emplazamiento: En la carretera de
Aisa. La tejería se ha convertido en un
campamento albergue juvenil (fig. 25).
Estado actual: Se conservan, remo-
deladas, sendas partes del alfar y del testar
(figs. 27 y 28).
Nota: A partir de aquí, los tejados
eran habitualmente de losetas.
Figs. 16. Vista general de la tejería de
Hecho.
Fig. 17. Estado actual de la boca del horno
de la tejería de Hecho.
Fig. 18 y 19. Estructura y vista interior
del tejado del horno.
Fig. 20. Tejas invendidas junto al obrador
de Urdués.
Fig. 21. Tipología de la teja plana
de Urdués.
Fig. 22. Estado actual del horno de Urdués.
Fig. 27. Parte del alfar de Jasa.
Fig, 28. Parte del testar de Jasa.
Fig. 26. Antigua tejería de Jasa, hoy albergue juvenil.
© 2013, Aurelio Bail Ciprés
Correspondencia con el autor: Carretera de Arguis, 40. Arguis (Huesca)
EMILIO MANRIQUE, ANA ROSA ABADÍA ALFACER
El admirable legado de un coleccionista:
Kaydeda y Oleiros
En el ayuntamiento coruñés del sugerente
nombre de Oleiros, en un gran pazo del
siglo XIX donde se localizan diversos ser-
vicios culturales municipales, se conserva
y expone una amplísima colección de alfa-
rería peninsular, mayoritariamente pro-
ducción de la etapa final de gran número
de alfares, que atesoró el artista José Mª
Kaydeda y que hoy constituyen los fondos
del Museo dos Oleiros José Mª Kaydeda.
Caracterizar a José Mª Kaydeda, falle-
cido en el año 2007, como coleccionista de
cerámica es quizá un reduccionismo exce-
sivo. Porque Kaydeda coleccionista, sobre
todo, de cerámica común, fue muchísimo
más: artista, pintor y escultor reconocido;
editor, escritor e historiador, siempre
heterodoxo y “raro”, en las acepciones de
extraordinario, poco frecuente y escaso en
su clase.
Nacido en Barcelona en 1920, se tras-
ladó muy pronto con su familia a Galicia.
Participó casi adolescente en la guerra civil
y estudió primero en Portugal y más tarde
Derecho en Santiago de Compostela y
Oviedo. Artista temprano, presentó su
primera exposición individual en el Círcu-
lo de Artesanos de Santiago de Composte-
la en 1941 e inició sus colaboraciones en
prensa y radio. En la década siguiente se
inició como dramaturgo y conferenciante,
junto a su faceta de artista que le hizo
acreedor de diversos premios (Premio Arte
Sacro, Premio Salón del Toro, etc.)
En los años 1970, comenzó a ser cono-
cido en el mundo del misterio, lo para-
normal y lo esotérico, del que fue activo
investigador y divulgador. Reivindicaba
que el misterio formaba parte de la cultura
y no era sólo un campo marginal al que
con frecuencia había sido reducido. Para
Kaydeda el mundo de lo esotérico ence-
rraba importantes aspectos culturales,
históricos y religiosos.
Esta última faceta suya confluyó en la
fundación de las Ediciones Kaydeda, edi-
torial especializada en obras heterodoxas y
transgresoras. Como editor, fue responsa-
ble de la publicación de numerosos libros
y entre ellos el facsímil de un incunable
como el Códice Calixtino. En su condición
de autor, destaca su Enciclopedia de la
Magia y Ocultismo y su compilación de los
Evangelios Apócrifos.
Kaydeda fue también un viajero incan-
sable; lo cual estuvo en el origen de sus
colecciones, no sólo de cerámica, sino
también de magia y brujería y de reliquias
de diversos credos. Junto con su compañe-
ra Teresa Jorge, recopilaron desde los
años 1960 y durante más de treinta años,
la producción de cerámica común que
elaboraban los alfares vivos; peregrinando
por ellos y adquiriendo las piezas cuya
producción agonizaba ya en aquellos días.
Es por ello que Kaydeda era conocido co-
mo propietario de una de las mejores co-
lecciones europeas de alfarería.
La donación de esta colección al Ayun-
tamiento de Oleiros (La Coruña), que la
recogió en el Museo de Oleiros ya citado,
posibilitó la formación de un magnífico
museo etnológico.
Páginas del Códice Calixtino en la edición
facsímil de Kaydeda
Museo de Oleiros con la colección Kaydeda
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Comunicaciones Página 46
Seis muestras de la alfarería aragonesa de la colección Kaydeda en el museo de Oleiros.
De izquierda a derecha y de arriba abajo:
Fuentes, Huesa, Calanda, Tamarite, Rubielos y Naval.
Quizá sea oportuno resaltar el hecho
afortunado de que para que esta realidad
exista hoy, el Ayuntamiento de Oleiros se
hizo cargo de la colección; circunstancia
esta por desgracia poco frecuente en otras
instituciones. El Ayuntamiento de La Co-
ruña primero y el de Oleiros posterior-
mente, ofrecieron sendos homenajes a su
trayectoria artística y cultural.
El de Oleiros lo galardonó además co-
mo hijo adoptivo.
La Feria Nacional de Alfarería de agos-
to de 2007 estuvo dedicada también a su
memoria.
En el Museo se expone una amplia co-
lección de alfarería en la que está repre-
sentada, probablemente, la casi totalidad
de los alfares españoles todavía activos en
los años 1970, además de útiles de alfarero
y elementos informativos sobre antece-
dentes y localización del alfar en su pro-
vincia respectiva. Está representada la
producción de casi 250 alfares que Kayde-
da visitó.
Sólo está expuesta una parte de la co-
lección, que en su totalidad se conserva en
los fondos del Museo. Además, puede ver-
se en una sala adjunta un grupo de piezas,
buena parte de ellas del siglo XIX y co-
mienzos del XX y una vitrina de objetos de
arte precolombino; algunas con dimensión
brujeril que nos sugieren experiencias de
chamanes y ritos iniciáticos.
La exposición de las producciones de
gran número de alfares peninsulares,
permite contrastar los diferentes rasgos
culturales que caracterizan a las diversas
áreas y regiones. En conjunto informa de
formas de vida ligadas a la sociedad tradi-
cional y de un oficio antiguo y esencial en
la historia de la humanidad, casi desapa-
recido hoy.
No es aventurado suponer que Kayde-
da pudo utilizar como guía para sus viajes,
tres publicaciones emblemáticas, hoy clá-
clásicas: Guía de los alfares de España
(1971-73) de Vossen, Seseña y Köpke
(1975), Cerámica popular española, de
Llorens Artigas, Corredor-Mateos y Català
Roca (1970) y Ruta de los alfares de Es-
paña y Portugal, de Sempere (1982) (Fo-
tos libros)
En el Museo están expuestas piezas de
alfares aragoneses, citados en estos libros
y activos entonces, como Fuentes de Ebro
(Zaragoza) donde trabajaban Antonio y
Alfonso Gayán; obra de Pablo Benedicto,
en Huesa del Común y de Pascual Lavarías
de Calanda, ambos centros turolenses; la
ollería de Esteban Pastor Goicoa en Rubie-
los de Mora (Teruel); la cantarería de Flo-
rencio Maull Verdiel en Tamarite de Litera
(Huesca) y las producciones olleras de
Naval (Huesca) de Francisco Buetas y
Ángel Echevarría, hoy todavía milagrosa-
mente vivas.
Sin embargo, no recordamos haber
visto en nuestra visita vasijas de los alfares
de Huesca, Fraga, Magallón, Daroca, Villa-
feliche, Ateca o María de Huerva, activos
todos en los primeros años 70; aunque no
descartamos que estén presentes en el
Museo dos Oleiros.
Este Museo forma parte hoy del pa-
trimonio cultural de Oleiros y de Galicia;
pero también lo es, en alguna medida, de
quienes amamos la cerámica tradicional.
Deberíamos visitarlo periódicamente.
Una muestra del arte pictórico
de Kaydeda
En 1954, el número 17 de la Revista de Arquitectura publicaba cuatro fotos en blanco y negro de
los seis dioramas del belén “futurista” que el heterodoxo Kaydeda había presentado en el Palacio
de la Virreina de Barcelona: La Anunciación, La visita de María a su prima Isabel, El nacimiento y
La Anunciación a los pastores.
© 2012, Emilio Manrique, Ana Rosa Abadía
Correspondencia con los autores: [email protected]
REFERENCIAS
EOC El Ojo Crítico. http://ojo-critico.blogspot.com.es/2007/09/ home-naje-jose-m-
kaydeda.html
LLORENS ARTIGAS, J.; CORREDOR-MATHEOS, J.; CATALÀ ROCA, F. (1970) Cerámica Popular Espa-
ñola. Blume, Barcelona, 192 pág.
SEMPERE, E. (1982) Rutas de los alfares de España y Portugal. Barcelona, 434 pág.
VOSSEN, R.; SESEÑA, N.; KÖPKE, W. (1975) Guía de los alfares de España (1971-73). Editora
Nacional, Madrid, 258 pág.
VV .AA. Oleiros en terra. Museo dos Oleiros. José Mª Kaydeda. Concello de Oleiros
9as JORNADAS SOBRE ALFARERÍA Y CERÁMICA TRADICIONALES
Morillo de Tou (Huesca) 28, 29 y 30 de septiembre de 2012
Viernes 28 de septiembre
17:30 Recepción de participantes y
entrega de documentación
18:00 inauguración de las Jornadas
18:30 Visita guiada a Morillo de Tou, al
Museo de Alfarería Tradicional Aragonesa
y a la Exposición Temporal “Nuevas
adquisiciones del Museo de Alfarería:
Agosto 2011–septiembre 2012”
19:30 Sesión de identificación. Novena
sesión de “La Torre de Babel en Morillo
Sábado 29 de septiembre
9:30 Tercer desembalaje. Mercadillo
de Morillo.
11:00 Conferencia. “El paso de la
cerámica manual al torno en la cultura
ibérica: diferencias y persistencias histó-
ricas”. Interviene: D. Javier Fanlo Loras.
Ceramista y arqueólogo (Muel)
11:45 Coloquio
12:30 Conferencia
– presentación del
libro La ollería de
Puertollano. Inter-
viene: D. Ángel Leal
Alcaide. Químico,
ceramista y ceramó-
logo (Puertollano)
13:15 Coloquio
17:00 Conferen-
cia. "La tradición
alfarera de La Lite-
ra: Tinajerías y can-
tarerías". Intervie-
ne: Juan Rovira
Marsal. Historiador,
escritor y antropló-
logo (Altorricón)
17:45 Coloquio
18:45 Conferen-
cias. "Alfarería es-
pañola en grabados
y pinturas de los
siglos XVI a XIX" y
"La fotografía en la
alfarería (siglos XIX
y XX): serie Tinajas
y otras Vasijas".
Interviene Sergio W.
Sabini Celio. Cera-
mólogo
19:30 Coloquio
17,00 a 20,00: Pa-
ralelamente al desa-
rrollo de las sesio-
nes tendrá lugar un
Taller de iniciación a la cerámica para
niños. Imparte: Mª de Gracia Arias Mora,
Ceramista (Maestra de Alfarería) de Cas-
tilla–La Mancha. Puertollano 2010) Alfar
Arias (Puertollano)
22:00: Asamblea General de la Asociación
Amigos de la Cerámica Decorada y la
Alfarería (ALFACER)
Domingo 30 de septiembre
9:30 Excursión a Aínsa y visita al Museo
de Oficios Tradicionales
11:00 Salida hacia el Monasterio de San
Vitorián con visita guiada semiteatraliza-
da al sepulcro de Don Pedro III, primer
rey de Aragón.
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Noticias y actividades de ALFACER Página 49
9a. Torre de Babel en Morillo
De mano en mano,
un proceso de iden-
tificación
Un objeto misterioso, una prueba de
humildad (en palabras de Carlos Díez)
¿Qué será será? Sesudo análisis
«Recuerdo de Peñafiel» (ni más ni menos): ¡Misterio resuelto!
Fue magnífica porque Lourdes y Alfredo Narvalaz la prepararon con mimo, detalle y atendiendo exactamente a nuestras aficiones.
La cita de reunión fue el sábado 30
por la mañana en Estella, frente a la puerta del Albergue de Peregrinos. A continuación visitamos largamente la colección privada de Esteban Boneta, y otra colección, de sorpresa, al pie de Montejurra.
Después de comer y de perdernos sin remedio a causa de los desvaríos de todos los GPS de la expedición, llegamos al Museo de la Cerámica Vasca, en Ollerías (Álava).
Al anochecer, Lourdes y Alfredo nos acogieron en su casa con una magnífica cena centrada en unas carrilleras cocidas a fuego paciente, según la receta que por gentileza de la propia Lourdes, aquí se acompaña.
Pernoctamos en Oyartzun (Guipúzcoa y el domingo día 1, dedicamos la mañana a la contemplación, análisis y comenta-rios de la extensa y selecta colección de Alfredo.
La excursión concluyó en San Sebas-tián, con un largo paseo de mediodía por el casco antiguo y la obligada comida de fraternidad.
Recuerdo de la excursión a Estella, Ollerías, Oyarzun y San Sebastián
30 de junio y 1 de julio de 2012
Carrilleras
a la manera de Lourdes
Ingredientes:
Un kilo de carrilleras en crudo.
Una cabeza de ajos con piel.
Una cebolla grande.
Cuatro puerros (lo blanco).
Medio litro de vino tinto.
Caldo de verdura.
Sal. pimienta, y harina.
Elaboración
Sazonar con sal y pimienta las carrille-
ras, pasar por harina y freírlas.
En otra cazuela pochar las verduras, es
decir, los puerros; se puede echar
alguna bolita de pimienta, laurel,
tomillo.
Cuando las verduras han cogido color,
echar una copa de brandy, reducir
un minuto.
Añadir medio litro de vino tinto, redu-
cir.
Incorporar las carrilleras, y cubrir con
caldo.
Dejar cocer dos horas.
Después pasar primero con el chino, y
luego con el colador fino, para que
la salsa quede muy fina.
Crónica de una visita a Villafeliche
17 de noviembre de 2012
Tras varios aplazamientos, llegó el día
esperado, el tercer sábado de noviembre.
Quedamos a la entrada del pueblo, junto
a la alfarería de José Martínez, "el Tío
Puchericos” a las 10 horas. De Zaragoza
subieron Chema y Mari, Mariano y Esther.
Del norte vinieron Alfredo y Lourdes. José
Mari y Olga desde Santa Cruz.
Pensamos ver primero los molinos de
la pólvora y marchamos al bar para pedir
la llave del molino restaurado. Tras to-
mar un café, el dueño del bar nos indicó
que la iglesia estaba abierta y que merec-
ía la pena. Una feligresa se ofreció a
enseñarla y descubrimos algunos azulejos
por los rincones, restos de antiguos arri-
maderos. Llamativo fue el plato desgas-
tado dentro de la pila de agua bendita
con la leyenda “oremus amen” y sello de
José Martínez. Y sorprendente la caja con
fragmentos de lápidas que se conservan
en un cuarto trastero tras la renovación
del piso de la iglesia en la última restau-
ración.
Por cierto que nos contaron que apa-
recieron varias momias con sus vestidos
intactos. Destacar igualmente un peque-
ño altar de la sacristía que será reprodu-
cido en la lotería del niño.
Sabido que un coleccionista había ce-
dido parte de sus cerámicas de Villafeli-
che al pueblo, preguntamos por ellas y
nos remitieron al alcalde o a la concejala
de cultura ya que estaban expuestas pro-
visionalmente en la ermita de San Antón,
junto a la alfarería de Manuel Gil, último
alfarero del pueblo. El benefactor, Luis
Esteban Ramón, hizo su colección en Za-
ragoza y hay mezcla de alfares.
Junto a clásicos platos de la alcacho-
fa se encuentran abundantes platos del
XVII de Muel o la serie del conejo del
XVIII también de Muel. Lo que no quita
mérito al conjunto donde destaca una
jarra vinatera y varias mancerinas. En un
lateral de la ermita se ha colocado una
vitrina con obra de ollería y cantarería
fabricadas en Villafeliche. Lástima que no
hayan localizado cántaros decorados con
almagre y manganeso típicos de la segun-
da mitad del XVIII y cuyos fragmentos aún
se pueden ver en las escombreras.
Cuando salíamos de la ermita, nos to-
pamos con Manuel Gil el alfarero. Nos en-
señó su casa, su tienda y nos contó que
ahora vivía en Daroca. Entre los cientos
de cachivaches de su obrador descubri-
mos un botijo decorado con decoración
plástica al que faltaba el asa. Manuel se
inclinaba por que fuera obra de su padre.
La producción que vimos es ecléctica:
cerámica creativa, murales, juguetes,
belenes, cazolillas y vasijas fabricadas
años atrás.
Ya eran las 14 horas y sin comer. Pa-
samos el río Jiloca en dirección a los mo-
linos de pólvora y nos detuvimos junto a
un molino harinero en desuso. Pusimos en
común las viandas que cada uno había
llevado y charramos un rato del buen
tiempo que nos hacía. Con el estómago
lleno caminamos unos 500 metros hasta
el molino de pólvora restaurado. Es una
pequeña casamata de unos 20 m2 donde
un eje horizontal de madera es movido
por las aspas exteriores en contacto con
el agua de una acequia. Varias pestañas
de madera en el eje hacen que los dos
mazos suban y bajen de forma alternativa
sobre sendas piedras de Calatorao vacia-
das. La mezcla de carbón de sarmientos,
azufre y potasa terminaba formando pe-
queñas bolas en un tonel que giraba me-
Crónica de una visita a Villafeliche
17 de noviembre de 2012
diante una rueda dentada unida al eje
principal. Solo restaba dejar secar la
pólvora. En sus buenos tiempos hubo más
de 200 molinos sobre la misma acequia.
A la vuelta visitamos y recogimos
fragmentos de las terreras. En su mayor
parte están formadas por cajas cilíndricas
desechadas donde se horneaban las jíca-
ras, tazas, platillos… De vez en cuando
aparecen algunos fragmentos vidriados
pegados y pasados de calor.
En la terrera situada al sur de la loca-
lidad no es raro encontrar fragmentos de
cántaros y botijos decorados con líneas
paralelas junto al fondo o con flores de-
bajo del cuello. Cántaros con bocas es-
trechas y moduladas. Mi tesoro fue un
pequeño caballito mutilado y decorado
con pinceladas negras.
De vuelta a los coches, junto al alfar
del Tío Puchericos pudimos ver, entre la
maleza, los restos del alfar y del horno
del Tío Venancio, famoso por los cántaros
“de la V” que decoraba su mujer en el
primer tercio del siglo XX.
Ya era hora de volver, pero Chema
nos habló de un exposición de fósiles en
Murero, y allí que con fuimos. Los fósiles
donados están expuestos en las antiguas
escuelas. En su mayoría son trilobites del
yacimiento de Valldemiedes. Este año se
cumplen los 150 de su descubrimiento y
está reconocido como uno de los aflora-
mientos más importantes de Europa por
su antigüedad. Chema se reencontró con
viejos conocidos, entre ellos el alcalde.
Nos tomamos unas cañas y terminamos en
la cocina friendo rebollones. Alfredo y
Lourdes se fueron a dormir con las mon-
jas de Daroca, Josemari y Olga se volvie-
ron a Santa Cruz, al resto les dieron las
tantas. En definitiva un buen día para el
recuerdo.
[José M. Gimeno]
Sección de identificación
Estos tres cuezos de muy diferen-
tes tamaños (el cuezo 3 mide po-
co más de 40 cm de altura), fue-
ron adquiridos por un mismo
comerciante, procedentes de dis-
tintas localidades de la Baja Ri-
bagorza oscense.
En la provincia de Huesca
fueron numerosos los centros
tinajeros activos todavía en el si-
glo XIX y a veces en los primeros
decenios del XX. El origen de al-
gunos (Sarsamarcuello, Cuatro-
Corz, Alcampell) está ligado a
tinajeros turolenses de Calanda.
En otros hay vinculaciones claras
y documentadas con los calandi-
nos, aunque más tardías (Nueno,
Abiego). En todo caso, esto ha de-
terminado similitudes formales
evidentes, en distinta medida, tanto entre las producciones de unos y otros como
con las producciones calandinas.
En la zona más oriental, desde Ribagorza a La Litera, pueden citarse por lo
menos, cuatro centros tinajeros: La Puebla de Castro, Quatre-Cortzs, Alcampell y
Castillonroy, que, afortunadamente, han sido estudiados. Además de referencias
diversas en otros autores, Joan Rovira estudió las tinajerías de La Litera en 1998
en un artículo del Butlletí Informatiu de Ceràmica y Alfons Romero se refirió a
todos ellos en el segundo volumen de su monumental Tinajería Tradicional Es-
pañola.
No obstante, la atribución de cualquiera de estos tres cuezos a alguno de los
centros citados (o a cualquier otro) continúa siendo difícil, en nuestra opinión.
Los
Los tres son, en principio, con mucha probabilidad, producciones de alguno
de ellos. En opinión autorizada de Alfons Romero que, consultado, conoce la fo-
tografía del cuezo 1, es que su aspecto general y algunos otros elementos serían
compatibles con una producción de Castillonroy, en este caso. Sin embargo, seña-
la también que la descarga cilíndrica-tronco-cónica parece más prominente de lo
que es habitual en este centro. Señalemos que, por el contrario, son los cuezos 2
y 3 los que presentan descargas poco sobresalientes.
¿Alguien puede identificar a qué tinajería concreta podrían atribuirse estos
cuezos o alguno de ellos?
Cuezo 1 Cuezo 2 Cuezo 3
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Sección de identificación Página 54
TERRART
Ha salido el número 40 de Terrart, la
revista de la Asociación Catalana de Cera-
mistas (ACC), correspondiente al segundo
semestre de 2012
El reportaje central está dedicado a 15
ceramistas españoles emergentes del siglo
XXI de entre 25 y 40 años: de Aragón,
Sara Biassu y Sara Monge; de Galicia,
Toño Pérez; de Valencia, Myriam Jimé-
nez, Ayako Funato, Fanny Galera, Bibiana
Martínez, José Cuerda, Rosa Guillem y
Lucía Gran; de Cataluña, Penélope Va-
llejo y Stella Rahola; de Castilla, Grego-
rio Peño; Madrid: Laura Rueda y Clara
Graziolino; y residente en el extranjero,
Ana Cruz.
Entre las actividades de la ACC se
cuentan las actuaciones llevadas a cabo
con motivo del 25 aniversario y la organi-
zación de 47º Congreso de la AIC previsto
para 2016 en Barcelona.
La sección de Talleres y Ceramistas
presenta la figura y la obra de Ángel Ga-
rraza, uno de los artistas más considerados
del Estado.
Por lo que respecta a la actividad mu-
seística, se recensiona la ex-posición de
botijos valencianos de fantasía, abierta
hasta el año 2013 en el Museo de Argento-
na (Barcelona), yt se dedican sendos artí-
culos a los recientemente remodelados
museos de Quart (Girona) y L'Alacora
(Castelló).
[ESF]
Más información en
Associació de Ceramistes de Catalunya
www.ceramistescat.org/terrart
c/ Doctor Dou, 7, bajos
08001-Barcelona
BUTLLETÍ INFORMATIU
DE CERÀMICA
Ha salido el número 103, correspon-
diente al primer semestre de 2011, de la
veterana, pionera y excelente publicación
Butlletí Informatiu de Ceràmica, de
la Associació Catalana de Ceràmica.
Como siempre, la calidad formal y de
contenidos es elevada. Incluso en las sec-
ciones habituales como “Libros” o “Noti-
cias de la Asociación” se puede encontrar
en este número interesante información,
sobre todo gráfica en este caso, referida a
las reuniones de identificación y, sobre
todo, a la entrañable exposición “Els sons
de la ceràmica” organizada por la Associa-
ció en el Museo de Can Tinturé, de Esplu-
gues de Llobregat en mayo de 2011.
Publican, además, un reportaje sobre
el Museu del Càntir de Argentona y una
entrevista al artista de azulejos Moisés
García Porcel.
Tres de los artículos originales se refie-
ren, uno dedicado al notable escultor de
Olot, eminente figura de la imaginería
popular catalana “Ignasi Buxó i Gou”, de
Xavier Fábregas i Armengol. Otro, de
Ángel Requena Fraile, referido a la azule-
jería valenciana, titulado “La Aritmética de
los fogones”. El tercero, “La porcellana
xinesa durant el periode anomenat ʻde
transicióʼ (Transitional Period)”, de Ma-
nuel Peiruza Rocamora, estudia las pro-
ducciones de la porcelana china de este
periodo del siglo XVII.
Contiene también este número, dos
artículos de temática y autores más
próximos a las especialidades de la alfarer-
ía. El de Ilse Schütz, “El barro como mate-
rial de construcción”, aborda algunas apli-
caciones del barro seco o cocido en la ar-
quitectura y los procesos de fabricación
artesanal con referencias concretas a una
fábrica en el municipio de Valentí (Mur-
cia) y a la evolución histórica de la tejería
en Agost (Alicante). Alfons Romero Vidal,
por su parte, en su artículo “Peces de ce-
ràmica poc conegudes: recipients ceràmics
per a la decantació de l’oli”, se centra en lo
que podemos considerar un tipo de tinajas
y cuezos que intervienen en el proceso de
decantación en la fabricación del aceite:
tipos, terminología, localización geográfica
y funcionamiento.
[EMP-ARA]
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2013), Notas de publicaciones Página 55
LA CERÁMICA EN EL MUNDO
DEL VINO Y DEL ACEITE Actas del XV Congreso anual de la Asocia-
ción de Ceramología
Navarrete (La Rioja), 30 de octubre-1 de
noviembre de 2010
En esta monografía, el tema de la cerámi-
ca, fundamentalmente centrado en las
funciones y usos vinculados al vino y el
aceite, se aborda desde distintas discipli-
nas y ópticas como la historia, la arqueo-
logía, la etnología, la historia del arte o el
coleccionismo, considerando que constitu-
ye un importante patrimonio cultural.
ALFACER participó en el congreso ─y
así se refleja en estas actas─ con la presen-
tación de una extensa comunicación sobre
"Las pichelas aragonesas, singulares jarras
pirenaicas para vino" a cargo de E. Manri-
que, A.R. Abadía y D. Guimerà.
[DG]
FERNANDO HUALDE (2012).
Alfarería de Lumbier Pamplona, Lamiñarra. 256 págs.
Lumbier, junto con Pamplona, Estella,
Tafalla, Tudela y Marañón, constituyó
durante cinco siglos y hasta mediados del
XX un centro alfarero importante, desde el
que se comercializaban recipientes cerá
micos para uso doméstico en una amplia
zona de Navarra y Aragón. En 1842 llegó a
haber 24 alfares activos, cifra que bajó
hasta los 7 en 1944. La cerámica de Lum-
bier se caracteriza por su arcilla roja del
término de Lardín, sus formas panzudas,
ligeramente irregulares, los vidriados
transparentes o rojizos y las decoraciones
típicas de cordones ungulados y bandas
superpuestas de ondulaciones incisas.
«Este libro tiene su razón de ser en el
agradecimiento de una casa de Isaba (valle
del Roncal) hacia los alfareros de Lumbier
por el servicio que durante siglos han pres-
tado en esa casa las piezas elaboradas por
ellos.
Este libro comenzó cuando Fernando
Hualde acometió la labor de catalogar su
propia colección de piezas de alfarería que
décadas y siglos atrás habían llegado a su
casa de Isaba a través de los alfareros de
Lumbier; la mayoría de esas piezas esta-
ban hechas por esos mismos alfareros;
otras, las menos, procedían de Naval
(Huesca) y de Breda (Girona), y constan
en el libro simplemente porque habían
sido comercializadas por los lumbierinos.
[DG]
OTRAS OBRAS SOBRE
LA ALFARERÍA NAVARRA
La importancia y antigüedad de Lumbier
(Irunberri) como centro alfarero, eran
conocidas gracias a publicaciones anterio-
res y, sobre todo, al libro de Enrike Ibabe
(1995) Cerámica Popular Vasca. En-
tre los más de 50 centros alfareros del País
Vasco y Navarra que describe Ibabe, da
noticia, en referencia a Lumbier, de docu-
mentación que atestigua la presencia de
alfareros ya a lo largo del siglo XVI (el
ollero "Ximon orcero"; el alfarero Tristán
Yrisarri). En base a la información de Eu-
sebio Rebolé detalla las alfarerías activas
en distintas fechas del siglo XIX y primera
mitad del XX. Se recogen nombres, técni-
cas de elaboración, las áreas comerciales,
las Ordenanzas y Constituciones del Gre-
mio de Alfareros, etc. La producción de
Lumbier abarcaba desde alfarería de bas-
to, "lo blanco" en expresión local, hasta
vidriada para fuego, todo tipo de vasijas
para transportar y beber líquidos, para
cocina, mesa, higiene, decoración, para
conservar alimentos, para animales de
corral, etc.
[EMP-ARA]
Pueden verse, además:
Mª LUISA GARCÍA GARCÍA. La alfarería
navarra tradicional. Recurso
electrónico:
http://www.euskonews.com/
0104zbk/ gaia10408es.html
SUSANA IRIGARAY SOTO. Los fondos del
Museo Etnológico de Navarra
Julio Caro Baroja. Recurso
electrónico: http:
//www.unav.es/catedrapatrimonio/
paginasintenas/conferencias/ etnogra-
fia/ museoetnologico/default.html
En las Navidades de 2010 Lumbier acogió
en una exposición sobre los olleros de la
población, exhibiendo una parte de la
colección de Alfredo Navarlaz (ALFACER).
Burgos
I DESEMBALAJE DE ANTIGUEDADES
EN BURGOS 2013
Palacio de Exposiciones y congresos
Forum Evolucion de Burgos
18 - 20 enero 2013
Albacete
ANTIGUA 2013
Feria de Antigüedades Albacete
08 - 10 febrero 2013
Módena (Italia)
MODENANTIQUARIA 2013
16 - 24 febrero 2013
Recinto de la Feria de Módena.
Zaragoza
III FERIA DE ANTIGÜEDADES
GRAN DESEMBALAJE 2013
23 - 24 febrero 2013
Caldes de Montbui (Barcelona)
FEM BULLIR L’OLLA. MERCAT
DE L’OLLA I LA CALDERA
16 - 17 marzo 2013
Irún
I FERIA DE ANTIGÜEDADES
GRAN DESEMBALAJE 2013
22 - 24 marzo 2013
Madrid
ALMONEDA 2013
Feria Antigüedades, Coleccionismo y Arte
06 - 14 abril 2013
Alicante
II FERIA ANTIGÜEDADES
GRAN DESEMBALAJE
26 - 28 abril 2013
Quart (Girona)
FIRA-MERCAT
DE LA TERRISSA CATALANA
04 - 05 mayo 2013
Madrid
I LOVE RETRO 2013
THE RETRO MARKET MADRID
Ático de la Estación de Chamartín
09 - 12 mayo 2013
Bilbao
DESEMBALAJE 2013
FERIA DE ANTIGÜEDADES
11 - 12 mayo 2013
Alicante
SALÓN DESEMBALAJE ANTIGÜEDADES 2013
24 - 26 mayo 2013
Argentona (Barcelona)
FIRA DEL CÀNTIR
2 - 4 agosto 2013
Pamplona
DESEMBALAJE DE ANTIGÜEDADES
DE NAVARRA 2013
15.11.2013 - 17.11.2013
Recinto Ferial de Navarra, REFENA
[AMP]
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)
Alfahar número 1 (2012), Ferias y desembalajes Página 57
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)Alfahar número 0 (enero-abril 2012), Editorial
Página 58
Quiénes somos
ALFACER es una asociación cultural abierta a cualquier persona interesada por algún aspecto relacionado con la cerámica y actualmente inte-
grada por coleccionistas, ceramólogos y ceramistas, principalmente. Los coleccionistas de cerámica asociados en ALFACER, reivindican su condi-
ción de tales, conocedores de las aportaciones que algunos coleccionistas han llegado a hacer en diversos ámbitos de las artes y las ciencias.
ALFACER tiene su origen en una asociación previa, Barro y Fuego, en cuyo marco hace algunos años se editaron dos publicaciones sobre alfarería
de basto y alfarería vidriada aragonesa y se comenzaron las Jornadas de Alfarería y Cerámica Tradicionales, de Morillo de Tou, que en 2011 han cele-
brado su octava edición.
Los fines asociativos son amplios y quizá ambiciosos. Se pretendió aglutinar todos los intereses y aficiones concretas que representaban los miem-
bros del grupo constituyente desde el coleccionismo, al estudio, la conservación, la difusión y divulgación y la defensa genérica del patrimonio que
constituye tanto las diversas especialidades de los oficios cerámicos tradicionales peninsulares, como sus producciones; fundamentalmente la alfa-
rería y la cerámica decorada (estannífera), pero también la azulejería, la cerámica arqueológica y la cerámica tradicional actual, observadas desde
ópticas históricas, etnológicas y museísticas.
Si los fines estatutarios son ambiciosos, no lo son menos las actividades previstas para su consecución: coloquios, exposiciones, conferencias, cur-
sos, publicaciones, peritaciones, colaboraciones, visitas colectivas, etc.
Somos conscientes de que las realizaciones no alcanzarán previsiblemente en algún tiempo a la totalidad de las actividades previstas. No obstante,
creemos que debemos sentirnos satisfechos de lo realizado hasta ahora que incluye, junto a las jornadas anuales de Morillo de Tou, tertulias, peque-
ñas exposiciones, viajes colectivos de visitas, etc. Ahora afrontamos el desafío de lanzar Alfahar como revista electrónica.
Para asociarse a ALFACER, vaya a la página 29.
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)Estatutos Página 59
Capítulo IDENOMINACIÓN, FINES, DOMICILIO Y ÁMBITO
Artículo 1. Con la denominación de Amigos dela Cerámica Decorada y la Alfarería, se consti-tuye una ASOCIACIÓN al amparo de la Ley Orgá-nica 1/2002, de 22 de marzo, y normas comple-mentarias, con capacidad jurídica y plenacapacidad de obrar, careciendo de ánimo delucro.
Artículo 2. Esta asociación se constituye portiempo indefinido.
Artículo 3. La Asociación Amigos de la Cerá-mica Decorada y la Alfarería tiene como finesdeterminados el estudio, la conservación, ladifusión, la divulgación y la defensa del patri-monio que constituyen los oficios cerámicos tra-dicionales y de las producciones cerámicas his-tóricas peninsulares, fundamentalmente las dealfarería, de cerámica decorada, de azulejería ypara edificación.
Artículo 4. Para el cumplimiento de los finesseñalados en el Artículo 3 de los presentes esta-tutos, se realizarán las siguientes actividades:
Coloquios, debates, exposiciones, conferen-cias, cursos, jornadas.
Publicación y divulgación de materialimpreso y audiovisual.
Peritaciones y actividades conjuntas conotras asociaciones o museos de fines ocontenidos semejantes.
Colaborar con los ámbitos científicos, acadé-micos y las administraciones y promoverante estas últimas actividades o actuacio-nes encaminadas a la consecución de losfines de la Asociación.
Visitas colectivas y otras actividades recreati-vas.
Artículo 5. La Asociación establece su domici-lio social en la Calle Maladeta 20, casa 3 deMaría de Huerva 50430 y su ámbito territorial
en el que va a realizar, principalmente, sus acti-vidades es autonómico, el de la ComunidadAutónoma de Aragón. La Junta Directiva, previoacuerdo de la Asamblea General, tendrá atribu-ciones para cambiar tanto el domicilio socialcomo las sedes o locales sociales, comunicandolos cambios que se produzcan en el registrocorrespondiente.
Capítulo IIÓRGANOS DIRECTIVOS Y DE REPRESENTACIÓN
Artículo 6. La Asociación será dirigida, gestio-nada y representada, conforme a principiosdemocráticos por una Junta Directiva y la Asam-blea General. La Junta Directiva estará formadapor: Presidente, dos Vicepresidentes, Secretario,Tesorero y un número de vocales no inferior atres. Éstos serán designados y revocados por laAsamblea General Extraordinaria y su mandatotendrá una duración de tres años renovables. LaJunta Directiva es el máximo órgano de direc-ción entre asambleas. Todos los cargos quecomponen la Junta Directiva serán gratuitos.
Artículo 7. Los miembros de la Junta Directivapodrán causar baja por renuncia voluntariacomunicada por escrito a la Junta Directiva, porincumplimiento de las obligaciones que tuvieranencomendadas y por expiración del mandato.
Artículo 8. Los miembros de la Junta Directivaque hubieran agotado el plazo para el cual fue-ron elegidos, continuarán ostentando sus cargoshasta el momento en que se produzca la acepta-ción de los que les sustituyan.
Artículo 9. La Junta Directiva se reunirá cuantasveces lo determine su Presidente y a iniciativa opetición de tres de sus miembros. Quedaráconstituída cuando asista la mitad más uno desus miembros y para que sus acuerdos seanválidos deberán ser tomados por mayoría devotos. En caso de empate, el voto de Presidente
será de calidad.
Artículo 10. Las facultades de la Junta Direc-tiva se extenderán, con carácter general, a todoslos actos propios de las finalidades de la asocia-ción, siempre que no requieran, según estosEstatutos, autorización expresa de la AsambleaGeneral.Son facultades particulares de la Junta Direc-tiva:
Dirigir las actividades sociales y llevar la ges-tión económica y administrativa de la Aso-ciación, acordando realizar los oportunoscontratos y actos.
Ejecutar los acuerdos de la Asamblea Gene-ral.
Formular y someter a la aprobación de laAsamblea General los Balances y lasCuentas anuales.
Resolver sobre la admisión de nuevos aso-ciados.
Nombrar delegados para alguna determi-nada actividad de la Asociación.
Cualquier otra facultad que no sea de laexclusiva competencia de la AsambleaGeneral de socios.
Artículo 11. El Presidente tendrá las siguientesatribuciones:Representar legalmente a la Asociación antetoda clase de organismos públicos y privados; Convocar, presidir y levantar las sesiones quecelebra la Asamblea General y la Junta Direc-tiva, así como dirigir las deliberaciones de una yotra; ordenar pagos y autorizar con su firma losdocumentos, actas y correspondencia; adoptarcualquier medida urgente que la buena marchade la Asociación aconseje o, en el desarrollo desus actividades, resulte necesaria o conveniente,sin prejuicio de dar cuenta posteriormente a laJunta Directiva.
Artículo 12. El Vicepresidente Primero sustituiráal Presidente en ausencia de éste, motivada porenfermedad o cualquier otra causa, y tendrá las
mismas atribuciones que él.
Artículo 13. El Secretario tendrá a cargo laDirección de los trabajos puramente administra-tivos de la Asociación; expedirá certificaciones,llevará los libros de la Asociación legalmenteestablecidos y el fichero de asociados, y custo-diará la documentación de la entidad, haciendoque se cursen las comunicaciones sobre desig-nación de Juntas Directivas y demás acuerdossociales inscribibles en los Registros correspon-dientes; así como la presentación de las cuentasanuales y el cumplimiento de las obligacionesdocumentales en los términos que legalmentecorrespondan.
Artículo 14. El Tesorero recaudará y custodiarálos fondos pertenecientes a la Asociación y darácumplimiento a las órdenes de pago que expidael Presidente.
Artículo 15. Los Vocales tendrán las obligacio-nes propias de su cargo como miembros de laJunta Directiva, y así como las que nazcan de lasdelegaciones o comisiones de trabajo que lapropia Junta encomiende.
Artículo 16. Las vacantes que se pudieran pro-ducir durante el mandato de cualquiera de losmiembros de la Junta Directiva serán cubiertasprovisionalmente entre dichos miembros, hastala elección definitiva por la Asamblea GeneralExtraordinaria.
Capítulo III.ASAMBLEA GENERAL
Artículo 17. La Asamblea General de Amigos dela Cerámica Decorada y la Alfarería es el órganosupremo de gobierno de la Asociación y estaráintegrada por todos los asociados.
Artículo 18. Las reuniones de la AsambleaGeneral serán ordinarias y extraordinarias. La
Estatutos de la Asociación Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería.(ALFACER)
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)Estatutos Página 60
ordinaria se celebrará una vez al año dentro delos cuatro meses siguientes al cierre del ejerci-cio; las extraordinarias se celebrarán cuando lascircunstancias lo aconsejen, a juicio del Presi-dente, cuando la Directiva lo acuerde o cuandolo proponga por escrito una décima parte de losasociados.
Artículo 19. Las convocatorias de las Asam-bleas Generales se realizarán por escrito expre-sando el lugar, día y hora de la reunión, así comoel orden del día con expresión concreta de losasuntos a tratar. Entre la convocatoria y el díaseñalado para la celebración de la Asambleaen primera convocatoria, habrán de mediar almenos quince días, pudiendo asimismo hacerseconstar, si procediera, la fecha y hora en que sereunirá la Asamblea en segunda convocatoria,sin que entre una y otra pueda mediar un plazoinferior a una hora.
Artículo 20. Las Asambleas Generales, tantoordinarias como extraordinarias, quedarán váli-damente constituidas en primera convocatoriacuando concurran a ellas un tercio de los asocia-dos con derecho a voto, y en segunda convocato-ria cualquiera que sea al número de asociadoscon derecho a voto.Los acuerdos se tomarán por mayoría simplede las personas presentes cuando los votos afir-mativos superen a los negativos, no siendo com-putables a estos efectos los votos en blanco nilas abstenciones.Será necesario mayoría cualificada de las perso-nas presentes, que resultará cuando los votosafirmativos superen la mitad de éstas, para:
Nombramiento de las Juntas DirectivasDisposición o enajenación de bienes inte-
grantes del inmovilizado.Modificación de estatutos.Disolución de la entidad.
Artículo 21. Son facultades de la AsambleaGeneral Ordinaria:
Aprobar, en su caso, la gestión de la JuntaDirectiva.
Examinar y aprobar las Cuentas anuales.
Aprobar o rechazar las propuestas de la JuntaDirectiva en orden a las actividades de laAsociación.
Fijar las cuotas ordinarias o extraordinarias.Cualquiera otra que no sea de la competen-
cia exclusiva de la Asamblea Extraordina-ria.
Acordar la remuneración, en su caso, de losmiembros de los órganos de representa-ción, previo acuerdo de modificación delos Estatutos.
Artículo 22. Corresponde a la Asamblea Gene-ral Extraordinaria:
Nombramiento de los miembros de la JuntaDirectiva.
Modificación de los Estatutos.Disolución de la Asociación.Expulsión de socios, a propuesta de la Junta
Directiva.
Capítulo IVSOCIOS
Artículo 23. Podrán pertenecer a la Asociaciónaquellas personas con capacidad de obrar quetengan interés en el desarrollo de los fines de laAsociación.
Artículo 24. Dentro de la Asociación existiránlas siguientes clases de socios:
Socios fundadores, que serán aquellos queparticipen en el acto de constitución de laAsociación.Socios de número, que serán los que ingre-sen después de la constitución de la Asocia-ción.Socios de honor, los que por su prestigio o porhaber contribuído de modo relevante a la dig-nificación y desarrollo de la Asociación, sehagan acreedores a tal distinción. El nombra-miento de los socios de honor corresponderáa la Asamblea General.
Artículo 25. Los socios causarán baja poralguna de las causas siguientes:
Por renuncia voluntaria, comunicada porescrito a la Junta Directiva.
Por incumplimiento de las obligaciones eco-nómicas, si dejara de satisfacer las cuo-tas periódicas durante más de 14 meses.
Artículo 26. Los socios de número y fundado-res tendrán los siguientes derechos:
Tomar parte en cuantas actividades organicela Asociación en cumplimiento de susfines.
Disfrutar de todas las ventajas y beneficiosque la Asociación pueda obtener.
Participar en las Asambleas con voz y voto.Ser electores y elegibles para los cargos
directivos.Recibir información sobre los acuerdos adop-
tados por los órganos de la Asociación.Hacer sugerencias a los miembros de la
Junta Directiva en orden al mejor cumpli-miento de los fines de la Asociación.
Artículo 27. Los socios fundadores y de númerotendrán las siguientes obligaciones:
Cumplir los presentes Estatutos y los acuer-dos válidos de las Asambleas y la JuntaDirectiva.
Abonar las cuotas que se fijen.Asistir a las Asambleas y demás actos que
se organicen.Desempeñar, en su caso, las obligaciones
inherentes al cargo que ocupen.
Artículo 28. Los socios de honor tendrán lasmismas obligaciones que los fundadores y denúmero a excepción de las previstas en los apar-tados b) y d) del artículo anterior.Asimismo, tendrán los mismos derechos aexcepción de los que figuran en los apartadosc) y d) del artículo 26, pudiendo asistir a lasasambleas sin derecho de voto.
Capítulo VRÉGIMEN ECONÓMICO Y FINANZAS
Artículo 29. Los recursos económicos previstos
para el desarrollo de los fines y actividades de laAsociación serán los siguientes:
Las cuotas de socios, periódicas o extraordi-narias.
Las subvenciones, legados o herencias quepudiera recibir de forma legal por parte delos asociados o de terceras personas.
Cualquier otro recurso lícito.
Artículo 30. El patrimonio fundacional o FondoSocial de la Asociación es de CIEN EUROS (100E)
Artículo 31. El ejercicio asociativo y económicoserá anual y su cierre tendrá lugar el 31 dediciembre de cada año.
Capítulo VIDISOLUCIÓN
Artículo 32. Se disolverá voluntariamentecuando así lo acuerde la Asamblea GeneralExtraordinaria, convocada al efecto, por unamayoría de dos tercios de los asociados.
Artículo 33. En caso de disolución, se nombraráuna comisión liquidadora la cual, una vez extin-guidas las deudas y, si existiese sobrantelíquido, lo destinará para fines que no desvirtúensu naturaleza no lucrativa y estén relacionadoscon los señalados en el Artículo 3 de estos esta-tutos.
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)Asociarse a ALFACER Página 61
Boletín de AsociaciónCumplimente los siguientes datos y envíelos a ALFACER:
La cuota de asociación es de 20 € anuales, que pueden hacerse efectivos mediante:
Giro postal a ALFACER, c/ Maladeta 20, casa 3. 50430 María de Huerva (Zaragoza)
o Cheque bancario enviado a ALFACER, c/ Maladeta 20, casa 3. 50430 María de Huerva (Zaragoza)
o Recibo por domiciliación bancaria. En este caso, indique sus datos a continuación:
Número de cuenta (20 dígitos)
Banco
Dirección postal de la agencia
Población
Titular de la cuenta
Nombre y apellidos
Calle, número, piso
Código Postal y Población
Provincio y/o Estado
Teléfono
Correo electrónico
Profesión
Especialidad de interés
Asociación de Amigos de la Cerámica Decorada y la Alfarería (ALFACER)Normas para los autores de la revista
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La revista Alfahar admite para su publicación tex-tos inéditos de interés en el campo de la alfare-ría, la cerámica, el coleccionismo y disciplinasafines, ya sean de carácter descriptivo o bien teó-rico, histórico, arqueológico y similares.El envío de artículos originales para su posiblepublicación debe hacerse mediante correo elec-trónico, adjuntando el archivo con el artículo (enformato de Word, o WordPerfect) a la dirección:
[email protected] La revista no se compromete a mantener corres-pondencia sobre los artículos no solicitados.Los autores deberán atenerse a las siguientesnormas:
1. AceptaciónLa aceptación de un artículo para su publicaciónrequerirá el informe favorable de uno o variosasesores de la revista. Tan pronto como el artí-culo sea evaluado positivamente, pasará a sermaquetado y publicado a la mayor brevedadposible en la revista.
2. ExtensiónComunicaciones: el número máximo de páginasescritas será de 12, más notas, bibliografía,resúmenes y apéndices. El material gráfico noexcederá de 15 ilustraciones (incluidas tablas yfotos y dibujos).
Artículos originales: 20 páginas aproximada-mente para el texto, más notas, bibliografía,resúmenes y apéndices y no más de 20 ilustra-ciones (incluidas tablas y fotos y dibujos). Los tra-bajos que excedan de esta extensión podrán serpublicados en números sucesivos de la revista.
3. Elementos del artículoTítulo: deberá ser lo más conciso posible y refle-jar con la mayor precisión el contenido del tra-bajo. En el caso de que el trabajo hubiera depublicarse en varias partes, cada una de ellas
deberá ir precedida de un subtítulo adicional.Autores: debajo del título se indicará el nom-
bre y apellidos del autor o autores y, en su caso,la denominación del centro donde se haya reali-zado el trabajo.
Resumen: el texto deberá ir precedido de unbreve resumen, de una extensión máxima de 15líneas, que refleje con la mayor concisión y clari-dad el propósito del trabajo, el método operato-rio empleado y los resultados obtenidos.
Texto e imágenes: el texto deberá presen-tarse en castellano, en documentos Word (fiche-ros .doc o .docx).
Las imágenes se enviarán en sendos archi-vos individualizados, en formato JPG, con la cali-dad necesaria para su reproducción: resoluciónmínima de 300 ppp y, al menos, tamaño 15 x11 cm. En su título deberá indicarse el númerode la figura correspondiente.
Para facilitar la comprensión de los textos,se recomienda que los estudios se estructurenen apartados o secciones claramente diferen-ciados, los cuales se escribirán: con letra minús-cula negrita, en un primer nivel; con minúsculanegrita cursiva, en el segundo; y con minúsculacursiva, en el tercero. Si, por su complejidad,fuera necesario mayor grado de clasificación, enaras de la claridad, se podrán emplear numera-les seguidos de punto en secuencia lógica, sinnegrita ni cursiva. En ninguno de los títulos par-ciales se añadirá punto al final.
La redacción será concisa, evitando descrip-ciones y detalles superfluos. Se evitará asimismola explicación de procedimientos ya descritos enotros trabajos, a los que el autor deberá limitarsea remitir mediante la correspondiente cita biblio-gráfica. El empleo de símbolos, abreviaturas demagnitudes físicas y unidades deberá ajustarseal Sistema Internacional de Unidades.
Las citas literales se encerrarán entre comi-llas. Si la cita está en otra lengua, se recomienda
pasarla a nota a pie de página y hacer unatraducción en el cuerpo del texto.
Las citas bibliográficas en el cuerpo deltexto, cuando se elija esta opción, se incluiránentre paréntesis, haciendo constar el/los ape-llido/s del autor o autores, seguidos de espacioy año de publicación. Para indicar el número depágina o páginas concretas, este se añadirá trasdos puntos y espacio.
En cuanto a las fotografías, mapas, dibujos,gráficos, etc., en el texto se hará una llamada alos mismos, indicando entre paréntesis sunúmero de orden tras la palabra «figura».
Todas las notas deberán colocarse al final decada página y en el formato de Word para Win-dows. Las notas que sean utilizadas para ampliarlos datos del texto, deberan ser concisas.
Bibliografía: al final del artículo, se hará unapartado con la bibliografía, quese presentaráordenada alfabéticamente y sin tabular. Exclusi-vamente se incluirán obras consultadas para laelaboración del estudio.
Cuando haya más de una publicación de unmismo autor, se ordenarán por el año de edicióny, si este coincide en varias, se le añadirá a con-tinuación una letra minúscula en secuencia alfa-bética.
En el caso de que figuren más de tres auto-res, bastará indicar el primero y se señalará laomisión mediante la expresión et al. (= et alii, «yotros») en cursiva. Si el autor es un editor, se indi-cará inmediatamente después de su nombre,entre paréntesis: (ed.). Cuando una publicaciónno tenga autor específico, se comenzará por eltítulo.
Modo de citar las referencias monográficas
Monografías:AUTOR/ES (año). Título. Responsabilidad subordi-nada. Edición. Lugar de publicación: editor.
Extensión. (Colección; núm.). ISBN.
Partes de monografías: AUTOR/ES (año). “Título”. En: RESPONSABILIDAD de lamonografía. Título de la monografía. Edición.Lugar de publicación: editor. Situación de laparte en la obra. (Colección; núm.). ISBN.
Artículo en publicación seriada: AUTOR/ES (año). “Título”. Título de la publicaciónseriada. Vol., núm., pp.
Recursos electrónicos: AUTOR/ES (año). Título [en línea]. Lugar de publi-cación: editor. Disponible en: ... [Consulta: díames año].AUTOR/ES (año). Título [dvd]. Lugar de publica-ción: editor.
Palabras clave: a continuación de la bibliografíase indicarán las palabras clave que mejor descri-ban el contenido del trabajo, hasta un máximode siete.
Agradecimientos, aclaraciones, conflictos deintereses y otros protocolos: en el caso de que eltrabajo forme parte de un plan de investigación ohubiera recibido algún tipo de ayuda o subven-ción, esta circunstancia se podrá hacer constar,así como agradecimientos u otras aclaraciones.Figurarán al final del artículo, después de laspalabras clave.
Relación de figuras: al final del trabajo, seincluirá una relación de todas las figuras, dondese indique su correspondiente número de orden[Figura 1…], los datos de su identificación [títuloreal o facticio (fecha), autor, etc.], explicaciones[comentario, localización actual, etc.] y fuentes[(© año, autor ), (Elaboración propia), (Fotografíadel autor)]...
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