Date post: | 12-Aug-2015 |
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Sta. Rose Philippine Duchesne
Sta. Rosa Filipina
Duchesne
(1769-1852)
Jesús llamó a sus discípulos.
Y también llamó a Rosa
Filipinaque no dudó
en dejarlo todo y seguir su llamada.
Conozcamos su vida…
“Id y enseñad el Evangelio a todas las gentes”
Nació en Grenoble, un pueblo de Francia, en el año 1769.
Es un pueblecito
muy agradable y amplio, al pié de Los
Alpes, rodeado de
colinas y lleno de historia.
Es la mayor de muchos hermanos.
Una niña con mucho carácter,
demasiado terca e independiente. Su
hobby favorito es la lectura. Ya pueden
los juguetes llenarse de polvo, que ella con un libro es feliz.
Quiere saber, quiere crecer. Escucha a los
mayores que les visitan, como los
Misioneros que, al calor de la chimenea,
les hablan de las misiones en el Norte
de América, una tierra aún sin civilizar, dura y desafiante. Se le queda todo esto en
la cabeza y en el corazón, y se
promete a sí misma ser misionera, y si
fuera posible, mártir.
Para prepararse a la Primera comunión, la llevan al monasterio Santa María de las Alturas, donde siente la llamada a entregar su vida sólo a Dios. Y decide hacerse monja.
Al principio sus padres no le dejan, pues no tiene siquiera la edad suficiente, pero finalmente ingresa en el monasterio.
Con la Revolución Francesa asaltan y queman muchos monasterios.
Tiene que volver a casa. Son tiempos difíciles que la convierten en una mujer fuerte y plena de voluntad, llena de ideales y dispuesta a cumplirlos.
Son tiempos difíciles. Pocas compañeras,
pocas alumnas. Pero
entonces la Luz aparece
en el horizonte.
Cuando acaba la Revolución, llega la paz, y
vuelve de nuevo al
monasterio.
Comentario
Le hablan de Sofía que acaba de fundar la
Sociedad del Sagrado Corazón.
Tras muchas cartas, Sofía va a Grenoble
a visitarla al Monasterio de Sta.
María de las Alturas.
En esta escalera se encontraron y allí
estuvo Magdalena un año compartiendo y
construyendo sueños con ellas.
Termina la soledad. Rosa Filipina es feliz de estar con Magdalena,
caminar juntas, soñar juntas, y
se dedica plenamente a sus niñas y a
Dios.
A veces pasa la noche entera rezando. Las niñas del colegio se dan cuenta, y para
asegurarse de que no se mueve por la
noche, echan sobre su hábito y su velo unos pedacitos de
papel que se caerían al primer movimiento.
Por la mañana, los papelitos están ahí,
¡no se ha movido! Las niñas deciden que su profesora es Santa.
Entonces, despierta su sueño de la infancia de ser misionera, pero
Magdalena le dice que debe esperar.
La espera dura 13 años, en los que aprende a tener
paciencia, hasta que aparece su
oportunidad.
Monseñor Dubourg, Obispo de Luisiana, llega de América pidiendo a Magdalena ayuda para su Misión. El viaje es largo y peligroso, pero es el sueño de Rosa Filipina.
Magdalena la envía por fin.
Y, junto con unas compañeras, se embarca en el
“Rebecca” que tarda 2 meses en llegar en un
viaje difícil. Fueron asaltadas incluso por los piratas. Sabía que
no volvería nunca más a su casa, pero ¡¡¡Las Misiones eran
su sueño!!!
Y llega a América, a una pobre
tierra, donde viven con
hambre, frío y mucha pobreza, pero con mucha alegría.
St CharlesFlorissant
St Louis
St Michel
Grand Cotbau La Pourche
A Partir de su llegada, se dedica a sembrar, dando su vida por ayudar y
enseñar el mensaje de Jesús a los
que allí vivían.
Comentario
Después de 30 años, ya ha fundado 6 Colegios del Sagrado Corazón y hay muchas religiosas que son Americanas. Su siembra
ha dado fruto abundante.
Nunca había estado con los
indios. Pero, casi al final de su vida, consigue que le
dejen ir a la misión de Sugar Creek, entre los
indios Potowatomies.
¡Qué feliz se sintió entre ellos!
Allí se encuentra aún el “Philippine Duchesne Memorial Park”,
en recuerdo de lo que la misionera hizo en aquel lugar.
Y así vivió sus días dedicados a su misión
Se acerca el final de su vida, y siente que
ella ha hecho
poco, que todo ha
sido obra de Dios.Muere a los 83 años, en el colegio de San
Carlos (una de sus fundaciones), en Missouri, rodeada de cariño y veneración.
Y allí Descansa En Paz desde 1852.
Ella fue la primera misionera del Sagrado
Corazón, hoy extendido por todo el mundo.
Fue beatificada en 1940 por
Pío XII y canonizada, hecha Santa, en 1988 por Juan Pablo II.
SANTA ROSA FILIPINA DUCHESNE
Primera Misionera de las Religiosas del Sagrado Corazón
1769 1852
FIN