Date post: | 13-Mar-2016 |
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UNIVERSIDAD METROPOLITANA DE EDUCACION CIENCIAS Y TECNOLOGIA
MATERIA:PSICODEGAGOGÍA EDUCATIVA
TEMA:LA OBJETIVIDAD DE LA EVALUACIÓN EN EL RENDIMIENTO
DEL ESTUDIENTE UNIVERSITARIO
FACILITADORA: MGTER. GRESSY ZUÑIGA
PARTICIPANTES:JOSELYNE BECERRA CEDULA: 8-736-746PEDRO BELLIDO CEDULA: 8-790-1519PORFIRIO CEDEÑO CEDULA: 8-827-850
ALIKI JUSTINIANI CEDULA: 8-736-853 YAZMINA SANCHEZ CEDULA: 8-336-196 AIDA VÉLIZ CEDULA: 2-105-578
ROLANDO VON CHONG CEDULA: 8-229-693
INDICE
INTRODUCCIÓN
Al inicio de este siglo se aprecian con mayor claridad los cambios que
están marcando esta era: los cambios sociales, tecnológicos, económicos y de
todo tipo a los cuales tenemos que ajustarnos y darles respuesta. Por ello, ha
surgido un nuevo paradigma que requiere una revisión del sistema
universitario tradicional, no solo desde el punto de vista de la enseñanza del
profesor, sino también desde el punto de vista del aprendizaje del alumno.
Por ello, desde la perspectiva de la función docente, es preciso un
replanteamiento profundo acerca de muchos aspectos metodológicos de la
formación. La sociedad actual no sólo está exigiendo profesionales con
muchos conocimientos, sino también con las competencias y las actitudes
necesarias para hacer frente a los nuevos retos que están requiriendo los
tiempos actuales. Todo indica que se debe caminar hacia una formación global
de la persona, se deben valorar otros aspectos más allá de la adquisición de
los simples conocimientos. Si posteriormente, estos conocimientos no saben
aplicarse, no sirven para solucionar problemas o para ser más calificados, ya
que la formación no está siendo eficaz. De allí, que es de gran importancia
una revisión del papel que tienen que jugar los formadores en las universidades
para obtener estos resultados.
Desde este punto de vista, el profesor universitario no puede actuar sólo
como un simple transmisor de conocimientos, sino que tiene que ser impulsor
del aprendizaje de las competencias y actitudes que necesitan adquirir los
estudiantes. Estos cambios en la formación universitaria sugieres diseñar e
implantar nuevos programas académicos donde se determinen objetivos claros
a obtener para lograr este aprendizaje. No se puede esperar que el estudiante
asimile todo lo que se le explica, sino que hay que comprobar que en efecto
esto sea de esta forma. Lo medular es dejar de pensar en aquello que el
profesor enseña y centrarse en lo que realmente los alumnos están
aprendiendo.
Este nuevo paradigma supone la utilización de nuevas metodologías
docentes con clases más dinámicas, fomentando el trabajo en grupo, con más
interacción entre el profesor y el estudiante y con una importante reducción de
las clases magistrales unidireccionales. Si se logra esta interacción continuada
se puede analizar sistemáticamente si el proceso de formación realmente está
funcionando. Ello lleva aparejados cambios en los métodos tradicionales de
evaluación, donde sólo se tenía en cuenta la asimilación de contenidos
mediante un examen escrito memorístico. La evaluación tiene que servir para
saber si el alumno está adquiriendo las competencias y habilidades previstas y
ello requiere utilizar fórmulas diferentes para averiguarlo. Con esta
metodología se requiere una evaluación más continua y con más componentes
a analizar. Por ello, el resultado de un examen no debe constituir el único
indicador para evaluar y, por otra parte tampoco permite evaluar todo tipo de
competencias; hay que completar la evaluación con otros medios como
trabajos de investigación, presentaciones orales, asistencia a conferencias, lo
que permitirá analizar un espectro más amplio de habilidades del estudiante.
Asimismo, para poder intervenir sobre el nivel de aprendizaje del estudiante, no
se puede esperar a evaluar a final de curso; la evaluación ha de ser continua y
debe permitir al alumno tener una retroalimentación sobre su proceso de
aprendizaje para que pueda mejorar en caso que sea necesario.
Esto implica igualmente un nuevo rol del estudiante universitario, que
tendrá que trabajar de forma mucho más activa delineando así su propio
proceso de aprendizaje. La predisposición del estudiante es esperar que sea el
profesor quien impulse la formación; en el nuevo patrón, el estudiante debe ser
más proactivo. La capacidad de trabajar en equipo con el resto de estudiantes
y con el profesor es vital para la ejecución de las nuevas metodologías. De esta
manera, es necesario incrementar el número de horas que el estudiante brinda
al estudio más allá de la clase presencial. Para poder interactuar y opinar en el
aula, se requiere de un proceso previo de elaboración y análisis de información.
En conclusión, el alumno tiene que volcarse en la carrera universitaria
como si se tratara de su profesión; el objetivo del estudiante no puede ser sólo
aprobar exámenes y asignaturas sino que tiene que tratar de obtener todos los
requisitos que le exigirá posteriormente el mercado.
Podemos decir, que este nuevo enfoque de enseñanza-aprendizaje, ya
ha sido adoptado en algunos ámbitos universitarios, es sin duda el que está
marcando las pautas del sistema universitario del nuevo siglo.
La objetividad de la evaluación en cuanto al rendimiento académico del
nuevo estudiante universitario tienen su marco legal en lo que dispone nuestra
Carta Magna y las leyes que se han creado, Ley 24 de 14/ de julio de 2005 que rige la Universidad de Panamá y la LEY 30 DE 2006 que crea y regula El
Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación para el Mejoramiento de la
Calidad de la Educación Superior Universitaria, las cuales son las que regulan
y aprueban las Universidades particulares.
1. Concepto de Evaluación
La evaluación es una actividad sistemática y continúa como el mismo proceso
educativo, un subsistema integrado dentro del propio sistema de la enseñanza.
Y tiene como misión especial recoger información fidedigna sobre el proceso
en su conjunto para ayudar a mejorar el propio proceso, y dentro de el, los
programa, las técnicas de aprendizaje, los recursos, los métodos y todos los
elementos del proceso. Pero hay otros ámbitos e conductas (sicomotriz y
afectivos), e incluso las categorías superiores de ámbito cognitivo (ej.:
comprensión, interpretación, extrapolación, análisis de los principios de
organización etc.), exigen por su naturaleza compleja de instrumentos de
evaluación diferentes.
También se entiende a la evaluación como proceso porque no se realiza es un
solo acto, sino a lo largo del tiempo. Es integral porque toma en cuenta todos
los aspectos de la personalidad del educando y no solo los conocimientos
adquiridos.
1.1. Evaluación de la Educación
La evaluación se ha convertido hoy en día en un instrumento indispensable
para pilotar el desarrollo de los sistemas educativos y para valorar el impacto
de las políticas de mejora de la educación puestas en práctica. Desde este
punto de vista, resulta lógico que ocupe un lugar destacado en el conjunto de la
propuesta de Metas 2021.
En efecto, no tiene sentido evaluar por el simple hecho de evaluar, sino que
debemos hacerlo para mejorar nuestra acción y valorar sus resultados.
Evaluamos a los alumnos para planificar y desarrollar mejor los procesos de
enseñanza y aprendizaje que desarrollamos en las aulas. Evaluamos a las
escuelas para lograr que funcionen mejor y más eficazmente y para conseguir
que ofrezcan las condiciones que favorecen un aprendizaje de calidad.
Evaluamos al profesorado para incentivarle en su desarrollo profesional y
promover las buenas prácticas docentes. Evaluamos, en fin, el sistema
educativo para valorar la adecuación, la pertinencia y la eficacia de las políticas
educativas que impulsamos. En suma, evaluamos para mejorar, no por rutina o
ESTRATEGIA PARA LA EVALUACION DE LA EDUCACION SUPERIOR
En este apartado se presentan los lineamientos generales, los procesos,
las etapas y las instancias que deberán contemplarse para la evaluación de la
educación superior, en el proceso que se impulsa.
Esta premisa ha sido asumida en consideración a la naturaleza e
identidad particular de las casas de estudio y a la evidencia empírica de que la
evaluación es un proceso gradual y acumulativo.
Se parte también de la premisa explicitada en el propio Programa para la
Modernización Educativa, de que se trata de impulsar un proceso nacional de
evaluación del sistema de educación superior. Esto implica la adopción de una
visión de proceso, estableciendo acuerdos preliminares que permitan dar inicio
a acciones y procedimientos concertados, susceptibles de ser revisados para
corregirlos, mejorarlos o, dado el caso, modificarlos
Cabe recordar que una línea de acción que resalta en todos los
Programas Nacionales para el Mejoramiento de las Funciones de la Educación
Superior, es la referida precisamente a la evaluación. El objeto de esta reunión
extraordinaria es someter a la consideración y, en su caso, aprobación de la
Asamblea General, una serie de propuestas que se basan inicialmente en el
documento elaborado por el grupo técnico de la Comisión Nacional de
Evaluación de la Educación Superior
Procesos de Evaluación
Dentro de la estrategia para la evaluación de la educación superior se
propone establecer tres procesos de evaluación relacionados entre sí, pero con
propósitos específicos y diferentes para cada uno de ellos, a ser realizados en
forma paralela y simultánea: a) procesos de evaluación institucional, a cargo de
las propias instituciones; b) estudios evaluativos sobre el sistema de educación
superior en su conjunto, a cargo de especialistas; e) procesos de evaluación
interinstitucional sobre programas y proyectos académicos en las diversas
funciones y áreas de la educación superior, mediante el mecanismo de
evaluación de pares (miembros reconocidos de la comunidad académica
nacional en áreas específicas).
La evaluación institucional consistirá en un proceso de análisis valorativo
sobre la organización, funcionamiento y resultados de los procesos académicos
y administrativos, tomando en consideración los resultados de las evaluaciones
de las dependencias y unidades académicas. Sus propósitos inmediatos son:
1) la toma de decisiones institucionales para el mejoramiento, fortalecimiento y,
en su caso, reforma de la institución y 2) la proposición de un programa
especial para la solución de problemas y la atención a necesidades urgentes e
importantes, así como para el desarrollo de proyectos prioritarios.
La evaluación del sistema de educación superior consistirá en un
proceso de análisis valorativo de los aspectos básicos de la problemática
general de la educación superior y de sus tendencias de desarrollo. Las
decisiones que se deriven de esta evaluación se traducirán en políticas y en el
establecimiento de prioridades para la consolidación y desarrollo del sistema de
educación superior.
La evaluación interinstitucional de programas y proyectos académicos se
sitúa en el ámbito del quehacer sustantivo de las instituciones, a un nivel de
mayor particularidad, el de un área específica del conocimiento, en el que se
pretende conocer y valorar las condiciones de operación y la calidad de los
procesos y de los resultados. Esta evaluación tiene que ser realizada
fundamentalmente entre los pares de la comunidad académica, y para ser
efectiva requiere de la existencia de espacios colegiados interinstitucionales del
más alto nivel académico, que cuenten con la legitimación de la propia
comunidad académica nacional.
La finalidad de estos procesos de evaluación es el mejoramiento de la
calidad de los resultados y de los procesos del quehacer académico de las
instituciones, así como la formulación de juicios fundamentados para orientar la
canalización de recursos económicos.
Planeamiento de enseñanza por objetivo
Unas de las tareas principales de la educación es orientar en el proceso de
enseñanza, para ello el educador planifica objetivamente de modo que sea
acorde a las necesidades del ambiente que rodea al estudiante
El educador debe tomar en cuenta lo siguiente:
-tener claro las exigencia de la sociedad
-contribuir al desarrollo sicótico del estudiante como individuo
Considerar los problemas colaterales que surgen al aplicar las leyes a nivel
familiar, social y económico
La planificación será entonces la disciplina que coordina todos los factores que
afectan al individuo y la sociedad hacia la realidad de las soluciones efectivas
con el fin de establecer previsiones y evitar hasta donde sea posible
improvisaciones.
Unas de las labores más complejas es la orientación de humanos pues cada
individuo tiene su idiosincrasia, por ende la planificación debe ser lo más
objetiva y básica para ello se fundamenta en:
Limitar las improvisaciones
Evitar la rutina año tras año
Facilitar y proveer e lo que se quiera hacer
Permitir la ejecución continua de la labor educativa
Impedir la pérdida de tiempo y esfuerzo
Propiciar educada evaluación
En cuanto halos elementos estructurales del planteamiento se toman en
cuenta, para que se va a enseñar, como se va a enseñar y como se va a
evaluar (objetivos, contenidos, actividades, el curso y evaluación)
Existen también clases de planeamientos a diversos niveles:
Planteamiento de desarrollo educativo
Planteamiento de currículo
Planteamiento de proceso de enseñanza con dos etapas, diagnósticas y
programación
Estos objetivos son determínate en el planteamiento y su efectividad de
manifiesta cuando:
Un objetivo dado se logra al finalizar la clase.
La experiencia es tal que los estudiantes efectúen con gusto el tipo de
comportamiento implícito en los objetivos
Los comportamientos que se espera de los estudiantes están acorde a sus
capacidades
El conjunto de relaciones e interrelaciones entre los componentes de la clase
conducen a estimular los logros de los objetivos.
Una misma experiencia de aprendizaje es útil para alcanzar diferentes
objetivos.
Como último paso se hace necesaria la evaluación, este debe ser entendido
como el proceso de recolección procesamiento, análisis de información para la
toma de decisiones sobre el objeto a evaluar
Las estrechas conexión entre contenidos, actividades, recursos y evaluación
permiten al alumno un mejor desenvolvimiento y aprovechamiento del proceso.
Uno objetivo bien formulado posee las siguientes características:
Plantear en forma clara y precisa la conducta del alumno las finalizar un
periodo de clase.
Establecer un contenido específico conductual
Escribir condiciones o situaciones
Describir el grado o nivel de rendimiento o desempeño al final de la clase
Mediante la evaluación
Antes la interrogante ¿que evaluar? La respuesta hace referencia al tipo de
aprendizaje en el desarrollo del proceso de enseñanza como es:
El contextual.
Lo procedimental.
Lo actitudinal
Los contenidos conceptuales (saber), hacen referencia a las distintas áreas de
conocimiento los procedimentales (saben hacer), son contenidos que se
recolectan con la capacidad operativa, tiene un carácter fundamentalmente
instrumental. Los actitudinales tienen por finalidad el desarrollo de la persona
para la vía en sociedad, generando valores, pautas e comportamiento y
actitudes para la convivencia.
En tanto a el como evaluar se vincula a tras aspectos básicos como son:
¿cómo se caracteriza a la evaluación? ¿Qué instrumentos será utilizaos? ¿Qué
sistema de calificaciones será adoptado?
Otra interrogante es cuándo hay que evaluar, las cual hace referencia en el
momento que se realizara la evaluación o las evaluaciones; así por ejemplo se
puede estar haciendo alusión a la evaluación diaria, semanal, mensual,
bimestral, etc. También hace alusión a la temporalización de la tarea
evaluativa.
Problemática
Entendemos que el rendimiento en el alumno se entiende desde dos factores
distintos: el propio alumno y el profesor, en cuanto al alumno, su esfuerzo, las
horas de dedicación, el grado de motivación e interés por la materia sus gustos
personales, su estilo de aprendizaje son variables que influyen en el
rendimiento. En cuanto al profesor, su estilo docente, su forma de evaluar, su
metodología de trabajo, su formación personal… son otras variables que en
forma externa también influyen en el rendimiento del alumno. Sería un trabajo
muy arduo y costoso controlar todas esta variables por lo tanto el motivo de
nuestra investigación es centrar nuestra atención en las variables externas al
estudiante.
En resumen decir que entre los elementos externo que pueden afectar sal
rendimiento delos estudiante universitarios están al tipo de evaluación utilizada
para calificar al alumno y la explicación clara de los criterios de evaluación por
parte del profesor.
Evaluación Institucional
En relación al reporte de evaluación se propone considerar los
siguientes aspectos:
- La descripción cuantitativa y cualitativa del estado que guarda la institución en
cada uno de los aspectos considerados en la evaluación;
- El estado o valor deseable por la institución (parámetro deseado) que se
considere como el óptimo adecuado para la realización de las tareas
académicas;
- La interpretación y el análisis de la información;
- La identificación de los problemas y necesidades más importantes a los que
se tiene que dar una atención inmediata.
Evaluación del Sistema de Educación Superior
En relación a la evaluación del sistema de educación superior, se
propone que el primer esfuerzo a realizar en el seno de la Comisión consista en
un estudio que sistematice y analice la información y las instancias de
coordinación, planeación y apoyo, para valorar el estado actual del desarrollo,
estructura y problemática del sistema de educación superior. Este estudio
estará a cargo de un grupo interinstitucional bajo la responsabilidad de un
coordinador operativo. Es necesario aclarar que este proceso de evaluación se
centrará en la dimensión del Sistema de Educación Superior, tomando en
cuenta macro variables que influyen en el desarrollo de éste y de sus
subsistemas, como son la cobertura de la educación superior y su crecimiento,
el financiamiento, los recursos humanos capacitados, las políticas educativas,
los modelos de desarrollo de las instituciones y su ubicación en el conjunto, la
estructura y funcionamiento de las instancias gubernamentales relacionadas
con la educación superior, la calidad y el impacto social del sistema, etc.
El propósito inmediato de la primera etapa de la evaluación será la
identificación de las situaciones límite y las señales de alerta que enfrenta el
sistema de educación superior, y la formulación de prioridades para su
consolidación y desarrollo.
PERFIL DEL NUEVO DOCENTE
A continuación se presentamos consideraciones generales acerca del
contexto educativo y los requerimientos de la profesionalización docente en
Panamá, así como los enfoques y fundamentos que sustentan el perfil del
nuevo docente a partir de las concepciones y bases jurídicas adoptadas por el
Ministerio de Educación.
El Entorno Educativo.
Con la llegada del siglo XXI se presentan transformaciones cambiantes
que afectan en todo los aspectos de la vida. Los cambios que vivimos, son
vertiginosos e insólitos son parte vital en nuestro presente y futuro.
Este cambio trajo consigo resultado de la convergencia de la era de la
tecnología de la información, con la revolución biológica en genética.
Destacándose el desarrollo de las comunicaciones a través de la
Internet; el acceso a la telefonía celular y satelital; la masificación de la
informática en los sectores productivos y de servicios; la facilidad de la
obtención de las computadoras y su rápida adaptación , así como el avance de
la biogenética. Sin embargo y a pesar de lo anterior, la calidad de vida no es
significativamente mejor, ya que con el aumento de todo los insumos el costo
de vida de los panameños va en aumento y cada día enfrentamos grandes
problemas, que plantean grandes desafíos tales como: desempleo, pobreza,
marginación, violencia, endeudamiento, exclusión, discriminación, explotación,
persecución, hambruna,
SIDA, analfabetismo, intolerancia, degradación del medio ambiente,
delincuencia entre otras. Estos problemas han generado cambios y
transformaciones profundas en la sociedad actual y han tenido efecto en los
sistemas de pensamientos, ideas y creencias; y por supuesto, han impactado
los sistemas educativos señalándoles nuevos retos.
de los datos recabados de la información sobre la educación panameña y el
nuevo perfil que se les quiere aplicar a los docentes tenemos que reconocer
que el Ministerio de Educación esta haciendo todo lo posible por elevar la
educación de nuestros estudiantes y poner a Panamá al nivel del tercer mundo
en cuanto al desempeño de nuestros estudiantes y al desafío de consensuar
con los docentes para que sean orientadores y utilicen el método de enseñanza
de acorde a las exigencia del mundo laboral y contexto intelectual con el cual el
estudiante sepa responder al mundo competitivo, ya que todos los países están
intentando transformar sus sistemas educativos para atender los nuevos
desafíos que irrumpen en la sociedad; además, frente a la competitividad que
exige el mundo globalizado, es claro que a la educación se le reconozca como
una inversión necesaria y estratégicamente determinante en el Siglo XXI.
Para lograr los ajustes necesarios para la implementación de nuevas
ideas de mejorar la educación y ponerla acorde a los otros países el Ministerio
de Educación implemento La dinámica de la llamada "sociedad del
conocimiento" o "sociedad de la información" influye necesariamente en el
campo educativo. Encontramos documentación en la cual La UNESCO,
elaboró un documento sobre las principales tendencias mundiales susceptibles
a convertirse en los principales desafíos del Siglo XXI, enumerando los
siguientes:
1 .El rápido desarrollo de la tercera revolución industrial, el continuo progreso
de la globalización y sus crecientes efectos.
2. La pobreza, la inequidad y exclusión.
3. La emergencia de nuevas amenazas a la paz, la seguridad y los derechos
humanos.
4. Los problemas relacionados con el crecimiento excesivo de la población
mundial.
5. La rápida degradación del medio ambiente.
6. La emergencia la sociedad de la información.
7. La relevancia del papel de la mujer.
8. El pluralismo cultural, la diversidad y la creatividad.
9. El desarrollo de la ciencia y la tecnología.
Esta información es una alerta para que la sociedad tome conciencia y los
gobernantes empleen una mejor distribución no solo de los recursos
económicos sino en general. En este contexto el capital intelectual es sin duda
alguna el principal recurso de la sociedad contemporánea; por ello la educación
para este siglo deberá satisfacer los objetivos de “aprender a vivir juntos,
aprender a lo largo de la vida, aprender a enfrentar una variedad de situaciones
y a que cada quien aprenda a entender su propia personalidad”, Se reconoce,
de este modo, que la llave para ingresar en el Siglo XXI es la educación
permanente, y que entre los retos de la educación de este siglo están:
El propiciar un desarrollo humano sustentable, revitalizar la democracia
participativa y el respeto a los derechos humanos. Cobra con esto importancia
la educación para la vida social y se advierte que es fundamental educar para
la reflexión crítica y la creación; que es necesario educar a personas capaces
de hacer uso de las tecnologías y las ciencias para transformar, creativamente
y en conjunto la sociedad en beneficio de todos. Formar personas con
disposición permanente de aprender y no sólo desarrollar sus competencias
académicas sino también las de carácter éticas y estéticas.
Desde el punto de vista pedagógico, será necesario introducir métodos
de enseñanza que propicien el aprendizaje autónomo y el juicio crítico, así
como el uso de las nuevas tecnologías de la comunicación y la información a
suerte de propiciar el aprendizaje de por vida.
Esta visión nueva de la educación supone cambios sustanciales en el
quehacer de los docentes y en su formación inicial y continua para que sean
garantes de su orientación y transformación en la búsqueda de mayor calidad,
pertinencia y equidad; estas son las preocupaciones actuales. Así por ejemplo,
el Proyecto
Profesionalizar al cuerpo docente , fortaleciendo las capacidades
académicas y su interrelación con las capacidades técnicas para la
formulación y ejecución de programas y la introducción de nuevas prácticas de
planificación y de gestión.
Garantizar la igualdad de oportunidades y posibilidades para el acceso,
la permanencia y el egreso del sistema educativo de manera de favorecer el
desarrollo equilibrado y la cohesión del cuerpo social en su conjunto.
Determinar los objetivos y contenidos fundamentales de los niveles de
enseñanza disponiendo mecanismos dinámicos y participativos para la
articulación con las nuevas demandas de la sociedad.
Establecer sistemas nacionales de evaluación de resultados del proceso
educativo que permitan asumir la responsabilidad por los logros obtenidos y
efectuar la rendición de cuentas a la sociedad y sistemas de información y de
investigación educativa que constituyan una base de datos operativos para la
toma de decisiones.
Establecer estándares cada vez más elevados para cada grado y año,
referidos al desarrollo del pensamiento lógico y a las competencias y
habilidades.
Lograr condiciones para que los ciudadanos y ciudadanas, tengan un
desempeño eficaz, dotándolos de las competencias necesarias para participar
en diferentes ámbitos y desenvolverse productivamente en la sociedad.
Todo lo anterior ha sido considerado por El Ministerio de Educación
como reto en los procesos de reformas desarrollados los últimos años. Sin
embargo, es claro que el rol que desempeñan los maestros dentro del proceso
ha sido descuidado o no ponderado. Pues es el maestro "precisamente la
conexión entre las transformaciones estructurales, institucionales y el proceso
de enseñanza y aprendizaje", de hecho la clave del éxito de cualquier proceso
de transformación educativa está en el compromiso de los docentes por
impulsarla. Sin embargo es claro que en todo este movimiento los educadores
no han sido los más comprometidos y su condición ha venido desmejorando.
LA PROFESIONALIZACIÓN DEL DOCENTE.
Los retos educativos del siglo XXI requieren que los docentes estén
comprometidos y con capacidad de ser reflexivos y creativos en cuanto a su
práctica, para cambiarla y adaptarla cuando sea necesario, atendiendo a las
realidades y necesidades del entorno y de sus alumnos tomando como
referencias las definiciones de la política educativa del país.
Para mejorar la calidad de la educación en Panamá es necesario
afrontar en los próximos años los desafíos relativos a la profesionalización del
sistema educativo, la profesionalización de la acción de las instituciones
educativas y sobre todo lo referente a la profesionalización de la función del
docente.
Lograr profesionalización del sistema educativo será necesario diseñar
y ejercer la conducción estratégica de las políticas de desarrollo educativo con
una visión prospectiva capaz de producir las adecuaciones que demanda el
entorno cambiante y de reorientar los procesos y las acciones. Asimismo,
promover la construcción de acuerdos nacionales que expresen la voluntad
política de los gobiernos a favor de la educación, en torno a metas de mediano
y largo plazo que generen el consenso y la participación de distintos sectores y
actores sociales, movilicen los recursos y esfuerzos necesarios para el
cumplimiento de las metas y otorguen continuidad y estabilidad a las políticas
públicas, así mismo que la escuela debe convertirse en un espacio de
democratización y participación. La profesionalización de la acción de la
escuela debe aprovechar mejor su nueva autonomía y crear las condiciones
institucionales, materiales y los incentivos necesarios para: desarrollar una
nueva modalidad de gestión y afirmar la función estratégica del equipo
directivo; fortalecer los nuevos roles de los docentes; fortalecer acciones de
concertación con la participación de los miembros dela comunidad, y garantizar
una adecuada infraestructura y equipamiento de las escuelas.
Se recomendó “otorgar a las escuelas y comunidades locales mayor
control sobre la educación, responsabilidad por los resultados institucionales y
por el rendimiento escolar de sus alumnos, participación de los padres y las
comunidades locales en la administración, confiriéndoles la autoridad de
requerir a las escuelas que asuman su responsabilidad por el rendimiento
escolar de sus alumnos”.
Finalmente es preciso profesionalizar la función del docente, actor
principal en el proceso de mejoramiento de la calidad educativa y ligadura
indiscutible entre los procesos de aprendizaje de los alumnos y las
modificaciones en la organización institucional; cabe destacar algunos aspectos
a importantes a ser considerados en esta tarea como por ejemplo: lo referente
a la formación inicial, la capacitación, las condiciones de trabajo, la continuidad
laboral, el acceso a una carrera profesional acorde con los logros pedagógicos
de los proyectos educativos del establecimiento, las remuneraciones, la
infraestructura escolar y el equipamiento didáctico, entre otros.
No puede olvidarse que en el ejercicio del rol profesional, intervienen factores
concomitantes tales como el contexto socio económico, el compromiso de la
comunidad, la autonomía en la toma de decisiones, la preparación científica y
pedagógica y el entrenamiento en los mismos procesos de aprendizaje a poner
en práctica, centrado en la reflexión y la investigación sobre su ejercicio
profesional.
Es fundamental que la sociedad cuente con maestros y profesores
eficaces y eficientes para poner en práctica distintos y adecuados recursos, con
el fin de acceder a mejores logros educativos.
La profesionalización de la enseñanza en las escuelas supone el
desarrollo de acciones vinculadas con el proceso de enseñar y aprender con
mayor autonomía en las aulas y responsabilidad por los aprendizajes
alcanzados.
Con la puesta en marcha de este conjunto de estrategias se favorecerá que el
docente sea revalorizado en su función profesional y social como protagonista
de las transformaciones educativas.
No hay políticas educativas serias sin políticas de preparación y
capacitación de los maestros, “ya que no hay mejora de la educación sin
buenos profesores”
(Fullan y Hargreaves, 1996; Darling Hamnd, 1997) . Para afrontar los desafío
de la sociedad actual es imperante prestar una atención prioritaria a la calidad
de los docentes. El ejercicio de la profesión es una experiencia en sí misma, sin
embargo los modelos artesanales de profesionalización, basados en el ensayo
y error, por espontáneos y naturales que sean, resultan insuficientes.
La preocupación por el tema de la profesionalización de los docentes es
mundial; en todas partes se hacen cuestionamientos al rol que están
desempeñando y la necesidad de cambios conforme las transformaciones que
se experimentan en la sociedad. Como ejemplo, veamos algunas definiciones
de rasgos de perfil del docente a nivel de educación superior (Zabala, 2,000).
Para este autor se trata de que el docente debe conocer bien la propia
materia, condición fundamental, pero no suficiente; se trata además de cómo
compartirlos con sus alumnos. Así, los docentes deben ser capaces de:
Analizar y resolver problemas.
Analizar un tópico hasta desmenuzarlo y hacerlo comprensible.
Apreciar cuál es la mejor manera de aproximarse a los contenidos cómo
abordarlos en las circunstancias presentes.
Seleccionar las estrategias metodológicas adecuadas y los recursos que
mayor impacto puedan tener como facilitadores del aprendizaje.
Organizar las ideas, la información y las tareas para los estudiantes”.
Pero, es necesario igualmente el dominio de competencias como:
Saber identificar lo que el alumno ya sabe (y lo que no sabe y necesitaría
saber).
Saber establecer una buena comunicación con sus alumnos
(individualmente y como grupo): explicar las cosas de forma que se le entienda,
mantener una relación cordial con ellos.
Saber manejarse en el marco de condiciones y características que presenta el
grupo de estudiantes con el que le toque trabajar (jóvenes de los primeros
cursos, estudiantes adultos, etc.), y ser capaz de estimularles a aprender,
pensar y trabajar en grupo. Transmitirles la pasión por el conocimiento, por el
rigor científico, por mantenerse siempre al día, etc.”
Se trata de que frente al complejo panorama inicialmente esbozado, los
docentes sean capaces de asumir nuevos retos y contar al menos con tres
herramientas fundamentales: sensibilidad, flexibilidad y conocimiento.
La sensibilidad, se vincula al área emocional, afectiva, receptiva del
educador con los hechos, problemas, soluciones y sujetos (alumnos, colegas,
padres de familia, etc.) Ser receptivo al cambio, sensible a las necesidades,
tristezas y alegrías. La flexibilidad se plantea como las capacidades para
aceptar otras ideas y propuestas, modificar o cambiar y el conocimiento está a
la base del ejercicio docente. Se trata de que, sólo el docente que conoce el
fundamento de su disciplina puede moverse con facilidad en distintos
escenarios, proponer distintos ejemplos y reconocer cuándo una determinada
situación puede ser aprovechada para producir un cambio conceptual en el
estudiante. Sólo el docente que conoce los límites de la disciplina y el lenguaje
en el cual se expresa, puede explicar por qué una determinada pregunta no es
legítima en un determinado contexto.
Conocer al interlocutor, saber quién es y qué quiere el estudiante,
conocer el proceso de desarrollo intelectual de los alumnos, conocer el
contexto de la escuela, saber interpretar las palabras y los gestos y tener
herramientas conceptuales para analizar los problemas de la relación
pedagógica es una herramienta indispensable. Para el ejercicio de la docencia.
Para lograr alcanzar la profesionalidad de la docencia se requiere que
los educadores estén conscientes de que su ejercicio profesional está
demandando un replanteamiento profundo para perfeccionar los conocimientos
y competencias específicas de esta actividad de enorme relevancia social a
pesar de la desvaloración en que se debate.
Para ello, es preciso clarificar los perfiles y trabajar de manera integrada
la formación inicial y el perfeccionamiento en servicio para alcanzar un mejor
nivel de desempeño.
En esta tarea se han invertido valiosos esfuerzos; es preciso consensuar
los aspectos que se consideren esenciales en el docente panameño
entendiendo que, aún cuando existan especificidades por nivel o modalidad
educativa existirá un conjunto de rasgos definitorios de su quehacer como
puntales que son del sistema educativo hacia el logro de sus fines
transcendentales.
En resumen, la profesión docente está siendo sometida en la actualidad
a un conjunto amplio de presiones, que reclaman una construcción de su
identidad y desempeño más compleja y con más tareas y responsabilidades,
así como una implicación personal y profesional que, a todas luces, es más
extensa e intensa.
Es evidente entonces que los nuevos escenarios escolares promueven
desafíos que suponen la profesionalización de quienes trabajan la educación.
En este sentido, mejorar la calidad y la motivación de los docentes debe
ser una de las prioridades de la agenda educativa del siglo XXI.
Rolando
MARCO LEGALCONSTITUCION POLITICA
Artículo 7. La Universidad de Panamá tiene como fines principales:
6. Fomentar la evaluación de la calidad en la realización de sus funciones.
Artículo 8. Adoptará innovaciones técnicas, metodologías modernas y
modalidades educativas apropiadas para brindar la más alta calidad en sus
servicios.
Artículo 18. Velar por la elevada calidad, la pertinencia, la eficiencia y la
eficacia de la docencia, la investigación, la extensión y la producción, así como
de los servicios en todo el ámbito universitario.
Artículo 38. 6. Evaluar al estudiante en forma científica.
Artículo 43. Son deberes del estudiante universitario, además de los que
señalen el Estatuto Universitario y los reglamentos, los siguientes:
1. Cumplir sus responsabilidades académicas con puntualidad y dedicación.
Artículo 44. Son derechos del estudiante universitario, además de los que le
confieren el Estatuto Universitario y los reglamentos, los siguientes:
1. Ser tratado con respeto a su condición y dignidad académica.
2. Recibir enseñanza de acuerdo con los planes y programas de estudios, y ser
evaluado en forma científica.
LEY 30 DE 2006
Artículo 5. El Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación para el
Mejoramiento de la Calidad de la Educación Superior Universitaria tiene como
objetivos fundamentales:
1. Fomentar y desarrollar una cultura de evaluación que asegure la calidad de
la educación superior universitaria.
Artículo 4. 2. Mejoramiento continúo de la calidad académica.1. Reconocimiento de la diversidad de instituciones universitarias y sus
diferentes modalidades de enseñanza.
Artículo 7. 1. Autoevaluación de programas o carreras.
Artículo 8. La autoevaluación institucional y la de programas deben
realizarse como procesos permanentes, transparentes y participativos, con la
intervención de todos los estamentos de la institución o del programa
Artículo 9. La autoevaluación institucional y la de programas se
complementan con la evaluación externa por pares académicos independientes
que organiza el Consejo Nacional de
Evaluación y Acreditación Universitaria de PanamáArtículo 14. El Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria
de Panamá tendrá las siguientes funciones:
1. Promover, organizar y administrar el Sistema Nacional de Evaluación y
Acreditación para el Mejoramiento de la Calidad de la Educación Superior
Universitaria.
2. Desarrollar las políticas para el fortalecimiento del Sistema Nacional de
Evaluación y
Acreditación para el Mejoramiento de la Calidad de la Educación Superior
Universitaria.
3. Elaborar los lineamientos conceptuales y metodológicos generales del
Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación para el Mejoramiento de la
Calidad de la Educación
Superior Universitaria.1. Ofrecer asesoría técnica a las instituciones universitarias en el proceso de
autoevaluación de programas y en la autoevaluación institucional, así como
velar por el cumplimiento del plan de mejoramiento institucional.
2 Realizar programas de capacitación en evaluación, acreditación y gestión de
la calidad de la educación superior universitaria, dirigidos a los organismos
responsables de dichos procesos.
3 Promover y establecer vínculos de cooperación con agencias de evaluación y
acreditación de reconocido prestigio, así como con organismos de cooperación
nacional e internacional.
Artículo 17. El Consejo Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria
de Panamá tendrá una Secretaría Ejecutiva que cumplirá las siguientes
funciones:
3. Presentar las propuestas de reglamentos al Consejo Nacional de Evaluación
y Acreditación Universitaria de Panamá, para su aprobación.
6. Proponer planes de capacitación en evaluación y acreditación de la calidad
del MARCO LEGAL. La educación superior universitaria, para el personal
comprometido en este proceso.
CONCLUSIONES
RECOMENDACIÓNES
INFOGRAFIAS
ANEXO