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Un mes de información sin rebajas JUNIO 2016
Pepe Modas Omniimp Las niñas de Carlos Maria Jesús Domínguez Olga Díaz Milagrosa Grimaldi El Ropero
Marisol Zamora Charada Boutique Pilar Fopiani Tierra Media Player vs Player Planeta 616 Zero Uno
Monai Monai Consulado de Comerciantes Veintiséis Happynk Lencería Helena Dulce Woman
Lencería Azahar Jópalo Rebeca La Burbuja Verde El Algario Manos Gaditanas Abaniquería Regla Lorenzo
Cerámica Rosso Folixa Cuero Guadalupe Clavijo Taller La Lezna Patuclín Patuclán Gitana Mora
Desde su fundación, en el año 1963, Pepe Modas se ha
ido adaptando a los nuevos gustos de la clientela e intro-
duciendo nuevas marcas en su catálogo; lo que no ha
cambiado es una de las señas de identidad del estableci-
miento: sólo vende producto nacional. Además, la tien-
da sigue siendo de la misma familia, aunque ahora es
una segunda generación la que afronta el reto que su-
ponen las redes sociales e internet.
Pepe Modas fue fundada por el matrimonio formado
por José Silva y Juana Sánchez en la calle Fernández
Ballesteros, pero no donde está ahora, sino en un local
considerablemente más pequeño situado en la acera de
enfrente, donde hoy en día hay una copistería. Con el
tiempo, el establecimiento se acabó mudando a local
más amplio, con dos grandes escaparates. Y ha habido
más cambios: ahora son dos de los hijos de la pareja
fundadora, Pascual y Juan José, los que regentan la tien-
da tras la jubilación de la anterior generación.
La larga trayectoria de esta tienda cercana al hospital
Puerta del Mar le valió ser finalista del premio “Toda una
vida dedicada al comercio” en la Primera Edición del
Premio Comercio de Cádiz (año 2010) concedida por la
Unión de Comerciantes de Cádiz con el patrocinio de
Unicaja.
Cuando abrió Pepe Modas, en la década de los sesenta,
Barcelona era la referencia del textil en el país y por tan-
to era española la ropa que se vendía, tanto en este co-
mo en los otros establecimientos dedicados al sector. Lo
Pepe Modas: con acento español
Esta tienda de ropa de señora y caballero de Fernández Ba-llesteros puede presumir de ser una de las más antiguas de la ciudad y la más veterana de la zona de San José
que era inicialmente fruto de las circunstancias ha aca-
bado convirtiendo en algo distintivo con la oferta de
otros establecimiento, en algo que destacan en el esca-
parate y en etiquetas. Sigue la filosofía, pero las marcas
van cambiando. Ahora trabajan, entre otras, con Cami-
sas Kent’s, Selinac (sastrería y prendas sport), Guasch
(pañuelos y pijamas), Abanderado (ropa interior), Old
Taylor (sport wear), Lusan (pantalón de caballero), Pers-
sa’m (punto para señora), Possum (cinturones masculi-
nos), Cencibel (corbatas) y Massana (sport). Pero el lista-
do va variando para adaptarse a los gustos de los clien-
tes. El catálogo “se está renovando continuamente con
nuevos fabricantes”, explica Pascual, quien indica que
acude a Madrid y Barcelona para renovar y buscar “las
últimas tendencias para nuestros clientes”.
Otra de las señas de identidad de esta veterana tienda
de Extramuros es la variedad de tallas. Tienen desde la
38 hasta la 58 en moda de señora y desde la 38 a la 70
en caballero. Y los precios son medios incluso en las ta-
llas grandes, contra lo que a veces suele ocu-
rrir. “Nosotros ofrecemos la garantía de trabajar con las
primeras marcas del mercado y a unos precios interesan-
tes, siempre con el propósito de satisfacer a su clientela,
que año tras año acude a Pepe Modas”, explican en el
establecimiento.
Ahora, Pepe Modas afronta el futuro con un nuevo cam-
bio: la apertura de una nueva página en internet. Hasta
ahora tenían una página en la red so-
cial Facebook donde avisar a sus seguidores de las nove-
dades que iban llegando a la tienda y situarse “al lado de
los usuarios” en las redes sociales, según ellos mismos
describen en la información que ofrecen ellos mismos
en la fanpage.
A esta nueva vía de contacto con sus clientes se une
ahora la web pepemodas.wix.com/pepemodas, un lu-
gar donde se puede ver, por ejemplo, el catálogo de
ropa, o contactar con la empresa para resolver cualquier
duda.
PEPE MODAS está en Fernández Ballesteros 9 y 11 (a pocos
metros del hospital Puerta del Mar).
Teléfono 956 20 03 21.
http://pepemodas.wix.com/pepemodas.
Variedad de tallas y
confección española
distinguen a este
establecimiento de
Fernández Ballesteros
El barrio de La Laguna acoge la única tienda de Cádiz
que imprime en tres dimensiones, Omniimp. La familia
Barragán Gutiérrez pone la técnica, el escaneo, las im-
presoras, el acabado, la laca para el pelo (sí, la laca para
el pelo)… Y el cliente, su imaginación. Porque la impre-
sión 3D sirve para hacer piezas de repuesto ilocalizables
en el mercado, pero también para convertir a alguien en
sirena o en piloto de algún vehículo de fantasía. O para
hacer un retrato original a los niños que celebran su
primera comunión. Para lo que pida el cliente.
Todo empezó por la afición de Pablo Barragán por la
impresión tridimensional. Descubrió esta técnica por
internet y le llamó tanto la atención que quiso aprender
cómo se hacía, al principio de forma autodidacta. Com-
prar uno de esos aparatos no es tan caro como puede
parecer. Según explica, el precio es inversamente pro-
porcional al tiempo que hay que emplear en montarla: si
el aparato cuesta 500 euros, el tiempo estimado de
montaje no bajará de 10 horas. Si cuesta el triple, será
cuestión de segundos. Después del largo montaje, el
aparato está listo para generar… sus propias piezas, pues
el fabricante recomienda imprimir, en primer lugar, los
recambios. Y después, lo que haga falta. Pablo estuvo un
año en la trastienda del negocio de sus padres apren-
diendo a imprimir en 3D. Y cuando se atisbaba que esto
podía convertirse en un medio de vida, recibió forma-
ción en BQ, la empresa de telefonía móvil, impresoras
3D y robótica española de la que Omniimp se ha con-
vertido en proveedor oficial. Una empresa que, por cier-
to, consiguió en 2015 el premio Cortes de Cádiz. En La
Omniimp: Fantasía 3D en familia
La única tienda que realiza figuras en tres dimensiones en Cádiz está en el barrio de La Laguna y surgió de la afición de un joven por esta novedosa técnica
Laguna se pueden comprar los aparatos, el material
para imprimir (PLA), que se vende por bobinas de un
kilo por 20 euros, y los teléfonos móviles de la marca.
Y es que lo que empezó como una afición se convirtió el
pasado mes de diciembre en un negocio familiar en la
calle Pintor Zuloaga que evitó que Pablo acabara de
auxiliar en una clínica veterinaria de Londres. Trabaja
con su hermano, al menos de momento: Javi ha estudia-
do Bellas Artes y a partir de septiembre comenzará a
formarse en animación en 3D fuera de la ciudad.
En una de las películas de la saga de Jurassic Park entra
en funcionamiento una impresora 3D antes de que el
común de los mortales sospechara que alguna vez esta
tecnología existiría y sería accesible. Esperanza Gutiérrez,
madre de Pablo y Javi, fue una de las espectadoras a las
que le llamó la atención la escena y pensó en la butaca
del cine: “Ojalá existiera algo así”. Ahora es la empresaria
‘titular’ del negocio, un auténtico ciclón que después de
una dilatada experiencia profesional en Caja Madrid,
empezó a trabajar con su marido en la oficina de Allianz
en la Cuesta de las Calesas. Esperanza ha pasado de las
cuentas bancarias a los seguros y a llevar de forma conti-
nuada una versión ‘pitufa’ (pequeña y azul) de ella y su
marido en el bolso para no perder ni una oportunidad
de promocionar el nuevo negocio familiar; porque eso,
actualmente, es uno de los temas que más le preocu-
pan: cómo dar a conocer la tienda.
La singularidad de este comercio no se queda en que es
la única que oferta esta tecnología en la ciudad: también
en que se ha centrado en la parte más artística de la
impresión 3D y que lo hace a unos precios muy asequi-
bles. Un ejemplo de lo segundo: Los dos aparatos de
que disponen pueden crear figuras de personas esca-
neadas. Una pequeña, de siete centímetros, cuesta cinco
euros; la mediana, de 12, 20 euros, y una de 16 centíme-
tros, 40 euros. Pablo tiene, sobre su mesa, tres réplicas
de niñas de primera comunión en estos tamaños. Es
uno de los productos más demandados. Cuando el niño
o la niña van a hacerse las fotos, ellos se desplazan al
estudio del fotógrafo y le escanean; es cuestión de cinco
minutos. Después, lo imprimen en el tamaño elegido (En
este vídeo promocional se puede
ver el proceso). El precio de las
figuras monocromas realizadas a
partir de escáneres de personas
está estandarizado, pero para el
resto de encargos entran en
juego multitud de variables que pueden hacer variar el
precio, como el tiempo de impresión, la calidad (la im-
presora puede hacer capas desde 0,05 a 0,3 milímetros,
y las más delgadas procuran más calidad), o si la figura
está pintada o sólo tiene el color del material del que
está hecho, por ejemplo.
Una de las dos impresoras de este comercio gaditano ha
‘liberado’ de las dos dimensiones del papel a un perso-
naje de cómic creado por una conocida, explica Javi. En
estos meses, esta familia ha hecho ya un poco de todo;
ha escaneado y reproducido el paso de Jesús Caído y
ha recreado el robot Glados del videojuego Portal, con
luz led y todo; ha fabricado repuestos de estores y hasta
el rótulo del propio local; ha hecho llaveros, castillos y ha
dado cuerpo a dibujos infantiles. Han creado instrumen-
tos de viento, ocarinas, que funcionan. No faltan las imá-
genes propias de videojuegos o de sagas con tantos
admiradores como La guerra de las Galaxias. Han hecho
teclas de ordenador personalizadas. Y uno de los encar-
gos más singulares es un llavero con forma de máscara
que tiene por bigote dos brazos musculosos. Lo de los
brazos es raro, pero los usuarios de thingiverse.com, un
lugar en Internet donde se pueden encontrar diseños
de todo tipo listos para la impresión en 3D, últimamente
le ponen brazos musculosos a las piezas más insospe-
chadas.
La impresión tiene alguna limitación, aunque salvable: el
tamaño máximo de cada pieza es de 19 centímetros,
pero se pueden combinar varias piezas para crear figu-
ras mayores. De una foto no se puede sacar la figura,
pero sí una especie de postal con relieve si la imagen
tiene suficiente calidad. El escaneo es rápido, pero el
escaneado tiene que estar quieto, algo que puede supo-
ner un reto a la hora de inmortalizar a mascotas. Tam-
bién tiene que estar quieto, por cierto, el material en la
placa de cristal donde se imprime la figura: para eso sirve
la laca para el pelo del primer párrafo.
OMNIIMP está en Pintor
Zuloaga, 33, a pocos metros
del Fondo Norte del estadio
Carranza. Teléfono
856071974.
www.omniimp.com
Esta peluquería abrió sus puertas nada menos que en el
año 68. La fundó Carlos López Rodríguez y la llamó Car-
los Macavi, aunque con el tiempo cambió el nombre y
se quedó sólo en Carlos. Allí entró a trabajar en el 86
Manoli Alba y cuatro años después, Carmen Dulce. Este
sector, el de la peluquería, no se caracteriza precisamen-
te por la estabilidad laboral, reconocen. “Pero Carlos ha
preferido siempre cuidar lo que tiene; ha preferido profe-
sionales porque ve que la clientela está contenta”, expli-
ca Alba.
Durante todo este tiempo, alguna vez se habían imagi-
nado como dueñas del establecimiento donde trabaja-
ban. O independizándose y creando su propio negocio.
Pero siempre habían sido sueños. No parecía que fuera
a suceder ni siquiera cuando Carlos López se jubiló, hará
ya diez años, aunque eran muchas las clientas que las
reclamaban como 'herederas' naturales del negocio.
Pero, para su sorpresa, fue el mismo Carlos quien se lo
acabó proponiendo a las ahora socias hace un par de
años. Desde finales de enero de este año, Manoli y Car-
men son las orgullosas propietarias de una peluquería
que mucho ha cambiado desde entonces. Han pasado
de la ilusión al miedo por convertirse en empresarias, del
miedo a poner manos a la obra para modernizar su
peluquería, y de ahí a estar muy contentas con la res-
puesta de la gente, aunque aún algo inquietas por tener
que enfrentarse a los “recibos”.
Las ahora socias consiguieron sin problemas un crédito
Mismo
trabajo,
aventura
nueva
Quién les iba a decir a Manoli y a Carmen que, después de décadas tra-bajando en el mismo sitio, un día abrirían la puer-ta nerviosas, estrenándo-se y con mucho que aprender. Porque siguen en la misma peluquería de siempre, pero ahora no son las empleadas, sino las empresarias: Las niñas de Carlos.
Familiares y amigos se
han volcado en la
reforma del local hasta
el último detalle
y se embarcaron en una obra que dejó al establecimien-
to irreconocible y a algunas clientas despeinadas, por-
que la fidelidad de algunas parroquianas llegó a tanto
que pasaron semanas sin ir a peinarse a la espera de la
reapertura. “Otras nos reñían por la calle por tener cerra-
do”, explican. La reforma, que ha dejado la entrada prac-
ticable para sillas de ruedas y carritos de niños y un inte-
rior muy diáfano, pasó muy deprisa y se hizo más lleva-
dera con la intervención de la familia, cuyas aportacio-
nes son ahora visibles en la renovada peluquería. Ma-
nuel Carrera Cortés, diseñador gráfico y hermano de
Carmen, empleada del establecimiento, es autor del
nuevo logotipo que luce sobre la puerta. Natividad Pé-
rez, que es sobrina de Manoli y toda una artista de las
manualidades y la artesanía, ha reciclado peines, creado
cajas y envuelto de color cualquier detalle que pudiera
desentonar con la nueva decoración.
Por fin, el día 4 de abril de 2016 abrió las puertas la pelu-
quería con nueva dirección y su nuevo nombre. Las
socias le dieron bastantes vueltas, pero finalmente deci-
dieron homenajear al que fue su jefe durante décadas,
al que hizo posible el sueño de convertirse en propieta-
rias: a Carlos. Al fin y al cabo, ya todo el mundo les llama-
ba “las niñas de Carlos” en el barrio ¿Por qué no llamar
así al establecimiento? Carlos, al principio, no se lo
creía. Y cuando se lo creyó, se le saltaron las lágrimas por
el gesto de Manoli y Carmen.
El día 4 de abril fue lluvioso, pero la clientela lle-
gó. Algunas de las habituales estaban esperan-
do, impacientes, y no dejaron pasar ni un día.
También llegaron caras nuevas, atraídas por los cambios.
Ellas hacen lo posible para que su clientela acuda: ade-
más de sus años de experiencia, ofrecen al cliente nue-
vas ofertas (8 euros peinar de lunes a miércoles, 18 eu-
ros cortar y peinar toda la semana, un descuento en
color los martes y tarjetas de fidelidad) y “mucha ilusión”.
De momento, la fórmula está dando resultado. Además,
son bastante optimistas sobre la evolución de un sector
que ha estado muy castigado por la crisis y por el au-
mento del IVA. “Yo veo buenas perspectivas. La verdad
es que si me lo hubiera propuesto hace siete años, me lo
hubiera pensado”, reconoce Manoli. La peluquería, ade-
más de local, estrenó recientemente una página de Fa-
cebook en la que todas las opiniones le dan cinco estre-
llas. “Si amas lo que haces ni los lunes te quitan las sonri-
sas”, proclaman en uno de los memes que comparten
en este perfil en la red social, donde informan de nove-
dades como la wifi gratis en el establecimiento y donde
han hecho constar el agradecimiento a Carlos López por
“haber valorado años de entrega y esfuerzo”, a la cliente-
la por su fidelidad, a la empresa que les ha realizado la
reforma por el resultado, a familiares y amigos por todo
el apoyo.
Las niñas de Carlos está en
General García Escámez, 5
956 018 528. En Facebook
¿Alguna boda en el horizonte? ¿Quizás una comunión? Estrena Cádiz
ha visitado algunas de las tiendas de la ciudad que ofrecen ropa para
fiesta para saber qué es lo que más se vende y a qué precios. Y la res-
puesta a la primera pregunta es casi unánime: vestidos tipo Vel-
vet para las invitadas a las comuniones y monos para las madres o
para las bodas. También tienen mucha demanda los trajes sobrios y
elegantes animados con complementos grandes y llamativos. Los co-
lores pasteles han irrumpido con fuerza pero no han desterrado a los
azules, los verdes o al buganvilla.
En el casco histórico hay donde elegir para encontrar ropa que lucir
en una ceremonia. En la calle Columela, 11 está María Jesús Domín-
guez. Este establecimiento se especializa en vestidos de fiesta y allí co-
mentan que este año les piden trajes sencillos para combinar con
complementos grandes y vistosos. Los trajes cortos siguen siendo para
las comuniones y los largos, para las bodas por la tarde y también para
graduaciones. Los tonos pastel son los más demandados. Esta tienda
ofrece vestidos desde los 65 hasta los 1.200 euros y con tallas que van
desde la 38 a la 54.
Muy cerca de esta tienda está Olga Díaz, en la esquina de Arbolí con
Compañía. Venden fiesta y también trajes de boda y de comunión.
Begoña, la encargada del establecimiento, explica que lo que más le
demandan para acudir a las comuniones es el vestido cortado a la
cintura, de la que surge una falda tableada y amplia. Lo buscan tanto
en versión lisa como estampada. Es un vestido que está en todos los
escaparates y que muchas quieren porque lo ha visto antes en televi-
sión, en una serie que incluso ha rebautizado este estilo sesentero: el
Velvet. Un estilo que, por cierto, antes se conocía como Pin-up. Otra
cosa son las bodas, donde triunfan encajes y transparencias en la es-
palda. Los pasteles conviven con los azules y el buganvilla, que siguen
Cádiz de
fiesta:
Velvet y
monos
El estilo de la serie televisiva inspirada en los sesenta arrasa entre las invitadas a las comuniones y bodas que tanto proliferan en esta época del año
Charada Boutique
está en la Avenida,
a la altura del
Estadio Carranza
La calle Columela
acoge a la tienda
de María Jesús
Domínguez
Olga Díaz está en
la esquina entre las
calles Compañía y
Arbolí
estando muy demandados. Y en cuanto a los tocados y complemen-
tos, en esta tienda destacan el sombrero canotier y los tocados gran-
des. En Compañía se pueden encontrar vestidos desde la talla 38 a la
59 -aunque también se hacen a medida- y con unos precios que van
desde los 80 a los 1.000 euros.
Un precioso Velvet preside uno de los escaparates de la pequeña tien-
da de Milagrosa Grimaldi, en Sánchez Barcaiztegui. Dentro, Jacinta, se
hace las pruebas para un elegante vestido largo de madrina; en esta
tienda las tallas van desde la 38 a la 54 pero también se trabaja a me-
dida.
Milagrosa abrió hace tan sólo unos meses en el mismo lugar donde ya
había una tienda similar. Vende el Velvet -es lo que se llevan el 80%
de sus clientas invitadas a bodas- y también monos. El mono se ha
convertido en una opción elegante y ponible que gusta especialmen-
te a las madres de los niños de primera comunión. Líneas sobrias y
elegantes y complementos llamativos (cinturones y abalorios) son las
tendencias predominantes. Junto a la plaza de Vargas Ponce, los colo-
res más demandados coinciden con los de Compañía y los precios
van desde los 70 a los 660 euros.
Visitamos otras tres tiendas en la zona de Puerta Tierra. En Ciudad de
Santander, 6 destaca un escaparate en el que todas las prendas tienen
el color rosado de la temporada. El Ropero tiene ropa de fiesta a pre-
cios muy asequibles y sus clientes optan por la pedrería y el encaje y
por el tradicional traje largo para bodas por la tarde y el corto para
enlaces mañaneros y comuniones. Sus tallas van desde la S hasta la XL.
Un poco más adelante, en Varela, Marisol Zamora apuesta por un
estilo minimalista, donde predomina el liso sobre el estampado. Mo-
nos, velvet, el cuello halter y los estampados (flores y lunares) son lo
más demandado. Precisamente, son estos estampados los que hacen
que algunos vestidos largos se vuelvan mañaneros. Ines Roa habla de
una opción versátil los pantalones palazzo, de pernera ancha. La ga-
ma de colores es pastel pero también verde, pistacho y musgo, pero el
negro parece haber quedado desterrado. Con respecto a los comple-
mentos, destacan los collares “muy potentes”, los bolsos metalizados,
rígidos y, para la mañana, un estilo más rústico. Las tallas en esta tien-
da de Doctor Gómez Plana van de la 38 a la 48 y tienen una amplia
variedad de precios.
Charada está en Cayetano del Toro, 42, más o menos a la altura del
estadio. Teresa Crespo nos explica algunas de las singularidades de la
tienda, como que sólo venda ropa española (o al menos fabricada en
España, como ocurre con la firma Manía) o que tenga en exclusiva en
marcas tan demandas como Dolores Promesas o Poète. De la primera
nos muestra un nuevo Velvet, con los estampados que caracterizan a
la marca y un vestido largo, con llamativas rayas y cuello smoking, y de
la segunda, un vestido de gasa color menta, vaporoso y romántico. En
la Avenida, las tendencias también afianzan el triunfo del mono para
las ceremonias y del estilo sesentero para comuniones, aunque Teresa
apunta que algunas madres aprovechan la ocasión para lucir largo.
También tiene demanda en su tienda el pantalón palazzo. El encaje es
la opción preferida por las invitadas más clásicas. Los complementos
son grandes y se llevan los cinturones con flores. Es una artesana gadi-
tana, El Atelier de Gema, la que surte a Charada de estos accesorios.
Los colores pasteles, verdes, los inevitables azules, blancos… destacan
entre las preferencias de las clientas que trabaja desde
la talla 38 hasta la 46 (sólo disponible en algunas mar-
cas; Dolores Promesas, por ejemplo, se queda en la
42). Entre los modelos más demandados, los precios
oscilan entre los 110 y los 249 euros.
Marisol Zamora
está en Doctor
Gómez Plana
(Varela)
El Ropero está en
Extramuros, en la
calle Ciudad de
Santander
Milagrosa Grimaldi,
junto a Vargas
Ponce (muy cerca
de San Francisco)
Presentadoras como Miriam Peralta (Onda Cádiz) y Soco
López (Canal Sur) han llevado sus prendas en la retrans-
misión del concurso de agrupaciones del Falla y han
hecho reconocible a primera vista el estilo de esta gadi-
tana afincada en San Fernando.
Pilar, de chica, cogía cualquier tela –servilletas, el trapo
de limpiar el polvo – que tuviera su madre por casa y le
hacía vestidos a las muñecas. Y no es porque imitara a
nadie, porque en su casa no le daban a la aguja. Simple-
mente, le “encantaba”. Diseñaba vestidos con trapos y
dibujaba nuevos modelos a los recortables de papel, un
camino que le llevó al taller de Corte y Confección situa-
do junto a su colegio con tan sólo 12 años. Fue la edad
en la que estrenó la primera prenda que había salido de
sus manos, lo primero que aprendió a confeccionar allí
porque es lo más fácil: una falda. En este taller, Pilar era
la niña, la única pequeña (incluso la única joven) en un
lugar lleno de señoras mayores. Otros niños se burlaban
de ella, pero Pilar lo que quería era aprender, y este taller
se le quedó chico muy pronto: quería una titulación,
patronear, aprender a diseñar. Y por eso, a los 14 años,
estaba en una Academia de La Isla que seguía el méto-
do Marti. Y a los quince vistió a su primer novio de arriba
abajo con un traje chaqueta (chaleco inclui-
do) confeccionado por ella para que fuera a la fiesta de
Fin de Año. Con estos mimbres, comenzó muy pronto a
hacer arreglos de costura mientras seguía con una for-
mación que siempre le sabía a poco: hizo un año de
sastrería, dos años en la Escuela de Arte haciendo Estilis-
mo e Indumentaria, dos años de Patronaje Industrial en
Sevilla… Y entre estudio y estudio, siguió trabajando para
diseñadores como Gabriel Vielman London, por ejem-
plo.
“Hay un momento en el que estás en un desfile. Toda la
ropa la has confeccionado tú, pero la ha diseñado la
persona para la que trabajas, y es quien sale al final.
Cuando se ve aplaudir a otro después de estar muchas
horas cosiendo te preguntas ¿por qué no lo hago yo?”.
Fue así, en un desfile, cuando Pilar maduró el impulso de
dejar de trabajar para otros y crear su propia colección. Y
lo hizo hace dos años.
El diseñador londinense aplicaba una técnica para es-
tampar las telas que es la que quiso realizar esta gadita-
na. Le costó encontrar quien hiciera ese proceso, pero lo
consiguió y sus prendas comenzaron a gustar. Camise-
tas, vestidos y demás se fueron cubriendo con los colo-
res y las formas de Cádiz: de la Caleta, del teatro Falla… Y
es que Pilar es de las que se va de viaje con la camiseta
del Cádiz. Le gusta llevar su tierra allá donde va, pero
quería algo diferente, con una estética más elegante
Presentadoras de
televisión han llevado
al concurso del Falla
sus creaciones
Pilar Fopiani: Tela de Cádiz
Pilar Fopiani traía al nacer un alfiletero debajo del brazo en lugar del pan. Hacer ropa ha pasado de ser su juego favori-to a un negocio abierto en la calle Rosario.
que la que ofrece la equipación deportiva.
La colección debutó en un desfile en Rota hace dos
años. Entonces, en los inicios de su aventura como em-
prendedora, aún no estaba la tienda de la calle Rosario.
En esta breve trayectoria ha habido dos grandes cam-
bios: la adquisición de la maquinaria necesaria para es-
tampar las telas con una ayuda de la Cámara de Comer-
cio, y la apertura de la tienda en la capital gaditana. La
maquinaría ha supuesto un avance muy importante:
para que encargar la realización de este proceso le salie-
ra rentable tenía que encargar de una vez 50 metros de
tela, lo que hacía que los encargos se acumularan.
Cuando adquirió la maquinaria, la instaló en una nave
de Fadricas, en La Isla, en la parte superior. En la planta
baja estaba la tienda. El lugar era
barato, pero no visible, así que des-
pués de una larga búsqueda, el 7
de diciembre de 2015, Pilar dejaba
el polígono industrial y abría en un
pequeño local de la calle Rosario, en
el casco antiguo de Cádiz y en una
zona con bastante transito ¿Y las
máquinas? “En mi casa. Entre el
salón y una habitación”.
En el perchero de la calle Rosario
hay un vestido estampado con el
Falla. En el cielo, sobre el teatro, está
la imagen de Paco Alba. Cuesta 50
euros y es el conocido popularmen-
te como ‘vestido Miriam’, un de los más demandados.
Se llama así porque lo lució Miriam Peralta, presentadora
de Onda Cádiz, en una de las retransmisiones del Con-
curso Oficial de Agrupaciones del Carnaval 2015. Pilar
contactó con ella a través de una prima y la periodista
accedió del tirón a lucir sus prendas. De ahí vino la en-
trevista en el Falla con Juan Manzorro (Canal Sur), y esta
es la explicación de que el vejeriego tenga una corbata
de Fopiani y de que Soco López también haya lucido
estas prendas en el Carnaval 2016.
En su tienda hay corbatas hasta collares, vestidos, cami-
sas o camisetas, y los precios oscilan de los 16 euros de
un collar o los 20 de una corbata a los 55 ó 50 de un
vestido. Muchos van a por un regalo especial y eligen de
lo ya confeccionado o bien
encargan lo que quieran. Las
fotos de Cádiz son de Pilar o
expresamente cedidas –
colabora mucho con
ella Luis Antonio Fer-
nández, quien administra un grupo de Facebook, Tacita
de Plata, donde se comparten fotos de la ciudad- y son
tratadas digitalmente y después impresas en tejido de
poliéster. Se pueden encargar prendas de diversos tipos,
todas diseñadas y confeccionadas por esta artesana, y
elegir entre un banco de imágenes. También se puede
pedir la estampación de una imagen en concreto, como
ocurrió con un fan de la comparsa de Martínez Ares que
creó una prenda con la cara de uno de los componen-
tes, ataviado con el tipo de Los Cobardes. Eso sí, Pilar es
cuidadosa con los derechos de autor de las imágenes y
se aseguró de que había los permisos oportunos; de
hecho, gente que vio la prenda y la quería se ha llevado
una negativa: el permiso fue individual, para ese caso
concreto.
Una de las ventajas de trabajar a medida es la variedad
de tallas; de hecho, hace bastantes para personas
de tallas grandes. Regalos para comuniones y bodas
están dando actividad a la tienda de Rosario durante
este mes. Hasta un regalo para un hijo que está en Chi-
na. Esta gaditana sigue intentando promocionar su ne-
gocio.
Además de en Rota, sus diseños han desfilado en San
Fernando, Chiclana y Cádiz, y ahora se plantea organi-
zar un nuevo evento, quizás para alguna causa benéfi-
ca, como fueron los de Chiclana (lucha contra el cáncer)
y San Fernando (Asperger). Mientras, continúa creando
en casa y vendiendo en una tienda que, como su ropa,
está impregnada de Cádiz de arriba a abajo.
PILAR FOPIANI está en Rosario ,31 y en Facebook
En Cádiz hay cuatro tiendas que se dedican a la venta de artículos
para los cada vez más numerosos frikis. Curiosamente, se concentran
en prácticamente dos calles: hay dos en José del Toro, en el centro
de la ciudad, y las otras están en las contiguas Pintor Zuloaga y Go-
ya, en La Laguna. Son tiendas muy especiales, casi todas con trastien-
das que se convierten en salón de juegos. Tras estos escaparates se
esconde el proveedor nacional de un juego clásico de mesa cana-
diense y una tienda online de camisetas impresas. Y también los or-
ganizadores de muchas actividades relacionados con el juego o el
mundo friki.
En José del Toro, 6 está Tierra Media desde hace dos años, pero la
historia viene de lejos. Antonio Chaves tenía una tienda en Antonio
López, Legends y Alvaro García, su amigo “de toda la vida”, La Co-
marca de Sanlúcar; de hecho, Antonio fue el pionero en el frikismo
gaditano, cuando inauguró hace 18 años una tienda en Jerez, Unli-
mited. Ambos, junto a Manuel Oliva, crearon Tierra Media.
Es bastante más que una tienda. Los socios (también hay un emplea-
do, José María) son unos frikis de la cabeza a los pies que están todo
el tiempo tramando nuevas actividades. Sería más fácil resumirlo en
que todo sarao friki, manga o de juegos de mesa que se organice en
Cádiz o cercanías tiene algo que ver con ellos. También están en la
Feria del Libro esta semana, con stand propio y participando en char-
las; van a colegios, a la Universidad y donde haga falta. En la tienda
hay actividades diferentes de forma permanente, por lo que lo mejor
es estar atento a su web o su Facebook. Tienen actividades fijas, co-
mo los sábados con partidas de demostración de juegos, que son el
tercer sábado de cada mes en la tienda de Cádiz, aunque cualquier
sábado se puede jugar en la trastienda de Tierra Media. También
tienen un Mercadillo Friki los primeros sábados de cada mes: cual-
quier cliente puede traer algo y, si se vende, quedarse con el 70% del
efectivo o el 100% del importe en productos de la tienda. “Funciona
muy bien y se encuentran bastantes chollos”, asegura Álvaro.
Ya desde el principio descartaron montar sólo una tienda de cómics,
porque es muy complicado que sea rentable en una ciudad como
Cádiz: haría falta vender mucho. Así que fueron diversificando. Tie-
nen un poco de todo en materia de frikismo (cartas, Manga, libros,
figuras…), pero quizás lo que más les distinga son los juegos de mesa.
“En las charlas preguntamos y la gente sólo recuerda como juegos
de mesa al Monopoly, el Trivial y poco más, y son juegos que tienen
más de 70 años. Pero todos los años sale un buen puñado de juegos
nuevos y algunos son muy buenos”, explica Álvaro. En Tierra Media
se puede encontrar una buena colección de juegos diferentes y muy
interesantes. Pero quizás el más especial es el crokinole, un juego de
mesa canadiense similar a una diana horizontal sobre la que hay que
impulsar unas fichas de madera para desplazar al adversario. El juego
tiene más de 200 años y ellos ya han organizado el primer campeo-
nato en Cádiz. Estos gaditanos son distribuidores nacionales de este
juego, los únicos que lo venden directamente al consumidor final.
En la calle José del Toro, cerca de Ancha, disfrutan de lo que ha-
cen. “Lo que no está en internet es que te digan: ‘prueba esto’. Esta-
mos contentos de que la gente esté contenta. Esta es nuestra afición,
nuestra vocación antes que nuestro método de sustento”, explica
este socio. Ellos se lo pasan bien planificando nuevas actividades, y
cada vez más gente se siente atraída por este mundillo: “Ahora todo
el mundo quiere ser friki”, explica, algo de lo que ‘culpa’ a la serie Big
Bang Theory o a las películas de superhéroes.
Esos inadaptados que vi-vían en su propia fantasía épica se han hecho le-gión y la serie de Juego de Tronos se ha converti-do, literalmente, en un re-galo digno de un rey.
Tierra Media, en
José del Toro, es
distribuidor del
juego crokinole
Player vs. Player
está en el último
tramo de José del
Toro
Tiendas
frikis: La
trastienda
da juego
“El punto de inflexión fue cuando Ironman salió en un anuncio de
Audi, hará 3 ó 4 años”, asegura Antonio Calvario, empleado
de Player vs. Player (José del Toro, 29; también tienen tienda en Je-
rez). Explica que la generación de chavales que se crió con los iconos
considerados frikis ya es adulta y ahora “pasa el testigo a sus hijos”.
De ahí que muchas veces considere la tienda como una “juguetería
para adultos”.
Player vs. Player, también tiene trastienda, mesas y sillas para juegos
que se ocupan cada viernes y sábado con gente de toda edad y
condición, y organiza diferentes competiciones. Y es que los juegos
“están de moda, están volviendo con fuerza porque la gente no tie-
ne dinero para salir. Ya no juega sólo el friki, sino gente de toda edad
y condición”, asegura. La tienda tiene los anaqueles llenos de figuras
y detalles para hacer las delicias de los seguidores de Starwars, el
Señor de los Anillos (por cierto, el Uruk-hai de la foto no se vende),
Juego de Tronos, superhéroes varios, miniaturas y sus pinturas… y
tiene un servicio de reserva, con un descuento, para los coleccionis-
tas.
Más allá de las Puertas de Tierra, en La Laguna, está Tierra 616, que
es como llaman al Planeta Tierra en el mundo Marvel, que apasiona
al propietario. Es la tienda más reciente de Cádiz, abierta en septiem-
bre de 2015 por Francisco Javier Romero. Antes era militar, aunque
se retiró tras un accidente, así que decidió montar algún negocio
que le gustara, y un conocido le dio la idea de montar una tienda
friki. “Al principio fue complicado”, explica, porque la mayoría de sus
potenciales clientes habían jugado poco, pero con el tiempo se ha
dado cuenta de que se le da bien ‘vender’ este mundo de los juegos,
y ahora en la trastienda de Pintor Zuloaga, 6 se puede encontrar
gente jugando cada día, y especialmente los fines de semana
(también abre los domingos). “Viene gente desde los 13 años y los
50, y hasta padres con el carrito del bebé”, explica. Juegan a las car-
tas, a Magic o a un juego que ahora está pegando fuerte, el Forcei
of will, entre otros. Hay torneos y sesiones de aprendizaje en el hábi-
tat adecuado para un friki: rodeado de las inevitables miniaturas,
regalos y artículos de colección.
Casi llegando a la plaza Reina Sofía, en el número 11 de la calle Go-
ya, completamos el recorrido en la tienda más veterana y la única
que no tiene trastienda: Zero Uno. Alejandro Sánchez abrió este esta-
blecimiento hace aproximadamente una década porque le gustaba
y vio la oportunidad de negocio. Es el menos optimista sobre la mo-
da friki: ha vivido una crisis que no se acaba nunca y recuerda los
tiempos anteriores, los buenos tiempos en los que la gente compra-
ba con más alegría. Por ejemplo: No hay comparación, explica, entre
las ferias anteriores a la crisis y las actuales: ahora son una lotería, por
lo que hay que pensarse muy bien si ir o no. “Después de once años,
me conformo con mantenerme”, explica.
Alejandro se ha especializado en merchandising y, sobre todo,
en artículos serigrafiados: tazas, camisetas… Tiene tienda online
(www.elpalaciodejabba.com) en el que vende estos artículos perso-
nalizados, aunque también se puede escoger de un amplio catálogo
que abarca todos los temas frikis imaginables.
Cuatro tiendas para elegir qué hacer, a qué jugar o qué
regalar en el próximo Día del Orgullo Friki y cuyas estante-
rías llenas de objetos hacen que en Estrena Cádiz sonria-
mos acordándonos de los mathom de los pequeños hob-
bits. Ya sabéis: el que no sea friki, que levante…
Tierra 616 está en
el barrio de La
Laguna, en Pintor
Zuloaga
Zero Uno, en la
calle Goya, es la
más veterana de
las tiendas frikis
Rosario cuenta desde la tarde del día el 6 de mayo con
una exótica vecina: rubia, ojos azules y Venckute de
apellido. Arquitecta y lituana por más señas, pero una
lituana que habla un perfecto español. Es Simona, la
propietaria de la flamante tienda y taller de abalorios y
complementos, Monai Monai.
El viaje desde su tierra natal lo hizo por amor: en el país
báltico conoció a un erasmus gaditano que la enamo-
ró. Después ella misma participó en este programa eu-
ropeo para universitarios, aunque en Gandía
(Valencia). Y desde hace tres años, vive en Cádiz.
Acostumbrada a llevar una vida muy activa en su país,
en el que compaginaba sus estudios con diferentes
responsabilidades relacionadas con el mundo estudian-
til (era la presidenta de los mentores de Erasmus y de
los alumnos de su facultad), los primeros tiempos de
descanso obligado en Cádiz fueron un gran impacto.
Ya le habían dicho que encontrar trabajo en la ciudad
era muy difícil, pero ella era optimista y probó suerte en
la hostelería. Lo único que consiguió fue una breve y
mala experiencia, así que decidió emprender por su
cuenta.
Simona decidió convertir su hobby durante muchos
años, el diseño y creación de bisutería y complementos,
en un negocio. Se enteró bien de las ayudas existentes
y su proyecto consiguió un crédito piara emprendedo-
res.
Ahora, en la calle Rosario se pueden encontrar las
Monai Monai: Arquitecta de complementos
El amor ha traído a la lituana Sonia a vivir a la capital gadi-tana, donde ha abierto una tienda-taller donde vende sus creaciones y las piezas para hacerlas
obras de esta amante del estilo boho y también las
piezas que sirven para realizar creaciones propias. Simo-
na vende collares con plumas naturales de gallo, cintu-
rones con flores, pamelas o canotiers (y más tipos de
tocados, collares, anillos y pulseras) y adorna sus crea-
ciones con pompones,
flecos, cuero… Acaba
de adquirir una máqui-
na para grabar el metal
y ahora está empezan-
do a aprender la técni-
ca, que pronto añadirá
a sus creaciones.
Lo que no se encuen-
tra ni en sus comple-
mentos ni en las piezas
que vende es el níquel.
Ella misma es alérgica a
este metal, así que lo ha
desterrado de su tien-
da, donde sí
hay piedras naturales como la amatista, el cuarzo o la
lava, entre otros materiales. Estas piedras, indica, son
difíciles de encontrar en otras tiendas similares de la
ciudad.
También se pueden comprar aquí cristales de Swarovs-
ki, sedas, cuerdas, cuero, y los básicos para engarzar,
que tiene bañados en plata. Próximamente quiere aña-
dir al surtido en venta las herramientas para hacer bisu-
tería y revistas y libros especializados.
A quienes deseen dar rienda suelta a su creatividad, les
asesora. Si alguien dice que le gusta una pieza en con-
creto, les explica cómo pueden combinarla con otras
para obtener un anillo, un pendiente… “Lo mejor es la
libertad total para crear. A mí me encanta”, explica.
En esta pequeña tienda de la calle Rosario, que hace
esquina con el callejón de San Andrés, los collares de
plumas naturales cuestan 24 euros, pero también los
hay de 16 euros y pulseras de 19, 15 ó 14, dependien-
do de los diseños.
Simona, de momento, ha dejado la arquitectura a un
lado para construir complementos en su tienda taller,
en la que ahora sueña con diseñar también bolsos y
zapatos.
Monai Monai Abalorios y Complementos está en él número 37
de la calle Rosario. Tiene Facebook e Instagram.
Las piezas están libres
de níquel y no falta un
amplio surtido de
piedras naturales
Javier Benítez Muñoz, gerente en Animarte y la tienda
Usted Está Aquí, es el Portavoz de la agrupación. De esta
tienda de regalos culturales surgió el germen de una
nueva entidad que no tiene cuota ni estatutos, pero sí
una filosofía. Apoyo, colaboración, bien común. Concep-
tos de los que se nutre el Plan C, en el que también parti-
cipa.
-Pregunta: En vuestra presentación habláis del próximo
Tricentenario de la Casa de contratación y el Consulado
de cargadores de Indias como el impulso para crear la
asociación ¿Significa esto que os implicaréis de alguna
manera en la conmemoración?
-Respuesta: Por un lado, llevábamos tiempo hablando
entre amigos y comerciantes de la calle sobre la situa-
ción, comentábamos que deberíamos hacer algo en la
calle porque tiene unas características chulas: es peato-
nal y hay comercios especiales que son apuestas perso-
nales muy arriesgadas. Por otro lado, nos agrupamos
colectivos y empresas para hacer propuestas de cara al
Tricentenario, con el nombre de Cádiz 2017, y hubo una
reunión a la que acudieron todos los partidos e institu-
ciones. Entre el grupo de gente que hace propuestas
está Animarte y Usted está aquí y hemos presentado
algunos proyectos: dentro de estas propuestas está un
plan de dinamización comercial de la calle José del Toro
aprovechando la efemérides. Como con Animarte hago
rutas, y hago rutas del XVIII, vi clara la relación entre la
historia de la ciudad y lo que queríamos hacer. Presenté
el proyecto a mis vecinos comerciantes y cuajó: hablas
con ellos y ves que hay una inquietud y que lo que hace
falta es un poco de abono. Estoy convencido de que
antes o después se hubiera hecho algo en esta calle
El día 12 de mayo de 1717, Felipe V firmó la orden por la que se trasladó la Casa de la Contratación y Consulado de Cargadores de Indias a Cádiz. 299 años después ha nacido la agrupación de co-merciantes (que no asociación) que trata de apoyarse en esta efe-
mérides para fomentar la actividad económica en José del Toro.
“No tenemos estatutos,
tenemos filosofía”
porque lo hablábamos, sólo que ha llegado en este mo-
mento.
– ¿Por qué crear una entidad nueva, cuando en la ciu-
dad hay varias asociaciones de comerciantes?
– Precisamente no queremos ser asociación porque ese
tema está un poco maldito. Hay un montón de asocia-
ciones y diferentes puntos de vista. Yo no pertenezco a
ninguna ni he pertenecido nunca. No queríamos hacer-
lo así, queríamos diferenciarnos para que quien se sume
a la propuesta no venga diciendo ‘bueno, voy a otra
asociación de comerciantes con lo malo que pueda
tener’, aunque estas asociaciones también tiene cosas
buenas, evidentemente. Pero ni queremos serlo, ni que-
remos cargarnos de esfuerzo extra ni de responsabilidad.
Cuando queramos haremos cosas, y cada uno participa-
rá en la media en que pueda. Hay un punto clave, y es
que es que no tenemos cuota. No hay. Los participantes
aportan en cada acción su esfuerzo y su apuesta perso-
nal, como el sábado, cuando cada uno hizo una cosa.
No tenemos estatutos, tenemos filosofía.
El primer fin de semana de actividad ha sido intenso,
con la actividad Lanzamiento del Consulado
(descuentos, una ruta guiada, un ciclotaxi y música en
directo) ¿Estáis satisfechos con la experiencia? ¿Tenéis
pensado repetir actividades similares?
-Muy satisfechos. Aún no hemos tenido tiem-
po de hacer una evaluación seria, pero esta-
mos muy contentos. Nos hemos visto capaces
de hacer cosas y hemos comprobado que
había respuesta, pese a que el evento que se
creó en Facebook muy poco antes, porque
teníamos que aprovechar la fecha del 12 de
mayo. Cuando dos semanas antes hablaba
con mis vecinos me miraban con cara de loco,
pero yo les decía que no había que tener
grandes pretensiones y que a ver qué salía. Todos veían
que el tiempo era escaso, pero que la actividad iba a
funcionar con poca cosa: un tenderete, música, el ciclo-
taxi y un par de promociones… y ha salido. Hay gente de
la agrupación que no ha podido participar, por lo que la
siguiente la van a coger con muchas ganas. Además,
comercios que han visto que lo que estábamos hacien-
do han mostrado su interés en sumarse.
-¿Ya está planificada la próxima actividad?
-No, todavía no hemos planificado ni cuándo vamos a
reunirnos, pero en el momento en el que se ha dado el
primer caso se abre la mente de la gente y todo el mun-
do empieza a discurrir nuevas ideas y hacer propuestas,
o sea que no creo que tarde mucho, igual el mes que
viene.
-La asociación nace en José del Toro, pero ¿tenéis previs-
to expandiros al casco histórico, o al resto de la ciudad?
-En principio no. A medida que la noticia de la creación
de la agrupación se ha ido moviendo por las redes so-
ciales hemos recibido peticiones de gente del centro y
de fuera para incorporarse porque les ha gustado la
idea, pero queremos hacerlo aquí en la calle José del
Toro, es para nosotros mismos, queremos ver que somos
capaces de hacer cosas y de desarrollar esa filosofía. Si
hacemos tres o cuatro acciones y nos sentimos satisfe-
chos podríamos plantearnos un plan de expansión por
contacto, es decir, por los comercios que estén pegados
a los que ya están. Quiero que sea así para que quede
claro con las primeras acciones cómo queremos hacer
las cosas, que esto no consiste en dar cincuenta euros y
que otro trabaje por mí. Esto es altruismo compartido:
queremos que el casco histórico no se muera y sabemos
que el comercio minorista es vital. Yo estoy más en la
línea de que si hay una serie de comercios en La Viña a
los que les gusta la idea y se quieren unir, que formen
una especie de sucursal.
-¿Cómo una asamblea de barrio del 15 M?
-Sí. Nosotros estaríamos encantados de ayudarles, pero
me gustaría que esto se extienda de esa manera. Lo que
no quiero es que entre nadie por mi puerta diciendo:
‘no habéis hecho nada en mi calle’. No, no lo habrás
hecho tú.
-¿Qué pedirías a las administraciones públi-
cas de cara a la celebración del Tricentena-
rio?
-Cádiz 2017 ha pedido una agenda única y
una imagen única entre todas las administra-
ciones y que se pongan de acuerdo, que
dejen hacer y apoyen. No se les está pidien-
do dinero porque no tienen. Se están pre-
sentado proyectos autofinanciados, se les
dice: voy a hacer esto, pero facilita.
-¿Y de cara al fomento del comercio local?
-Cuando nos sentemos a hablar todo lo que hablamos
con la cervecita o el café saldrá y llegará un momento
en el que tengamos que dar nuestra opinión. De forma
individual yo les pido que nos dejen hacer las cosas sin
poner muchas pegas, porque no vamos a hacer nada
delictivo ni molesto; que haya un poco de flexibilidad.
Que tengan en cuenta que nuestra propuesta va más
allá del negocio de cada uno, tratamos de revitalizar el
centro y el comercio curioso, singular, que no haya solo
franquicias.
El Consulado de Comerciantes está
en Facebook
Susana inició su carrera profesional, tras estudiar estética,
en el centro de belleza de su madre. Pero, tras un tiempo
en Sevilla, decidió no volver al negocio familiar: iba a
emprender su propia aventura. Así, en 2013, con 26
años y un crédito, abrió Veintiséis, nombre que también
homenajea al día de nacimiento de su progenitora. “Era
un local muy pequeño, de unos 30 metros cuadrados”,
explica. Inicialmente, se dedicaba a la ropa femenina del
día a día. Posteriormente fue llegando la moda de fiesta.
Y a los seis meses de abrir, la tienda se le hizo pequeña,
así que se mudó de local a otro más grande, también en
Puerto Real. Y las redes sociales hicieron el milagro de
que la tienda fuera más allá de los límites del municipio:
como había muchas clientas de San Fernando, allá abrió
Susana, un año después que en Puerto Real. Y el 10 de
mayo ha iniciado la aventura gaditana en el número 3
de la calle Corneta Soto Guerrero.
En estos tres años, el negocio ha quedado bien definido:
Veintiséis tiene ropa y complementos de calle de sep-
tiembre a febrero, y ropa y complementos de fiesta de
marzo a septiembre, siempre a precios muy asequibles.
Lo más caro que tiene actualmente de fiesta cuesta 150
euros, y no es lo habitual: los vestidos para comuniones,
bodas, etc van desde los 55 a los 100 euros, aproximada-
mente, y con respecto a las tallas, de la 36 a la 48. Y la
fórmula tiene éxito, especialmente en lo que concierne a
Las tres tiendas de la
Bahía dan empleo a
seis personas
26 moda=
3 tiendas +
2 redes
sociales
Susana Ruiz tiene tres tiendas físicas y otras dos que llegan a todos lados: Facebook e Instagram, donde suma casi 75.000 seguidores. Esta puerto-realeña, emprendedora en el mundo de la moda, ha encontrado en estas dos redes sociales su me-jor aliado: las ha converti-do en un catálogo on line para la venta a distancia.
la moda de fiesta “por los precios y la variedad”.
La calle que ha elegido en la capital gaditana tiene mu-
cho tránsito y en la tienda no para de entrar gente; esta
temporada buscan faldas largas, midi… “Menos mal que
ya habéis abierto en Cádiz”, exclama un clienta tras en-
trar y reconocer la tienda. “Mucha gente nos lo dice”,
asegura. Ha habido expectación en el ciberespacio con
esta apertura; y es que estas pequeñas tiendas en tres
localidades de la Bahía son grandes en internet. Y eso
que no tienen página web con tienda online, ni siquiera
un blog: tienen cuentas en Facebook e Instagram.
Esta joven empresaria ha buscado promocionarse en las
redes sociales y lo ha conseguido. Hace sorteos cada
mes de bonos para su tienda o prendas, y ha logrado
que famosas (concursantes televisivas, la pareja de un
actor…) lleven sus vestidos. “Cada vez que un personaje
conocido se pone un vestido nuestro, aumentamos en
3.000 seguidores. Así han conseguido 68.420 en Face-
book y 6.222 en Instagram (a fecha de 11 de mayo).
Estos seguidores ven sus modelos (los nuevos se publici-
tan en la red con fotos e indicando precios y tallas) y se
ponen en contacto por privado con la tienda, que se los
envía, en 24 horas, a domicilio. El cliente paga los gastos
de envío. El sistema “va muy bien”, explica.
Sin embargo, no hay que descuidar las tiendas físicas:
“Son muy importantes, puedes tener lo que quieras en
internet, pero si después no tienes variedad de tallas, o
de colores, no sirve”, asegura. Esta puertorrealeña da
empleo –contándola a ella- a seis personas. A la tienda
se asoma una chavala. No viene a comprar, sino a entre-
gar el curriculum. En tan sólo 24 horas, le han llegado
entre 60 y 70 por internet, suspira Susana.
Esta emprendedora advierte de que no es oro todo lo
que reluce. Ella se considera algo loca por atreverse a ir
abriendo tiendas, pese a que el trabajo es mucho y muy
duro. “Es difícil y requiere mucho esfuerzo. A los que
vayan a emprender les aconsejo que se aseguren bien,
que se informen, porque hay que tener muchas ganas
de trabajar; desde fuera todo parece muy bonito, pero
hay que trabajar tela, y eres responsable de todo. Esto es
una cadena y la que da la cara al final soy yo”, asegura.
Veintiséis Moda está en
Cádiz (Corneta Soto
Guerrero, 3), San Fernando
(Rosario, 39) y Puerto Real
(calle de la Plaza, 94), en
Facebook y en Instagram.
Happynkn es una pequeña tienda situada en la plaza de
España, cerca de las murallas de San Carlos, que aúna
tres actividades por una cadena de causalidades: porque
la primera ha ido llevando a la siguiente, según explica el
propietario, Javier Marín. En Happyink se venden objetos
rosa, vino de naranja y se alquilan coches de juguete
clásicos para niños.
El origen de todo está en que Javier tiene dos hijas y
estaba deseando cambiar su trayectoria laboral. Quería
emprender y fue la más pequeña de las crías y su obse-
sión por el color rosa, unido a la enfermedad de una
familiar, la que le inspiró. Crear una tienda web de obje-
tos rosados (o relacionados con concepto rosa) y dedi-
car el 15% de los beneficios a la lucha contra el cáncer
de mama le pareció una idea original ya que, aunque
este tipo de tiendas existe en EEUU, no se ve por aquí.
“También fue un poco por cabezonería, porque cuando
le dices a la gente que vas a montar una web para ven-
der cosas de color rosa, ser ríe de tí”, explica.
En septiembre de 2015, tras un año de preparación,
comenzó a funcionar www.happynk.com. En esos mo-
mentos la tienda física no se atisbaba por el horizonte.
Fue un eslabón en la cadena del causa-efecto de esta
historia. Si tienes una tienda, por muy virtual que sea,
necesitas almacén. Pero a Javier no le llamaban la aten-
ción los trasteros, sino el pequeño local del casco anti-
guo por el que pasaba cada día para llevar a las niñas al
colegio y que llevaba años sin uso. El lugar no era para
un almacén, pero estaba bien de precio, y sí que tiene
bastante espacio al fondo, así que decidió alquilarlo y
buscar una segunda ocupación al lugar. El sitio no es de
mucho tránsito, pero si alguien pasa son niños, porque
hay dos colegios cercanos, Las Carmelitas y el Celestino
Mutis. Y Javier tenía alguna reproducción de coche de
juguete rosa a la venta en la web que no tenía salida
porque no es barato y es grande. Así que pensó en al-
quilarlo.
Ahora, el escaparate y la zona derecha de la tienda son
un especie garaje de vehículos en miniatura, todos clási-
cos y a pedales. Hay quince reproducciones de estos
antiguos juguetes de los años veinte y los precios van
desde los 2,5 euros la media hora con bonos, a 10 euros
por el alquiler único. Las tarifas están pensadas para que
el cliente habitual pueda beneficiarse de unos bonos
Happynk: La vida rosa, y el
vino, de naranja
Todo empezó con una página web que vendía objetos ro-sas. Ahora son distribuidores de un vino cítrico valenciano y también alquilan pequeños coches clásicos
La tienda tiene réplicas
de coches de juguetes
antiguos que se
pueden alquilar
que pueden ser utilizados por varios niños y no tienen
fecha de caducidad. Este rent a car en miniatura (‘rent a
dream’ es su lema) ha tenido muy buena acogida, pese
a que comenzó su andadura a finales de abril, por lo
que padeció el temporal de lluvia que se alargó hasta el
14 de mayo. Funciona también a mediodía y fines de
semana y el servicio incluye wifi y consigna de maletas
gratis.
Los coches están a la izquierda, los variopintos objetos
rosa a la derecha, y al fondo hay una estantería con vino
e naranja, que también vende en la Duty Free del puer-
to. Aunque parezca raro, el vino naranja ha llegado de
la mano de las cosas rosas ¿Cómo? A través del pomelo
rosado. La idea inicial era vender cosas rosas o relaciona-
das con el concepto rosado, productos originales y dis-
tintos a ser posible (tienen hasta botas, de las de beber,
rosa). Gracias a esto, dieron con Tarongino, unos pro-
ductores valencianos que están aplicando las técnicas
que convierten a la uva en vino a los afamados cítricos
de esa tierra. Happyink los conoció por la vía rosa pero
ahora venden toda la gama y son los distribuidores en
exclusiva en Andalucía de esta marca, tres de cuyos pro-
ductos (el vino de Naranja, de Clementina y de Pomelo)
han conseguido premios en la Feria Anuga 2015.
Curiosamente, esta segunda línea de negocio deriva-
da de la original es la que ocupa buena parte del tiem-
po de este nuevo empresario, sobre todo porque el
vino de naranjas ecológicas tiene muy buena acogida
en la Duty free del muelle gaditano: parece gustar mu-
cho a los ingleses, algo que se notó en la visita del enor-
me transatlántico Queen Mary II. La botella cuesta 9,95
euros en la tienda de la plaza de España, aunque los
cruceristas se libran de los impuestos si están en un viaje
que los lleve fuera de Europa, y lo pueden comprar más
barato. Aunque los del lujoso barco “ni siquiera pregun-
taban precio. Lo probaban y se lo llevaban”, asegura
Javier.
Happynk traza planes para el futuro que pasan por da
más visibilidad a la pequeña tienda rosada y más distri-
bución al vino anaranjado. Javier explica algunas ideas,
como exponer obras rosas de artistas. Ya tiene el primer
cuadro colgado en el local.
Happynk está en el número
2 de la plaza de España.
Tiene página web
(www.happynk.com) y
perfil en la red social
Facebook.
Hemos recorrido cinco tiendas gaditanas en busca de bikinis y baña-
dores y hemos encontrado una gama de precios enorme: de los casi
200 euros a los 10 ¡Comenzamos por los diseños más exclusivos!
Azahar tiene una trayectoria de 17 años y dos tiendas: una en la calle
Rosario, 19 y otra en Cayetano del Toro, 6. Este establecimiento reci-
bió, hace unas semanas, uno de los premios Wedding Awards que
otorga bodas.net gracias a las recomendaciones de las novias.
Luisa González, al frente de la tienda, explica a Estrena Cádiz que este
año es clave el estampado, entre ellos el gráfico, las flores, los tribales
y el cachemir; el lunar parece estar algo más de capa caída. A clásico
negro le acompañan los también clásicos azules y llega con fuerza el
rojo. En esta tienda tienen variedad y marcas: “Me gusta tener varie-
dad de patrones para que las clientas puedan combinar y hacerse su
propio bikini”, explica. A diferencia de otros establecimientos, donde
los expositores aparecen llenos gracias a que se muestran todas las
tallas de una misma prenda, la pared llena de bikinis y bañadores de
Azahar es una pared llena de bikinis y bañadores diferentes: se expo-
ne una talla y las demás están guardadas, a la espera de que las
clientas la reclamen.
Las marcas van desde la más exclusiva Lise Charmel a Xanadú Beach,
una firma que está teniendo mucha aceptación porque sus prendas
son reductoras. Semark Mare o Ivette Swim son otras de las marcas
que se pueden encontrar en estas tiendas.
Con respecto a las tallas, van desde la 85B a la 120 (talla de sujeta-
dor). Los precios oscilan desde los 52 euros a los 200 que puede
costar, como máximo, uno de los modelos de Lise Charmel.
Azahar también tiene prendas de las marcas Hugo Boss e Impetus
(con tratamiento de secado rápido) para ellos.
“Es el año del color”. Coli, en Lencería Helena (en la esquina de Inge-
niero La Cierva), explica que se llevan los estampados y
que predominan los bañadores sobre el bikini, quizás porque la gen-
te está más sensibilizada sobre la necesidad de protegerse del sol y ya
“no es tan importante broncearse”. En esta tienda venden algunos
modelos especiales, reductores, también muy demandados.
En este establecimiento de Puertas de Tierra también cuentan con
una gran variedad de tallas, que alcanza hasta la 54 (o 120 de sujeta-
dor). Con respecto a los precios, van de los 48 euros que puede cos-
tar un bikini juvenil de la firma Cherry Beach hasta los 100 euros de
los modelos más caros. Esta tienda oferta marcas como Basmar, Re-
Bikinis y
bañadores:
un verano
de color
¿Bikini o bañador? ¿Liso o estampado? ¡Ya es tiem-po de playa! Aquí verás qué venden y por cuanto las tiendas de Cádiz
Lencería Helena está
en la Avenida, junto a
la glorieta Ingeniero
La Cierva
Azahar tiene dos
tiendas: en la calle
Rosario , 19 y en
Cayetano del Toro, 6
point, Dolores Cortés, Anita, Ana Durán o Bestform, entre
otras.
El término medio en cuanto a precios está en Rebeca (San
Francisco, 8), donde descubrimos el tankini, que no es ni
bikini, ni bañador, ni trikini. El tankini es como un bañador
que se queda en camiseta, combinado con la braguita de
un bikini. Ideal para quienes odien sufrir ropa mojada por-
que es muy fácil cambiarse, y “además, favorece mucho”,
explican en este establecimiento.
Los colores alegres, indican, se llevan este año junto con el
negro y los combinados con negro, así como con los estam-
pados, entre los que destacan los tribales. Y las clientas tam-
bién demandan los modelos reductores.
En San Francisco venden las marcas Sloggi, Susan, Sportex,
Tessy y Evelin. Las tallas van de la 40 a la 56 y los precios, de
los 30 a los 90 euros.
Dulce Woman y Jópalo son los lugares de referencia para
encontrar un bikini o bañador sin gastar mucho. En Jópalo,
en Hospital de Mujeres, los bikinis cuestan entre 15 y 20
euros y tienen tallas que van desde la 36 a la 60. Tras 21
años de negocio, la clientela es de confianza y la mercancía
viene prácticamente al gusto del consumidor; en esta tienda
saben perfectamente qué va a gustar en el barrio. El negro
es el color clave en Jópalo: los bañadores y bikinis de ese
color se agotan inmediatamente.
Dulce Woman está en La Laguna (Pintor Zuloaga, 22) y
tiene unos precios de lo más ajustado: braguitas de bikini
desde 4,99 euros, tops desde 6,99, bikinis completos desde
9,99 y bañadores desde 11,99. Las tallas arrancan en la 38 y
llegan a la 60 en modelos concretos. También hay prendas
para chicos: tipo calzona desde 4,99, slip desde 5,99 y bóxer
desde 7,99.
La propietaria del establecimiento, Anabel Rubiales, señala
como tendencia la parte de arriba tipo camiseta y explica
que se llevan los modelos combinados: una de las partes del
bikini estampada y la otra no, por ejemplo. El colorido es el
de siempre más los verdes, pasteles, cítricos y los estampa-
dos tribales.
Modelos especiales
Todas las tiendas consultadas disponen de modelos para
mujeres mastectomizadas, aunque con alguna peculiaridad.
En Jópalo, por ejemplo, nos comentan que trae modelos
en los que se puede introducir un relleno y que son más
altos de escote, por lo que se adaptan perfectamente sin
que haya un incremento de precio con respecto a las de-
más prendas.
En Lencería Helena explican que existen versiones de mode-
los de baño específicos para estas mujeres luchadoras. Ade-
más de poder introducir un relleno, el escote es más al-
to para ocultar la cicatriz. “Pero por lo demás el colorido es
igual, hasta el punto de que tengo clientas con mucho pe-
cho que se llevan estos modelos porque están más cómo-
das con el escote alto”, explica Coli.
Jópalo ha cumplido
más de dos décadas en
la calle Hospital de
Mujeres, 39
Rebeca, que está en la
calle San Francisco, 8,
oferta los originales
tankinis
Dulce Woman está en
La Laguna (Pintor
Zuloaga, 22) y tiene
bikinis desde 10 euros
Fue el calor el que hizo que los artesanos del Mercado
de Cruceros pidieran un traslado de apenas unas dece-
nas de metros: querían estar bajo los toldos que se colo-
can en la plaza de San Juan de Dios durante el verano.
El mercadillo, además, tenía otro problema cuando esta-
ba en la zona de Canalejas: quedaba dividido en dos
partes y una de ellas, la más cercana al muelle, tenía
mucha menos afluencia de público que la próxima a la
calle Nueva.
Curiosamente, la artesana que crea abanicos, Regla Lo-
renzo, fue la que ideó el remedio contra el calor: emigrar
al centro de la plaza. Lo suyo, está claro, es refrescar. Así
que trasladó esta propuesta por medio de la asociación
de artesanos Erytheia, según explica. Su puesto está aho-
ra junto al de Manos Gaditanas, que vende bolsos de
material reciclado y piel, y bisutería. “Es más pintoresco,
se para más gente y es más céntrico. Estamos en el paso
de las calles”, explican estas artesanas que son también
vecinas en la Galería Artesanal de El Pópulo (San Anto-
nio Abad, 14).
Desde el día 4 de marzo, los artesanos están en el centro
de la plaza de San Juan de Dios de 10:00 a 18:00 horas
todos los días del año que llegue un crucero al Puerto
de Cádiz, así como los viernes, sábados y domin-
gos. Además, a partir de junio y hasta el mes de septiem-
bre, estos comerciantes podrán instalar sus puestos dia-
riamente sin necesidad de que haya un crucero. Sólo
durante la Semana Santa y la celebración del Corpus,
estos artesanos vuelven a su ubicación habitual, en la
confluencia entre Canalejas y la plaza de San Juan de
Dios.
Para el Ayuntamiento de Cádiz, la decisión de trasladar
el mercadillo responde, según explicó en su momento la
concejala de Comercio, Laura Jiménez, al objetivo
de “ofrecer un entorno más adecuado para promocio-
El mercadillo se ha trasladado al centro de San Juan de Dios hu-yendo del sol, pero la sombra también le ha traído más tránsito de clientes y una ampliación.
Mercado de cruceros: A la
sombra se vende mejor
nar a los artesanos y para protegerlos de las inclemen-
cias del tiempo, pues en el centro de la plaza están más
resguardados”.
Los puestos ahora forman una calle desigual, en la que
la mayor parte de las pequeñas carpas blancas están en
la zona más cercana a Nueva y sólo dos, en la parte más
cercana a Plocia. Esto no es casual; los de la izquierda
son La Burbuja Verde y El Algario. Están en esa parte a
petición propia: sus productos son muy sensibles a la luz
solar, así que se han situado en la sombra. La Burbuja
Verde vende una gran variedad de jabones artesanales,
y el Algario realiza adornos con algas, con una técnica
que consigue preservar los ejemplares para adornar
pulseras, collares, broches y, últimamente, anillos. Ade-
más, sus joyas han incorporado recientemente plata. En
este último puesto están encantados con el cambio de
ubicación.
En la acera del sol está Cerámicas Rosso. Es uno de los
artesanos que compagina el mercadillo con una tienda
en la Galería de El Pópulo. Ofrece piezas de cerámica y
azulejos y estos, asegura, se calentaban tanto en la ante-
rior ubicación que parecían recién sacados del horno. Su
balance es bueno: pasa más gente. Y cree que aún será
mejor cuando se complete la calle con nuevos artesa-
nos. "Con más artesanos habrá más variedad", coinciden
en El Algario, quienes destacan la calidad de los artículos
del mercadillo.
Y es que a principios de mayo, el Ayuntamiento decidió
aumentar el número de puestos del mercado a 18
“dado el éxito que está teniendo y el interés mostrado
por los artesanos de la ciudad”, según explicaba en un
comunicado.
La concejal de Presidencia y Asuntos Sociales, Ana Fer-
nández, hablaba “buena acogida” del mercadillo tras el
cambio de ubicación, “no sólo por la imagen que ofrece
a los visitantes sino también por lo beneficioso que ha
resultado para ellos [los artesanos] al estar en una ubica-
ción mejor y ampliar los días en los que pueden instalar
el puesto. Estos dos factores ha provocado que los pro-
pios artesanos estén contratando a personal por lo que
su beneficio está repercutiendo en la sociedad”.
No todo el mundo espera con tantas ganas a los nue-
vos. En Folixa Cueros echan de menos que el Ayunta-
miento hubiera tanteado la opinión de los artesanos
antes de calificar de forma tan positiva el resultado del
cambio de ubicación, y explican que venden menos:
uno de los factores (junto con que en Cádiz “no ha me-
jorado la economía) es la mayor competencia, por lo
que para él la llegada de nuevos artesanos no es una
buena noticia. Eso sí, en este puesto de marroquinería y
serigrafiado en textiles, encuentran un punto a favor del
traslado: que estarán bajo los toldos en verano.
En Guadalupe (bisutería, casi toda ella realizada con piel)
sí que se muestran satisfechos: “el sitio es mucho mejor y
se ha notado”. “Es mucho mejor, ni comparación. Si no
llega a cambiar de sitio yo no estaría en el Mercado”,
asegura Juan Carlos, del Taller La Lezna, un puesto dedi-
cado a la venta de artículos de piel. Hace un par de años
se instaló en Canalejas y le tocó la peor ubicación: la más
cercana al muelle. “No se nos veía, pero nosotros sí que
veíamos la plaza llena de gente”, explica. No le mereció
la pena, así que dejó de poner su puesto… hasta aho-
ra. “Hasta los vecinos están contentos, porque hay más
movimiento de gente y la plaza está más bonita”, explica
este artesano veterano en mercadillos: también se ha
instalado en el Paseo Marítimo y en el navideño de San
Antonio.
Los dos últimos puestos de la hilera son también los más
recientes: en ellos se puede comprar la bisutería de Gita-
na Mora o las creaciones en crochet y macramé de
Patuclín Patuclán. Llevan pocos meses, pero están con-
tentas con la nueva ubicación. Conocen la anterior por
uno de los días en los que el mercadillo tuvo que volver
y “se nota mucho la diferencia”. Nerea, de Patuclín…
indica que algún día se han hecho actividades, como un
taller de títeres para niños, y le encantaría que se repitie-
ran experiencias como esa. Y su compañera de Gitana
Mora apunta un dato curioso: que en este Mercado de
Cruceros, el número de barcos atracados en el muelle
no es proporcional con el número de clientes: “el otro
día hubo cuatro y no se notó tanto, será porque se los
llevan de Cádiz”, explica.
Cualquiera no puede instalarse en el Mercado de Cruceros. Es
un mercado de artesanos y lo primero que hay que hacer para
conseguir un puesto es demostrar serlo. Las bases elaboradas
por el Ayuntamiento de Cádiz para este mercadillo, que
comenzó a funcionar en Canalejas, exigen para acceder a un
tenderete tener la condición legal y acreditada de artesano,
tres meses de actividad ininterrumpida, estar dado de alta
como profesional autónomo, tener un seguro de
responsabilidad civil y no tener deudas con ninguna
administración. Pero no sólo eso: hay que demostrar que los
artículos que se van a vender han sido realizados
artesanalmente y por la persona que aspira a ser titular del
puesto. Para hacerlo, hay que aportar una declaración jurada,
una memoria del proceso de producción, fotografías, y un
ejemplar de cada producto que se vaya a vender.
Un mercado exigente
GRACIAS
Acabamos de empezar, pero no nos podemos quejar:
pese a que Estrena Cádiz está aún dándose a conocer,
son muchos los visitantes que acuden a nuestra página,
muchos más de los que esperábamos conseguir en este
tiempo. La gente nos ve y le gusta lo que ve: algunas
noticias han sido compartidas más de 300 veces en Fa-
cebook directamente desde la página.
No queremos obsesionarnos con los datos. Ahora, lo
importante es que los gaditanos nos conozcan. Por eso
estamos tan agradecidos a los medios de comunicación
que se han hecho eco de esta iniciativa. Diario Bahía de
Cádiz publicó nuestro nacimiento. Canal Sur Radio nos
hizo la primera entrevista. Después vino la Cadena Ser,
Onda Cádiz Radio y Onda Cádiz televisión ¡Gracias a
todos!
Pero, sobre todo, estamos muy agradecidos a los comer-
cios que nos han abierto en las puertas. Algunos de ellos
han confiado en nosotros cuando aún estábamos pre-
parando la página y, por lo tanto, no podían comprobar
en qué consistía el proyecto o cómo se trataban las infor-
maciones. Mil gracias, de verdad.
¡Seguiremos estrenando!
¿QUIÉN HACE ESTRENA CÁDIZ?
Estrena Cádiz es un proyecto de autoempleo de la periodista gaditana Ángeles
Peiteado. Con dieciocho años de experiencia, esta profesional ha desarrollado la
mayor parte de su carrera en medios de comunicación escritos y gabinetes de
prensa. Estrena Cádiz pretende promocionar el comercio de la ciudad de Cádiz a
través de reportajes de establecimientos nuevos o singulares, así como mediante la
publicación de noticias de interés para los que quieran pasar una agradable jorna-
da de compras en la ciudad.
¿Hablamos? Estoy en Twitter (@estrenacadiz), en el correo electrónico redac-
ció[email protected] y también puedes contactar conmigo en la web ¡Nos ve-
mos en las tiendas!
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