1. El tabaco afecta principalmente los sistemas bronco pulmonar y
cardiovascular. Las estadísticas señalan que el tabaquismo es la principal causa
de cáncer de pulmón, laringe, órganos digestivos y aparato urinario.
2. El calor producido por la combustión del cigarrillo tiene contacto directo con la
mucosa oral, provocando efectos nocivos sobre la misma, entre
ellos, periodontitis y gingivitis.
3. Aumenta el riesgo de sufrir bronquitis crónica, enfisema, EPOC y úlcera
péptica. Está demostrado que predispone a la arteriosclerosis con sus
manifestaciones a nivel coronario, arterial periférico y cerebral.
4. El fumador es más propenso a sufrir otro tipo de padecimientos, como úlceras
de estómago, enfermedades cardíacas y de los vasos sanguíneos, y por si esto
fuera poco, tiene menos inmunidad a las infecciones que los que no fuman.
5. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) los hijos de padres
fumadores tienen 70% más de probabilidad de ser internados por enfermedades
respiratorias. El peso de los recién nacidos cuyas madres fuman es menor
comparado con los hijos de no fumadoras. Además el tabaco causa más del 80%
de la mortalidad por procesos pulmonares crónicos.
Se admite que cantidades de cafeína inferiores a 300 miligramos, una cantidad
que equivale a 3 tazas de café al día, tonifica el organismo, alivia la fatiga,
favorece las funciones intelectuales e incluso puede resultar útil en caso de
desmayo, ya que la cafeína proporciona un estímulo de emergencia, aunque no
soluciona la causa del trastorno.
No obstante, cuando se toma en exceso -o incluso dosis menores en personas
que no están habituadas-, el café puede provocar temblor, nerviosismo,
insomnio, palpitaciones y menor capacidad de rendimiento. Todos estos signos
tienen lugar de forma más acentuada en personas que no están habituadas a su
consumo.
Además, el consumo frecuente de café lleva consigo una adaptación a la
cafeína, lo que explica que personas habituadas a tomar café sufran diversos
síntomas cuando no ingieren su dosis habitual de cafeína, alcanzando incluso
un síndrome de abstinencia que se muestra con signos como cansancio,
irritabilidad nerviosa, incapacidad para concentrarse, ansiedad, dolor de
cabeza... También explica que las personas acostumbradas a tomar café cada
noche no tengan ningún problema para conciliar el sueño
1.En el cerebro, el alcohol en exceso inhibe las funciones de la región frontal,
por lo que disminuye la memoria, la capacidad desconcentración y
el autocontrol.
2.En el hígado, los efectos de esta metabolización son náuseas, vómitos y dolor
de cabeza.
3.En el riñón, elimina más agua de la que ingiere y provoca que el organismo la
busque en otros órganos. Esto provoca que las meninges (membranas que
cubren el cerebro) pierdan líquido lo que genera el dolor de cabeza.
4.En la piel, el alcohol aumenta el flujo de sangre, por lo que presenta más
sudoración.
5.En el estómago, el alcohol aumenta las secreciones ricas en ácidos y mejora
la digestión, pero cuando se bebe en exceso causa erosiones en la mucosa del
estómago producidas por el etanol, principal componente del alcohol. El ardor
estomacal será mayor si se mezclan diferentes bebidas, ya que la irritación
gástrica se debe a todos los componentes bebidos.
6. En los pulmones, el alcohol acelera la respiración. Si el alcohol circulante es
demasiado detendrá la respiración.
7.En el corazón, los efectos del alcohol provocan un aumento en la actividad
cardiaca y aceleración del pulso. Cuando el alcohol llega a la sangre, se produce
una disminución de los azúcares presentes en la circulación, lo que provoca una
sensación de debilidad y agotamiento físico.
Los efectos que provocan las drogas son diferentes sobre nuestro sistema
nervioso según los distintos tipos de drogas consumidas: unas son excitantes y
otras, depresoras; unas aceleran nuestro funcionamiento mental, con el riesgo de
aumentar los errores, y otras lo lentifican o lo distorsionan; otras producen
alucinaciones o cambios en la percepción de la realidad.
El consumo de drogas tiene consecuencias en el funcionamiento normal de
nuestro sistema nervioso y provoca una serie de efectos que alteran nuestras
capacidades: modifican la manera de pensar, de funcionar, de relacionarse con los
demás y de enfrentarse a los desafíos de la realidad. En definitiva, nos hacen
menos protagonistas de nuestra vida.
Las drogas producen efectos negativos sobre nuestras capacidades físicas y
mentales. Las consecuencias del consumo de drogas también pueden ser
observadas en animales. Cuando una araña es expuesta a vapores que contienen
LSD, su capacidad para construir la tela se altera de manera considerable
WEB GRAFÍA
http://www.salud180.com/jovenes/7-efectos-del-alcohol-en-el-organismo
http://www.salud180.com/jovenes/5-efectos-nocivos-del-tabaco-en-la-salud
http://cienciaytecnologiacorsaje.blogspot.com/2012/09/efectos-nocivos-del-exceso-
del-consumo.html
http://www.hablemosdedrogas.org/es/efectos-drogas