Vicente de Paúl nació el 24 de abril de1581 en Pouy-Landas.
Vicente fue bautizado pocos días después de su nacimiento, pues sus padres eran excelentes cristianos, y por nada de este
mundo habrían querido retardar el momento en que su hijito podía llegar por
el bautismo a ser hijo de Dios.
Vicente nació dentro de una familia cristiana.Y sus padres a los pocos días de su
nacimiento le regalaron lo más valioso: El ser
hijo de Dios, mediante el Bautismo y la Fe.
Vicente siendo niño aún fue dedicado a los trabajos de la granja. Frecuentemente iba
a pastar sus rebaños.En esta región plana, durante la estación de
las lluvias, el suelo se volvía pantanoso, entonces, Vicente vigilaba sus ovejas
desde lo alto de sus zancos, siguiendo la costumbre del país.
Excelente medio para no mojarse los pies, pero había que saber guardar el equilibrio.
Desde muy niño ayudaba a sus padres en las tareas de la casa, se dedicaba a la granja y al cuidado de los
animales.
La instalación de la casa era más bien rústica. Así, en ese tiempo, el establo de
los animales no estaba a menudo separado del cuarto sino por un tabique
de tablas movibles.Doble ventaja había en esto, en invierno nos
servia de calefacción central, y no había la molestia de salir para alimentar a los
animales.
San Vicente amaba todo lo que Dios
había creado, por eso cuidaba con mucho cariño a todos los seres vivos de la
creación.
Por otra parte así en invierno como en verano, la vida era muy regular. Cada cuál
tenía su trabajo y lo realizaba con buen humor, bajo la mirada de Dios. Hay más ánimo para el trabajo cuando se piensa,
en Dios. En las veladas, se leía la vida de los santos, se hacía la oración común; se recordaban los difuntos de cada familia y,
antes de acostarse, los hijos pedían la bendición a sus padres.
Vicente y toda su familia oraban mucho y confiaban siempre en el cuidado de su Padre Dios y su Madre la
Virgen María.
Vicente amaba mucho a la Sma. Virgen.
Su mamá le había enseñado, desde pequeñito, a conversar con ella sencillamente y a acudir a
ella en cualquier circunstancia de su vida.
Como todos los pastorcitos cristianos, gozaba en construir, para honrarla capillas de follaje.
Una o dos veces por año, iba en peregrinación con su familia a Bublosa, donde era
especialmente venerada nuestra Señora.
Vicente oraba a la Virgen María siempre, se
encomendaba a ella sobre todo, en los momentos
difíciles; le habla como un hijo a su madre y siempre
le pedía imitar sus virtudes de humildad, fidelidad,
caridad y fe.
Vicente ya iba a dar la Primera Comunión y tenía que terminar sus estudios; el Párroco aconsejó a sus padres que lo mandasen a la ciudad en el
siguiente año de estudio.Un amigo de la familia, el Sr. De Comet, abogado
de la corte de Dax, se había también fijado en él y animó a sus padres a enviarle al colegio de
esta ciudad.Y así fue, Vicente estudió allí por tres años con
mucho éxito en sus estudios.
Vicente demostró en todo momento ser un buen estudiante, por eso mucha gente lo admiraba e incluso le propusieron a sus padres enviarlo a
completar estudios fuera de la ciudad.
Los padres de Vicente vieron todo su esfuerzo así que vendieron dos bueyes
para asegurar sus gastos.
En ese transcurrir del tiempo decidieron mandarlo a la escuela de teología en la universidad más próxima que era la de
Tolosa.
Sus padres hicieron un gran esfuerzo por amor
a Vicente, desprendiéndose de sus animales, para obtener recursos económicos y así
Vicente pueda ir a la Universidad.
A sus casi 21 años de edad, un 23 de septiembre de 1600, en una ceremonia, el Obispo de lugar, lo consagró sacerdote.
De esta forma Vicente consagraba su vida al Señor, con toda su mente, con toda el
alma y con todo el corazón.El enseñaba a los niños, lo que a él le enseñaron, sus niños lo estimaban por la
manera en que les enseñaba y los amaba.
Vicente consagra su vida a Dios con todo el corazón , con toda su mente y con toda el alma, para servir a
los que más necesitan, a los pobres, ya que ellos son los preferidos de Dios.
Vicente evangelizó a los pueblos, convirtió a mucha gente al cristianismo.
Fue Capellán, siguió sus estudios de Teología y cursos que dictaban en la
Soborna ilustres profesores.
Obtuvo el grado de licenciado en derecho canónico.
Vicente cumplió su sacerdocio llevando el
mensaje de Dios a todos los pueblos y ciudades,
confesando a los fieles y amando a los más
pobres.
Vicente sirvió por mucho tiempo al Rey y a la reina de Francia donde lo acusaron por
un robo echo por uno de los muchos sirvientes; al poco tiempo el culpable
envió una carta disculpándose por el robo que cometió en ese tiempo.
Meses después muere la reina, el rey le da a Vicente una buena cantidad de dinero
para que hiciera una obra buena.
Vicente sufrió con paciencia a los que lo molestaban, el sabía en su corazón que no había cometido ninguna
falta. Y que en todo lo que hacía agradaba a Dios.
Vicente una vez se subió a una barca donde habían muchos esclavos uno de ello no
podía seguir remando y Vicente se ofreció a sustituirlo.
Enseñó muchas cosas, también las daba con el dinero ofrecido por el rey.
Un día cuando había mucha gente en reunión comenzaron a discutir y Vicente les dijo que
pararan porque así no se arreglaban las cosas, sino que se hacía desde el corazón.
Vicente en todo momento enseña con el ejemplo. Él Servía a los más
necesitados y débiles.
Vicente con el dinero que le dio el rey fundó el convento de las Hijas de Caridad junto con
Luisa de Marillac, un convento donde oraban mujeres solteras, casadas, viudas y
de toda clase.Ellas eran pobres pero ricas de corazón y de
Espíritu.En ese convento también refugian a niños
abandonados en todo tipo de lugares, ayudaban a mendigos, daban comida a los
pobre y muchas cosas más.
Vicente funda el convento de las Hijas de la Caridad, junto con Luisa de Marillac.
Se dedicaban a orar, a cuidar a los
enfermos y a refugiar a los niños.
Y después de una vida consagrada a Dios y a los hermanos, un 27 de Septiembre, del
año 1 660, hacia las 5 de la mañana; muere Vicente besando el crucifijo y pronunciando:
“Tengo confianza en Dios mi Padre”.
La Reina Ana de Austria, al saberlo, exclamó:”¡Gran pérdida para la Iglesia y los
pobres!”.
Vicente después de haber consagrado su vida entera a Dios, muere un 27 de
Septiembre de 1660.
Gran pérdida para la Iglesia y los pobres manifestó la Reina
Ana de Austria.
Mucha gente asistió a sus exequias; todos decían: “Hemos perdido a un Padre”. Se
le tenía ya como un Santo. El Papa Benedicto XIII lo beatificó en
1 724 y fue canonizado en 1 737. Su cuerpo reposa en París, en la capilla de
los Lazaristas, en donde vienen a venerarle de todas partes.
San Vicente de Paúl un Ejemplo de Vida a seguir.