TEMA 7: LA ESPAÑA DEL SIGLO XVI
1. El Imperio de Carlos V. Conflictos internos: Comunidadesy Germanías.
2. La monarquía hispánica de Felipe II. La unidad ibérica.3. El modelo político de los Austrias.4. Economía, sociedad y cultura en la España del S. XVI. La
Inquisición.
INTRODUCCIÓN
En septiembre de 1517 cruzaba el mar Cantábrico desde Flandes el príncipe
Carlos, hijo de Juana I, para hacerse cargo de la gobernabilidad de los reinos
que su madre, la hija heredera de los Reyes Católicos, no estaba en
disposición de ejercer. El joven príncipe sería el primero de los monarcas de la
casa de Austria o Habsburgo que gobernaría la monarquía hispánica durante
cuarenta años, hasta la abdicación en su hijo Felipe II en 1556.
El joven Carlos recibió una herencia espectacular: de sus abuelos paternos
heredaba los Países Bajos y los territorios patrimoniales de la casa de Austria;
de los maternos, Castilla y Aragón, y con ellos el dominio de América y de
buena parte de Italia.
Los reinados de Carlos V y Felipe II ocupan la mayor parte del siglo XVI y
presentan algunos rasgos comunes, como la subordinación de los intereses
hispanos a su política europea, o el papel de defensa del catolicismo adoptado
por la monarquía española. Además, su tiempo fue no solo brillante en
hazañas bélicas, sino por el resplandor de la cultura del Renacimiento.
1. EL IMPERIO DE CARLOS V. CONFLICTOS
INTERNOS: COMUNIDADES Y GERMANÍAS.
1. 1. Llegada a la Península del nuevo rey:
Carlos I de España, educado en Borgoña, venía a
Castilla sin saber castellano. Nacido en Gante en 1500,
sólo había hablado flamenco. Sus nuevos súbditos
llevaban años sin su reina. Fernando había sido un
regente como lo fue antes que él Felipe el Hermoso, y
después de él el Cardenal Cisneros. Juana I no se
encontraba en condiciones de reinar, y los castellanos
estaban ansiosos de tener un rey, pero cuando llegó
Carlos, no pudo comunicarse directamente con sus
súbditos.
Además, vino acompañado de una camarilla de nobles
flamencos que hicieron un auténtico cerco en torno a él,
y a los que el rey nombró para los cargos más
importantes del reino.
Tras duros forcejeos con los representantes, logró ser
aceptado por las Cortes de Castilla, Aragón y Cataluña,
tras lo cual, en junio de 1519, recibió la noticia de la
muerte de su abuelo Maximiliano de Austria.
Maximiliano I de Habsburgo
por Alberto Durero
Maximiliano, emperador del Sacro Imperio,
dejaba vacante el trono imperial. Carlos quiso
acceder a ese trono, pero se encontraba con un
contrincante poderoso, Francisco I de Francia,
que también lo deseaba. Como el título era
electivo, había que convencer a los príncipes
alemanes electores de que votaran a Carlos,
quien gastó una cantidad elevadísima para
convencerlos.
Finalmente los príncipes alemanes eligieron al
Habsburgo, que se convertía en el emperador
Carlos V. Enseguida se dispuso a emprender
viaje para recibir la Corona imperial en
Aquisgrán, por lo que, ya en 1520 convocó
Cortes en Santiago y La Coruña para pedir dinero
a las ciudades castellanas para sufragar el viaje.
Acto seguido, marcharía hacia los Países Bajos.
El triunfo en el exterior le planteó problemas en
el interior. Primero la revuelta de las
Comunidades de Castilla, luego la de las
Germanías en Valencia y Mallorca.Carlos V joven y capilla palatina de Aquisgrán
1. 2. La rebelión de las Comunidades de Castilla:
La marcha del rey con el dinero castellano desembocó en la sublevación de las
Comunidades de Castilla, rebelión contra la autoridad de la Corona que se extendió por
la mayor parte de las ciudades de la zona central de Castilla.
Causas:
• Administración en manos de nobles flamencos.
• Abandono del territorio por parte del emperador.
• Gasto del dinero castellano en asuntos europeos.
• Temor de los productores textiles de una vuelta a la política de exportación de lana a
Flandes.
• Crecimiento de la fuerza de los grandes señores ante la ausencia del Rey.
El movimiento comenzaba en Toledo poco antes de marcharse el Rey, pero
rápidamente se extendió a otras ciudades. Tras el incendio de Medina del Campo por
parte del ejército real se generalizó la rebelión. Los comuneros tomaron Tordesillas y
organizaron una Santa Junta, gobierno revolucionario que exigía la retirada de los
impuestos votados en las Cortes, el respeto a las leyes del reino y la marcha de los
consejeros flamencos. Así mismo, intentaron, sin éxito, convencer a doña Juana,
recluida en el castillo de la ciudad, para que apoyase su causa.
Carlos V reaccionó ascendiendo a los
puestos de gobierno a miembros de la
nobleza castellana que comenzaron a
reclutar tropas. Además, los levantamientos
que también se producían en algunos
señoríos acabaron por poner a todos los
nobles del lado del emperador. En
noviembre, Burgos se retiró de la Junta y,
en diciembre, las tropas de la Corona
recuperaban Tordesillas.
Finalmente, el 23 de abril de 1521, las
tropas comuneras fueron derrotadas junto
al pueblo de Villalar. En pocos días, todas
las ciudades sublevadas se fueron
rindiendo, salvo Toledo, que resistiría hasta
comienzos de 1522.
Los cabecillas de la rebelión, Padilla, Bravo
y Maldonado, fueron decapitados.
Ajusticiamiento de Comuneros y mapa de los bandos
1. 3. Las Germanías:
Esta revuelta recibe el nombre de la palabra “germá”, que en catalán-valenciano
significa hermano. El nombre se aplicó a los “hermanados” que lucharon en esta
revuelta social desarrollada en el reino de Valencia casi al mismo tiempo que las
Comunidades, aunque no hubo relación entre ambos movimientos.
Las causas que la provocaron fueron de índole estrictamente social: la crisis y las
epidemias llevan a un enfrentamiento contra la nobleza por parte de un pueblo llano
armado al haber permitido Fernando el Católico la creación de milicias para luchar
contra los piratas berberiscos que atacaban las costas del Levante peninsular.
La ciudad de Valencia padeció un ataque de peste en el año 1519, por lo que los
nobles huyeron de la ciudad, momento en que se manifestó el descontento del pueblo
llano, apoyado por los burgueses. Se hicieron cargo del gobierno municipal colocando a
su cargo a un representante de cada uno de los gremios de la ciudad, e intentaron
instaurar un sistema en el que no se permitía el trabajo libre, sino solo el controlado
por los gremios. No solo se hicieron con el poder en Valencia, sino que otras ciudades
del reino valenciano.
Los agermanados no solo se enfrentaron a la nobleza, sino que también atacaron a
los mudéjares que trabajaban en las huertas y otros oficios para los señores contra
quienes luchaban obligando a muchos a convertirse al cristianismo.
A pesar de su fuerza y de su victoria en la batalla de Gandía (1521), la revuelta de los
agermanados fue aplastada con la ayuda de las tropas de refuerzo que el virrey de
Valencia pudo recibir tras la derrota de los comuneros.
Sin embargo, la fuerza del movimiento agermanado fue suficientemente importante
como para que sus ecos llegaran al reino de Mallorca, donde también se produjo una
revuelta social con matices parecidos a los de Valencia.
Paz de las Germanías
1. 4. Retorno a la Península de Carlos I:
En julio de 1522 el rey regresaba a los
territorios hispanos y ordenaba la represión
contra los sublevados. Pronto estableció un
Perdón General en Castilla, hecho que se
haría esperar hasta 1528 en la zona
valenciana.
Efectos de las rebeliones en el rey:
• Carlos V permaneció en Castilla durante los
siguientes siete años.
• Cambió el trato con sus súbditos, incorporó
consejeros nativos al gobierno y aprendió a
hablar castellano.
• Mantuvo una actitud de escucha hacia las
Cortes.
• Mejoró su imagen pública.
En 1526 se casó con Isabel de Portugal y en
1529 abandonó de nuevo la Península,
dejando el gobierno en manos de su esposa.
Isabel de Avis y Trastámara
por Tiziano
1. 5. Política Imperial de Carlos V:
La política exterior del rey se dirigió hacia dos puntos fundamentales:
• Unidad de la cristiandad y lucha contra el Islam.
• Conservación de toda la herencia recibida.
- Lucha contra Francia:
La tensión territorial con Francia,
heredada de los tiempos en que
Aragón era independiente, se
agravaría entre Carlos V y Francisco I a
raíz de la elección del primero como
emperador. Los enfrentamientos
serían constantes, si bien, al final del
reinado se llegó a una situación de
equilibrio, pues parecía evidente que
ninguno podría imponerse sobre el
otro.
- Lucha contra los turcos:
Los turcos habían logrado reunificar el
Islam tras una larga etapa de
disgregación, convirtiéndose su nuevo
Imperio en una gran amenaza en el
Mediterráneo y en el continente
Europeo. En 1529, el ejército turco
llegó incluso a sitiar Viena. En 1535
Carlos V les arrebató Túnez, pero no
logró imponer completamente su
poder en el Mediterráneo.
- El problema de la reforma protestante:
En 1517 Martín Lutero publicó sus tesis contra la
Iglesia de Roma. Su postura encontró el apoyo de
príncipes alemanes que vieron en ella un
instrumento más para reafirmar su independencia
respecto al emperador. Carlos V se erigió entonces
en defensor del catolicismo. En 1531 los
protestantes formaron la Liga de Smalkalda, a la que
el emperador no pudo enfrentarse hasta 1547,
cuando los venció en la batalla de Mühlberg. Lejos
de poner fin al problema, este se agravó hasta que,
en 1555, la Paz de Augsburgo establecía el derecho
de cada príncipe a decidir la religión de su territorio.
A pesar de algunas desavenencias, los papas
comprendieron que el Imperio era la principal
defensa contra la reforma y contra el Islam, y por
ello tuvieron gran presencia los teólogos y prelados
españoles en el Concilio de Trento (1545-1563),
donde se sentaron las bases de la Contrarreforma
católica.
Martín Lutero
padre de la reforma protestante
- Fin del reinado:
En 1556, agotado por el peso de su cargo, Carlos I decidió abdicar en su hijo Felipe
II las coronas hispanas y de los Países Bajos (el título imperial quedó para su
hermano Fernando), al que dejó casado con María Tudor de Inglaterra.
Acto seguido se retiró al monasterio de Yuste, donde murió en 1558.
Monasterio extremeño de Yuste
2. LA MONARQUÍA HISPÁNICA DE FELIPE II.
LA UNIDAD IBÉRICA.
2. 1. Primeros años de reinado:
El príncipe Felipe tenía 29 años cuando
asumió el poder que le dejaba su padre.
Lo primero que tuvo que hacer fue
enfrentarse a Francia, a la que venció en
las batallas de San Quintín de 1557 y
Gravelinas de 1558, que llevaron a la
firma de la paz de Cateau-Cambrésis al
año siguiente. En ella, se negociaron
acuerdos territoriales y se pactó el
matrimonio de Felipe II con Isabel de
Valois, hija de Enrique II de Francia, que
sería la esposa más querida del rey.
Tras resolver aquellos asuntos , regresó
a la Península Ibérica, de donde no
saldría más, para dedicar su tiempo a
resolver varios problemas internos.Felipe II e Isabel de Valois
2. 2. La rebelión de los moriscos:
Felipe II fue heredero de la intransigencia
religiosa de sus antecesores.
En 1567, apoyado por sus consejeros, dictaría un
decreto que obligaba a abandonar la lengua, los
vestidos y las tradiciones moriscas en el plazo de
tres años. Pronto los moriscos se organizaron
para negociar la ley pero, tras un año de
infructuoso diálogo, se rebelaron en Granada en
diciembre de 1568, haciéndose con el control de
las Alpujarras. Llegaron incluso a nombrar un rey
y recibieron apoyo africano.
Don Juan de Austria, hermanastro del rey, se hizo
cargo de la dirección de las operaciones en 1570
y al año siguiente aplastó la revuelta.
El resultado fue la deportación de los moriscos
por toda la Corona de Castilla con el fin de
mantenerlos separados. Muchos optarían por
abandonar la Península.
Principales focos de rebelión
Don Juan de Austria
2. 3. La conquista de Portugal:
En 1578 muere Sebastián I de Portugal,
sobrino de Felipe II. Varios candidatos optarían
entonces al trono, siendo el rey español
apoyado por las clases dirigentes portuguesas.
Sin embargo, las clases populares apoyaron al
infante Antonio, que se hizo coronar rey en
julio de 1580.
Ante ese hecho, Felipe II envió un ejército bajo
el mando del duque de Alba que obligó a
Antonio I a abandonar el país. Las Cortes
portuguesas de 1581 reconocieron como rey
al español, que permaneció en Lisboa durante
tres años.
La anexión se realizó respetando las leyes,
instituciones y funcionarios portugueses. Se
creó un consejo de Portugal y se eliminaron
las aduanas con Castilla. Significó además la
suma de dos inmensos imperios coloniales y
la extensión de los dominios de Felipe II.
Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel
Duque de Alba
pintado por Tiziano
2. 4. Antonio Pérez y la rebelión de Aragón:
El rey gobernaba Aragón mediante el virrey y el Consejo de Aragón.
Los cargos los podía elegir el monarca, aunque tenía que seguir la
norma de que fueran para aragoneses. Había, sin embargo, otros
organismos poderosos en cuyos nombramientos el rey no intervenía:
las Cortes, y el tribunal del Justicia de Aragón, que ejercía la
jurisdicción civil y criminal.
Antonio Pérez había sido uno de los secretarios más influyentes de Felipe II, pero en
1579 fue acusado de asesinato y de conspirar contra el monarca, siendo encarcelado.
En 1590 logró escapar y huyó hacia Aragón, donde reinaba el malestar contra el rey por
el nombramiento de un virrey castellano. Allí fue recluido en la cárcel del Justicia Mayor,
quien lo tomó bajo su protección.
El rey reclamó que le pasaran a la cárcel del único tribunal sobre el que no tenían
jurisdicción ni los Fueros de Aragón ni el Justicia, la de la Inquisición. En el momento en
que se producía el traslado se produjo un gran tumulto en Zaragoza, cuyo resultado fue
la muerte del virrey. El ejército real entró en Aragón y restableció el orden. Los líderes de
la rebelión, incluido el Justicia, fueron ejecutados, pero no se pudo evitar que Pérez
huyera a Francia, colaborando allí y en Inglaterra en las políticas contra la monarquía
hispánica. Felipe II mantuvo los Fueros de Aragón, aunque introdujo algunos cambios
que le convenían: como el derecho a nombrar a un virrey no aragonés o el control de los
miembros del tribunal de Justicia.
2. 5. Política exterior:
La política exterior se basaría en el mantenimiento de los mismos objetivos que tuvo
su padre, la unidad y defensa de la cristiandad y la conservación de toda la herencia
recibida.
- La rebelión de los Países Bajos:
Aunque su padre no tuvo problemas
en aquel territorio, Felipe II fue
considerado por los holandeses un rey
extranjero. A ello se uniría la amplia
difusión que tuvo el calvinismo, sobre
todo en el norte. En 1566 estallarían
motines en varias ciudades, por lo
que, en 1567, Alba fue enviado a
aplastar la rebelión. En 1571 los
rebeldes que pudieron huir regresaron
y establecieron un gobierno
independiente en el norte, calvinista,
que desde entonces estuvo en guerra
abierta con el sur católico y leal a
España.
- Lucha contra los turcos:
Tras años de tranquilidad, los turcos
volvieron a la acción en el Mediterráneo
conquistando Túnez y Chipre. Se formó
entonces la Santa Liga entre Venecia, el
papado y Felipe II, alianza militar cuyo mayor
peso recaía en España. En Octubre de 1571,
la flota cristiana venció a la musulmana en
la batalla de Lepanto.
- Rivalidad con Inglaterra:
En 1558 murió María Tudor, tercera
esposa de Felipe II, y reina católica de
Inglaterra. Ascendió entonces al trono
su medio hermana, la protestante
Isabel I, siendo desde entonces muy
tensas las relaciones con la
monarquía española, sobre todo en
torno a dos cuestiones: América y los
Países Bajos.
Incluso, en 1558, Felipe II armó la
llamada Armada Invencible con la
intención de invadir Gran Bretaña,
pero fue derrotada.
- Intervención en Francia:
En 1584 estalló una guerra civil en el país
vecino entre católicos y protestantes, allí
llamados hugonotes, que llevó a Felipe II a
apoyar a los primeros. Así mantenía a sus
ejércitos implicados en tres frentes: los
Países Bajos, Inglaterra y Francia. Sin
resolver ninguno de los problemas, el rey
moría en septiembre de 1598 en El Escorial.
Derrota de la Armada Invencible
3. EL MODELO POLÍTICO DE LOS AUSTRIAS.
3. 1. La administración del Imperio:
La organización política de los Habsburgo es, evidentemente, herencia de la
desarrollada por los RR. CC. Las figuras de consejeros, secretarios y, más tarde, validos,
serían fundamentales en esta época para el asesoramiento del monarca. Los Austrias
procuraron rodearse de letrados de modesto origen, apartando a la nobleza de la Corte
y ocupándola en el ejército, la marina o la diplomacia.
Toda la autoridad recaía en la figura del monarca, pero desde los RR. CC. se desarrolló
un régimen de Consejos polisinodial (varios sínodos o reuniones) que resultaría
bastante eficaz y que servían para aconsejar al monarca en diversos temas.
CONSEJOS
SECTORIALES
TERRITORIALES
Se encargaban de áreas determinadas del
gobierno, como el de Estado, encargado de
asesorar al monarca en cuestiones exteriores,
o el de Hacienda.
Encargados de administrar cada uno de los
diferentes reinos que formaban la monarquía
hispánica.
Castilla fue la sede principal del gobierno, y el resto de los Estados conservaron sus
leyes e instituciones. En ellos, los reyes se hacían representar por virreyes, como en
Aragón , América o Italia, o por gobernadores, como en los Países Bajos. Normalmente,
estos cargos fueron desempeñados por altos funcionarios o miembros de la familia real.
En el campo de la administración territorial, esta estuvo compuesta por las mismas
instituciones y funcionarios que antaño: chancillerías y audiencias para impartir justicia;
corregidores, para el control de las ciudades; contadores y recaudadores de impuestos;
regidores y alguaciles, etc.
Con Felipe II se acentuaría el predominio castellano, estableciendo la Corte en Madrid,
pues Castilla era el motor financiero y militar desde el que el rey dirigía la política de sus
estados. Era el territorio más rico y sobre el que recayó el peso de los mayores
impuestos, dedicados a financiar las guerras europeas. Además, aportaba la plata de
América que mantenía los ejércitos imperiales. La Corona de Aragón también contribuyó
al esfuerzo bélico, muy afectada por lo que ocurría en el Mediterráneo.
Aunque los consejeros españoles solicitaban con frecuencia al rey que la política
exterior se encaminara a defender los intereses peninsulares la acción europea y los
intereses dinásticos acabarían imponiéndose en la mayoría de las ocasiones.
4. ECONOMÍA, SOCIEDAD Y CULTURA EN LA
ESPAÑA DEL S. XVI. LA INQUISICIÓN.
4. 1. Evolución demográfica y económica:
Aumento demográfico
en Castilla-Aragón.
De 6,5 millones de habitantes se pasa a 8.
Cerca de 150.000 emigran a América.
España seguirá siendo
un país de campesinos
con ciudades pequeñas.
Cambio de
distribución Auge del Sur. Comercio con América.
Decadencia del Norte. Guerra de Flandes.
Desarrollo económico
2 primeros tercios del S.
Aumento de la población + aumento del comercio con
América = crecimiento de la demanda
Revolución de los precios – aumento
de la demanda + metales preciosos
INFLACIÓN
CRISIS – 2ª
MITAD
SIGLO
• Entrada de producto
extranjero + barato.
• Guerras europeas.
• Presión fiscal + préstamos.
• Declaración de bancarrota.
La sociedad seguirá
siendo tradicionalmente
estamental.
4. 2. La cultura del Renacimiento en
España:
Con el reinado de los RR. CC. y, sobre
todo, de Carlos V, entrarán en España
las tendencias literarias y artísticas
del Renacimiento italiano.
En el campo literario destacaron la
poesía de Garcilaso o el teatro de
Fernando de Rojas. A mediados de
siglo, la novela anónima, El Lazarillo
de Tormes, daba inicio a la picaresca
como género.
Desde la segunda mitad del siglo se
da un retroceso en el humanismo
debido a la intolerancia religiosa que
surge de la reforma protestante. La
búsqueda de la exaltación religiosa
dio lugar al nacimiento de la literatura
mística de autores como Juan de la
Cruz o Teresa de Jesús.
4. 3. El arte en el siglo XVI:
-Arquitectura:
No es fácil hablar de un único estilo
renacentista español, pues dentro del
Renacimiento se encuentran edificios
tan distintos como el Hospital de los
Reyes Católicos de Santiago de
Compostela, como el Monasterio de
El Escorial, el primero entra dentro
del estilo renacimiento plateresco,
muy ornamentado en algunas partes
del edificio, y el segundo al estilo
renacimiento purista, con ausencia
prácticamente absoluta de
decoración.
Entre ambos hay aún un tercer estilo
del Renacimiento que podría
denominarse clasicista, por ser el que
más se acercaría al estilo del
renacimiento clásico italiano.
Hospital de los RR. CC.
Colegio de la Santa Cruz de Valladolid
y fachada de la Universidad de Salamanca
Retablo de la capilla del condestable
y Sepulcro de Juan II de Castilla
(Burgos)
-Escultura:
Hay que destacar la obra de autores
como Vigarny, Alonso Berruguete,
Juan de Juni o Gil de Siloé,
especialistas en obras de fuerte
emotividad religiosa, con todas las
características de belleza habituales
en el Renacimiento.
-Pintura:
Las escuelas españolas se vieron muy
influenciadas por el estilo flamenco, pero
pronto llegará la influencia italiana,
destacando Pedro Berruguete. Los
Habsburgo fueron grandes amantes del
arte e invirtieron en gran cantidad de
pintura europea, sobresaliendo los
encargos que hicieron a Tiziano.
En la segunda mitad del XVI destaca la
figura de El Greco, que marca un periodo
de esplendor en la pintura española.
Martirio de San Mauricio (El Greco)
para El Escorial
4. 4. La intolerancia religiosa y la Inquisición:
En los inicios del reinado de Carlos V se
acogieron las ideas de Erasmo de Rotterdam,
humanista que defendía una reforma de la
Iglesia pero sin ruptura. A partir de la
expansión de la reforma protestante el
erasmismo dejará de ser aceptado.
En tiempos de los RR. CC., la persecución
inquisitorial se había centrado en los
conversos judíos y musulmanes. Pronto
ampliaría su radio de acción a castigar la
brujería, la blasfemia, desviaciones
doctrinales de clérigos, la bigamia o la
homosexualidad.
El erasmismo ayudó a que descendiera el número de detenciones y ejecuciones en los
primeros años del emperador, pero , a partir de 1527, la obsesión del Santo Oficio
pasaría a ser la detección de luteranos y protestantes en general. En 1553 se publicaba
el primer índice de libros prohibidos. En 1558 surgieron en Sevilla y Valladolid dos brotes
protestantes. Se detuvo y ejecutó a los cabecillas en un Auto de Fe celebrado el año
siguiente en Valladolid, al que acudió el propio rey Felipe II.