La cuenca del río Sixaola la comparten Costa Rica (81%) y Panamá (19%). Su territorio va desde la costa en el Mar
Caribe hasta los 3820 ms.n.m. Demográficamente, la cuenca baja está habitada principalmente por población mestiza, conformada sobre todo por población migrante de Jamaica, China y la Península Arábica. En la parte media y alta de la cuenca los principales grupos étnicos son los Bribri, Cabécar y
Ngäbe en Costa Rica; y Bribri, Naso y Ngäbe Buglé en el sector panameño. Se estima un total de 33.650 habitantes en toda la cuenca.
Entre los ecosistemas presentes se encuentran los bosques tropicales, los bosques húmedos tropicales, los bosques premontanos, las selvas tropicales y los páramos.
Adaptación basada en Ecosistemas y seguridad alimentaria en la cuenca del río Sixaola, Costa Rica/Panamá
Evid
encia
N° 08SERIE 4
2 EVIDENCIA
Sobre su diversidad biológica, se conocen 975 especies de plantas y 1077 vertebrados superiores (aves, mamíferos, anfibios y reptiles). Esta área posee un alto endemismo.
Entre los medios de vida predominantes está la producción a pequeña escala de frijoles y maíz en la zona baja de la cuenca; seguida de la producción de cacao en zonas más altas, donde se combina con áreas naturales de bosques.
1 Secretariat of the Convention on Biological Diversity (CBD) (2009). Connecting Biodiversity and Climate Change Mitigation and Adaptation: Report of the Second Ad Hoc Technical Expert Group on Biodiversity and Climate Change. CBD. Technical Series 41. [documento en línea], (2009). Disponible en: https://www.cbd.int/doc/publications/ahteg-brochure-en.pdf. (Consultado: 18 septiembre 2018).
2 Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), (1996). Declaración de Roma sobre la Seguridad Alimentaria Mundial. [documento en línea], (1996). Disponible en: http://www.fao.org/docrep/003/w3613s/w3613s00.htm. (Consultado: 18 septiembre 2018).
3 International Union for Conservation of Nature (IUCN) (2013). Food Security Policies: Making the Ecosystem Connections. Gland, Switzerland: IUCN. [online document], (2013). Available at: https://www.iucn.org/sites/dev/files/import/downloads/iucn_food_security_en.pdf. (Accessed: 6 May 2019).
El enfoque de Adaptación basada en Ecosistemas (AbE) se define como “el uso de la biodiversidad y los servicios de los ecosistemas como parte de una estrategia general de adaptación al cambio climático”.1 Es decir, es una estrategia para enfrentar y disminuir la vulnerabilidad de las personas ante los nuevos escenarios climáticos.
Los efectos directos e indirectos de esta vulnerabilidad afectan también los ciclos de reproducción de las especies, alterando la productividad y la eficiencia de los sistemas naturales y agrícolas, y la disponibilidad de recurso hídrico en calidad y cantidad suficiente, lo que pone en riesgo, entre otras cosas, la seguridad alimentaria de las personas.
La definición de seguridad alimentaria considerada en el marco de las acciones del proyecto AVE (Adaptación, Vulnerabilidad y ecosistemas) es: “La situación en la cual todos los miembros del
hogar tienen en todo momento acceso físico, social y económico a suficientes alimentos seguros y nutritivos, para satisfacer sus necesidades y preferencias alimenticias con el propósito de tener una vida sana y activa”.2
Es ampliamente reconocido que los ecosistemas saludables (incluyendo los sistemas de producción ecológica e integral) e interconectados entre sí, aseguran la generación de bienes y servicios ecosistémicos necesarios para la producción y la supervivencia de las personas. Lo anterior se puede definir como resiliencia alimentaria.3
Fortalecer la seguridad alimentaria mediante la implementación del acciones con enfoque de AbE refuerza la capacidad humana y de los ecosistemas para soportar el estrés ambiental, social y económico causado por el cambio climático.
Relación entre la Adaptación basada en Ecosistemas y la seguridad alimentaria
Los cultivos extensivos de plátano y banano para exportación son los que más predominan; la mayoría pertenecientes a grandes compañías como Bocas Fruit Company en Panamá y a la Corporación Bananera Nacional de Costa Rica. En la cuenca alta las plantaciones de banano están en manos de pequeños y medianos agricultores. Solo un sector muy pequeño trabaja en agricultura orgánica. El ecoturismo es otra actividad económica importante que se ha posicionado a lo largo de los años, sin embargo todavía no está bien consolidada debido al difícil acceso a las comunidades.
Las principales amenazas en la cuenca del río Sixaola son la deforestación y el cambio de uso del suelo, situaciones que expone de forma directa a los recursos hídricos y al suelo a los efectos anormales de lluvia o viento. Entre sus efectos encontramos una alta erosión y sedimentación, así como un aumento en la frecuencia, la intensidad y las áreas de impacto de fenómenos naturales como el desbordamiento de los ríos.
Las amenazas expuestas afectan seriamente las zonas productivas, aumentan el riesgo por deslizamientos y facilitan condiciones para la expansión de enfermedades en las plantaciones de banano y plátano como la Sigatoka negra (causada por el hongo de la especie Mycosphaerella fijiensis).
En Costa Rica las inundaciones causan la contaminación de acuíferos debido principalmente a la falta de vegetación que proteja las zonas de recarga. En Panamá, las zonas altas de las montañas se ven afectadas por el pastoreo y la producción de maíz.
3EVIDENCIA
El porqué de una metodología sobre seguridad alimentaria con un enfoque de AbEEl cambio climático, además de afectar el equilibrio ecológico de los sistemas naturales y agrícolas, también tiene un efecto cada vez más directo sobre el bienestar y desarrollo de las personas. Lo anterior está íntimamente ligado al surgimiento de nuevos enfoques para entender las diferentes formas en que se expresa la pobreza, como “la pobreza multidimensional”, implementada en los últimos años en el seno de las Naciones Unidas. Esta es una de las razones por las cuales desde hace unos años, el cambio climático ha pasado a formar parte de los principales temas discutidos en las agendas de desarrollo de los países.
Diversos estudios muestran que a pesar de las repercusiones del cambio climático sobre los sistemas naturales y agrícolas y de los beneficios que aporta la AbE, existe aún muy poca evidencia científicamente probada que caracterice esta relación. Las palabras “científicamente probada” se refieren a la generación de evidencias basadas en la implementación de sistemas de Monitoreo y Evaluación (M&E, los cuales se refieren a la colecta sistemática de información datos y su análisis para una toma de decisiones acertada). Estos sistemas proveen información continua sobre los avances y son un componente necesario para el diseño o ajuste de políticas, programas o proyectos de desarrollo.
La escasa evidencia sobre los impactos de las intervenciones de AbE a nivel del bienestar humano vuelve urgente plantear métodos
4 Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), Fondo Internacional de desarrollo agrícola (IFAD), Programa Mundial de Alimentos (WFP), (2013). The State of Food Security in the World 2013. The Multiple Dimensions of Food Security. Rome, FAO. [Reporte en línea], (2013). Disponible en: http://www.fao.org/3/a-i3434e.pdf. (Consultado: 15 octubre 2018).
5 Programa CE-FAO. (2011). La Seguridad Alimentaria: Información para la toma de decisiones. Guía práctica. [Documento en línea] (2011). Disponible en: http://www.fao.org/docrep/014/al936s/al936s00.pdf. (Consultado: 22 mayo 2019).
1 3 42Disponibilidad: La existencia de cantidades suficientes de alimentos en una calidad adecuada.
Utilización: La utilización se entiende como la forma en la que el cuerpo aprovecha los diversos nutrientes presentes en los alimentos como resultado de buenas prácticas de salud y alimentación, la correcta preparación de los alimentos, la diversidad de la dieta y la buena distribución de los alimentos dentro de los hogares.
Acceso: Acceso de las personas a los alimentos adecuados, apropiados y nutritivos. Incluye aspectos culturales y recursos colectivos.
Estabilidad de los recursos: Acceso adecuado y sin riesgos a alimentos nutritivos en todo momento. Este concepto se refiere a las tres dimensiones anteriores en el tiempo.
Figura 1. Pilares de seguridad alimentaria de la FAO.
que, basados en el contexto local e indicadores previamente establecidos, ayuden a comprender la relación entre las medidas de AbE y la mejora de la seguridad alimentaria.
Durante el 2015, conjuntamente la UICN y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT) desarrollaron una metodología para contribuir a un mejor entendimiento de los beneficios de la AbE para enfrentar el cambio climático.
La metodología analiza el posible efecto de las medidas de la AbE en la seguridad alimentaria y la disminución de la vulnerabilidad climática, mediante un sistema de M&E que se desarrolló basándose en los cuatro pilares (ver Figura 1) que de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO),4, 5 definen el estado de la seguridad alimentaria:
4 EVIDENCIA
Figura 2. Marco conceptual de la inseguridad alimentaria en el hogar. Fuente: Manual de uso y aplicación de la ELCSA.
Inicialmente, existe ansiedad y preocupación por los suministros alimentarios.
A continuación, se hacen ajustes en el presupuesto del hogar, lo que afecta la calidad de la dieta.
Se afecta la calidad y la cantidad de los alimentos consumidos por los niños.
Los adultos limitan la calidad y la cantidad de los alimentos que consumen.
Leve
Moderado
Severo
›
›
›
La metodología fue diseñada con base en la Teoría de Cambio del proyecto AVE, para identificar la línea base y los cambios generados en el corto y mediano plazo. Para obtener resultados a mediano y largo plazo y poder así realizar una evaluación de efectividad, se requiere integrar un análisis de impacto, que no se desarrolla aquí por las limitaciones temporales del estudio.
Las medidas de AbE puestas en marcha en Sixaola6 fueron: restauración de bosques de ribera, sistemas agroforestales y diversificación de cultivos, y uso y recuperación de semillas autóctonas.
La obtención de evidencia para los cuatro pilares de seguridad alimentaria se incluyó en la metodología a través de preguntas recomendadas e indicadores en dos métodos de medición principales (MAHFP y ELCSA). Además, se incluyeron dimensiones para entender la percepción de los hogares sobre el acceso a agua en términos de cantidad y calidad. Asimismo, se preguntó por los beneficios a futuro de las medidas de AbE y la capacidad de los hogares para enfrentar el cambio climático:
a) Meses de Aprovisionamiento Adecuado de Alimentos en el Hogar (MAHFP, por sus siglas en inglés): Mide el acceso de los hogares a los alimentos durante el año y considera su capacidad/habilidad para adquirirlos. Captura cambios de la capacidad del hogar para abordar la vulnerabilidad de tal forma que se garantice el aprovisionamiento por encima de un nivel mínimo durante todo el año.
b) La Escala Latinoamericana de Seguridad Alimentaria (ELCSA, por sus siglas en inglés): Método cualitativo que se basa en la percepción de las personas sobre su inseguridad alimentaria. Estos resultados permiten conocer en qué grado de severidad se encuentra la inseguridad alimentaria de cada familia, para posteriormente monitorear cómo las acciones de AbE permiten a estas familias “evolucionar” a partir de esta línea base.
La Figura 2 muestra los grados de inseguridad alimentaria considerados (si no existe ninguna de estas situaciones, se considera que la familia se encuentra en situación de seguridad alimentaria).
La implementación de la metodología se realizó mediante la aplicación de encuestas a nueve familias con fincas integrales donde se desarrollan medidas de AbE en las siguientes comunidades: Yorkín, Shuabb, Catarina y Paraíso de Costa Rica; y El Guabo, Washout y Barranco (Aeropuerto) de Panamá.
Se obtuvo una línea base estacional mediante la realización de encuestas en julio del 2016 y en marzo del 2017 (durante las épocas lluviosa y seca respectivamente) debido a la influencia de la disponibilidad y calidad del recurso hídrico para la producción y el uso doméstico. La variación en la precipitación o humedad ambiental tiene un efecto directo sobre la seguridad alimentaria.
6 Pérez de Madrid, M., Dávila, M. (2018). ‘Agrobiodiversidad y restauración en la cuenca binacional del río Sixaola Costa Rica-Panamá’. Catálogo de Adaptación basada en Ecosistemas: Serie 2 Comunidades con inteligencia natural, N°6. San José, Costa Rica: UICN.
5EVIDENCIA
Figura 3. Resultados provisionales del índice de MAHFP (sobre acceso de los hogares a los alimentos durante el año)
Los resultados detallados en este documento deben ser entendidos como una imagen de la situación de los hogares beneficiarios y no como representativos del contexto de la zona, ya que la muestra de nueve familias con fincas integrales es limitada.
En términos generales, el índice de MAHFP indicó que a pesar de que todos los hogares entrevistados afirmaron que por lo menos tienen un mes de inseguridad alimentaria al año, en el territorio indígena estos hogares son significativamente más vulnerables en estos términos (ver Figura 3). Tres hogares identificaron el mes de mayo como el más crítico debido al usual exceso de lluvia que afecta a producción de frijoles, banano y cacao. Un hogar identifica enero como el mes más crítico porque tuvo una baja en la producción de banano, lo que generó pocos ingresos. Mientras que un hogar tuvo
problemas en marzo porque la época seca se extendió más de lo previsto, afectando su producción.
Por otro lado, la ELCSA muestra que en territorio indígena, el 60% de los hogares estuvo en una situación de inseguridad alimentaria en los últimos 3 meses del año. Ningún hogar en Panamá tuvo inseguridad, mientras un hogar en Costa Rica presentó inseguridad alimentaria leve (Ver figura 4). La gran mayoría de hogares encuestados indican que la dificultad de acceder a alimentos se debe a la escasez de fuentes de ingreso (poca actividad turística por las dificultades de acceso, o los pocos servicios) y solo dos hogares identificaron que la escasez de alimentos estuvo relacionada con algún fenómeno climático.
Resultados del análisis sobre seguridad alimentaria y adaptación en la cuenca del río Sixaola
MAHFP
15
109.6
1211
5
0
Territorio indígena Panamá
Mes
es
Costa Rica
6 EVIDENCIA
120%
100%
80%
60%
40%
20%
Costa Rica
Inseguridad moderada
Panamá Territorio Indígena
0%
Inseguridad leve Inseguridad alimentaria
Los resultados obtenidos hasta el momento reflejan la situación inicial de estas familias que tienen fincas productivas donde se implementan en estas medidas de AbE. Es decir, reflejan la línea base. Esto es fundamental, ya que a partir de aquí y con la implementación sistemática y posterior de los métodos de recopilación de información y análisis de datos, se logrará tener
mayor evidencia sobre los efectos de este enfoque en la seguridad alimentaria de los hogares beneficiarios.
Considerando los cuatro pilares de seguridad alimentaria, se tiene como resultados preliminares que:
Figura 4. Resultados provisionales del índice de la ELCSA (sobre la percepción de la inseguridad alimentaria)
Estabilidad. El mantenimiento de las condiciones físicas del suelo permitirá tener acceso en todo momento a los cultivos que se producen en las fincas. Estos cultivos no solo son importante para la dieta alimentaria, también son una fuente de ingresos por la venta de los mismos.
Disponibilidad de alimentos. De acuerdo a la información recolectada durante marzo del 2017, en los nueve hogares con fincas integrales no se identifica ningún cambio significativo en cuanto a la disponibilidad de recursos naturales, aunque sí ha aumentado la diversidad de cultivos en las fincas (algunos cultivos temporales y otros permanentes, disponibles durante todo el año). La ausencia de agroquímicos mejora la disponibilidad de los alimentos para consumo familiar.
Acceso. Entre los beneficios identificados se percibe una mejora en el acceso a sus alimentos considerando que actualmente la gran mayoría son producidos en sus fincas generando menor dependencia del mercado.
Utilización. La recuperación de semillas criollas contribuye al mantenimiento de la biodiversidad local, abriendo la posibilidad de diversificar la dieta alimentaria.
1
2
3
4
35% 20%
65% 40%
40%
100%
ELCSA
7EVIDENCIA
Ante las condiciones de deforestación y sus consecuentes cambios en la estabilidad de los recursos hídricos, la restauración del bosque, la protección de fuentes de agua y el fortalecimiento de las fincas integrales y agroforestales son acciones que a mediano o largo plazo tendrían efectos directos sobre la seguridad alimentaria. Un monitoreo sistemático es fundamental durante el desarrollo de las intervenciones porque permitirán tomar mejores decisiones sobre las estrategias de adaptación frente al cambio climático.
Para más información sobre la metodología consultar UICN, 2018.7
7 UICN (2018). Guía de monitoreo de evaluación de la seguridad alimentaria en proyectos de adaptación basada en ecosistemas. [En prensa], San José, Costa Rica. UICN-ORMACC y CIAT.
AutoresMelissa Marín, Maria Claudia Tristán y Elías Cruz.
Acerca del proyecto AVEEl proyecto AVE: Adaptación, Vulnerabilidad & Ecosistemas busca escalar el enfoque de Adaptación basada en Ecosistemas (AbE) por medio del fortalecimiento de las capacidades para abordar el cambio climático, la articulación de marcos políticos, jurídicos e institucionales y la obtención de evidencia sobre sus múltiples beneficios para aumentar la resiliencia y reducir la vulnerabilidad de las personas y la naturaleza. Su implementación se realiza desde el 2015 en seis países de Mesoamérica (México, Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica y Panamá) con el apoyo del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza y Seguridad Nuclear (BMU) de Alemania, y ejecutado por el Centro de Derecho Ambiental (ELC)y la Oficina Regional para México, América Central y el Caribe de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), y en coordinación con las organizaciones Miembro y socios como la Fundación Hondureña de Ambiente y Desarrollo VIDA, la Unidad Ecológica Salvadoreña, la Sociedad de Historia Natural del Soconusco, la Asociación del Corredor Biológico Talamanca Caribe y la Comisión Trinacional del Plan Trifinio.
Más información en: https://www.iucn.org/node/594 Contacto: [email protected]
Acerca de la UICNLa UICN es una Unión de Miembros compuesta por Estados soberanos, agencias gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil. Cuenta con la experiencia, los recursos y el alcance de sus más de 1.300 organizaciones Miembro y los aportes de más de 10.000 expertos. La UICN es la autoridad mundial en cuanto al estado de la naturaleza y los recursos naturales, así como las medidas necesarias para protegerlos.
